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INSTITUTO BÍBLICO BAUTISTA “IBARRA”

FACULTAD DE TEOLOGÍA

HOMILÉTICA

BACHILLERATO EN TEOLOGÍA

AUTOR: HENRY ISRAEL VARELA


DOCENTE: Pr. GALO TEJADA

IBARRA-ECUADOR
OCTUBRE 2019
SÍNTESIS
LIBRO: LA PREDICACIÓN JOHN MACARTHUR

EL REDESCUBRIMIENTO DE LA PREDICACIÓN EXPOSITIVA

Durante muchos años las iglesias evangélicas han venido realizando la tarea de la predicación, de
forma especial los predicadores, sin embargo, ha ocurrido un problema, y es que muchos
predicadores se han preocupado mas por la relevancia personal, por mostrar sus habilidades, por
enseñar experiencias, o temas morales en la iglesia y han dejado de lado la relevancia de las
escrituras. La palabra de Dios requiere de hombre fieles que prediquen la palabra de Dios con
fidelidad y que hablen no sus palabras sino las palabras de Dios mismo, las cuales únicamente las
podemos mirar y aprenden siendo fieles a la palabra de Dios. De igual manera es necesario
regresar o redescubrir la importancia de ser fieles expositores de la palabra de Dios, para
glorificar a Dios con lo que él nos ha llamado a hacer.

EL MANDATO DE LA INFALIBILIDAD BÍBLICA: LA PREDICACIÓN


EXPOSITIVA

La iglesia cristiana durante toda su vida ha hecho un énfasis muy especial en la infalibilidad de
las escrituras. En la actualidad se ha hecho un énfasis mas profundo en predicar de manera
expositiva, por razones de salud de la iglesia. Como sabemos Dios se ha comunicado fielmente
especialmente por su hijo y su palabra, que es el lugar donde se encuentra toda su voluntad para
el hombre, por lo cual es necesario un pro exegético adecuado, con el propósito de exponer
infaliblemente, la escritura infalible. Dios ha dado mandatos a su iglesia y uno de esos mandatos
es predicar la palabra, para esto se requiere un compromiso y responsabilidad del predicador para
estudiar la palabra fielmente para así exponerla de manera infalible.
El escritor del libro hace mención a un exégeta que dijo que no es un secreto que la iglesia de
Cristo hoy en día no está saludable en muchos lugares del mundo ya que ha sido alimentada con
basura, y cosas artificiales, menos de la palabra de Dios y la cura para este fenómeno es La
predicación expositiva.

LA HISTORIA DE LA PREDICACIÓN EXPOSITIVA

La predicación expositiva se centra desde el principio de la iglesia y aún mas desde el Antiguo
Testamento por medio de hombres que se dedicaron a exponer las escrituras. Esto dio resultados
profundos y maravillosos en cuanto a su ministerio, y mirando la manera como ellos exponían las
escrituras y la voz de Dios mismo, podemos ver que la hacían de manera expositiva, y por ende
podemos ver que la predicación es un ente esencial de la iglesia. Podemos ver hombres como el
Apóstol Pablo en 1 Cor 2:4 y la instrucción a su hijo en la fe Timoteo en 2 Tim 4:2. Podemos
mirar como Moisés reveló el encargo de Dios para Israel en Dt 31-33, en el cual Moisés presenta
este discurso con mucha habilidad y claridad, aún a pesar de que él mismo se había declarado
como tardo en habla y torpe en lengua. Así como vemos estos simples ejemplos podemos ver que
cada hombre de Dios declaró la voluntad de Dios y no eran palabras meramente humanas, que es
lo que la predicación expositiva busca.

LA PRIORIDAD DE LA ORACIÓN Y LA PREDICACIÓN EXPOSITIVA

Muchos en la actualidad han hecho énfasis en la predicación expositiva, pero de cierta manera
han dejado de lado la oración como elemento importante. La oración para la predicación es un
elemento crucial, si podemos decir el más importante. Un predicador que no tiene su tiempo de
oración es un predicador que no tiene gasolina. Si bien es cierto un predicador puede hacer un
trabajo de exégesis y hermenéutica muy profundo, pero si en medio de todo proceso de
preparación no está la oración no sirve de nada. El predicador necesita depender de la oración
todo el tiempo porque es Dios quien habla, no el predicador. Ahora esto no quiere decir que
solamente con oración podemos estar aptos para predicar, sino que todo va en congruencia. El
ejemplo mas grande sin duda es Jesús que tuvo una vida de oración todo el tiempo en su
ministerio y en cada palabra que salía de su boca, estaba antes su oración al Padre. Necesitamos
depende de la oración para que Dios sea manifestado con poder, y un aspecto clave del
predicador es orar por quienes van a escuchar el mensaje.

EL HOMBRE DE DIOS Y LA PREDICACIÓN EXPOSITIVA

Algo que es primordial en el predicador es su carácter. Es importante hacer un énfasis en el


carácter del expositor porque esta dando un mensaje de parte de Dios que muestra el carácter de
Dios y por ende es necesario que un expositor cada día trabaje para que su carácter sea conforme
al de Cristo. Los voceros de Dios frecuentemente son denominados mediante diferentes títulos
como por ejemplo profeta, anciano, evangelista y pastor sin embargo uno de ellos hace referencia
al carácter del hombre que sostiene uno de estos oficios. Este título es “Hombre de Dios” y
vemos en ejemplos de Antiguo testamento a Hombres como Moisés (Dt 33:1, Samuel (1Sam 9:6,
David (Neh 12:24,36 ) y Elías (2 R:8-9) quienes fueron llamados hombres de Dios y tiene que
ver con hombre que representaron a Dios al hablar su palabra. Por lo tanto, un Predicador debe
ser un hombre de Dios porque es quien representa a Dios al hablar su palabra y aquellos deben
cada día mejorar en su carácter como aquel de quien son portadores de su palabra.

EL ESPIRITU DE DIOS Y LA PREDICACIÓN EXPOSITIVA

Para un predicador es sin ninguna duda muy importante la dependencia del Espíritu Santo ya que
es imposible entender de manera clara y objetiva la palabra de Dios sin primeramente ser
iluminados por su Santo Espíritu. El Espíritu Santo nos ilumina para así poder comprender cual
es el mensaje de Dios para nosotros por medio de su Santa Palabra y así poder exponerlo de
manera fidedigna. El libro nos lleva a hacer una distinción entre la iluminación, revelación e
inspiración, pero voy a mencionar lo que en sí es la iluminación; “La iluminación no es lo mismo
que la revelación o inspiración. Ella no comunica ninguna nueva verdad divina, sino que nos
capacita para comprender la verdad de Dios en la revelación completa y al final en la escritura.
Sin la obra de iluminación no se puede alcanzar un entendimiento claro de la escritura con el fin
de predicar de manera poderosa.”

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