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Frontera urbana, frontera colonial

Historia(s) de la región platina durante


el dominio de las coronas ibéricas
(siglos XVI al XIX)
Frontera urbana, frontera colonial
Historia(s) de la región platina durante
el dominio de las coronas ibéricas
(siglos XVI al XIX)

Marcela V. Tejerina

Rosario, 2018
Tejerina, Marcela
Frontera urbana, frontera colonial. Historias de la región platina durante el dominio de las
coronas ibéricas : siglos XVI al XIX / Marcela Tejerina. - 1a ed . - Rosario : Prohistoria Edi-
ciones, 2018.
132 p. ; 23 x 16 cm. - (Universidad ; 61)

ISBN 978-987-4963-04-8

1. Historia. 2. Historia de América. 3. Historia de América del Sur. I. Título.


CDD 980

Maquetación de interiores: Lorena Blanco


Edición: Prohistoria Ediciones
Maquetación de tapa: Estudio XXII

Este libro recibió evaluación académica y su publicación ha sido recomendada por reconoci-
dos especialistas que asesoran a esta editorial en la selección de los materiales.

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HECHO EL DEPÓSITO QUE MARCA LA LEY 11723

© Marcela V. Tejerina

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tada, en cualquier formato y por cualquier medio, mecánico o electrónico, sin expresa autor-
ización del editor.
Este libro se terminó de imprimir en MultiGroup, Buenos Aires, Argentina
en el mes de septiembre de 2018.
Impreso en la Argentina

ISBN 978-987-4963-04-8
Índice

PRESENTACIÓN ...................................................................... 9

INTRODUCCIÓN
Escalas de análisis y abordajes historiográficos ......................... 15

CAPÍTULO I
Los primeros contactos (siglo XVI) ............................................. 33

CAPÍTULO II
La intensificación de las relaciones (1580-1640) ........................ 41

CAPÍTULO III
La ampliación de los nexos (1680-1762) ..................................... 55

CAPÍTULO IV
La adaptación a las nuevas condiciones (1763-1808) ................ 67

CAPÍTULO V
Acción y reacción durante las guerras por la independencia ..... 87

EPÍLOGO
Manifestaciones de la región en la nación .................................. 111

BIBLIOGRAFÍA........................................................................ 117
PRESENTACIÓN

A
nte todo una aclaración: este es un libro pensado para alumnos
universitarios de grado y elaborado a partir de mi experiencia
como docente. Resulta, por tanto, un libro pensado para mí y, des-
de mí, como guía e instrumento para la integración de procesos que la
mayor parte de las veces se nos muestran desarticulados. Me ha motivado
fundamentalmente el propósito de llamar la atención sobre la importan-
cia y riqueza de observar y comprender en clave regional las historias de
espacios urbanos que, si bien luego pertenecerán a las jurisdicciones de
Argentina, Brasil, Uruguay o Paraguay, por formar parte de una región de
frontera entre los imperios ibéricos dan cuenta de un pasado en común que
sólo se hace inteligible a la luz de este marco interpretativo. Una región
platina que se fue desplegando desde los inicios de la expansión de las
coronas ibéricas y que, desde esta misma perspectiva, se constituye en una
variable de análisis imprescindible a la hora de comprender la complejidad
del tránsito de dichos territorios de la colonia a la etapa independiente.1
En los últimos años historiadores argentinos, brasileños y uruguayos
han vuelto su mirada sobre distintas facetas de las relaciones hispano
lusitanas en torno del Río de la Plata durante la etapa de los imperios
coloniales y su continuación hasta las primeras décadas del siglo XIX.
Y con ello han realizado relevantes aportes, fundamentalmente en orden
a superar la fragmentación propia de los abordajes de las historiografías
nacionales predominantes en la Argentina, el Brasil y el Uruguay. No
obstante esto, aún queda mucho por hacer, entre otras cosas, en lo que
hace a la articulación de los avances aludidos. Pretendemos por tanto,
contribuir a la elaboración de un cuadro totalizador que dé cuenta del
proceso de conformación de esa región de frontera desde una perspecti-
va urbana, que apele tanto a la diacronía como a la sincronía de los he-
chos que, desde una doble matriz castellana y portuguesa, dieron lugar
a su configuración.

1 Si bien los historiadores de origen argentino y uruguayo se refieren preferentemente


a la región rioplatense, entendemos que esta denominación posee una connotación
que dentro del imaginario colectivo la circunscribe fundamentalmente a las campa-
ñas argentina y uruguaya, con exclusión del territorio actualmente bajo jurisdicción
del Brasil. Es por ello que en este trabajo optamos por la de región platina, utilizada
por la historiografía brasileña, la cual creemos más abarcadora.
10 Frontera urbana, frontera colonial

Y es para comenzar a hablar de esa región platina que elegimos a las


ciudades, villas y poblados castellanos y portugueses, en forma indepen-
diente de la importancia relativa que pueden haber adquirido a lo largo
de la etapa colonial y su papel en torno de aquella integración.
Porque la fundación de núcleos urbanos constituyó la base de la ex-
pansión castellana sobre territorio indiano, en tanto la ordenación del es-
pacio y la convivencia urbana cumplían un importante papel como repro-
ductores de la jerarquía y de los valores de la hispanidad. Y también los
núcleos urbanos tuvieron un rol fundamental en el proceso de internación
de los portugueses hacia el sur del territorio. Analizados en los últimos
años como puntos de confluencia y una efectiva vida social, centros de
diseminación de informaciones, ideologías y de materialización del pro-
pio poder político y religioso, el despliegue de estos centros contradice
la tradicional manera de considerar el modelo expansivo portugués en su
dimensión costera y desterritorializada, vinculada con el establecimien-
to de una sociedad agraria asentada en la economía azucarera.2
Sostenemos en este libro que, para el tiempo y el lugar que nos ocupa,
los núcleos de población hispanoamericanos, tanto como los luso-bra-
sileños,3 funcionaron como parte de una frontera urbana entre ambas
jurisdicciones de las coronas ibéricas, que se fue estructurando a partir
de la interacción entre unos y otros al interior mismo del territorio.

¿A qué frontera urbana nos estamos refiriendo?


Nos referimos a una frontera urbana que se irá desplegando en la medida
en que los pueblos, villas y ciudades vayan integrando la región platina
colonial, desarrollando en sí mismas áreas de influencia e interrelación
hispano lusitana, cuya incorporación al medio urbano no fue del todo
formal ni oficial. En esta suerte de frontera urbana, portugueses y cas-
tellanos, hispano-criollos y luso-americanos compartieron un espacio,

2 VILARDAGA, José Carlos São Paulo no Império dos Felipes – conexões na


América Meridional (1580-1640), Editora Fapespintermeios, São Paulo, 2014.
3 La expresión se aplica tanto en referencia a los portugueses nacidos en territorio
brasileño como a quienes tenían sus intereses en esta parte del imperio. Según Prado
ésta era una forma de identificación muy corriente en el silgo XVIII. PRADO, Fabri-
cio Colônia do Sacramento. O extremo sul da America portuguesa, FUMPROAR-
TE, Porto Alegre, 2002, p. 213, nota 3. Según Pimenta, hacia principios del siglo
XIX el Correio Braziliense denominaba a los nacidos en Brasil como “brasilienses”.
PIMENTA, João Paulo Estado y Nación hacia el final de los Imperios Ibéricos. Río
de la Plata y Brasil 1808-1828, Sudamericana, 2011, Buenos Aires, p. 166.
Presentación 11

interactuaron en el mismo, se enfrentaron y se complementaron, confor-


mando una realidad concreta que operó paralelamente al proceso diferen-
ciador que implicaba el reconocimiento de los reinos ibéricos y sus po-
sesiones de ultramar.4 Privilegiadas puertas de entrada al conocimiento y
comprensión de una región que se fue articulando en torno a ellas y, des-
de ellas, con otros espacios fronterizos, nos brindan una vía de reflexión
alternativa, de gran utilidad a la hora de explicar y encadenar en forma
lógica la realidad de la presencia de los otros, castellanos o portugueses,
en el ámbito urbano de las respectivas jurisdicciones coloniales. Para los
habitantes de dichos poblados, la interacción con esos otros se dio en for-
ma continua, directa, inmediata, personal y global. Entraban aquí a jugar
factores que hacían a la historia y realidad del conjunto poblacional local,
en el marco de la región de frontera platina colonial.
De alguna manera, entonces, los pueblos, villas y ciudades fueron
reproduciendo en su interior una realidad de frontera perfectamente con-
gruente con la de la región platina a la cual se iba integrando, con predo-
minio de la inclusión por sobre la exclusión, de la complementariedad
por sobre la rivalidad, por lo menos en lo que hacía a las experiencias
de sus habitantes y de la mayor parte de las autoridades residentes en el
lugar.
Se da paso de esta forma a la consideración de una región platina
atravesada por una experiencia de frontera que se fue construyendo a
lo largo del proceso de ocupación territorial y poblamiento por parte de
hispanos y lusitanos en contacto con los grupos que originariamente ha-
bitaban en el área; una región platina que se constituyó como una región
de frontera,5 en tanto abarcaba un espacio compartido por los súbditos
de las coronas ibéricas, cuyos límites jurisdiccionales se encontraban al
interior de la región.

4 Esta idea ya ha sido trabajada por la autora en el caso de la ciudad de Buenos Aires
durante la etapa virreinal. Cfr. TEJERINA, Marcela V. Luso-brasileños en el Buenos
Aires virreinal. Trabajo, negocios e intereses en la plaza naviera y comercial, Edi-
torial de la Universidad Nacional del Sur (EDIUNS), Bahía Blanca, 2004.
5 HEREDIA, Edmundo A. “Regiones y frontera en el Cono Sur: del conflicto a la
integración”, en Cuadernos del CILHA, Vol. 6, Nro. 6, 2004 [en línea] http://bdigital.
uncu.edu.ar/500.
12 Frontera urbana, frontera colonial

Principales núcleos poblacionales de la frontera urbana


en la región platina colonial

Fuente: elaboración propia.

El presente libro propone, por tanto, tomar como punto de partida la fron-
tera urbana que comienza a delinearse desde los inicios del poblamiento
de la cuenca del Plata y, desde allí, iniciar el recorrido por el largo proceso
de constitución de la región de frontera platina colonial. Para ello pone-
mos el foco en el papel de las villas, ciudades y poblados que la fueron
integrando, así como en el de sus habitantes, en tanto agentes dinamizado-
res de su transformación. No desconoceremos, sin embargo, los designios
políticos de las coronas ibéricas y su desarrollo a lo largo del tiempo, a la
luz del influjo de intereses geopolíticos y estratégicos. Tampoco lo hare-
mos con los procesos de revolución e independencia que posteriormente
dieron lugar al surgimiento de los nuevos estados nacionales.
Presentación 13

Nos interesa particularmente poner en diálogo en el largo plazo a es-


pañoles y portugueses –peninsulares o americanos–, pobladores de São
Paulo, Asunción, Santa Fe, Buenos Aires, Montevideo, Colonia, y aún
Córdoba o Mendoza; comerciantes, contrabandistas, bandeirantes, trope-
ros, artesanos o marineros. Todos ellos testigos o protagonistas de la con-
formación de una región de frontera en torno del Río de la Plata colonial.
Con nuestra propuesta pretendemos privilegiar la mirada sobre las
vivencias e interacciones entre los diferentes actores sociales, econó-
micos y políticos que se desenvolvieron desde principios de la coloni-
zación, y con ello, ir en busca de una historia regional que no pretenda
ser la comprobación de lo general ni remita a espacios previamente es-
tablecidos desde el poder. Nos referimos a una historia regional platina
colonial que permita articular lo general con lo particular, el contexto
con lo específico, sin dejar de lado su vinculación con procesos locales
y su integración con ámbitos más amplios de carácter interregional y
aún imperial.
Veremos que los diferentes núcleos de poblamiento que se fueron
instalando en el marco del proceso de expansión de las coronas ibéricas
tuvieron un papel central, en tanto dieron lugar a la articulación de una
red urbana que, no sólo consolidó una estructura espacial regional en
torno de los polos de Potosí y de Minas Gerais, sino que además actuó
en forma centrípeta respecto de los mismos, actuando tanto en forma
directa como indirecta, aún sobre lejanas poblaciones. Tal fue el caso
de las ciudades de Córdoba o Mendoza que, aún sin formar parte de ese
espacio de frontera, recibieron la influencia de los procesos que se de-
sarrollaban en el seno de la región no sólo en términos económicos sino
también demográficos y sociales.
Si bien por sus mismas características, entendemos que la red urbana
a la que estamos aludiendo se fue estructurando la mayor parte de las
veces por fuera de los designios políticos de las coronas ibéricas, su
desarrollo a lo largo del tiempo no puede separarse del influjo de los
intereses geopolíticos y estratégicos de las mencionadas monarquías. Es
por ello que la propuesta del libro se estructura sobre una periodización
que contribuya a comprender el desarrollo de estos procesos en el tiem-
po largo, desde los primeros contactos a mediados del siglo XVI hasta
la conformación de los estados nacionales en la primera mitad del XIX;
una periodización que refleje el fuerte componente histórico de ese es-
pacio de frontera, que se estructuró a lo largo del período de dominación
colonial en una serie de etapas sucesivas que remiten a la dinámica de
14 Frontera urbana, frontera colonial

alternancia entre acción particular e intervención oficial, que es posible


reconocer en el proceso de avance territorial de los lusitanos sobre la
jurisdicción castellana. Este contrapunto entre acción individual y ofi-
cial da cuenta de una suerte de oscilación en el juego de intereses de
los portugueses, a partir de la cual identificar el comportamiento de las
variables que hacen al papel de los núcleos urbanos en la interacción
hispano lusitana en la región. Y, en función de ellas, dar cuenta de las
múltiples experiencias de frontera de sus pobladores.
Cabe acotar que para la organización del trabajo y con la mira puesta
en facilitar la lectura, he optado por evitar hacer referencia a los múlti-
ples especialistas consultados para la elaboración de la presente síntesis
integradora. Hago la salvedad, sin embargo, en lo que respecta a los
casos ilustrativos que, en su gran mayoría, surgen de los testimonios
documentales por ellos analizados. Sus aportes, por otra parte, han que-
dado debidamente consignados en el siguiente apartado, el cual hace las
veces de introducción teórica e historiográfica.
INTRODUCCIÓN

Escalas de análisis y abordajes historiográficos

El paradigma regional frente al nacional

E
s fundamentalmente una cuestión de escalas, dicen los historia-
dores.
En los últimos años y en coincidencia con las tendencias his-
toriográficas actuales, historiados brasileños, uruguayos y argentinos
han llamado la atención sobre la necesidad de superar el punto de vista
unilateral, nacionalista que predominó en la producción historiográfi-
ca de sus respectivos países, impidiendo que el estudio de cuestiones
comunes trascendiera los límites de los estados nación. En este marco,
una de las perspectivas que más se ha profundizado es la de la historia
comparada, a partir de la conformación de espacios académicos con la
participación de investigadores de los distintos países de la región.1 Por
otro lado, también se ha ido desarrollando un importante número de in-
vestigaciones sobre distintos aspectos relativos a la región platina, entre
la expansión de los imperios ibéricos y la formación de los estados na-
cionales. Coinciden sus autores en la necesidad de incorporar escalas de

1 Cfr.: BARRAL, María E. y SILVEIRA, Marco Antonio –coordinadores– Historia, po-


der e instituciones. Diálogos entre Brasil y Argentina, Prohistoria ediciones, Univer-
sidad Nacional de Rosario, Rosario 2015; BRITO, Adilson; ROMANI, C.y BASTOS,
Carlos Augusto –organizadores– Límites fluentes. Fronteiras e Identidades na Amé-
rica Latina (séculos XVIII-XXI), EDITORA CRV, Curitiba, 2013; BRITO, Adilson
Júnior Ishihara y BASTOS, Carlos Augusto –organizadores– ENTRE EXTREMOS:
experiências fronteiriças e transfronteiriças nas regiões do rio Amazonas e do rio da
Prata – América Latina, séculos XVI-XX, EDITORA CRV, Curitiba, 2018; FREGA
NOVALES, Ana; PADOIN, María Medianeira; KÜHN, Fabio; BRAVO, María Celia
y TEDESCHI, Sonia Rosa –organizadores– História, Regioes e fronteiras, FCOS-
UFSM, Santa María / RS, 2012; REGUERA, Andrea y MARQUES HARRES, Mar-
luza –directoras– De la región a la nación. Relaciones de escala para una historia
comparada Brasil-Argentina (s. XIX y XX), Universidad Nacional del Centro de la
Provincia de Buenos Aires; Cesal, Tandil, 2012.
16 Frontera urbana, frontera colonial

análisis que permitan dar cuenta de procesos que en el marco de las his-
torias nacionales permanecieron invisibilizados. Y, de este modo, echar
luz sobre la diversidad al interior de ciertos espacios ubicados en zonas
de fronteras entre las posesiones de Castilla y de Portugal que, a lo largo
de la etapa colonial habían constituido lugares de interacción, pasajes y
refugio para los vasallos de las respectivas coronas.
En general, estas investigaciones se han propuesto como fuerte reac-
ción frente a la tendencia tradicional de las historiografías nacionales, ge-
neralmente encaminadas a destacar la existencia de la frontera entre las
posesiones de las coronas ibéricas como un área de conflicto y distancia-
miento. Como se ha planteado respecto de la historia de la Banda Oriental
del Río de la Plata a lo largo de la etapa colonial, los recortes de un territo-
rio considerado nacional que sustentaron las investigaciones de corte na-
cionalista hicieron descuidar la diversidad al interior de ciertos espacios
ubicados en zonas de fronteras con el Brasil que, a lo largo de la etapa
colonial habían constituido lugares de pasajes y de refugio entre las áreas
dominadas por portugueses y españoles. Los fenómenos de diferenciación
y relativa auto identificación de los pueblos al interior de esos espacios de
frontera terminaron asimilados a identidades nacionales preconfiguradas,
desatendiendo las variables locales y regionales, descuidando las tensio-
nes entre soberanías locales y poderes centrales e ignorando los procesos
económicos, sociales y culturales específicos de espacios de interrelación
entre pueblos distintos, así como los múltiples vinculaciones, sentimien-
tos de pertenencia y posiciones políticas de los habitantes de la región.2
La existencia de formas de articulación espacial que podríamos de-
nominar pre – nacionales también ha sido considerada una variable de
importancia a la hora de analizar la influencia de los luso-brasileños en
la plaza naviera y comercial porteña durante la etapa virreinal. En este
caso se puso el acento en la existencia de manifestaciones locales y re-
gionales que hacían a la constitución del puerto de Buenos Aires en una
suerte de frontera urbana entre hispanos y lusitanos, cuya continuidad a
lo largo de la etapa colonial había resultado desdibujada en el marco de
las historias nacionales.3

2 FREGA, Ana “Temas y problemas para una historia regional rioplatense”, en 13


Congreso de la APHU en Pasysandú, 12 de octubre de 2002, p.1, [en línea] dis-
ponible en http://www.uruguayeduca.edu.uy/Portal.Base/Web/verContenido.as-
px?ID=200776, 2002
3 TEJERINA, Marcela V. Luso-brasileños en el Buenos Aires virreinal…, cit., pp. 35-37.
Introducción: Escalas de análisis y abordajes historiográficos 17

En el caso brasileño se ha observado el predominio de cierta histo-


riografía de corte nacionalista, que condujo a minimizar o casi siem-
pre omitir, por ejemplo, todo lo que refiere a las innegables influencias
castellanas sobre el territorio de Río Grande del Sur. El presupuesto de
que la frontera se había delineado por la ocupación y posesión efec-
tiva de dicho espacio por parte de los portugueses, permite entender
que la historiografía regional relativa al período de dominación española
(1763-1776) haya construido una representación idealizada de una fron-
tera excluyente respecto de las poblaciones indígenas y españolas. Esta
representación de la historia riograndense de matriz lusitana también
habría alcanzado a las misiones jesuíticas y a las relaciones luso brasi-
leñas con el Plata; simplemente porque los jesuitas estaban al servicio
de la corona española, la historia de los Siete Pueblos de las Misiones
habría resultado excluida de la historia de Río Grande del Sur.4
La historiografía brasileña tradicional, asimismo, ha sido responsa-
bilizada de distorsionar el rol de la ciudad de São Paulo a lo largo del
siglo XVI y parte del XVII, dentro del proceso expansivo portugués. Se
ha criticado que, al analizar el desarrollo de esta villa desde un enfoque
netamente portugués, sin ponerlo en diálogo con el punto de vista caste-
llano, sólo se resaltó su situación de marginalidad, aislamiento y sentido
estratégico, un enclave ofensivo, contra las posesiones castellanas, en
posición defensiva, siempre alerta ante el avance de los paulistas. Si
bien en investigaciones recientes la pobreza paulista ha sido bastante re-
lativizada, su aislamiento cuestionado y sus circuitos mercantiles intra-
coloniales y atlánticos revelados, en tanto se la siga estudiando desde un
punto de vista unilateral no se deja de considerarla en su marginalidad,
en su condición periférica en relación a la estructura colonial.5
Según criticas recientes, algo similar habría ocurrido también con
el tratamiento historiográfico de la Colonia del Sacramento. Afectado
por las limitaciones propias de las historiografías tradicionales para el
abordaje de la historia colonial de la frontera rioplatense, toda vez que se
partió de una representación sesgada, el análisis del pasado se ajustaba a
las fronteras políticas de los estados nacionales. Desde el punto de vista
argentino, los estudios se dedicaron a resaltar el nefasto contrabando
con Buenos Aires, entendiendo que la existencia de ese enclave refle-

4 KÜHN, Fabio Breve Història do Rio Grande do Sul, Leitura XXI, Porto Alegre,
2002, pp. 26-27.
5 VILARDAGA, José Carlos São Paulo no Império dos Felipes… cit.
18 Frontera urbana, frontera colonial

jaba claramente el fracaso de la política española en el Río de la Plata.


Desde el Uruguay la Colonia de Sacramento sólo recibió atención en
episodios específicos de la historia nacional. Y desde el Brasil, la pro-
ducción historiográfica se remitió casi exclusivamente a las narrativas
político-militares, con énfasis en cuestiones diplomáticas y geopolíticas.
Dentro de este cuadro analítico el papel de Colonia de Sacramento se
redujo al de un nido de contrabandistas, cuyo alto costo de manuten-
ción justificaba la renuncia de Portugal a favor de España. Esto hizo que
la representación tradicional de Sacramento dentro de la historiografía
brasileña se subordinara a la historia de la formación de la frontera sur
del Brasil en función de los límites del actual territorio de Río Gran-
de del Sur. Esta forma de representación del enclave cisplatino no hizo
más que proyectar la nación y las fronteras actuales al pasado colonial,
cuando estas estructuras políticas e identitarias aún no existían. Como
corolario de este tipo de abordajes, la historiografía nacionalista apenas
se permitió el esbozo de diversas e importantes cuestiones económicas,
sociales y urbano-demográficas que hacen a la historia del área. En esta
línea, el contrabando aparece sólo en su dimensión política, vinculado
al crimen y al delito, sin tener en cuenta el significado social, cultural y
económico del comercio de cueros y del tráfico ilegal, en el contexto de
las relaciones hispano lusitanas en el amplio espacio fronterizo en torno
de la cuenca rioplatense.6

La noción de frontera y la región platina colonial


Para esta altura queda claro que cuando hablamos de la frontera riopla-
tense no nos referimos al límite o línea que separa jurisdicciones polí-
ticas o administrativas sino por el contrario, a un espacio a ocupar, un
espacio que da lugar a profundos contactos y constantes intercambios
que se va desplegando a partir del avance de un grupo sobre el territorio
ocupado por otro. Nos referimos a una noción de frontera que no remite
al límite o línea que separa jurisdicciones políticas o administrativas
sino por el contrario, a un área de profundos contactos y constantes in-
tercambios, que se va desplegando a partir del avance de un grupo so-
bre el territorio ocupado por otro. Ese concepto de frontera se originó a
partir de los nuevos enfoques y valoraciones espaciales desarrollados a
fines del siglo XIX por Frederick Jackson Turner, para quien el térmi-
no, si bien elástico y sin definición precisa, no se refería a una línea de

6 PRADO, Fabricio Colônia do Sacramento..., cit., pp. 17-32.


Introducción: Escalas de análisis y abordajes historiográficos 19

separación entre dos países, fija, continua y más o menos permanente,


sino a un espacio abierto a la expansión. Esta concepción turneriana
y los aportes que a posteriori surgieron de la revisión de su propuesta
teórica fueron retomados por historiadores argentinos para aplicarlos al
análisis de la frontera con el indígena entre los siglos XVI y XVIII,7 pero
fundamentalmente por quienes se inclinaron por su utilización en los
estudios rurales y de las relaciones interétnicas a lo largo del siglo XIX.8
Aplicado al análisis de la historia de América, este concepto de frontera
ha sido definido como clave integradora que, en forma independiente de
las particulares consideración que se puedan realizar en su derredor, sólo
tiene validez si es considerado como un espacio de interacción.9 En la
frontera, tal como está siendo entendida, hay interrelación y contacto, es
un espacio donde se cruzan distintas influencias políticas, económicas,
sociales y culturales; puede coincidir con el límite territorial reconocido
por dos jurisdicciones o puede excederlo, configurando un avance o una
presión, ya sea concreta como indeterminada. La frontera en este senti-
do, va más allá del concepto geográfico – político o geopolítico que la
concibe como una línea, borde o límite que separa. Tampoco implica un
espacio vacío a ocupar o tierra vacía. Puede haber apropiación del suelo,
pero también se puede configurar a partir de la ocupación de espacios
económicos, sociales o aún culturales. Puede manifestarse a partir de la
marginación, de la exclusión, pero también sobre la base de la integra-
ción. En todos estos casos, no implica un proceso unilateral, sino múl-
tiple. De lo dicho se desprende que no existe una sola clase de frontera,
sino que su conformación está íntimamente vinculada al proceso histó-
rico que da origen a su formación, a partir de la práctica concreta de un
determinado grupo sobre un espacio físico definido. Y para el estudio de

7 Cfr. los trabajos de GASCÓN, Margarita “La articulación de Buenos Aires a la fron-
tera sur del Imperio español, 1640-1740”, en Anuario IEHS, núm. 13, 1998, pp.
194-213; “Frontier Societies: a view from the southern frontier of the Indies”, en
International Seminar on the History of the Atlantic world, 1500-1825, Harvard
University, Cambridge, 2002 y Periferias imperiales y fronteras coloniales en His-
panoamérica, Editorial Dunken, Buenos Aires, 2011.
8 Dada la multiplicidad de trabajos bajo este enfoque, a modo introductorio remitimos
al ensayo de SCHMIT, Roberto La construcción de la frontera decimonónica en la
historiografía rioplatense, en Mundo Agrario, 8 nro. 16, 2008 [en línea] http://www.
mundoagrario.unlp.edu.ar/article/view/v08n16a06/959.
9 CLEMENTI, Hebe La frontera en América. Una clave interpretativa de la historia
americana, Leviatán, Buenos Aires, 1987, p. 13.
20 Frontera urbana, frontera colonial

estas fronteras nos interesa aquí destacar el modelo analítico que propo-
ne Hebe Clementi, en tanto pone en énfasis en tres componentes de todo
espacio fronterizo: a) el que refiere a las condiciones que facilitaron y/o
motivaron la expansión de uno u otro grupo; b) el que se centra en las
formas de comportamiento que adoptaron en el lugar y c) por último, el
que hace a la situación misma del espacio geográfico y de las comuni-
dades que lo habitan.10
Esta ha sido una perspectiva analítica sumamente fecunda para los es-
tudios que en los últimos años se han dedicado a analizar las relaciones
entre castellanos y portugueses no sólo en sus posesiones americanas, sino
en el espacio atlántico, fundamentalmente en relación a la conformación
de sus respectivos dominios territoriales.11 En particular, los trabajos in-
teresados en profundizar el estudio de las relaciones hispano lusitanas en
el ámbito rioplatense durante la etapa colonial encontraron en esta noción
de frontera una alternativa teórica de gran utilidad a la hora de analizar el
proceso de expansión de los portugueses sobre territorio ocupado o per-
teneciente a los castellanos y hacer visibles procesos que van más allá
de las relaciones imperiales, para ahondar sobre la constitución de una
realidad y experiencia de frontera que desde el inicio de la presencia ibé-
rica en el territorio operó por fuera de los intereses de los gobiernos.12
Estamos hablando, por tanto, de un área cuyos márgenes fueron mutando
a lo largo del tiempo. Un espacio de que ha sido considerado como una

10 CLEMENTI, Hebe La frontera en América… cit.


11 Cfr., entre otros, BRITO, Adilson Júnior Ishihara y BASTOS, Carlos Augusto –
organizadores– ENTRE EXTREMOS... cit.; HERZOG, Tamar Fronteras de pose-
sión. España y Portugal en Europa y las Américas, Fondo de Cultura Económica de
España, Madrid, 2018; TRUCHUELO, Susana y REITANO, Emir –editores– Las
fronteras en el mundo atlántico (siglos XVI-XIX), Universidad Nacional de La Plata,
Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, La Plata, 2017 [en línea]
http://libros.fahce.unlp.edu.ar/index.php/libros/catalog/book/85
12 Cfr.: KÜHN, Fabio “A fronteira en movimento: relações luso-castelhanas na segun-
da metade do século XVIII”, en Estudos Iberoamericanos, vol. XXV, num. 2, 1999,
pp. 91-112 y Breve Història do Rio Grande do Sul..., cit.; Prado, Fabricio, Colônia
do Sacramento..., cit.; REICHEL, Heloise J. “Os caminhos do contrabando entre a
Província de Rio Grande de São Pedro (BR) E O Vice-Reinado do Prata no tardio
colonial (1776-1810)”, en SILVA, Hernán A. –director– Los caminos del Mercosur.
Historia Económica Regional. Etapa Colonial, Instituto Panamericano de Geografia
e Historia (IPGH-OEA), México D. F., 2004, pp. 235 a 254; REICHEL, Heloise J.
y GUTFREIND, Ieda As raízes Históricas do Mercosul. A região platina Colonial,
Editora Unisinos, São Leopoldo 1996; TEJERINA, Marcela V. Luso-brasileños en
el Buenos Aires virreinal..., cit.
Introducción: Escalas de análisis y abordajes historiográficos 21

frontera abierta, expuesta al avance desde Río de Janeiro hacia el sur, con
rumbo al estuario del Plata, así como desde São Paulo hacia el interior de
la llanura. Una frontera que de este modo se abría a los hombres como
posibilidad para ampliar recursos, poder y prestigio en articulación con
los intereses del gobierno colonial y los propios del Rey y su Consejo Ul-
tramarino, una frontera que terminaría por definir el rol de cada una de las
poblaciones que se fueron realizando dentro de la política de expansión
territorial.13 Este espacio rioplatense también ha sido caracterizado como
una frontera en movimiento, permeable a todo tipo de influencias, que nos
permite volver la atención sobre los variados influjos poblacionales de un
territorio fronterizo colonial, como el que involucraba a territorios que en
la actualidad se encuentran bajo la jurisdicción de Río Grande del Sur, del
Uruguay o del litoral argentino.14 Tal como ha observado Vilardaga, en
el marco de este espacio de frontera entre dos imperios, el rol de las ciu-
dades puede interpretarse de dos maneras diferentes. Si desde la mirada
anacrónica de los nacionalismos serían consideradas como puntos estraté-
gicos del avance expansionista de una u otra monarquía sobre territorios
periféricos y marginales, desde una perspectiva regional, estas ciudades se
convierten en espacios claves de articulación intercolonial. Lo que deter-
minó la organización de los espacios durante la etapa colonial no fue tanto
la demarcación de las jurisdicciones entre las coronas ibéricas, como las
relaciones comerciales y políticas cotidianas, más allá de las intenciones
de las metrópolis.15
Para el estudio de la frontera platina, afirma Frega, la perspectiva de
la historia regional contribuye al conocimiento del pasado en varios sen-
tidos, toda vez que nos permite encontrar unidades significativas que no
siempre tuvieron que coincidir con las circunscripciones definidas desde
los centros del poder. Surgen entonces problemas nuevos a resolver en
torno a los espacios, las identidades y los poderes que se construyen en
esa región de frontera, siempre presentes en la tensión entre quienes
vivían en el lugar y tenían vínculos familiares, de negocios, de amis-
tad independientemente de los límites territoriales que pretendían fijarle
desde los centros político – administrativos.16

13 PRADO, Fabricio Colônia do Sacramento..., cit., p. 52.


14 Cfr.: KÜHN, Fabio Breve Història do Rio Grande do Sul, cit.; PRADO, Fabricio
Colônia do Sacramento..., cit., p. 25-38.
15 VILARDAGA, José Carlos São Paulo no Império dos Felipes…, cit.
16 FREGA, Ana “Temas y problemas…”, cit.
22 Frontera urbana, frontera colonial

Dado su fuerte componente histórico, esta región constituye un


problema en sí misma, que puede ser abordado desde múltiples pers-
pectivas; incluyendo cuestiones de índole económica, demográfica,
política.17 Atendiendo a su condición fronteriza, el proceso histórico
que dio lugar a la conformación de la región platina colonial ha sido
caracterizado desde un principio en función de la vocación militar para
la defensa de los límites entre territorios pertenecientes a diferentes
jurisdicciones, tanto como por su subordinación política y económica
a los respectivos contextos político-administrativos.18 Por el contrario
también se ha interpretado la constitución de la región platina colonial
a partir de los factores naturales predominantes en su geografía. Se
menciona en forma específica la abundancia de tierra plana, fértil y
con abundante pasto para la multiplicación de los rebaños de vacunos
y caballares y el papel centralizador del Río de la Plata que, al ligar al
Atlántico a la zona minera del Potosí, actuó como agente de su inte-
gración con otras áreas circunvecinas. En función del reconocimiento
de estos elementos dinamizadores, los contornos de esta región fueron
planteados a partir de las actuales campañas de Rio Grande, Uruguay
y Argentina, que se extiende desde el río Salado, al sur de Buenos
Aires, hasta los territorios que se ubican al norte del río Negro en Uru-
guay, al noroeste y el rio Jacuí.19 En este caso, para el estudio de esta
región las investigaciones se centraron en la actividad pecuaria y en
la presencia del gaucho o gaúcho como referente cultural producto de
la misma. Partieron de la idea de que el conjunto de hábitos y valores

17 Para un análisis de la perspectiva regional cfr. ARECES, Nidia “La historia regional
y la historia económica en la historiografía argentina de las etapas coloniales durante
los últimos veinte años. A modo de balance y hacia una agenda renovada”, en GEL-
MAN, Jorge –coordinador– La historia económica argentina en la encrucijada: ba-
lances y perspectivas, Prometeo Libros, Buenos Aires, 2006, p. 387; CARBONARI,
María Rosa “De cómo explicar la región sin perderse en el intento. Repasando y
repensando la Historia Regional”, en História Unisinos, Vol. 13, núm. 1, Janeiro/
Abril 2009, pp. 19-34; MATA DE LÓPEZ, Sara E.; BANDÍERI Susana y FRAD-
KIN, Raúl O. “Cuestionario de Avances del Cesor. Tema: ‘Historia Regional’”, en
Avances del Cesor, nro. 2, 1999, pp. 111 a 124.
18 AZEVEDO COURLET, Beatriz “Identidades em una zona de fronteira: a região
do Prata no período colonial”, ponencia presentada en las Segundas Jornadas de
Historia Regional Comparada, Primeras Jornadas de Economía Regional Compa-
rada, Porto Alegre, 3 al 6 de Octubre de 2005, p. 3, [en línea] http://cdn.fee.tche.br/
jornadas/2/H4-03.pdf
19 REICHEL, Heloise J. y GUTFREIND, Ieda As raízes Históricas do Mercosul..., cit., p. 13.
Introducción: Escalas de análisis y abordajes historiográficos 23

comunes que se organizaron socioculturalmente en torno a la actividad


pecuaria de la región pudieron permanecer en el tiempo aún pesar del
modo diferencial en que se desarrolló dicha economía en los dominios
españoles respecto de los lusitanos a partir de la segunda mitad del
siglo XVIII y de la posterior fragmentación de la región a partir de
los movimientos independentistas. Con el aporte de la historia socio
cultural cobran especial interés, por tanto, las vivencias, las ideas, los
sentimientos de los hombres que la habitaban, entendiendo la cultura
de esa región como resultante de los conflictos resultantes de las rela-
ciones de poder que caracterizan las relaciones sociales.20 Al analizar
el proceso histórico colonial de esa región platina como una totalidad,
identificándola como un espacio geográfico funcional en donde se im-
bricaban una forma especial de reproducción de capital y, por tanto,
una forma especial de relaciones sociales, se tiene especialmente en
cuenta la articulación de esa región platina colonial con la lejana Po-
tosí y otras áreas circunvecinas y en ella el papel dinamizador del Río
de la Plata que las vinculaba al Atlántico. También en estos estudios
se llama la atención sobre la integración de la región platina al Río
Grande del Sur, con posterioridad a la pérdida de Colonia del Sacra-
mento por parte de la corona de Portugal y a través del contrabando de
ganado y de cueros.21
El análisis de la dinámica endógena de una región platina, producto
en este caso de las relaciones fronterizas establecidas desde la época
colonial, habilitó también para el Rio Grande del Sur la búsqueda de ele-
mentos históricos fundadores de una identidad, atendiendo sobre todo,
a la influencia que tuvo para el Río Grande la vecindad con el Río de la
Plata, históricamente irrefutable, si bien frecuentemente negada por los
brasileños.22 Con el fin de brindar visibilidad a las distintas instancias de
coexistencia, cooperación y convivencia entre hispanos y lusitanos du-
rante la etapa de dominio castellano sobre la villa de Río Grande (1763-
1776), se optó igualmente por complementar la perspectiva económica
con una mirada más social. Como se ha afirmado en forma enfática, la
formación de Río Grande do Sul no puede ser disociada de su contexto
platino y una perspectiva beligerante o conflictiva de esa vinculación
es insuficiente, toda vez que esa frontera configuraba un espacio de cir-

20 REICHEL, Heloise J. y GUTFREIND, Ieda As raízes Históricas do Mercosul..., cit.


21 REICHEL, Heloise J. “Os caminhos do contrabando...”, cit., p. 236.
22 AZEVEDO COURLET, Beatriz “Identidades em una zona de fronteira...”, cit., p. 2.
24 Frontera urbana, frontera colonial

culación de hombres y bienes, el cual permitía la supervivencia de esa


sociedad.23
El hecho de que la variable económica haya sido la más utilizada
para la formulación de una región platina o rioplatense colonial, según
ha sido denominada por los brasileños o los uruguayos y argentinos en
forma respectiva, no es un hecho casual. Como plantea Sara Mata de
López, en general las variables más utilizadas en la formulación de las
regiones han sido las económicas, atendiendo a variables tales como
población, producción y circulación mercantil.24 De esto se desprende
entonces que, tal como se ha señalado para la historiografía argentina,
en este caso también la propuesta de funcionamiento de los mercados
interiores construida por Assadourian y los estudios de frontera conflu-
yeron para la activación de una perspectiva regional que respecto de Río
Grande condujo a profundizar sobre las diferentes vías de su articula-
ción a la región platina.25 La escala regional, sin embargo, no impidió el
punto de vista imperial o el más restringido al ámbito local, en atención
no sólo a los poderes y las redes que los conectan a nivel interregional,
sino también a los designios que emanan del poder central y sus instan-
cias de negociación.
Si tenemos en cuenta que en el caso de la región rioplatense la escala
imperial debe atender a la doble influencia de los imperios portugués y
español, en tanto nos refiramos a un espacio compartido por los súbditos
de las coronas ibéricas, cuyos límites jurisdiccionales se encontraban al
interior de la región, no podemos perder de vista que estamos hablando
de una región de frontera, atravesada por la lógica imperial. El análisis
de los intereses del Imperio Portugués sobre el espacio rioplatense y la
condición de frontera abierta que atravesaba a la región platina permi-
tieron, por ejemplo, discutir el significado social y comercial del espacio
urbano de Colonia del Sacramento, a partir de documentos oficiales,
mapas, cartas de gobernadores y mercaderes, lo cual permitió, por tanto,
reconstruir una sociedad mucho más rica y compleja que la retratada por

23 Cfr.: KÜHN, Fabio Breve Història do Rio Grande do Sul, cit.; PRADO, Fabricio
Colônia do Sacramento..., cit., pp.77-78.
24 MATA DE LÓPEZ, Sara “Historia local, historia regional e historia nacional. ¿Una
historia posible?, en en Revista Escuela de Historia, Facultad de Humanidades de la
Universidad de Salta, Año 2, Vol. 1, núm. 2, p. 3, [en línea] http://www.unsa.edu.ar/
histocat/revista/revista0203.htm.
25 ARECES, Nidia “La historia regional y la historia económica en la historiografía
argentina…”, cit., p. 387.
Introducción: Escalas de análisis y abordajes historiográficos 25

la historiografía tradicional, profundizando sobre los grupos sociales


que se desenvolvían en la ciudad, sus intereses y su inserción región.26
La información recopilada permitiría concluir sobre la importancia de la
villa para el desenvolvimiento de las relaciones fronterizas en la Banda
Oriental, con fuertes lazos comerciales y vínculos tanto con los españo-
les como con los riograndenses, tierra de labradores, militares, pulperos
azorianos e indios, que funcionaba además como un importante núcleo
de atracción social y movilidad.27 La plaza de Colonia, no sólo era para
los luso-brasileños el principal núcleo de la Banda Oriental vinculado
al Atlántico. También a lo largo del siglo XVIII constituyó uno de los
tres principales focos de las redes de relación que se instituyeron desde
la otra banda, junto con los puertos de Buenos Aires y Montevideo, un
espacio sub-regional que se ha denominado complejo portuario riopla-
tense,28 escenario de actuación de complejas redes de comerciantes y
autoridades españolas y portuguesas en el marco del comercio ilícito
que ligaba a Buenos Aires y a Colonia con el mercado atlántico.29
Al poner el foco sobre las relaciones de poder y las luchas de faccio-
nes que involucraron a porteños como lusitanos en torno del comercio
legal e ilegal en el Río de la Plata, se abordaba la dimensión política que
asumía el proceso de conformación de la frontera platina colonial hacia
la segunda mitad del siglo XVIII. Esta, no obstante, ya había sido anali-
zada para el período filipino (1580-1640), llamando la atención sobre la
influencia de los portugueses en la conformación de las elites de poder
en la ciudad de Buenos Aires a principios del XVII,30 así como también

26 PRADO, Fabricio Colônia do Sacramento..., cit., pp. 20-21.


27 PRADO, Fabricio Colônia do Sacramento..., cit., p. 127.
28 Cfr. JUMAR, Fernando “Colonia del Sacramento y el complejo portuario rioplatense,
176-1778”, en en SILVA, Hernán A. –director– Los caminos del Mercosur. Historia
Económica regional. Etapa colonial, Instituto Panamericano de Geografía e Historia
(IPGH), Comisión de Historia, México D. F., 2004, pp. 163-199.
29 Cfr. los trabajos de MOUTOUKIAS, Zacarías “Redes Personales y autoridad
Colonial”, en Annales. Historire, Sciences Sociales, Paris, mayo-junio, 1992 y
“Redes sociales, comportamiento empresario y movilidad social en una economía de
no mercado (El Río de la Plata en la segunda mitad del siglo XVIII)”, en ZEBERIO,
Blanca; BERG María y OTERO, Hernán –compiladores– Reproducción social y
sistema de herencia en una perspectiva comparada. Europa y los países nuevos
(Siglos XVIII al XX), Instituto de Estudios Históricos Sociales. Facultad de Ciencias
Humanas, Universidad Nacional del Centro, Tandil, pp. 63-81.
30 Cfr.: CEBALLOS, Rodrigo Arribadas portuguesas: a participação luso-brasileira
na constituição social de Buenos-Aires (c. 1580-1650), Tese (Doutorado), Niterói,
26 Frontera urbana, frontera colonial

sobre su presencia e inserción para la misma época no sólo en la ciudad


de Santa Fe la Vieja31, sino también en la de Córdoba del Tucumán.32
Vemos entonces que los avances de la historiografía argentina, uru-
guaya y brasileña de los últimos años nos permiten ir delineando la con-
figuración de esa región platina a lo largo de la época colonial, en torno
a tres ejes centrales de circulación que, en forma sucesiva, se fueron
manifestando con mayor o menor intensidad y con diversos grados de
interrelación, de acuerdo a la sucesión de particulares coyunturas que
rodearon las relaciones hispano lusitanas en ese espacio de frontera: el
primero en torno del Guairá y con centro en las ciudades de São Paulo
y Asunción; el segundo, con foco en el desenvolvimiento de los puertos
rioplatenses y su articulación con el eje Buenos Aires Potosí y el terce-
ro, comunicando estos puertos con el Río Grande do Sul a través de la
Banda Oriental. Como dijimos, a lo largo de los siguientes capítulos y
ubicando el rol de los núcleos urbanos hispanos y lusitanos en un lugar
de centralidad, lo utilizaremos como una suerte de observatorio desde el
cual recorreremos la constitución de los diferentes espacios que dieron
lugar a la región.

Universidade Federal Fluminense, Instituto de Ciências Humanas e Filosofia, 2008;


GELMAN, Jorge D. “Economía natural - economía monetaria. Los grupos dirigen-
tes del Buenos Aires a principios del siglo XVII”, en Anuario de Estudios America-
nos, nro. 44, 1987, pp. 1-19; PERUSSET, Macarena “Elite y comercio en el tempra-
no siglo XVII rioplatense”, en Fronteras de la Historia, núm. 10, 2005, pp. 257-277;
SAGUIER, Eduardo “The social impact of a middleman minority in a divided host
society: the case of the portuguese in early seventeenth – century Buenos Aires”, en
Hispanic American Historical Review, 65, núm. 3, 1985, pp. 467 – 491.
31 Cfr. los trabajos de ARECES, Nidia y TARRAGÓ, Griselda “La élite santafesina en
el siglo XVII. Familia y poder”, en 49 Congreso Internacional del Americanistas
(ICA), Quito Ecuador, 1997, [en línea] http://www.equiponaya.com.ar/congresos/
contenido/49CAI/Areces.htm y “Los inmigrantes portugueses en Santa Fe la Vieja:
estrategias parentales, económicas y sociales de integración”, en Rábida, en Rábida,
núm. 14-15, pp. 67-82.
32 Cfr. los trabajos de GOULD, Eduardo G. “La actividad artesanal de los portugueses
en los primeros años de vida de la ciudad de Córdoba (1573-1623)”, en Actas del
Congreso Nacional y Regional de Historia Argentina, Río Cuarto, (Córdoba), 24
al 26 de septiembre de 1987, Academia Nacional de la Historia, Buenos Aires; “La
condición del extranjero en América: los portugueses en Córdoba del Tucumán entre
1573 y 1640”, en Revista de Historia del Derecho, nro. 19, 1991, pp. 245 a 279 y
“Los extranjeros y su integración a la vida de una ciudad indiana: los portugueses
en Córdoba del Tucumán 1573-1640”, en Revista de Historia del Derecho, núm. 24,
1996, pp. 63 a 112.
Introducción: Escalas de análisis y abordajes historiográficos 27

Los núcleos urbanos en la expansión ibérica


Según han señalado Hardoy y Gutman, en líneas generales el sistema
urbano colonial se ha conservado sin importantes modificaciones. De
las treinta y ocho ciudades de América Latina y el Caribe que en 1990
tenían por lo menos un millón de habitantes, treinta y dos habían sido
fundadas por los españoles y los portugueses entre los siglos XVI y
XVIII; veintiuna de ellas habían sido erigidas antes de 1660, siete du-
rante el siglo XVII y las restantes cuatro en el siglo XVIII. Vale marcar,
a nuestros fines, las diferencias relativas que tuvieron los núcleos urba-
nos en los procesos de expansión castellano y portugués, en torno a la
cantidad y crecimiento. Entre 1530 y 1650 sólo se fundaron en Brasil 31
villas y 6 ciudades, mientras que en Hispanoamérica, hacia 1574 había
189 centros urbanos y en 1630 habían aumentado a unos 330.33
Para la América castellana los núcleos urbanos tuvieron un papel
central, fundamentalmente en el marco del proceso de dominación terri-
torial por medio de la conquista armada. La expansión se caracterizó por
el planeamiento urbano y una fuerte institucionalización de las ciudades,
como base del poblamiento y el control del territorio.34 La población se
concentraba en pequeños pueblos, villas y ciudades de diferente tamaño
más que en el campo, fundamentalmente por las disposiciones legales
de la Corona que tendían a reunir a la gente para su protección y control,
y para una mejor administración del territorio. Una villa o pueblo se
declaraba ciudad por una decisión del rey en función de su importancia
como punto estratégico, a veces por su significado prehispánico, su lo-
calización y sus conexiones. Las villas podían estar dotadas de su propio
Cabildo y de la facultad de formar milicias. Las ciudades, por su parte,

33 HARDOY, Jorge Enrique y GUTMAN, Margarita “Construcción urbana y rural: sus


aspectos ideológicos, sociales y económicos”, en CASTILLERO CALVO, Alfredo
–director– Historia general de América Latina, Vol. III, Tomo I, “Consolidación del
orden colonial”, Ediciones UNESCO, Trotta, París-Madrid, 2001, p. 33.
34 Cfr. por caso los trabajos de ARECES, Nidia “Las sociedades urbanas coloniales”,
en TANDETER Enrique –director– Nueva Historia Argentina. La sociedad Colo-
nial. Tomo II, Sudamericana, Buenos Aires, 2000; HOBERMAN, Louisa S. y SO-
COLOW, Susan M. –compiladoras– Ciudades y Sociedad en Latinoamérica colo-
nial, Fondo de Cultura Económica, México, 1993; MORSE, R. M. “El desarrollo
urbano de la Hispanoamérica Colonial”, en BETHELL, Leslie –editor– Historia
de América Latina: América Latina Colonial, Economía, T. III, Editorial Crítica,
Barcelona, 1990; ROMERO, José Luis Latinoamérica: la ciudad y las ideas, Siglo
XXI, Buenos Aires, 1976.
28 Frontera urbana, frontera colonial

tenían sus títulos, su jurisdicción, su santo patrono, y un estandarte. Mu-


chas veces se titulaban ciudad a núcleos de poca importancia, pero una
vez titulada ciudad, cualquiera fuese su tamaño, en cada una de ellas
funcionaba un Cabildo, corporación de vecinos dotada de atribuciones
jurisdiccionales, políticas y militares. La condición de ciudad no era una
cuestión de cantidad de habitantes, sino de la distinción jurídico – po-
lítica que se había alcanzado. Las ciudades eran cabeceras de jurisdic-
ciones más amplias, de índole rural, subordinadas e inseparables. En el
proceso de ocupación territorial hispanoamericano, la subordinación del
campo a los núcleos urbanos ha sido directamente relacionada con la
conformación de regiones urbanas o ciudades territorios que, a su vez,
se englobaban dentro de espacios más amplios. Esos espacios daban
cuenta de una red urbana y una estructura territorial ínfimas, como con-
secuencia de la escasa población que albergaban y de las enormes dis-
tancias que las separaban.35 El relativo aislamiento y la distancia entre
las ciudades determinaron en América hispana el perfil de las regiones,
estructuradas en torno al predominio del capital comercial; movilizando
las producciones requeridas por el tráfico interregional y colocando las
mercancías que recibían de otras regiones o de la metrópoli. En el centro
de esas redes de funciones, los núcleos urbanos constituían mercados
para los productos metropolitanos, a cambio de metálico o de produc-
tos con demanda fuera del ámbito local, mercado para las producciones
del campo para la subsistencia de la población urbana y mercado de
crédito para esos intercambios para los productores rurales o urbanos.36
A través de las ciudades se buscaba imponer y organizar la cultura y
los valores del viejo mundo, lanzando las bases para la reproducción
de la sociedad ibérica. Para la América española, la organización del
espacio y la convivencia urbana poseían un importante papel ordenador,
en cuanto reproductores de la jerarquía y de los valores. Configuraban
espacios de reproducción de una rígida jerarquía social en una región de
frontera abierta, constituían un microcosmos del orden imperial y ecle-
siástico, donde los intereses políticos de la corona primaban sobre los
intereses y necesidades comerciales de la sociedad local. Las ciudades

35 MARTIN LOU, M. A. y MÚSCAR BENASAYAG, E. Proceso de urbanización en


América del Sur. Modelos de ocupación del espacio, MAPFRE, 1992, Madrid, p. 119.
36 CHIARAMONTE, José Carlos Mercaderes del Litoral, Economía y sociedad en la
provincia de Corrientes, primera mitad del siglo XIX, Fondo de Cultura Económica,
Buenos Aires, 1991, pp. 30-31.
Introducción: Escalas de análisis y abordajes historiográficos 29

conformaban importantes centros comerciales y puntos cruciales para


la administración e implementación de las políticas coloniales; centros
administrativos y religiosos, donde se representaba y administraba la
justicia, centros comerciales y financieros, y focos de actividades cul-
turales y artísticas. En base a las funciones que fueron concentrándose
en algunas ciudades es posible identificar centros administrativos, reli-
giosos, puertos de comercio internacional y regional, centros mineros,
centros agrícolas, pueblos de indios, presidios y centros militares de
frontera. Entre 1580 y 1630 los sistemas urbanos de cada Audiencia se
fueron jerarquizando en forma progresiva, destacándose los puertos del
comercio transatlántico, los centros mineros y algunos centros adminis-
trativos. Este crecimiento se debió más a la importancia que adquirieron
las ciudades que a un verdadero desarrollo económico de sus regiones.37
En el siglo XVII el número de fundaciones fue menor que en el siglo
anterior, en zonas de reciente colonización o que se trataban de recupe-
rar, como el sur de Chile; era una época de integración y afirmación de
las autonomías locales y del poder económico y político de sus elites.
Más adelante, a lo largo del siglo XVIII, la conformación de pequeños
poblados volvió a intensificarse. La política borbónica de fundación de
poblaciones en Indias se extendió a lo largo de todo el siglo y hasta
la primera década del XIX. Se perseguían dos objetivos centrales: a)
promover la vida en policía mediante la concentración de poblaciones
dispersas, y b) asegurar el dominio sobre territorios fronterizos, con el
fin de impedir la expansión de potencias rivales.38 En el caso del Río de
la Plata, se trató fundamentalmente de frenar la expansión de Portugal
sobre la Banda Oriental y el Paraguay. Se buscó, por tanto, la fundación
de villas y ciudades, pero fundamentalmente de plazas militares, que
también se denominaban plazas fuertes, fortines o presidios, que ga-
rantizaran la presencia, la defensa y el dominio territorial y que, con el
tiempo, constituirán la base poblaciones de futuras ciudades.39

37 MORSE, R. M. “El desarrollo urbano…”, cit.; ROMERO, José Luis Latinoamérica…cit.


38 NAVARRO GARCÍA, Luis “Poblamiento y colonización estratégica en el siglo
XVIII indiano”, en Temas Americanistas, núm. 11, 1994.
39 Sólo como ejemplos para el Río de la Plata, cfr. BARRAL, María E. y FRADKIN,
Raúl O. “Los pueblos y la construcción de las estructuras de poder institucional en
la campaña bonaerense (1785-1836)”, en FRADKIN, Raúl –director– El poder y
la vara. Estudios sobre la justicia y la construcción del Estado en el Buenos Ai-
res rural, 1780-1830, Prometeo Libros, Buenos Aires, 2007, pp. 25-58; CANEDO,
Mariana “Fortines y pueblos en Buenos Aires del siglo XVIII. ¿Una política de
30 Frontera urbana, frontera colonial

Para la América portuguesa, los núcleos urbanos del período no te-


nían planificación, y eran más bien producto de las circunstancias y de
los intereses de aquellos que llevaban adelante el proceso de poblamiento,
más que un resultado pensado y planeado por la Corona. Como señala
Schwartz, el proceso de ocupación territorial en Brasil no requirió de una
red de ciudades estrechamente conectadas, sino más bien se organizó en
torno a un “archipiélago de puertos”, cada uno rodeado por una zona agrí-
cola propia, y más vinculadas con Lisboa que entre ellas mismas. Recién
luego del descubrimiento de Minas Gerais, hacia el siglo XVIII la red
urbana comenzó a ampliarse hacia el interior.40 Según observa Prado, du-
rante el proceso de ocupación del Brasil, los núcleos urbanos carecieron
del fuerte sentido de reproducción del orden social, notoriamente jerar-
quizado, que había primado en el proceso hispanoamericano.41 Tanto las
ciudades ubicadas en las zonas dedicadas a la agricultura de plantación
como las situadas en los márgenes del territorio se desarrollaron en torno
de la economía de exportación; todos los centros principales eran puertos.
Con un mercado interno reducido y fuerte predominio de los latifundistas
sobre los demás grupos sociales, la ciudad se constituyó como punto de
pasaje del azúcar entre el ingenio y los puertos europeos. Las pocas po-
blaciones de carácter secundario constituían generalmente pequeños asen-
tamientos agrícolas, situados en zonas ribereñas o en puertos de poca im-
portancia, vinculados con los centros marítimos a través de la navegación
de cabotaje. La excepción fue São Paulo y los pueblos de la meseta, que
se desarrollaron como asentamientos interiores relativamente al margen
de la orientación exportadora del resto de la colonia. A lo largo del siglo
XVIII, sin embargo, la dimensión e influencia del poder centrado en la
ciudad comenzó a cambiar. Con la estructuración de un mercado interno
colonial y la existencia de una elite mercantil poderosa, las ciudades em-
pezaron a tener un importante papel como centros de comercio y crédito,
sede de poder político, centro religioso, es decir, con un papel central en la
estructuración y reproducción de la sociedad lusa en las colonias.

urbanización para la frontera?”, Mundo Agrario-Revista de Estudios Rurales, Vol.


7, núm. 13, pp.1 – 18, 2006 [en línea] https://www.mundoagrario.unlp.edu.ar/issue/
view/v07n13.
40 SCHWARTZ, Stuart B. “Brasil colonial: plantaciones y periferias, 1580-1750”, en
BETHELL, Leslie –editor– Historia de América Latina: América Latina Colonial,
Economía, T. III, Editorial Crítica, Barcelona, 1990, pp. 191 a 259.
41 PRADO, Fabricio Colônia do Sacramento..., cit., p. 78.
Introducción: Escalas de análisis y abordajes historiográficos 31

En el Brasil los núcleos urbanos se diferenciaron según su signifi-


cado administrativo. En las ciudades la vida política se centraba en el
senado da cámara; las cámaras controlaban todos los aspectos de la vida
municipal, y a menudo los de los campos de alrededores. Plaza era una
denominación militar y comercial: un núcleo militarizado, una ciudade-
la militar con finalidades comerciales o de colonización, como el caso de
las factorías africanas y los presidios en la costa atlántica sur en el siglo
XVIII. El presidio era una plaza de guerra, un fuerte administrado por
un comandante. La autoridad máxima en este núcleo era el gobernador.
Una plaza podía convertirse en una villa sin dejar de ser una plaza en el
sentido militar o comercial. La villa poseía una cámara, con sus oficiales
y jueces, que constituía un canal para que los grupos locales ejercieran
poder político, especialmente en el siglo XVIII. Una villa podía surgir
de la evolución de una comandancia militar, una fortaleza, tal el caso
de la villa de Río Grande. Una ciudad comprendía una villa verdadera-
mente desarrollada, que se convertía en núcleo regional e interregional
importante y pasaba a ser sede de instancias jurídicas más altas, disfru-
tando administrativamente de mayor autonomía. Tanto la ciudad como
la villa estaban sometidas administrativamente a una capitanía o podían
ser sede de una capitanía. La capitanía era una forma de administración
utilizada para controlar grandes territorios, donde se pretendía una ins-
talación duradera y relativamente pacífica. Según el uso de la época, la
parroquia era sinónimo de feligresía, el lugar de la ciudad o el campo
donde vivían los feligreses. La feligresía tenía una función aglutinadora,
referencia central de los poblados y reguladora para el registro de la po-
blación. Es por ello que se le reconocía gran importancia como recorte
administrativo dentro de la jurisdicción de la villa.42

42 Para mayores precisiones y usos de estos términos en América portuguesa cfr.


KÜHN, Fábio y COMISSOLI, Adriano “Administração na América portuguesa: a
expansão das fronteiras meridionais do império (1680-1808)”, en Revista de Histó-
ria, São Paulo, num. 169, 2013, p. 53-81 y OSÓRIO, Helen “A organização terri-
torial em um espaço de fronteira com o império espanhol e seu vocabulário. Notas
de pesquisa”, en Claves. Revista de Historia, Nº 1 Montevideo, 2015, pp. 67-90,
[en línea] http://www.revistaclaves.fhuce.edu.uy/index.php/Claves-FHCE/article/
view/16/8

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