RADIESTESIA

Introducción a la radiestesia
Es la detección de objetos, personas, energías y de cualquier cosa a través del operador y
utilizando algún elemento para evidenciarlo, habitualmente se emplea un péndulo o unas varillas
metálicas en forma de “L”. Los instrumentos no son más que un medio de manifestar lo que a nivel
inconsciente se percibe, la única misión del péndulo es la de visualizar respuestas propias. 

Para que los resultados sean veraces es necesaria una alta dosis de concentración y de
abstracción de los propios pensamientos, que se adquiere a base de entrenamiento disciplinado y
experiencia. Es la heredera de los antiguos rabdomantes o zahories buscadores de agua,
minerales, tesoros, etc. Desde finales del siglo XIX y principios del XX se profundizó mucho en su
estudio y conocimiento, sobre todo en Europa y especialmente en Francia; el término “radiestesia”
se creó en 1929 por el abate Alexy Bouly. 

Hay dos escuelas según la explicación que se le dé al fenómeno; una es “radiestesia física” que
considera que el cuerpo humano es capaz de detectar o sintonizarse con las frecuencias que
caracteriza y emiten un objeto o persona, la otra tendencia es la de la “radiestesia mental” que
considera que la psiquis humana tiene la capacidad de conocer cualquier dato por sí misma. A
estas dos habría que sumarle la llamada radiestesia “chamanica” creada por el Norte Americano
Raymon Grace; si en las dos visiones anteriores cuenta la sensibilidad y concentración del
operador, en esta perspectiva contemporánea de la técnica se suman los factores espirituales
como la conexión con los “espíritus guía”. La radiestesia funciona tanto en directo con la persona a
analizar o un terreno, como a distancia con una foto o mapa, lo que se conoce como
teleradiestesia. 

En distintos estudios científicos y en distintas épocas, se ha constatado que el ser humano tiene
una sensibilidad a los campos electromagnéticos, de hecho, se ha encontrado la presencia de
diminutos cristales de magnetitas en el cerebro, lo que abre la puerta a una explicación de la
sensibilidad e interrelación con los campos magnéticos terrestres y lo que se interpone entre ellos.
Una corriente de agua, un objeto distinto al resto del terreno en el que se encuentra produce un
cambio en la percepción de el magnetismo terrestre y puede ser percibida por el individuo y
manifestada a través de una varilla, péndulo …

Los instrumentos utilizados más usados en radiestesia son:

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Las varillas o varas con forma de Y, típicas de los zahories y especialmente indicadas para
encontrar elementos, objetos o anomalías en el terreno o en construcciones. Las hay de muchos
tipos, como las varas zahorí de avellano o de otro tipo de madera, dos varillas metálicas en forma
de “L”, la varilla Hartmann, la antena Lecher, y otros modelos. Básicamente es un elemento largo
que se mueve o reacciona de algún modo cuando se detecta un elemento o perturbación. Por
ejemplo, en las culturas andinas utilizaban el llamado “yaku tarina”, consistente en dos varas de
madera tratada, una macho y otra hembra, que se sostienen en equilibrio mientras se camina y que
se inclinan cuando se encuentran agua. Las varas de madera para buscar agua se han utilizado
desde hace más de 4.500 años, se han encontrado imágenes de esta actividad incluso en el Egipto
faraónico.
El péndulo, es un objeto que cuelga de un cordel o cadena, oscila o se mueve cuando da
respuesta a la pregunta formulada por el operador. Existen de muchos tipos, cada uno con una
función o sensibilidad distinta, pero principalmente se pueden dividir en dos grupos: los pasivos y
los emisores. 

Los pasivos están dedicados principalmente a la detección, ya sea en directo o a distancia;

los activos, tienen una función de emitir algún tipo de energía dependiendo de la forma del
péndulo. Por ejemplo, para buscar en un mapa y marcar una posición con exactitud, puede ser
muy efectivo un péndulo del tipo “Luci”. Si se quiere aportar energía para una curación se puede
emplear el denominado “Isis”, que aporta energía de la denominada en radiestesia “luz blanca”.  

Los péndulos emisores, tienen su capacidad activa debido a su forma. Hay péndulos
especiales, como el péndulo Universal o el hebreo, que tienen funciones específicas; cada uno de
los dos mencionados requieren una especialización y aprendizaje concreto. La elección del
péndulo es algo muy especial, muy personal, el usuario debe encontrar afinidad con el
instrumento. 

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El biotensor, es un mango con un extremo flexible, y normalmente una plomada o bola en su
extremo. Se emplea sosteniéndolo con una sola mano, es útil para trabajar sobre el terreno o en
directo sobre una persona, es una herramienta muy sensible y versátil. El giro y la oscilación de la
punta marca el tipo de respuesta que se obtiene de este instrumento. 

Una variación del biotensor es el “aurometro” creado por Verne Cameron, muy utilizado por los
buscadores de metales preciosos. El biotensor con bola de madera, espiral o punta, es empleado
para el diagnóstico en la denominada “nueva homeopatía”.

La radiestesia abrió la visión al conocimiento y manejo de las energías sutiles, pues no solo se
quedó en detectarlas, sino que fue clasificándolas por elementos como el “rayo principal” o los
“colores”, llegando a la conclusión de que determinadas formas emanan energías que pueden
manipularse. Por ejemplo, el descubrimiento de la energía de las pirámides y de su posterior
utilización práctica se debe al radiestesista André Bovis que detectó la radiación llamada “verde
negativo” en un viaje a Egipto y a su regreso a Francia construyó un modelo a escala, pudiendo
comprobar resultados en elementos orgánicos, tales como la conservación, deshidratación y
momificación.

El estudio de las energías producidas por las formas tanto de objetos solidos tridimensionales
como de gráficos hizo descubrir todo un abanico de instrumentos para el tratamiento de
enfermedades y la utilización de sus cualidades sobre los seres vivos. Producto de estas
investigaciones en el campo de la radiestesia surge a partir de la década de 1940 la radiónica
franco-belga, como modo de actuar a distancia.

El concepto de “onda de forma” es la gran aportación de la evolución de los viejos zahories, pues
permitió el desarrollo de los péndulos emisores y de instrumentos de emisión energética.

Todo buen investigador de las energías sutiles debe tener un conocimiento de la radiestesia tanto a
nivel teórico como practico, pues si bien la práctica permite tener un modo de conectar con estos
niveles energéticos, por otro lado, los conocimientos teóricos permiten la utilización de objetos y
elementos cotidianos como emisores de energía. 

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Uso del péndulo
El péndulo es el instrumento radiestésico más conocido y empleado, por su facilidad de
aprendizaje, así mismo cualquier objeto suspendido de un hilo hace las funciones del mismo.
Cualquiera que desee adentrase en la detección y manejo de las energías sutiles debe tener un
aprendizaje del uso de este instrumento, pues para la detección de energías telúricas, el uso de
instrumentos psiónicos o radiónicos, así como en infinidades de investigaciones, es el instrumento
auxiliar por excelencia.  Veamos algunas prácticas para el aprendizaje de péndulo.

Como péndulo puede usarse cualquier objeto suspendido de un hilo o cadena,

tal como un anillo sujeto de una cadena, una bola o cualquiera de los muchos disponibles
comercialmente. El material con el que esté construido es importante, pues determina la
sensibilidad del mismo, cada radiestesista tiene sus preferencias, según el uso y afinidad con el
propio objeto. Para empezar es importante que no pese mucho y que sea grato su manejo, es
decir, que guste la forma y que no tenga una cuerda o cadena demasiado larga o corta. El
denominado péndulo neutro quizás sea el más adecuado para el principiante, este consiste en una
simple esfera de madera sujeta por un hilo. Los péndulos suelen ser pasivos, exteriorizan las
respuestas sensibles del operador, conforme se avance en su uso se pueden utilizar los
denominados “péndulos emisores” que se emplean para limpiar objetos o producir determinados
efectos sobre objetos y personas. 

El péndulo es un visualizador de las respuestas internas que tiene el operador, por lo que por sí
mismo y sin un acuerdo mental para el uso del mismo, es un simple objeto suspendido de un hilo o
cadena. La relajación y la concentración son imprescindibles en el manejo del péndulo para que las
respuestas sean auténticas y no fruto de los prejuicios y condicionamientos del operador.

El péndulo tiene los siguientes movimientos: giro en el sentido de las agujas del reloj, giro en
sentido contrario a las agujas del reloj, oscilación vertical u horizontal y diagonal hacia la izquierda
o la derecha. El usuario debe definir su propio código antes de formular una pregunta. Las
preguntas deben ser concretas, sencillas y han de mantenerse mentalmente con constancia y sin
interferencia en la mente.

Se denomina “testigo” a una representación, muestra o referencia al objeto a investigar. Por

ejemplo si se quiere buscar oro, se puede introducir un poco dentro del péndulo o tenerlo sujeto en
la otra mano. Una fotografía de la persona, o una muestra de la misma (un poco de pelo, unas
gotas de saliva o sangre sobre un papel secante) sirve para poder diagnosticar o tratar a distancia.
Radiestesia es cuando se hace con la persona delante o directamente sobre el terreno y
teleradiestesia es cuando se hace con un testigo o sobre un mapa.

Se debe sujetar el péndulo con dos dedos, de un modo que se esté cómodo y estable, los pies bien
firmes

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 sobre el suelo, y el brazo
pegado al cuerpo de tal modo que de estabilidad. La mano que se emplea para utilizar el péndulo
es la que se utiliza habitualmente para escribir, derecha o izquierda si se es zurdo. El péndulo
funciona por conversión mental, es decir por acuerdos propios, por lo que cualquier posición o
forma de sujetarlo es correcta, siempre y cuando se garantice objetividad en el movimiento del
mismo y que el operador no afecte a sus movimientos. La mano no debe de impedir el libre giro del
péndulo, ni propiciar movimientos involuntarios.

Para aprender el control del péndulo se comienza por obtener obediencia del mismo, sujetándolo
una mano, pensar mentalmente: “Gira libremente”, cuando empiece a hacerlo dar la orden mental:
“Detente”.  Repetirlo varias veces hasta obtener pleno control.

Una primera práctica es aprender a comunicarse de un modo sencillo con el péndulo a través de
un código simple, por ejemplo con un sí o un no. Sujetando el péndulo con una mano, preguntar
mentalmente: ¿Cómo vas a señalar el “sí”?, y observar el movimiento del péndulo. Después
preguntarse: ¿Cómo vas a señalar el “no”? y apreciar su movimiento. Ahora con este código inicial,
hacer unas preguntas obvias para reafirmar la consistencia del acuerdo establecido, por ejemplo:
¿mi nombre es Antonio?, ¿tengo 20 años?, ¿soy de pelo rubio?... Practicar estos ejemplos y otros
similares hasta tener confianza en las respuestas del péndulo.

Otra práctica básica es determinar si es positivo o negativo, aunque normalmente se dice que el
giro en el sentido de las agujas del reloj es positivo y al revés negativo, es mejor tener el propio
acuerdo mental. Para ello extender la palma una mano por el adverso hacia arriba y sosteniendo el
péndulo encima de esta preguntarse: ¿Qué giro indica positivo?, posteriormente preguntar por
como indicará el contario.

También el péndulo nos puede indicar una dirección, por ejemplo preguntar: ¿Dónde está la mesa?
y esperar a que lo indique. O poner dos objetos distintos y pedirle que señale cual es de
determinadas características naturales o propiedad: ¿Cuál de los dos es mío?, ¿señala el objeto
azul?... 

Con los rudimentos anteriores, ya se puede empezar a hacer prácticas de radiestesia. Veamos
algunos ejemplos:

Cara o cruz: Acordar con el péndulo un movimiento para la cara y otro para identificar la cruz de
una moneda. Una vez definido como se indicará la cara o cruz de la moneda, lanzarla al aire y
taparla con una mano, con la otra mientras se sostiene el péndulo e interrogarle sobre si es cara o
cruz.

Polos de una pila: Acordar un movimiento para positivo y negativo, por ejemplo giro en el sentido
de las agujas del reloj será positivo y al contrario negativo. Con los ojos cerrados o tapando con
una superficie opaca,  hacer girar una pila, interrogar al péndulo sobre la posición del polo positivo
y la del negativo.

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Encontrar un objeto: Pedirle a alguien que esconda un objeto en algún lado de la habitación, de pie
sosteniendo el péndulo, pedirle que vaya oscilando en la dirección donde se encuentra el objeto, y
siguiendo hasta que haga un signo de localización. Los acuerdos con el péndulo pueden ser
balanceo en la dirección y giro circular cuando lo encuentre. 

Estas prácticas son sencillas pero nos permiten introducirnos en el uso del péndulo para multitud
de usos en el manejo de energías y en el diagnóstico de enfermedades  o en la detección de
objetos u otras cuestiones.

Tipos de péndulos
Pese a que como péndulo puede servir casi cualquier objeto, a lo largo de los años de evolución de
la radiestesia se han ido desarrollando distintos tipos de estos instrumentos, cada uno para una
función o sensibilidad. Aparte de los péndulos para detección, hay una categoría especial
denominada “péndulos emisores”, que son especialmente útiles para el tratamiento de trastornos o
enfermedades. Incluiremos aquí algunos de los péndulos emisores, dejando los clásicos en este
apartado para una descripción independiente. Veamos a continuación una selección de los más
conocidos y su funcionalidad principal:

Luci: Debe su nombre a un radiestesista francés, empleado para diagnóstico tanto sobre mapas
como sobre atlas de anatomía, similar al péndulo “mimosa” pero de mayor tamaño.

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Mermet: Diseñado por el famoso radiestesista y abad suizo del que heredó su nombre. Lleva
espacio para el testigo del objeto a buscar y es especialmente indicado para teleradiestesia.

Mimosa: De forma delicada, se emplea para trabajos que requieren precisión como todo tipo de
diagnóstico y especialmente en numerología y astrología, para encontrar los valores adecuados.

Cromático: Concebido para detectar el color radiestésico de los objetos, es un antecesor del
denominado “péndulo universal”, pero a diferencia de este, solo detecta no emite. No confundir los
colores radiestésicos, que es un modo de clasificar la frecuencia de vibración con los colores del
espectro visible.

Bola: Se emplea para trabajos de precisión, sobre todo en teleradieistesia sobre mapas o atlas de
anatomía.  Es muy utilizado por su precisión, por ser pequeño y ligero.

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Radión: Sensible a las energías telúricas y especialmente diseñado por su peso para el trabajo de
campo, principalmente para la detección de agua. Lleva depósito para el testigo.

Telúrico: Se emplea en la detección de energías nocivas en terrenos y viviendas. Capta tanto la

energía cósmica, como la de la propia tierra y los campos electromagnéticos que la interfieren.

Plomada: Es el típico péndulo utilizado en construcción, es pesado y no muy grande. Se emplea

para trabajo sobre el terreno y para diagnóstico, aunque por su peso no es muy recomendable para
trabajos prolongados.

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Triangular: Es el más utilizado por los principiantes, es ligero, sencillo y preciso; apto para todo tipo
de usos. Su nombre se debe a su forma.

Cubo metatrón: Tiene seis caras. Es utilizado para despertar la consciencia de los niveles
superiores, tanto para la curación como acelerar procesos de conocimiento superior. Estimula el
sistema energético y elimina influencias negativas. Se le podría considerar un péndulo del tipo
emisor. 

Péndulos minerales: Pueden tener cualquier forma, aunque los más habituales son de forma
triangular o tipo egipcio. Sus propiedades y son las del mineral con el que están hechos, existen
juegos de siete péndulos que corresponden con los chakras para comprobar la el funcionamiento
de cada uno en el paciente o para estimularlos.

  

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Péndulos neutros esféricos, semiesféricos y cónicos: Se impregnan de la energía del objeto al que
se expone. Sirven para limpiar las influencias negativas de las personas y objetos. Son muy
adecuados para todo tipo de investigación y aptos para principiantes. Tras usarlo debe darse con él
unos golpecitos en el suelo para descargarlos antes de guardarlos. Tienen polaridad invertida, de
ahí que se les denomine neutro. También se pueden hacer de yeso además de madera.

Péndulo Mer-Isis: También llamado “Isis extraterrestre”, entraría en la categoría de péndulos

emisores, pues en opinión de algunos radiestesistas es el más apropiado para la curación después
del de Isis. Equilibra y estimula la propia energía del paciente para propiciar la auto curación. Su
movimiento a izquierda tranquiliza y a derecha estimula. 

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Ufo: Llamado así por su forma, utilizado para diagnósticos especiales, en opinión de algunos
practicantes es útil en manejo de cuestiones relacionadas con bazo y el páncreas. 

Péndulo hebreo: Es un cilindro de madera habitualmente de palisandro, atravesado por un hilo de

algodón y al que se adjuntan unas tarjetas con palabras hebreas que viene en el conjunto de
mensajes incluidos con el mismo. Fue ideado por el radiestesista francés Pierre Gellyde al principio
del siglo XX. Es un péndulo emisor enfocado a la curación.

Péndulos emisores
Los radiestesistas franceses y belgas desarrollaron péndulos que emiten radiaciones dependiendo
de su forma fruto del estudio de la onda de forma y sus cualidades. Se utilizan tanto directamente
sobre el sujeto como sobre el testigo o en un gráfico activo con la intención de cargarlos
energéticamente o de transferirles una determinada tendencia.

En algunos de los denominados gráficos radiónicos o activos no solo se emplea el péndulo para
orientar adecuadamente el testigo y el remedio o tendencia en la posición determinada, sino con la
finalidad de potenciar y aportarle una energía extra, ya que algunas de las forma de estos péndulos
emiten la radiación Verde Negativo. Para emitir la radiación sobre el gráfico radiónico se sitúa el
péndulo encima a unos centímetros de la muestra y se hace que gire en sentido horario. La función
de estos péndulos es fundamentalmente para la carga energética y no tanto la detección. Algunos
practicantes de la radiestesia han desarrollado sus propios modelos, pero los más conocidos son:

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Emisor radiónico: Es un péndulo metálico con una parte de cristal y una espiral dentro de ella en la
que se introduce el elemento a irradiar. Si se desea influenciar un remedio para la sanación, se
introduciría el medicamento o elemento dentro de la espiral interior y se haría oscilar encima del
testigo o incluso el propio sujeto. Otro uso es el de cargar un líquido con la vibración del remedio,
para ello se haría girar encima del mismo con el elemento terapéutico en su interior.

Péndulo espiral: Es un potenciador neutro, es decir, carga con la energía  natural del objeto o
elemento, elevándola pero no condicionándola. Su empleo es apropiado para potenciar gráficos
activos y cristales de cuarzo. Además de su capacidad potenciadora es muy sensible a las
energías electromagnéticas y telúricas.

Péndulo Universal: Es el más conocido y específico para la emisión de energía ya que fue
diseñado para ello, permitiendo detectar el tipo de energía que se emite en base a los colores
radiestésicos, así como emitir una gama concreta y específica. Chaumery y De Belizal lo
desarrollaron dentro de sus investigaciones sobre la onda de forma. En su interior consta de una

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pila radiestésica que transfiere la radiación apropiada como portadora, en su esfera se puede
determinar el color radiestésico de detección o de acción. Su uso es un poco complejo y requiere
de cierto entrenamiento. Su precio es bastante elevado.

Péndulo Egipcio: También llamado de “Karnak”, se descubrió dentro de un sarcófago en Egipto. Es

el más adecuado para el principiante por su emisión de energía constante, por lo que no necesita
ser limpiado, siendo de gran utilidad para un radiestesista experto. Su emisión de energía no varía
y potencia la natural del elemento a tratar. Se suele guardar en un recipiente cerámico y se elabora
en metal, madera y piedra mineral.

Péndulo Osiris: Es un péndulo que solo debe de utilizarlo un radiestesista experto y que debe ser
guardado envuelto en una hoja de aluminio, ya que al constar de cuatro semiesferas formando una
pila radiestesia emite por sí mismo radiación del tipo Verde Negativo. Se emplea para tratamiento
de virus y del cáncer, pues, al tener esta radiación tan particular, tiene efectos asépticos y de
momificación. Cuando se utiliza el cordel es conveniente que toque tierra o que se conecte el
extremo a un péndulo Path; después de tratar un objeto, éste debe ser limpiado con Verde Positivo
(Péndulo Universal) o con luz blanca (Péndulo Isis). 

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Péndulo Isis: Se le atribuye la capacidad de generar Luz Blanca según la radiestesia, está formado
por cuatro discos a modo de pila radiestésica, pero genera una radiación distinta al Verde Negativo
por no incorporar semiesferas. Es capaz de limpiar cualquier tipo de influencia o energía y no
necesita ser desimpregnado después de su uso; además, al emitir energía debido a su forma
geométrica, el operador no sufre desgaste alguno. Muy adecuado para principiantes en la
manipulación de las energías sutiles.

Péndulo Iko: Su nombre deriva de la unión en su forma del péndulo de Isis, el de Karnak y el del
Osiris; combinando la emisión energética de las formas de estos tres modelos emisores.  Se
emplea para renovar y desbloquear cualquier tipo de estancamiento, recuerdos impuros o hábitos
viejos que inmovilizan el desarrollo.

Péndulo Atlante: Basado en el símbolo descubierto en el Valle de los Reyes que es utilizado en el

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anillo con la misma denominación. Es muy sensible para la detección de alteraciones de
vibraciones  y del entorno equilibrándolas, es empleado para regular las glándulas hormonales, y
proteger y despertar la intuición.

El biotensor

Los bioteonsores son un tipo de instrumentos radiestésicos

destinados a la detección sobre el terreno o con el sujeto directamente; el más conocido de este
tipo de herramienta es el “Aurímetro” de Cameron. No se conoce su origen exacto, pero poco antes
de los años 60 del siglo XX empezaron a aparecer, el nombre de “biotensor” es una marca
registrada por la empresa Bioplasma GmbH.

Básicamente es un vara radiestésica un  poco más elaborada y

según su creador con una u otra característica sensible. Un antecedente del biotensor es descrito
por el italiano Elio Pasquini en 1955 como amplificador del péndulo en un artículo. Hay muchos
modelos y cada diseñador le pone su propia denominación: el "biotensor"  del Dr. Oberbach, el
"péndulo oscilante" y "tensor de energía" del Dr. Stangl, la "vara universal" de Körbler, la
"bioantena"  de Burbaum, el "biotensor" del Dr. Farkas y el "tensor"  de Weberstorfer. El más
conocido es el “aurímetro” o “aurametro” de Verne Cameron, por lo sofisticado de su diseño y la
popularidad de este radiestesista californiano, nombre adquirido por el conocido antropólogo y
escritor Max Freedom Long. Diferenciándose básicamente este respecto al biotensor por tener
unas vueltas en forma de muelle en el cable que va desde el mango al extremo donde tiene la
terminación en forma de péndulo, además de tener partes más articuladas tanto en el mango como
en la terminación.

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 Es esencialmente un mango con un cable rígido con cierta flexibilidad, que
en su punta tiene un objeto que le hace oscilar en distintos sentidos cuando se detecta algo; a
partir de aquí hay múltiples versiones. En algunos diseños es simplemente el mango con una
antena flexible de distintos materiales, desde metálicos hasta resinosos; en la punta puede tener
una anilla metálica, una especie de péndulo, una bola de madera u otro tipo de remate; entre la
antena y el mango, algunos modelos incluyen un muelle o una espiral. Cuando se quiere tener
algún testigo se le incluye un espacio en el mango para ello o un cable que se pone en contacto
con el sujeto u objeto.

Se emplea para el diagnóstico con el paciente en directo indicando cual es la zona afectada sobre
el terreno para detectar zonas de perturbación energética, para la elección de un remedio o un
alimento adecuado o no, y en general para todos los usos en los que se emplea el péndulo.

Los movimientos realizados por el biotensor son reflejo del subconsciente, por lo que se debe
disponer de un código propio para el uso del mismo. Sosteniendo el tensor con la mano dominante
se interroga al tensor sobre las distintas respuestas y sus movimientos, es decir: muestra el
movimiento para el “si”, muestra el movimiento para el “no”, muestra el movimiento para el sentido
“positivo” y manifiesta el sentido “negativo”. Lo común es que con una oscilación vertical muestre el
“si”, con una oscilación horizontal el “no” y con el giro en sentido de la agujas del reloj el “positivo” y
al revés el “negativo”. Como todo en radiestesia se trata de una serie de acuerdos mentales entre
el operador y el instrumento utilizado. Para encontrar un objeto en una determinada localización
bastaría con tener el código de oscilación seguir adelante, giro en un sentido u otro para cambiar
de dirección, y la ausencia de movimiento para indicar el punto exacto. Solo la práctica y la
experiencia hacen que exista una correcta sincronía entre el operador y su instrumento.

Hacer un aurímetro básico: Se requiere un mango de plástico, madera u otro material aislante de
10 cm aproximadamente de largo, por 2 ó 3 de diámetro; un cable de cobre o alambre de aluminio
de unos 2 m de largo y de un grosor que le permita flexibilidad al tiempo que mantenerse recto y
firme; una bolita, plomada o similar. En el mango darle al alambre siete vueltas, doblando en
ángulo recto paralelo a la empuñadura (A); dejar unos pocos centímetros de separación y con un
vaso o cilindro de entre 5 y 8 cm de diámetro, darle 3 vueltas, quitar el cilindro y doblar en el
alambre en ángulo recto en la parte superior del bucle (B). En el extremo libre poner una plomada,

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una bola de madera, una punta piramidal o tipo péndulo (C). Se puede envolver el mango con una
funda de cualquier material aislante para separar el alambre del contacto con la mano.

El biómetro de Bovis

El radiestesista Antoine Bovis en colaboración con el ingeniero Simone,

desarrolló una regla que permite medir la vibración que produce un objeto mediante el péndulo, es
muy conocida y empleada para determinar la energía de una persona o lugar. Es una escala del 0
al 10.000, en una unidad de medida con el su propio apellido: Bovis (UB).  Corresponde con la
longitud de ondas de luz visible expresada en Angstrom.

Es muy empleada está técnica de medida no solo para determinar el estado de salud o a la hora de
evaluar la energía telúrica de un sitio, sino como herramienta en el desarrollo e investigación de
instrumentos radiónicos y psiónicos. 

Según Bovis y tras múltiples pruebas, una persona sana en su escala vibra entre 6500 y 8000, una
persona con cáncer entre 4000 y 4500, mientras que una persona cercana a la muerte da una tasa
de vibración sobre 1000.  

Para saber el valor en UB de un objeto se coloca el objeto o su muestra en el lado izquierdo de la

regla y se pone el péndulo en el centro de la misma, se pregunta mentalmente cual es el valor de
vibración del objeto, el péndulo se desplazará en la dirección que indique hasta que se mueva al
frente o haga un giro. Una vez obtenido el valor, si no se está seguro se pregunta si ese el valor es
correcto, confirmando con el acuerdo radiestésico establecido. La misma técnica puede servir para
medir la energía de un lugar, de un medicamento o de cualquier objeto en general.

Existen distintos modelos de reglas tanto realizadas por el propio Bovis como a partir de sus
modelos por distintos investigadores posteriormente. Aquí representamos el modelo original:

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El biómetro en español:

Otra variante del propio Bovis:

Onda de forma
Las formas geométricas por estar inmersas en un universo energético, emiten unas radiaciones
denominadas onda de forma, que también la producen determinadas formas físicas, colores y
objetos. Los radiestesistas De Belizal, Chaumery, De Bondy, Bondy y Martial, cada uno por
distintas vías, llegaron a las mismas conclusiones, llamando a esta energía de acción real como
“onda de forma”. 

Es la vibración determinada por la forma de las cosas, se mueve en una longitud de onda del orden
de los angstrom. Se podría decir que la onda de forma es la huella que deja el objeto a existir e
interactuar con las energías de su entorno, pudiendo servir de portadora de información, así como
de acciones desde el objeto hacia otros y viceversa. Por lo tanto puede ser utilizado para saber un
diagnóstico, como para portar un efecto al sujeto, es la portadora de la frecuencia en la que existen
las cosas. La mente es capaz de sintonizarse con esta huella de vibración e interactuar a distancia,
pues sirve como portadora; algunas fuerzas electromagnéticas, magnéticas y de otro tipo pueden
incrementar su acción. Al ser la materia energía, ésta se transforma en la medida que evoluciona
su onda forma, pues son parte de la misma identidad. Por otro lado cada acción, cada
pensamiento, genera su propia onda de forma, lo que se denomina onda de forma abstractas. En
la física actual la onda forma y su interactuación entre una y otras,  correspondería a la “resonancia
mórfica”, teorías surgidas del trabajo de  Rupert Sheldrake y de sus experimentos sobre los campo
morfo genético.

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 En general se tratan de construcciones geométricas y dibujos que son
capaces de propagar ciertas influencias que actúan sobre las personas, plantas y objetos. Las
figuras geométricas regulares emiten ondas de forma benignas, mientras que las emitidas por
polígonos y formas geométricas irregulares no compensadas, son dañinas. En esta categoría de
onda de forma entran figuras geométricas como las pirámides, los conos, las pilas radiestésicas,
los dibujos activos (a veces llamados gráficos radiestésicos o radiónicos) y  los dibujos
teleinfluyentes. Si bien es un desarrollo de la radiestesia, entrarían más en el apartado de la
psiónica, aunque a menudo no quede claro la diferencia entre ésta y la radiónica. La psiónica utiliza
la energía de los objetos y sus formas, mientras que la radiónica las cualidades de los
componentes electrónicos analógicos; por lo que las máquinas simbólicas entrarían más en la
primera categoría y no en la segunda.

Los radiestesistas de principios de siglo XX, partieron del estudio de los colores, que no
se refiere a los colores comunes, sino a gamas de frecuencias; encontraron una radiación
misteriosa asociada a la forma de los objetos denominada “verde negativo”. Esta radiación es
capaz de portar la energía a distancia, tanto es su aspecto benéfico como en el contrario; ya que
bien utilizada puede producir la sanación o la enfermedad. En la gama de colores radiestésicos se
encuentra esta energía misteriosa entre el negro y el blanco y si todos los colores giran en un solo
sentido, éste en el verde hace girar el péndulo en sentido contrario; de ahí su denominación de
verde negativo (-V). Su cualidad principal es la deshidratación y la de hacer de portadora de otras
influencias, es por ejemplo la radiación que se encuentra en un tercio de la pirámide y en las pilas
radiestésicas, ambas con propiedades modificadoras.

Para detectar estas energías, se diseñó un tipo de péndulo llamado “cromático”, pues
si con un péndulo normal se puede determinar con un péndulo común, este lleva una marca para
cada uno de los colores radiestésicos. Además de este diseño se realizó otro más avanzado que

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permite tanto detectarla como concentrarlas para un tratamiento, es el llamado “péndulo universal”,
que incorpora unas pilas radiestesicas dentro de las esferas con la marcación de los colores.

Lo más importante de estas investigaciones sobre los colores radiestésicos es que hay una
frecuencia propia emanada de las formas, lo que permitió desarrollar muchos instrumentos
psiónicos, péndulos capaces de generar estas influencias, así mismo gráficos para el tratamiento
de dolencias. Los gráficos activos dieron lugar a las tarjetas geométricas que utilizan los
instrumentos radiónicos de Malcom Rae y posteriormente los 79 dibujos geométricos para sanción
de Don Gerrad, recogidos en el libro llamado “Doctor papel”; más recientemente en las cartas de
sanación de Sai Sanjeevini, sigue la huella de la radiónica desarrollada en Francia y Bélgica a
partir de la onda de forma y de las investigaciones sobre los colores radiestésicos.

Dibujos teleinfluyentes
Jean Martial ideó un método para realizar un gráfico que actuase sobre una foto o testigo a modo
de gráfico radiónico o activo personal. Originalmente se utilizaba junto a una foto de cuerpo entero,
pero se puede emplear en un gráfico activo junto a un testigo del sujeto.

Se necesita una foto de cuerpo entero si una vez obtenido se va a aplicar sobre esta y un trozo de
papel en blanco satinado preferentemente, cinco o seis más pequeños; así como un lápiz de mina
blanda y un péndulo sencillo.

Se pone la foto a la derecha y encima de ésta se sostiene el péndulo, con la mano izquierda se
sostiene el lápiz a unos milímetros sobre el papel. Mentalmente se tiene la idea de que en el papel
hay un dibujo que es beneficioso para la persona. Sosteniendo el péndulo a dos o tres centímetros
encima de la foto se le hace oscilar un poco para centrarlo y frenar la inercia. El procedimiento
consiste en vigilar el movimiento del péndulo sin mirar el papel y bajar el lápiz haciendo una marca
cuando gire, por lo que el desplazamiento sobre el papel debe ser muy lento y cuidadoso. En cada
giro del péndulo se hace una marca, se va recorriendo muy despacio el papel al azar de derecha a
izquierda y en diagonal; tras una primera pasada, si se ha hecho bien se encontrarán unos trazos
con cierta forma. Se repite una o dos veces más, hasta que entre un punto y otro solo quede un
espacio en blanco inferior a 1 milímetro. Entonces solo queda unirlos con tinta, rodearlo de dos o
tres círculos y estaría terminado el dibujo teleinfluyente. Comprobar por medio radiestésico que el
resultado es bueno, preguntándose si el grafico es el adecuado para la persona o el efecto
deseado.

20
Para ponerlo a actuar sobre la foto se sitúa el dibujo teleinfluyente en el centro y se va girando
lentamente, al tiempo que con el péndulo encima a algunos centímetros se espera el giro que
confirme que es la posición correcta. Se repite el proceso para confirmar que es la posición
adecuada, marca con tres puntos la foto y el dibujo para recordar el emplazamiento; dejando actuar
por el tiempo que se determine con el péndulo. 

Cuando se emplea con un gráfico radiónico, dependiendo del diseño utilizado se sitúa donde es
indicado para el remedio o la acción y el testigo en su correspondiente posición. Como en el caso
de la foto se va moviendo lentamente hasta encontrar su posición adecuada. 

Dibujos activos, método de J. Pagot

21
 El radiestesista Jean Pagot ideó un modo de hacer dibujos para generar un
efecto sobre un sujeto, ya sea sobre cuestiones de salud o de estados emocionales. De algún
modo se podría decir que es el método de convertir un pensamiento en forma, en geometría capaz
de activar o dirigir el pensamiento. Es un modo similar al de Jean Martial de los “dibujos
teleinfluyentes” pero de un modo más rápido y ligero, con el que se obtiene el diseño de líneas que
actúen como protector personal o precursor de los deseos.  La teosofía tiene el concepto adquirido
del hinduismo de “kamarrupa” o forma de pensamiento, que algunos artistas han explorado como
método de expresar sus percepciones, como el pintor de Cartagena Vicente Ros (1887-1976), del
que reproducimos una de sus creaciones.

Antes de empezar se ha de elegir el lugar adecuado para hacerlo, asegurándose que este libre de
ondas nocivas o de influencias perjudiciales terrestres, electromagnéticas o de cualquier tipo. Para
ello se consulta con el péndulo, las varillas o el detector táctil. Por métodos también radiestésicos
se ha de elegir el momento adecuado, la atención y el ánimo del operador debe estar en sintonía
con la operación que se va a realizar.

Debe ser muy claro el objetivo del dibujo, concretándolo lo más posible en un papel por escrito, por
ejemplo “María deja de estar triste”. Como testigo se puede utilizar una foto o una muestra
biológica, pudiendo validar el testigo poniéndolo durante unos veinte minutos en un decágono
inscrito en un círculo al modo de los hermanos Servranx. Si se utiliza el modo de validación de los
hermanos Servranx, la nota con el objetivo puede ser empleada como testigo.

Se utilizará una hoja de papel blanco de unos 20 por 20 centímetros, poniendo en la esquina
superior derecha el objetivo del mismo, siguiendo nuestro ejemplo “Dibujo activo para que María
deje de estar triste”. Una vez se haya realizado el dibujo activo, se puede copiar, calcar o hacer
fotocopia del diseño resultante.

Para realizar el dibujo se puede emplear distintos sistemas siendo el último el que más
recomendamos por su minuciosidad y por ser una elaboración más radiestésica:

I. Trazado simple: Concentrándose en el propósito frotar un lápiz suave sobre el papel unos dos o
tres minutos.

II. Trazado libre: Concentrándose en el propósito y a un modo similar al de la escritura automática,

con la punta del lápiz apoyada en el papel, dejar que se mueva libremente sin prefijar como o
donde, dejándose llevar por los primeros impulsos.

III. Seguimiento del péndulo: Concentrado en el propósito, con el péndulo en la mano dominante y
el lápiz en la contraria, pedir que trace el dibujo, reproduciendo lo mejor posible los movimientos
del péndulo con el lápiz. Se mueve en recto, se traza una línea recta, gira se marca un giro, se
desplaza en un sentido u otro se traza con el lápiz… se completarían las líneas interrumpidas con
ayuda de la consulta al péndulo y así se completaría el dibujo.

22
IV. Acuerdos gráficos con el péndulo: Hay que acordar con el péndulo cómo, si oscila
tangencialmente es una curva, paralelamente es una recta… Sobre el papel se va pasando el
péndulo y los puntos, líneas o giros que marque en un primer momento, después se hace otra
pasada con el péndulo uniendo los puntos sueltos, los laterales, etc… Se le pregunta al péndulo si
el dibujo está completo y se concluye cuando éste lo determine. Es un proceso lento y minucioso,
en donde la pericia del radiestesista hace aparecer el dibujo poco a poco. Este es el método
original de Pagot.

Una vez completado el dibujo por alguno de los métodos propuestos, se pondrá sobre el testigo, o
se llevará en la cartera o en un bolsillo en determinados momentos, para elegir cual es la mejor
opción es conveniente consultar de modo radiestésico.  Existe un modelo de péndulo que permite
trazar líneas con el mismo, se llama “scripto” creado por Auscher, con modelos con lápiz o brocha
para tinta china. 

Hemos expuesto el tema de los dibujos activos, pues permiten entender la evolución que se da
desde la radiestesia al uso de sigilos tradicionales o no, que tanto abundan en los diseños de
instrumentos psiónicos e incluso radiónicos actualmente.

Dibujos activos, método de Herrinckx

Otro método para realizar dibujos activos tele influyentes es el de W. Herrinckx, personaje
vinculado a los hermanos Servranx. Esta forma de realizar un diseño para un determinado fin
permite ver la evolución en la radiónica franco-belga y como se van incorporando elementos
simbólicos.

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 Basándose en el recuadro anterior, que se utilizará a modo de trazos maestros, se va realizando
todo el proceso por medio radiestésico y con el testigo de la persona a la que se va destinar o con
la mente enfocada en el objetivo a cumplir por parte del gráfico; este puede ser protección, salud,
superación personal …

Cada paso ha de ser verificado por el péndulo, siguiendo los siguientes:

En primer lugar, se escoge un recuadro de papel adecuado, consultándose si es el adecuado. 

Luego se plantea cuantas formas han de componer el dibujo.

Se elige dentro del recuadro cual es el elemento que corresponde. En el papel con el péndulo se
determina que tamaño ha de tener y su orientación.

Donde está en el papel el centro del diseño o el inicio del mismo si son líneas. 

Finalmente se determina el color, ya que no siempre tiene que ser negro. Es conveniente que se
emplee una tabla de colores y elegirlo con el péndulo, ya que el pensamiento racional puede estar
prejuzgado por el conocimiento del problema.

Se pasa al siguiente diseño que debe incluirse, repitiendo los mismos pasos, en caso de que se
haya determinado al principio del proceso que debe incluir más de uno. 

Una vez concluido, se magnetiza con el propósito sosteniendo en las manos o se deja bajo la
influencia de algún elemento energizante (pirámide, disco ecuatorial, un cuarzo, etc…).

Finalmente se consulta al péndulo si el individuo lo ha de llevar con él y donde, así como su

orientación. Si el diseño es de protección de un lugar o para ejercer una influencia sobre un
emplazamiento se ha de localizar el lugar exacto y la orientación.

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Al principio parece un proceso muy lioso, pero una vez entrados en la dinámica se verá como va
fluyendo sin dificultad alguna, solo hay que ser metódicos y comprobar cada una de las
afirmaciones o directrices que indique el péndulo. Este es uno de los distintos métodos para
realizar gráficos activos, y que puede servir tanto para uno personalizado como para propósitos y
utilización general, de hecho, algunos de los gráficos de los hermanos Servranx y de otro que se
distribuyen comercialmente fueron creados por este sistema o similar.

El rayo principal en radiestesia

Cada persona, cada objeto que existe, tiene un punto por donde se canaliza la energía universal,
es lo que lo define como tal; es la posición de la energía lineal que emite un objeto en una
circunferencia. Esta idea procedente de la radiestesia clásica dio lugar a numerosas
investigaciones y desarrollos posteriores, tanto en el campo de la detección como en el de la
acción radiónica o psiónica. Ese punto principal de energía que emana del objeto es llamado “rayo
principal” o “rayo fundamental”.

Además de este tipo de rayo, según los abades Mermet y Bouly existen otros tipos de rayos con
distinta denominación. El rayo principal es el más conocido y estudiado de estas definiciones
radiestésica.

Para localizar el rayo principal colocaremos el objeto a analizar o su testigo en una hoja de papel
donde se trazarán dos rectas que crucen el objeto simétricamente. Con el péndulo encima se
determina dónde está el rayo principal o punto de máxima energía, con una brújula se determina y
se señala el Norte magnético, midiendo los grados que hay de diferencia desde ese punto, en el
sentido de las agujas del reloj. Otro modo es ponerlo en el centro del grafico denominado
“goniómetro” convenientemente orientado y determinar el rayo principal con el péndulo. 

Es interesante este modo de entender donde se concentra la mayor cantidad de energía o punto
de entrada de la misma, pues permite analizar la falta de un elemento o la recomendación de un
producto determinado como medicamento. En radiónica este concepto es utilizado para determinar
la posición o punto máximo de energía en la orientación de una muestra en un instrumento de
diagnóstico o tratamiento, creando sintonía entre el rayo principal del testigo respecto al del
operador o terapeuta; lo que se llamó “punto de rotación critica”. Se realizaba con la muestra del
testigo en instrumentos que disponían de marcación de la tendencia, como los de los laboratorios
Delawarr, o con el remedio y el testigo en caso de transferencia directa, sin tasas. 

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Cada practicante debería hacerse su propia tabla, esta una tabla más genérica:
TABLA DE
ACIMUTES
Carbono 255º
Sodio 360º
Magnesio 360º
Aluminio 75º
Silicio 330º
Azufre 330º
Cromo 75º
Manganeso 225º
La siguiente tabla es la elaborada por dos radiestesistas distintos, Chevalier y Mermet:
Elemento Chevalier Mermet
Aluminio 75º 75º NE
Azufre 330º 30º NE
Bismuto 75º 75º NE
Carbono 255º 75º SO
Cobalto 180º Sur
Cobre 225º 45º SO
Cromo 75º 75º NE
Estaño 25º 27º NE
Hierro 180º Sur
Magnesio 360º Norte
Manganeso 225º 45º SO
Mercurio 37,5º 37º NE
Níquel 125º 55º SE
Oro 240º Oeste. A veces: Norte. Raramente: Este.
Plata 90º Este
Plomo 300º 60º NO
Sodio 360º Norte

Los colores radiestésicos

En radiestesia se llaman colores a gamas de frecuencias que tienen propiedades

determinadas y que no corresponden solo con los colores del espectro visible. Cada color tiene una
serie de correspondencias específicas y cada elemento emite uno determinado que lo caracteriza.
Así mismo las formas geométricas  en cada parte de su superficie emiten una frecuencia de color

26
específica. Este concepto surgido entre los radiestesistas franceses de principios del siglo XX fue
fundamental para el descubrimiento de objetos y técnicas en manejos de energía, como por
ejemplo en la apreciación de las cualidades de las pirámides y los conos. 

Existen distintos tipos para diagnosticar el color de un elemento u objeto, tales

como el “péndulo Universal” o “el cromático”, aunque por la distancia del cordel o cadena del
péndulo también se puede determinar. Cuando el péndulo gira en el sentido de las agujas del reloj
significa que el instrumento está en sintonía con éste, ya se indique en la posición adecuada del
péndulo o a través de una tabla. El manejo y explicación del “péndulo Universal” requiere su propio
apartado dada su complejidad, siendo la herramienta elegida por los radiestesista expertos. Un
simple péndulo con bolitas en la cadena o cordel  con los colores del espectro más el verde
negativo también serviría para trabajar en la detección de estas frecuencias. Esta sería la
disposición en un péndulo normal, preferentemente del tipo “neutro” y con forma de esfera pintada
de negro de los colores a lo largo del cordel o cadena:

Cada objeto tiene un color o vibración determinada, la ausencia de uno puede determinar una
enfermedad o patología, pues se relaciona directamente con las sustancias químicas del elemento
en cuestión. A través de los colores se puede diagnosticar o tratar diferentes patologías. Los
colores pueden ser potenciados su radio de acción a través de un imán u otras fuerzas como la
electricidad, el radio o el verde negativo.

Hay dos grupos distintos de colores:

27
A – Positivos: Rojo, anaranjado y amarillo.

B – Negativos: Azul, índigo y violeta.

El verde que se encuentra entre esos dos grupos es simultáneamente positivo y negativo,
reuniendo las características de sus vecinos: el amarillo y el azul.

Los colores radiestésicos operan igualmente en la gama que están fuera del espectro óptico: el
ultravioleta, el infrarrojo, el blanco y el negro. Entre estos dos últimos en el polo opuesto a 180
grados del verde del espectro, se encuentra una radiación misteriosa más fuerte que todas las
demás, la conocida como verde negativo. Algunos llaman a esta radiación “el color gris”,
fundamentándose en el hecho de que está entre el negro y el blanco y presenta una mezcla de
estos dos colores, lo mismo que el verde es una mezcla del amarrillo y el azul. Otros la denominan
“verde negativo” por su oposición al verde del espectro, pues el péndulo que gira en sentido directo
sobre el verde, girará en sentido inverso sobre esa radiación. Es una frecuencia de energía que es
muy delicada de trabajar, pues produce deshidratación y es portadora de efectos, se habla de
distintos investigadores franceses que resultaron envenenados por un mal uso de esta frecuencia
energética; se encuentra presente en muchas figuras geométricas, como a un tercio de la pirámide
tal y como descubrió Bovis en su inspección radiestésica de la Gran Pirámide. La denominada “pila
radiestésica” o el “péndulo Osiris”, son potentes emisores de esta radiación y han de ser
manipulados con cuidado.

Son colore ácidos: el rojo, el anaranjado, el amarillo, el infrarrojo y el negro; sus radiaciones son
irritantes. 

Son colores alcalinos: el blanco, el índigo, el violeta, el ultravioleta; sus radiaciones son en general
frías y calmantes.

Tanto para diagnosticar, como para la sanación, hay dos colores fundamentales: el anaranjado y el
violeta. Estas son sus características:

Anaranjado: Positivo. Se emplea para contrarrestar una acción demasiado intensa del azul. Es
tónico cardiaco, combate la somnolencia, la opresión, el pesimismo y similares. En fisiología afecta
al corazón, al cerebro, los nervios motores, los ojos y el lado derecho del cuerpo en general.
Patológicamente causa las enfermedades del corazón, ciertas afecciones nerviosas y la oftalmía.
Como metal le corresponde el oro, su reacción química es ácida y su rayo principal tiene la
dirección SUR-ESTE.

Violeta: Negativo. Produce un efecto sedante en general, sobre todo en cuestiones psíquicas, pero
su dosis ha de ser muy pequeña. Fisiológicamente corresponde con el bazo, la vejiga, los huesos,
los dientes y el oído derecho. Patológicamente se relaciona con enfermedades infecciosas, la
desintegración celular y la disminución de la nutrición. Como metal le corresponde el plomo y su
reacción química es alcalina.

Las fases eléctrica y magnética de los colores en

radiestesia

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 Cada color en radiestesia tiene una cualidad especifica, y su
exceso o defecto en una persona determina qué enfermedad o  dolencia puede padecer. Se
denominan “colores forma” por ser las radiaciones emanadas de la interrelación de la forma con la
energia universal o éter, este concepto es importante tanto para el tratamiento de sujetos y a la
hora de aprovechar con instrumentos los efectos especificos de uno u otro elemento del especto
tanto magnetico como eléctrico. Los radiestistas Bélizal, Chaumery, De la Foye  y Gilbert Le
Cossec realizaron múltiples investigaciones de las que proceden las clasificaciones actuales.

Las radiaciones se dividen en doce colores: Verde negativo (V-), Blanco (B), Ultravioleta (Uv),
Violeta (Vi), Índigo (I), Azul (Az), Verde Positivo (V+), Amarillo (Am), Naranja (Na), Rojo (R),
Infrarrojo (Ir) y Negro (Ne). Esta es  la distribución de los colores de un meridiano: 

Las radiaciones de onda de forma se dividen  en el meridiano magnético y eléctrico, con las
siguientes características según la fase en la que se encuentren:
Magnéticos, sanadores (M.): Tienen un efecto positivo, reequilibran el organismo y sanan.
Eléctricos, modificadores (E.): Son vibraciones correspondientes al espectro no visible, no son
favorables a la vida, normalmente señalan factores patológicos y deben ser neutralizados.

29
De las investigaciones sobre las radiaciones de color se fueron deduciendo la radiación de color de
las formas circulares y esféricas, considerando el sentido de giro del péndulo, si gira en el sentido
horario de considera que está en fase eléctrica o si era en sentido anti horario estaría en fase
magnética. Las dos fases en las que puede encontrarse el color se redujo en dos semi círculos, de
tal modo que el Este magnético se encuentra al Oeste físico y el Este eléctrico al Este.  En cada
fase o espectro se repiten los mismos colores pero invertidos de posición, a modo de espejo.

La posición del color tiene una relación con la tasa de salud, así desde el Azul al Violeta de la fase
eléctrica indica un 50 %, mientras que ese mismo rango en la fase magnética sería 100%, que
representa el equilibrio. El Verde Negativo de meridiano magnético indica una vitalidad del 2 al 5%
y en su extremo eléctrico del 1 al 2%, estando presente en un sujeto sano del orden del 1 al 2 %,
no existiendo 0 absoluto de Verde negativo Eléctrico. Cualquier variación diferente de color indicará
enfermedad, apareciendo en la zona del meridiano eléctrico será signo de enfermedad grave.
 

30
Las atribuciones originales de las características de los colores de Belizal  son:

Las características de la cada vibración de color en su doble fase:

Verde + (V+). M.: Situado al Sur, es portador de vitalidad, donde hay vida sostenible se encuentra
esta vibración, es portador de otras radiaciones, presente en lugares beneficiosos. E.: Situado al
Norte, se encuentra en lugares perjudiciales o zonas patógenas, en la   contaminación
electromagnética y química, presente en la pirámide en los procesos momificación; 4° chakra.
Verde – (V-). M.: Energía a todos los niveles, destrucción por exceso de dinamismo, frecuencia
portadora. E.: Idénticos efectos que en la fase magnética; 4° chakra, en su parte posterior.
Azul (Az). M.: Armonizador a todos los niveles, paz espiritual, es la radiación que emana de los
lugares telúricos positivos, adecuado para producir equilibrio emocional, físico y en relación con el
cosmos, se utiliza para reducir las molestias producidas por las infecciones bacterianas;  reduce las
inflamaciones en combinación con el Verde + magnético. E.: Sin función curativa, se relaciona con
la frecuencia de 50 Hz, es una gama que debe evitarse; 5° chakra.
Índigo (I). M.: Es una radiación neutra, favorece lo espiritual, la inspiración y los lugares armoniosos
y las acciones positivas. E.: Sin función curativa, se relaciona con la frecuencia de 50 Hz, es una
gama que debe evitarse; 6° chakra.
Violeta (Vi). M.: Espiritualidad, vigorizante, equilibrio y justica. E.: Sin función curativa, se relaciona
con la frecuencia de 50 Hz, es una gama que debe evitarse; 7° chakra.
Ultravioleta (Uv). M.: Aumento de la sensibilidad a todos los niveles, percepción extrasensorial. E.:
Sin función curativa, se relaciona con la frecuencia de 50 Hz, es una gama que debe evitarse; 6°
chakra, en su parte posterior.
Negro (Ne). M.: Alto nivel de propiedades sanadoras, promueve la capacidad de curación propia y
hacia los demás. E.: Frecuencia extraña, ambiente enrarecido o de influencias originadas por
acciones psíquicas, cáncer y enfermedades graves, cuando entre el negro y el blanco eléctrico
produce degeneración nerviosa o esclerosis múltiple; 3er chakra, en su parte posterior.
Infrarrojo (Ir). M.: Fortalece la energía interna y la resistencia a los virus, fuerza espiritual. E.: No es
una radiación peligrosa, actúa con más intensidad que el Amarillo sobre las inflamaciones; 2°
chakra, en su parte posterior.

31
Rojo (R). M.: Aporta fuerza y vitalidad, positivo para activar el proceso curativo; previene contra las
infecciones, el cáncer y las enfermedades degenerativas. E.: inflamaciones fuertes, así como el
reumatismo, refleja lugares húmedos en geobiología; 1er chakra.
Naranja (Na). M.: Anti infecciones,  favorece todos los proceso intelectuales y creativos a nivel
mental, así como la concentración. E.: Inflamaciones; 2° chakra.
Amarillo (Am). M.: Favorece los trabajos intelectuales y de estudio, es el más adecuado para todo
tipo de protección, regenerativo a todos los niveles, efectivo contra las molestias en general. E.:
Inflamaciones leves, entre el Verde + magnético y Amarillo eléctrico revela problemas de páncreas;
3° chakra.
Blanco (B). M.: Onda de color portadora a nivel terapéutico, adecuado para todo tipo de
enfermedades y  en especial para la artritis, reumatismo, neumonía y esclerosis múltiples. E.:
Revela etapas terminales de las enfermedades, mucosidad, enfermedades pulmonares en su
última fase, entre el Blanco y el Negro eléctrico revela degeneración del sistema nervioso y
esclerosis múltiple, en ocasiones se utiliza el Blanco eléctrico para secar las ulceras; 5° chakra, en
su parte posterior.

Se puede determinar qué color afecta a una dolencia utilizando el péndulo cromático o cono virtual,
con el péndulo Universal o utilizando una tabla de colores; para corregir o tratar la dolencia se
podría emplear el péndulo Universal, el cono virtual, el disco ecuatorial de De la Foye, la pirámide
en su atribución de color u objetos que permitan seleccionar que radiación de color a emitir. Las
radiaciones de color descubiertas por los radiestesistas fue una gran aportación que todavía tiene
muchas posibilidades por explorar y descubrir.

El péndulo cromático

El péndulo cromático es un instrumento radiestésico muy útil para el diagnóstico y en

la detección de las radiaciones de los objetos, aunque se utiliza el código de colores, se mueve en
la gama tanto del espectro visible como el invisible. Los colores en radiestesia tienen una gran
importancia, pues no solo indican la salud o carencias en el organismo, sino que también son útiles
para determinar la efectividad de los instrumentos y gráficos emisores, así como el tipo de
radiación que generan. También es denominado como “cono virtual”, pues la posición del disco que
marca el color a detectar proyecta la longitud virtualmente sobre la punta, de un modo similar a
como ocurre en los prismas de cristal.

León Chaumery y André de Belizal, fueron los que diseñaron y patentaron este péndulo en 1939,
aunque no se comercializó hasta 1960 en la librería Desforges de Paris, que en 1990 volvió a
relanzarlo. Estos dos célebres radiestesistas desarrollaron este péndulo como un sistema de
medida y comprobación de las radiaciones emitidas, fruto de los muchos años de investigación en
este campo. De ellos es también el “Péndulo Universal”, de más difícil manejo y aprendizaje. Se
puede diagnosticar la carencia o necesidad de un color para el tratamiento y posteriormente
emitirlo con algún instrumento psiónico, como por ejemplo la “Flecha Regulable” creada por Enel,
el “Escargort – Selector“ de Bélizal y Morel, o el “El Disco Ecuatorial” de Jean de La Foye, incluso

32
la pirámide empleando su distribución de colores. Chaumery y Belizal crearon otro péndulo similar
al cono virtual, destinado a medir el sector radioactivo del espectro, con una detección total de 240
puntos; es el llamado “Detector IV-UV” difícil de encontrar y sin información de su uso.

Consta de una pieza central con los doce colores marcados, esta pieza en el diseño
original es rectangular, pero en los diseños actuales suele ser cilíndrica, en todos los casos ambos
extremos terminan en punta. Dispone de un disco que se desplaza por las marcas de los colores y
que es fijado con un pequeño alambre o tope, mientras que en los modelos actuales una pestaña
permite que quede fijo en su posición. Está sujetado por un cordel que en su extremo opuesto
dispone de tres nudos o marcas para delimitar el área de detección. Las tres marcas en el hilo se
sujetan con los dedos según se pretenda detectar un campo de medición u otro, las marcas se
sostienen entre el índice y el pulgar con los dedos en vertical hacia abajo y deben ser ajustadas a
cada persona. Puede ser utilizado sin sujetar los nudos, solo por el extremo del cordel, pero una
vez calibrado es mucho más efectivo.

La marca o nudo superior sirve para trabajar con la onda de color o energía en general, la marca
de en medio es para operar con energías sutiles o de onda forma, y la tercera marca es para
funcionar en el área de las energías biométricas, que es la energía emitida por cualquier ser vivo.
Se puede definir como campos de actuación, gama o frecuencia.

El péndulo o cono virtual dispone de un disco que se queda fijo en el color a explorar, si gira en el
sentido de las agujas del reloj es que ha entrado en sintonía con el mismo. En cada uno de los
extremos se encuentra el verde negativo que es una energía extraña, perjudicial en principio, pero
útil en las máquinas y dispositivos psiónicos. Se representan los colores radiestésicos que se

33
encuentran en una esfera, en donde el punto del ecuador corresponde con electromagnético o
neutro, en el meridiano de dirección este-oeste se encuentra el espectro eléctrico, mientras que en
el meridiano norte-sur se encuentra el espectro magnético. A este espectro de vibraciones se le
denomina el “ecuador Chaumery-Bélizal”. La afinación respecto al color se consigue a través del
disco que crea un ángulo respecto a las puntas similar al espectro de color en un prisma de cristal,
de ahí la otra denominación de este instrumento como “virtual” y “cono” por la figura que genera la
proyección del disco.

El modo más sencillo de familiarizarse con el uso de este tipo de instrumento es de poner un color,
por ejemplo un papel azul, y sostener el péndulo por el primer nudo con el disco situado en la
posición azul (Az). No hay que pensar en nada, con la mente totalmente en blanco, dejar que gire;
si lo hace en sentido horario es que se ha conectado, si no gira o lo hace en sentido contrario es
que se sostiene el péndulo mal o no  está situado el disco en su posición adecuada. La intensidad
y velocidad del giro denota la calidad del elemento sintonizado. El verde negativo es más lento de
sintonizar, por lo que el péndulo puede tardar más en detectarlo, aunque esto depende del
adiestramiento y sensibilidad del operador.

El orgón se detecta con este instrumento como una mezcla de los colores: índigo (I), ultravioleta
(Uv) y verde negativo (-V). Se sujeta el péndulo por la marca más cercana al instrumento y se va
poniendo el disco en cada uno de los colores, si gira en sentido horario en estos tres colores (I, Uv
y –V) es signo certero de que hay orgón de gran calidad y beneficioso. Aunque hay elementos que
emiten estos tres colores, el que los tres se encuentren juntos es un indicio claro. Hay aparatos y
objetos que se distribuyen como generadores de orgón y no lo son, no significando que sean
inútiles, sino que operan en otra gama como equilibradores de energía interna, pirámides o
purificadores de cargas electromagnéticas. Las corrientes telúricas negativas, fallas o cavidades,
se detectan con el disco en la posición de verde negativo (-V) y sujetando el péndulo por la marca
central, que corresponde a la onda forma.

Para calibrar de modo personalizado los puntos, nudos o marcas que determinan el tipo de gamas
de energía en las que se está operando se procede del siguiente modo:
• Situar el disco en la posición de verde positivo (+V), sostener el péndulo por su cordel a unos dos
centímetros de la punta cónica superior; poner la mano por la palma hacia arriba y debajo de la
punta inferior a unos pocos centímetros. Si es péndulo gira en el sentido de las agujas del reloj,
hacer la marca en el punto donde se está sujetando; si no gira dejar correr un poco de hilo y volver
a probar, así repetidamente hasta obtener el punto exacto. Repetir esta operación tantas veces

34
como sea necesario, hasta estar completamente seguro. Este punto es el biométrico, cualquier ser
vivo que no tenga una enfermedad degenerativa emite verde positivo. 
• Para encontrar el segundo punto, el que corresponde a las onda forma se utilizar una pirámide
bien orientada en el centro de su base dirección norte-sur, situando el instrumento en el ápice
superior de la misma, debe girar en sentido de la agujas del reloj cuando entre en sintonía. Para
ello se sujeta el cordel un poco por encima del primer punto con el disco en la posición de verde
positivo (+V), ir desplazándose lentamente por la longitud de cordel hasta que gire, marcar la
posición.
• El tercer punto es el destinado a detectar las ondas de color del espectro visible, para ello poner o
situar el disco en la posición de un color determinado, situar debajo del péndulo una tarjeta u objeto
del mismo color, ir desplazando los dedos con los que se sujeta por  el cordel a un poco de
distancia de la segunda marca y en la posición donde gire marcar este tercer punto.
Repetir este proceso de calibración en cada punto tantas veces como sea necesario, con paciencia
y con la mente despejada, una vez bien calibrado, serán válidas las posiciones para su usuario
durante al menos dos años.

El cono virtual o péndulo cromático es un instrumento de investigación imprescindible para abordar

el fascinante terreno de los colores radiestésicos y las ondas forma. Así mismo supone una
herramienta muy eficaz para el diagnóstico tanto en directo como a través de un testigo y un atlas
de anatomía. 

Uso del Péndulo Universal Simplificado

El péndulo Universal es una herramienta poderosa en manos de un radiestesista experto, tanto

para el diagnóstico de los colores de los que se tiene déficit como para la emisión de los
necesarios en cada caso. El péndulo Universal (P. U.) tiene en contra el que requiere estudio y
dedicación, además de un precio considerable; pero existe una alternativa que, si bien no es tan
potente, permite introducirse en el fascinante campo de los colores radiestésicos, esta opción es el
“péndulo universal simplificado” (P. U. S.). 

El PUS no es tan potente como el P. U., sobre todo si éste tiene seis baterías internas, pues en su
versión sencilla solo incluye una, pero es un buen entrenamiento y una herramienta sencilla de
dominar. Los PUS comerciales constan de una bola de madera con una batería interna y una serie
de cuentas o marcas en la distancia del cordel que corresponden a cada color, cada fabricante
tiene su propio modo de indicar los colores correspondientes. Incluso si no es posible conseguir un
PUS, con una simple bola de madera con un cordel en donde se ha marcado las distancias que
señalan la posición de cada color es suficiente para iniciarse en su uso y transferir la influencia,
aunque no sea tan potente como el P. U.  o P. U. S. El primer estudio de los colores radiestésicos
se comenzó con este sistema sencillo, después vinieron las pirámides, las pilas radiestésicas, el P.
U., el P. U. S …

Para comprobar si un color está activo en un lugar, una persona o un chakra, se pone el péndulo
encima de éste y se sujeta desde la cuenta o posición que se desea valorar con los dedos índice y
pulgar. Si se mueve linealmente es que el color está presente y no requiere aportar ese color. Si el

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péndulo se mueve en el sentido de las agujas del reloj, es que tiene carencia del mismo y se deja
girar hasta que se detenga. Si el péndulo gira en sentido contrario sobre un chakra significa que
hay algún tipo de disfunción en relación con la radiación de color seleccionada. Para cargar un
objeto o un alimento, simplemente se pone encima de éste el péndulo sujetándolo desde la
posición adecuada y mentalmente se da la instrucción de que gire en el sentido de las agujas del
reloj; o mejor pensar: “cargar energéticamente con el color …”. Por ejemplo, si se desea cargar un
recipiente de agua con el verde positivo, sostener el péndulo sujetándolo la posición del verde con
los dedos índice y pulgar. Para desbloquear un chakra o para simplemente sacar su máximo
potencial, sujetar el péndulo desde la posición del blanco, esta posición es similar a la utilización
del péndulo Isis.

Los colores, sus características y posicionamiento a lo largo del cordel son:

Verde negativo: A 7 cm de la bola. A este color radiestésico también se le refiere como gris. Puede
indicar algún tipo de daño o proceso degenerativo por exceso de dinamismo. Se puede potenciar
cuando se necesita transmitir un efecto en tele radiestesia, por ejemplo, con un testigo y un
remedio. Su chakra es el 4º en su parte posterior.

Negro: A 12,5 cm de la bola. Se relaciona con enfermedades graves tanto por agentes externos,
como psíquicos. Cuando se activa tiene grandes propiedades curativas, porque contiene toda la
gama de energía. Corresponde en el cuerpo con los pies. Su chakra sería el 3er chakra en su parte
posterior.

Infrarrojo: A 2 cm más que el anterior. Relacionado con los procesos virales y con la energía
interna, también con la fortaleza espiritual. En el cuerpo se asocia con los muslos. Se le relaciona
con el 2º chakra en su parte posterior.

Rojo:  A 2 cm por encima del anterior. Se activa para aumentar la energía en todos los sentidos,
así como para prevenir cáncer, enfermedades infecciosas y degenerativas. Su carencia indica
inflamaciones graves o reumatismo. Corresponde con el 1er chakra.

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Naranja: A 2 cm más que el anterior. Relativo a los procesos mentales, a la capacidad de
concentración y capacidad creativa. Corresponde a 2º chakra.

Amarillo: Por encima del anterior 2 cm. Relativo al estudio y los procesos intelectuales, se activa
para regenerar cualquier aspecto físico o mental, así como para combatir cualquier tipo de
molestias, también puede indicar problemas en el páncreas. Corresponde al 3er chakra.

Verde: A 2 cm por encima del anterior. Si está presente es indicador de bienestar, se activa para
todo tipo de regeneración y fomento del equilibrio, así como portadora de otros tipos de
radiaciones. Es una radiación sumamente beneficiosa. Corresponde al 4º chakra.

Azul: Por encima del anterior 2 cm. Relacionado con la armonía y equilibrio en todos los aspectos,
muy efectivo cuando se activa para combatir infecciones bacterianas. Su chakra es el 5º.

Índigo: Encima del anterior 2 cm. Favorece la espiritualidad, la elevación de conciencia y la

positividad en cualquier aspecto.  Corresponde con el 6º chakra.

Violeta: A 2 cm por encima del anterior. Espiritualidad al más alto nivel, reconciliación e integración
de todos los planos, justicia total. Su chakra es el 7º.

Ultravioleta: Por encima del anterior 2 cm. Se relaciona con la percepción tanto física, como
psíquica; se activa para incrementar estas cualidades.  Se le asocia con el chakra encima de la
cabeza, denominado “estrella” y con el 6º chakra en su parte posterior.

Blanco: A 2 cm por encima del anterior. Es una frecuencia portadora, totalmente benéfica,
relacionada con la artritis, la neumonía, la esclerosis múltiple; tanto en activación como en
detección. Se puede utilizar para tratar ulceras, procesos terminales y mucosidades. Se relaciona
con la envoltura energética que rodea al cuerpo y con el 5º chakra en su parte posterior. 

El Péndulo Universal Simplificado es una herramienta sencilla para diagnosticar o cargar un

elemento, si bien no es la potencia del Péndulo Universal, en cambio permite hacer todo tipo de
diagnóstico con los colores o acciones a distancia de un modo sencillo. Por ejemplo, se puede
analizar si cada uno de los chakras está activado o determinar el color predominante en una
persona, un alimento u objeto.

Los chakras y el péndulo Universal

El Péndulo Universal (PU) es un gran instrumento dentro de la radiestesia para el testeo de las
funciones de los chakras y para su posterior activación.  Puede ser usado para la verificación del
funcionamiento de los chakras, tanto con la persona presente, con una foto, con un testigo artificial
o una firma.  La mayor potencia sanadora, reparadora o de activación se obtiene sobre el sujeto y
la zona en concreto. Son doce los colores que se utilizan, correspondiendo cada uno a un punto
energético, siete de ellos en la parte frontal y cinco en la parte posterior; al primer y último chakra
no se le reconoce lado posterior.

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 Usualmente el péndulo girará en sentido horario para cargar el chakra y en sentido anti horario
para descargarlo. El diagnostico debe hacerse sujetando el nudo del ecuador electromagnético y la
anilla en el mismo sector, con la anilla en el meridiano magnético y sujetando el péndulo desde el
mismo punto del nudo en el que se realizan las acciones (carga o descarga) sobre los colores en
concreto. Si las operaciones se realizan a distancia, el péndulo se sujeta sobre el testigo, siendo
conveniente tener un esquema con los colores y los chakras correspondientes.  También sería
conveniente determinar la intensidad de la acción del color sobre el chakra, utilizando algún tipo de
escala de valores y, si fuese necesario, con la ayuda de otro péndulo no activo. Un acuerdo
apropiado para determinar si el chakra está activo o bloqueado sería el giro en el sentido horario
para indicar un funcionamiento activo y en sentido anti horario para señalar el bloqueo. Es
recomendable plantear también la cuestión en el caso de indicar que ese punto está activo, si se
requiere descargarlo.

La correspondencia entre los colores y los chakras es la siguiente: 

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Cuando el péndulo indica que el color no está activo, es decir, que el chakra se encuentra
bloqueado, señala una serie de deficiencias, aparte de las correspondientes a las propias del color:
1º. Muladhara: Corresponde con el color rojo.  La seguridad en uno mismo es escasa, se tiene
poca habilidad para manejarse en el mundo físico y a nivel material. Falta de vitalidad. 
2º. Svadhisthana frontal: Naranja. La capacidad de auto sanación y protección está bloqueada,
depresión y tendencia a las adicciones.
2º. Svadhisthana posterior: Infrarrojo. Temor a la sexualidad, frigidez o impotencia. Se relaciona
con los dolores de espalda, alergias y la acción de los virus.
3º. Manipura frontal: Amarillo. Baja autoestima. Control excesivo de uno mismo que llega a
bloquear cualquier acción. Falta de regulación en el organismo que puede producir sobrepeso o
estomago rígido. Pueden darse problemas en el páncreas. 
3º. Manipura posterior: Negro. Rechazo a uno mismo, con abandono del cuidado de la salud. Falta
de deseo de actividad, encerramiento en uno mismo, aunque puede darse el extremo contario de la
búsqueda de actividad extrema. Incapacidad para la auto regeneración a todos los niveles. 
4º. Anahata anterior: Verde. Falta de amor desinteresado, relaciones inestables. Se experimenta
un sentimiento de desamparo y soledad extrema, pues se desconoce la transcendencia de la
existencia.  Desajustes en la presión sanguínea, tensión muscular.
4º. Anahata posterior: Verde -. El exterior se siente como algo hostil que origina un estado de
agresividad permanente. Falta de consideración a los demás. Autodestrucción o degeneración a
todos los niveles.
5º. Visuddha anterior: Azul. Desconfianza, hiperactividad, desordenes en la tiroides, cambios de
humor bruscos. No se experimenta la tranquilidad interior ni mental.  Dolor de cuello, mandíbula y
boca.
5º.  Visuddha posterior: Blanco. Incapacidad para dar y manifestar lo mejor de uno mismo.
Sentimiento de fracaso vital, orgullo como mascara de la decepción, fiebre, refriados y artritis. 
6º. Ajna anterior: Índigo. Falta de sueño, incapacidad para el aprendizaje, descoordinación.
Percepción negativa de la realidad.  Problemas de visión, dolor de cabeza.
6º. Ajna posterior: Ultravioleta. Se es incapaz de plasmar las ideas en el plano material. Frustración
por no poder manifestar la realidad interior. Problemas nerviosos.
7º. Sahasrara: Violeta. Descoordinación entre los hemisferios cerebrales, epilepsia, alergia en la
piel, problemas en los vasos sanguíneos. Dolores de cabeza. Actitud dogmática tanto a nivel de
creencias como a nivel material. 

Una vez realizado el análisis de los chakras con sus respectivos colores se procede a la acción
oportuna, activación o descarga, desde el meridiano ecuador electromagnético o desde el
meridiano magnético; para determinar desde cual de ellos se debe hacer, se interroga al péndulo
sosteniendo el nudo del cordel correspondiente, con el color seleccionado. Se sitúa el péndulo
sobre la zona del chakra y se deja actuar, para ello es conveniente que la persona se encuentre
tumbada. Cabría discutir sobre la acción del Verde negativo el lado posterior del 4º chakra, en
nuestra opinión se puede administrar esta radiación durante un breve periodo de tiempo, pero se
recomendaría posteriormente luz blanca con el propio PU o con otro elemento, como un péndulo
tipo Isis. 

Aunque se ha desarrollado el modo de realizar el análisis de los colores radiestésicos respecto a

los chakras con el PU, se podría hacer también con el “cono virtual”, el Péndulo Universal
Simplificado o con un péndulo normal y una tabla de colores.  Artículos referidos a los colores
radiestésicos:
Los colores radiestésicos 
Las fases eléctrica y magnética de los colores en radiestesia
El péndulo cromático 
Uso del Péndulo Universal Simplificado
El disco ecuatorial de Jean de la Foye 

La Onda de Chartres

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 En su estudio de las formas que
generan ondas peculiares dentro del espectro de colores, tanto en su aspecto eléctrico como
magnético, Jean de la Foye y sus colaboradores encontraron un tipo de onda muy peculiar a la que
denominaron “Onda Chartres”. Surgió del estudio de la catedral de dicho lugar, este recinto
encierra una sabiduría ancestral por su utilización de la geometría sagrada. Es utilizado para
influenciar a distancia y cargar elementos en el diseño de su famoso laberinto, pero la“onda”
presente en los arcos góticos de este lugar tiene unas peculiaridades que desembocaron en una
serie de estudios sobre las formas. El articulo original se publicó en la revista de los hermanos
Servranx llamada “La Radiesthésie pour Tous” en 1966.

La base de emisión es la ojiva, propia de arte gótico. Para su estudio y experimentación se puede
realzar un modelo en hilo cobre, no requiere de ninguna escala ni de posición particular pues su
emisión es axial. La ojiva es hecha de dos círculos secantes, por lo que los colores se cortan a lo
largo del eje de simetría, en colores simétricos que dan como resultado la Onda Chartres.

Rara vez se encuentra esta onda de manera pura, pues se entremezcla con otras formas
geométricas y da como resultado distintas ondas. Se detecta con el péndulo Universal en el grado
300, entre el Ultra Violeta y el Blanco, en el Disco Ecuatorial en el grado 251. El modo más fácil de
detectarla es utilizando un péndulo cilíndrico con la etiqueta o camisa añadida de la luna creciente
pintada en negro, siendo su apertura al lado Este para el sector Eléctrico y en dirección Oeste para
el Magnético.

Las propiedades de la onda Chartres son: 

Es una onda compuesta por todos los colores del espectro, es posible descomponerla en un
prisma en orden inverso al del Blanco, como si fuese un Blanco inverso. 
En su presencia los colores se invierten en su simétrico, es decir el Rojo se hace Violeta, el Azul
pasa a Amarillo, etc…
Cuando dos figuras generadoras de esta onda se oponen, esta se transforma en Negro, lo que
supone un buen método para detectarlo.
Cuando se le añade el Blanco normal, esta onda se transforma en el Rojo y el Violeta a la vez.

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Se puede utilizar la forma geométrica de la onda de Chartres para crear dispositivos
experimentales o instrumentos que generen distintas gamas de ondas de colores, por ejemplo,
utilizando un Disco Ecuatorial y unas formas ojivas de hilo de cobre.  

Lo efectos de esta onda no se han definido, pero quizás se esté ante un tipo de radiación peculiar
que dé como desarrollo nuevos instrumentos y percepciones en el campo de las ondas forma,
como ocurrió con el Verde Negativo y su posterior utilización en pirámides y pilas radiestésicas.

La onda de carga Z+, la onda de descarga Z- y el Nodo

de Vida
La obra de Jean de la Foye como desarrollo de las de Chaumery y Belizal, está llena de formas
derivadas de sus investigaciones sobre los colores radiestésicos. Hay tres ondas que
corresponden al magnetismo vital, aunque detectaron distintas ondas según la forma cada una con
una característica particular. De todas las formas que utilizaron destacan tres: la onda de carga z+,
la onda de descarga z- y el nodo de vida. Ellos estuvieron tras una forma anti cáncer efectiva, si
bien sus resultados son controvertidos (se dice que Chaumery murió de una intoxicación del Verde
negativo) es interesante conocer sus aportaciones con la perspectiva de aplicarlos en instrumentos
para tratamiento directo o a distancia y aporta un entendimiento entre las formas emisoras puras y
los símbolos tradicionales. 

Las ondas Z+ y Z- tienden constantemente a modificar un equilibrio en dos sentidos opuestos, en

una pulsación indefinida; a esto se le denomina “compensación sinodal”. Produce saturación en el
organismo si se prolonga mucho su influencia, por lo que el tiempo de aplicación debe ser
moderado.

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 Las ondas de carga Z+, le llamarón así porque creían que su número
era cero, lo que resultó falso, pero dejaron esta denominación. Es emitida por la palma de la mano
y la boca cuando se tienen los ojos abiertos y en las partes de las plantas que están por encima del
suelo. Es emitida por muchas formas conocidas, tales como la estrella de David, la Flor de Lis de
los reyes de Francia, el armiño de la Bretaña, dos medias lunas unidas por la parte de atrás y por
diversas formas sagradas antiguas.

En el espectro de colores, Z+ se encuentra a 250º entre el Ultra-Violeta (UV) y el Blanco (B) en

fase Magnética, a 1° de la Onda de Chartres. En fase eléctrica, Z+ es fuertemente nociva. Se
obtiene Z+ por oposición de colores sobre el espectro no-diferenciado: Az+Ne, I+Ir Vi+R, Uv+Na,
B+Am y (V+M)+(V-E)

Cuando se cierran los ojos se produce un fenómeno de inversión de la onda Z+, pues aparecen en
la parte posterior de las manos. Cuando se hace tratamiento por magnetismo (según las técnicas
de Franz Mesmer) con las palmas de las manos y los ojos abiertos, a veces se le pide al paciente
que cierre los ojos por lo que las ondas pasan a ser del tipo Z-, para producir descarga de energía.

Las ondas de descarga Z-, es denominada así por ser la

oposición a las ondas Z+. Cuando los ojos están abiertos, son emitidas por el reverso de las
manos. Cuando los ojos están cerrados lo emiten las palmas de las manos y la boca, también las

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plantas en las raíces. Se obtiene a partir de la onda Z+ juntando la Onda de Chartres, es decir con
uno trazo Norte-Sur de cada lado, a Este y Oeste. Produce agotamiento pues descarga, por lo que
podría utilizarse para producir sueño. Su posición en el espectro es a 290º entre Negro e Infrarrojo
en fase magnética.

  

El Nodo de Vida, esta onda se encuentra en los orificios nasales de los animales vivos, en la boca
de los humanos muertos, en el ombligo de los mamíferos, en el cerebro y al nivel del suelo en las
plantas. Se encuentra también en el temporal izquierdo de humanos vivos, por lo que es posible a
través de una foto saber si está vivo o muerto; si aparece en la boca es que se trata de un difunto,
mientras que si aparece en el temporal izquierdo es que el sujeto está vivo. Es la unión de las dos
ondas, Z+ y Z-; su vibración se encuentra en el espectro a 200º entre Azul y Índigo en fase
magnética, y a 20º en fase eléctrica. Debe evitarse fijar esta onda artificialmente en un organismo,
pues impide la rapidez de las actuaciones naturales. 

Aparte de las tres mencionadas, existen muchas ondas más, tanto descubiertas como por
descubrir. Los radiestesistas franco-belgas trataron el estudio de las ondas forma como si de una
física nueva se tratara, con el tiempo a estas ondas se les denominará de múltiples modos posibles
y se encontrarán aplicaciones distintas para la salud y en relación con la actividad de los seres
vivos 

El micrómetro de Belizal

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 En el libro clásico  de A. de Belizal y de P. A. Morel “Physique micro-
vibratoire et forces invisibles” describe un gráfico para valorar el potencial energéticos tanto de
personas como de remedios. Originalmente era una plancha de madera grabada conectado con un
disco de plata, pero el gráfico  que adjuntamos permite operar del mismo modo. Por su capacidad
de medir el valor energético global de una persona, también se le denomina “psicómetro” pues
según el porcentaje puede ser adecuado para una labor u otra, llegando a ser utilizado como
herramienta de selección de personal.

Se trata de una rosa de los vientos orientada siempre al norte, divido en tres áreas de 90 grados
cada una, que a su vez se dividen en 9 radios, haciendo un total de 270 grados, En el círculo
externo se sitúa el testigo de la persona o elemento a valorar. Es una representación de la unidad
del ternario. Del grado 0 al 90 es 1 micras, del grado 90 al 180 son 2 micras y del 180 al 270 son 3
micras. Poniendo el péndulo en el centro del gráfico se hace una medición en cada una de las
áreas, siendo la área 0 a 1 micras se comprueba el valor físico de la persona, mientras que de 1 a
3 hace referencia al aspecto psíquico. 

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Consultándole al péndulo tres veces sobre cada uno de los aspectos, éstos serían los baremos y
sus afinidades: 

De 0 a 1 micras se refiere a las condiciones físicas, cuanto más próximo al valor 0, más enfermo se
encuentra el individuo, el cáncer se detectaría en 0. Del 1 a 3 serían las cualidades morales,
psíquicas y éticas; por debajo de estos valores la persona es de poca confianza y por encima de
2.5, se puede definir al sujeto como espiritual o de una gran integridad moral. 

Los baremos para considerar las condiciones físicas están entre 0.6 y 0.8 es lo adecuado para
trabajadores que requieren hacer un esfuerzo considerable, para un trabajo de oficina es suficiente
entre 0.0 y 0.6 micras; mientras que un vendedor debería estar entre 0.8 y 0.9 micras. 

Para evaluar el aspecto intelectual de una persona, entre 1.5 y 1.8 micras es el valor idóneo para
las personas que se dediquen a los negocios y las ventas, para los trabajos físicos entre 0.8 y 1,
aunque si requiere además de sentido práctico es mejor que esté entre 1.2 y 1.4 micras; para
trabajos intelectuales y artísticos deben estar los valores entre 1.9 y 2.1. 

A nivel moral, entre 1.5 a 1.6 micras es lo adecuado para cualquier labor comercial, mientras que
un cajero o persona de confianza estaría entre 1.7 a 1.8 micras; mientras que el valor de 1.3 a 1.4,
para labores que tengan supervisión por parte de terceros. 

Midiendo los valores de estos tres parámetros (físico, intelectual y moral) se puede determinar el
tipo de trabajo que una persona puede desempeñar o a que labores se le puede asignar. 

Un modo practico de utilizar el micrómetro sería para determinar el nivel de salud de una persona y
si el remedio empleado es adecuado o no. Para ello se pone en el círculo exterior una foto o testigo
de la persona, por debajo de 0.3 micras es signo de enfermedad, 0.5 micras indicará que se
requiere cuidarse, de 0.6 a 0.9 micras será indicio de buena salud, ya que raramente se supera 1.0
micras a nivel físico.  Una vez elegido por otros medios el remedio, se sitúa el remedio cerca del
testigo y si eleva la medición anterior o supera 1.0 micras es que es favorable. 

Este un tipo de gráfico de medida psicofísica muy sencillo pero extremadamente útil para todo
practicante radiestésico o aquel que va a realizar tratamientos homeopáticos, con gemas o
esencias florales; si bien Belizal lo ideó como un tipo de test psicotécnico.

El gráfico psicométrico de Jean de la Foye

Jean de la Foye fue un radiestesista discípulo de Belizal que desarrolló distintos dispositivos para
la detección y manipulación de las energías sutiles, sobre todo en el campo de las ondas forma.  Al
igual que Belizal realizó un gráfico para valorar a través del péndulo la vitalidad y honestidad de

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una persona, es solo para crear criterios de actuación, nunca debe ser utilizado para emitir, pues
provocaría un retorno en el operador. Este radiestesista estaba muy influenciado por la kabala
hebraica, por lo que utilizaba palabras y divisiones en base a este alfabeto, de hecho este grafico
tiene la forma de la letra “yod”. 

Se orienta el gráfico al norte en el grado 90, se sitúa el testigo en el círculo pequeño que queda a la
derecha del círculo graduado.  Se pone el péndulo en el centro y se deja que indique el valor
adecuado. El péndulo debe ser neutro y tiene tres nudos que representa los tres niveles para poder
separar una área de la otra en la medición, es decir, el aspecto físico, el vital y el espiritual que es
el que está más cerca del péndulo; se sujeta por el nudo que corresponde al nivel que se desea
explorar. Para afinar en la posición que indica el péndulo se va recorriendo el círculo grande con un
puntero.

El círculo grande esta graduado del 0º al 270º, con el indicador de equilibrio en el 50º.  Dividido en
tres cuadrantes con un cuarto libre, cada uno indica un nivel:
 
De 0º al 90, es el campo vital, cuanto más cerca del 0º mayores son los problemas de salud, el
equilibrio está en el 50º, aunque es posible tener niveles más altos dentro de este cuadrante. 

Del 90º al 270º es el campo espiritual. Este semicírculo se divide en dos partes, del 90º al 180º es
el sector de la mentira y las personas que están en estos grados no son dignas de mucha
confianza. Desde el 180º al 270º el individuo es de mayor confianza.

Para valorar la inteligencia de una persona se pone la palabra hebrea “or” (luz) en el norte del
gráfico y se interroga al péndulo. Una inteligencia media está en 80º y 90º, más allá  de 120º
indicará una inteligencia aguda. 

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Jean de la Foye hizo muchas aportaciones a la radiestesia, como  el péndulo hebreo y el disco
ecuatorial, siendo de obligada lectura su libro “Ondas de Vida, Ondas de Muerte”. Si bien tiene un
cierto acercamiento a lo esotérico o mágico, su apreciación es desde el concepto de que
determinados gráficos (incluida las letras hebreas) tienen un efecto como onda forma.

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