Sie sind auf Seite 1von 2

Antes de poder hablar directamente sobre los derechos fundamentales, debemos tener el

conocimiento de lo que son los derechos Humanos, y la distinción que existe entre
estos, y los constitucionales. En primer lugar, los derechos humanos son el conjunto de
prerrogativas que son inherentes al hombre, precisamente por su condición de ser
humano. Sin distinción alguna de raza, sexo, nacionalidad, origen étnico, lengua,
religión o cualquier otra condición.

Sin embargo, cuando hablamos de los derechos fundamentales los Estados contemplan
en sus ordenamientos internos de manera expresa aquellos derechos que poseen sus
ciudadanos, como forma de reconocimiento de estos por parte de los poderes del
Estado. Estos tienen rango constitucional, y en la mayoría de los textos constitucionales
son conocidos como Derechos Fundamentales. Y aquí radica su distinción, mientras los
Derechos Humanos se encuentras inherentes a todas las personas del mundo, los
derechos fundamentales se basan en los ideales que crea cada jurisdicción que considera
competentes para la protección de sus ciudadanos.

Así pues, los derechos contemplados en nuestro ordenamiento interno, específicamente


en nuestra Constitución, son los derechos fundamentales que el Estado Dominicano
reconoce hacia sus ciudadanos.1

Los derechos fundamentales son una protección que se le da de forma interna a un


ciudadano de un país en concreto, en nuestro caso la Republica Dominicana. Sin
embargo, y adicionalmente a esto, nuestra Constitución de manera expresa, como parte
de su ordenamiento interno y como una forma de proteger de manera exacta a sus
ciudadanos, de igual forma ha adoptado las normas de derecho internacional 2 y de
manera muy particular, en su artículo 74.3, le da jerarquía constitucional a aquellos
tratados internacionales que se refieran a derechos humanos, esto quiere decir que
dichos derechos tendrán una posición constitucional, expresando que se encuentra por
encima de toda ley, o decreto. Diciendo literalmente lo siguiente: “Los tratados, pactos
y convenciones relativos a derechos humanos, suscritos y ratificados por el Estado
dominicano, tienen jerarquía constitucional y son de aplicación directa e inmediata
por los tribunales y demás órganos del Estado”

1
Ver Artículo 37 al 67 de la Constitución de la República Dominicana.
2
Constitución Dominicana 2010, Artículo 26.
La constitución divide los derechos fundamentales en cuatro grandes categorías, siendo
la primera categoría los derechos civiles y políticos, dentro de los que se encuentran los
siguientes: derecho a la vida, derecho a la libertad y seguridad personal, derecho a la
igualdad, derecho al libre desarrollo de la personalidad, libertad de tránsito, libertad de
expresión, entre otros. La segunda categoría se basa mas en la actividad económica,
denominándose derechos económicos y sociales, los cuales se encuentran: la libertad de
empresa, derechos del consumidor, derecho de propiedad, derechos de la familia,
derecho a la salud, derecho a la educación, y otros. Luego encontramos la tercera
categoría que son los derechos culturales y deportivos, y por último, que sería ya la
cuarta categoría los derechos relativos al ámbito medioambiental.

Todos estos derechos se ejecutan de manera clara en la constitución dominicana, y son


medidas internas que ha tomado la legislación para crear una segunda capa de
protección a sus ciudadanos. Mientras que la primera capa seria la protección de los
derechos humanos, esta segunda capa que es una forma de ampliar la protección, son los
derechos fundamentales.

No obstante, los derechos fundamentales no son una única forma de protección interna
que tenemos los dominicanos, ya que para el cumplimiento de dichos derechos
fundamentales se requiere una forma de garantía que cubra el goce y disfrute de los
mismos. ¿Y cuáles son esas garantías? Pues las garantías constitucionales.

Las garantías individuales, llamadas también garantías constitucionales, se han


considerado como disposiciones fundamentales en una constitución, cuyo valor es
equiparado al de las instituciones gubernamentales3. Comprendamos que las garantías
son las herramientas contempladas en el ordenamiento interno e internacional para
reconocer la existencia y validez de los derechos fundamentales, son una forma de
poder proteger los derechos fundamentales, de que estos se cumplan sobre todas las
cosas.

Las garantías como tales no tienen el valor que se le ha querido asignar, es decir no tienen un
verdadero valor constitucional, sino que, dado su origen, reflejan las relaciones entre los
ciudadanos y los poderes establecidos. Su importancia se debe, principalmente, en que incluirlas
en las constituciones demuestran el régimen político del país que la consagre. 4
3
Sobre las partes fundamentales de una constitución. Ver en este sentido a Carro Martínez, Antonio.
Derecho Político, Gráficas Benzal, Madrid 196S, 3ra. Edición, Pag. 166:167.
4
V. Prelot, Marce l. Institutions Politiques et Droit Constitutionnel, Libráire Dalloz, Troisieme Edition,
París, 1963, Pág. 200. ·

Das könnte Ihnen auch gefallen