Leonet Matiz Espinoza

Nace el 1 de abril de 1917 (Aracataca- Magdalena, Colombia)en el hogar de Julio Martínez y Eva
Espinoza. Acudió a la escuela en Ciénaga y completó su formación escolar en el Liceo Celedón en Santa
Marta.
En 1933 aun siendo adolescente era alentado a seguir una carrera artística en los principales diarios y
publicaciones de Santa Marta, Colombia. En las páginas de Civilización y la Voz de Magdalena,los
cronistas de la época ya destacaban las habilidades del dibujo , particularmente la caricatura dado a que
contaba con un maravilloso poder de síntesis.
El 15 de julio de 1933 Leonet Matiz tiene su primera exposición individual en la confitería y Café
excelsior,donde presentó una serie de caricaturas- varias con lápiz y otras con pluma- cuya modernidad
visual provocó que fuese llamado “cubista” de influencias Cubanas y Argentinas tales como Rafael
Valdivia, expresionismo Alemán, tendencia estilística con la que debió identificarse por la forma en la que
privilegiaba el dibujo y acentuó los gestos de la línea, a la manera de la caricatura. (Influencia de la
pintura de artistas latinoamericanos como: Carlos Mérida y Adolfo Best Maugard.

Leonet decide tomar el nombre artístico de “Leo” Matiz para probar suerte en la capital del país.
En 1934 se unió a la iniciativa de fundar una revista literaria y humorística con varios intelectuales; bajo
el nombre de Lauros, publicaba crítica político-social y algunos dibujos de Matiz.

En 1935 La Nación de Barranquilla daba cuenta de su segunda exposición en los elegantes salones del
Café estrella, donde mostro caricaturas de políticos Nacionales e incluso una de Hitler.
En 1937, el Ministerio de Educación lo invitó a participar en una campaña de cine educativo; dado a su
reciente incursión en la fotografía, pero Matiz decidió seguir exhibiendo sus caricaturas, presentando en
septiembre una exposición en los salones del Teatro Variedades, donde mostro trabajos litográficos,
apuntes de viaje, aguafuertes, y quizá incluso fotografía que le significó elogiosos comentarios de la
crítica:
Mario Madrid Malo reseñó:
En 1938 Debutó como fotógrafo para la revista Santa Fe.
Portada de de julio de 1938
Leo Matiz debutaba como fotógrafo de gran modernidad visual, gracias a la experiencia analítica que
había desarrollado antes como diestro caricaturista
De la noche a la mañana paso a ser el fotorreportero más reconocido lo llamaban “ángulo Matiz” y
“Cámarita” dado a que se le veía por todas partes con su cámara Kodak .
Desde sus primeras fotografías, inspiradas por la fuerza visual del artista Luis B. Ramos.. La fotografía
de Ramos se caracterizó por su interés social y nacionalista, reflejado, por ejemplo, en las series de los
campesinos de Boyacá y Cundinamarca. En ellas, Ramos fotografió a los campesinos en sus actividades
cotidianas eliminando la pose, que se había convertido en un elemento recurrente en la fotografía
colombiana; por el contrario, Ramos captó la esencia de sus “protagonistas de manera más natural”.
El “efecto Matiz”, como es reconocido hoy en día, se deriva directamente de su maestro Luis B. Ramos y
consiste en el uso constante del contrapicado así como de diagonales marcadas en la composición de
las imágenes.
Se establecen también conexiones con otros artistas de la época, como Alipio Jaramillo, Ignacio Gómez
Jaramillo, Luis Alberto Acuña, Fernando Botero, David Alfaro Siqueiros, Omar Rayo, Julio Abril, Jesús
Soto, Alejandro Otero, Carlos Cruz Diez y Julio Le Parc, que permiten articular diferentes momentos de
su creación.

si bien es cierto que, en medios como la pintura y la escultura, las primeras aproximaciones modernistas
empezaron a surgir en Colombia durante las décadas del cuarenta y cincuenta, este mismo fenómeno
artístico se concretó en el medio fotográfico un par de años antes por medio del trabajo del fotógrafo Leo
Matiz (1917-1998). Sus fotos abstractas anticiparon el nacimiento de la pintura de este mismo carácter
en Colombia y su iniciativa apoyó la promoción y difusión de las artes plásticas de vanguardia a través
de su propia galería. 
1939 año en el que la abstracción no había permeado ni siquiera la pintura en Colombia, Matiz se acercó
a la fotografía abstracta de manera intuitiva Matiz jugó justamente con esa serialidad hasta el punto de
volverla abstracta. Sus imágenes no sólo se compusieron de patrones materiales, como es el caso de
Abstracto, Venezuela (1951), sino también de juegos de luz y sombra, como es evidente en Polígono,
Venezuela (1950)
sus composiciones abstractas características de sus años de trabajo en grandes firmas industriales,en
Venezuela y Colombia se caracterizaron justamente por resaltar la noción de progreso

Todas sus fotografías abstractas comparten tanto las estrategias para llegar a la abstracción como las
principales características de su estilo reflejado, por ejemplo, en la desfamiliarización de los sujetos, la
repetición y multiplicación de los objetos, el énfasis en los detalles, estrategias en el cuarto oscuro y el
uso de asociaciones espontáneas.

En marzo de 1939, Leo Matiz abrió un taller de dibujo para las artes gráficas en el edificio Bazar
Veracruz, en compañía del escultor Julio Abril. Meses después Julio Abril obtiene una beca para
continuar sus estudios en México y Matiz encontró la oportunidad que estaba buscando para irse al
extranjero, aunque no obtuvo apoyos de entidades Colombianas y tuvo que emprender el viaje por sus
propios medios. el 20 de agosto de 1940 abandonó el país.
Antes de llegar a México Matiz se detuvo en Panamá, Costa Rica y el Salvador. Poseían una auténtica
alma hispanoamericana (…) con tal fuerza y personalidad que nos hacen sentirnos completamente
distintos de los americanos precolombinos, como de los españoles(…)como sólo encontramos en la
pintura Méxicana.
En enero de 1941 Matiz llega a México con credenciales de reportero para el diario colombiano El
tiempo, sus obras fueron incluidas en una exposición con motivo de CXXXI aniversario de Colombia en el
Palacio de Bellas Artes de la Ciudad de México.
Si bien las fotografías de los tempranos años cuarenta tienen resabios de la corriente pictórica- en donde
el fotógrafo aún persigue efectos pictóricos con la imagen –pronto Leo Matiz supera las ineficiencias del
preciosismo de los detalles y concentra sus esfuerzos en el manejo de la composición. El “efecto Matiz” ,
como llegó a conocerse en el medio de los reporteros gráficos de los años cuarenta, radicaba en el uso
de un punto bajo y en marcadas diagonales desde donde el artista accionaba el obturador de la cámara;
resultando fotografías en las que (aunque tratan temas convencionales como niños en paisajes del
campo) la composición se torna grandilocuente y el manejo del celaje de las nubes recuerdan mucho las
soluciones de espacio en el trabajo de los pintores murales.
Leo Matiz fue asimilando para la fotografía un enorme caudal de lecciones estéticas a partir de la pintura
moderna Méxicana ,
Matiz viaja a los estados unidos a perfeccionar las técnicas de cine y fotografía Para 1944 el advertising
club de Nueva York presentaba una exposición individual del fotógrafo Leo Matiz exhibition
1945 se le otorga diversos premios por parte de asociaciones gremiales que convocaban a los fotógrafos
de prensa en México , en este mismo año Matiz empezó a realizar viajes a Sudamérica
1947. Se vincula a la revista Selecciones del Reader’s Digest, que lo lleva a trabajar en varios países de
Latinoamérica. Después de visitar una exposición de David Alfaro Siqueiros en el Palacio de Bellas
Artes, Leo Matiz acusa de plagio al artista en la Revista de América, en el mes de noviembre. El litigio
revela un malentendido alrededor del papel de la fotografía en el método muralista. Debido a la amplitud
del escándalo ocasionado por su denuncia y tras el incendio de su estudio, Matiz decide irse de México.

1978. Víctima de un violento asalto en Bogotá, pierde el ojo izquierdo y abandona el ejercicio de la
fotografía. Matiz cuenta este suceso en varias entrevistas como la realización de una premonición que
había tenido años antes en un sueño.

1998. Muere el 24 de octubre en Bogotá, a la edad de 81 años.