Eating is one the most important events in everyone’s life.

We depend on eating: the foods we eat are the sole

source of our energy and nutrition. But we also know so little about eating - about how the foods we eat
everyday affect our health. We are more confused than ever about the link between diet and health: margarine
is healthier than butter or not; a little alcohol will keep heart attacks at bay but cause breast cancer; dietary
vitamin antioxidants can prevent lung cancer or can not. Eating is a paradox and a mystery that our ancestors
tried and modern scientists are trying to solve
Based on experiences and traditions, our ancestors have used foods and plant materials to treat various kinds of
illness. Manuscripts discovered from a tomb (dated 168 B.C.) in China described prescriptions for 52 ailments
with herbs, grains, legumes, vegetables, animal parts, and minerals. Ancient Sumerians recorded the use of 250
medicinal plants on tablets five thousand years ago.
The pharmacological roles of everyday foods have long been neglected by modern medicine due to lack of
proven scientific validity. The main focus of modern medicine is on pharmaceuticals.
However, while there continues to be great strides made in the understanding and use of pharmaceuticals,
there is also widespread dissatisfaction with both them and the system of medicine that utilizes them. This
dissatisfaction is centered around the feeling that they are too disease-oriented, and perhaps too limited by their
precision to cope effectively with the subtle factors and interrelationships that compromise human health and
disease. The precise and pure nature of modern biomedical pharmaceuticals also tends to increase their side
effects. In addition, with the victory over many common infectious diseases, more people are concerned with
chronic degenerative processes and with prevention of disease. The increasing concerns have started a new
movement in medical research. More and more mainstream scientists are reaching back to the truth of ancient
food folk medicines and dietary practices for clues to remedies and antidotes to our modern diseases.

Comer es uno de los eventos más importantes en la vida de todos . Dependemos de la

alimentación : los alimentos que comemos son la única fuente de nuestra energía y
nutrición. Pero también sabemos tan poco acerca de la alimentación - sobre cómo los
alimentos que comemos todos los días afectan a nuestra salud. Somos más confundido
que nunca acerca de la relación entre la dieta y la salud : la margarina es más saludable
que la mantequilla o no, un poco de alcohol mantendrá a raya los ataques del corazón
pero causan cáncer de mama, los antioxidantes vitamínicos en la dieta puede prevenir el
cáncer de pulmón o no. Comer es una paradoja y un misterio que nuestros antepasados
trataron y los científicos modernos están tratando de resolver
Con base en las experiencias y tradiciones , nuestros antepasados han utilizado
alimentos y materiales de plantas para el tratamiento de varios tipos de enfermedades .
Los manuscritos descubiertos de una tumba (de fecha 168 aC ) en China describen
recetas para 52 dolencias con hierbas , granos, legumbres , vegetales , partes de
animales y minerales. Sumerios antiguos registran el uso de 250 plantas medicinales en
tablillas de hace cinco mil años.
Las funciones farmacológicas de los alimentos diarios de largo han sido descuidados
por la medicina moderna debido a la falta de validez científica comprobada . El objetivo
principal de la medicina moderna es en los productos farmacéuticos .
Sin embargo, aunque sigue habiendo grandes avances en la comprensión y uso de
productos farmacéuticos , también hay una insatisfacción generalizada con ellos y para
el sistema de medicina que los utiliza . Esta insatisfacción se centra alrededor de la
sensación de que están demasiado orientados a la enfermedad , y tal vez demasiado
limitados por su precisión para hacer frente eficazmente a los factores sutiles e
interrelaciones que comprometen la salud humana y la enfermedad. La naturaleza
precisa y pura de los productos farmacéuticos biomédicas modernas también tiende a
aumentar sus efectos secundarios . Además , con la victoria sobre muchas enfermedades
infecciosas comunes , más personas se preocupan con procesos degenerativos crónicos
y con la prevención de la enfermedad. Las preocupaciones crecientes han comenzado un
nuevo movimiento en la investigación médica. Cada vez más científicos convencionales
están llegando de nuevo a la verdad de las antiguas medicinas populares alimentos y
prácticas alimentarias de pistas sobre los remedios y antídotos a nuestras enfermedades
modernas .