Facultad de teología Introducción a métodos teológicos German Alonso Vera Peña
Teoría del conocimiento teológico
Dentro de la introducción que realiza José Vidal sobre la teoría del conocimiento, hace una contextualización sobre dicha teoría que es la reflexión crítica sobre el conocer humano, sobre su esencia y su capacidad de acceder a la verdad. Y es que la episteme del ser humano tiene su historia y no hay una teoría universal del conocimiento, pues cada ser humano por su naturaleza y su libre albedrio, puede pensar de una u otra forma, existen pues, en este sentido algunas generalidades que entre personas pueden tener, pero no una generalidad de comportamiento humano y menos una forma de pensar universal. Ahora mismo, en teología se ve de la misma forma, ha hecho su propia historia, en algunos momentos enfrentándose a nuevos retos y a aquellas novedades que se imponían en la sociedad, y en otras ocasiones siendo ella misma la protagonista en el campo del conocimiento, tanto filosófico como científico, desde el concilio del Vaticano I se invita a los creyentes a caminar, a seguir avanzando en la fe y en el sentir religioso, dejando a un lado el racionalismo y el fideísmo que tanto daño hizo a aquellos más humildes y más sencillos de recibir la palabra de Dios. Por otra parte, se ve la preocupación por realizar una nueva teología desde el quehacer del conocimiento, así se puede evidenciar en Melchor Cano, la forma de interpretar los lugares Teológicos y sus fuentes de conocimiento. Siempre se va a hablar de la palabra de Dios, y esta palabra se da en plenitud en la obra redentora de Jesucristo, de la revelación de sí mismo y de su plan de salvación. A partir del Concilio Vaticano I y sobre todo en el Segundo Vaticano se quiere realizar una teología más pura, más enraizada en el sentir del magisterio y de las fuentes que puede haber sobre la teología. Si dejar a un lado las fuentes principales del método teológico. Y es que Lang había hecho un estudio sobre los lugares teológicos propuestos por Melchor Cano y aparte realiza un estudio sobre la teoría de los principios teológicos de la escolástica medieval. Así mismo Lang realiza un escrito sobre los preámbulos de la fe, o también se le denomina, filosofía de la religión de acuerdo con la teología católica. Y esto lleva al teólogo a seguir actuando y no quedarse simplemente con aquellas opiniones históricas que pueden estar sujetas a discusión y que hacen en este sentido perder el trabajo de teólogos que se dedican a la investigación. Siempre deben encaminar su conocimiento en virtud del sentir del magisterio que ha de estar vivo identificado con el proceso de tradición que va de Cristo a los Apóstoles y de ellos a la iglesia. Pero que esto no se puede quedar simplemente en ayudas para el investigador actual, sino que han de ser fuentes primordiales y de inspiración a una fundamentación esencial de la fe. Ahora bien, en este aspecto de la teología católica hay que tocar el tema de la representación protestante y su caso representativo se encuentra K Barth, quien va a reaccionar en contra de la llamada teología liberal; esta teología ve en Jesucristo la verificación histórica y el símbolo sin igual de las aspiraciones religiosas más universales, aunque se queda en el campo meramente antropológico de la persona de Jesucristo. En este aspecto pone en peligro aspectos fundamentales dentro de la religión católica como lo es la revelación y la fe, y todo esto lo expone desde el planteamiento de la teología dialéctica, en donde plantea la sustracción de Dios a todo acto racional del ser humano. Así mismo otro, teólogos de la misma línea de éste, pero que matizan el radicalismo gnoseológico de Barth, y asumen el valor de una nueva hermenéutica existencial, histórica o filosófica