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C OM U N I C A CIÓ N , C UL T URA S J UVE NIL E S Y G É NE RO

Por: Adriana del Rocío Hernández Yasnó


Investigadora de la Fundación Universitaria de Popayán (FUP)
ariadnayco@yahoo.com

Resumen:
La pretensión de este artículo no es proponer una nueva visión del género, sino relacionar
esta categoría con el concepto en el cual los colaboradores de las distintas culturas
juveniles, grupos, clanes, solitarios de Popayán-Cauca en Colombia, se relacionan frente a
sí mismos y frentes a sus pares, cultura y sociedad desde la relación estrecha entre
corporeidad y género. Tampoco se trata de hacer un estado del arte con lo que ello conlleva,
más bien es mostrar las orientaciones generales que surgieron como patrones propios de los
jóvenes dentro del trabajo de campo, cuestionarios, historias de vida, entrevistas.

Summary:
The aim of this article is not to propose a new vision of gender but relate this category with
the concept in which employees of different youth cultures, groups, clans, solitary in
Popayan -Cauca in Colombia , are related against themselves and fronts their peers , culture
and society from the close relationship between corporeality and gender. Nor is it to make a
state of the art with all that implies, rather is to show the general guidelines that emerged as
own patterns of young people in the field work, questionnaires, life stories , interviews

“A mí me gusta escuchar el metal, pero


no meterme con las metaleras porque
eso es para problemas, yo lo escucho
en mi casa, con mis amigos y con Juan,
no me gustan los parches, por los
chismes. Pero me hubiera ido contigo a
lo de Judas.1

La categoría de género fue creada por Gayle Rubin en el año 1977, pero tiene
antecedentes en el año 1955 con John Money quien creó el término papel de género
(gender role). Ahora bien, en los años sesentas exactamente en 1968 Robert Stoller,
investiga infantes con sexo no bien definido y probó como su comportamiento e identidad
sexual, depende plenamente de cómo los eduquen sus familias es decir, como el género es
una construcción social y cómo los adultos influyen en la formación de la identidad sexual
de niños y niñas.

1
Conversación acerca de concierto del grupo británico Judas Priest en Bogotá-Colombia .En el concierto de death metal Club las
profesionales (2008). V (Elizabeth, 21 años, estrato 2, entrevista. Octubre 2008, Club Las profesionales)

1
De otro lado, Stoller prueba cómo la interacción social hizo que niñas con estas
malformaciones fueran situadas como niños2. Volviendo a Rubin, ella identifica como las
sociedades sustentadas en jerarquías sociales, se basan en diferencias sexuales, de allí se
genera la discriminación a las mujeres, algunas feministas radicales afirman como la fuerza
física y el poder son asignados a los hombres desde antiguo en las sociedades
eminentemente patriarcales, no solamente de los distintos orientes como de los occidentes.
Ciertamente, el género se teoriza en los años setentas desde la discusión realizada en la
antropología para evitar la naturalización del sexo, e ir más allá de los cuerpos humanos
hacia las relaciones de los cuerpos consigo mismos, con sus representaciones y sus
relaciones culturales y sociales. Por ello, la categoría de género es relacional, en ello
concuerdan un sinnúmero de autoras y actores. Lo cual no quiere decir, que estos discursos
hayan cambiado las concepciones y prácticas discriminatorias de las mujeres, y las
representaciones biologicistas en la vida cotidiana hasta el presente, pero si han influido
sobre las políticas en el mundo entero.
Especialmente desde la categoría de género pensada, después de varias décadas de
profundas discusión, especialmente por los feminismos franceses como por los
norteamericanos. El género pensado, diferencial, histórico e incluyente. Pero ésta no es una
categoría suficiente como lo dirá Judith Butler, quien también la crítica como determinista
y políticamente excluyente, es decir, el género para ella, es más bien un lugar contra el cual
hay que luchar para superarle, porque subyace una división polar muy occidentalizada por
un lado y muy patriarcal y todavía sexuada.
Es decir esta categoría constriñe, porque el género es entendido como un conjunto que
implica las representaciones tanto sociales, como culturales en las cuáles se determinan
tanto, para el hombre como para la mujer, los roles sociales y culturales. La corporeidad, y
el determinismo de género son producidas en el mundo y son admitidas dentro las
representaciones que las familias dentro de las sociedades también definen, crean,
imaginan, proyectan, tanto para lo femenino como para lo masculino, sus hijos e hijas
deben ser como ellas quieren con base en el pattern. En consecuencia para Butler el género
entendido de esa manera, sería un lugar de exclusión y de repetición de imágenes donde la
dominación del mundo patriarcal, y la incomprensión de los devenires corporales del deseo
es una fuente de exclusión de ahí su propuesta de la teoría queer.
La propuesta de Butler es subversiva en cuanto a la llamada teoría queer, correspondiente a
los estudios de género actual, contra los esencialismos de la identidad de género centrados
en lo inmutable, y arraigados en la naturaleza, en el cuerpo o en una heterosexualidad
estandarizada y obligatoria, esa es en términos generales la propuesta de Butler.
Naturalmente, es importante situar ¿Cuál es representación del género en las multitudes
queer? : Es contra esta definición, que ha hecho carrera, especialmente en la producción de
políticas mundial como las que produce el poder global de la O.N.U, al decir de María del
Carmen Martínez: género como:
Conjunto de ideas, creencias y atribuciones sociales construidas en cada cultura en
momento histórico, tomando como base la diferencia sexual, a partir de ello se
construyen los conceptos de masculinidad y feminidad, los cuales determinan el

2
MARTINEZ, María Carmen Introducción a la perspectiva de género. Documento de trabajo., p. 3

2
comportamiento, las funciones, oportunidades, valoración y las relaciones entre
hombres y mujeres. Son construcciones socioculturales que pueden modificarse
dado que han sido aprendidas3.
La mayoría de investigadores afirman, que el género como categoría no es sólo una
determinación social o cultural o una elección subjetiva, sino que resaltan el género en su
carácter histórico, por los cambios persistentes en las subjetividades y la aparición de
nuevas sensibilidades, nuevas emociones y nuevas corporeidades, que son producto de unas
luchas por hacer el deseo fuera de los discursos logocéntricos y como dirán las feministas
francesas falologocéntricos, en el sentidos de los más recientes estudios posestructuralistas.
De otro lado, un problema para acercarse a los estudios de género lo constituye la
presencia de un variopinto panorama teórico: muchas formas de entender el género, más de
sesenta y tres corrientes de feminismo desde las más radicales, pasando por las anarquistas,
ecologistas, otras asociadas a nuevas formas de relativismo donde todo vale como la new
age, y ahora reiteradamente el tema de las masculinidades que surge como campo de
estudio en las investigaciones en ciencias sociales y humanas en Colombia desde el año
2002 en las investigaciones de instituciones tan importantes en Colombia como el
I.E.S.C.O. de la Universidad Central de Bogotá- Colombia.
Todo ello, hace que uno no se sienta tan seguro al referirse a un enfoque u otro, porque no
está haciendo justicia a uno u a otro, pero lo cierto, es que los estudios acerca de género
pueden llegar a tal especificidad, que se tenga una definición del mismo, por cada sujeto
que puede estar agenciando su diferencia, en tanto género, a causa de la existencia de
múltiples discursos, como visiones heterogéneas que les sustentan, empezando, por lo que
significa tener un cuerpo y poder hacer otros cuerpos, como en el caso de hombres que se
dicen con alma de mujer, o hombres que se operan para ser como mujeres y luego se
enamoran de una mujer, o mujeres que quieren ser hombres y tener una mujer, porque
tienen alma de hombre, o todas estas formas de expresiones nuevas y sus respectivos
modos de situarse en el mundo tanto en los discursos de jóvenes y jóvenes adultos
payaneses.
Adelante situamos a J. Butler quien introduce una discusión muy fuerte con las multitudes
Queer, muy visibilizadas por los estudios de corte antropológico y de los Cross cultural
Studies, especialmente en norte América, Australia y en Europa, es decir, se está más allá
de la biología, del cuerpo y sus determinaciones físicas, en una serie de mixturas que son
más devenires del deseo, y transgresiones al propio cuerpo humano legitimado como objeto
de la biología, la medicina, la filosofía, la sicología y la siquiatría. Evidentemente estas
operaciones teóricas sobre la corporeidad y la subjetividad tienen su deuda con toda la
apreciación del posestructuralismo francés de Michelle Foucault y las aproximaciones a sus
cuerpos-placeres y a los cuerpos-deseo en los términos de Gilles Deleuze y Félix Guattari.,
para hacer lo que se quiera ser y pueda ser con el propio cuerpo. Consecuentemente, las
multitudes queer hablan como minoría: homosexuales, gays, lesbianas, transexuales etc, se
auto-representan como minorías en cuanto no se han aceptado su dignidad y sus derechos,
aunque parezca contradictorio, se consideran una cultura en todo el mundo, todavía en
luchas por su legitimación.

3
MARTINEZ, María Carmen Introducción a la perspectiva de género. Documento de trabajo. P. 4

3
En Popayán, desde el año 2008, no existen propiamente estas multitudes Queer como tal,
que si se presentan en Bogotá constituidas por una alta población LGTB, que cualquier
parroquiano puede ver desfilar a las diez de la noche o en las colas de los lugares de
ambiente como Theatron o los bares de todos tipo en la trece entre calles 40 a 63 de
Bogotá-Colombia. Pero los discursos de queer si están presentes, pero no con los visos de
reivindicación política como sucede en el mundo entero.
En Popayán estas minorías existen, aunque el homosexualismo y el lesbianismo y otras
tantas formas de identidad sexual especialmente, transgresoras, siempre han existido
soterradamente. El ocultamiento de estas identidades sexuales, es por el ambiente de una
ciudad eminentemente homofóbica y tradicionalmente religiosa como Popayán. Aquí
todavía no existen carnavales gay, ni festivales, todo es semi-clandestino, en fiestas
privadas tanto de homosexuales como swingers. Incluso adultos pagan a jóvenes y
jovencitas que se ofertan como prepagos en los catálogos, especialmente en las páginas
Web de scorts.
Ahora bien, son muchos los jóvenes que se identifican con estas nuevas formas de asumir
lo femenino, o lo masculino, que ven a diario en la Web, y en los lugares gay o de
“ambiente” que visitan o que observan como prácticas de sus propios compañeros de clase
o del trabajo, pero no son abiertas sus formas de expresión, en Popayán salir del closet es
para gente valiente, al decir de Hipli. En la Ciudad Blanca, son más visibles los
homosexuales, que las lesbianas, poco se conocen, tienen un “perfil muy bajo”, pero éstas
siempre han existido, principalmente, como juegos, entre universitarias liberadas, en varias
carreras de universidades públicas o privadas, como antropología, filosofía, historia y artes,
en los ambientes de la educación media privada y pública.
Algunas jóvenes se hacen lesbianas por moda, “se dan una cana al aire”, pero más bien son
pocas. Otras los hacen por grandes decepciones amorosas, pero esas sexualidades
transgresoras para el statu quo payanés, en este momento se presentan en los clanes de
jóvenes Emo, como parte de la representación misma del Emo a nivel global.
En el mundo entero y por supuesto en Popayán estas prácticas de transgresión de la moral
sexual por los Emos, son evidentes en los procesos de iniciación de nuevos miembros al
clan y en otras ocasiones, como formas de prueba para decirle a un neófito que allí, impera
una transvaloración absoluta de la moral y las costumbres en donde fue educado,
especialmente las judeo-cristianas. Para algunos estas representaciones son superficiales y
pasajeras, pero se recuerda que las adscripciones juveniles son móviles al decir de Susana
Reguillo, hoy Emo, mañana otra búsqueda en el metal, o en el punk o en grupos totalmente
distintos, como sucede con dos colaboradores que pasaron de los grupos emo y metálicos a
los ministerios musicales católicos.
En estos clanes emos, es importante hacer notar como los géneros masculino y femenino
tienden a borrarse por un tercer género, decirlo así parece un poco inaudito, pero no lo es,
es que ese borramiento, esa tachadura del género, implica una posibilidad nueva
transgresora de hacer cuerpo: una corporeidad andrógina, ni hombre, ni mujer o los dos
aspectos al mismo tiempo, la novia emo debe ser idéntica al novio emo, ambos andróginos.

4
En la observación del clan Emo que colaboró en la investigación, no se distingue un Emo
mujer, de un Emo hombre, incluso la tendencia, es a un tercer estado, una corporeidad
andrógina, de la cual son conscientes, y es una forma de diferenciarse de las demás culturas
juveniles, grupos, solitarios. La representación del cuerpo de los Emo, no tiene nada que
ver con formas del fenotipo indígena, ni menos el fenotipo mestizo, predominantes en el sur
occidente colombiano, es decir, los jóvenes Emo deben ser flacos, altos, blancos, pelo
negro, si no tienes este fenotipo eres un posser, nada más, si eres gordo, ni indígena, ni
zambo, ni mestizo, no puedes ser Emo.
Los Emos de Popayán representan su corporeidad imitando a los Emos mayores que tienen
blogs o páginas en la Internet. Estos son idénticos en sus estilos y en su visión del mundo,
una novia y un novio Emos, son indistinguibles, se parecen como mirarse a un espejo. En
ello también se observa la repetición de los estereotipos de los personajes y sus cuerpos del
anime japonés, al cual han tenido acceso todas las generaciones desde hace muchos años,
especialmente desde los setenta en adelante, por la transmisión del mismo, a través de
series de televisión en canales oficiales y ahora gracias a la televisión por cable. Las
corporeidades del manga son altamente prestigiosas, también los discursos románticos que
giran alrededor de los personajes adolescentes, recordemos a Sakura mail, recordada por
jóvenes universitarios.

P OP AYÁ N Y SU S SU B M U N D O S

No obstante, lo que importante de ello, es que el fenómeno de nuevas sensibilidades existe


en Popayán y ha admitido a un sinnúmero de jóvenes, especialmente, aquellos que entran
en la moda de lo homosexual, libre de tapujos, la bi-sexualidad como práctica transgresora
privada, la sexualidad prepago de hombres y mujeres jóvenes como servicio público, el
fenómeno swingers y la homosexualidad, para los llamados jóvenes prepago, que se auto-
representan como viriles y que hacen parte de las redes de prostitución que en Popayán
existen, pero no propiamente como negocios de propietarios payaneses, éstos son más bien
pocos, sino como parte de empresas constituidas a nivel global, para tal fin, con núcleos en
Bogotá, Cali-Valle, Medellín, Cartagena (registra incremento de turismo sexual infantil,
desde febrero de 2011). Es decir, el género también vende al mejor postor.
Ahora bien, el género es un lugar de enunciación múltiple, produce y reproduce
prácticas locales dependientes de prácticas globales, redes de trata de blancas: hombres y
mujeres, especialmente cuando se trata de unas economías sexuales que reemplazan el
trabajo cotidiano con el comercio sexual.
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Pero el elemento importante, es el carácter transgresor de los cuerpos contemporáneos, no
querer ser lo que se es en el cuerpo, en el estrato. Cegar al fantasma que es el propio
cuerpo, para hacerse otro cuerpo. Cuerpo que se desocupa de la organización moral, sexual
y sociocultural del género, que es sin duda una categoría esencialista, o del cuerpo
biológico y para crear uno nuevo. Incluso a través de cirugías o a través de dispositivos
más económicos, aunque no baratos, como los ofrecidos por la cirugía estética y otros
meramente externos. Sólo basta tener el dinero para tener un nuevo cuerpo, en jóvenes con
actividad o sin actividad como prepagos, ser prepago es salir de unas representaciones
socio-culturales y económicas, y en el caso de transexuales que son más bien pocos en
Popayán, existen pero invisibilizados, sin expresión de sus propias representaciones.
El ámbito de hacer un cuerpo parte de la transgresión esencial del cuerpo propio y su
historia personal y cultural, se ejerce, no solamente contra el contexto histórico, lo político,
sino contra lo religioso que en fin de cuentas, es el que corrige el ejercicio del deseo y de
las prácticas homosexuales, en la lucha de las representaciones, esto especialmente, en
Popayán, pero en delicada cercanía con los jóvenes y jovencitas asociadas al Clan Emo.
En fin de cuentas, la categoría de género adquiere una profunda relación con el deseo, o con
lo que llamará Michel Foucault, la capacidad de agencia: cuerpos/placeres en Foucault o
cuerpos deseantes en Deleuze y Guattari, la equivalencia dada por el diálogo con Foucault-.
Incluso la misma categoría de género estalla con el concepto de las máquinas deseantes que
se elaboran en el sistema capitalista y esquizofrénico del esquizoanálisis deleuziano.
Si el sexo es un concepto que surge de la naturalización del cuerpo en el mundo. El mismo
género se queda corto ante las máquinas deseantes, cuando se superan el Edipo, emerge el
Antiedipo y se producen otras sensibilidades y otras sexualidades, y más bien en vez de
género se edita y reedita el deseo como límite de la experiencia infinita aÿon, por lo cual el
cuerpo se renueva despojándose de un cuerpo sexuado, incluso determinado genéricamente
por él mismo, para fluir en el eterno devenir de los encuentros maquínicos del deseo, ésto
en proporción a la visión deleuziana del esquizoanálisis. Incluso, ante el deseo a veces
importan, otras veces no conciernen las ETS, es decir, es un carrusel imparable en donde se
ha roto con las representaciones de la pureza/peligro en los términos de Mary Douglas y
por supuesto con el sagrado dogma del cuerpo occidental judeo-cristiano, sus pastorales,
sus catecismos, sus mandamientos, las concepciones de la salud, la sexualidad para el
matrimonio, para la procreación, la imagen de la familia.
Incluso, al escuchar o leer la nueva poesía de los jóvenes poetas payaneses, algunos de ellos
son parte de un capítulo de esta investigación, no deja uno de encontrar la imagen del poeta
que vuela sobre los cuerpos de las jóvenes payanesas en una orgía verbal, donde todo el
vocabulario exalta la grandeza de un hombre que siente por los poros, al que le hierve la
sangre y los flujos internos, incluso, el cuerpo de la mujer será una especie de cloaca-
prostíbulo que se idolatra. No habría mucha diferencia en ello con las letras del death metal
y el black metal, que quieren exterminar la mujer en el desmembramiento, lo extraño es
como ellas mismas bailan en los conciertos, a la manera de los headbangers, siendo
tratadas como la peor basura del planeta, como lo he observado, escuchado y registrado en
mis notas en los conciertos de los géneros citados desde el año 2008 en Popayán.

6
Las representaciones acerca del género implican también un fluir de los cuerpos hacia
subjetividades nuevas, en las cuáles las determinaciones biológicas no importan sino, la
forma en que moldean sus relaciones intersubjetivas no solamente heterosexuales y los
modos de comunicación interior y exterior y por supuesto sus representaciones. La
construcción de la corporeidad es un íntimo deseo de ser lo que su propio cuerpo no acepta
ser, se quiere ser mujer, no hombre, como en el caso de aquellos jóvenes que se auto-
marcan en una relación consigo mismos, ser homosexual, ser gay, ser travesti,
representarse a través de formas femeninas en el vestir, o masculinas en el caso de algunas
lesbianas, en la gestualidad, en la identificación con patrones de consumo femeninos que
quisieran ellos mismos algún día llegar a ser.
En el caso de Frank nuestro colaborador, el mundo del trabajo como docente, no ha podido
ser realizado, porque hay tabúes para aceptar a jóvenes homosexuales como docentes en los
colegios de Popayán. La homofobia ha hecho que no consiga desempeñarse y que por lo
tanto, deba dedicarse a otros menesteres no propios de su formación. Ser sí mismo cuesta
para los nacidos varones, no sólo en Popayán, sino en toda Colombia y más cruelmente en
algunas regiones es más fuerte la homofobia y el ataque especialmente, a homosexuales y a
mujeres lesbianas, a quienes ni siquiera se les nombra, ni menos se les visibiliza. No
aparecen como protagonistas de novelas, ni siquiera son entrevistadas o aparecen en
programas o publicidad. Pero también existen casos de jóvenes que entran en estas nuevas
sensibilidades, por ser el último grito de la moda, es decir, por no quedarse atrás de sus
compañeros como los afirman dos colaboradores.
La separación que se hace con la categoría de género del ámbito sexual, promueve grandes
problemas anexos a la relación de cómo ven los otros la corporeidad que se expresa y con
la cual se vive en un mundo, sea para verse siempre, en una relación de continuidad con los
órdenes de la corporeidad establecida o para transgredirla, como sucede en los jóvenes
tanto solitarios como los jóvenes asociados a grupos, clanes o culturas juveniles, en
Popayán. Para muchos determinarse como hombres no puede ser posible y he ahí la
situación esquizoide en la que algunos viven, en el caso de los jóvenes homosexuales, que
como en el caso de nuestro colaborador Frank, no puede expresarse en la familia, en el
ámbito laboral, pero no en el ámbito interpersonal donde vive de aventura en aventura, es
decir a sus anchas, pero a escondidas con citas a ciegas, chatear, disfrutar de los encuentros,
abandonar, liarse, dejar, entristecerse, estar feliz y definitivamente cuando nada funciona,
estar en la casa como un hijo de familia, en Internet, leyendo revistas de moda, aprendiendo
sobre cortes, vestuario, combinación de colores, tips de cuidado de la piel, subiendo sus
fotos previamente mejoradas con programas para tal oficio, etc.
Pero el género, está también supeditado a cómo las mujeres y los hombres están inmersos
en el poder, en su acceso y distribución del poder. Este es otro elemento importante, en
Popayán, es la familia de los jóvenes a quien debe mostrarse la imagen estereotipada que
ellos quieren ver, como en el caso de Frank, su padre, su madre, cero conflictos, para poder
hacer “por debajo de cuerdas” la efusión de su deseo. Para su familia él es un hombre, -raro
sí, pero ni se lo dicen- quiere parecerse a Shakira, identificarse con ella, llenar su cuarto,
con cuadernos, con afiches de la cantante, tener todos los DVD de sus conciertos, subir al
facebook las canciones que le gustan, no porque sienta un deseo por la diva, a la manera de
cualquier muchacho heterosexual, sino porque él quiere ser como ella. Estos roles de
género son evidentemente transformados, transvalorados, se desfugura la sexualidad

7
biológica y se presenta más bien, la corporeidad homosexual como una nueva máquina de
producción del deseo humano.
Toda la teoría de los roles de género manejada por la UNESCO para sus políticas globales
es resituada en el deseo individual, fuera de todo condicionamiento, fuera de todo
aprendizaje, lo masculino y lo femenino ya no son equivalentes a ciertas acciones y no se
pueden diferenciar tan fácilmente, los roles de género no son naturalizados, tampoco
garantizan adscripciones a identidades fijas, estadísticamente claras, ni presentan visiones
de mundo que las vinculen a poblaciones o a grupos, son absolutamente postmodernas,
individualistas, ateas y materialistas. No existirán entonces roles de género dentro de la
anarquía del deseo contemporáneo. Es la sociología, la siquiatría, la psicología, incluso la
filosofía, las que naturalizan para normalizar un cuerpo. Cito un discurso para que se matice
la diferencia de las concepciones de género de la UNESCO y la OIT4:

… La naturalización de los roles y atributos de género es lo que lleva a sostener que


existe una relación determinante entre el sexo de una persona, su capacidad para realizar
una tarea y la valorización social que se le otorga a dicha tarea. Considerar como
naturales los roles y las capacidades es creer que son inmutables. Reconocer y descubrir
que estas características, supuestamente fijas e inamovibles, son asignaciones culturales,
es lo que permite transformarlas. Desnaturalizar la percepción que se tiene del ser varón o
mujer y reconocer que sus roles y capacidades han sido socialmente construidos permite
pensar de otro modo los lugares que ambos pueden ocupar en la sociedad.

En un contexto social dado, los roles de género de los hombres y las mujeres pueden ser:
flexibles o rígidos, semejantes o diferentes y complementarios o conflictivos.
Particularmente en las situaciones de crisis, como la guerra, terremotos, hambrunas, los
roles pueden cambiar pero, luego, las antiguas actitudes pueden regresar y las mujeres
suelen ser desplazadas lo que se traduce en nuevas expresiones de la discriminación o de
barreras para el acceso al empleo, la formación profesional, etc.

Tanto las mujeres como los hombres realizan múltiples roles en sus vidas, en la esfera
productiva -actividades dirigidas a la producción de mercancías para el consumo o el
comercio y las generadoras de ingreso- y en la esfera reproductiva - actividades
relacionadas con la creación y sostenimiento de la familia y el hogar. No obstante, en la
mayoría de las sociedades, los roles de los hombres en la esfera productiva son
prominentes, si bien se están produciendo cambios significativos en su involucramiento en
las actividades doméstico y de cuidado. Generalmente se desarrollan fuera del hogar lo
que les permite realizarlos secuencialmente y no simultáneamente.

Las mujeres, por su parte realizan varias tareas simultáneamente, desempeñando múltiples
roles (multitarea) dentro de la esfera reproductiva y productiva. Desempeñan así un rol
productivo, reproductivo o doméstico (atención y cuidado de la supervivencia de la vida
humana) y comunitario (las tareas que como generalmente como extensión del rol de

4
http://www.oitcinterfor.org/public/spanish/region/ampro/cinterfor/temas/gender/doc/glosario/iv.htm

8
cuidado realizan en beneficio de la comunidad (promoción y mantenimiento de recursos
escasos como el agua, el cuidado de la salud, la educación, etc.). La mayoría de las veces
este trabajo es voluntario y, por ende, no remunerado y, por supuesto, considerado como
natural, derivado de su condición de cuidadoras y, por tanto invisible en las estadísticas
nacionales. Por su parte, la gestión comunitaria de los hombres tiende a ser más visible y
de mayor valor social.

¿Por qué el género es un elemento constitutivo de las relaciones sociales? es una variable
de base del sistema de jerarquización y categorización de las personas que regula las
relaciones entre mujeres y hombres atribuyéndole mayor valor a los rasgos y características
definidas como masculinas.

La construcción de género supone un conjunto de acuerdos elaborados por una comunidad


determinada en un momento histórico determinado. Es un proceso activo y sutil, más tácito
que explícito que se va elaborando cotidianamente y lleva a que cada persona haga lo que
se espera de ella y, cuando esto no ocurre, pone en riesgo la pertinencia al grupo o la propia
identidad.

Como elemento constitutivo de las relaciones sociales, el género se expresa en: símbolos
culturales: visualizan las representaciones sociales e ambos sexos,

1. Conceptos normativos: polarizan y reprimen comportamientos y tareas,

2. Instituciones y políticas: reproducen y valorizan la asignación de roles y


capacidades,

3. Identidad subjetiva: posiciona y determina el proyecto de vida de unos y otras.

4. Hoy ya no hay dudas que el género es uno de los principios organizativos centrales
alrededor de los cuales se desenvuelve la vida social y uno de los fundamentos de la
identidad individual. Por ello, en la auto percepción así como en las trayectorias de
vida y laborales tienen un rol muchas veces determinante las expectativas de los
otros, o sea, los condicionamientos o estereotipos sociales. Los estereotipos se
cristalizan como competencias y tareas femeninas o masculinas, valorizadas
socialmente de manera desigual y no sólo han fundamentado históricamente la
división sexual del trabajo, sino que condicionan las opciones profesionales y los
lugares reservados a hombres y mujeres en lo personal, laboral y profesional.

Este círculo se cierra porque el acceso diferenciado impacta en el desarrollo de los recursos
internos -autoestima, confianza en sí mismo, habilidad de liderazgo, capacidad para
expresar intereses propios y para planificar, etc.- y, no cabe duda, que ellos son la materia
prima para los procesos de enseñanza-aprendizaje. Los estereotipos van evolucionando con
el tiempo y en el espacio. Pero, como están internalizados, se trata de procesos lentos,
costosos, no lineales ni uniformes e incluso contradictorios. Por lo cual, las pautas
culturales diferenciadas por sexo todavía pueden ser explicadas en gran parte por el modelo
tradicional.

9
El discurso anterior evidencia como el concepto de rol sexual o de género es obsoleto frente
a las nuevas sensibilidades y búsqueda de emociones contemporáneas y la idea de
arriesgarse en la experimentación con nuevas sensaciones ya sean sexuales o alucinógenas.
Existe en el discurso anterior todavía la marca de la polaridad sexual humana, la sociedad
occidental no comprenden los géneros neutros, la homosexualidad y sus devenires, ni la
androginia y sus alcances, son más bien seudo aceptados entre los bohemios, artistas, locos,
bohemios, diseñadores, modelos, cantantes, gente de la moda o del espectáculo donde los
cuerpos se transforman con mayor holgura y sin tabúes, pero que en América en general,
apenas se están forzando para ser visibilizados, como nuevas corporeidades. Al respecto un
discurso de contraste muy fuerte y para muchas discusiones, es la versión de la
homosexualidad en términos religiosos, en el reconocimiento que hace la iglesia católica de
estas subjetividades y la invitación a asumir la castidad como imperativo moral:
…La esencia de la solicitud pastoral hacia la persona homosexual se refleja en las
palabras de nuestro Santo Padre, Juan Pablo II, quien en 1979, les dijo a los obispos
estadounidenses: "En la claridad de esta verdad, ustedes constituyeron un ejemplo
de la verdadera caridad de Cristo, al no traicionar a aquellas personas que, por su
homosexualidad, se enfrentan a problemas morales difíciles, como hubiera sucedido,
si en nombre de la comprensión y la compasión, o por cualquier otra razón, ustedes
hubieran dado una falsa esperanza a cualquiera de nuestros hermanos o hermanas.
Por el contrario, por medio de su testimonio de la verdad de la humanidad en el plan
de Dios, ustedes manifestaron su amor fraternal de una manera efectiva, poniendo
en alto la verdadera dignidad humana, para con aquellos quienes también buscan en
la Iglesia de Cristo una guía que procede de la luz de la palabra de Dios5.

En otra instancia, existe otra aproximación importante para esta investigación y es la


Antropología del cuerpo. Género, itinerarios corporales, identidad y cambio, en la de Mary
Luz Esteban (2004), es un libro primordial en lengua española que se han tomado como
base para la realización de los acercamientos de la investigación donde se realizan varias
aproximaciones reflexivas que involucran discusiones acerca del problema de género y en
él, existe una crítica fundamental con la que se quiere superar el problema de género con el
cual se ha pensando el cuerpo femenino y masculino desde los años sesentas. Una nueva
perspectiva que se separa especialmente de una mirada feminista desde una propuesta
deconstructiva son las multitudes Queer, en diálogo con algunas afirmaciones de Judith
Butler, donde no se trata sólo del género como determinación biológica, sicológica o
social, sino donde se comprende lo femenino y los masculino como un complejo entramado
de significaciones que impactan relaciones más del lado de la posibilidad de un cuerpo para
ser sí mismo, también en diálogo con Michel Foucault.

Centrándonos en el texto de Esteban, éste se compone de tres partes, la crítica desde la


teoría social y feminista del cuerpo, los tratamientos y usos del cuerpo en la sociedad
occidental y su relación con el género y finalmente, realiza una propuesta, desde la
descripción y análisis de itinerarios corporales, a partir de entrevistas que entre otras cosas,
5
S.S. Juan Pablo II, "Meeting with the Bishops of the United States of America" ("Encuentro con los Obispos de los Estados Unidos de
America"), 5 de octubre 5 de 1979, número 6. 3. Web: http://www.vidahumana.org/vidafam/iglesia/respuesta.html. Acceso 04 de
Febrero de 2011.

10
se presenta como una forma de revelar el cuerpo y sus emociones, dolores, procesos,
propuestas y metas para devolver la esperanza en la vida de muchas de las colaboradoras
entrevistadas, en fin de crear una reflexión sobre el posible empoderamiento que en la
sociedad, la cultura y la familia necesitan las mujeres.

En el texto se muestra el cuerpo en el orden capitalista contemporáneo, que hace de él y sus


usos, uno de los principales espacios de contradicción social, y su importancia como campo
teórico, especialmente en el mundo anglosajón, pero informado por las críticas del
posestructuralismo y el feminismo. La autora considera el cuerpo como objeto
prevaleciente, relaciona interdisciplinariamente estudios antropo-sociológicos, circundando
los de Michel Foucault y las contribuciones de un feminismo crítico, y el feminismo, el
constructivismo, el posestructuralismo y la teoría de la agencia de Michel Foucault.

La propuesta teórica es una teoría corporal de la acción social e individual, que considera
al cuerpo como agente, en tanto postula la existencia de una dimensión corporal
independiente en la experiencia y en la práctica. La idea de cuerpo como agente, ataca unas
posturas dentro del feminismo, promueve un análisis que se separa de la visión
victimizadora de la dominación de la mujer y de otros grupos. Ver las mujeres como
aquellas capaces de resistir a las estructuras sociales y reconducir sus itinerarios más allá de
las intenciones de partida, contribuyendo a su propio empoderamiento.

Enfocándose en la observación en campo en la ciudad de Popayán, esta manera de ver la


corporeidad tanto femenina como masculina, ni víctima, ni agente dominador, se percibe en
el movimiento de inclusión de las mujeres y los hombres en la comunidad de practicantes
del parkour en Popayán, que vincula a mujeres cada vez más, para practicarlo con la
mismas técnicas, ímpetu y perfección del movimiento, es decir, la exigencia no es
moderada, sino es la misma, porque el parkour trata a los cuerpos como un agente que
supera las limitaciones de todo tipo, incluso el obstáculo que es cualquier objeto de la
ciudad, sirve para sacar de las limitaciones tanto físicas como síquicas al cuerpo.

Una limitación mental podría ser, la que representa a las mujeres como débiles en la
representación socio cultural generalizada, como si la concentración de fuerza en el cuerpo
pudiera ser la condición única, para poder realizar el desplazamiento, y el salto de
obstáculos, esto es distinto en el parkour, la determinación de la acción viene dada
previamente porque no hay barrera mental, por lo tanto, no hay barrera física.

Así, ante los cuerpos contemporáneos del parkour, el género es sólo un accidente, todo
cuerpo puede desplazarse no linealmente por el mundo, como todos los demás cuerpos
transitan, sino que pueden romper la línea de continuidad, (superar los trazos que implican
la calle) para crear una escritura del cuerpo, crear su propio recorrido, es crear su propia
ciudad, nuevas tácticas para asumir la vida y la ciudadanía. Traceur o traceureses son los
modos lingüísticos de diferenciación, ésto no se puede negar, pero la meta es igual: trazar
de nuevo los mundos dados: la ciudad blanca de Popayán torna a llamarse por su
comunidad parkour Ville Blanche recreada como un territorio múltiple en los múltiples
recorridos creados por jóvenes y jovencitas. El cuerpo va en una deriva, en los términos de
Guy Debord, quien explica las relaciones de cambio en medio del trayecto desautomatizado

11
de quien recorre los espacios urbanos, esta la deriva se presenta como una técnica de paso
ininterrumpido a través de ambientes diversos:

…El concepto de deriva está ligado indisolublemente al reconocimiento de efectos


de naturaleza psicogeográfica, y a la afirmación de un comportamiento lúdico-
constructivo, lo que la opone en todos los aspectos a las nociones clásicas de viaje
y de paseo.

Una o varias personas que se abandonan a la deriva renuncian durante un tiempo


más o menos largo a los motivos para desplazarse o actuar normales en las
relaciones, trabajos y entretenimientos que les son propios, para dejarse llevar por
las solicitaciones del terreno y los encuentros que a él corresponden. La parte
aleatoria es menos determinante de lo que se cree: desde el punto de vista de la
deriva, existe un relieve psicogeográfico de las ciudades, con corrientes constantes,
puntos fijos y remolinos que hacen difícil el acceso o la salida a ciertas zonas…

Pero la deriva, en su carácter unitario, comprende ese dejarse llevar y su


contradicción necesaria: el dominio de las variables psicogeográficas por el
conocimiento y el cálculo de sus posibilidades. Bajo este último aspecto, los datos
puestos en evidencia por la ecología, aun siendo a priori muy limitado el espacio
social que esta ciencia se propone estudiar, no dejan de ser útiles para apoyar el
pensamiento psicogeográfico.

En las antípodas de estas aberraciones, el carácter principalmente urbano de la


deriva, en contacto con los centros de posibilidad y de significación que son las
grandes ciudades transformadas por la industria, responde más bien a la frase de
Marx: "Los hombres no pueden ver a su alrededor más que su rostro; todo les
habla de sí mismos. Hasta su paisaje está animado".

Así, el modo de vida poco coherente e incluso ciertas bromas consideradas


equívocas, que han sido siempre censuradas en nuestro entorno, como por ejemplo
introducirse de noche en los pisos de las casas en demolición, recorrer sin parar
París en auto-stop durante una huelga de transportes para agravar la confusión
haciéndose conducir adonde sea, o errar en los subterráneos de las catacumbas
prohibidos al público, revelarían un sentimiento más general que no sería otro que
el de la deriva. Lo que se pueda escribir sólo sirve como contraseña en este gran
juego...

En el marco investigativo se presentan serias diferencias entre las mujeres asociadas a cada
una de las culturas juveniles, grupos, clanes y comunidades juveniles en las cuáles ellas
interactúan, el género por ejemplo en los grupos católicos converge con la naturalización y
división biológica de la sexualidad y está íntimamente ligada a un patrón de diferenciación
total entre mujer y hombre, porque en ello es clave el metarrelato mítico de la creación de
Dios. La diferenciación sexual se da con los primeros padres de la humanidad y la relación
entre pureza y peligro evidente en el Levítico muestra las prácticas que diferencian lo
sagrado tanto en el cuerpo como en el ritual en los términos de Mary Douglas. Allí se ha
radicalizado la idea de género como diferencia mítica, física y biológica, la corporeidad es
12
sagrada en sus distintas maneras de portar el cuerpo, como receptáculo de la gracia y
templo del Espíritu Santo. Un referente fuerte de contraste de estos jóvenes, tanto los
asociados al parkour como en los grupos católicos es el contraste abismal entre una
corporeidad centrada en los valores de una tradición religiosa y los antivalores que
propician una experimentación del cuerpo en los demás agrupamientos juveniles, si el
modelo en la visión ortodoxa es la virtud, verdad y belleza de Jesús y María el modelo
ideal sagrado de lo humano masculino y femenino, el modelo de jóvenes asociados a los
clanes emo, rock metal, punk, gótico, es la rebeldía y la representación del mal occidental;
he ahí una gran influencia de la lectura de obras como la de Andrés Caicedo, un referente
como ¡Que viva la música!. Libro de almohada, de un sinnúmero de colaboradores
nuestros, muestra como es evidente en la axiología y la ideología reflejada en el mundo
textual de María del Carmen, su protagonista que ha permeado a los jóvenes. Este
personaje inmerso en los años setentas en Cali, una ciudad apenas forjándose como
intermedia. Quien contrasta muy bien con visiones actuales de algunas culturas juveniles
asociadas al anarquismo punk en Popayán, ellas afirman su rebeldía en graffitis. Pero ese
anarquismo vitalista no es sólo un medio de las mujeres, sino también una reafirmación
para los hombres. Ella representa el camino del exceso en los cuerpos-placeres, el vicio y la
Ley y lo femenino.

El deseo de ser todo lo que se es en el propio sentido, es un redireccionamiento de lo


femenino desde el deseo como agencia, para la salida de las estructuras occidentales que
disciplinan el cuerpo femenino, principalmente en una ciudad como Popayán con una fuerte
estructura cultural colonial y por lo tanto, con unos valores y principios morales judeo-
cristianos muy arraigados, que hacen a “la mujer de bien o perdida”. Lo anterior en fuerte
discordancia con el imaginario que se mantiene aún hoy, especialmente en el núcleo
poblacional con prácticas religiosas, necesariamente esa idea del cuerpo como templo
sagrado o del Espíritu Santo se evidencia en los cuestionarios realizados, tanto en
estudiantes de universidades públicas y privadas de Bogotá, como en la Universidad
pública y privada de Popayán.

El determinismo de la mujer como aquella que representa la base familiar sólida, quien
hace la crianza, inculca valores a los hijos, la imagen de Eva-María en la representación
social, dista mucho de las jóvenes contemporáneas que ya no hacen una lectura y una
práctica de las pastorales religiosas, ni, de los catecismos, ni manuales de comportamiento,
de protocolo y etiqueta, ni de los consejos maternos, sino que subvierten las pastorales,
incluso que se han laicizado, aunque nacieron en hogares de tradición cristiana. Tal vez de
manera más fuerte en la relación con las prácticas, discursos y rituales católicos estos se
han abandonado, especialmente tradiciones marianas muy arraigadas entre mujeres
mayores, madres y abuelas como el rezo del Santo Rosario, la Eucaristía, las visitas a los
enfermos o a los presos, o los ancianos familiares o no familiares, han disminuido.

El joven o la joven prefieren entrar a la Internet, a las redes sociales, entre los jóvenes ver
películas, jugar maquinitas o X-BOX u escuchar música solos (mujeres y hombres) o
acompañados, en su propio cuarto por horas, o en el vagabundeo diurno y nocturno en los
diversos sitios de encuentro de jóvenes, el morro, el pueblito patojo, los alrededores del
Banco República, especialmente las metaleras (os) , las góticas (os), las emos (os), rastas,
entre otros, o van a la prácticas deportivas, de skate (No hay mujeres en este práctica

13
deportiva en Popayán, según el trabajo etnográfico del primer semestre de 2010), parkour o
capoeira en los ratos libres, en estas dos últimas prácticas, hay mujeres aunque pocas.

Del lado del cuidado del cuerpo de la mujer, este no ha sido implementado en las jóvenes
contemporáneas, como el lugar de la procreación en el matrimonio, en los términos de las
pastorales cristianas y los catecismos, sino que se ha convertido en el lugar de una lucha
simbólica por el placer en la mujer, cuestión que según el estudio de Mónica Campos
Cortés (2010) no se practicaba con tal fuerza en mujeres nacidas en períodos como el que
va entre 1968 y 1983, materia de su estudio. Más bien como ella bien lo define, se trata de
representaciones de los ideales de las jóvenes, ellas son constructoras de su juventud, pero
todavía media la autoridad de los padres sobre el propio cuerpo, y el qué dirán, como lo
pudo inferir de su trabajo etnográfico e histórico. En contraste entre las jóvenes
contemporáneas en los albores del año 2011 se observa todo lo contrario, dueñas de su
cuerpo, auto determinadas en el caso de las jóvenes universitarias.

En el período de 1968-1983 estudiado por Cortés (2010), las representaciones que se


habían forjado en sus propias familias, incluso las jóvenes tenían posibilidades según su
estratificación social para legitimar ciertos comportamientos, especialmente, las
universitarias que no podían tener las mujeres de estratos bajos.

El cambio cultural en las mujeres payanesas es dado por las variables educativa y
diastrática, para poder descubrirse como mujeres, las de mayor capacidad económica
podían repetir estereotipos de las jóvenes y de los jóvenes, esencialmente en cuanto la
influencia de los medios de comunicación de la época, revistas, periódicos, televisión y
radionovelas y la existencia de la oferta educativa de dos instituciones, la universidad del
Cauca y el Colegio Mayor e instituciones variopintas de formación técnica, por ejemplo, el
S.E.N.A, entre otras, abrieron nuevas posibilidades tanto laborales, como de interacción
social. También el hecho de la movilidad que producían los viajes posibilitó un contacto
cultural con otras regiones, especialmente Cali y Bogotá, eran focos de desarrollo y cambio
de la visión provincianal. Resurgen ideas nuevas que llegan rápidamente a Popayán. Se
construía otro imaginario de ciudad dentro de Popayán, una ciudad conservadora, histórica
y colonial. Los modos de comportamiento sociales eran más bien privados para las
mujeres, y más públicos para los hombres, según la perspectiva de Whiteford citado por
Cortés6, Hoy día es al contrario para las jóvenes contemporáneas payanesas.

Ahora bien, en cuanto a la vida cotidiana, las clases bajas en 2011, son mucho más
vulnerables a fenómenos como la trata de blancas, la venta del cuerpo a través de catálogos
bajo el nuevo eufemismo de la prepago, especialmente de jóvenes universitarias, en la
publicidad revisada se encuentran entre niñas de catorce años, llamándose las Lolitas, hasta
mujeres de treinta y ocho años o más, incluso con hogares establecidos, especialmente de
Barrios de estrato dos y del suroriente de Popayán, Barrio Alfonso López, Barrio
Comuneros (estrato dos), Barrio Los Sauces, (estrato uno), Barrio Empedrado (estrato
tres), Barrio Santa Inés (estrato tres), pertenecientes a las comunas 5 y 6. En algunos casos
las mujeres con estas actividades de prostitución tienen sus hogares, por ejemplo, la esposa
será pre-pago y el marido apartamentero, según información reportada en entrevistas con

6
Quien parte desde la perspectiva de género de Joann Scott.

14
una docente de un Colegio Público, aledaño a la Zona sur-oriental de Popayán, comuna
seis.

El caso femenino contrastante a esta posición del deseo como forma de administrar el
cuerpo, como agente auto determinado, es el caso de las jóvenes punkeras-anarquistas,,
quienes quieren hacerse a sí mismas, eliminando representaciones culturales occidentales,
especialmente, las patriarcales y el metarrelato moral occidental, para determinar su vida
desde sus propias leyes, dicen, en ellos se juegan elementos ideológicos y políticos muy
importantes, hacer la propia ley del deseo, es ejercer una capacidad de agencia sobre la
posición de una minoría en una ciudad tan conservadora como Popayán. Ellas desean una
liberación del yugo masculino, pero de las estructuras masculinas del imaginario cultural,
se trata de una resistencia político-cultural.

Contrastando con lo anterior, el género como escenario de diferenciación para establecer


tácticas de empoderamiento y control sobre la imagen propia, tener fama, éxito, contratos
publicitarios se da en los jóvenes de ambos sexos, las pelolais y Chocolais, la práctica no
es ideológica, sino narcisista e individualista en FotoLog o MetroLog, redes sociales de
Internet, ellas exhiben su cuerpo como un territorio que ejerce fascinación sobre ellas
mismas y sobre quien las observa en la red, ellas mismas abren el campo para ser vistas
como una forma de rendir culto al voyeurismo en la red, pero también para vender al mejor
postor su imagen de top model o de conejita de playboy o chica latina.

Estas determinaciones del deseo contrastan fuertemente con jóvenes desempleadas en


Popayán, quienes por encima de su propio deseo, tienen que acceder a las redes de trabajo
y explotación, dentro de una economía sexual de empresas dedicadas al comercio de este
tipo, que ellas ven como salida de problemas económicos, fenómeno presente en clases
medias y en estratos bajos.

Las segundas se han venido pauperizando aún más, por la inmigración de familias a los
cinturones de miseria de Popayán, como efecto del terremoto del 31 de marzo de 1983.
Ellas afirman que fueron obligadas por las necesidades de sus familias, se trata de un efecto
colateral de la pobre política social en Popayán, hay hambre social, pero recomiendan a las
jóvenes no seguir esta senda de explotación. Popayán es la segunda ciudad con mayor
desempleo en Colombia, primero está Pereira y en tercer lugar Armenia (2010). Si el
desempleo es alto en los adultos, en los jóvenes es mayor y no sólo a nivel de la provincia
caucana, sino a nivel de Colombia y del mundo según el último informe de la OIT 7, del
D.A.N.E y de la Cámara de Comercio del Cauca.

De otro lado, la corporeidad masculina, como territorio de experimentación fuera de la


organización sexual del cuerpo judeo-cristiano, se presenta en Popayán en formas que para
muchos jóvenes son tácticas para participar de la moda denominada coloquialmente salir
del closet. Evidente en una sociedad del entretenimiento que muestra nuevos modelos que
los jóvenes imitan especialmente, en las producciones de los canales como R.C.N en
Caracol, con la presencia de una actriz travesti o en los programas con L con protagonistas
lesbianas o en Series de televisión con tal alto rating como Sex and the city, con producción

7
Fuente: CNN en español. Agosto de 2010 e informe mundial de la OIT.

15
fílmica incluida y con destapes de figuras latinas de la canción, son modelos que se imitan
fácilmente, no es raro encontrar jóvenes gay aficionados a tres cantantes que querrían haber
sido, Shakira, Paulina Rubio, y Thalia. Incluso los mismos transexuales hacen espectáculos
vestidos a la manera de estas divas latinas o americanas. En el canal Caracol en las series
de agosto de 2010, se presenta el modelo del diseñador homosexual, las protagonistas son
un refrito a la colombiana de la serie americana Sex and the city, con la homosexualidad y
promiscuidad de las protagonistas de novela Los hombres las prefieren brutas (2010) que
muestran los prototipos americanos de estas series con sexualidad del deseo queer.

Ahora bien estas representaciones de la corporeidad transgénero son aceptadas y usadas


también para vender en los canales nacionales y locales, incluso de fuente directa esta
nueva ola de la sexualidad gay y la transexualidad aparece como tema legitimo en la
televisión, por los nuevos discursos de legitimación legales en Colombia de las minorías
gay tanto con la institución Colombia diversa, como con proyectos de Ley en el Congreso
de la República defendidos por la población LGBT. En la televisión estos temas han
entrado sin ninguna dificultad, precisamente porque los libretistas han declarado ser
homosexuales y sus defensores como el caso de Pedro Miguel Rozo, quien en compañía de
Adriana Suárez Fuentes realizan en el año 2007, los libretos de una novela llamada el
último matrimonio feliz, bajo la dirección de Luis Orjuela, con un altísimo rating. Con uno
de los protagonistas gay, peluquero y explotado por su pareja un joven violento pero
enamorado que muere defendiendo a su pareja el hombre mayor peluquero.

Pero estas representaciones no sólo se muestran en los medios, en los ídolos, en su destape
y salida del closet. Ser homosexual se ha convertido en una moda en Colombia y en los
ámbitos universitarios desde hace varios años, es un hecho, especialmente en universidades
públicas y en ambientes heterodoxos, e incluso aceptados en los discursos presidenciales de
los postulantes de la izquierda, a través del polo de Rosa8.

…Según Gaviria, la comunidad LGBT ha sido discriminada históricamente tras explicar


por qué este grupo debe sentirse orgulloso de asumir públicamente su condición, aún a
costa de las consecuencias negativas que de ella se derivan."Lo que hay que pedir con la
comunidad LGBT no es tolerancia, sino respeto (...) esta es una demostración de que en
Colombia la democracia está por construirse", dijo Gaviria al manifestar que la tolerancia
implica una posición de superioridad, mientras que el respeto exige una relación horizontal
y por lo tanto mucho más igualitaria…

Una referencia importante es los cambios en la concepción de la sexualidad y el género


parte de los trabajos de las comunidades LGBT, población desde donde se han realizado
trabajos legales de defensa de estas minorías, especialmente en el informe de Colombia
Diversa de mayo de 2010. Donde se informa casos de homofobia y violencia contra esta
población. En esta línea es necesario reconocer cómo en Popayán se han introducido
discursos y las prácticas homosexuales, bisexuales, lesbianas y swingers, se han convertido
en un lugar de enunciación de discursos y de práctica de la sexualidad, que comparten
muchos jóvenes se ha constituido una forma de romper con esa visión marcada del género
reducida a lo biológico. Según estas nuevas formas de representación en el sentido de

8
Elespectador.com. Política informe del 13 de enero de 2009.

16
Esteban (2004), la sexualidad se agencia como la posibilidad de producir el propio sentido
de sí mismo y el derecho sobre el propio cuerpo, esto es evidentemente una teoría queer del
cuerpo actual.

El espacio de encuentros de la reivindicación de la minoría gay son los lugares de la rumba


como por ejemplo en Bogotá, Theatron y en Popayán, El Closet. Sin punto de comparación
éste último, en la parafernalia espectacular varias y grandes salas con varios ambientes,
para cada consumo musical, lugar que privilegian especialmente jóvenes en la rumba
bogotana. Sus dueños afirman: “Muchos conocemos a Theatron en Bogotá como un lugar
de rumba y entretenimiento para la comunidad gay. Sin embargo, Theatron ha venido
creciendo abriendo nuevos salones que esporádicamente abren las puertas, para eventos
abiertos a todo el público, consolidándose así como una sala de gran importancia para la
vida nocturna y la cultura Bogotana. Hoy en día Theatron es un complejo de
entretenimiento que cuenta con salones como: Lottus (donde hemos hecho en repetidas
ocasiones Soul Heaven), Theatrino, El Chillout y LUXE BAR” (entre otros)9.

Aunque con fines semejantes, la rumba gay. En Popayán existe por esta población una
fuerte auto-estigmatización, comparemos la foto de la rumba ambiente de El Closet (8) y la
de Theatron (9) en el antiguo Teatro Metro de Bogotá.

10 11

Por ejemplo, las nuevas sensibilidades que construyen nuevos cuerpos, hacen parte de
consumos mundiales y de grupos con estilos de vida replegados hacia nuevas prácticas
sexuales presentes en Popayán, estas prácticas son muy antiguas en todas Colombia, pero
son recientes en Popayán, los swingers que se intercambian las parejas. En español se
autodenominan parejas swingers, es decir parejas liberales tal como se publica en 1975 en
la Revisa Lib. Las actividades de intercambio de pareja ocurren cuando una pareja casada o
de otra forma comprometida, se involucra con una pareja similar o un individuo soltero (es
menos frecuente, podría romper la unión marital). El sexo se eufemiza
denominándolo juego. El fenómeno implica nuevas formas de sensibilidad y nuevas
concepciones de los cuerpos y sus relaciones transgrediendo las prescripciones cristianos
sobre el cuerpo y la sexualidad.

9
http://beatsoflife-mc.blogspot.com/2008/05/nix-luxe-complejo-theatron.html
10
http://www.facebook.com/home.php?#!/photo.php?fbid=432251979579&set=a.432251429579.207386.730689579
11
http://www.myspace.com/pedropuentes

17
Continuando con Esteban, en la segunda parte del texto El cuerpo en la sociedad
occidental, muestra en ellas un disciplinamiento general de los cuerpos que, dice la autora,
se ha mantenido en Occidente en los últimos dos siglos desde el juego del consumo y el
control, y se ilustran con respecto a áreas como la alimentación, el cuidado estético, el
ejercicio físico y la sexualidad, en este último sentido no se está muy de acuerdo, porque en
una sociedad tan cerrada, colonial y provincial como Popayán, es precisamente donde más
se transgreden esos disciplinamientos de los que habla Esteban (2004) como en las
transgresiones sexuales interpersonales, la puesta en escena de las parejas swingers no
implica ningún tipo de control, allí no existen disciplinamiento, sino puntos de fuga desde
el deseo, incluso son encuentros sexuales delicados en cuanto a los problemas colaterales
como las enfermedades ETS.

Así mismo es necesario recalcar como todas estas nuevas prácticas con el cuerpo, tienden
igualmente, a ser cooptados por redes de comercio, que se muestran a través de un perfil
bajo para no ser blanco de ataques, estas nuevas sexualidades son también parte de la
sociedad de consumo para simular que se está liberado, en cuanto a personas que se
asocian a estos consumos por pura afición y apariencia, por moda, de la cual seguramente
emigrarán al aparecer otras novedades.

Naturalmente, en el sentido del control corporal, este no es solamente panóptico en las


sociedades occidentales, como lo afirman Esteban, sino que se evidencia en un autocontrol
y un autocuidado, que Esteban (2004) no tiene en cuenta, en este sentido hay una filiación
interesante con los estudios americanos de Linda Hogle sobre el mejoramiento del cuerpo
desde una estética corporal del consumo. La autora reconoce efectos distintos para hombres
y mujeres, y las resistencias entre géneros, y en sostener que las relaciones entre cuerpo,
imagen corporal y género deben ser comprendidas con noveles lecturas. Particularmente en
líneas que dejo sólo mencionadas en esta investigación y que pueden constituirse en nichos
de investigación para quienes se interesan por las nuevas prácticas y nuevos cuerpos como
el BDSM, el matrimonio abierto, la poliandría , la promiscuidad, sexo grupal y el
nudismo, que no son materia de esta investigación y no se revelan en las fuentes
etnográficas.

En cuanto al autocuidado del cuerpo ubica a las modelos como ejemplo de la utilización de
una imagen corporal donde se actualizan elementos simbólicos y sociales de prestigio,
empoderados y legitimados en la cultura y que construyen modelos hegemónicos de
feminidad, para su emergencia en los ámbitos de la vida. Se trata de una estética del
consumo occidental femenino que las mujeres deberán implementar sobre sus cuerpos.
Contra lo cual se expresan las metaleras, las jóvenes emo y las punkeras anarquistas, como
la banda punk bogotana Las polas.

De otro lado, las estéticas anacrónicas son parte de la parafernalia y orden simbólico que
instauran las mismas bandas musicales, en cuanto al tipo de indumentaria que usan por
ejemplo, en el metal gótico con vestiduras anacrónicas para esta época como se puede
ilustrar con las cantantes que acompañan la agrupaciones de metal.

Lo femenino se expresa dentro de una imagen que incluye elementos tanto medievales en
los trajes como también mezclan vestuario de épocas romántica, la mujer como un sueño

18
perfecto romántico constituye una fuerza espiritual por sí misma, la musa ideal romántica y
ella como expresión total de la belleza y la verdad a la manera de un misticismo de corte
pagano si se pudiera afirmar. Muchas jóvenes en toda Colombia buscan esta imagen que
surge dentro del ideario del metal, pero también con mezclas folk del norte de Europa,
dama medieval o talvez princesa irresistible.

La anterior cantante de la agrupación Nigthwish. Tarja Turunem, reemplazada por Jane


Olsen, quien a través de su imagen y representación muesta un ideal femenino nórdico,
incluso que nos recuerda personajes tan caros de leyenda finlandesa, islandesa o alemana,
mujeres como las de la epopeya de Das nibelungen en apariencia fuertes e indestructibles
como las mismas líricas que cantan refiriéndose a la visceral fuerza de la lujuria como en la
lírica Angel, que muestra la fuerza erótica embrujadora y femenina. Cualquier parecido con
Brinhild o Krimild no es sólo coincidencia. Nuestra colaboradora Aleja teniendo como
referencia estas imágenes femeninas e históricas diseña y confecciona ropa para este tipo de
clientas que expresan un sentido gótico y neoromántico de sí mismas, quieren vestirse
como estas princesas, imitando la forma en que aparecen las cantantes de este grupo entre
otras.

19
12

Y desde otro consumo el metal gótico con la intérprete del grupo alemán Lacrimosa: duo
que en conjunto se convierte en un ícono, pero que expresan un ideal de belleza ario,
íntimamente ligado con un deseo de belleza del gótico que precisamente compone y
construye bellamente Tilo Wolf para su producto exquisito y exótico.

Esta forma de vestir es muy distinta a la moda occidental, especialmente a la de ropa de


marca y a la del consumo en su ideal de la top model, implica una visión de la mujer
completamente distinta, con esa ropa adquiere un halo místico medieval, son elementos
semióticos de tipo no sólo antiguos, sino incluso románticos que expresan cierto misticismo
en la puesta en escena de los Shows musicales, como en las propias letras y en la
vestimenta de las Fans de estos grupos. Igualmente pasa en la vida cotidiana en la
Universidad del Cauca con A. R. a quien ese halo del metal gótico, le hace ver muy
distinta, cuando porta ropa normal, digamos jeans y camisetas, es como si perdiera esa
aureola que por supuesto es una ilusión, una construcción de la imagen en coherencia al
consumo musical.

El sentido de estas observaciones anteriores es también el de una crítica a la antropología y


a la teoría feminista que relegaron la imagen corporal. En particular, Mary Luz Esteban
condena toda forma de sexualización del cuerpo femenino, muy frecuente en el feminismo,
contraponiendo los procesos de construcción de imagen y las prácticas concretas como
parte de la dimensión corporal de todo empoderamiento.

De manera crítica esta sexualización como un debilitamiento de la imagen de la mujer y así,


estamos de acuerdo con la concepción del género instaurado, no como determinismo
biológico, o ideología que excluye otro género, sino género como prácticas y modos de
representación de lo femenino como subjetividad productora de vida y no alienación:
construcción del propio cuerpo.

En la tercera parte del libro de referencia, Esteban (2004) resalta como en el mundo
occidental se están produciendo alteraciones en las prácticas y la categoría de identidades
de género por lo tanto, ésta es cuestionada. En este sentido, se discute la noción cerrada de
12
Foto tomada de la página oficial del grupo www.lacrimosa.com

20
género que ha defendido el feminismo radical, incluso la misma teoría de devenir en el
posestructuralismo deleuziano y guattariano, en la asunción de los sujetos de nuevas formas
de representarse.

El aporte fundamental de Esteban13 consiste en pensar la identidad de género como


identidad corporal, en su dimensión constructiva y en su potencialidad en el
empoderamiento de las mujeres todas. Esta visión de una voz particular en unidad con otras
voces implica un proceso de salida de la subalternización para prefigurar lo que llama la
autora una “emancipación” estos términos muy del feminismo implican, como hay una
tendencia generalizada a marcar utopías de recuperación del propio cuerpo femenino, pero
también del cuerpo masculino.

Ahora bien, la visión de la mujer sobre sí misma, es muy importante, en Popayán hay una
tendencia a construir un cuerpo en torno a las normas, a las pastorales y a los dogmas; pero
la pregunta es si realmente, esta ubicación es real, o si es parte de la mímesis de las
representaciones judeocristianas por el modo de transmisión postfigurativa, aprendizajes de
los padres y abuelos y sus tradiciones y culturas. O si realmente hay una vivencia real por
ejemplo, del catolicismo o del cristianismo en la vida de las mujeres, o si se trata de no
salirse de las reglas morales, para no ser juzgadas según los siguientes imaginarios que
existen en Popayán sobre las mujeres, en general surgen en la forma de referirse a las
mujeres, son representaciones sociales negativas, y corresponden a un discurso que las
degrada. En las formas cotidianas de referencias a los demás la palabra ajena en términos
de Bajtin, construye las alteridades y las representaciones de ciertos modos de hacer social,
especialmente de las mujeres, siempre desvirtuándolas y degradandolas, estas formas de
nombrarlas son muy comunes en la vida cotidiana. Estas representaciones son muy
comunes en Popayán.

Representación
Sentido sociolingüístico y cultural DESCRIPCIÓN
La Perdida, vagabunda: Joven de colegio, universitaria, generalmente le
gusta el rock, consume marihuana anda con
Es decir, su comportamiento deja metaleros o punkeros, disfruta de los
mucho que desear, se acuesta con conciertos, puede meter perico o coca buena,
cualquiera que le guste: generalmente cuando el círculo de amigos la consume, le
en proporción a su edad o mayores gusta viajar, su moda es rockera aunque
porque tienen dinero y les dan gusto, femenina. Puede moverse en ambientes de la
13
El trabajo de Esteban a nivel metodológico (2004) muestra como las entrevistas son una forma acertada de conocer la voz de las
mujeres, especialmente, aumentando el número de entrevistados y la variable de edad, género, estrato social. En cuanto al logro con
esta crítica y el proceso de reflexión sobre su propio "ser mujer" que hacen las entrevistadas, muestra como un ejercicio desde la
etnografía es clave porque muestra “diferencias” desde la creación de un contexto social que favorecen la reflexión y el apoyo de otras
mujeres en ese proceso, hagan de su "empoderamiento" individual, una contestación colectiva, con fuerte proyección social. Elementos
particulares (la pertenencia a la cultura vasca, los ejercicios de auto-etnografía en dos de los casos, ciertas vivencias corporales como la
hipocondría) mantienen a estos itinerarios en su particularidad. Este sería un buen ejemplo, para elaborar investigaciones acerca del
tema en cuanto, estas etnografías no existen para ciudades intermedias como Popayán y porque son muy importantes para hacer un
tipo de intervención sobre las posibilidades de transformación de los problemas de muchas mujeres en Popayán, como por ejemplo, en
los casos de violencia tanto contra niños, como adolescentes y mujeres tanto jóvenes como adultas.

21
pero las abandonan muy rápido. electrónica también, consume pepas y ácidos
de vez en cuando, especialmente cuando hay
dinero.
La Liberada: Universitaria, sus consumos son libros,
internet, cine arte, trabaja en grupos de
La intelectual que no cree en nada sólo investigación o da clases en colegios, le gusta
hace su deseo. la reuniones con amigas y amigos del colegio,
universitarias o egresadas de universidades
públicas o privadas, viaja mucho, tiene una
pareja estable, pero maneja un perfil bajo, no
muestra la pareja, rumbea en ambientes
crossover o en viejotecas en programa de solos
y solas, le gusta leer, está al día en noticias, ha
leído a las feministas, ama especialmente a
Simone de Bouvoir, Florence Thomas, a
Andrés Caicedo y su novela, rumbea con poca
frecuencia, su mayor consumo son las bebidas
alcohólicas, sino tiene dinero se dedica a leer o
a subir opiniones sobre su vida sentimental al
facebook. Quiere tener un noviazgo más no un
matrimonio, unión libre.
La prostituta: Mujeres jóvenes se venden especialmente en
los hoteles del Barrio Bolívar cerca a la plaza
Barata: vende su cuerpo generalmente del mismo nombre, entre los trece y veintiséis
por las necesidades básicas de años. Algunas aducen que no hay trabajo, en
sobrevivencia, no tiene estudio, su muy poco porcentaje se siente bien con ello, a
madre ha sido prostituta también. otras les gusta por la costumbre ejercer esta
actividad.
La prepago: Jóvenes de colegio y universitarias de todos los
estratos. Se mueve en ambientes de la rumba
Cuesta mucho dinero tener acceso a salsera, y en los after party que no son muy
ella, es muy bella. Vende su cuerpo al frecuentes en Popayán, en el consumo de la
mejor postor, saca ganancias, estudia, música electrónica. Y en ambientes privados va
porta la mejor ropa y tiene los a clubes. Busca traquetos o mafiosos.
aditamentos tecnológicos de última
moda celulares, Ipods, Blackberry
(para las citas) generalmente de marcas
chiveadas compradas en el Centro en
los locales comerciales de Popayán de
la sexta con sexta. En el detalle, ella es
la envidia de sus compañeras por la
ropa de marca y los objetos que porta,
generalmente de Colegio o de
Universidad.

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La juiciosa Generalmente son jóvenes con pocos amigos y
en un círculo de una iglesia o de un culto,
El control de los padres es total, las participan de los ministerios de alabanza y
leyes de la casa se cumplen o se adoración de las iglesias, son muy buenas
cumplen. estudiantes, cuando son de estratos tres, dos y
uno trabajan los fines de semana en
restaurantes, almacenes, ventas informales, o
en servicios de aseo hospitalarios o de
residencia. Hay madres solteras que deben
mantener a sus hijos, ellas trabajan pero no
dejan de estudiar especialmente, en colegios de
jornada nocturna o sabatina o por ciclos, en
estudios técnicos en el SENA o en Instituto
técnicos para ser auxiliares de enfermería, de
criminalística, de sistemas, secretarias, o cursos
de inglés: La marca común de estos cursos
técnicos es que son muy costosos, los realizan
jóvenes que no pueden ingresar por su bajo
puntaje a la Universidad del Cauca o porque no
tienen el valor de semestres que es costoso en
las Universidades privadas, hay diez de ellas
reconocidas hasta el momento.
La morronga Las mujeres manejan un perfil bajo.
Se muestra como una persona normal,
pero tiene sus deslices y constantes,
pero a nadie le cuenta y los esconde
muy bien.

Ahora existen una serie de preguntas que debemos responder y que pueden
constituirse en lugares de investigación en cuanto a una antropología de la juventud.
1. ¿Es necesaria una categoría de género o las prácticas de los jóvenes las hacen
obsoletas?
2. ¿Cómo son las representaciones de los jóvenes sobre ellos mismos en cuanto a
su propia corporeidad?
3. ¿Existe una pedagogía de la educación sexual o desde el género y cómo
funciona? ¿Cuál es la recepción de esta pedagogía o si ésta no existe y el
esquema es de transmisión de información sobre sexualidad, sin ahondar en los
problemas, efectos directos y colaterales de no asumir una educación sexual
adecuada en jóvenes, desde escenarios de formación como la escuela, el colegio,
o la Universidad?
4. ¿Cómo afianzarla o si es suficiente o no? porque cuando los jóvenes salen al
mundo cotidiano se encuentran con una realidad muy diferente, en las

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universidades, la orientación sexual se reduce a campañas de planificación para
publicitar productos como la capsula del día después, que se regala en sus
primeras dosis. Sin tener en cuenta las implicaciones sobre la salud, éticas, e
ideológicas de estos usos y productos, que se acogen fácilmente por la
población.
5. ¿Cómo educar para una verdadera, responsable, educación sexual, desde
estudios de género o desde estudios de una antropología del cuerpo o una
antropología de la juventud?
6. ¿Qué pasa cuando el deseo del ámbito privado, se presenta como práctica
cotidiana en lo público?

Por ejemplo el caso de Johan que al tener diez años, ahora tiene veinte, tuvo la
experiencia de saber de los labios de su madre, sobre la compañía homosexual de ella. Esta
confesión de aquello que pareció ser una confesión sincera, causó un trauma que aún no
supera Johan y que sirve de pasto para las discusiones y el odio por el abandono que sintió
la adolescente en esos momentos hasta la fecha. Esta actitud tan liberada de la madre
produjo un desafuero total de la adolescente al punto de quedar embarazada y tener su
primer hijo a los diez y seis años, con grandes problemas actuales, tanto por el embarazo
tardío, como su unión marital con el padre del niño, que entre otras cosas tiene grandes
problemas emocionales dentro de consumos en la cultura juvenil del punk, el ska, la
marihuana y las barras bravas del equipo azul bogotano. Un coctel muy variado y
explosivo.
Lo anterior, implica una discusión amplia que debe realizarse, tanto para una moral
cristiana occidental o una ética liberal, polos entre un abismo, tampoco esta investigación
puede dar salida a un caso tan complejo donde se mezclan fuertes emociones, elementos
libidinales, complejos o taras infantiles u adolescentes que subyacen en la pareja joven y un
sinnúmero de problemas tanto económicos, como sociales. Este caso no es muy diferente
con respecto al caso de los estratos medios y bajos de Medellín como lo pudimos ver en el
documental La sierra del año 2004, para siete jóvenes con una edad promedio de 17 y 20
años, tener un hijo del jefe de las autodefensas de La Sierra, ser la pareja de un joven con
esta reputación se mostraba como una ganancia, como si se adquiriera un halo de prestigio
al ser la pareja de un matón.
B I B L I O G R AF ÍA

BUTLER, Judith. El Género en disputa: el feminismo y la subversión de la identidad

CORTÉS Mónica Campos (2010) Las jóvenes de Popayán de 1965 a 1983. Monografía de
grado de Universidad del Cauca. Programa de Historia. Popayán

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ESTEBAN, Mari Luz (2004) Antropología del cuerpo. Género, itinerarios corporales,
identidad y cambio”. Ediciones Bellaterra, Barcelona, España.
HOGLE, Linda. (2005) Enhancement Technologies and the Body 14. Department of Medical
History and Bioethics and Department of Anthropology, University Wisconsin. The annual
Review of Anthropology. Realicé la traducción complete del artículo.
MARTINEZ, María Carmen. Introducción a la perspectiva de género. Documento de
trabajo. Instituto Estatal de Puebla, Agosto de 2004. PDF.

CIBERGRAFÍA

COLOMBIA DIVERSA. Informe mayo de 2010. P.D.C. Acceso 18 de octubre de 2010 a


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Juan Pablo II, "Meeting with the Bishops of the United States of America" ("Encuentro con
los Obispos de los Estados Unidos de America"), 5 de octubre 5 de 1979, número 6. 3.
Web: http://www.vidahumana.org/vidafam/iglesia/respuesta.html. Acceso 04 de Febrero de
2011.

14
The Annual Review of Anthropology.2005-

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