Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
Semana 1
Madre
Feto
Unos cinco días después de que se haya producido la fecundación del óvulo, el nuevo
embrión llega al útero femenino y pasa a llamarse blastocisto. En primer lugar, el blastocisto se
adhiere a las paredes del útero y, seguidamente, se incrusta profundamente en las paredes del
endometrio. Es entonces cuando se ha producido la llamada implantación del óvulo, momento
que da comienzo al embarazo.
Semana 2
Madre
A las 2 semanas de embarazo, se espera que finalmente sea un solo óvulo maduro el
que inicie el viaje hacia las trompas de Falopio y, posteriormente si es fecundado, hacia el útero,
debes saber que ambos ovarios contribuyen al crecimiento de los folículos.
Feto
Una vez expulsado el óvulo, este traspasa la superficie del ovario y se dirige hacia la
trompa de Falopio, cuyas pareces se contraen y relajan para arrastrar ese óvulo a través del tubo,
lo que marca el inicio de su viaje hacia el útero, donde se implantará finalmente el feto.
Junto con el óvulo maduro, se desprenden algunos fluidos del folículo ovárico, así
como hormonas como la progesterona, que a su vez estimula el engrosamiento de la membrana
del útero.
Semana 3
Madre
A su vez, esta mantiene los niveles de progesterona altos, algo esencial para la
supervivencia del embrión y el correcto desarrollo del embarazo.
Aunque todavía no haya una evidencia clara de embarazo, ya que aún no te ha dado
tiempo a comprobar si el periodo se ha retirado o no, es cierto que hay algunas señales que
indican que todo va por buen camino.
Feto
Una vez fecundado el óvulo, este empezará un proceso de división celular, dando
lugar primero a un cigoto (de solo 0,1 mm de diámetro y 16 células), después a una mórula
(llamada así por su similitud con el fruto) y, por último, al blastocito, una especie de pelota de 58
células.
Semana 4
Madre
Esta es una semana crucial, ya que es cuando podrás confirmar si estás embarazada.
Es probable que ya se hayan empezado a notar los primeros síntomas del embarazo como las
náuseas, el cansancio o un olfato extremadamente sensible, pero no solo eso, ya que en el interior
el embrión ya empezó a desarrollarse.
Feto
El embrión, a su vez, estará formado por dos capas de tan solo células que se dividirán
muy rápidamente para formar el inicio del cuerpo del bebé.
Esta pelota celular o blastocito, que al principio medirá 0.5 mm y crecerá a un ritmo
de milímetro diario.
Madre
Por un lado, el saco amniótico es un saco repleto de fluido que aloja el embrión en
desarrollo. El saco gestacional, a su vez, nutre al embrión hasta que la placenta se estabilice y
pueda proporcionar nutrientes a través de su riego sanguíneo.
Feto
Madre
Además de los cambios más evidentes, cuando el embarazo está en las 6 semanas
el cuerpo sufre importantes transformaciones en lo que se refiere al aspecto interno de la
estructura ósea y de todos los órganos.
Feto
El embrión tiene ahora 14 somitas, que son los pilares del sistema musculo esquelético
del bebé y mide 4 milímetros desde la coronilla hasta las nalgas.
En su cabeza aparecerán dos pequeños hoyos a lado y lado que, después, darán paso a
sus ojos; su cabeza se doblará hacia el cuerpo y en su cabeza y cuello se esbozarán la mandíbula
inferior y su laringe.
En su tren inferior se desarrollará una protuberancia parecida a una cola que, después,
dará lugar a sus piernas. En el tren superior también aparecerán unos pequeños primordios que
darán lugar a sus brazos. A estas alturas del embarazo, el saco gestacional sigue suministrando la
mayor parte de la alimentación del bebé, ello se debe a que el cordón umbilical, que contiene
vasos sanguíneos que entran y salen de la placenta en formación, todavía no suministra al bebé
todos los nutrientes que este necesita.
En la semana 6 del embarazo, el que sí que empezará a hacer circular la sangre
alrededor del cuerpo del bebé es su corazón.
Semana 7
Madre
Feto
Durante estas próximas semanas el embrión va a adoptar una forma cada vez más
parecida a la de un bebé.
Las encargadas de guiar su desarrollo van a ser tres grupos de células: el primero se
encargará de formar a piel y el sistema nervioso; el segundo, de los vasos sanguíneos y los
músculos, y el tercero, de todo el sistema digestivo.
El embrión sigue teniendo una cabeza muy grande en comparación con el resto del
cuerpo, pero en su interior el corazón ya se ha dividido en dos cámaras.
Los pulmones tienen un bronquio primario para permitir el paso del aire, el cerebro se
divide en dos hemisferios y va aumentando de tamaño, y empiezan a aparecer las fosas nasales y
las órbitas de los ojos.
La placenta sigue su proceso de estabilización, aunque todavía no está preparada para
servir de fuente de suministro.
Esta semana, los órganos vitales del embrión como los pulmones y el intestino se
empiezan a desarrollar, el hígado empieza a producir glóbulos y el páncreas empieza a segregar
insulina.
Semana 8
Madre
Feto
Esta semana también estarán formados el labio inferior y la mandíbula. Por otro lado,
la cola del embrión empieza a desaparecer y acabará siendo reemplazada por los cuatro huesos
unidos que formarán el coxis o parte inferior de la columna del bebé.
En la semana 8 de embarazo, los ojos y orejas del embrión empiezan a crecer, los
dedos de sus pies y manos comienzan a formarse, aunque aún permanecen unidos, y los codos ya
son visibles. Ya se diferenciarán las válvulas aórtica y pulmonar, y que ya late a unos 160 latidos
por minuto.
En esta fase, su cerebro es una estructura hueca unida a la médula espinal, pero que
ahora empieza a torcerse y formar cinco áreas distintas divididas entre el cerebro posterior,
formado por puente, médula y cerebelo, y el cerebro medio, donde habita el tálamo y los dos
hemisferios cerebrales, que ahora todavía son muy blandos.
Semana 9
Madre
También es probable que sea cuando las náuseas estén en pleno apogeo, aunque deben
pensar que es probable que remitan dentro de pocas semanas, justo cuando el primer trimestre
toque a su fin.
El cuerpo sigue adaptándose poco a poco a la presencia del bebe, de ahí que se nota
también dolor pélvico y ligeras contracciones, lo cual indica que el útero sigue creciendo.
Feto
Esta semana, sus manos y deditos de las manos ya asoman y sus piernas se alargan
hasta dar paso a los pies. Además, su rostro empezará a adquirir un aspecto más parecido al
nuestro y, aunque no se note todavía, el bebé comenzará a realizar pequeños movimientos.
Esta semana todos los órganos principales del sistema digestivo del bebé ya se han
empezado a desarrollar, aunque todavía no pueden llevar a cabo ninguna función digestiva.
Semana 10
Madre
Feto
A partir de ahora ya se podrá empezar a calcular su peso, que en esta semana rondará
los cinco gramos.
A sus órganos todavía les queda un largo camino por delante para funcionar por sí
solos, aunque debes saber que la placenta ya funciona completamente y se convertirá en el
soporte vital del bebé hasta el final de la gestación.
Esta semana, la cabeza del bebé se separa ligeramente del pecho, algo a lo que
contribuye el progresivo crecimiento de cuello y mandíbula.
Su nariz sobresale de la cara, la boca y los labios se han desarrollado casi
completamente, igual que el oído externo, que ya está enteramente formado, aunque no ocupe
todavía su posición final, que será más arriba.
Semana 11
Madre
A partir de esta semana, empieza un periodo más tranquilo del embarazo. Las
molestias matinales empiezan a desaparecer y los síntomas típicos del primer trimestre empiezan
a suavizarse.
Feto
A las 11 semanas de embarazo, el feto mide unos tres centímetros desde la coronilla
hasta las nalgas, y pesa en torno a los ocho gramos.
Durante esta semana, el bebé empieza a generar sus propios glóbulos rojos. Pronto
empezará a producir orina, el principal componente del líquido amniótico, donde el bebé
comenzará a estar muy activo, dando patadas y retorciéndose, aunque tú de momento no lo
percibas.
Unos movimientos a los que se sumarán los de la cabeza, unida ahora al tronco por un
cuello mucho más estirado, en la boca del bebé ya se ha formado también el paladar duro.
Los ovarios o testículos empezarán a formarse y en el caso de que esperes un niño,
sus testículos comenzarán a producir testosterona, la hormona masculina.
Semana 12
Madre
El aumento del flujo sanguíneo aumenta la sangre en los vasos sanguíneos y las
hormonas producen más glándulas sebáceas. Por eso, tu piel tendrá un aspecto más fresco y sano.
Feto
Sus miembros están totalmente formados y se han alargado, su cabeza tiene una forma
mucho más redondeada, su boca puede abrirse y cerrarse, sus orejas están prácticamente donde
les corresponde y sus intestinos, que hasta ahora estaban sujetos a la base del cordón umbilical,
se desplazan a la cavidad abdominal, donde ya hay espacio para ellos.
Semana 13
Madre
Feto
Los brazos y las piernas se estiran rápidamente, las articulaciones de la cadera han
madurado y se han separado los dedos de los pies.
Su cuerpo no tiene grasa y sus huesos empiezan a intuirse bajo su delicada piel.
En este momento, el bebé está muy activo en el saco amniótico, donde flota y tiene
espacio suficiente para moverse con libertad.
Ahora, la frente del bebé está elevada y abultada. En ella se pueden ver las uniones de
las placas de hueso que conforman el cráneo. Los hemisferios cerebrales izquierdo y derecho
comienzan a conectarse y las primeras en madurar serán las fibras motoras, aquellas que
controlan los movimientos.
Después lo harán los nervios sensoriales, que son los que controlan la alimentación. El
desarrollo del cerebro se acelerará notablemente durante las próximas tres semanas y se
completará en unas diez.
Semana 14
Madre
La madre ya está en el segundo trimestre del embarazo y eso se hará visible muy
pronto. Entra la etapa más tranquila del embarazo. Lo normal es que no se noten grandes
cambios en el cuerpo, excepto el aumento de la barriga, que cada vez será más y más grande.
Puede ser que la madre también sude más. Esto se debe al aumento de glándulas
sudoríparas, provocado por los cambios hormonales propios del embarazo.
Feto
El feto ya depende totalmente de la placenta, que ya tiene un tamaño mayor que él,
para su alimentación.
Ahora, el feto ya mide entre ocho y nueve centímetros y su peso es de unos 43 gramos.
Semana 15
Madre
Habiendo dejado atrás los síntomas y molestias típicas del inicio de la gestación, es
posible que a las 15 semanas de embarazo la futura mamá se sienta extrañamente normal o no
tenga la sensación de estar embarazada.
A medida que crece él bebe, es probable que te salga una línea vertical más oscura en
medio del vientre. Se llama línea alba y afecta a un 90% de las embarazadas de alguna manera,
aunque suele notarse más si una tiene la piel oscura.
También puede ocurrir que se oscurezca la piel de alrededor de los pezones, así como
las pecas, lunares y marcas de nacimiento. Estos cambios de pigmentación suelen desaparecer al
nacer el bebé y se deben a las cantidades extra de la hormona estrógeno durante el embarazo, la
cual afecta a las células productoras de melanina de la piel. También son frecuentes las manchas
en la cara debido al aumento de melanina, por lo que deberás cuidarte con cremas de alta
protección solar.
Feto
En la semana 15 de embarazo, el bebé ya ha desarrollado lo suficiente el oído como
para captar sonidos y oír la voz de la madre.
La médula espinal del feto ya está totalmente formada y se extiende por todo el canal
vertebral, con nervios que parten en cada vértebra.
La placenta sufre una nueva fase de desarrollo para cubrir todas las necesidades del
bebé. Su cuello se está alargando y ya puede levantar más la cabeza y separar la cabeza del
pecho.
Sus brazos han crecido lo suficientemente como para acercar sus manitas a la cara y,
además, es posible que le descubras en alguna ecografía chupándose el dedito.
Semana 16
Madre
A las 16 semanas de embarazo, el útero y el pecho cada vez son más grandes.
Durante esta etapa algunas embarazadas afirman empezar a notar los movimientos del
bebé, aunque lo habitual es que sea un poco más adelante, sobre todo si es tu primer embarazo.
Feto
El bebé ya tiene una gran movilidad en las manos y es capaz de abrirlas y cerrarlas.
Es cuando aparece el pelo de las cejas y las uñas en manos y pies. Sus músculos
faciales también se han desarrollado lo suficiente para que el feto realice algunas muecas. Ahora,
la barriga de la futura mamá ya es evidente.
Esta semana, el bebé mide una media de 11,6 centímetros desde la coronilla hasta las
nalgas y su peso es de 100 gramos. Su piel es muy suave y tiene una apariencia rojiza debido a la
poca grasa que hay depositada.
El bebé también empieza a desarrollar folículos pilosos. En su cerebro se están
formando las células nerviosas, aunque su actividad neuronal es todavía muy inmadura, igual
que sucede con el intestino, que pese a poderse hacer cargo a intervalos de pequeñas cantidades
de líquido amniótico que traga el bebé, todavía sigue siendo demasiado inmaduro para funcionar
adecuadamente de manera regular.
Semana 17
Madre
El útero de la madre es cada vez más redondo, se alarga hacia la parte superior del
abdomen y no tiene una posición fija. Cuando está de pie, lo nota más porque roza las paredes
interiores del abdomen. El aumento de peso durante el embarazo, que en este momento debería
ser entre dos kilos y medio y cuatro kilos y medio, no es únicamente debido a la presencia del
niño, sino también a la preparación de una reserva energética en previsión de la lactancia.
Asimismo, desde las primeras semanas, ha observado como los pechos han ido cambiando. Las
hormonas los están preparando para que produzcan leche. La irrigación de sangre hacia los senos
crece para prepararlos para amamantar.
Feto
El bebé tiene mucho espacio para moverse y no para quieto. Se estira, se retuerce y
cambia constantemente de postura, pasando de estar boca arriba a estar boca abajo, y viceversa.
Abre correctamente la boca y ha aprendido a tragar. Periódicamente, traga el líquido
amniótico en el cual está sumergido y lo elimina haciendo pipí.
Dentro de la boca, las papilas gustativas ya han madurado, aunque el bebé no puede
notar ningún sabor todavía, porque las conexiones nerviosas son aún inmaduras.
Semana 18
Madre
En cambio, tu centro de gravedad, a causa del aumento de las dimensiones del útero,
se desplaza ligeramente hacia las piernas, los músculos se relajan, los huesos de la pelvis se
hacen más flexibles y podrías empezar a sufrir de dolor de espalda.
Los pechos crecerán bastante a partir de estas 18 semanas de embarazo, el útero,
asimismo, puede que ya sea lo suficientemente grande como para redondear tu barriga.
Feto
En la semana 18 de embarazo, el bebé es más grande que la placenta por primera vez y
seguirá superándola en tamaño gradualmente. el bebé mide 14,2 centímetros desde la coronilla
hasta las nalgas y tiene un peso medio de 190 gramos.
Semana 19
Madre
Esto se llama leucorrea y está causada por el aumento de flujo sanguíneo en la mucosa
vaginal. A su vez, la vagina toma una coloración violácea típica del embarazo, llamada signo de
Chadwick. Los labios mayores y menores de la vagina estarán más abultados de lo normal.
Feto
Las orejas y los ojos del bebé, todavía cerrados, ya han alcanzado su ubicación final en
la cabeza.
Semana 20
Madre
Ya puede resultar cansado para la madre estar de pie durante mucho rato, algo que se
debe al peso in crescendo del bebé y del útero.
Feto
La columna ya está casi recta y la ecografía también revelará todas sus vértebras. A
partir de ahora, el peso del bebé aumentará más de diez veces y llegará a medir el doble de lo que
mide en estos momentos.
En un embarazo de 20 semanas, el bebé mide unos 16,4 centímetros de la coronilla
hasta las nalgas y pesa en torno a los 300 gramos. A pesar de que el líquido amniótico que lo
rodea distorsiona un poco los sonidos, ya percibe tu voz y los latidos de tu corazón.
Durante esta semana, los órganos abdominales del feto, que incluyen el estómago, los
intestinos y el hígado, están contenidos totalmente en la cavidad abdominal.
Los dedos de los pies y de las manos son muy flexibles, al igual que todo él. De hecho,
el bebé se llevará muy a menudo los pies y las manos hacia la boquita.
Semana 21
Madre
Feto
Sus movimientos todavía son actos reflejos, aunque es cierto que, a medida que sus
vías nerviosas se desarrollan, se expanden y maduran, el bebé ganará control sobre sus acciones.
En las niñas, los ovarios han bajado del abdomen a la pelvis. Los testículos de los
niños han sufrido un descenso similar, aunque todavía no han llegado al escroto.
Semana 22
Madre
Feto
El bebé mide unos 27,8 centímetros desde la coronilla hasta las nalgas y su peso
medio es de 430 gramos.
Ahora, todos sus huesos contienen médula ósea, que puede producir glóbulos, y su
piel almacena en su interior finas capas de grasa corporal que son esenciales para el completo
desarrollo del sistema nervioso. A medida que el bebé va almacenando grasa bajo la piel, esta se
vuelve traslúcida y sus venas se hacen menos visibles.
El sistema límbico del bebé está en pleno desarrollo. Será el encargado de controlar
los sentimientos y emociones. Gracias a él, el bebé puede experimentar cambios en su estado de
ánimo.
Madre
Feto
Sus movimientos ahora ya son muy enérgicos, así que la futura mamá percibirá sus
patadas sin lugar a dudas. En estos momentos, el bebé se estira, bosteza, duerme siestas. Su
coordinación muscular ahora también está mucho más desarrollada.
Semana 24
Madre
Muchas zonas del cuerpo de la madre, como el pecho, los glúteos o la barriga, se ven
sometidos a una fuerte distensión de los tejidos, por eso, es muy habitual que aparezcan las
temidas estrías, que pueden prevenirse mediante una alimentación controlada, gimnasia diaria y
cremas específicas.
Durante esta etapa, es probable que haya empezado a experimentar sofocos. También
suda más. Todo ello se debe a que transporta más peso del habitual y a que hay más sangre
circulando por tu cuerpo.
Feto
El bebé no para de moverse dentro del útero, mide unos 30 centímetros desde la coronilla
a las nalgas y pesa unos 600 gramos.
Los pulmones del bebé cada vez funcionan mejor, aunque todavía no están preparados
para el mundo exterior. Las células comienzan a alinear las ramificaciones de los pulmones y a
producir surfactante, una sustancia que ayuda al correcto funcionamiento de los pulmones.
La semana 24 de embarazo se considera la edad legal de viabilidad del feto. Esto significa
que, a partir de este momento, el bebé es viable y, de nacer prematuramente, los médicos están
obligados legalmente a aplicarle cuidados y tratamientos orientados a salvar su vida en una
unidad de cuidados especiales pediátricos.
Semana 25
Madre
Esto, a su vez, provoca que los jugos gástricos del estómago se derramen en el
esófago. A medida que avanza el embarazo, además, el bebé ocupa cada vez más sitio y aplasta
el estómago, lo que hace que la futura mamá disponga de menos espacio para digerir la comida,
algo que acrecienta las molestias digestivas.
En esta etapa, también son frecuentes los gases o flatulencias, que en ocasiones llegan a
producir tanto dolor que son confundidos con posibles contracciones.
Feto
El bebé ya tiene pestañas y abre por fin sus ojitos. Su lengua sale de la boca y se mueve
hacia los lados.
Sus uñas también empiezan a asomar, aunque aún tardarán en alcanzar la punta de los
dedos.
Su cabeza sigue siendo demasiado grande en comparación con el cuerpo, aunque, poco a
poco, irá adquiriendo un tamaño más proporcionado.
A las 25 semanas de embarazo, el bebé mide unos 30,5 centímetros desde la coronilla
hasta el talón y su peso medio es de 660 gramos.
Las capas más gruesas de células queratinizadas se encuentran en las palmas de las manos
y las plantas de los pies del bebé. A partir de esta semana, se empieza a depositar grasa marrón
en su cuello, pecho y espalda, una grasa que, tras el nacimiento, servirá para generar calor y
energía.
Semana 26
Madre
A partir de este mes, tu peso debería incrementarse en unos 350 gramos por semana,
con un aumento máximo de unos 10 kilos hacia el final del embarazo.
El bebé sigue creciendo, y con él, el útero y la placenta. Por eso, es muy normal que
empieces a sufrir los temidos dolor de espalda y dolor de cabeza. Empezarás a tener una mayor
sensación de pesadez en las piernas.
Feto
Él bebe ya mide unos 35 centímetros, desde la cabeza hasta el coxis, y pesa unos 760
gramos, la carita se afina y, en la ecografía, ya son del todo visibles las cejas y las uñas de las
manos y de los pies.
Madre
Por una parte, existe el irresistible deseo de tener al hijo entre los brazos; por otra, la
tensión que acompaña a este acontecimiento.
A partir de ahora, los cambios hormonales pueden variar semana a semana. Es normal
que tengas los pies y las piernas hinchados.
Feto
Semana 28
Madre
Feto
El bebé mide unos 36,6 centímetros y pesa un poco más de un kilo. Su superficie
cerebral, que hasta este momento era lisa, empieza a tener surcos.
El bebé todavía está cubierto por una fina capa de vello, el lanugo, que le recubre toda
la piel excepto las palmas de las manos, las plantas de los pies y el contorno de los labios.
Semana 29
Madre
En este último trimestre, puede que engordes cerca de cinco kilos. De media, es
normal aumentar de peso medio kilo por semana.
Feto
El bebé mide una media de 38 centímetros desde la coronilla hasta el talón, y pesa en
torno a 1,150 kilogramos.
El lanugo (pelo muy finito) que hasta ahora cubría su cuerpo está empezando a
desaparecer. La mayor parte se pierde antes del nacimiento, aunque en algunos casos el bebé
todavía puede nacer con algunos pelos en la espalda.
Por otro lado, los pliegues del cordón umbilical empezarán a cubrirse por un fluido
gelatinoso cuya función es evitar que este quede comprimido cuando el bebé se gira y se
retuerce.
Esta semana 29 también marca un hito en el desarrollo del bebé por el hecho de
que sus pulmones ya han madurado lo suficiente como para que, en el caso de nacer
prematuramente y pese a necesitar asistencia para respirar, las posibilidades de supervivencia
fuera del útero mejoren significativamente. Empezará a darse la vuelta y a colocarse apoyándose
en el cuello del útero.
Semana 30
Madre
A las 30 semanas de embarazo, la madre habrá notado que las facciones de su cara se
han redondeado y sus manos, tobillos, pies y piernas se han hinchado.
La futura mamá afronta la última etapa del embarazo sintiéndose más pesada que
nunca. Se trata de un efecto absolutamente normal.
Las hormonas son las culpables de sentir estos efectos: el aumento de la producción de
estrógenos y progesterona son los causantes.
Los estrógenos son los encargados de regular la grasa corporal y la progesterona, por
su parte, es la causante de la retención de líquidos.
En este período, las paredes del útero se relajan y los huesos de la pelvis se hacen más
flexibles, para permitir el paso del niño, llegado el momento del parto.
Feto
Sus rasgos están bien definidos y sus proporciones se han reequilibrado. La cabeza ya
no es demasiado grande respecto al resto del cuerpo.
Su piel ya no está tan arrugada, y ahora es mucho más tersa. Ya empieza a colocarse
en la posición definitiva que le permitirá nacer.
Semana 31
Madre
Feto
La longitud del bebé es de unos 40 centímetros y pesa, más o menos, 1,5 kilos.
Su epidermis es más rolliza y rosada, porque el niño tiene ya un poco de grasa bajo la
piel, y los capilares ya no son visibles en la superficie. Sus ojos y sus oídos se afinan, y también
mejora el funcionamiento de los pulmones.
Semana 32
Madre
A las 32 semanas de embarazo, tu cuerpo ya está listo para el nacimiento del niño, y
hasta el momento del parto es necesario mantenerse "en forma", tanto física como
psicológicamente.
Feto
Todos los órganos (estómago, intestinos, pulmones, corazón, riñones) están realizando
el "ensayo general" para poder funcionar perfectamente al nacer.
En los dos meses que faltan antes del parto, el feto aún aumentará medio kilo por mes,
aproximadamente, hasta completar los 3,5 kilos de media que pesan los bebés al nacer.
Semana 33
Madre
El propio feto es el que colabora en este proceso, ya que durante las últimas semanas
distribuye, a través de la placenta, unas hormonas que, absorbidas por la madre, activan
la producción de leche, que estará a punto inmediatamente después del parto.
Feto
En la semana 33, el bebé mide unos 42,4 centímetros desde la coronilla hasta el talón
y pesa en torno al kilo 900 gramos. Sus huesos se siguen endureciendo paulatinamente gracias al
calcio procedente de la dieta de la madre, que atraviesa la placenta.
En esta etapa, las uñas de sus manitas ya han alcanzado la punta de los dedos y sus
papilas gustativas ya se han desarrollado, de manera que puede distinguir algunos sabores de lo
que haya ingerido su mamá.
A su vez, el líquido amniótico que traga el bebé pasa por su estómago e intestinos. Los
deshechos (o meconio) se almacenarán en su colon y los excretará tras el parto.
Madre
A partir de las 34 semanas de embarazo, el tamaño de la barriga se deberá cada vez más
solo al bebé, algo que se explica por la progresiva disminución del nivel de líquido amniótico,
ese que hasta ahora ha ayudado a que los pulmones y los intestinos de tu bebé maduraran y a
controlar su temperatura, además de aportarle las proteínas que necesita.
En estos momentos, la cantidad de líquido amniótico que le rodea está en su punto álgido
y la placenta ya casi ha terminado de crecer.
Feto
Las enzimas digestivas del bebé ya están activas, con lo que, si naciera ahora, sus
intestinos podrían procesar la comida.
Su oído está muy desarrollado y empieza a reconocer los sonidos que le son familiares,
sobre todo la voz de la madre.
En estas semanas, el bebé adopta la posición que tendrá al nacer. Generalmente, hacia
finales del séptimo mes de embarazo, se pone cabeza abajo, que es la mejor posición y la más
frecuente.
Sin embargo, puede haber excepciones que podrían hacer necesaria una cesárea:
presentación de cara (permite el parto por vía natural), presentación de frente (a causa de la
mayor dimensión del diámetro con el que el pequeño se presenta al canal del parto, es necesario
practicar una cesárea) y presentación de hombros (precisa también, casi siempre, de una cesárea).
Madre
Para evitarlo, debes seguir bebiendo entre uno y dos litros de agua diarios, comer
alimentos ricos en fibra, pasear al menos una hora y recurrir a la ingesta de laxantes, enemas o
evacuantes.
Ahora, las varices en las piernas pueden hacerse más evidentes, igual que ocurre con
las estrías, que adoptan un color más rojizo y picarte mucho, algo que paliarás aplicando crema
hidratante en la zona del abdomen.
Feto
Es el caso de sus ojos, que, aunque se abrieron hacia la semana 26, seguirán creciendo
hasta después del nacimiento y, ahora, parpadean, son capaces de enfocar y de llevar a cabo unos
movimientos más coordinados.
Te interesa saber, asimismo, que el desarrollo del cerebro en estas últimas semanas es
muy rápido. El bebé tiende a dormir con mayor frecuencia y, durante sus siestas, va procediendo
a la formación definitiva de su sistema nervioso.
Madre
Feto
El bebé ya mide unos 46,2 centímetros de largo y su peso puede alcanzar los 2,8 kilos.
Se mueve algo menos, puesto que el espacio que le queda es verdaderamente poco.
Únicamente, sería un poco más pequeño que los demás. Sin embargo, no es lo ideal
que nazca antes de término, es decir, antes de la semana 38 de embarazo, puesto que todavía
existe el riesgo de que se produzcan algunas complicaciones.
Semana 37
Madre
Cuando él bebe se haya encajado, es posible que tú te notes algo más ligera, ya que
debido al cambio de ubicación de la presión que ejerce el bebé, ahora podrás respirar mejor.
Feto
El bebé sigue ganando peso, a causa de la grasa que va depositándose en sus miembros
y abdomen. Su oído interno y externo ya están totalmente formados.
Ahora, el fino lanugo que cubría su cuerpo empieza a caerse y a perderse en el líquido
amniótico, algo que no es peligroso, ya que es una fuente natural de proteínas para el bebé, que
lo ingerirá a través del cordón umbilical. En su lugar, el cuerpo del bebé empezará a cubrirse por
unos pelitos cortos, finos y sin pigmentar, o vello.
El pelo terminal, que es más grueso, aparecerá en sus pestañas, cejas y cuero cabelludo.
Madre
A las 38 semanas de embarazo, algunas mujeres todavía aumentan de peso hasta poco
antes del parto, mientras que otras no aumentan durante las últimas semanas de embarazo.
Cada día que pasa se te hace más largo, y las dificultades para dormir se acentúan,
sobre todo, debido al volumen de la tripa y la excitación que te produce la proximidad de la
fecha del parto.
A medida que pasan los días, es más probable que se desencadene el parto. Puede que
experimentes contracciones Braxton Hicks de las que ya hemos hablado-, lo cual ayuda
a ablandar la pelvis y a preparar el parto.
Debes saber que el líquido amniótico que rodea al bebé asegura que tú apenas notes
estas leves contracciones.
Te harán una exploración para ver la dilatación del cuello del útero o cérvix y su grado
de borramiento y, si tienes muchas contracciones.
Feto
Él bebé supera los 3 kilos, mientras que su longitud se mantiene alrededor de los 48,6
centímetros.
En esta semana, entras en la “zona de parto”, pero algunos niños podrían tardar todavía
cuatro semanas. Se puede decir que tu embarazo ha llegado "a término", dicho en palabras más
técnicas.
En realidad, la mayoría de los bebés nacen antes o después de la fecha prevista de parto, y
sólo un cinco por ciento lo hacen en la fecha señalada. El hecho concreto que desencadena
finalmente el parto continúa siendo un misterio, aunque sí se sabe que es el niño el que "decide"
nacer.
Semana 39
Madre
Es probable que una se sienta pesada, torpe y cansada, aunque también impaciente y
excitada ante la inminente llegada de su bebé.
Te costará mucho conciliar el sueño, así como moverte y realizar tus tareas cotidianas,
dentro y fuera de casa. No estarás cómoda ni cuando estés sentada ni tumbada.
Feto
Ahora, el bebé hace unos 40 movimientos respiratorios por minuto. Sus ojos, ya
grandes y bien formados, aún tardarán en sofisticar del todo las conexiones neuronales que le
permiten enfocar.
Los músculos de su cuello se han fortalecido, por lo que ahora es capaz de mantener su
cabeza alejada del pecho. Esta, a su vez, puede estar cubierta por pelo, tener solo algunos
mechones o nada de pelo.
Como ya hemos dicho antes, el pequeño cada vez tiene menos espacio a su alrededor,
aunque todo movimiento, por pequeño que sea, le ayuda a construir su fuerza muscular y a
mejorar su coordinación.
Semana 40
Madre
A las 40 semanas de embarazo, tu cuerpo está más que preparado para dar a luz.
Debes estar atenta a cualquier señal que te envíe y a los movimientos cada vez más
limitados de tu bebé.
Feto
Ahora, el cordón umbilical tiene casi la misma longitud que tu bebé. Los huesos del
cráneo están separados por membranas que permiten que se desplacen, así como que su cabeza
pase más fácilmente por el canal de parto.
No obstante, los extremos de los huesos más largos y las puntas de los dedos de manos
y pies siguen siendo de cartílago, algo que es necesario para que puedan seguir creciendo a
medida que se desarrolla el niño.
En la semana 40 de embarazo, y pese a que el estómago del bebé ya está totalmente
desarrollado, sus niveles bajos de ácido harán que, durante los primeros meses, solo pueda
ingerir leche.
Durante este período evite el alcohol. Ningún nivel de consumo de alcohol está
considerado seguro durante el embarazo. Igualmente, consulte con tu doctor antes de tomar
vitaminas o productos basados en hierbas. Algunos de estos productos pueden ser perjudiciales
para el feto.
El nacimiento normal
En cuanto a las contracciones que suceden en un parto normal. Se puede reflejar que
cuando una Contracción es cada 5 minutos, con duración entre 30 y 40 segundos, es una
dilatación de casi 5 cm. Cuando una Contracción es cada 3 o 4 minutos, con duración de 40 a 45
segundos es una dilatación de unos 6 cm. Cada 2 o 3 minutos, con duración de 45 a 50 segundos,
dilatación de 8 cm. Y cuando las Contracciones son cada 1 o 2 minutos, con duración de
aproximadamente 1 minuto, dilatación de casi 10 cm. Cuando se llega a esta etapa, tendrás poco
tiempo entre una contracción y otra para recuperarte. Puedes sentir una sensación de calor,
estiramiento y ardor en la vagina, acompañado de sudoración alrededor de la boca.
El médico te pedirá que continúes empujando a tu bebé y, una vez que salga un hombro y
luego el otro, el resto del cuerpo saldrá sin esfuerzo por sí mismo. Y en este momento sentirás
dolores, pero el sentimiento de alivio será intenso, El parto se termina con la expulsión de la
placenta.
La hemorragia
La hemorragia está asociada a un tamaño grande del feto o a los embarazos gemelares;
también es más frecuente en las cesáreas frente al parto vaginal. Las mujeres con miomas
también son más propensas a sufrir hemorragias.
Las mujeres mayores de 40 años tienen más dificultad para que se contraiga el útero
tras el parto, un factor que favorece la aparición de hemorragias. Otros factores que dificultan la
contracción del útero son los partos muy largos. La obesidad de la madre es también un factor
prevenible que aumenta el riesgo de hemorragia.
Infecciones
Se producen mayormente en gestantes que tienen mucho tiempo con la bolsa rota. Una
de las situaciones que aumenta el riesgo de infección con respecto al parto vaginal son las
cesáreas. Unidos a estos factores también incrementa la posibilidad de infección el parto
instrumental y la obesidad materna.
“Para evitar aumentar de peso es muy importante que la gestante siga una dieta que no
incremente el número de calorías que la madre consumía antes del embarazo (en el caso de
mujeres con normopeso). También es muy recomendable realizar ejercicio físico aeróbico
incluso en mujeres que nunca han realizado ninguna clase de deporte. La gestación es un buen
momento para empezar.
Sufrimiento fetal
Esto puede asociarse con: un ritmo cardíaco irregular en el bebé, problemas con el tono
muscular y el movimiento, baja cantidad de , que pueden deberse a problemas maternos como
hipoxia, anemia e hipertensión, retraso del crecimiento intrauterino, líquido amniótico con
meconio, entre otros.
Asfixia perinatal
Es cuando la cabeza del bebé ha salido de la vagina, pero uno de los hombros se atasca
dentro del canal de parto.
Si bien no es común, es más probable que afecte a las mujeres nulíparas y es responsable
de la mitad de los partos por cesárea en este grupo.
Los médicos o parteros pueden realizar maniobras específicas para liberar los hombros,
como es el cambio de posición de la madre o girar los hombros del bebé con las manos. De no
resultar, se puede recurrir a una episiotomía para ampliar el espacio para los hombros.
La posición cefálica del feto es la habitual para nacer (95% de los casos), pero los
bebés pueden estar mirando hacia arriba, de nalgas (o podálica) o transversal (acostado de lado),
por lo que puede ser necesario cambiar manualmente la posición o realizar una episiotomía.
Parto precipitado
En conjunto, las tres etapas del parto suelen durar de 6 a 18 horas, pero a veces solo
duran de 3 a 5 horas y comienza con una serie de contracciones rápidas e intensas.
Las posibilidades de un parto precipitado aumentan cuando el bebé es más pequeño que
el promedio, el útero se contrae eficientemente y si existe una historia de parto rápido.
Las desventajas del trabajo de parto rápido para la madre son el riesgo aumentado de
desgarro de cuello uterino y vagina, hemorragia y shock post parto, mientras que para el bebé
existe el riesgo de aspiración de líquido amniótico.
Las complicaciones pueden ser potencialmente mortales donde hay una falta de atención
médica adecuada, pues las principales causas son las hemorragias e infecciones.
Vínculos después del parto
El primer vinculo que crea un bebe es con su madre, ya que lo tiene 9 meses dentro de
ella, y al bebe nacer su primer contacto es con su mama, es muy importante que la madre se
esfuerce por crear un lazo o vinculo bueno con su bebe, en donde haya amor, tranquilidad. Lo
cual hará que él bebe se sienta seguro y protegido, los bebes aunque no lo creamos, perciben
todo aquello que siente su madre, todo lo que habla, por ello es importante hablarle al bebe de
una manera delicada y evitar los ajetreos en la vida de la mama. La madre debe tener tiempo e
intimidad para recibir y acoger al bebe. El vínculo que la madre crea es la base para las
relaciones futuras del niño.
Al momento del bebe nacer el contacto de piel con piel con la madre, el cual hace que se
recuperen del estrés, se tranquilicen, regulen su temperatura y glucemia.
Se dice que los bebes prematuros se recuperan más rápido por el método canguro que por
la incubadora
Composición
La leche materna incluye todos los nutrientes que un recién nacido requiere hasta los seis
meses de edad, por lo que será su único alimento. Los componentes principales de la leche materna,
que son:
Grasas: En cada 100 mililitros de leche hay 3,5 gramos de grasa, aunque la cantidad
que recibe el lactante varía a lo largo de la toma.
Carbohidratos: El principal es la lactosa, cuya presencia es más alta que en otro tipo
de leches y sirve como fuente de energía.
Proteínas: La leche materna contiene una menor concentración de proteínas que la
leche normal, lo cual la hace más adecuada para los lactantes.
Calostro
Antes de nacer tu bebé, tu organismo se prepara para poder alimentarlo. Empiezan a ocurrir
cambios en los pechos, más o menos alrededor de la decimosexta semana de embarazo. Las glándulas
mamarias, formadas por multitud de pequeños sacos llamados alvéolos mamarios, tienen las paredes
tapizadas por las células encargadas de la producción de leche.
Desde ahí, la leche es conducida a través de unos conductos que derivan hasta a la altura de
la areola, donde se ensanchan formando una especie de remansos, llamados senos galactóforos (de
galactos, leche, y foros, llevar), en los que se almacena una pequeña cantidad de leche, esperando ser
succionada por el bebé.
Para el nacimiento del bebé se preparara uno de los alimentos más importantes de su vida, el
calostro. Este alimento es el líquido segregado por las glándulas mamarias durante el embarazo y los
primeros días después del parto, precursor de la leche materna. Está compuesto por inmunoglobulinas,
agua, proteínas, grasas y carbohidratos conformando un líquido seroso y amarillo. Es la primera leche
que se produce y su duración está entre los 2 y 5 días, antes de que se empiece a producir la leche
definitiva. El calostro es un alimento ideal y primordial, ya que en él está la primera inmunización del
bebé y resuelve además las necesidades alimentarias de sus pequeños órganos, aún no maduros.
Algunas diferencias existentes con respecto a la leche definitiva son por ejemplo la
densidad, mucho mayor y más pegajoso. Su color, al calostro lo apodan oro líquido, esto se debe a su
color algo dorado, claro que depende de la mama que lo produce, a veces es más oscuro y otras veces
más claro, pero independientemente de esto, sigue siendo el alimento perfecto para el bebé.
Una madre puede no sentir sus pechos llenos de leche, con lo cual se preocupa, ya que cree
que el bebé no saca nada, pero no es así, el calostro, incluso en pequeñas cantidades, es un especial
laxante que ayuda a estimular el paso del meconio disminuyendo así la posibilidad de ictericia.
Además, se digiere rápidamente y estabiliza el azúcar de la sangre del bebé.
El calostro está ajustado a las necesidades específicas del recién nacido, cumpliendo todas estas
funciones:
Los antioxidantes y las quinonas que contiene el calostro son necesarias para
proteger al bebé del daño oxidativo y la enfermedad hemorrágica.
De modo que con un poquito de paciencia hasta la subida de leche "definitiva", el bebé en
condiciones normales (nacimiento a término y saludable) no necesita otra cosa que esta leche para
alimentarse adecuadamente. Ni la cantidad ni la composición son inadecuadas sino que se ajustan a los
requerimientos del bebé.
Una cosa curiosa es cuando el bebé nace prematuro, el calostro tiene aún más potencial para
prevenir las infecciones. Es especialmente importante que los bebés prematuros reciban el calostro
producido por la madre. El cuerpo del bebé es un trabajo aún no terminado que el calostro se encarga
de finalizar.
Periodos de Lactancia
Bebés prematuros
El pediatra determinará si un bebé prematuro puede ser amamantado o no, dependiendo del
desarrollo que haya alcanzado. Mientras que algunos lo pueden hacer desde el momento de su
nacimiento, para otros habrá que extraer la leche materna de las mamas y suministrarla a través de
jeringuillas, sondas o biberones.
Las tomas de los bebés prematuros suelen ser más frecuentes de lo normal, y además no
suelen succionar toda la leche que necesitan, por lo que es frecuente administrar posteriormente leche
previamente extraída.
En algunas ocasiones, la madre puede dejar de producir la cantidad de leche necesaria para
su hijo. En estos casos se recurre al método canguro, que consiste en el contacto directo entre la piel del
neonato y la madre, lo que estimula la producción de leche.
Conservación de la leche
La leche de la madre puede extraerse de las mamas y conservarse, de forma que el bebé
pueda alimentarse si la madre no puede estar presente en el momento en que lo pida. Además, cuando
se produce más leche de la que el bebé necesita, es recomendable extraerla para evitar problemas como
la ingurgitación o la mastitis.
Según el Comité de Lactancia de la AEPED, el calostro puede conservarse a temperatura
ambiente durante 12 horas. La leche madura se mantiene en buen estado más tiempo, y dependiendo de
la temperatura durará más o menos:
A 15º: un día.
La leche puede adquirir un olor rancio en algunas ocasiones, algo que se puede evitar
escaldando la leche y enfriándola rápidamente después. No obstante, la leche rancia no es perjudicial
para el bebé, aunque generalmente suelen rechazarla por su olor o sabor.
Dolor o grietas en la mama: Surgen a causa de una mala postura al amamantar o porque
el bebé presente problemas para succionar, como un frenillo lingual corto. Para aliviar el dolor, se
recomienda aplicar la propia leche sobre la grieta, o tratar de amamantar con el pecho no dolorido
primero.
Ingurgitación: Es el dolor que se produce en las mamas por acumulación de leche. Para
aliviar el dolor se debe extraer la leche, para lo que se puede recurrir a un sacaleches si el bebé no
quiere tomarla. Para facilitar este proceso se puede aplicar calor sobre los senos, ya que se produce una
vasodilatación que permite que la leche fluya mejor.
Mastitis: Cuando se retiene leche durante mucho tiempo, los lóbulos de la mama
pueden llegar a inflamarse, provocando lo que se conoce como una mastitis. Puede presentar síntomas
parecidos a los de una gripe: fiebre, escalofríos, malestar general, cefaleas, etcétera. Es una infección
que no puede trasmitirse al bebé, y la forma de tratarla es extrayendo la leche (de forma similar a la
ingurgitación) y reposar. Se pueden tomar analgésicos como el ibuprofeno o el paracetamol para aliviar
los síntomas. Continuar amamantando también puede ayudar a revertir los síntomas.
Mastitis.
Es posible que el bebé se muestre más inquieto en ciertos días cuando transcurren cerca de
tres meses de su nacimiento. Esta inquietud se traduce en una mayor insistencia para mamar con
repentinos agarres al seno, lloros o problemas a la hora de dormir.
Esto se debe a que el bebé está creciendo y, por lo tanto, su apetito crece al necesitar más
alimento. En estos días, el número de tomas se verá aumentado, pero de forma natural las mamas
producirán la leche necesaria para que el niño quede satisfecho. En ningún caso se debe recurrir a
alimentar al bebé con leche artificial, ya que se puede producir una ingurgitación debido al
acumulamiento de leche.
Mordidas
La curiosidad del bebé con sus dientes recién desarrollados puede hacer que en ocasiones se
produzcan pequeños mordiscos en el seno, que pueden causar dolor. Para evitarlo, se debe hacer
entender al bebé que no puede hacerlo.
Para ello, se puede retirar al bebé del pecho en el momento de la mordida mientras se le dice
“no” con semblante serio. Poco después, se puede seguir amamantando. Es posible que sea necesario
repetir el proceso varias veces para que el niño entienda el mensaje
La leche materna es el alimento ideal para el bebé ya que contiene todos los elementos
nutritivos que necesita para su crecimiento y desarrollo, así como las sustancias que lo protegen
contra infecciones y alergias. La cantidad y calidad de la leche materna es suficiente, por lo que
no es necesario que le des otros alimentos como agua, té o jugos, antes de los seis meses. Los
bebés amamantados tienen menos probabilidades de desarrollar obesidad tanto en la infancia
como en la época adulta.
Al amamantar al bebé estrecho los lazos de afecto con él o ella, por ello lo mejor es
tratar de que sea una experiencia agradable y tranquila para ambos.
Primer mes
Durante el primer mes de embarazo se forma el tubo neural, estructura embriónica que
más tarde formará el cerebro y la médula espinal. Los defectos en el cierre del tubo neural están
entre los defectos congénitos más severos y comunes en el mundo. Estos defectos son totalmente
previsibles si la madre tiene un aporte suficiente de ácido fólico al momento de la formación del
tubo neural. Debido a que la madre no se da cuenta que está embarazada sino hasta días después
de la formación de éste, es decir, cuando ya no hay nada que hacer, de aquí surge la importancia
de que todas las mujeres en edad reproductiva, que piensan embarazarse, coman alimentos ricos
en ácido fólico y/o consuman suplementos de este nutrimento.
Aparecen los botoncitos de las extremidades, que crecerán para formar los brazos
y las piernas.
El corazón y los pulmones se empiezan a formar. Para el día 25, el corazón
empieza a latir.
El tubo neutral, que se convierte en el cerebro y la médula espinal, se empieza a
formar.
Al final de este mes, el embrión mide entre 1 y 1,5 cm. de largo y tiene principios
de encéfalo, ojos, estómago riñones vestigiales y corazón. El corazón late (60
veces por minuto, aproximadamente).
El embrión ha aumentado ya posee un peso 10.000 veces mayor que el del huevo
que lo originó, pesa menos de 30 gramos.
Segundo mes
A las 6 semanas y con 15 Mm. de largo, el corazón produce alrededor de 140-150 latidos
por minuto.
El embrión se parece cada vez más a un ser humano. Los ojos, nariz, boca y lengua,
aparecen con mayor nitidez; los miembros se alargan un poco y otros brotes empiezan a surgir en
sus extremidades, que más tarde formarán los dedos de los pies y de las manos.
En esta primera fase el embrión tiene una cabeza enorme, si se compara con el resto del
cuerpo: es la época en que se desarrollan principalmente el cerebro y la médula espinal, a partir
de la capa externa de células que forman el llamado tubo neural.
A los 42 días el esqueleto está totalmente formado y ya existen reflejos, sin embargo no
será sino hasta los 45 días ya se pueden registrar los impulsos eléctricos que produce su cerebro.
Parte de ese tubo permanece erecto, formando la médula espinal, mientras que la extremidad
superior se curva, para dar origen al cerebro.
Otro tubo se forma cuando los costados del embrión se curvan uno sobre otro hasta
encontrarse abajo: es el tracto digestivo que, a través de alargamientos sucesivos, dará origen al
estómago y, poco después, a la "cloaca" (la porción final del tubo digestivo de ciertos artrópodos,
en este caso los Humanos).
A partir de la "cloaca" se origina el futuro recto, la vejiga - separada del recto por una
delgada pared que crece entre ellos - y, en las extremidades del tubo, los órganos genitales
externos. El tubérculo genital (protuberancia que se encuentra en el frente de la abertura del
tubo) se transforma luego en el pene o en clítoris. Detrás de esa protuberancia en torno de la
cloaca, se desarrolla pequeños pliegues, que en el hombre sirven para envolver la uretra
(pequeño tubo que sale de la vejiga hacia el exterior) y se prolongan hasta el glande; en la mujer,
estos pliegues se funden y forman los labios menores, es decir, los pequeños labios que rodean la
abertura de la vagina y de la uretra, respectivamente.
Al costado de cada uno de los pliegues surge otra protuberancia: son las dos mitades del
escroto en los varones y los labios mayores en las niñas. El desarrollo del ser continúa en forma
ininterrumpida.
El sistema nervioso y muscular se ha desarrollado a tal grado que el feto puede mover sus
brazos y voltearse ligeramente.
Se forman todos los sistemas y órganos principales del cuerpo pero no se desarrollan
completamente.
Las etapas iniciales de la placenta, la cual hace el intercambio de sustancias nutritivas que
vienen del cuerpo de la mamá y los productos de desecho producidos por el bebé, son visibles y
ya funcionan.
Se forman las orejas, los tobillos y las muñecas. También se forman y crecen los
párpados pero aún permanecen sellados.
Para el final del segundo mes, el feto ya se ve más como una persona, mide como 2,5 cm.
de largo y todavía pesa menos de 30 gramos.
Al final del segundo mes, el embrión posee la mayoría de las características y órganos
internos del futuro ser adulto y a partir de aquí hasta el nacimiento ya no se le considera como un
embrión, sino como feto. Su tamaño al final de este periodo es no más de 5 cm. pesando menos
de 2 gr.
Durante el transcurso de este mes, la futura madre podrá sentir como un nuevo ser dentro
de ella se alimenta mutuamente, se sienten náuseas constantes por la doble alimentación que se
estará llevando, pero no significa comer exactamente de todo el doble, sino los nutrientes por
dos, ya que la constante absorción de nutrientes por parte del embrión es el causante principal de
los mareos, fatigas, rapidez para cansarnos, además que la cantidad total de sangre del cuerpo de
la futura mamá, aumenta.
Tercer mes
Ya tiene todos los órganos que debe tener para desarrollarse. Si bien el feto no mide más
de 1 pulgada o 1 pulgada y 1/2 en este momento, todos los órganos y sistemas principales ya
están formados, que es el inicio de este nuevo mes de vida.
Sus nervios, sus músculos y las conexiones entre ellos se desarrollan rápidamente y
empiezan a trabajar: una gran parte del cuerpo del embrión se vuelve sensible al tacto.
Los dedos de las manos y de los pies ahora tienen uñas suaves. La boca presenta veinte
botoncitos que se convertirán futuramente en los "dientes de leche".
Por primera vez, la madre podrá oír los latidos del corazón de su bebé (10 a 12 semanas).
Durante el resto del embarazo, todos los órganos del cuerpo madurarán y el feto aumentará de
peso.
Durante este mes la cara adquiere aspecto más humano, los ojos en un principio
orientados lateralmente, se localizan en la superficie ventral de la cara, las orejas se sitúan cerca
de su posición definitiva a los lados de la cabeza; las extremidades alcanzan su longitud relativa
en comparación con el resto del cuerpo, aunque las inferiores son aún más cortas y menos
desarrolladas que las superiores
En este mes los miembros se alargan, aparecen las uñas y los órganos sexuales externos
se diferencian lo suficiente para poder distinguir el sexo.
Las asas intestinales son patentemente visibles en el extremo proximal del cordón
umbilical hasta la mitad de la décima semana cuando el intestino vuelve al abdomen.
Los primeros 90 días del desarrollo del embrión, periodo llamado órgano génesis
(formación de los órganos), son sumamente importantes porque en esa etapa del desarrollo es
cuando se producen la mayor parte de las malformaciones congénitas al finalizar el tercer mes, el
feto (como se empieza llamar el embrión a partir de ese momento) puede moverse, patear, tragar,
extender los dedos de los pies, cerrar las manos, girar la cabeza y fruncir la frente.
Sin embargo, aún es muy pequeño para que su madre pueda sentir sus movimientos.
Durante las primeras 12 semanas, el feto es sumamente vulnerable. En este período, todos
los órganos y sistemas corporales más importantes se encuentran en formación y pueden dañarse
si el feto se ve expuesto a drogas, rubéola, radiación, tabaco, y sustancias químicas y tóxicas. A
pesar de que hacia el final de las 12 primeras semanas los órganos y sistemas corporales se
encuentran totalmente formados, el feto no puede sobrevivir de manera independiente.
Cuarto mes
Para ese momento todos los sistemas del organismo del feto están bastante desarrollados.
Mientras tanto la placenta un órgano vital para el desarrollo y el bienestar del feto también se va
desarrollando, y toma a su cargo el ejercicio de diversas funciones.
Una vez oxigenada la placenta funciona como pulmón, creciendo oxígeno y eliminando
anhídrido carbónico, la sangre vuelve al feto.
La sangre fetal circula por las vellosidades coriónicas, en íntimo contacto con la decidua
basal, pero separada de ella por una delgada membrana. De esta manera, las dos sangres materna
y fetal, quedan completamente separadas por esta membrana, que muestra una permeabilidad
selectiva, y a través de la cual se produce la nutrición del feto por la vena umbilical, que se
encuentra también en el cordón umbilical. El cordón umbilical lleva todas las sustancias vitales
de la madre hasta el feto.
Quinto mes
El crecimiento es un poca más lento durante este periodo, pero el feto todavía aumenta la
longitud coronilla a rabadilla hasta alrededor de 50 Mm.
Para el final de esta etapa, también son apreciables las cejas y el cabello.
En el transcurso del quinto mes, un día el feto logrará introducirse el pulgar en su boca,
iniciándose el paulatino aprendizaje de un acto reflejo, Fundamentalmente en su vida
extrauterina: la succión.
Sexto mes
Abre ya las manos y los ojos. De allí en adelante, se prepara para volverse un ser
independiente.
Crece y aumenta de peso; el cabello crece también, y la mayor parte del lanugo se cae.
Como ya es más grandecito dispone de menos espacio para moverse, pero necesita crecer aun
más para sobrevivir con buena salud.
La piel esta generalmente arrugada, en particular en la parte incipiente de este periodo. La
piel es más translucida y de color rosado a rojo por que se ha tornado visible la sangre visible en
los capilares alrededor de las 24 semanas, las células alveolares del pulmón han comenzado a
fabricar surfactante un lípido con actividad sobre la tensión superficial que mantiene la
capacidad de distenderse de los alvéolos.
Un feto nacido durante el sexto mes o en la primera mitad del séptimo tendrá gran
dificultad para sobrevivir aunque pueden funcionar varios sistemas orgánicos, el aparato
respiratorio y el sistema nervioso central no se han diferenciado lo suficiente y aun no se ha
establecido la coordinación entre ambos.
Séptimo mes
En este mes los ojos vuelven a abrirse y el cabello y el lanudo están bien desarrollados.
Se han formado gran parte de grasa subcutánea, lo cual borra muchas de las arrugas. Durante este
periodo la cantidad de grasa blanca del cuerpo aumenta aproximadamente 3,5 %.
El feto a partir de esta etapa puede llorar y hacer ejercicio pateando y estirándose además
ya responde a la luz y al sonido.
El feto ocupa una posición más o menos fija, generalmente se mantienen con la cabeza
hacia abajo, posición que el momento del parto se llama presentación cefálica. A veces en
cambio, la presentación es anormal y aparecen primero las nalgas o los pies, circunstancia que
vuelve más difícil el parto. Existen algunas presentaciones en las que el parto normal resulta
imposible, y no queda otro remedio que recurrir a la cesárea.
Un feto puede sobrevivir en este momento si es que nace prematuramente, debido a que
los pulmones son capaces de respirar, ya que los vasos pulmonares y los pulmones se han
desarrollado lo suficiente como para realizar el intercambio gaseoso. Además el sistema nervioso
central ha madurado hasta la etapa en la cual puede regir movimientos respiratorios rítmicos y
regulares la temperatura corporal.
Aunque el bebé puede sobrevivir al nacer en el séptimo mes, serán necesarios cuidados
especiales durante los primeros meses de vida para ayudarlo a completar su desarrollo. Existe
una gran incidencia de deficiencias visuales y problemas de aprendizaje en los niños prematuros
debido a no haber completado el ciclo de desarrollo dentro prenatal.
Octavo mes
En este mes está presente el reflejo de la luz pupilar. Por lo regular para el final de este
periodo la piel es rosada y lisa y brazos y piernas tienen aspecto regordete, la cantidad de grasa
blanca en el organismo es de aproximadamente de 7 a 8 %. El crecimiento rápido del cerebro.
El feto mide de 40 a 45 cm. y pesa alrededor de 2 kg. , en este periodo los testículos
descienden a las bolsas escrútales.
En esta etapa es cuando el feto adquiere la mayor parte de su peso, en este tiempo se
transmite la mayoría de los anticuerpos maternos, lo que le prestan cierta protección contra
agentes infecciosos en los primeros 6 meses después del nacimiento.
El feto ya está demasiado grande para moverse mucho pero puede patear fuerte y darse
vuelta.
Los fetos de treinta y cinco semanas tienen una firme prenoción manual y exhiben
orientación espontánea hacia la luz. La mayor parte de los fetos durante este periodo final están
rollizos.
Los pulmones del bebé han madurado y están listos para funcionar por su cuenta. Durante
este mes, el bebé aumenta como 225 g por semana.
Los pulmones pueden estar todavía inmaduros. Si naciera antes de las 37 semanas, el feto
sería prematuro pero tendría excelentes probabilidades de sobrevivir.
Al finalizar el noveno mes el cráneo tiene mayor circunferencia que cualquier otra parte
del cuerpo, hecho importante para su paso por el canal del parto. En la fecha del nacimiento el
peso del feto es de 3000 a 3500 gr., su longitud vértice nalga son alrededor de 36 cm., y la
longitud vértice talón de unos 50 cm. Los caracteres sexuales son notables y los testículos deben
estar en el escroto.
Algunas se pueden curar, como las manos de seis dedos o polidactilia (solución
quirúrgica), aunque la mayoría (síndrome de Down, ceguera...) son incurables.
Las causas pueden ser genéticas o ambientales. Hace varios años se desconocían estas
causas; hoy conocemos algunas y podemos procurar la prevención del 40% de los defectos
congénitos.
Las drogas que se venden en las calles no son buenas para la madre... Pero son aún peores
para el bebé que está por nacer.
Si usted toma alcohol como cerveza, vino, refrescos con alcohol, licor o bebidas mixtas
mientras está embarazada:
Su bebé podría nacer con el síndrome alcohólico fetal, o FAS. Los bebés con FAS pueden
ser retrasados mentales. Algunos de estos bebés tienen problemas cardíacos.
De hecho, es mejor dejar de beber ANTES de tratar de quedar embarazada. Tres semanas
después de concebir, ya se están formando los órganos importantes del bebé. Pero a esta altura
puede que la madre no sepa todavía que está embarazada. Durante esa etapa, el alcohol puede
afectar el cerebro y el organismo del bebé en desarrollo.
El bajo peso al nacer es un peso de menos de 5 libras, 8 onzas (2,500 g) al nacer. Un bajo
peso al nacer muy bajo es un peso de menos de 3 libras, 5 onzas (1,500 g).
Los bebés de bajo peso al nacer pueden confrontar problemas de salud graves cuando
recién nacidos y están en mayor riesgo de las discapacidades de largo plazo.
Conocemos algunas, pero no todas, las razones por las cuales bebés nacen demasiado
pequeños, demasiado pronto, o las dos cosas. Los defectos fetales que resultan de las
enfermedades o de los factores ambientales hereditarios pueden limitar el desarrollo normal. Los
bebés nacidos de embarazos multifetales (gemelos, tripletos, etc.) a menudo son de bajo peso al
nacer, aún al término. Si la placenta no es normal, un feto quizás no crezca como debe.
Estos bebés carecen de una mezcla química llamada el agente tensioactivo o surfactante
que previene que las bolsas pequeñas de aire en los pulmones se desintegren. No consiguen
suficiente oxígeno en su sangre o no sale suficiente dióxido de carbono fuera de ellos.
Algunos bebés de bajo peso al nacer tienen desajustes de sal o de agua o un nivel bajo de
azúcar en la sangre (hipoglicemia), que puede causar daño cerebral. Los bebés prematuros tienen
mayor probabilidad de contraer ictericia y de volverse amarillos porque sus hígados pueden ser
lentos para comenzar a funcionar por sí solos. Un problema severo puede conducir al daño
cerebral.
Un bebé prematuro puede ser anémico (no tener suficientes hematíes). Los bebés de bajo
peso al nacer quizás no tengan suficiente grasa para mantener una temperatura corporal normal.
La temperatura corporal baja puede causar cambios en la química sanguínea y un crecimiento
lento.
Los bebés prematuros a menudo tienen un problema del corazón potencialmente
peligroso.
Algunos bebés prematuros tienen enterocolitis necrotizante, una inflamación severa del
intestino que puede dar lugar a la muerte. La retinopatía de la prematuridad, que es un
crecimiento anormal de los vasos sanguíneos en el ojo, puede dar lugar a la visión pobre o a la
ceguera.
Una condición se denomina congénita cuando está presente al nacer. Los defectos del
corazón empiezan en la etapa temprana del embarazo cuando el corazón se está formando. Los
defectos congénitos del corazón pueden afectar a cualquiera de las diferentes partes o funciones
del corazón.
Ciertos defectos del corazón impiden que el corazón bombée la sangre adecuada a los
pulmones o a otras partes del cuerpo. Esto puede causar insuficiencia cardíaca congestiva. Un(a)
niño(a) afectado(a) puede experimentar un latido rápido y dificultades para respirar,
especialmente durante el ejercicio (o en los lactantes, durante la alimentación, resultando en un
aumento de peso inadecuado). También puede ocurrir hinchazón de las piernas o del abdomen o
alrededor de los ojos.
Algunos defectos del corazón dan lugar a una coloración pálida grisácea o azulada de la
piel (llamada cianosis), generalmente apareciendo poco después del nacimiento o durante la
lactancia. En ocasiones, puede retardarse hasta después en la niñez. Es indicativo de los defectos
que previenen que la sangre consiga suficiente oxígeno. Los niños con cianosis pueden cansarse
fácilmente. Los síntomas como la disnea y desmayándose a menudo empeoran cuando el(la)
niño(a) se ejerce. Algunos jóvenes pueden acuclillarse con frecuencia para hacerlo más fácil para
respirar.
Las mujeres que contrajeron la rubéola (sarampión alemán) durante los primeros tres
meses del embarazo tienen un alto riesgo de tener a un bebé con un defecto del corazón.
Tomando alcohol durante el embarazo también puede aumentar el riesgo de los defectos
del corazón -bebés con síndrome alcohólico fetal (FAS, fetal alcohol syndrome) a menudo los
tienen.
Más de una tercera parte de los niños con el síndrome de Down tiene defectos del
corazón.