HUMILDAD

Una ruleta es la mejor descripción de la vida. En constante cambio, unas veces arriba otras
abajo. Eso debe de estar muy claro.
Nuestra divina escencia nos hace a todos iguales, en ese orden de ideas, podemos ver que
todos somos almas sedientas de amor de Dios, almas puras en eterna lucha por llegar a casa.
Unas de pronto lo saben otras quizá no, aquellas que están más perdidas pero buscan sin
saberlo llegar.
Todos somos amor puro de Dios y para él somos todas igual de valiosas, si él nos cuida y ama
tanto, por qué tenemos que sentirnos unas más que otras.
Veamos en todos los seres a Dios, en la cara triste de un anciano abandonado, en el rostro
mugrientos del mendigo, en la cara feliz del niño juguetón, en el rostro angustiado del
hambriento.
El dinero, la belleza, los títulos, la posición económica, la posición social etc. No nos hace mas
que otros, tampoco la sabiduría.
Pensemos, hablemos y actuemos en base al amor, eso es lo verdaderamente valioso.
Veamos en los otros la escencia pura del amor.