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Desarrollo de Habilidades del Pensamiento Complejo Sección: 403

21 de Noviembre de 2017

La Práctica de la Inteligencia Emocional


Daniel Goleman
Resumen Discursivo

1. La competencia emocional es una capacidad adquirida basada en la inteligencia emocional que da lugar a un
desempeño laboral sobresaliente. En el núcleo de esta competencia se encuentran dos habilidades, la empatía
(que supone la capacidad de interpretar los sentimientos ajenos) y las habilidades sociales (que nos permiten
manejar diestramente esos sentimientos).
2. Según Goleman, nuestra inteligencia emocional determina la capacidad potencial que dispondremos para
aprender las habilidades prácticas basadas en uno de los siguientes cinco elementos compositivos: la conciencia
de uno mismo, la motivación, el autocontrol, la empatía y la capacidad de relación. La inteligencia académica es
la capacidad exclusivamente cognitiva medida por el cociente intelectual.
3. Estos dos tipos de inteligencia, expresan la actividad de regiones diferentes del cerebro. El intelecto se basa
exclusivamente en el funcionamiento del neocortex, los centros emocionales ocupan la región subcortical más
antigua.
4. Gardner fue el primero en señalar las diferencias que existen entre las capacidades intelectuales y emocionales,
propuso un modelo ampliamente difundido, llamado “inteligencia múltiple”; donde en su lista de siete
inteligencias agrega dos modalidades de inteligencia personal: conocimiento propio e inteligencia social.

COMPETENCIA PERSONAL
5. Salovey y Mayer definieron a la inteligencia emocional como la capacidad de controlar y regular los sentimientos
de uno mismo y de los demás, utilizando como guía del pensamiento y la acción las siguientes habilidades
emocionales y sociales básicas:
 Conciencia de sí mismo: capacidad de saber lo que estamos sintiendo.
 Autorregulación: manejar nuestras emociones; ser capaces de recuperarnos prontamente al estrés
emocional.
 Motivación: utilizar nuestras preferencias más profundas para encaminarnos hacia nuestros objetivos.
 Empatía: darse cuenta de lo que estamos sintiendo las personas.
 Habilidades sociales: manejar bien las emociones en las relaciones, utilizar estas habilidades para
persuadir, dirigir, negociar y resolver disputas.
6. Las capacidades de la inteligencia emocional son las siguientes:
• Independencia: Cada persona aporta una contribución única al desempeño de su trabajo.
• Interdependencia: Cada individuo depende en cierta medida de los demás, con los que se halla unido por
interacciones muy poderosas.
• Jerarquización: Las capacidades de la inteligencia emocional se refuerzan mutuamente. Por ejemplo, la
conciencia de uno mismo resulta esencial para el autocontrol y la empatía; el autocontrol y la conciencia de uno
mismo contribuyen a la motivación, y estas cuatro capacidades resultan esenciales, a su vez, para desarrollar las
habilidades sociales.
• Necesidad pero no suficiencia: Poseer una inteligencia emocional subyacente no garantiza que la gente acabe
desarrollando o ejerciendo las competencias asociadas con ella.
• Genéricas: La lista general resulta, hasta cierto punto, aplicable a todos los trabajos, pero cada profesión exige
competencias diferentes.
La importancia de la inteligencia emocional aumenta en la medida en que se asciende en el escalafón. Los
trabajadores estrella son personas, en suma, que no compiten sino que colaboran.

LOS LIMITES DEL LIDERAZGO


7. Una competencia emocional es una capacidad adquirida basada en la inteligencia emocional queda lugar a un
desempeño laboral sobresaliente. Nuestra inteligencia emocional determina la capacidad para aprender las
habilidades prácticas basadas en la conciencia de uno mismo, la motivación, el autocontrol, la empatía y la
capacidad de relación. Nuestra competencia emocional, muestra hasta qué punto hemos sabido trasladar este
potencial a nuestro mundo laboral.
8. Las competencias emocionales más relevantes para el éxito caen dentro de los tres grandes grupos siguientes:
• Iniciativa, motivación de logro y adaptabilidad.
• Influencia, capacidad para liderar equipos y conciencia política.
• Empatía, confianza en uno mismo y capacidad de alentar al desarrollo de los demás.

CONFIANZA EN SI MISMO

9. La competencia emocional implica que tenemos la posibilidad de elegir cómo expresar nuestros sentimientos. La
autorregulación –la capacidad de controlar nuestros impulsos y sentimientos conflictivos- depende del trabajo
combinado de los centros emocionales y los centros ejecutivos situados en la región prefrontal. Ambas
habilidades primordiales –el control de los impulsos y la capacidad de hacer frente a los contratiempos-
constituyen el núcleo esencial de cinco competencias emocionales fundamentales:
• Autocontrol: Gestionar adecuadamente nuestras emociones y nuestros impulsos conflictivos.
• Confiabilidad: Ser honrado y sincero.
• Integridad: Cumplir responsablemente con nuestras obligaciones
• Adaptabilidad: Afrontar los cambios y los nuevos desafíos con la adecuada flexibilidad.
• Innovación: Permanecer abierto a nuevas ideas, perspectivas e información.

COMPETENCIA SOCIAL

10. Existen lagunas que nos indican que estamos desaprovechando la oportunidad única para determinar qué es lo
que podría aumentar la eficacia de una empresa y las formas de diagnosticar los errores de actuación. Entre las
lagunas más evidentes cabe señalarlas siguientes:
Conciencia emocional de sí mismo: Comprensión clara del impacto del clima emocional sobre la eficacia laboral.
Logro: Examinar el entorno en busca de datos cruciales y nuevas oportunidades para la empresa.
Adaptabilidad: Flexibilidad para afrontar los desafíos y obstáculos que vayan presentándose.
Autocontrol: Actuar eficazmente bajo presión en lugar de dejarse arrastrar por el pánico, el enojo o la alarma.
Integridad: Fiabilidad que genera confianza.
Optimismo: Resistencia ante los contratiempos.
Empatía: Capacidad para comprender los sentimientos y puntos de vista de los demás, ya se trate de
consumidores, clientes o los propios empleados.
Aprovechamiento de la diversidad: Utilizar las oportunidades que nos brindan las diferencias.
Conciencia política: Comprensión de las tendencias económicas, políticas y sociales del momento.
Influencia: Destreza en el uso de las estrategias de persuasión.
Establecimiento de vínculos: La fortaleza de los vínculos que se establecen entre los trabajadores y las distintas
partes de una organización.

LAS EMOCIONES SON CONTAGIOSAS

11. Nuestro estado de ánimo es fácil de transmitir a las personas que nos rodean, pues portan señales vitales para la
supervivencia y son las emociones que nos dicen a que tenemos que atender y cuando debemos disponernos a
actuar. Nuestro radar emocional se sintoniza con el de quienes nos rodean, fomentando una interacción más
fluida y eficaz. La competencia emocional exige el aprovechamiento de las corrientes emocionales subyacentes.

LA CAPACIDAD DE MOVER EMOCIONES AJENAS


12. Los mecanismos neurales de la empatía permiten la sintonización emocional con los demás y facilitan el
contagio emocional, la habilidad social de movilizar las emociones de los demás necesita competencias como la
influencia, comunicación, gestión de conflictos y catalizadores de cambios.

EL EQUIPO DE COMPETENCIAS CON QUE CUENTA EL LIDER

13. El liderazgo aplica la capacidad de activar la imaginación de los demás e inspirarlos a moverse en la dirección
que deseen.

LAS VENTAJAS DE SER BUENA PERSONA

14. Los mejores lideres tienen una personalidad que armoniza un rol de mando con una orientación clara hacia las
personas sin imponer un estereotipo de militar. Este tipo de personas deben ser catalizadores de cambio, deben
ser capaces de establecer vínculos, tiene que ser colaborativos y tener capacidades de equipo.

LAS ORGANIZACIÓN EMOCIONALMENTE INTELIGENTE

15. La transparencia sobre los valores, espíritu y objetivos de una empresa contribuyen a crear confianza en la toma
de decisiones.

UNA ULTIMA CONSIDERACIÓN

16. La inteligencia emocional puede aprenderse y es posible identificar, valorar y actualizar esta inteligencia. Las
habilidades de la inteligencia emocional son el resultado de la sobrevivencia y el mantener nuestra humanidad
intacta, así como también la cordura.

DEFINICIONES

 Conciencia de sí mismo: capacidad de saber lo que estamos sintiendo.


 Autorregulación: manejar nuestras emociones; ser capaces de recuperarnos prontamente al estrés
emocional.
 Motivación: utilizar nuestras preferencias más profundas para encaminarnos hacia nuestros objetivos.
 Empatía: darse cuenta de lo que estamos sintiendo las personas.
 Habilidades sociales: manejar bien las emociones en las relaciones, utilizar estas habilidades para
persuadir, dirigir, negociar y resolver disputas.
 Independencia: Cada persona aporta una contribución única al desempeño de su trabajo.
 Interdependencia: Cada individuo depende en cierta medida de los demás, con los que se halla unido
por interacciones muy poderosas.
 Jerarquización: Las capacidades de la inteligencia emocional se refuerzan mutuamente. Por ejemplo, la
conciencia de uno mismo resulta esencial para el autocontrol y la empatía; el autocontrol y la conciencia
de uno mismo contribuyen a la motivación, y estas cuatro capacidades resultan esenciales, a su vez,
para desarrollar las habilidades sociales.
 Necesidad pero no suficiencia: Poseer una inteligencia emocional subyacente no garantiza que la gente
acabe desarrollando o ejerciendo las competencias asociadas con ella.
 Genéricas: La lista general resulta, hasta cierto punto, aplicable a todos los trabajos, pero cada profesión
exige competencias diferentes.

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