Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida, almacenada en un sistema de recuperación, o transmitida
de ninguna forma ni por ningún medio (ya sea electrónico, mecánico, fotocopia, grabación, o cualquier otro) sin el
permiso previo del editor, salvo lo dispuesto por las leyes de derecho de autor de Estados Unidos.
Adaptacion de las enseñanzas de Nancy Demoss de Wolgemuth por Mindy Kroesche y Leanna Shepard. Traducido
al español por el equipo de ANC.
A menos que se indique lo contrario, el texto bíblico se tomó de La Biblia de Las Américas. Derechos reservados
2000, 2001 por Crossway Biblias, una división de Good News Publishing. Utilizado con permiso.
1
Por cuanto muchos han tratado de
compilar una historia de las cosas que entre
Elisabet
nosotros son muy ciertas, 2 tal como nos las
han transmitido los que desde el principio
EN
DE JUAN EL BAUTISTA
5
Hubo en los días de Herodes, rey de
Judea, cierto sacerdote llamado Zacarías,
del grupo de Abías, que tenía por mujer
una de las hijas de Aarón que se llamaba
Elisabet.
2
6
Ambos eran justos delante de Dios, y se al Señor su Dios. 17 E irá delante de Él en
conducían intachablemente en todos los el espíritu y poder de Elías para hacer volver
mandamientos y preceptos del Señor. 7 No los corazones de los padres a los hijos, y a
tenían hijos, porque Elisabet era estéril, y los desobedientes a la actitud de los justos, a
ambos eran de edad avanzada. fin de preparar para el Señor un pueblo bien
8
Pero aconteció que mientras Zacarías dispuesto.
ejercía su ministerio sacerdotal delante de 18
Entonces Zacarías dijo al ángel: ¿Cómo
Dios según el orden indicado a su grupo, 9 podré saber esto? Porque yo soy anciano y mi
conforme a la costumbre del sacerdocio, fue mujer es de edad avanzada. 19 Respondiendo
escogido por sorteo para entrar al templo el ángel, le dijo: Yo soy Gabriel, que estoy
del Señor y quemar incienso. 10 Y toda la en la presencia de Dios, y he sido enviado
multitud del pueblo estaba fuera orando para hablarte y anunciarte estas buenas
a la hora de la ofrenda de incienso. 11 Y se nuevas. 20 Y he aquí, te quedarás mudo, y no
le apareció un ángel del Señor, de pie, a la podrás hablar hasta el día en que todo esto
derecha del altar del incienso. 12 Al verlo, acontezca, por cuanto no creíste mis palabras,
Zacarías se turbó, y el temor se apoderó de él. las cuales se cumplirán a su debido tiempo.
13
Pero el ángel le dijo: No temas, Zacarías, 21
Y el pueblo estaba esperando a Zacarías,
porque tu petición ha sido oída, y tu mujer y se extrañaba de su tardanza en el templo.
Elisabet te dará a luz un hijo, y lo llamarás 22
Pero cuando salió, no podía hablarles, y se
Juan. 14 Y tendrás gozo y alegría, y muchos se dieron cuenta de que había visto una visión
regocijarán por su nacimiento. 15 Porque él en el templo; y él les hablaba por señas, y
será grande delante del Señor; no beberá ni permanecía mudo.23 Y cuando se cumplieron
vino ni licor, y será lleno del Espíritu Santo los días de su servicio sacerdotal, regresó a su
aun desde el vientre de su madre. 16 Y él casa. 24 Y después de estos días, Elisabet su
hará volver a muchos de los hijos de Israel mujer concibió, y se recluyó por cinco meses,
3
diciendo: 25 Así ha obrado el Señor conmigo el ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá
en los días en que se dignó mirarme para sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá
quitar mi afrenta entre los hombres. con su sombra; por eso el santo Niño que
nacerá será llamado Hijo de Dios. 36 Y he
ANUNCIO DEL NACIMIENTO aquí, tu parienta Elisabet en su vejez también
DE JESÚS
ha concebido un hijo; y este es el sexto mes
26
Y al sexto mes, el ángel Gabriel fue
para ella, la que llamaban estéril. 37 Porque
enviado por Dios a una ciudad de Galilea
ninguna cosa será imposible para Dios.
llamada Nazaret, 27 a una virgen desposada 38
Entonces María dijo: He aquí la sierva
con un hombre que se llamaba José, de los
del Señor; hágase conmigo conforme a tu
descendientes de David; y el nombre de la
palabra. Y el ángel se fue de su presencia.
virgen era María. 28 Y entrando el ángel, le
dijo: ¡Salve, muy favorecida! El Señor está
MARÍA VISITA A ELISABET.
contigo; bendita eres tú entre las mujeres. 29
En esos días María se levantó y fue
39
5
guardaban en su corazón, diciendo: ¿Qué, padre Abraham: 74 concedernos que,
pues, llegará a ser este niño? Porque la mano librados de la mano de nuestros enemigos,
del Señor ciertamente estaba con él. le sirvamos sin temor 75 en santidad y
justicia delante de Él, todos nuestros días.
PROFECÍA DE ZACARÍAS 76
Y tú, niño, serás llamado profeta del
67
Y su padre Zacarías fue lleno del Espíritu Altísimo; porque irás delante del Señor
Santo, y profetizó diciendo: para preparar sus caminos; 77 para dar a su
68
Bendito sea el Señor, Dios de Israel, pueblo el conocimiento de la salvación por el
porque nos ha visitado y ha efectuado perdón de sus pecados, 78 por la entrañable
redención para su pueblo, 69 y nos ha misericordia de nuestro Dios, con que la
levantado un cuerno de salvación en la casa Aurora nos visitará desde lo alto, 79 para
de David su siervo, 70 tal como lo anunció dar luz a los que habitan en tinieblas y en
por boca de sus santos profetas desde los sombra de muerte, para guiar nuestros pies
tiempos antiguos, salvación de nuestros
71
en el camino de paz.
enemigos y de la mano de todos los que 80
Y el niño crecía y se fortalecía en espíritu;
nos aborrecen; 72 para mostrar misericordia y vivió en lugares desiertos hasta el día en
a nuestros padres, y para recordar su santo que apareció en público a Israel.
pacto, 73
el juramento que hizo a nuestro
6
INTRODUCCIÓN
Muchas de las cartas y correos electrónicos que recibimos en
Aviva Nuestros Corazones, provienen de mujeres que están
enfrentando alguna desilusión en sus vidas. Desilusiones tales
como:
ESTUDIO
• Estar en un matrimonio con un hombre que no sigue al
Señor.
• No tener hijos.
• Ser padres de un niño difícil.
• Tener un hijo adulto que no está en los caminos del Señor.
• No tener una carrera profesional exitosa.
• Enfrentar un diagnóstico médico no alentador.
ESTE
La lista de las potenciales desilusiones es larga. Tú misma pu-
dieras tener tu propia lista de desilusiones. Las pregunta es:
¿Cómo manejas o enfrentas las desilusiones con gracia? ¿Cómo
continúas confiando en el Señor cuando tus deseos o anhelos
USAR
siguen sin ser respondidos o satisfechos?
7
quienes también enfrentaron desilusiones. Quizás puedas identificarte con algunos
de ellos. Analizaremos ejemplos, pidiéndole al Señor que nos enseñe la verdad que
aplica a nuestras vidas.
• ¿Qué me enseña este pasaje acerca del corazón, las formas y el carácter de
Dios?
• ¿De qué manera apunta este pasaje a Jesús y al evangelio?
• ¿Hay un ejemplo que debo seguir o evitar? De ser así, ¿qué cambios debo hacer
en respuesta a ello?
8
Para ayudarte a sacar el mayor provecho a este estudio, también hemos incluido pre-
guntas de discusión grupales al final de cada sección. Puedes unirte a la discusión con
nuestro grupo de amigas a través de los videos de Elisabet creados para este estudio,
los cuales puedes encontrar en nuestro canal de YouTube.
UN EJEMPLO PRÁCTICO
La historia de Elisabet, aunque breve, proporciona una excelente perspectiva de cómo
hacer frente a la desilusión de una manera que honra al Señor. A través de años de
La historia de Elisabet, aunque breve, proporciona una excelente perspectiva de cómo
hacer frente a la desilusión de una manera que honra al Señor. A través de años de
infertilidad, Elisabet maneja su deseo insatisfecho de tener un hijo con una confianza
y obediencia continuas al Señor. Es posible que su vida no haya resultado como ella
lo planeó, pero Dios le permitió jugar un papel fundamental en el desarrollo de su
historia redentora.
En el transcurso de las próximas seis semanas podrás encontrar formas prácticas de
poner la Palabra de Dios en acción. Oramos que puedas rendir tus propias desilu-
siones como un acto de alabanza a Cristo, quien es digno.
9
MEMORIZA L AS ESCRITURAS
10
Semana 1
RESUMEN
LIBRO DE
Pero la historia de Elisabet no siempre estuvo tan llena de alegrías. Su fe se forjó en el fuego de la
desilusión, y ella tiene mucho que enseñarnos acerca de enfrentar nuestros propios contratiempos con
esperanza y gracia.
Aunque cada palabra sobre Elisabet en las Escrituras está contenida en un solo capítulo, su
historia revela muchas ideas interesantes que pueden ayudarnos a caminar con Dios.
El versículo 5 nos describe el escenario de su vida: «Hubo en los días de Herodes, rey de Judea,
cierto sacerdote llamado Zacarías, del grupo de Abías, que tenía por mujer una de las hijas de
Aarón que se llamaba Elisabet.»
Detengámonos y profundicemos aquí por un momento. Se puede extraer oro de estas dos
oraciones.
¿Cuál era el nombre del esposo de Elisabet?
¿Cuál fue su vocación?
El pasaje nos dice que Zacarías era «del grupo de Abías». En 1 Crónicas 24: 7–19, aprendemos
que los levitas (sacerdotes) estaban organizados en veinticuatro divisiones o grupos. En términos
generales, esta rotación dio lugar a que los sacerdotes fueran convocados dos veces al año para
servir en el templo en Jerusalén.
Lee de nuevo. ¿De acuerdo con este verso, Elisabet es parte de cuál árbol genealógico?
De acuerdo con Éxodo 28:1, ¿cuál era el papel de Aarón y los miembros de su familia?
12
Elisabet era la hija de un ministro. Estaba casada con un ministro, y a medida que se desarrolla
su historia, veremos que se convirtió en la madre de un ministro.
¡Qué gran elogio! Si las características de tu propia familia pudieran registrarse en las Escrituras,
¿qué palabras se usarían? Escribe algunas en el espacio a continuación:
Elisabet viene de una familia de fe. Mientras había existido un templo, sus abuelos habían
estado sirviendo al Señor allí. Se casó con un hombre de fe y juntos sirvieron al Señor y a
su pueblo. Eran una pareja piadosa, justos delante del Señor. Tenían un estilo de vida de
obediencia.
Y sin embargo...
Un legado de fe, un matrimonio piadoso y una vida justa no protegieron a Elisabet de la
desilusión. El versículo 7 nos dice: «No tenían hijos, porque Elisabet era estéril, y ambos eran de
edad avanzada».
13
Dios hace llover sobre y los .
En otras palabras, todos recibimos bendiciones y desilusiones. Elisabet nos recuerda que aun
siendo justas necesitamos esperar en el Señor; aun siendo justas podemos pasar por sufrimiento.
Analiza los siguientes versículos. Aparea lo que cada uno expresa acerca de esperar.
L AMENTACIONES 3:25 Bueno es el Señor para los que en Él esperan.
Alma mía, espera en silencio solamente en Dios
ISAIAS 4 0 : 31
pero los que esperan en el Señor renovarán sus
paciencia.
Elisabet esperó años y años y años para tener un hijo propio. No sabemos su edad exacta, pero
sí sabemos que «ambos eran avanzados en años». En la superficie, parecería que brazos vacíos
serían la única recompensa para la espera de Elisabet.
Tal vez tu conozcas el tipo exacto de angustia que Elisabet sufrió. Has anhelado tener un hijo
durante años y te duele el corazón cuando lees los anhelos insatisfechos de Zacarías y Elisabet.
O tal vez conoces un tipo diferente de desilusión.
Reemplaza los detalles de la desilusión de Elisabet con los tuyos, rellenando los espacios en
blanco en el texto con los detalles de tu propia vida.
Pero (inserta tu nombre) no tenía (área del
deseo no satisfecho) debido a y .
14
Como seguidores de Cristo que persiguen una vida de rectitud, ? ¿qué promesas tenemos?
Busca los siguientes pasajes y escribe la promesa al lado de cada uno.
JOB 17: 9
SALMOS 5:12
PROVERBIOS 21:21
En el caso de Elisabet, su matriz era estéril, pero la esterilidad puede tomar muchas formas.
En la agricultura, la esterilidad significa «habitualmente fracasar en dar frutos». 2 Es como una
imagen de un manzano que tiene solo hojas, o semillas que se niegan a dar brotes. Esta es la
imagen de nuestras propias desilusiones.
•Tal vez has invertido mucho en una relación solo para verla marchitarse y morir.
•Tal vez has invertido innumerables horas en una idea o sueño, pero el crecimiento nunca
llega.
•Puede ser que te hayas desilusionado en ver en lo que se han convertido tus hijos. Antes
solían ser tus pequeños plantíos, pero ahora sus vidas parecen estar llenas de maleza.
•Tal vez hayas intentado todos los tratamientos y remedios para curar una dolencia, pero nin-
Enumera algunas áreas de tu vida en las que te sientes desanimada mientras esperas ver el «fru-
to» de tu inversión.
15
Si bien es cierto que hay mucho que no sabemos acerca de Elisabet, no vemos que deje de
obedecer a Dios. Vemos a una mujer que no está sirviendo a Dios por sus dádivas, sino que
está sirviendo a Dios solo porque Él es bueno. Ella estaba comprometida con obedecer a Dios,
incluso cuando sus anhelos no se cumplían.
Ella era justa y sabía cómo esperar de la manera correcta. ¿Se puede decir lo mismo de nosotras?
Vamos a hacer una pausa aquí por un momento. Las desilusiones que enfrentas hoy pueden
sentirse grandes o pequeñas. Es posible que hayas luchado con un anhelo insatisfecho durante
décadas o simplemente desde que te despertaste esta mañana. En cualquier caso, recuerda que
Dios está prestando atención. Él escucha tus anhelos. Toma esperanza en esto: los anhelos de
Elisabet no fueron insignificantes. Eran el lienzo que Dios usó para pintar una magnífica obra
maestra.
¿Qué verdad nos revela el Salmo 56:8 sobre la respuesta de Dios a nuestra angustia?
Dios nos invita a rendir nuestras preocupaciones, miedos, anhelos, y suspiros profundos. ¿Por
qué? Porque Él se preocupa por nosotras. ¿En qué área de tu vida te está agotando el obedecer?
Piensa en formas como puedes recordar de manera intencional esta verdad durante esta semana.
Escribe tus ideas a continuación.
16
Día 3: L A TIERRA DEL ANHELO
Las raíces de nuestras desilusiones son mucho más profundas que nuestra situación actual
o pasadas. Para entender mejor la angustia de Elisabet y la nuestra, hagamos una pausa y
recordemos a la primera mujer que experimentó la desilusión.
Lee Génesis 3. ¿Que desilusiones enfrentó Eva como resultado de la caída?
Las semillas de muchos de nuestros anhelos más profundos se plantaron en la caída. El pecado
fracturó nuestras relaciones para siempre, torció nuestros corazones y fracturó nuestra intimidad
con el Padre. El mismo suelo debajo de nuestros pies se corrompe por el pecado (Gn. 3:17).
Tú y yo siempre tendremos deseos no satisfechos de este lado del cielo. Vivir con rectitud no
significa que no enfrentaremos desilusiones. Si tuviéramos todos nuestros anhelos cumplidos
aquí en la tierra, no continuaríamos anhelando un lugar mejor, el hogar supremo de nuestro
corazón.
El teólogo y predicador Charles Spurgeon dice que «todo lo que nos lleva a orar es una
bendición».
¿Te recuerdan tus desilusiones la necesidad que tienes de Jesús? ¿Funcionan los contratiempos
como relojes de alarma, recordándote que ores? Si es así, considéralas como una bendición.
Durante sus años de infertilidad, ¿cuántas horas debió haber pasado Elisabet en oración? ¿Con
qué frecuencia la llevó esta lucha a sus rodillas en su desesperación por ver al Señor moverse?
Como pronto veremos, nada de eso se desperdició. El Señor estaba escuchando a Elisabet. Y Él
te está escuchando, también.
Los anhelos no son en sí mismos pecaminosos. Lo que es pecaminoso es exigir que se cumplan
ahora, o insistir en satisfacer esos anhelos legítimos de manera ilegítima.
17
Reflexionando sobre tus propias desilusiones, ¿cómo crees que pudo Elisabet haber respondido
pecaminosamente a su anhelo de tener un hijo?
¿Conoces a alguien que haya enfrentado la desilusión con una gracia extraordinaria? ¿Qué pue-
des aprender de su ejemplo?
Recita el Salmo 27:14 en voz alta como una oración, pidiéndole al Señor que te ayude a esperar
en Él.
Día 4: ÉL ES DIGNO
La obediencia a Dios no es un medio para hacer que Él haga nuestra voluntad. No obedecemos
a Dios para que Él nos haga la vida más fácil. Obedecemos a Dios porque Él es Dios, Él es
soberano, y Él es digno de nuestra obediencia.
Tómate un tiempo hoy para reflexionar sobre quién es Dios, usando los pasajes a continuación
como guía.
18
Dios, Colosenses 1:7 me dice que Tú eres
Con estas Escrituras en mente, escríbele una oración a Él, diciéndole que deseas obedecerle,
incluso cuando enfrentes desilusión.
• En la medida que nuestro estudio de Elisabet avanza, ¿es el deseo de tu corazón rendir tus
propias desilusiones como un acto de fe y alabanza a Cristo, quién es digno? Si es así, ¿puedes
compartir qué diferencia esperas que esta actitud cause en tu vida?
Como seguidoras de Cristo que buscan vivir vidas piadosas, ¿qué nos promete la Biblia en Job
17:9, Salmo 5:12 y Proverbios 21:21?
19
Se registra a Charles Spurgeon diciendo: «Cualquier cosa que nos lleve a orar es una bendición».
¿Cómo has visto que esta afirmación es cierta en tu propia vida?
• Describe formas ilegítimas en que una mujer pudiera tratar de cumplir sus anhelos de manera
pecaminosa:
Oren como grupo agradeciendo a Dios por el poder de su Palabra. Expresen las formas en que
desean crecer personalmente a partir del estudio de Elisabet.
20
MEMORIZA L AS ESCRITURAS
21
¿Qué
es el
Semana 2
EL PAN ORAMA COMPLETO
Evangelio?
En 1 Corintios 15:1-4,
Pablo describe los
latidos del corazón
Introducción
del evangelio en tres
pasos. Todas nos hemos visto ante la bifurcación en el camino; ese
momento entre la esperanza y la desesperación. Sucede cuando
1. Cristo murió por
nuestros pecados.
hemos estado caminando por el mismo camino durante mucho
2. Fue enterrado. tiempo, lo suficiente como para preguntarnos si nuestras
3. Resucitó al tercer circunstancias alguna vez cambiarán.
día.
Quizás se trate del camino hacia la sanidad física. . .
El evangelio es este:
Cristo murió por tus
Tal vez sea el camino hacia una relación restaurada. . .
pecados para que Tal vez sea el camino hacia la libertad financiera. . .
tu no tuvieras que O el éxito profesional...
morir. Él pagó la
O la victoria parental. . .
pena por tus pecados.
O la liberación de los patrones del pecado. . .
Él fue separado de su
Padre para que tú y
En el caso de Elisabet, era el camino a la maternidad. A medida
yo nunca tengamos
que estar separados
que se encontraba «avanzada en años» (Lucas 1:7) y todavía
del Padre. Pero ya estéril, el camino le debió parecer increíblemente largo. Algunas
no está muerto; de nosotras podemos ser obedientes y experimentar la desilusión
¡Servimos a un por cierto tiempo, pero luego la espera se hace larga. Hemos
Salvador resucitado!
obedecido, hemos obedecido y hemos obedecido a Dios, hemos
Estas verdades y
todo lo que fluye de esperado, hemos esperado y hemos esperado (y hemos esperado
ellas transformará un poco más), esperando verlo obrar.
radicalmente tu vida,
y nunca serás igual.
22
Escribe sobre un momento en el que te encontraste en la bifurcación entre la esperanza y la
desesperación. Al final, ¿elegiste confiar en el cuidado del Señor, o aceptaste el camino del
desaliento, la derrota y la duda?
Vuelve a visitar Lucas 1:7. ¿Qué otros anhelos no cumplidos podrían haber estado relacionados
con el deseo insatisfecho de Elisabet de tener un hijo? (Ejemplo: una familia que se pareciera a
la de todos los demás).
¿Cuál es tu mejor suposición con respecto a cuánto tiempo esperaron para ver a Dios cumplir
este deseo?
Elisabet y Zacarías llegaron a su primer aniversario de bodas sin hijos, seguramente esperando
que el año próximo trajese uno al hogar. Pero luego pasó el año siguiente, y el siguiente, y el
siguiente, y todavía nada… No había bebé en sus brazos.
¿Cómo sabemos que la esterilidad de Elisabet no fue un castigo del Señor? (Ver Lucas 1:6).
¿Te has preocupado alguna vez pensando que quizás tus anhelos insatisfechos sean una señal de
que Dios está disgustado contigo? Escribe acerca de esos temores:
Lee Juan 9:1–12. Mientras lees, anota las preguntas que hicieron los testigos presenciales de este
milagro en el espacio a continuación.
P :
P :
P :
P :
24
El milagro registrado en este pasaje ocurrió una generacion despues del embarazo de Elisabet, y
claramente se mantuvo el estigma de la vergüenza asociada a los anhelos no cumplidos. Segu-
ramente, este hombre quería ser curado. Tal vez había pasado muchas horas orando para que el
Señor eliminará la carga de la ceguera, y hasta este encuentro con Jesús, todavía no podía ver.
Para los discípulos ¿la ceguera era una señal de qué? (v.2)?
¿Crees que vivimos en una cultura que asume que las desilusiones son el resultado de un pecado
personal? Explica tu respuesta.
Jesús usa este encuentro para enseñar una profunda verdad. Lee el versículo 3 de nuevo.
¿Fue el pecado de sus padres que causó que su hijo quedara ciego?
25
De acuerdo con el versículo 7, ¿cuál es el significado de «Siloam», el nombre del estanque donde
el hombre ciego se lavó los ojos después de su encuentro con Jesús?
Este ciego fue puesto en libertad para ser enviado con un mensaje acerca de Jesús. Si avanzamos
unos pocos versos, lo encontramos ya predicando su primer sermón evangelístico.
Unos 1500 años antes de que John Newton escribiera las palabras de su famoso himno «Subli-
me gracia», este hombre ya lo estaba cantando. Él no podía responder todas las preguntas de los
líderes religiosos, pero sí pudo utilizar su sufrimiento para apuntarlos a Jesús.
Lee el versículo 34, ¿Cómo respondieron los líderes finalmente ante la experiencia de este hom-
bre?
Aunque su deseo más imperante (recibir la vista) se había cumplido, otros dolores permanecie-
ron. Continuó llevando un estigma (pecador) y un estatus (marginado). Él había llevado estas
etiquetas durante toda su vida, pero ahora había un propósito detrás de ellas porque apuntaban a
otros hacia Jesús.
26
Día 2: SU PRESENCIA DIARIA
Los sacerdotes solían trabajar en rotaciones y generalmente eran llamados a servir en el templo
por un periodo de una semana, dos veces al año.
De acuerdo el verso 9, ¿cómo fue elegido Zacarías para entrar el templo y quemar incienso?
Podría parecer que el grupo de Zacarías fue elegido por casualidad en este momento de la histo-
ria y que, echando suertes se ganó el turno para quemar incienso. Algunos sacerdotes nunca re-
cibieron tan alto honor como Zacarías recibió aquel día. Mirando hacia atrás, podemos ver que
no fue casualidad; fue el acto de un Dios soberano que está orquestando cada circunstancia en
este universo y en nuestras vidas (incluyendo nuestras desilusiones) para cumplir sus propósitos.
Lee Lucas 1: 8- 17. Debido a la providencia de Dios, ¿que experimentó Zacarías en el templo
ese día?
Busca los siguientes pasajes. ¿Que nos enseña cada uno de ellos acerca de la providencia de
Dios?
SALMOS 103:19
SALMOS 103:19
PROVERBIOS 16 : 9 , 33
27
PROVERBIOS 16 : 9 , 3 3
SALMOS 14 5 : 15 - 16
Aunque servir en el templo era sin lugar a dudas una tarea sagrada, Zacarías simplemente estaba
haciendo lo que Dios le pidió que hiciera, cumpliendo con sus responsabilidades como sacerdo-
te; y en el curso de cumplir con su deber, Dios lo encontró.
Ora a través del Salmo 34:4–8, pidiéndole al Señor que te encuentre a medida que avanzas en el
día.
28
Día 3: SIRVE MIENTRAS ESPERAS
De acuerdo a Job 26:14, ¿qué porción de las obras de Dios podemos ver?
¿Qué esperanza te da esto mientras piensas en aquellas áreas de desilusión o desánimo en las
cuales estas esperando ver a Dios moverse?
A pesar de que el niño que crecía en su vientre era motivo de celebración, Elisabet no permitió
que ella o el bebé fueran el centro de atención.
29
Como una mujer que ha servido al señor fielmente toda su vida, ella sabía que el Mesías iba
a venir. Ella estaba muy involucrada en las cosas de Dios, lo suficiente para reconocer que Él
estaba en camino.
Cuando enfrentas desilusiones, ¿cómo haces para mantenerte enfocada en conocer y servir al
Señor? Escribe tus respuestas aquí debajo:
Las circunstancias que rodeaban el nacimiento de Juan son tan notables que los que estaban allí
rápidamente pasaron de mera observación y temor a preguntarse «¿Qué, pues, llegará a ser este
niño?»
La respuesta la encontramos en Lucas 3. Él llegaría a ser portavoz del mensaje de Cristo, porque
sus padres esperaron tanto tiempo por él y sirvieron al señor tan fielmente, cuando Juan habló
a las personas, estaban listos para escucharle. Elisabet no supo nada de esto durante sus largos
años de espera por un hijo. Pero ella sí sabía que Dios era digno de su continua devoción.
Más allá de Lucas 1, no se vuelve a mencionar a Elisabet en la Biblia. ¿Qué pasó con ella? No lo
sabemos… y no es relevante. Su objetivo en la vida fue apuntar a las personas a Dios, para que
sus propósitos fueran cumplidos. Ella había cumplido su llamado al dar a luz a un hijo, el cual
30
fue devuelto a Dios. Su vida es un recordatorio para nosotras de que no es acerca de nosotras;
todo es acerca de Él. Esta ha sido la actitud del corazón de aquellos que Dios ha usado a lo largo
de la historia para dar a conocer a Jesús al mundo.
Todo lo que podemos ver es el momento presente. No podemos ver la imágen completa, el
cuadro completo. Dios es quien tiene el cuadro completo, un gran tapiz que Él ha estado tejien-
do. Este plan no era solo para la vida de Elisabet, su matrimonio o su familia, sino para toda la
nación de Israel y más allá, para todo el mundo, no solo para su época sino para toda la historia.
Dios tiene un plan de redención grandioso e increíble. Su plan es tomar a los pecadores caídos y
restaurarlos a una comunión con Él mismo. Lo hace a través de su Hijo, Jesús.
Debido a esto, nuestras desilusiones ilustran el evangelio. Al igual que el cuerpo de Cristo estuvo
sepultado por tres largos días antes de su resurrección, los anhelos y sueños que parecen morir y
estar enterrados están simplemente esperando que el Señor los levante.
Las desilusiones a las que te enfrentas no se tratan de ti, como tampoco lo fue la esterilidad de
Elisabet.
Se trata de Jesús.
Escribe aquí las palabras del apóstol Pablo que encontramos en Hechos 20:24
La Reina Valera Contemporánea pone las palabras de Pablo de la siguiente forma. « Pero eso a
mí no me preocupa…»
En el contexto, Pablo estaba diciendo «Voy a experimentar persecución en cada ciudad a la que
iré. Dios así me lo ha dicho». Pero él dijo, «Pero eso a mí no me preocupa, pues no considero mi
vida de mucho valor, con tal de que pueda terminar con gozo mi carrera y el ministerio que el
Señor Jesús me encomendó, de hablar del evangelio y de la gracia de Dios». (RVC)
31
¿Qué está Pablo diciendo? ¿«Persecución»? Yo no escogería eso, pero lo abrazo. ¿Por qué? Por-
que lo único que a mí me interesa es que el evangelio sea expandido y que Dios sea glorificado.
Todo lo que llega a nuestras vidas de una forma u otra, si somos hijas de Dios, es parte del plan
de Dios para dar a conocer a Jesús al mundo. ¡Si tan solo pudieramos ver eso! Ojalá que cuando
no podamos verlo, aún así pudiéramos confiar en ello. Dios tenía un plan, un propósito, para
la vida de Elisabet. Ella era un pedacito, una parte muy pequeña, de una imagen mucho más
grande.
¿Estás dispuesta a ver tus anhelos insatisfechos como una oportunidad para mostrar a Cristo? si
es así, ¡dilo!
Cuando tomamos la decisión de decir «sí», experimentamos contentamiento, aún ante una
gran desilusión. El contentamiento no es lo mismo que estar en un estado «zen» o negar las
desilusiones que han existido en nuestras vidas. Es llegar a la bifurcación entre la esperanza y la
desesperación y escoger la esperanza, confiando en que Dios está trabajando en redimir nuestro
sufrimiento para su gloria. Esta es la elección que nos libera y nos envia en nombre de Jesús.
Igual que el hombre ciego que recibió la vista y que Elisabet, que recibió su tan deseado hijo,
escoge usar tus circunstancias para apuntar al Salvador. No hay garantías de que Dios cumplirá
cada uno de tus deseos de este lado de la gloria, pero es posible apuntar al Salvador en cada una
de las desilusiones de tu vida.
Oh Señor, yo sé que tú sabes lo que estás haciendo. Yo no puedo explicarlo. No lo entiendo. Aunque
quisiera, desde mi finito punto de vista, que fuera diferente, en lo más profundo de mi corazón sé que no
cometes errores. Ayúdame a usar mis desilusiones como un canal para revelar el evangelio. Amén.
32
PREGUNTAS DE DISCUSIÓN PARA GRUPOS PEQUEÑ OS
•¿De qué formas específicas podemos animarnos unas a otras para elegir el camino correcto
•¿Encuentras algún paralelo con la forma como Jesús experimentó el rechazo del mundo al
•Mientras esperamos que la mano de Dios se mueva, ¿qué actitudes o acciones debemos
•Explica cómo la opción de decir «¡sí!»a los anhelos no cumplidos, como una manera de
•Si la meta de la vida de una mujer es señalar a las personas hacia Dios para que sus propósi-
33
MEMORIZA L AS ESCRITURAS
34
Semana 3
EL MEOLLO DEL ASUNTO
5 Maneras
Introducción de orar
A la mayoría de nosotras nos gusta arreglar las cosas. Vemos por otros
una rodilla raspada; la vendamos. La casa es un desorden; la
1. Ora para que
limpiamos.Nuestros hijos derraman algo; lo limpiamos bien.
tengan sabiduría (Ef
El cabello de nuestra amiga está fuera de lugar; lo cepillamos
1:18-20).
y lo acomodamos para ella. Utilizando la escala proporcional a
continuación, evalúa con qué frecuencia sientes la responsabilidad
2. Ora para que
de «arreglar» las circunstancias que te rodean.
comprendan el
1 2 3 4 5 6 7 8 9 1 0 3:16–19).
Circula las palabras a continuación que describen la respuesta de Zacarías en el versículo 18.
EMOCIONADO
ESCÉPTICO
FELIZ
ANSIOSO
INSEGURO
INCRÉDULO
SEGURO
TÍMIDO
VEHEMENTE Y DISPUESTO
Zacarías estaba en el templo del Señor, cara a cara con un ángel, escuchando las palabras que
había anhelado escuchar y, sin embargo, su falta fue dudar.
¿Puedes pensar en algún momento en tu propia vida en que Dios se movió poderosamente y,
sin embargo, luchaste por abrazar o ver su mano?
36
Tal vez ves a alguien que amas en la historia de Zacarías. Es obvio que Dios está trabajando y,
sin embargo, parece que no lo ven ni le responden. Escribe cualquier ejemplo que te venga a la
mente.
Llena los espacios en blanco con la respuesta de Gabriel que se encuentra en el versículo 19.
«Respondiendo el ángel, le dijo: ______ soy _____, que _____ en la ______ de ______, y he
sido ______ para ______ y ______ estas _______ _________.»
En esencia, Gabriel está diciendo: «¡No importa realmente quién eres! Yo s oy Gabriel, y estoy
en la presencia de Dios. Punto. Eso es realmente todo lo que necesitas saber. Me enviaron a
hablar contigo y te traigo estas buenas nuevas».
Las experiencias y dudas de Zacarías no importaban. ¡Dios estaba obrando! Dios era en última
instancia soberano sobre la esterilidad de Elisabet y Zacarías, y Dios es en última instancia
soberano en nuestras propias vidas.
¿Qué enseñan cada uno de los siguientes pasajes acerca de la soberanía de Dios?
SALMO 115 : 3
ISAÍAS 45:7
DANIEL 4:35
Recuerda que Zacarías y Elisabet fueron fieles en su compromiso con el Señor y, sin embargo,
Zacarías tuvo un lapso temporal en la confianza y expresó su duda de que Dios pudiera cumplir
su promesa. De la misma manera, nuestras cabezas pueden saber que Dios es soberano y
nuestros corazones aún pueden dudar de que Él tiene autoridad sobre los muchos desafíos que
enfrentamos.
37
Escribe una oración al Señor, expresando tu gratitud de que Él tiene el control y confesando
áreas de duda o temor.
Mientras Zacarías servía en el templo, encontrándose con un ángel, enterándose de que sería
padre y quedándose en silencio por su desobediencia. . . imagina a Elisabet. Ella está sentada en
su casa, esperando que su esposo termine su período de servicio sacerdotal.
¿Cuáles son algunas maneras en que Elisabet podría haber tratado de «arreglar» o controlar la
situación?
38
Las Escrituras no registran la respuesta exacta de Elisabet, pero según lo que sabemos sobre el
carácter de Elisabet y el resto de su historia, ¿cuál supones que fue la respuesta de Elisabet ante
la condición de Zacarías y sus noticias?
No sabemos lo que pensó Elisabet; no sabemos lo que ella dijo. Pero de acuerdo a este texto
parecería que ella dejó que Dios fuera Dios, no solo en su propia vida sino en el trato de Dios
con su esposo.
¿A quién conoces que está enfrentando desilusión en este momento? ¿Cómo te sientes tentada
a «arreglar» o tomar el control de la situación?
Hay cosas que Dios hará o permitirá que ocurran en la vida de tu esposo, en las vidas de tus
padres, en las vidas de tus hijos, en las vidas de tus hermanos y en otras personas, que tú conoces
y amas que no puedes entender o explicar. Ahí es donde tenemos que volver a este principio
básico de que Dios es Dios, y nosotras no lo somos. Elegimos confiar en que Él hará su
voluntad en la vida de aquellos a quienes amamos.
Registra la respuesta de Job al Señor que se encuentra en Job 40:4–5. Compara las palabras de
Job con las del salmista que se encuentra en el Salmo 46:10.
JOB 40:4–5
SALMO 46:10
39
Zacarías fue silenciado por un ángel, pero tal vez Elisabet eligió el silencio como una expresión
de su confianza en que Dios tenía el control de su vida y la de su esposo.
Escribe cualquier área en la que luchas por simplemente dejar que Dios sea Dios en tu vida o en
la vida de alguien que amas.
Cuando su esposo regresó mudo de un viaje ministerial con la noticia de que iban a ser padres,
Elisabet había estado caminando en los mandatos y la ordenanza de Dios toda la vida.
Una vida de obediencia a Dios cuando no es tan difícil es la mejor preparación para una vida
de obediencia cuando llegan los verdaderos desafíos. No pienses que puedes vivir a tu manera,
y luego, cuando lleguen las grandes pruebas, de repente tener un corazón para obedecer a Dios.
No funciona así. La obediencia diaria desarrolla los músculos necesarios para cuando las cosas se
ponen difíciles.
Aunque el registro de la vida de Elisabet es breve, está cargado de «sí». A un lado de cada
versículo, escribe a lo que Elisabet dijo «sí».
LUCAS 1:5
LUCAS 1:6
LUCAS 1:24
40
LUCAS 1:40-44
LUCAS 1:45
LUCAS 1:56
LUCAS 1 : 6 0 – 61
Ya fuera casarse con un sacerdote, abrazar la maternidad o elegir el nombre de su hijo, Elisabet
hizo un hábito de decir «sí» al Señor. Al hacerlo, ella creó un legado que sería seguido por su
hijo, Juan.
Lee los siguientes pasajes, luego anota tu respuesta, responde estas dos preguntas. ¿A qué le dijo
Juan «sí»? ¿Qué desilusiones probablemente enfrentó como resultado?
MATEO 3:1–6
MATEO 11 : 1 - 6
MARCOS 6 : 17 – 2 0
Debido a que Elisabet dijo «sí» a Dios, incluso ante la desilusión, ella le enseñó a su hijo a hacer
lo mismo. Incluso cuando significó encarcelamiento y ejecución, Juan fue obediente al Señor,
viviendo el legado de sus padres de devoción firme al Señor.
41
Considera tu propia respuesta ante la desilusión. ¿Qué mensaje estás enviando sobre quién es
Dios con tus acciones y reacciones cuando la vida es difícil y la obediencia es costosa?
Escribe el Salmo 86:11 como una oración, pidiéndole al Señor que te enseñe a obedecerlo
diariamente para que puedas transmitir un legado de «sí».
A medida que la historia de Elisabet continúa desarrollándose, encontramos que en el sexto mes
de su embarazo, el mismo ángel que visitó a Zacarías visita a una virgen llamada María. Parece
que los anuncios dramáticos de nacimiento son la especialidad de Gabriel, porque esta vez él da
la noticia de que María será la madre de Jesús.
Hagamos los cálculos. Elisabet tenía seis meses de embarazo cuando María llegó, con el
Salvador recién en su vientre. María se quedó durante tres meses, lo que significa que hizo las
maletas y se dirigió a casa justo después de la llegada del hijo de Elisabet, o tal vez se quedó para
el nacimiento de Juan.
Dos mujeres:
•Una en el último trimestre del embarazo, una justo comenzando a experimentar náuseas
matutinas.
Y, sin embargo, ambas mujeres experimentaron tanto la desilusión como el favor inmerecido del
Señor.
¿De qué crees que hablaban Elisabet y María durante sus tres meses juntas?
De acuerdo con 2 Corintios 1:3–5, ¿cuál es una de las razones por las que Cristo nos consuela?
(Ten en mente este pasaje. Lo revisaremos la próxima semana).
43
Al enfrentarte a las desilusiones, tienes una opción. Puedes enfrentar los desafíos pateando y
gritando, cuestionando la soberanía y la bondad de Dios, o puedes dejar que Dios sea Dios y
decir «sí» a su obra en tu vida. Ambas elecciones tienen un impacto. Cuando elegimos responder
como Elisabet, nos convertimos en un canal de bendición para los otros que nos rodean.
¿Ha servido alguien de ejemplo para ti al decir «Sí, Señor» con su vida y testimonio? Considera
escribirle una carta, agradeciéndole su obediencia y explicándole su impacto en tu vida.
•Ponte en las sandalias de Elisabet. Describe el rango de emociones que podrías sentir
después de escuchar la noticia de que finalmente tendrás el bebé que has anhelado. ¿De qué
forma podría Elisabet confiar en Dios en esta nueva temporada de su vida?
•En un momento u otro, todas hemos luchado con la duda. ¿Cuál fue el resultado de la duda
de Zacarías en el versículo 20? ¿De qué manera impacta negativamente nuestra relación con
Dios cuando dudamos de Sus promesas y soberanía?
•¿Qué aprendiste acerca de la soberanía de Dios en Proverbios 16:9, Isaías 45:7 y Daniel
4:35 (Día 1)? ¿Cómo se verá afectada nuestra vida diaria cuando vivamos con la confianza de
que Dios está en control y no hay nada que temer?
•¿Qué te ha enseñado la lección de esta semana acerca de entregar tus impulsos para «arre-
glar» a las personas y las circunstancias en lugar de dejar que Dios sea Dios (Día 2)?
•¿A quién conoces que haya caminado con el Señor por décadas? ¿Cómo ha sido su vida un
•Reúnete para orar por las personas que amas usando los cinco motivos de oración en la
44
MEMORIZA L AS ESCRITURAS
45
Semana 4
ESPERANZA PARA UN MUNDO
DESILUSIONADO
Introducción
¿Cómo Las gradas estaban llenas. Las cámaras estaban rodando. El
Describe jinete estaba listo. Pero la desilusión, no la celebración, en
última instancia, se convirtió en el estado de ánimo del día.
la Biblia Silver Charm estaba preparado para ganar en grande. El
el Mundo? campeón estadounidense de caballos de carrera de pura raza
estaba listo para apoderarse de la elusiva Corona Triple, un
•Lleno de problemas
premio otorgado a solo trece caballos en los últimos 100 años.3
(JUAN 16:33)
Ya había ganado el Derby de Kentucky y el Preakness Stakes.
•Temporal Simplemente necesitaba cruzar la meta final primero en
(1 JUAN 2:17)
Belmont Stakes para pasar a la historia como un ganador de la
Triple Corona, un campeón entre los campeones.
•En guerra Pero no iba a ser posible:
(2 COR. 10: 3)
Silver Charm fue superado por Touch Gold por menos de
•Amado
una zancada. Mientras el jinete del caballo, Gary Stevens, se
(JUAN 3: 16–17)
desmontaba, dijo: «Si alguien alguna vez tenía alguna duda
sobre lo difícil que es ganar la Triple Corona. . . », mientras
se apagaba su voz sin decir más. 4 Más de una década
después, todavía podemos sentir su desilusión. Estaba lo
suficientemente cerca de la victoria para saborearla, y sin
embargo no lo suficientemente cerca como para darle una
mordida.
46
Si pensamos en la desilusión como una enfermedad infecciosa, la esperanza es el antídoto.
Elisabet nos enseña cómo aferrarnos a la verdadera esperanza frente a la desilusión y cómo ser
una embajadora de esperanza en un mundo desilusionado.
Escribe Romanos 5:5 a continuación. ¿Qué nos enseña este versículo acerca de la fuente de
nuestra verdadera esperanza?
La Escritura solo registra a Elisabet hablando en tres lugares. Registra sus palabras exactas
debajo de cada referencia de las Escrituras a continuación.
LUCAS 1:25
LUCAS 1:42-45
LUCAS 1:60
47
Basada en estas breves interacciones, ¿cómo describirías el rostro de Elisabet? Circula todo lo
que corresponda.
OPTIMISTA AMARGADA
ALEGRE DEMANDANTE
ESTABLE FELIZ
GRACIOSA CRÍTICA
PRÁCTICA FIEL
Aparte del momento en que ella anunció el nombre de su bebé de manera bastante casual (v.
60), las únicas veces que vemos a Elisabet hablar, ella habla de Dios.
Y mientras esperaba que su esposo pudiera hablar nuevamente por sí mismo, ella habló en su
nombre: «No; sino que se llamará Juan» (v. 60). Incluso en la declaración del nombre de su hijo,
ella estaba siendo obediente a Dios, aceptando darle el nombre que el ángel le había dicho a su
esposo.
Estas no son las palabras de una mujer amargada, aunque había enfrentado la desilusión de la
infertilidad durante décadas.
Estas no son las palabras de una mujer enojada, a pesar de que su esposo había quedado mudo
como resultado de su incredulidad.
Estas no son las palabras de una mujer débil. Ella escuchó al Señor y obedeció, a pesar de los
murmullos de la multitud.
48
Estas son las palabras de una mujer anclada en la esperanza.
Define la palabra «esperanza» en el espacio provisto.
Piensa en la esperanza como una perla producida dentro de la concha de una almeja. Para que
la perla se desarrolle, debe haber un irritante. Las perlas naturales se forman cuando un objeto
extraño, como la arena, el polvo o un parásito, se abre paso más allá de la dura defensa exterior
de la almeja. Como un medio para protegerse a sí misma, la almeja recubre el irritante en capas
de líquido hasta que se forma una hermosa perla.
Tenemos todas las razones para pensar que Elisabet se aferró a la esperanza de que Dios obraría
en cada angustia. ¿Seguiremos su ejemplo aferrándonos a la esperanza mientras enfrentamos
nuestras propias desilusiones?
En Romanos 5, Pablo alienta a los creyentes a «gloriarse en la esperanza de la gloria de Dios» (v.
2). Pero él no se detiene allí. Según el versículo 3, ¿en qué nos pide Pablo que nos regocijemos?
Pablo continúa describiendo una progresión en los versículos 3–5. Regístralo llenando los
espacios en blanco a continuación.
Elisabet fue una mujer con carácter, pero ese carácter no fue producto de la casualidad, fue
forjado en el fuego de la desilusión. Sus años de larga espera por ver al Señor trabajar le
enseñaron a como debía esperar.
49
¿Pudieras mirar atrás en tu propia vida e identificar cualquier desilusión que te haya enseñado a
encontrar tu esperanza en el Señor? Escribe sobre esa experiencia a continuación:
¿Nos dicen las Escrituras algo acerca de si Elisabet y Zacarías oraron por sus desiluciones?
(Pista, revisa Lucas 1:13)
Nosotros no sabemos por cuánto tiempo ellos estuvieron orando, pero da la impresión de que
probablemente fueron muchos años. Ellos clamaron a Dios « Señor, bendícenos con un hijo».
Conocemos el final de la historia, pero Elisabet no tenía forma de saber cómo las cosas iban a
terminar. ¿No es así como ocurre cuando tenemos anhelos insatisfechos? Oramos. Obedecemos
a Dios dentro de nuestras posibilidades, hacemos lo mejor que podemos, y nos vemos
estancados en esta situación, en medio del dolor o la desilusión.
Elisabet y Zacarías pasaron años orando; sembrando oraciones y regándolas con lágrimas.
Muchas lágrimas. Sin embargo, por largo tiempo no vieron crecimiento. Mientras oramos por
tiempos prolongados para que el Señor escuche nuestras oraciones, ¿cómo podemos mantener
la esperanza de que nos responderá?
50
En Mateo 6:9–13, Jesús nos da un modelo de cómo orar. Escribe esta oración familiar en el
espacio provisto a continuación.
Junto a los versículos 9-10, escribe esta parte de la oración de Jesús en tus propias palabras.
Mateo 6:9-10
9
Cuando Jesús se fue de allí,
vio a un hombre llamado
Mateo, sentado en la oficina
de los tributos, y le dijo:
¡Sígueme! Y levantándose,
le siguió. 10 Y sucedió que
estando Él sentado a la mesa
en la casa, he aquí, muchos
recaudadores de impuestos
y pecadores llegaron y se
sentaron a la mesa con Jesús
y sus discípulos.
Antes de orar por cualquier otra cosa, no importa lo urgente que sea, no importa en medio de
qué tipo de crisis estemos, Jesús nos enseñó a orar para que el nombre de Dios sea glorificado.
Su nombre representa todo lo que Él es. Queremos orar para que el reino de Dios venga y se
haga su voluntad.
51
Mientras oramos por las áreas de desilusión y anhelos, Jesús nos anima a hacerlo en el contexto
de querer que Dios sea glorificado, mientras su reino y su gobierno se afirma en este mundo. Es
querer que se haga la voluntad de Dios.
•¿Por qué oras por esa persona que acaba de recibir un diagnóstico terminal?
Al igual que la oración de Elisabet y Zacarías por un hijo, estas son peticiones apropiadas para
llevar delante del Señor. Pero la pregunta es ¿por qué? ¿Cuál es nuestra prioridad y qué es lo que
nos importa? ¿Nos impulsa a orar por estas cosas el amor por el nombre de Dios, su gloria, su
reino y su voluntad, o estamos pidiendo por nuestro bienestar personal, satisfacción y felicidad?
Es una cuestión de prioridad y orden.
Dios respondió a la oración de Elisabet por un hijo con un «sí», pero lo más importante, Él
respondió a su deseo de usar su vida para glorificar su nombre.
En retrospectiva, podemos ver lo que Elisabet ya debía haber sabido: su historia no se trataba
sobre ella. Dios utilizó todos esos años de desilusión y espera. Él usó el ejemplo de Elisabet de
andar «intachablemente en todos los mandamientos y preceptos del Señor» (Lucas 1: 6). Él
utilizó la incredulidad de su marido. Lo usó todo para escribir una historia milagrosa sobre su
poder y gloria. Él desea hacer lo mismo en nuestras vidas.
52
De acuerdo con Romanos 1:7, ¿a quién escribió Pablo estas palabras?
Pablo estaba escribiendo a los seguidores de Cristo en este versículo, informando la trágica
noticia de que el nombre de Dios estaba siendo tergiversado debido a ellos. ¡Uf! ¿Hasta qué
punto somos responsables, como creyentes, de que el mundo tenga una visión pobre de Dios
porque no santificamos su nombre y no deseamos su gloria sino nuestra propia comodidad?
En contraste, ¿qué impresión tuvieron los demás como resultado de la fe de Elisabet? (Ve Lucas
1:66.)
Escribe una oración a continuación, pidiéndole al Señor que te ayude a perseguir su gloria ante
la desilusión.
Cuando las desilusiones siguen llegando, ¿por qué debemos seguir orando? La Escritura
responde a esa pregunta con las hermosas promesas de Dios. La lección de hoy está basada en la
Escritura. Toma tiempo para leer estos pasajes lentamente, enfocándote intencionalmente en la
promesa que Dios ofrece en cada uno.
53
Esperanza para desilusiones relacionales
Juan 16:33
Salmo 34:18
Apocalipsis 21:14
La desilusión entró en el mundo mucho antes de que Elisabet tuviera que enfrentar sus anhelos
insatisfechos de tener un hijo, y existe entre nosotros mucho después de que su historia se
registrará en el libro de Lucas.
¿Fue Eva motivada a pecar por un anhelo insatisfecho? Si es así, ¿cuál era?
54
Cuando Eva tomó el primer bocado de ese fruto, realmente creo que no se detuvo a pensar en
las consecuencias, las consecuencias en su propia vida, en su matrimonio, en sus hijos, sus nietos,
sus bisnietos y sus tataranietos. En las mujeres y los hombres, en el matrimonio y la cultura, en
la historia y toda la vida para siempre. Ella no se detuvo a pensar y contar el costo. Un costo que,
entre otras cosas, significaría vivir en un mundo desilusionante.
De acuerdo con Romanos 5:12, ¿qué consecuencia primaria entró al mundo como resultado del
pecado?
El pecado de Adán y Eva tomó la creacion perfecta de Dios y la rompió hasta lo más profundo.
Nuestros corazones están rotos, plagados de pecado. Nuestras relaciones están rotas, infectadas
con orgullo y egoísmo. Nuestro planeta está roto, gimiendo bajo el peso del pecado y la muerte.
Y como resultado, cada uno de nosotros debe lidiar con el profundo anhelo de la redención.
55
Vuelve a visitar las palabras de Elisabet registradas en Lucas 1:41–45.
Elisabet fue la primera persona en declarar a Jesús como el Salvador tan esperado. María
accedió a obedecer al Señor, pero Elisabet fue la primera en decir que Jesús era el Señor. Al
hacerlo, Elisabet se convirtió en la primera embajadora de esperanza.
¿Cómo nos llaman las Escrituras a cada una de nosotras en 2 Corintios 5:20?
Como seguidoras de Cristo, somos embajadoras de esperanza. Sabemos que Cristo es soberano
sobre todo anhelo insatisfecho y que solo Él puede redimir todas las desilusiones causadas por el
pecado y el quebrantamiento. Completa la siguiente declaración como una forma de aceptar la
comisión de Cristo para estar lista para hablar sobre la esperanza que tienes en Él.
56
PREGUNTAS DE DISCUSIÓN PARA GRUPOS PEQUEÑ OS
•¿Cuál es la fuente de verdadera esperanza de un cristiano? ¿A qué otras fuentes acuden las
5:2-5)? ¿Qué significa para ti que nuestro sufrimiento tiene un propósito final para producir
perseverancia, carácter y esperanza?
•¿Qué nos enseña el mundo sobre cómo manejar la desilusión? ¿Cómo se diferencia la visión
oración durante meses, años o décadas antes de recibir una respuesta del Señor? ¿Cómo te
gustaría imitarlas?
•Haz una lluvia de ideas sobre las maneras en que las miembros de tu grupo pueden ser em-
57
MEMORIZA L AS ESCRITURAS
58
Semana 5
EL CAPÍTULO FINAL
El Final
es el
Principio
Introducción La Biblia termina
con estas poderosas
Imagínate si el final de cada gran historia te dejará en suspenso.
palabras:
¿Qué pasaría si nunca supiéramos si la zapatilla de cristal de
Cenicienta finalmente le sirvió? El que testifica de estas
¿Qué pasaría si no supiéramos con certeza si Caperucita Roja cosas dice: Sí, vengo
pronto. Amén. Ven,
finalmente logró escapar de las garras del lobo o si al final los osos
Señor Jesús.
descubrieron a Ricitos de Oro durmiendo en la cama del Oso
Bebé? La gracia del Señor
Jesús sea con todos.
Las historias sin finales son una frustración, no un consuelo para
Amén (Ap. 22:20–21).
nosotros. Queremos saber que todo eventualmente estará bien
y que los personajes tienen la oportunidad de ser «felices para Y, sin embargo, esto
siempre». es solo el comienzo
A primera vista, la historia de Elisabet parece terminar con un del resto de la historia.
Desde el momento en
signo de interrogación. No se nos dice exactamente cómo termina
que el Señor regrese
su vida. Sin embargo, las Escrituras no nos dejan adivinando. Es
por nosotros, Él
rica en promesas, destinadas a revelar el último capítulo para todos
marcará el comienzo
los que creen en Cristo.
de una nueva realidad
libre de dolor, angustia
59
Está bien si no pudiste pensar en muchas cosas al responder la pregunta más arriba. Cuando se
trata de la historia de Elisabet, la Biblia omite los detalles que quisiéramos mos conocer.
•No lo sabemos, sin embargo, las Escrituras no son tan silenciosas como luce a primera vista.
Una de las cosas que amo acerca del Señor es que Él siempre escribe el capítulo final; y Él
conoce ese capítulo final mucho antes de que nosotros podamos conocerlo.
Elisabet pudo haber escrito su historia de una forma muy diferente. Ella probablemente hubiera
escogido tener hijos en una etapa más temprano en su vida. Quizás ella hubiera escrito el
guión de su vida para que incluyera muchos hijos. Tal vez ella hubiera esperado que su historia
60
incluyera un hijo un poco más «normal» que Juan. Pero Dios escribió la historia que Él tenía en
mente para Elisabet. Él está escribiendo la historia que Él tiene en mente para ti también.
Elisabet espero por años convertirse en madre. Ella enfrentó la infertilidad mes tras mes. Y
cuando parecía haber perdido toda esperanza, Dios intervino de una manera sobrenatural,
trayendo fin a toda su desilusión en una forma extraordinaria.
Dios tenía un plan para Elisabet. Dios tiene un plan para ti.
Aparea cada una de las siguientes referencias con la verdad que enseña acerca del plan de Dios.
EFESIOS 2:10 Po r q u e s o m o s h e c h u r a s u y a ,
Yo s é q u e t ú p u e d e s h a c e r
ROMANOS 8:28 todas las cosas, y que ningún
propósito tuyo puede ser
estorbado.
Cada día de la vida de Elisabet, Dios estaba acercándola al día en el que el Mesías llegaría;
en ese contexto era que vivían ella y su esposo. En la medida que Elisabet se enfrentaba a la
desilusión de su infertilidad, Dios iba preparando el camino para la llegada de Jesús. Cuando
Dios tiene un propósito en mente que Él quiere llevar a cabo, no hay nada que lo detenga.
Cuando Elisabet cruzó su mirada con la mirada de la madre de Jesús, María, ella comprendió
cuál era el final que más importaba. Sus más profundos anhelos serian satisfechos. ¡Cristo estaba
en camino!
61
¿Cuál promesa nos da Cristo en Apocalipsis 22:12?
Al igual que Elisabet, nosotras también esperamos al Mesías. Él ya vino como un bebé, pero ese
no es el final de la historia. Él volverá.
En lo que respecta a nuestras desilusiones, Cristo ya ha escrito el final. El día llegará cuando Él
regrese por nosotras. Igual que los anhelos de Elisabet se desvanecieron con las noticias de que
Jesús iba a nacer pronto, nosotras podemos aferrarnos a esa esperanza, porque gracias a Jesús,
nuestras historias tienen un final maravilloso.
Escribe una oración agradeciendo a Dios que sus planes son confiables y que tu esperanza está
en la promesa de su regreso.
El ángel Gabriel le prometió a Zacarías que experimentaría dos emociones. ¿Cuáles eran?
¿Cómo describirías la diferencia entre gozo y alegría? Busca diferentes versículos que te ayuden
con tus definiciones.
62
GOZO ALEGRÍA
Aunque la diferencia entre esas dos emociones quizás no sea tan evidente, las Escrituras sí nos
indican que ambas son regalo del Señor y que son una muestra de su bondad en nuestras vidas.
A Elisabet y a Zacarías se les prometió un hijo quien sería una fuente de gozo y alegría.
Sin importar lo que pudieras estar experimentando en tu lugar de trabajo, tu vecindario, tu
comunidad, iglesia, tu hogar o en tu mismo corazón, no importa en las circunstancias en las que
Dios te encuentre hoy, si eres una hija de Dios, tienes la promesa de que un día habrá gozo y
alegría.
Quizás estás en una etapa prolongada de desilusión y piensas, ha sido un largo y doloroso tiempo y no
he podido ver el gozo todavía.
Hay un tipo de gozo que puedes experimentar, aun en medio de esas circunstancias, porque tu
gozo está atado a Dios quien nunca cambia (Mal. 3:6)
Pero hay otro tipo de gozo que todavía no podemos experimentar completamente… el gozo en
el futuro cumplimiento de las promesas de Dios.
En la medida que cerramos el estudio de hoy, pasa tiempo meditando sobre Apocalipsis 21:1-6.
Describe el gozo de esta promesa ya sea en ilustraciones o en palabras.
63
Día 3: VENCEREMOS
Ser un vencedor implica que hay una lucha, una batalla o tiempos difíciles. En esos momentos, a
menudo lo que nos mantiene en marcha, nos motiva y nos anima a dar el siguiente paso, es una
promesa, algo que anticipamos con ansias.
Tal vez estás soportando largos días en un trabajo que no te gusta. ¿Qué te hace seguir adelante
con tu trabajo por la mañana? Es la promesa de un cheque de pago.
¿Qué tal soportar una dieta o un programa de ejercicio? ¿Qué te motiva a continuar? Es una
promesa de perder peso, de estar en forma y saludable.
Tal vez estás invirtiendo años en la crianza de tus hijos y todavía no estás viendo frutos de
todo tu trabajo, porque está en medio de esto ahora mismo. Es difícil. Requiere que continúes
presionando. ¿Qué te mantiene en marcha? Es la promesa de que, por la gracia de Dios, un día
tus hijos crecerán y se convertirán en adultos responsables.
¿Qué motivaba a Zacarías y Elisabet a seguir orando por un hijo durante tantos años? La
promesa de que Dios los escuchaba y respondería a sus clamores.
Las promesas proveen motivación y alimentan la esperanza para poder seguir adelante.
Hojea las cartas a las siete iglesias que se describen en Apocalipsis 1–3.
64
un amigo de la gracia. Seguir a Cristo y defender la verdad vendrá con un sinnúmero de
desilusiones. El mundo se opondrá a Cristo, tal como lo hizo con Juan, el hijo de Elisabet.
Sin embargo, los creyentes en las iglesias en Apocalipsis fueron exhortados a ser fieles a pesar de
encontrarse en circunstancias difíciles. A través del tiempo, Elisabet se levanta como un ejemplo
fidelidad, y, en última instancia, vencer. A pesar de las desilusiones y las penas, los reveses y la
oposición, todos los creyentes son, en última instancia, vencedores.
Busca los siguientes pasajes. Junto a la referencia, escribe lo que cada pasaje enseña sobre vencer.
JUAN 1:5
JUAN 16 : 3 3
1 JUAN 5:4–5
APOCALIPSIS 12 : 1 0 - 11
¿Qué hicieron los santos? Ellos vencieron; ellos conquistaron; ellos prevalecieron. Volvieron a
tener vida y reinaron con Cristo por mil años.
65
Día 4: UN FINAL FELIZ COMPARTIDO
Compara y contrasta Génesis 3:4–19 y Apocalipsis 22:1–6. ¿Qué similitudes ves? ¿Qué
diferencias?
La desilusión entró en el mundo como consecuencia del pecado. Como personas caídas en
un mundo roto, continuaremos experimentando dolor. Y sin embargo, lo que sucedió en el
Jardín del Edén no tendrá la última palabra. La maldición se revertirá y nuestros anhelos más
profundos se cumplirán.
John MacArthur escribe: «En el cielo, ya libres de pecado, veremos la gloria de Dios revelada
en su plenitud. Esa será la visión más agradable y espectacular que cualquier cosa que hayamos
conocido o que podamos imaginar en la tierra. Ningún mero placer terrenal podrá estar a la
altura del privilegio y el éxtasis de una visión sin obstáculos de la gloria divina»5.
66
«Bienaventurados los de ____________ ____________, pues ellos ________ a ________».
¿Describirías a Elisabet como una persona de «limpio corazón»? ¿Por qué sí o por qué no?
Ver a Dios, estar en su presencia, conocerlo completamente, siendo plenamente conocidas por
Él (1 Co. 13:12). . . Ese es el anhelo más profundo de nuestras almas.
Los detalles de la vida de Elisabet y las desilusiones que enfrentó se desvanecieron ante
la presencia de su Señor. Nuestras historias comparten el mismo final feliz. Cada anhelo
insatisfecho que enfrentamos ahora, cada desilusión que está por venir, finalmente se
desvanecerá cuando lo veamos a Él cara a cara.
Pudieras estar lidiando con un hijo pródigo. Quizás lloras hasta quedarte dormida en la noche
pidiéndole a Dios que cambie su corazón.
Quizás estés lidiando con problemas físicos, diagnósticos médicos o dolor físico.
¿Cómo puedes soportar? ¿Cómo puedes permanecer fiel? ¿Cómo puedes evitar tirar la toalla?
¿Cómo puedes vencer?
67
Miras hacia adelante. Miras más allá del aquí y ahora. Levantas los ojos y miras las promesas
que se están cumpliendo. Mantienes tus ojos en la meta.
Vuelve a escribir el Salmo 42:1–2 como una oración con tus propias palabras en el espacio
debajo:
•¿Alguna vez piensas acerca de cómo será ver el rostro de Dios en el cielo (Ap. 22:4)? ¿Cómo
cambia tu visión del aquí y ahora el saber que te espera un futuro de vivir para siempre con el
Señor? ¿Cómo podemos «ver» el rostro de Dios incluso ahora?
•Describe cómo te consuela saber que Dios tiene un plan y que Él está escribiendo un final
•¿En qué área de tu vida te gustaría ver surgir el gozo y la alegría? ¿Experimentaste un nuevo
gozo y alegría al meditar en Apocalipsis 21:1-6? ¿Qué te llamó la atención de estos versícu-
los?
•Describe cómo Elisabet fue una vencedora. ¿Te consideras una vencedora? ¿Por qué sí o por
qué no?
•¿Cuál de los pasajes sobre vencer te animo? (Día 3)? ¿Puedes compartir cómo se aplica a tu
vida?
Lean el Salmo 42:1-2 juntas en voz alta. ¿De qué formas satisface Dios la sed de nuestra alma?
68
MEMORIZA L AS ESCRITURAS
69
Cánticos
en la
Semana 6
LA CANCIÓN DE ELISABET
Escritura
Puedes encontrar 185
Introducción
canciones en la Biblia.
El 80 por ciento de Robert Ingersoll fue un célebre infiel y agnóstico del siglo XIX.
estos son Salmos. Cuando murió, los avisos fúnebres incluían esta declaración: «No
Los Salmos no son el habrá cánticos».
único libro de cánticos
Aquellos que no conocen a Cristo tienen muy poco de qué cantar
en la Biblia. Cantar
y nada de qué cantar cuando se trata de la muerte. Por otro lado,
de los Cantares es
aquellos que sí conocen a Cristo tienen muchas razones para
una canción de amor
irrumpir en cánticos.
entre un novio y una
novia. Lamentaciones Lucas 1 está lleno de cantos. Elisabet exclamó su gozo por Jesús
es un conjunto de con tanto entusiasmo que casi podemos imaginarla cantando
cinco canciones que llena de emoción. María estaba llena del Espíritu Santo mientras
lamentan la caída de cantaba «El Magnificat», un himno de alabanza. La profecía de
Jerusalén. Zacarías se lee como letras de un canto. Quizás no pudo evitar
El Salmo 119 es la cantar ya que él también estaba lleno del Espíritu.
canción más larga de
Los cristianos deberían ser personas que cantan.
la Biblia con 1,732
palabras. En el sermón de Charles Spurgeon, «El himno memorable»,
Las dos canciones él habla del himno que Jesús y los discípulos cantaron cuando
más cortas tienen salieron de su celebración de la Última Cena en el Aposento
solo siete palabras Alto. Fue una celebración de la Pascua, y el Evangelio de Mateo
largas (hebreas). nos dice que cantaron un himno cuando salieron al Jardín de
(Puedes encontrarlos Getsemaní antes de que Jesús se enfrentara a la cruz.
en 2 Crónicas 5:13 y
20:21.6
70
En ese sermón, Spurgeon habla acerca de cómo los hijos de Israel cantaban himnos para alabar
al Señor y que Jesús estaba siguiendo la tradición de la Pascua de cantar himnos.
Amados, si habiendo dicho que Israel podía cantar de manera tan apropiada, ¿qué
debería decir de los que somos redimidos espiritualmente del Señor? Hemos sido
emancipados de una esclavitud peor que la de Egipto. Como dice la Escritura, «Con Su
mano y brazo extendido, Dios nos ha liberado».
La sangre de Jesucristo, el Cordero de la Pascua de Dios, ha sido rociada en nuestros
corazones y conciencias. Por la fe guardamos la Pascua, porque hemos sido salvadas.
Hemos sido sacadas de Egipto, y aunque nuestros pecados alguna vez se nos opusieron,
todos han sido ahogados en el Mar Rojo de la sangre expiatoria de Jesús. Las
profundidades los han cubierto. No queda ninguno de ellos. Si el judío podía cantar un
gran hallel [la palabra hebrea para alabanza], nuestro hallel debería ser aún más brillante.
Es una realidad. El cristianismo siempre ha sido una religión que canta. En tiempos de
abundancia y en tiempos de sufrimiento, los cristianos han cantado al Señor, y todavía lo
hacemos. Considera:
•Los Cristianos del primer siglo que sufrieron por su fe. Muchos murieron sin temor, y en
•Pablo y Silas en prisión y sin embargo cantando himnos al Señor en medio de la noche
(Hechos 16:25–34).
•Pablo anima a los creyentes del Nuevo Testamento a dirigirse unos a otros con cánticos
Cantar era su medio para decir: «No somos víctimas. Por la gracia y el poder de Dios, somos
vencedores. ¡El ha triunfado gloriosamente!»
71
Día 1: L AS CORISTAS DE ELISABET
¿Qué nos enseñan los siguientes pasajes acerca de cada mujer mencionada?
S A R A I — G É N E S I S 1 1 : 3 0
R E B E C A — G É N E S I S 2 5 : 2 1
R A Q U E L — G É N E S I S 2 9 : 3 1
L A E S P O S A D E M A N O A : J U E C E S 1 3 : 2 – 3
M I C A L — 2 S A M U E L 6 : 2 3
A menudo, cuando nos enfrentamos a la desilusión, existe la tentación de creer que somos las
únicas. Miramos a nuestro alrededor y pensamos que nadie más tiene que lidiar con los anhelos
insatisfechos de la misma manera que nosotras. Y sin embargo, la verdad es que la desilusión es
parte de la condición humana.
Elisabet venía de una larga lista de fieles seguidores del Señor. Pero también encontramos
muchas mujeres en su linaje que lucharon con el mismo tipo de desilusión que ella. Mientras
pasaban tiempo de dolor esperando por un hijo, también cantaban de la fidelidad de Dios en
medio de la desilusión. Mientras escuchamos a Elisabet cantar sobre su historia en esta última
semana, estas mujeres son sus coristas.
72
¿A quién conoces en tu propia vida que haya sufrido desilusiones similares a las tuyas?
Este versículo nos dice que Elcana era un efrata, lo que significa que era de Efrata (también
conocido como Ephrathah).
¿Podemos evaluar si Elcana y Ana sirvieron fielmente al Señor con este pasaje?
Al igual que Zacarías y Elisabet, Elcana proviene de una herencia familiar de fe. Como Zacarías
y Elisabet, ellos sirvieron al Señor fielmente año tras año. Y al igual que Zacarías y Elisabet, esta
pareja se enfrentó a la desilusión de la infertilidad.
Lee la oración de Ana por un hijo, registrada en 1 Samuel 1:9–18. ¿Qué te sorprende de Ana en
este pasaje?
73
Sin ninguna confirmación de que su oración por un hijo sería contestada, ¿qué hizo Ana a
continuación? (Ver versículo 19)
Después de derramar su corazón ante el Señor, Ana eligió adorar. A pesar de no tener evidencia
física de que sus oraciones desesperadas por un hijo habían sido escuchadas, Ana alabó al Señor.
Elisabet eligió la obediencia frente a la desilusión; Ana eligió el sacrificio de alabanza.
Registra tus partes favoritas de la canción de Ana que se encuentra en 1 Samuel 2:1–10.
Todas somos estériles de alguna manera. Todas tenemos oraciones que queremos
desesperadamente que sean respondidas. La Biblia nos da instrucciones claras sobre qué hacer
mientras esperamos.
¿Qué nos anima a hacer este pasaje en medio de nuestra esterilidad? (Ver versículo 1)
Dedica un tiempo esta semana para cantar al Señor. Aquí hay algunas ideas para comenzar:
•Crea una nueva lista de reproducción de Spotify de tus canciones de adoración favoritas.
Toma la decisión de cantar al Señor incluso en medio de las desilusiones que seguramente
enfrentarás esta semana.
74
Día 2: EL SACRIFICIO DE AL ABANZA
¡La Escritura es el director del coro supremo, que inspirando el pueblo de Dios a cantar!
Los Salmos están particularmente llenos de invitaciones para cantar. Escribe las siguientes
invitaciones a la adoración que se encuentran en los Salmos.
S A L M O 7 1 : 2 3
S A L M O 9 5 : 1
S A L M O 9 8 : 1 – 7
S A L M O 1 0 5 : 2
S A L M O 1 5 0 : 1 – 6
El pueblo de Dios no es invitado a cantar porque nunca experimenta desilusión, sino porque
tenemos esperanza más allá de cualquier contratiempo temporal. Cantamos con la esperanza de
que algo mejor llegará pronto.
Siempre tendremos anhelos insatisfechos de este lado del cielo. De no ser así, nos sentiríamos
satisfechas con lo que tenemos aquí en la tierra. No continuaríamos añorando un lugar mejor, el
hogar supremo de nuestro corazón.
No es pecado querer un hijo. No es pecado querer estar casada. No es pecado querer una carrera
más satisfactoria. No es pecado desear provisión financiera. Estos anhelos no son, en sí mismos,
pecaminosos. Lo que es pecaminoso es cuando exigimos que se cumplan ahora o tomar una
postura de amargura frente a la desilusión.
75
Los anhelos más profundos de nuestros corazones no pueden ser llenados por una persona o
cosa creada, y es por eso que debemos aprender a aceptar los anhelos no cumplidos, aprender a
vivir con ellos y rendirlos a Dios.
Basado en lo que sabes del carácter de Elisabet, ¿crees que ella también renunció a su deseo de
tener un hijo? ¿Cómo crees que podría haberse visto esto de manera práctica en su vida?
Cuando entregamos nuestros anhelos a Dios, se convierten en material para sacrificio, algo que
podemos ofrecer a Dios en adoración. Luego, cuando rendimos esos anhelos, lo buscamos a Él
para satisfacer las necesidades más profundas de nuestros corazones. Confiamos en que Él se
moverá en Su tiempo y a su forma para cumplir sus propósitos y para Su gloria eterna.
Ante la desilusión, la alabanza puede sentirse como un sacrificio. Somos tentadas a perder la
esperanza o exigir nuestro propio camino. Y sin embargo, una vez rendidas, las desilusiones
funcionan como la leña, alimentando nuestra devoción al Señor.
¿Estás dispuesta a rendir tus anhelos con un sacrificio de alabanza al Señor? Si es así, escribe tu
propia versión de esta oración:
76
Señor, te ofrezco estas desilusiones. Estoy dispuesta a confiar en que Tú te moverás a Tu manera, de la
forma que traiga a Ti la mayor gloria. Mientras tanto, estoy dispuesta a seguir caminando por fe, a seguir
sirviéndote y alabandote, solo porque Tú eres Dios. Amén.
Incluso ante la desilusión, Dios le ha dado a su pueblo muchas razones para cantar. La lección
de hoy está basada en las Escrituras, con muchos recordatorios de por qué el pueblo de Dios
debe alabarle. Toma tiempo para leer estos pasajes; No corras para terminar esta sección.
Jesús cantó.
Mateo 26:30
Marcos 14:26
Hebreos 2:11-12
77
Cuando cantamos,
estamos ensayando por la eternidad.
Apocalipsis 4:8–11
Apocalipsis 7:9–17
Apocalipsis 15:3–4
Los redimidos siempre tienen motivos para cantar, incluso cuando nuestros corazones están
abatidos o nuestras circunstancias son abrumadoras. Hice una lista personal recientemente de
algunas de las razones que tengo para cantar, independientemente de lo que esté sucediendo a
mi alrededor:
•Nosotras, quienes éramos sus enemigas, ahora somos llamadas sus amigas.
•Jesús está delante del trono de Dios, intercediendo para siempre por nosotras.
•Él siempre está trabajando para proteger, proveer y satisfacer nuestras necesidades, sin im-
78
Haz su propia lista. Escribe las muchas razones que tienes para cantar.
A través de su Palabra, Dios nos llama a más que simplemente soportar la desilusión. Debemos
usar nuestras vidas para dar gloria a Dios y animarnos unos a otros.
¿Puedes pensar en un tiempo en el que te haya fortalecido escuchar a otro creyente cantando o
el cantar con otros cristianos en la adoración corporativa? Escribe sobre esto a continuación.
79
La historia de Elisabet es un recordatorio de que podemos enfrentar la desilusión con gracia
debido a la esperanza que tenemos en Cristo. Nuestras historias pueden ser una continuación
de su canción, mientras nos recordamos mutuamente que debemos mirar más allá de nuestros
deseos no cumplidos hacia Aquel que, en última instancia, satisfará cada anhelo.
Nuestras circunstancias en este momento no durarán para siempre. Hay algo más grande. Hay
algo que las supera, que excede nuestras circunstancias. Elisabet pudo enfrentar su desilusión
porque sabía que se avecinaba un día en que todos los reyes, cada presidente, cada primer
ministro, cada dictador, cada esposo, cada jefe, cada líder, cada político; todos se inclinaran ante
su majestad, y Jesús reinará por los siglos de los siglos.
Charles Spurgeon lo dijo de esta manera: «Somos ordenados para ser los trovadores de los
cielos, así que ensayemos nuestro eterno himno antes de cantarlo en los pasillos de la Nueva
Jerusalén».
Eso es lo que hacemos aquí. Nosotras practicamos; nos preparamos. Comienza a cantar esa
canción ahora. Únete a las que se han ido antes, a las Miriams, las Anas, las Deboras, las Marías.
. . las Elisabets. Únete a aquellos alrededor del mundo quienes están cantando ahora. Canta al
unísono con otros que han sido redimidos. No permitas que las desilusiones de esta vida sean tu
himno. Habla de lo que Él ha hecho por tu alma. Cuenta cómo Él te ha rescatado, y unámonos
ahora y por toda la eternidad a cantar la canción de los redimidos.
•Elisabet nos muestra cómo cantar a través de las desilusiones de la vida. ¿Tienes una can-
Señor mientras esperas que tus oraciones sean respondidas. ¿Cantaste al Señor esta semana?
¿Qué diferencia hizo en tu corazón o actitud?
80
•¿Cómo reaccionas ante esta afirmación? «...Los anhelos no son, en sí mismos, pecaminosos.
Lo que es pecaminoso es cuando exigimos que se cumplan ahora, o cuando tomamos una
postura de amargura frente a la desilusión». ¿Alguna vez has respondido pecaminosamente
ante los anhelos no cumplidos?
•Debate cómo Ana y Elisabet rindieron sus deseos al Señor. ¿Qué has aprendido acerca de
81
1
Notas
Dunbar, Brian. «El Hubble encuentra el ‘Décimo planeta’ un poco más grande que Plutón» Nasa,
States)
4
Hovdey, Jay, Triple Crown Near Misses: Silver Charm, 1997 HandRIDE.com, 31 May 2012,
https://www.drf. com/news/triple-crown-near-misses-silver-charm-1997
5
MacArthur, John F., «¿Veremos la cara de Dios?», gty.org, https://www.gty.org/library/questions/
QA105/will-we-see-gods-face.
6
Kranz, Jeffrey, «Todas las canciones en la Biblia», OverviewBible.com, https://overviewbible.com/
82
Reflexiones
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
83
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
84
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________
85