Sie sind auf Seite 1von 9

EL LEGADO

CONCEPTO

(P, Eugene, año, 2005, “Tratado Elemental del Derecho Romano”,


pag.732): Es la especie de donación dejado por un difunto. Una
liberalidad hacia el legatario; tal es, en efecto, la idea dominante. Pero
esta definición, exacta bajo Justiniano, era incompleta en la época clásica;
ella descuido varios caracteres esenciales de los legados, que había
desaparecido ya antes, o que el mismo había suprimido. He aquí los
principales:

A. El legado solo podía ser dejado por testamento.


B. El legado debe estar formulado en términos imperativos, por ser
una ley para heredero.
C. Los legados solos se podían ser impuestos al heredero
testamentario.

Es una parte de la sucesión que le era quitada delibatio hereditatis. Ser


término por decidir que el legado no podía antes que la institución.
(Leonardo L y Otros, año, 2005, “Herencia y Legado”, Universidad
Católica Santo Toribio de Mogrovejo, Chiclayo, Perú): Legado, en su
origen su objetivo consistía de realizar atribuciones del caudal
hereditario a título particular: una especie de regalo que hace el
testador para después de su muerte y que ha de pagar o entregar el
heredero. Esta descripción conviene a la mayor parte de los legados,
pero no a todos ellos por ser extensísima su posibilidad
caracterológica.

FORMAS DE LEGADOS

Para Florentino, el legado es una sustracción de la herencia que el


testador hace para dársela a otra persona. Modestino definió el legado
como una donación dejada por testamento, mientras que Justiniano
también lo consideró como una donación hecha por el fallecido.

Las diversas formas de legado que están vigentes provienen del


derecho romano.

Constituía una figura jurídica de importancia que contaba con varias


modalidades.

Existía el legado vindicatorio (per vindicationem) mediante el cual el


testador hacía una atribución directa al legatario de un bien de su
propiedad. Después de la muerte del testador, el legatario podía tomar
posesión de la cosa legada. Si los herederos pretendían desconocer
su derecho, ejercía una acción reivindicatoria contra ellos.
El legado per damnationen no atribuía de manera directa la propiedad
de la cosa al legatario. Ordenaba a los herederos, o a uno de ellos,
entregarle la propiedad al legatario. Constituía una obligación para los
herederos y un derecho para el legatario.

En el legado de precepción (per praeceptionem), el testador entregaba


un bien de la herencia a uno de sus herederos. Era una suerte de
prelegado.

El Legado sinendi modo. Se parecía al legado per damnationem.


Como éste, el legatario tenía una actio ex testamento, de carácter
personal, en contra del heredero, para reclamar la entrega; pero el
objeto de este legado se limitaba a los bienes pertenecientes a la
sucesión o al heredero.

CARACTERES DEL LEGADO

La institución de los legados sólo puede llevarse a cabo mediante


testamento. Por tanto, la existencia del legado es extraña a la
sucesión intestada y a la sucesión forzosa o legítima. El legado es un
acto voluntario del testador, éste puede revocarlo en cualquier
momento. El legado ha de tener necesariamente contenido jurídico-
patrimonial, sin que su institución pueda limitarse a meras
recomendaciones, expresiones de afecto o consideraciones de
parecida índole.
LA ADQUISICION DEL LEGADO

(Wilmer. C, “Manual de Derecho Romano”, pag.97):

a) Si el legado es puro y simple, es adquirido y exigido en él,


momento de la adición de la herencia.
b) Si el legado es a término o condicional, no basta con la adición,
sino que es necesario que el término haya vencido o que se
haya cumplido la condición.

(P, Eugene, año, 2005, “Tratado Elemental del Derecho Romano”,


pag.739): cuando el legatario ha adquirido su legado de un modo cierto y
definitivo, puede exigir el pago; y para determinar en qué momento tiene
lugar esta adquisición, hay que por un término o por una condición.

a) Si el legado es puro y simple, es adquirido y exigido en el


momento de la adición de herencia, pues es, en realidad, cuando
el testamento produce su efecto y cuando hay también una
persona a quien el legatario puede reclamar el pago del legado.
b) Si el legado es a término o condición, no es bastante con que la
adición haya tenido lugar para que el legado sea definitivamente
adquirido o exigible; es necesario, además, que el termino haya
vencido, o que la condición este realizada.

La teoría del dies cedit, referente a la adquisición de los legados,


había que preguntar en que momento era preciso colocarse para
reglar los tres puntos siguientes:
 La transmisibilidad del legado a los herederos del legatario.
 Las personas que debe beneficiarse del legado; porque puede
ocurrir que el legatario pase a condición de sui iuris a la de alini
iuris, o recíprocamente.
 La extensión del legado, puesto que el objeto puede ser
susceptible de aumento o diminución; por ejemplo: si es peculio
o un rebaño.

Para un legado puro y simple, los jurisconsultos romanos nos enseñan


que estas cuestiones debían resolverse colocándose a la muerte del
testador. Dicen en este sentido: ex die mortis, dies (legati) cedit. Esta
misma solución estaba admitida para los legados a término cierto.

El legado a término cierto: la diei cesio se colocaba a la muerte del


testador. Por tanto, el legatario que muere después de esta época, y que
aunque no haya habido aun adicción, trasmite su derecho al legado a sus
herederos.

EL OBJETO DE LOS LEGADOS

(Wilmer. C, “Manual de Derecho Romano”, pag.97): Los legados podían


tener por objeto todas las cosas dentro del comercio, podían ser cosas
corporales o incorporales, e incluso universalidades de cosas.

1. Legados de cosas corporales: podía ser de cosas genéricas o


específicas. En el primer caso solo se exigía que el objeto no fuera
muy indeterminado. Si se trataba de una cosa determinada, podía
ser una cosa del testador, del heredero o de un tercero (eso ultimo
solo en el legado per damnationem).
2. Legado de cosa incorporales: El testador podía legar un derecho
real como, por ejemplo: una servidumbre o un usufructo.
3. Legado de crédito: Debía hacerse per damnationem y el legatario
tenía la actio ex testamento para obligar al heredero a cederle el
crédito legado.
4. Legado de liberación: Es el legado de un crédito que tenía el
testador contra el legatario.
5. Legado de deudas: Es el legado de lo que el testador debía al
legatario. Solo se aceptaba si le procuraba alguna ventaja al
legatario.
6. Legado de opción: Es el legado del derecho de escoger un objeto
determinado entre lo que forma la sucesión.
7. Legado de una universalidad: podía ser de dos forman:

a) Legado de una parte alícuota de la herencia: en este caso


los preculeyanos consideraban que el legatario tenía
derecho a su parte de los bienes de la herencia, mientras
que los sabinianos opinaban que solo se le debía el valor
estimado de dicha parte.
b) Legado de peculio: El testador legaba a un tercero o a su
esclavo los bienes cuya administración les había
encomendado.

LEGADO DE COSAS CORPORALES GENÉRICAS O ESPECÍFICAS

Legado de cosas genérica: se ha legado, por ejemplo, un esclavo o un


caballo. Este legado es válido, con tal de que el objeto no sea muy
indeterminado; es una cuestión hechos.
En la época clásica, este legado podía hacerse per vendicationem, si el
testador tenía en su patrimonio cosas de la especie de las que había
legado, siendo entonces el legatario investido de la acción in rem, a quien
pertenecía la elección.

Legado de cosa específica: el testador ha podido legar su propia cosa,


la del heredero o la de otro. Este último caso merece una atención
especial.

El legado de la cosa de otro solo es válido en el derecho antiguo si estaba


hecho per damnationem. Después el senadoconsulto Neroniano le hizo
valido como tal, cualquiera que fuese la fórmula empleada, y bajo
Justiniano ya no hubo porque preocuparse de la forma. Pero desde la
época clásica se subordino la validez del legado de la cosa de otro a una
distinción que al parecer fue sancionada por Antonio el Pioadoso .

Es necesario averiguar si el testador sabe o ignora que la cosa que lega


pertenece a otro. Si lo sabe, el legado es válido, y entonces el heredero
esta obligado adquirir la cosa y cedérsela al legatario.

LEGADO DE COSAS INCOPORABLES

El testador puede legar un derecho real, lo mismo que una servidumbre


predial, un derecho d usufructo, de uso o de habitación. Es más, era esto
diferentes derechos un modo de constitución muy usado:
1. Legado de crédito: este legado debía de hacerse per
damnationem. Bajo Justiniano, no daba la acción real, y el legatario
lo único que podía hacer era forzar al heredero por la acción ex
testamento, a cederle el crédito.
2. Legado de liberación: el testador puede legara su deudor su
liberación, empleando la forma del legado per damnationem. Por el
efecto de este legado, el deudo no está liberado, porque el legado
o es un, un modo de extinción de las obligaciones, y el heredero
solo está obligado a liberar al legatario, que tiene contra él la
acción ex testamento, para forzarle.
3. Legado de deudas: el legado, siendo esencialmente una
liberalidad, la disposición por lo cual el difunto ha legado a su
acreedor lo que debe: tito quod ei debeo do lego, era nula en
principio, no dando al legatario nada más que lo que le era debido;
este legado solo era válido si le procuraba alguna ventaja: por
ejemplo, si el testador ha legado pura y simplemente lo que debía a
término o bajo condición.
4. Legado de opción: el difunto ha podido legar el derecho de
escoger un objeto de una naturaleza determinada, entre los que se
encuentran en la sucesión. Lo que alega es una cosa incorporal, la
elección, optio, electio. El legatario tiene la opción de elegir y
puede quedarse con la mejor.

LEGADO DE UNA UNIVERSALIDAD

Aunque el legado o recae en principio más que sobre cosas consideradas


a título particular, los textos citan dos casos de legados que tiene por
objeto una universalidad: el legado de una parte de la herencia y el legado
de un peculio. Ulpiano llama partitio este legado que hacia per
damnationem: heres meus cum titio hereditatem, o dividito. El legado era
entoces de la mitad de la herencia, y se podía también legar de alguna
fracción de la sucesión.

Das könnte Ihnen auch gefallen