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MARXISMO Y 1

PENSAMIENTO CRÍTICO
PRINCIPALES HERRAMIENTAS TEÓRICAS PARA EL CAMBIO SOCIAL
Cartilla de formación
marzo - abril 2009

Frente Popular Darío Santillán


w w w. f r e n t e d a r i o s a n t i l l a n . o r g
“Con sus prácticas militantes y sus actividades de
formación el FPDS encara el problema de la
construcción de una nueva conciencia. Sin esa
nueva conciencia, será imposible plantearse
la transformación de las estructuras opresivas
y las relaciones de explotación.”

En esta cartilla:
Primer encuentro
El marxismo. Los conceptos básicos y dinámicos del marxis-
mo: dialéctica, materialismo, filosofía, alienación, ideología,
modo de producción. La dialéctica y el dogma. La categoría de
totalidad. Cuestiones de Método. Sobre los usos del marxismo.
Los usos “acomodaticios”.

Segundo encuentro
El capitalismo. Teoría del valor. La mercancía como valor
de uso y valor. El trabajo como contenido de la forma mer-
cancía. El carácter bifacético del trabajo. El dinero. Trabajo
asalariado. Condiciones básicas del capital. Relaciones
sociales de producción capitalistas. Teoría del plusvalor. La
fórmula general del capital (D-M-D’). De la circulación a la
producción. Trabajo necesario y trabajo excedente.
Acumulación de capital, competencia y explotación.
Plusvalor absoluto y relativo. La lucha de clases y el des-
arrollo de las fuerzas productivas. El ciclo industrial, el ejér-
cito industrial de reserva y las luchas por el salario. La acu-
mulación originaria, la violencia como fuerza económica y la
constitución del mercado mundial capitalista.
Índice

Presentación...................................................................................................3

PRIMER ENCUENTRO
Marx, marxismos y pensamiento crítico. ¿Por qué el marxismo?
Area de formación del FPDS............................................................................5

Guía para la interpretación del texto .............................................................20

La Ideología Alemana (selección)


Carlos Marx y Federico Engels.......................................................................21

Tesis sobre Feuerbach


Carlos Marx ..................................................................................................35

Prólogo a la Contribución a la Crítica de la Economía Política


Carlos Marx...................................................................................................37

Carta de Federico Engels a José Bloch (selección) .................................... 43

Anexo: Extractos del libro Marx para principiantes de Rius ....................... 45

Cronología de las principales obras escritas por Carlos Marx ...................... 52

SEGUNDO ENCUENTRO
El Capitalismo. Introducción a la selección de textos de El Capital de
Carlos Marx
Area de formación del FPDS..........................................................................53

Guía para la interpretación del texto .............................................................66

El Capital. Crítica de la Economía Política. Libro Primero.


El proceso de producción del capital. (selección)
Carlos Marx....... ...........................................................................................67

Anexo: Extractos del libro El Capital. Dibujos e historietas


de Max y Mir sobre "El Capital", Libro primero, de Carlos Marx.............. 97
Presentación - 3

Presentación del curso


de formación 2009

El énfasis puesto por el FPDS en el desarro- por un conjunto de rasgos que se fueron defi-
llo de espacios de formación puede explicarse niendo en el transcurso de una experiencia
a partir de un planteo central del Che: la histórica de organización y de lucha concreta.
necesidad de la conciencia como factor del
desarrollo de una revolución socialista. Esto
es, la necesidad de comenzar a formarnos Objetivos generales de la Escuela de
como hombres y mujeres nuevos, aquí y Formación del FPDS
ahora. Porque el hombre y la mujer nuevos
no son sólo el efecto de la sociedad auto- 1. Desarrollar en cada compañero y cada
emancipada, también son su condición. compañera el sentido de responsabilidad
individual y colectiva en el proceso de des-
Con sus actividades de formación y sus arrollo de la auto-conciencia y la conciencia.
prácticas militantes el FPDS encara el proble- Asumir que el estudio ininterrumpido es un
ma de la construcción de una nueva concien- medio para apropiarnos de la realidad, para
cia. Sin esa nueva conciencia, será imposible desarrollar la conciencia, y para transformar
plantearse la transformación de las estructu- la realidad.
ras opresivas y las relaciones de explotación.
2. Desarrollar la capacidad de análisis,
La tarea de formación debe estar basada en interpretación y crítica, para que las compa-
la práctica social y servir para forjarnos como ñeras y los compañeros, militantes de los
nuevos seres humanos, indudablemente diferentes espacios que componen el FPDS,
debe ser permanente y debe estar alejada de puedan manejarse en forma autónoma frente
todo recetismo y “bajada de línea”. Un riesgo a las diferentes situaciones planteadas por
es la simplificación que muchas veces, en las luchas sociales y políticas. En este senti-
aras de la “claridad”, anula la creatividad y la do la Escuela de Formación del FPDS, se
responsabilidad. Al respecto decía el Che, que niega a cualquier forma de conductismo: no
lo que “entiende todo el mundo” es lo que proporciona ni trata de imponer líneas, rece-
“entienden los funcionarios”. La claridad para tas, manuales, etc.
nosotros es sinónimo de la masificación de
los saberes, de la construcción conjunta de 3. Desarrollar la conciencia colectiva de la
los mismos y de la praxis. La claridad tiene capacidad transformadora que poseen los
como fin la utilización autónoma y creativa de seres humanos como sujetos sociales hacede-
las herramientas y las categorías de análisis. ros de la historia y de su propio lugar como
protagonistas de los cambios.
Finalmente, asumimos una perspectiva y
una parcialidad en nuestra concepción de la 4. Valorar el aporte del marxismo y de sus
formación. La encaramos desde un conjunto corrientes no dogmáticas y otras vertientes
de prácticas geopolíticamente situadas, desde del pensamiento emancipador a la compren-
una comunidad socio – política poseedora de sión de los problemas de las sociedades pre-
una identidad muy básica pero distinguible sentes, de las lógicas y mecanismos y que
4- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

rigen su funcionamiento. lencia como fuerza económica y la constitu-


ción del mercado mundial capitalista.
5. Analizar y comprender las sociedades
como totalidades complejas y contradictorias 3. Estado. Poder. Dominación. Estado y
en las cuales las instancias económicas, polí- sociedad civil. Visión instrumental, estructu-
ticas, sociales e ideológicas se interrelacionan ral y política del Estado. Debates en torno a la
en un proceso que modela los cambios a lo cuestión estatal. Autonomía y Estado. El
largo del tiempo. poder popular.
6. Avanzar en la comprensión de la dimen- 4. Clase - Sujeto. Sujeto y agencia históri-
sión del Estado capitalista, de sus diferentes ca. Sujetos fuertes y débiles. Sobre la subal-
manifestaciones y encarnaduras y de las dife- ternidad. Las dimensiones del sujeto de la
rentes concepciones sobre su naturaleza y su emancipación social y de la Lucha de clases.
función específica. “Lucha” y clases.
7. Abordar la resolución de problemas apli- 5. Hegemonía - Ideología – Conciencia. La
cando los procedimientos básicos de la inda- ideología como falsa conciencia, la ideología
gación y utilizando de manera crítica diversas como alienación (separación entre teoría y
fuentes y medios de información y comunica- práctica). Otros significados de la ideología en
ción. la tradición marxista. La crítica a la analogía
del reflejo. La ideología como parte de lo real.
La ideología en el marco del modo de produc-
ción capitalista. Teorías de la ideología.
Ejes temáticos: ¿Ideologías revolucionarias? Ideología y cul-
1. El marxismo. Los conceptos básicos y tura. Cultura y contracultura – hegemonía y
dinámicos del marxismo: dialéctica, materia- contrahegemonía. La ideología como parte
lismo, filosofía, alienación, ideología, modo de del proceso de producción.
producción. La dialéctica y el dogma. La cate- 6. Imperialismo – Nación. Teorías del impe-
goría de totalidad. Cuestiones de Método. rialismo. el debate al principio del siglo XX y
Sobre los usos del marxismo. Los usos “aco- en la actualidad. La “cuestión nacional” en la
modaticios”. actualidad. Lo nacional y lo global. La cate-
2. El capitalismo. Teoría del valor. La mer- goría de globalización. Soberanía y autono-
cancía como valor de uso y valor. El trabajo mía. La nación – popular democrática y el
como contenido de la forma mercancía. El internacionalismo. ¿Puede haber una idea no
carácter bifacético del trabajo. El dinero. burguesa de Nación? Sobre el internaciona-
Trabajo asalariado. Condiciones básicas del lismo.
capital. Relaciones sociales de producción 7. Política revolucionaria y poder popular.
capitalistas. Teoría del plusvalor. La fórmula Herramientas políticas. Movimiento – institu-
general del capital (D-M-D’). De la circulación ciones. Movimien-tos, partidos, sindicatos,
a la producción. Trabajo necesario y trabajo etc... Procesos de burocratización. El “partido
excedente. Acumulación de capital, compe- científico”. La política como concreción de
tencia y explotación. Plusvalor absoluto y una verdad o como apuesta. Relación entre
relativo. La lucha de clases y el desarrollo de concepciones del poder, el Estado, etc., y las
las fuerzas productivas. El ciclo industrial, el herramientas. El analisis de la correlación de
ejército industrial de reserva y las luchas por fuerzas y las diferencias entre coyuntura,
el salario. La acumulación originaria, la vio- etapa y epoca.
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 5

Marx, marxismos y pensamiento crítico


¿Por qué el marxismo?
Por Área de Formación del FPDS

Un fantasma sigue recorriendo aún el mundo(*), incansable e imposible de exorcisar,


lleva diferentes nombres y se cuenta en distintas lenguas . Entre otros, se sabe, se lo ha
conocido y se lo conoce como comunismo. En sus pliegues resuenan rostros y palabras,
entre tantos un lugar destacado le cabe a la imagen barbada de Karl “Carlos” Marx (1818-
1883) y a la corriente de pensamiento iniciada con sus escritos y que recibe el nombre
de “marxismo”. Maldecidos y canonizados, temor de los palacios y huésped de honor en
los tugurios (Brecht, 1945), los espectros de Marx se encuentran entre las rebeldías y las
insumisiones que tienen lugar en tantos lugares. Algunos de los conceptos e ideas del
marxismo, muchos de sus “santos y señas”, son conocidos por tod@s nosotr@s. La sim-
ple operación de rememorarlos configura ya un verdadero rompecabezas que asume for-
mas diversas y que convoca a sentidos distintos.

Entre otros, estos sentidos interrogan tam- de Estado, especialmente en su utilización por
bién sobre las diferentes maneras y experien- la experiencia del estalinismo en la URSS. En
cias históricas en las que el marxismo ha sido éste y otros sentidos, muchas veces fue con-
considerado y utilizado. Así, desde ciertas vertido también en dogma, en receta para la
perspectivas se lo ha presentado y defendido repetición y el aprendizaje disciplinante.
como una teoría científica, enfatizando el Contra estas malversaciones, el espíritu trans-
carácter de verdad catedrática de su método formador del marxismo conmina a no consi-
y sus elaboraciones. Sin embargo, como se ha derarlo ni como una teoría cerrada en sí
señalado, el marxismo no se deja clasificar en misma, homogénea y estática; ni como un libro
sagrado que debe ser descifrado o interpreta-
ninguno de los cajones habituales del sistema
do correctamente. Desde esta mirada, deberí-
de las ciencias establecidas; no es propiamen-
amos considerarlo en realidad como un
te ni una “economía”, ni una “filosofía”, ni una
campo de reflexión en el que conviven dife-
“historia”, ni una “sociología”, ni una combina- rentes perspectivas y corrientes, y es justa-
ción de éstas. Más aún, la principal obra de
Marx es desde el principio al fin una “crítica”
de la economía política (Korsh, 1980).

También el marxismo ha sido considerado


* De manera similar comienza el Manifiesto
Comunista escrito por Marx y Engels en 1847. El
mismo dice en su párrafo inicial: “Un fantasma
una ideología; y, en particular, una ideología recorre Europa: el fantasma del comunismo”.
6- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

mente por ello que vale entenderlo también rentes sujetos y en el terreno de las concien-
en plural, como los marxismos. cias.

Conocimiento crítico de la sociedad, guía 2) En segundo lugar, en el cuestionamiento


para la praxis transformadora, crecido y vin- a la falaz escisión entre conocimiento y
culado junto y en la lucha de los sectores acción y, consecuentemente, a la postulación
oprimidos y explotados por su liberación, de una neutralidad valorativa como caracte-
unida su suerte a la misma batalla, el marxis- rística esencial del conocimiento verdadero
mo en plural refiere así a uno de los esfuer- cuyo escalón más alto –en verdad y jerarquía-
zos colectivos e históricos en el terreno del le correspondería al conocimiento científico.
pensamiento y la reflexión más importantes, Por el contrario, ya Marx en sus Tesis sobre
consistentes y ricos en la batalla por el cam- Feuerbach (ver texto en bibliografía) habrá de
bio social y la construcción de la emancipa- resaltar el papel de la praxis transformadora
ción. Es, en esta perspectiva, que reclama su como núcleo central de la perspectiva crítica;
condición de teoría de la rebelión y de la y, en ese sentido, afirmará que todo conoci-
transformación. Es, en este espíritu, que nos miento es toma de partido y, consiguiente-
aproximamos a los aportes de Marx y del mente, se inscribe en la lucha social y debe
marxismo que pretendemos abordar a lo ser considerado a la luz de la misma.
largo del presente curso.
3) El tercer lugar le corresponde al papel de
la crítica, del cuestionamiento, del debate y de
la creación en la vitalidad del pensamiento
Los contornos del marxismo y del pensa- marxista. No sólo la vida y el estilo polemista
miento crítico de Marx son un ejemplo de ello, sino que, aún
Es posible entonces referir a ciertos ele- más, éste supo constituir a la crítica como
mentos que fundarían la identidad propia del principio de su método de análisis y reflexión,
marxismo conjugado en plural, de esta familia lo que se reflejó en el reiterado uso de esa
de marxismos. En esta dirección ciertamente palabra en muchos de sus estudios. En este
habría que hacer referencia, por lo menos, a sentido, también valdrá recordar una vez más
cuatro dimensiones que también sirven, en la frase de José Carlos Mariategui (1894-
cierta medida, a delimitar las fronteras del 1930), aquél que fuera considerado por algu-
pensamiento crítico. nos como el verdadero fundador del marxis-
mo latinoamericano (Löwy, 1999), en la que
1) En primer lugar, al acuerdo sobre la exis- afirma que “no queremos, ciertamente, que el
tencia –objetiva- que tienen las relaciones de socialismo sea en América calco y copia.
explotación y opresión en la historia presen- Debe ser creación heroica. Tenemos que dar
te y pasada de la humanidad y particularmen- vida, con nuestra propia realidad, en nuestro
te en su papel en las sociedades capitalistas, propio lenguaje, al socialismo indoamericano.
más allá de cómo estas relaciones -de explo- He aquí una misión digna de una generación
tación y opresión- sean referidas por los dife- nueva” (Mariátegui, 1971). Podríamos también
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 7

mencionar al esfuerzo del Che (Ernesto Marx surge en debate y ruptura con la filoso-
“Che” Guevara, 1928–1967) por dar vida a la fía hegeliana alemana, con las corrientes
construcción de una sociedad socialista en la socialistas y anarquistas que hacían de su cen-
Cuba revolucionaria contraria a toda imita- tro político continental el París de la época y
ción del modelo de la Unión Soviética y de con la economía política inglesa y sus princi-
todo burocratismo. Y a tant@s otr@s. pales representantes: Adam Smith y David
Ricardo. En cierta medida, esta imagen da
4) Finalmente, el marxismo se afirma tam- cuenta del camino que lo conduce hasta su
bién como una ética emancipatoria, y nueva- destino final en Londres. En este tránsito, los
mente aquí la figura del Che surge como un casi quinces meses que vive en París (1843-
ejemplo inevitable. Pocos como él no sólo la 45) serán intensos. Allí entrará en contacto
practicaron a rajatabla sino que se propusie- con las corrientes socialistas y anarquistas y
ron proyectarla en el terreno político-social con el movimiento obrero de su tiempo,
enfatizando el papel central que le cabe al conocerá y trabará amistad con Federico
“hombre nuevo” en la construcción de esa Engels (Friedrich Engels, 1820–1895), y parti-
otra sociedad ambicionada. cipará de la fundación y publicación de los
Anales Franco-alemanes primero y del perió-
dico Vorwärts (Adelante en alemán) después.
¿Quién fue Carlos Marx? Justamente, por esta publicación y bajo pre-
sión del gobierno alemán será finalmente
Carlos Marx nació en la pequeña ciudad de expulsado de Francia viajando a Bruselas,
Tréveris, en la Renania prusiana (Alemania) en Bélgica. En su estancia de casi tres años en
1818. Siguiendo sus estudios universitarios en dicha ciudad Marx habrá de concluir su críti-
Derecho y Filosofía viajará a Bonn primero y ca y ruptura con la filosofía hegeliana y
luego a Berlín (1836). En el contexto de la comenzar a profundizar sus estudios sobre
actividad universitaria y cultural de esta ciu- economía y sobre el funcionamiento del capi-
dad, Marx participará en lo que fuera un talismo que culminarán luego en su obra “El
amplio movimiento de cuestionamiento a la Capital”. Pero, también, en Bruselas habrá de
monarquía prusiana y su estado confesional promover la fundación y participar de la lla-
que lo llevará desde posiciones liberales a la mada “Liga de los Comunistas” y escribirá
defensa de un democratismo radical y de junto con Engels su declaración: el Manifiesto
izquierda. En este camino, se destaca su cola- Comunista (1847). Cuando la insurrección
boración primero (1841) y luego la dirección popular en París de 1848 y su proyección al
del periódico la “Gazeta Renana” (1842). El resto del continente europeo fueron derrota-
cierre del periódico por la censura monárqui- das, Marx –luego de haber acompañado su
ca y los límites del movimiento liberal en despliegue con su estadía en la ciudad alema-
Alemania lo llevarán a trasladarse a París na de Colonia y la publicación del periódico
(1843), iniciando así un derrotero político- “Nueva Gazeta Renana”- iniciará su último
intelectual que estará marcado por sucesivos viaje, esta vez a Londres (1849). Allí permane-
exilios. Se suele decir que la elaboración de cerá hasta su muerte en 1883, dedicando sus
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esfuerzos, primero a una serie de obras capitalista, la derrota del ciclo de luchas ante-
donde examinará la experiencia de la emer- rior y la afirmación del estalinismo, hubo de
gencia y derrota del levantamiento social en afirmarse en la tradición del marxismo euro-
París y Francia entre 1848 y 1852, para con- peo un marxismo académico que, aún sin
centrarse luego en sus estudios sobre econo- negar sus vínculos con la luchas sociales, no
mía política que fructificarán, entre otras participaba directamente en las construccio-
obras, en la publicación del primer tomo de nes político-partidarias ni sociales. Esta cuar-
“El Capital” en 1867. En Londres también ta generación de marxistas europeos -que
promoverá la fundación y participará activa- agrupa entre otros a Jean Paul Sartre,
mente de la Asociación Internacional de los Theodor Adorno y Louis Althusser- será así
Trabajadores (1864-1876) conocida luego llamada bajo cierta mirada eurocéntrica el
como la Iº Internacional redactando entre “marxismo occidental”. Pero el surgimiento
otros su Manifiesto Inaugural y seguirá la de un marxismo académico distinto del mar-
gesta de la insurrección parisina conocida xismo político y militante no será solo una
como la Comuna de París (1871) sobre la que construcción europea. También en América
reflexionará en su escrito La guerra civil en Latina puede detectarse un marxismo que se
Francia. Agobiado por la enfermedad en sus constituía y desarrollaba en las aulas universi-
últimos años, el último Marx enfocará su inte-
tarias, división que se reitera y profundiza en
rés en la periferia del centro capitalista euro-
cada momento de reflujo y retroceso de la
peo: en el proceso en Rusia y su intercambio
lucha social. Partiendo de ello sería un error
con los populistas rusos, en la realidad irlan-
tanto convalidar la escisión entre un saber
desa y en los estudios sobre pueblos y cultu-
(científico y verdadero) y un hacer (político y
ras del mundo (etnología). Su vida estará mar-
militante), como negar la dimensión de lucha
cada así por ese indisoluble compromiso inte-
lectual y político cristalizado en la combina- en el terreno de las instituciones académicas
ción de una dedicada y profunda elaboración y la de producción de conocimiento (y de la
teórica y una intensa militancia cotidiana. reflexión marxista) por parte de los militan-
(Para una cronología de sus principales obras tes y activistas. En este sentido, la pretensión
ver la bibliografía). de carácter científico por parte del marxismo
ha conllevado la más de las veces la imposi-
ción de una jerarquía de saberes y una autoa-
signada calificación de verdad por la simple
Los marxismos
validación de sus dichos por la institución
Esta característica de combinar la produc- académica. Ello no obsta reconocer, por otro
ción intelectual con la actividad política será lado, la importancia de la recuperación y dis-
un elemento distintivo de diferentes genera- puta de los términos de “teoría” y “ciencia”
ciones de marxistas europeos que siguieron a por parte del marxismo crítico así como
Carlos Marx. Recién a posteriori de la entender la calificación de “ciencia” en rela-
Segunda Guerra Mundial, en el marco de las ción con su método de investigación y elabo-
particularidades que signarán a la sociedad ración.
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 9

Por otro lado, el carácter plural del marxis- diferencias también deben ser consideradas a
mo, de los marxismos; también refiere a las la luz de los dos “espíritus” que tensionan el
distintas perspectivas, corrientes y escuelas pensar y hacer crítico; aquel de la parte
que caracterizan este pensamiento. Valga caliente, crítica, y transformadora y ese otro
como ejemplo mencionar la diversidad de de la parte fría, conservadora, jerarquizante.
marxismos europeos que pueden identificar- Así, la pluralidad de marxismos refiere tam-
se entre las décadas de 1970 y ´80 en una bién a las diferencias que marca el agrupa-
cuenta de la que no podrían faltar la escuela miento, por un lado, de los marxismos positi-
de Frankfurt, la de Budapest, la de la deriva- vistas, cientificistas, de cuño reformistas o
ción, el marxismo analítico anglosajón, el reaccionarios; a aquellos convocados como
estructuralismo francés de cuño althusseria- “ideología estatal” de los regímenes del
no, el historicismo italiano e inglés, el llamado “socialismo real” y como dogmas incuestio-
marxismo abierto y el autonomismo obrero nables de la doctrina oficial. Y, por el otro
italiano. O pensemos en las diferentes lado, a los marxismos rebeldes y revoluciona-
corrientes de una antología del pensamiento rios, críticos y transformadores, que se enhe-
marxista en América Latina a lo largo del siglo bran con las luchas emancipatorias y contri-
XX, desde las diferentes tradiciones político- buyen a su desarrollo.Y, aunque de una mane-
partidarias (socialismo, comunismo, trotskis- ra muy distinta a esta contraposición, también
mo, guevarismo, entre otras) hasta los distin- la tensión entre el peso de los elementos
tos aportes que pueden agruparse por ejem- conservadores de ciertas épocas y la pers-
plo bajo la llamada teoría de la dependencia pectiva crítica puede rastrearse al interior de
de las décadas de los ´60 y ´70. En este senti- la reflexión de muchos de los renombrados
do, hasta podemos referirnos a la existencia pensadores marxistas, incluido en algunos
de un marxismo latinoamericano, que fuera casos el propio Marx, que no resulta salvado
caracterizado por los estudios y los debates de ello por su incuestionable genio ni por ser
alrededor de diferentes cuestiones, entre las el iniciador del movimiento, tal como vere-
que pueden mencionarse la identificación de mos también a lo largo del curso.
la conformación económico-social, las clases
y los movimientos sociales de origen popular;
el papel de las burguesías locales, el imperia- Marxismos y pensamiento crítico
lismo y subimperialismo; y el valor del socia-
lismo y de los horizontes emancipatorios a la El campo de los marxismos no sólo no
luz de las particularidades de los períodos puede considerarse ni homogéneo ni estático
transicionales de cambio y la discusión sobre sino que tampoco puede pensarse como un
su división en etapas. compartimento cerrado sobre sí mismo. No
sólo porque su permanente ejercicio de críti-
Ciertamente el reconocimiento de esta ca de la realidad y articulación con las prácti-
pluralidad no significa adoptar un punto de cas sociales de los oprimidos lo conduce a un
vista ecléctico o relativista respecto de dicha debate y cuestionamiento riguroso de las
diversidad de marxismos. En particular, estas ideas, teorías y cosmovisiones sistémicas y
10- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

conservadoras. Sino también por que los rá de manifiesto en las diferentes perspectivas
marxismos se alimentan de un diálogo indiso- que serán abordadas a lo largo del mismo y
luble con otras corrientes de pensamiento que teñirán también las distintas reuniones.
que sin ser o reconocerse marxistas forman
parte de una familia más amplia que puede lla-
marse la del “pensamiento crítico”. En esta El materialismo histórico
dirección, por ejemplo, vale considerar las
múltiples relaciones entre el marxismo y el La crítica a la ideología alemana
psicoanálisis indispensables si se trata de
reflexionar sobre las cuestiones de la subjeti- Otro de los principales aportes de Marx -
vidad y la conciencia en ruptura con el racio- que será también una de las marcas de identi-
nalismo egoísta individualista y a la luz de las dad del pensamiento marxista- habrá de ser lo
consideraciones sobre el “inconsciente”. En que se conoce como “materialismo histórico”;
similar camino marchan los debates e inter- es decir la perspectiva -teórica y metodológi-
cambios entre el marxismo y el anarquismo, ca- para analizar la historia y los procesos
el nacionalismo revolucionario o la teología sociales. Una de las obras clásicas donde se
de la liberación, así como con otras tradicio- formulan las ideas centrales de este “materia-
nes de lucha. Asimismo, no debemos olvidar la lismo histórico” es la conocida por el nombre
estrecha relación y vinculaciones que los mar- de “La Ideología Alemana” (se incluye una
xismos cultivaron y cultivan con el feminismo selección de fragmentos a continuación).
o con el indigenismo, claves para pensar la Escrita por Carlos Marx y Federico Engels
emancipación en sus especificidades y en la entre 1845 y 1846 durante su estancia en
multiplicidad de los sentidos que ésta implica. Bruselas, Bélgica, y más allá de que no haya sido
Son estos diálogos los que enriquecen y vita- publicada en vida de sus autores –lo que se
lizan al pensamiento crítico. refleja en su estilo sinuoso– hubo de permitir-
le a ambos explicitar sus diferencias con la filo-
Bajo estas premisas, si consideramos al sofía idealista del filósofo alemán Hegel (Georg
marxismo como instrumento para compren- Wilhelm Friedrich Hegel, 1770–1831) y de los
der y transformar la realidad que nos rodea, llamados “jóvenes hegelianos” o “neohegelia-
su abordaje plantea priorizar el debate sobre nos” que, como Marx, se habían formado en la
las principales herramientas conceptuales filosofía de Hegel para luego diferenciarse de
que ofrece y hacerlo teniendo en cuenta tam- ella desde una perspectiva crítica que aspiraba
bién las discusiones sobre la actualidad latino- a ser más progresista. Esta corriente de los
americana y de nuestro país. Es en esta direc- jóvenes hegelianos se inaugura en 1836 con la
ción que aspira a caminar el presente curso, aparición del libro La vida de Jesús del filósofo
en el sentido de debatir y profundizar el David Strauss (1808–1874) que dio comienzo
conocimiento colectivo sobre ciertas herra- a la crítica filosófica de la religión en el pensa-
mientas conceptuales para el conocimiento miento de Hegel. Sin embargo, los que apare-
transformador de la realidad. Y ello, también cen mencionados especialmente en el texto
en un enfoque plural que seguramente queda- son Max Stirner (1806-1856) y Bruno Bauer
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 11

(1809-1882) a los que Marx y Engels suelen lla- hacia el cuestionamiento y transformación de
mar con ironía crítica como si fueran santos, esas relaciones sociales. Este cuestionamiento
como “San Max” y “San Bruno”. Ambos habían al idealismo de los hegelianos y los neohegelia-
compartido con Marx inicialmente la labor en nos –entendido “idealismo” como aquella
el periódico político la “Gazeta Renana”. La perspectiva que parte de afirmar la primacía de
filosofía de Hegel proponía entender la histo- las ideas, de “los productos de la conciencia”,
ria como el desarrollo de una Idea, de un en la explicación de los procesos históricos y
“Espíritu Absoluto” que se desplegaba “dialéc- sociales- no es simplemente un recuerdo del
ticamente” y autoreconociéndose a través de
pasado sino que nos habla también de la actua-
los tiempos y que culminaba en su nivel máxi-
lidad, de la crítica a una de las formas que
mo con la expansión de los contenidos bur-
adopta hoy también la filosofía, las cosmovisio-
gueses de la revolución francesa al resto de
Europa –incluida Alemania- bajo la égida napo- nes y el sentido común conservador y sistémi-
leónica. Críticos del pensamiento de Hegel, co. El mismo se expresa, por ejemplo, en el
Stirner y Bauer pretenderán cuestionar el lugar preponderante que se le asigna actual-
mismo en la denuncia y demostración del sus- mente en las ciencias sociales y sus divulgacio-
tento religioso que lo caracterizaba, reducien- nes, a los aspectos culturales, simbólicos y lin-
do todas sus categorías a la primacía de este güisticos como forma de entender una socie-
espíritu religioso y pretendiendo así su refuta- dad bautizada como “de la información” o “del
ción y superación. Marx y Engels al desarrollar conocimiento”. Referencias que expresan el
su crítica a la “ideología alemana” referirán así predominio de las corrientes intelectuales
a ambas corrientes. En esta crítica, vale dete- identificadas con el llamado posmodernismo(*)
nerse un momento en el señalamiento que los
autores formulan respecto de los dichos de
Stirner y Bauer cuando refieren que “ellos han
descubierto la expresión adecuada para desig-
nar su actividad cuando afirman que sólo
luchan contra «frases». Pero se olvidan de aña-
dir que a estas frases por ellos combatidas no
saben oponer más que otras frases y que, al
* Por “posmodernismo” se refiere a una serie
de corrientes de pensamiento que, a partir de la
década de los ´70, ganaron creciente influencia
combatir solamente las frases de este mundo, en diferentes terrenos. Las mismas se caracteri-
no combaten en modo alguno el mundo real zaron por cuestionar el llamado pensamiento
existente” (Marx y Engels, Ideología alemana). moderno –en referencia a aquel que primó
Entonces, no se trata para Marx de pretender durante el siglo XX. Desde el “posmodernismo”
cambiar las conciencias con una crítica de se desarrolló un cuestionamiento al marxismo y
al pensamiento crítico considerándolos como
carácter ateo a la religión sino de hacer un partes de los “grandes relatos” de una sociedad
cambio radical de perspectiva, de entender las pasada y proponiendo entender a éstos como si
prácticas sociales, las relaciones sociales efecti- fueran sólo formas de comunicación y de lengua-
vas, que sustentan y sirven a reproducir estas je; reduciendo los procesos sociales a sus expre-
ideas de naturaleza religiosa, y de orientarse así siones culturales y simbólicas.
12- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

La dialéctica: suntas leyes de desarrollo de la naturaleza, el


de Hegel a Marx y sus derivas “materialismo dialéctico” fue esgrimido y
colonizado luego por el estalinismo en la
Suele decirse que la crítica de Marx al pen- URSS y consagrado y desarrollado como su
samiento de Hegel recupera de éste el con- filosofía oficial. Esta inscripción histórica hace
cepto de la “dialéctica”, particularmente del concepto de la dialéctica uno de los más
desde el desarrollo de su obra Elementos fun- controvertidos dentro del pensamiento mar-
damentales para la crítica de la economía xista.
política -más conocida como los Grundrisse-
que escribiera entre 1857 y 1858. Así, en el Finalmente, es necesario resaltar también
epílogo a la segunda edición del primer tomo que existe un uso práctico del término “dia-
de “El Capital” Marx señala que su “método léctica”. Entendido más en términos figurati-
dialéctico no sólo difiere del de Hegel en vos aunque no lejano del espíritu que le reco-
cuanto a sus fundamentos sino que es su antí- noce el propio Marx, se utiliza habitualmente
tesis…Para Hegel el proceso del pensar…es para resaltar el carácter complejo de los pro-
el demiurgo de lo real…[para Marx] a la cesos sociales, de mutua relación e interde-
inversa, lo ideal no es sino lo material tras- pendencia; o también para destacar la natura-
puesto y traducido en la mente humana” leza contradictoria de los mismos, las contra-
(Marx, El Capital) Esta metáfora de la inver- posiciones, tensiones y luchas que caracteri-
sión, sin embargo, dio pie a diferentes inter- zan al hacer social y político. Este uso es
pretaciones del uso de la dialéctica dentro del importante para subrayar el signo no unidi-
marxismo, incluso algunas positivistas. En rea- reccional ni estático ni naturalizado de la rea-
lidad, en la elaboración de Marx la dialéctica lidad social aunque puede también a veces -y
hegeliana sufre una transformación mucho a fuerza de su repetición- servir a limitar una
más radical que su simple inversión, para éste mejor comprensión de los procesos. Con
la perspectiva dialéctica es aquella justamente todo, el desarrollo a fondo de dicha cuestión
que da cuenta de las contradicciones de la quedará para un próximo encuentro.
realidad social.

Por otra parte, no puede mencionarse el ¿Qué es el materialismo marxista?


concepto de “dialéctica” sin hacer mención a
uno de sus usos –o deformaciones- más En la perspectiva sostenida por Marx y
extendido dentro del marxismo posterior a Engels, la referencia al materialismo, más allá
Marx y que fuera conocido bajo el nombre de las vulgatas y las deformaciones de las crí-
del “materialismo dialéctico” o por sus siglas ticas malintencionadas, no refiere a la mate-
“Diamat”. Expresión acuñada por el marxista rialidad de los objetos ni a lo material como
ruso Plejánov (Georgi Plejánov, 1856–1918), sinónimo del interés económico. En este
heredera del desplazamiento realizado por caso, la referencia marxista al materialismo
Engels en el uso de la dialéctica para la com- señala principalmente el hecho de que las
prensión de los hechos naturales y las pre- prácticas sociales a las que refiere tienen fren-
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 13

te a los sujetos una existencia objetiva y, en y transmite el pasado” (Marx, 18 de


este sentido, material. Así lo señalan Marx y Brumario).
Engels cuando afirman que “la estructura
social y el Estado brotan constantemente del Pero el materialismo de Marx tiene un ter-
proceso de vida de determinados individuos, cer aspecto que constituye, diríamos, su
pero de estos individuos, no como pueden núcleo central. Estos condicionamientos que
presentarse ante la imaginación propia o venimos describiendo encuentran su cuestión
ajena sino tal como realmente son; es medular en la determinación que ejerce un
decir…tal y como desarrollan sus actividades particular conjunto de relaciones sociales en
bajo determinados límites, premisas y condi- las que participan hombres y mujeres en la
ciones materiales, independientes de su vida en sociedad; estas son las que se estable-
cen para producir las condiciones materiales
voluntad” (Marx y Engels, Ideología alemana).
de vida. Esta preponderancia aparece refleja-
En este sentido, el materialismo defendido da en la obra a través de un ejemplo respec-
por Marx tiene, podríamos decir, tres aspec- to del orden de los hechos históricos, orden
tos que son complementarios entre sí. El pri- que no remite a la sucesión temporal –es
mero de ellos es el que plantea la necesidad decir no existió un hecho antes que otro-
de analizar primero las prácticas sociales para sino a la jerarquía lógico-explicativa de los
después comprender y evaluar críticamente mismos, a los momentos como mencionan
los discursos. Sobre ello dicen los autores Marx y Engels en el texto haciendo uso de
que “no se parte de lo que los hombres dicen, una expresión característica de la filosofía
se representan o se imaginan…se parte del hegeliana. En este desarrollo, los autores acu-
hombre que realmente actúa y, arrancando de ñarán una frase que habrá de reiterarse en
su proceso de vida real” (Marx y Engels, otras obras y que, en cierta medida, sintetiza
Ideología alemana). E incluso Marx, en su afán la crítica materialista al idealismo señalando
explicativo, hace uso de un ejemplo cotidiano que “no es la conciencia la que determina la
cuando señala que “del mismo modo que no vida, sino la vida la que determina la concien-
podemos juzgar a un individuo por lo que él cia” (Marx y Engels, Ideología alemana).
piensa de sí, no podemos juzgar a estas épo-
cas de transformación social por su concien-
cia” (Marx, Prólogo). Algunos conceptos importantes
Un segundo aspecto del materialismo es el De esta manera, a lo largo de la Ideología
que refiere a los condicionamientos que una Alemana, Marx y Engels irán presentando y
sociedad y su pasado imponen, en todos los definiendo en su uso los conceptos funda-
órdenes de la vida social, a las mujeres y hom- mentales para dar cuenta de lo que llaman la
bres. Y así se dice que “los hombres hacen su “vida”, las “condiciones materiales de vida”, el
propia historia, pero no la hacen a su arbi- “ser social”, o simplemente el “ser”. Así, men-
trio…sino bajo aquellas circunstancias con cionarán a la “división social del trabajo”, que
que se encuentran directamente, que existen refiere al hecho de que en las sociedades el
14- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

trabajo (social) necesario para producir un límites de las clases y sectores dominantes-
bien se encuentra habitualmente dividido explotadores por un lado y las dominadas-
(repartido) entre diferentes trabajos concre- explotadas por el otro.
tos útiles. En este sentido la división social del
trabajo tiene tanto una dimensión técnica En estos breves señalamientos quisiéramos
como social e implica, en los diferentes traba- finalmente hacer una breve mención a dos
jos, también la división en distintas clases términos más. El primero de ellos es el de
sociales. Junto a la división social del trabajo “modo de producción” que aparece referido
se hace mención también a las “fuerzas pro- en el texto especialmente a través de una
ductivas” que remiten a la capacidad humana serie de ejemplos históricos reiterados bajo
y técnica con la que cuenta una sociedad para la enumeración de diferentes modos de pro-
apropiarse de los bienes de la naturaleza, ducción (tribal, antiguo, feudal, capitalista)
transformarlos y producir los medios y bien- tanto en el Prólogo como en la Ideología
es necesarios a su reproducción. De esta Alemana. Así por “modo de producción no
manera, el concepto de fuerzas productivas debe considerarse solamente…la reproduc-
abarca a los llamados medios de producción ción de la existencia física de los individuos. Es
y a la fuerza de trabajo. Por último, y aunque ya, más bien, un determinado modo de la acti-
todavía los autores no lo habían desarrollado, vidad de estos individuos, un determinado
aparece la idea del concepto de “relaciones modo de manifestar su vida, un determinado
sociales de producción”; categoría que cum- modo de vida de los mismos” (Marx y Engels,
plirá un papel central en la teoría marxista, y Ideología alemana). Sin embargo este término
que, en este caso, se menciona de diferentes ha despertado encontradas interpretaciones
maneras pero, particularmente, con el uso del dentro del corpus marxista y dado pie a
término alemán “Verkehr” que en la versión aquellas visiones que enfatizan una explica-
que se acompaña en la bibliografía aparece ción lineal y unívoca del proceso histórico
traducido como “trato”. En este sentido, por como si el mismo evolucionara de manera
estas “relaciones sociales de producción” se necesaria de un modo de producción a otro,
refiere a las relaciones que establecen muje- proyectando como lógica universal a la expe-
res y hombres en una sociedad para producir riencia histórica europea –en una muestra de
los medios y bienes necesarios para su soste- “eurocentrismo- y considerando dichos cam-
nimiento y de la propia sociedad. En corres- bios expresión de un progreso técnico o de
pondencia con ellas se configuran las diferen- las llamadas “fuerzas productivas”. Es por ello,
tes formas de propiedad presentes en las que resulta más útil el concepto de “forma-
diferentes sociedades (comunal, privada ción económico-social” que refiere a las for-
mobiliaria, privada inmobiliaria, privada en mas particulares que asumen las relaciones
general) y también la forma que adopta no sociales de producción y el entramado eco-
sólo la producción sino también la distribu- nómico-social en una sociedad dada en un
ción y apropiación de los productos del tra- momento histórico determinado aunque,
bajo y la riqueza social y cuya expropiación posteriormente, otros pensadores marxistas
por un sector de la sociedad configura los han aportado conceptos más interesantes
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 15

aún, como por ejemplo el de “bloque históri- ciones sociales presentes en la práctica con-
co” elaborado por el italiano Antonio creta, “material”, de las sociedades y, conse-
Gramsci (1891-1937) que enfatiza la com- cuentemente, no poder dar cuenta de la
prensión de las configuraciones y articulacio- capacidad transformadora de la acción de
nes que se presentan entre las clases sociales, mujeres y hombres sobre su propia realidad
el Estado, la sociedad política, la sociedad civil “material”. Así, estas realidades que daban
y la economía en un período histórico deter- motivo al movimiento enajenante de la con-
minado. ciencia humana en la invención y creencia en
Dios aparecían como incuestionables. En este
sentido, Marx y Engels afirmarán que “en la
¿Porqué el materialismo de Marx es históri- medida en que Feuerbach es materialista, se
co? mantiene al margen de la historia, y en la
medida en que toma la historia en considera-
Pero la perspectiva formulada por Marx y ción, no es materialista” (Marx y Engels,
Engels reclama no sólo el nombre de materia- Ideología alemana).(*)
lista sino también de histórica. Este segundo
elemento está lejos de cumplir un papel Marx realizará la crítica al materialismo
secundario en la reflexión de los autores. Su contemplativo de Feuerbach en La Ideología
desarrollo adopta también la forma del análi- Alemana y también en las conocidas Tesis
sis crítico -tal como será característico del sobre Feuerbach. En estas últimas, Marx seña-
método de Marx y también otro de sus apor- lará que “la teoría materialista de que los
tes al marxismo- de las reflexiones de otro hombres son producto de las circunstancias y
filósofo alemán. En este caso, se trata de la de la educación, y de que por tanto, los hom-
crítica y ruptura con una filosofía de corte bres modificados son producto de circunstan-
materialista que había planteado otro pensa- cias distintas y de una educación modificada,
dor “neohegeliano”, Ludwig Feuerbach olvida que son los hombres, precisamente, los
(1804–1872), cuestionando también la filoso- que hacen que cambien las circunstancias y
fía de Hegel. En su obra La esencia del cristia- que el propio educador necesita ser educa-
nismo (1841) Feuerbach había presentado do” (Marx, tesis, tesis III). De esta manera, en
una crítica a la religión y a su interpretación el cuestionamiento a la filosofía de Feuerbach
por parte de la filosofía hegeliana señalando las tesis postulan y desarrollan el concepto
que, en realidad, era el propio hombre quien marxista de praxis que refiere tanto a la uni-
atribuía a Dios sus propias cualidades y refle- dad del saber y el hacer cuanto al énfasis en
jaba en él sus propios deseos, enajenándose y su capacidad transformadora. Tal vez una de
dando origen así a su propia divinidad. De
sus expresiones más conocidas sea la Tesis XI
esta manera, la enajenación residía en la con-
ciencia humana y un simple acto de la misma
podía disiparla. Por otra parte, este materia-
lismo resultaba –como lo llamará Marx- con-
templativo o mecánico al negar las contradic-
* Para profundizar esta cuestión puede consultar-
se la contribución de Rubén Dri en la Cartilla Nº 2
del Curso de formación 2008, páginas 35 y 36.
16- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

que señala que “los filósofos no han hecho “motor de la historia” (Marx y Engels,
más que interpretar de diversos modos el Manifiesto). Esta tensión entre enfatizar el
mundo, pero de lo que se trata es de trans- papel de las estructuras –especialmente
formarlo” (Marx, Tesis). La actualidad de esta entendidas como estructuras económicas o
crítica a un materialismo contemplativo pro- en referencia a las relaciones sociales de pro-
yecta sus cuestionamientos a aquellas pers- ducción- o el de los sujetos sociales y políti-
pectivas que destacan el lugar central del cos para entender en este caso la transforma-
conocimiento empírico naturalizando al ción social volverá a manifestarse de otras
mismo tiempo la forma social de su existen- formas en relación al materialismo histórico.
cia. De esta manera, la perspectiva sostenida
por Marx intenta romper con la división trá-
gica entre idealismo y materialismo contem- El problema de la determinación: del mode-
plativo; donde el primero desarrolla el lado lo estructura/superestructura a sus reelabo-
activo del sujeto “pero sólo de un modo abs- raciones.
tracto” mientras que el materialismo mecáni-
co revela la importancia de lo empírico y la Ciertamente, la afirmación de que las “con-
realidad concreta pero presentándolo como diciones materiales de producción de la vida
intransformable por lo menos en un sentido social”, de que las “relaciones sociales de pro-
emancipatorio. Por ello, el materialismo de ducción”, condicionan el conjunto de los pro-
Marx es histórico; porque, contrariamente a cesos sociales se constituirá en uno de los
esta perspectiva, enfatiza la praxis humana elementos centrales del materialismo históri-
transformadora y se plantea, en consecuen- co. Así también ello implicará una serie de
cia, la explicación de los cambios y los conflic- cuestiones problemáticas alrededor de la
tos sociales que caracterizan a todo proceso interpretación del papel, la intensidad y la
histórico. forma de este condicionamiento o determi-
nación. En el Prólogo a la Contribución a la
Sin embargo, en las explicaciones del cam- Crítica de la economía política de 1859 (con-
bio social ofrecidas por Marx aparecerá la sultar en bibliografía) Marx se referirá a ello
contraposición entre poner el acento en la utilizando por primera vez las nociones de
estructura o en la acción de los sujetos. base (o estructura) y superestructura. En un
Ciertamente sin resultar del todo contra- interesante texto donde describe su recorri-
puestas, esta tensión puede rastrearse en, por do intelectual y político, dirá en relación al
un lado, el señalamiento de que es la contra- materialismo histórico que justamente “el
dicción entre las relaciones sociales de pro- conjunto de estas relaciones de producción
ducción y las fuerzas productivas lo que abre forma la estructura económica de la socie-
las puertas a una época de cambio social dad, la base real sobre la que se levanta la
(Marx, Prólogo) y la definición de que “la his- superestructura jurídica y política y a la que
toria de todas las sociedades que han existi- corresponden determinadas formas de con-
do hasta nuestros días es la historia de la ciencia social” y “al cambiar la base económi-
lucha de clases” y que esta es entonces el ca se transforma, más o menos rápidamente,
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 17

toda la inmensa superestructura erigida sobre procesos sociopolíticos. Sobre ello Engels
ella”. Así esbozado, este modelo que repre- afirmará que “la situación económica es la
sentaba a la sociedad como un edificio com- base, pero los diversos factores de la superes-
puesto por una base, estructura o infraes- tructura que sobre ella se levanta -las formas
tructura sobre la que se levantan los pisos de políticas de la lucha de clases y sus resultados,
la superestructura jurídica, política e ideológi- las Constituciones que, después de ganada
ca será tomado y propagandizado a posterio- una batalla, redacta la clase triunfante, etc., las
ri de la muerte de Marx hasta convertirse en formas jurídicas, e incluso los reflejos de
una de las imágenes más conocidas asociadas todas estas luchas reales en el cerebro de los
al materialismo histórico. Esta metáfora del participantes, las teorías políticas, jurídicas,
edificio que fuera entendida como una teoría filosóficas, las ideas religiosas y el desarrollo
descriptiva o una tópica, más allá del efecto ulterior de éstas hasta convertirlas en un sis-
didáctico que parece a veces asignársele y por tema de dogmas- ejercen también su influen-
lo cual usualmente se la defiende, ha estimu- cia sobre el curso de las luchas históricas y
lado una visión esquemática y disociada de los determinan, predominantemente en muchos
procesos sociales que redujeron la compren- casos, su forma” (Engels, carta) (ver el texto
sión de estos a un pretendido (y metafísico) completo de la carta en la bibliografía). Para la
determinismo económico. De esta manera, el defensa de esta posición Engels enfatizará que
llamado “determinismo” o “economicismo” la determinación de la estructura es válida
consistió en subordinar y eliminar la riqueza pero “en última instancia”, categoría de
y complejidad de los procesos históricos y de “determinación en última instancia” que, si
lucha, de las formas particulares que presen- bien parece referir a que la determinación
taba lo político y lo ideológico, a unas líneas aparece en realidad en el largo plazo, remite
explicativas que se deducían simplemente del en términos filosóficos al orden lógico de la
análisis de lo económico-social y de la llama- causalidad.
da “estructura”. Dichas aseveraciones justifi-
cadas por la determinación de la estructura En una dirección similar habrá de forjarse el
por sobre la superestructura parecían gozar término de “autonomía relativa” para referir-
de cierta cientificidad “empirista” reempla- se especialmente a la naturaleza de clase del
zando así al materialismo histórico por un Estado; es decir, a la relación entre el Estado
remozado materialismo mecánico y vulgar y las clases dominantes a la luz de la determi-
que disolvía el concepto marxista de la praxis. nación de las relaciones sociales de produc-
Frente a estas interpretaciones, promovidas ción. Divulgada especialmente por la escuela
tanto por algunos discípulos y críticos, inclu- althusseriana en la década de 1960 la idea que
so Federico Engels habrá de salir a dar batalla inspira la expresión “autonomía relativa” es
intelectual entre fines de la década de 1880 y justamente la de dar cuenta de la autonomía
principios de la de 1890; defendiendo el papel (siempre relativa, es decir limitada) que pue-
que le cabían a los agrupamientos políticos, den ejercer los gobiernos o las políticas públi-
las normas jurídicas, y las creencias e ideolo- cas adoptadas por la administración estatal
gías en la configuración y definición de los respecto de los intereses de las clases domi-
18- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

nantes. El desarrollo de esta categoría se ins- ciones de fuerza entre las clases y sectores
pira en el estudio realizado por Marx del lla- sociales. Este énfasis en la noción de relación,
mado “bonapartismo”(*) , fenómeno político y particularmente de “relaciones de fuerza
que surge de la coronación monárquica de sociales” será retomado y reiterado por la
Luis Bonaparte (sobrino de Napoleón mayoría de las elaboraciones marxistas que
Bonaparte) en la Francia de mediados del intentarán superar los riesgos de las visiones
siglo XIX en oposición a las diferentes frac- que imponen la superioridad de la estructura
ciones de las clases dominantes y luego de por sobre los sujetos o viceversa. Gramsci
haber aplastado la insurrección popular de aportará también a este debate el ya mencio-
1848 y la república democrática. nado concepto de “bloque histórico”(**) y
enfatizará “que entre estructura y superes-
Ciertamente todo ello no disipó las tergi- tructuras hay un nexo necesario y vital, al
versaciones del materialismo histórico y la igual que en el cuerpo humano entre la piel y
reaparición de versiones deterministas y eco- el esqueleto: se diría un despropósito si se
nomicistas del mismo. Así también otras apro- afirmase que el hombre se mantiene erecto
ximaciones fueron formuladas para la supera- sobre la piel y no sobre el esqueleto y sin
ción del esquematismo del modelo estructu- embargo eso no significa que la piel sea una
ra-superestructura. Entre ellas, por ejemplo, cosa aparente e ilusoria, tanto es así que no
Louis Althusser propondrá referir a la “sobre- es muy agradable la situación del hombre des-
determinación” que la superestructura ejerce ollado”
sobre la estructura así como repensar la fun-
ción de la primera en términos de “reproduc- Por otra parte, es necesario insistir en la
ción” de las propias relaciones sociales de importancia de evitar la falsa disociación de lo
producción. Por otra parte, Antonio Gramsci, social que puede desprenderse del modelo
en una de sus notas de los Cuadernos de la estructura/superestructura en la medida que
Cárcel, propondrá repensar este edificio el mismo puede derivar en la promoción de
como una serie de diferentes niveles de rela- pensar la realidad social dividida entre aquella
parte que correspondería a la estructura y la
que estaría comprendida por la superestruc-
* El “bonapartismo” refiere a las características
del régimen encabezado por Luis Bonaparte. Dicha
categoría permite dar cuenta de aquellos regíme-
nes y/o gobiernos que, sin perder su naturaleza
burguesa, expresan en el terreno de la definición
** El concepto gramsciano de “bloque histó-
rico” se refiere a la particular configuración que
adopta la articulación entre las estructuras y
de la política pública una importante autonomía superestructuras en un momento histórico
respecto de los distintos sectores de las clases determinado y que caracteriza a todo un período
dominantes. Esta imagen de “gobierno fuerte”, de tiempo. Desde esta perspectiva supone dar
“personalista” y de “impronta presidencialista” se cuenta de las particularidades que signan a las
explica por una configuración particular que pre- relaciones entres las clases dominantes y domina-
sentan las relaciones de fuerza entre las clases das, las formas del Estado, la sociedad política y la
sociales –y particularmente al interior del bloque sociedad civil y sus articulaciones con la estructu-
dominante. ra económico-social.
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 19

tura. Lejos de esta mirada disociada, el análisis (se cita en el texto como “Engels, carta”)
marxista exige partir de la consideración de - Fernández Buey, Francisco 1999 Marx (sin ismos)
situaciones histórico-concretas donde a par- (Barcelona: El viejo topo)
tir de las acciones de los sujetos nos interro- - Gramsci, Antonio 1999 Cuadernos de la Cárcel
(México: Era)
gamos sobre sus condicionamientos y deter-
- Korsch, Karl 1980 La concepción materialista de la
minaciones. Como siempre, el mejor ejemplo
historia y otros ensayos (Madrid: Ariel)
de la aplicación de esta perspectiva lo consti-
- Löwy, Michael (comp.) 1999 O marxismo na
tuyen las obras de análisis histórico de Marx, América Latina (San Pablo: Perseu Abramo)
particularmente La lucha de clases en Francia
- Mariategui, José Carlos 1971 “Aniversario y
y El 18 Brumario de Luis Bonaparte. Estos Balance”, Amauta n° 17, en Ideología y Política (Lima:
señalamientos, ciertamente, están todavía Biblioteca Amauta)
lejos de dejar atrás definitivamente –si esto - Marx, Carlos 1995 El dieciocho brumario de Luis
fuera posible- la tensión entre poner el énfa- Bonaparte (Montevideo: La Comuna)
sis en la estructura o en los sujetos sociales - Marx, Carlos 2002 El Capital (tomo I, vol.I, libro
para entender los procesos históricos y las primero) (Buenos Aires: Siglo XXI) (se cita como
dinámicas socio-políticas de nuestras socieda- Marx, El Capital)
des. Esta tensión, que en realidad atraviesa al - Marx, Carlos 2009 “Prólogo a la Contribución a la
Crítica de la Economía Política”, Cuadernillo de
conjunto del conocimiento social y está pro-
Formación 2009, Marxists Internet Archive
fundamente imbricada en las propias caracte- (http://www.marxists.org) (se cita en el texto como
rísticas de la sociedad capitalista, volverá a “Marx, Prólogo”)
reaparecer y a ser tratada seguramente a lo - Marx, Carlos 2009 Tesis sobre Feuerbach,
largo del presente curso. Cuadernillo de Formación 2009, versión extraída de
Marxists Internet Archive (http://www.marxists.org)
(se cita como “Marx, Tesis”)
- Marx, Carlos y Engels, Federico 1983 Manifiesto
Bibliografía del Partido Comunista (Buenos Aires: Anteo) (se cita
como Marx y Engels, Manifiesto)
- Althusser, Louis 1996 Ideología y aparatos ideoló-
gicos del Estado (Buenos Aires: Nueva Visión) - Marx, Carlos y Engels, Federico 2009 “La ideología
alemana (fragmentos)” Cuadernillo de formación
- Bottomore,Tom 1988 Diccionario do pensamento 2009, versión extraída de Marxists Internet Archive
marxista (Río de Janeiro: Jorge Zahar Editor) (http://www.marxists.org) (se cita como “Marx y
- Engels, Federico 2009 “Carta a Jose Bloch”, Engels, Ideología alemana”)
Cuadernillo de Formación 2009, versión extraída de Mazzeo, Miguel 2009 “Notas sobre el curso de for-
Marxists Internet Archive (http://www.marxists.org) mación 2009”, mimeo.
20- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

Guía para la interpretación


del texto (sugerimos abordar
estas preguntas en grupo,
después de la lectura)

1) ¿Qué es (y qué no es) el marxismo?

2) ¿Por qué vale hablar de “marxismos” en plural?

3) ¿Cuál es la crítica que Marx y Engels hacen a las


interpretaciones "idealistas" de la historia?

4) ¿En qué consiste el materialismo, según la definición


de Marx?

5) ¿Por qué el materialismo que plantea Marx es “historico”?

En el texto que abre esta cartilla encontraremos los primeros ele-


mentos para responder estas preguntas. Con la lectura directa de
los textos “clásicos” de Marx y Engels a continuación, podremos pro-
fundizar en la comprensión de los conceptos, yendo directo a las
fuentes. Finalmente, en el encuentro de formación,
podremos evacuar dudas y debatir colectivamente
en función de esta primera aproximación a estos
temas tan complejos, necesarios y apasionantes
para la lucha revolucionaria...
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 21

La Ideología Alemana
Carlos Marx y Federido Engels

Nota sobre el texto: Marx escribirá “la Ideología


Alemana” conjuntamente con Federico Engels entre 1845 y 46 residiendo en
Bruselas, Bégica. Comprometido con su editor a escribir una obra sobre
“economía”, su preparación lo llevará a ajustar cuentas primero con la
herencia hegeliana –concepción filosófica de la que había sido tributario- y
precisar su concepción de mundo y su visión sobre los procesos históricos
en general. Marx y Engels no conseguirán publicar el texto en su momento
y quedará así, como lo señala el propio Marx posteriormente, abandonado a
la “crítica roedora de los ratones”. El hecho de que no haya sido publicado
en vida de los autores hace que los manuscritos presenten tanto una redac-
ción menos sistemática que otras de sus obras, como que no se disponga de
una versión final definitiva. En este caso incluimos aquí una selección de
fragmentos del primer capítulo considerando la versión de la obra disponi-
ble en formato digital que figura en el Marxists Internet Archive
(http://www.marxists.org) que recupera los señalamientos de las diferentes
copias (primera y segunda) y los borradores existentes.

Iº Capítulo - Feuerbach Strauss(1), se ha desarrollado hasta


convertirse en una fermentación uni-
Oposición entre las concepciones
versal, que ha arrastrado consigo a
materialista e idealista
todas las «potencias del pasado». En
medio del caos general, han surgido
poderosos reinos, para derrumbarse de
[I]
nuevo en seguida, han brillado momen-
Según anuncian los ideólogos alema- táneamente héroes, sepultados nueva-
nes, Alemania ha pasado en estos últi- mente en las tinieblas por otros rivales
mos años por una revolución sin igual. más audaces y más poderosos. Fue
El proceso de descomposición del siste- ésta una revolución junto a la cual la
ma hegeliano, que comenzó con francesa(2) es un juego de chicos, una
22- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

lucha ecuménica al lado de la cual pali- ra una crítica omnímoda del sistema
decen y resultan ridículas las luchas de hegeliano, por mucho que cada uno de
los diádocos(3). Los principios se des- ellos afirme haberse remontado sobre
plazaban, los héroes del pensamiento Hegel. [...]
se derribaban los unos a los otros con
inaudita celeridad, y en los tres años […] Los viejos hegelianos lo compren-
que transcurrieron de 1842 a 1845 se dían todo una vez que lo reducían a
removió el suelo de Alemania más que una de las categorías lógicas de Hegel.
antes en tres siglos. Y todo esto ocurrió, Los jóvenes hegelianos lo criticaban
según dicen, en los dominios del pensa- todo sin más que deslizar debajo de ello
miento puro. […] ideas religiosas o declararlo como algo
teológico. Los jóvenes hegelianos coin-
[…] Para apreciar en sus debidos tér- cidían con los viejos hegelianos en la fe
minos toda esta charlatanería de tende- en el imperio de la religión, de los con-
ros filosóficos que despierta un saluda- ceptos, de lo general, dentro del mundo
ble sentimiento nacional hasta en el existente. La única diferencia era que
pecho del honrado burgués alemán; los unos combatían como usurpación
para poner plásticamente de relieve la ese imperio que los otros reconocían y
mezquindad, la pequeñez provinciana aclamaban como legítimo.
de todo este movimiento joven hegelia-
no y, sobre todo, el contraste tragicómi- Y, como para estos jóvenes hegelianos
co entre las verdaderas hazañas de las representaciones, los pensamien-
estos héroes y las ilusiones suscitadas tos, los conceptos y, en general, los pro-
en torno a ellas, necesitamos contem- ductos de la conciencia por ellos sus-
plar siquiera una vez todo el espectácu- tantivada eran considerados como las
lo desde un punto de vista situado verdaderas ataduras del hombre, exac-
fuera de los ámbitos de Alemania. tamente lo mismo que los viejos hege-
lianos veían en ellos los auténticos
nexos de la sociedad humana, era lógi-
[II] co que también los jóvenes hegelianos
lucharan y se creyeran obligados a
[1.]— La ideología en general, y la luchar solamente contra estas ilusiones
ideología alemana en particular de la conciencia. En vista de que, según
La crítica alemana no se ha salido, su fantasía, las relaciones entre los
hasta en estos esfuerzos suyos de últi- hombres, todos sus actos y su modo de
ma hora, del terreno de la filosofía. Y, conducirse, sus trabas y sus barreras,
muy lejos de entrar a investigar sus son otros tantos productos de su con-
premisas filosóficas generales, todos ciencia, los jóvenes hegelianos formu-
sus problemas brotan, incluso sobre el lan consecuentemente ante ellos el pos-
terreno de un determinado sistema filo- tulado moral de que deben trocar su
sófico, del sistema hegeliano. No sólo conciencia actual por la conciencia
sus respuestas, sino también las pre- humana, crítica o egoísta, derribando
guntas mismas, entrañan un engaño. con ello sus barreras. Este postulado
La dependencia respecto de Hegel es la de cambiar de conciencia viene a ser lo
razón de por qué ninguno de estos mismo que el de interpretar de otro
modernos críticos ha intentado siquie- modo lo existente, es decir, de recono-
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 23

cerlo por medio de otro interpretación. propia acción. Estas premisas pueden
Pese a su fraseología que supuesta- comprobarse, consiguientemente, por
mente «hace estremecer el mundo», los la vía puramente empírica.
jóvenes hegelianos son, en realidad, los
La primera premisa de toda historia
mayores conservadores. Los más jóve-
humana es, naturalmente, la existencia
nes entre ellos han descubierto la
de individuos humanos vivientes. El
expresión adecuada para designar su
primer estado que cabe constatar es,
actividad cuando afirman que sólo
por tanto, la organización corpórea de
luchan contra «frases». Pero se olvidan
estos individuos y, como consecuencia
de añadir que a estas frases por ellos
de ello, su relación con el resto de la
combatidas no saben oponer más que
naturaleza. No podemos entrar a exa-
otras frases y que, al combatir sola-
minar aquí, naturalmente, ni la contex-
mente las frases de este mundo, no
tura física de los hombres mismos ni
combaten en modo alguno el mundo
las condiciones naturales con que los
real existente. Los únicos resultados a
hombres se encuentran: las geológicas,
que podía llegar esta crítica filosófica
las oro-hidrográficas, las climáticas y
fueron algunos esclarecimientos en el
las de otro tipo. Toda historiografía
campo de la historia de la religión,
tiene necesariamente que partir de
harto unilaterales por lo demás, sobre
estos fundamentos naturales y de la
el cristianismo; todas sus demás afir-
modificación que experimentan en el
maciones se reducen a otras tantas
curso de la historia por la acción de los
maneras de adornar su pretensión de
hombres.
entregarnos, con estos esclarecimien-
tos insignificantes, descubrimientos de Podemos distinguir los hombres de
alcance histórico-mundial. los animales por la conciencia, por la
religión o por lo que se quiera. Pero los
A ninguno de estos filósofos se le ha
hombres mismos comienzan a ver la
ocurrido siquiera preguntar por el
diferencia entre ellos y los animales tan
entronque de la filosofía alemana con la
pronto comienzan a producir sus
realidad de Alemania, por el entronque
medios de vida, paso este que se halla
de su crítica con el propio mundo mate-
condicionado por su organización cor-
rial que la rodea.
pórea. Al producir sus medios de vida,
el hombre produce indirectamente su
propia vida material.
[2. Premisas de las que arranca la
concepción materialista de la histo- El modo de producir los medios de
ria]. vida de los hombres depende, ante
todo, de la naturaleza misma de los
Las premisas de que partimos no son
medios de vida con que se encuentran
arbitrarias, no son dogmas, sino premi-
y que hay que reproducir.
sas reales, de las que sólo es posible
abstraerse en la imaginación. Son los Este modo de producción no debe
individuos reales, su acción y sus con- considerarse solamente en el sentido de
diciones materiales de vida, tanto aque- la reproducción de la existencia física
llas con que se han encontrado ya de los individuos. Es ya, más bien, un
hechas, como las engendradas por su determinado modo de la actividad de
24- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

estos individuos, un determinado modo La división del trabajo dentro de una


de manifestar su vida, un determinado nación se traduce, ante todo, en la
modo de vida de los mismos. Los indivi- separación del trabajo industrial y
duos son tal y como manifiestan su comercial con respecto al trabajo agrí-
vida. Lo que son coincide, por consi- cola y, con ello, en la separación de la
guiente, con su producción, tanto con ciudad y el campo y en la oposición de
lo que producen como con el modo de sus intereses. Su desarrollo ulterior
cómo producen. Lo que los individuos conduce a que el trabajo comercial se
son depende, por tanto, de las condicio- separe del industrial. Al mismo tiempo,
nes materiales de su producción. la división del trabajo dentro de estas
diferentes ramas acarrea, a su vez, la
Esta producción sólo aparece al mul-
formación de diversos sectores entre los
tiplicarse la población. Y presupone, a
individuos que cooperan en determina-
su vez, un trato(4) entre los individuos.
dos trabajos. La posición que ocupan
La forma de esté intercambio se halla
entre sí estos diferentes sectores se
condicionada, a su vez, por la produc-
halla condicionada por el modo de apli-
ción.
car el trabajo agrícola, industrial y
comercial (patriarcalismo, esclavitud,
estamentos, clases). Y las mismas rela-
[3. Producción y trato. División del
ciones se revelan, al desarrollarse el
trabajo y formas de propiedad: tribal,
trato, en las relaciones entre diferentes
antigua y feudal]
naciones.
Las relaciones entre unas naciones y
Las diferentes fases de desarrollo de
otras dependen del grado en que cada
la división del trabajo son otras tantas
una de ellas haya desarrollado sus
formas distintas de la propiedad; o,
fuerzas productivas, la división del tra-
dicho en otros términos, cada etapa de
bajo y el trato interior. Es éste un
la división del trabajo determina tam-
hecho generalmente reconocido. Pero,
bién las relaciones de los individuos
no sólo las relaciones entre una nación
entre sí, en lo tocante al material, el
y otra, sino también toda la estructura
instrumento y el producto del trabajo.
interna de cada nación depende del
grado de desarrollo de su producción y La primera forma de la propiedad es
de su trato interior y exterior. Hasta la propiedad de la tribu(5). Esta forma
qué punto se han desarrollado las fuer- de propiedad corresponde a la fase inci-
zas productivas de una nación lo indica piente de la producción en que un pue-
del modo más palpable el grado hasta blo vive de la caza y la pesca, de la
el que se ha desarrollado en ella la divi- ganadería o, a lo sumo, de la agricultu-
sión del trabajo. Toda nueva fuerza pro- ra. En este último caso, la propiedad
ductiva, cuando no se trata de una tribal presupone la existencia de una
simple extensión cuantitativa de fuer- gran masa de tierras sin cultivar. En
zas productivas ya conocidas con ante- esta fase, la división del trabajo se halla
rioridad (como ocurre, por ejemplo, con todavía muy poco desarrollado y no es
la roturación de tierras) trae como con- más que la extensión de la división
secuencia un nuevo desarrollo de la natural de trabajo existente en el seno
división del trabajo. de la familia. La estructura social, en
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 25

esta etapa, se reduce también, por comercio marítimo. Las relaciones de


tanto, a una ampliación de la familia: a clases entre ciudadanos y esclavos han
la cabeza de la tribu se hallan sus adquirido ya su pleno desarrollo.
patriarcas, luego los miembros de la
Con el desarrollo de la propiedad pri-
tribu y, finalmente, los esclavos. La
vada surgen aquí las mismas relacio-
esclavitud latente en la familia va des-
arrollándose poco a poco al crecer la nes con que nos encontraremos en la
población y las necesidades, al exten- propiedad privada de los tiempos
derse el intercambio exterior y al modernos, aunque en proporciones
aumentar las guerras y el comercio de más extensas. De una parte, aparece la
trueque. concentración de la propiedad privada,
que en Roma comienza desde muy
La segunda forma está representada pronto (una prueba de ello la tenemos
por la antigua propiedad comunal y en la ley agraria licinia(6)) y que, desde
estatal, que brota como resultado de la las guerras civiles, sobre todo bajo los
fusión de diversas tribus para formar emperadores, avanza muy rápidamen-
una ciudad, mediante acuerdo volunta- te; de otra parte, y en relación con esto,
rio o por conquista, y en la que sigue la transformación de los pequeños
existiendo la esclavitud. Junto a la pro- campesinos plebeyos en proletariado
piedad comunal, va desarrollándose ya que, sin embargo, dada su posición
la propiedad privada mobiliaria, y más intermedia entre los ciudadanos posee-
tarde la inmobiliaria, pero como forma dores y los esclavos, no llega a adquirir
anormal, supeditada a aquélla. Los ciu- un desarrollo independiente.
dadanos del Estado sólo en cuanto
comunidad pueden ejercer su poder La tercera forma es la propiedad feu-
sobre los esclavos que trabajan para dal o por estamentos. Del mismo modo
ellos, lo que ya de por sí los vincula a la que la Antigüedad partía de la ciudad y
forma de la propiedad comunal. Es la de su pequeña comarca, la Edad Media
propiedad privada comunal de los ciu- tenía como punto de partida el campo.
dadanos activos del Estado, obligados Este cambio de punto de arranque
con respecto a los esclavos a permane- hallábase condicionado por la pobla-
cer unidos en este tipo natural de aso- ción con que se encontró la Edad
ciación. Esto explica por qué toda la Media: una población escasa, disemi-
estructura de la sociedad asentada nada en grandes áreas y a la que los
sobre estas bases, y con ella el poder conquistadores no aportaron gran
del pueblo, decaen a medida que va incremento. De aquí que, al contrario
desarrollándose la propiedad privada de lo que había ocurrido en Grecia y en
inmobiliaria. La división del trabajo Roma, el desarrollo feudal se iniciara
aparece aquí más desarrollada. Nos en un terreno mucho más extenso, pre-
encontramos ya con la oposición entre parado por las conquistas romanas y
la ciudad y el campo y, más tarde, con por la difusión de la agricultura, al
la oposición entre Estados que repre- comienzo relacionada con ellas. Los
sentan, de una parte, los intereses de la últimos siglos del Imperio romano
vida urbana y, de otra, los de la vida decadente y su conquista por los pro-
rural; dentro de las mismas ciudades, pios bárbaros destruyeron una gran
con la oposición entre la industria y el cantidad de fuerzas productivas; la
26- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

agricultura veíase postrada, la indus- de los siervos que huían de la gleba y


tria languideció por la falta de merca- afluían en tropel a las ciudades próspe-
dos, el comercio cayó en el sopor o se ras y florecientes, y la estructura feudal
vio violentamente interrumpido y la de todo el país hicieron surgir los gre-
población rural y urbana decreció. mios; los pequeños capitales de los
Estos factores preexistentes y el modo artesanos individuales, reunidos poco a
de organización de la conquista por poco por el ahorro, y la estabilidad del
ellas condicionado hicieron que se des- número de éstos en medio de una cre-
arrollara, bajo la influencia de la ciente población, hicieron que se des-
estructura del ejército germánico, la arrollara el sistema de oficiales y apren-
propiedad feudal. También ésta se dices, engendrando en las ciudades
basa, como la propiedad de la tribu y la una jerarquía semejante a la que impe-
comunal, en una comunidad raba en el campo.
[Gemeinwesen], pero frente a ésta no se
Por tanto, durante la época feudal, la
hallan ahora, en cuanto clase directa-
forma fundamental de la propiedad era
mente productora, los esclavos, como
la propiedad territorial con el trabajo de
ocurría en la sociedad antigua, sino los
los siervos a ella vinculados, de una
pequeños campesinos siervos de la
parte y, de otra, el trabajo propio con
gleba. Y, a la par con el desarrollo com-
un pequeño capital que dominaba
pleto del feudalismo, aparece el antago-
sobre el trabajo de los oficiales de los
nismo del campo con respecto a la ciu-
gremios. La estructura de ambas for-
dad. La estructura jerárquica de la pro-
mas hallábase determinada por las
piedad territorial y, en relación con ello,
condiciones limitadas de la producción,
las mesnadas armadas, daban a la
por el escaso y rudimentario cultivo de
nobleza el poder sobre los siervos. Esta
la tierra y por la industria artesana. La
estructura feudal era, lo mismo que lo
división del trabajo se desarrolló muy
había sido la propiedad comunal anti-
poco, en el período floreciente del feu-
gua, una asociación frente a la clase
dalismo. Todo país llevaba en su entra-
productora dominada; lo que variaba
ña la oposición entre la ciudad y el
era la forma de la asociación y la rela-
campo; es cierto que la estructura de
ción con los productores directos, ya
los estamentos se hallaba muy ramifi-
que las condiciones de producción eran
cada y acusada, pero fuera de la sepa-
distintas.
ración entre príncipes, nobleza, clero y
A esta estructura feudal de la pose- campesinos, en el campo, y maestros,
sión de tierras correspondía en las ciu- oficiales y aprendices, y muy pronto la
dades la propiedad corporativa, la orga- plebe de los jornaleros, en la ciudad, no
nización feudal de la artesanía. Aquí, la encontramos otra división importante.
propiedad estribaba, fundamentalmen- En la agricultura, la división del traba-
te, en el trabajo individual de cada uno. jo veíase entorpecida por el cultivo par-
La necesidad de asociarse para hacer celado, junto al que surgió después la
frente a la nobleza rapaz asociada; la industria a domicilio de los propios
necesidad de disponer de locales en el campesinos; en la industria, no existía
mercado comunes en una época en que división del trabajo dentro de cada ofi-
el industrial era, al propio tiempo, cio, y muy poca entre unos oficios y
comerciante; la creciente competencia otros. La división entre la industria y el
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 27

comercio se encontró ya establecida de la actividad material y el trato material


antes en las viejas ciudades, mientras de los hombres, como el lenguaje de la
que en las nuevas sólo se desarrolló vida real. La formación de las ideas, el
más tarde, al entablarse entre las ciu- pensamiento, el trato espiritual de los
dades contactos y relaciones. hombres se presentan aquí todavía
como emanación directa de su compor-
La agrupación de territorios impor-
tamiento material. Y lo mismo ocurre
tantes más extensos para formar reinos
con la producción espiritual, tal y como
feudales era una necesidad, tanto para
se manifiesta en el lenguaje de la políti-
la nobleza propietaria de tierras como
ca, de las leyes, de la moral, de la reli-
para las ciudades. De aquí que a la
gión, de la metafísica, etc., de un pue-
cabeza de la organización de la clase
blo. Los hombres son los productores
dominante, de la nobleza, figurara en
de sus representaciones, de sus ideas,
todas partes un monarca.
etc., pero se trata de hombres reales y
activos tal y como se hallan condiciona-
dos por un determinado desarrollo de
[4. Esencia de la concepción mate-
sus fuerzas productivas y por el trato
rialista de la historia. El ser social y
que a él corresponde, hasta llegar a sus
la conciencia social]
formas más lejanas. La conciencia [das
Nos encontramos, pues, con el hecho Bewusstsein] jamás puede ser otra
de que determinados individuos que se cosa que el ser consciente [das bewuss-
dedican de un determinado modo a la te Sein], y el ser de los hombres es su
producción, contraen entre sí estas proceso de vida real. Y si en toda la ide-
relaciones sociales y políticas determi- ología, los hombres y sus relaciones
nadas. La observación empírica tiene aparecen invertidos como en la cámara
necesariamente que poner de relieve en oscura, este fenómeno proviene igual-
cada caso concreto, empíricamente y mente de su proceso histórico de vida,
sin ninguna clase de embaucamiento y como la inversión de los objetos al pro-
especulación, la relación existente yectarse sobre la retina proviene de su
entre la estructura social y política y la proceso de vida directamente físico.
producción. La estructura social y el
Totalmente al contrario de lo que ocu-
Estado brotan constantemente del pro-
rre en la filosofía alemana, que descien-
ceso de vida de determinados indivi-
de del cielo sobre la tierra, aquí se
duos; pero de estos individuos, no
asciende de la tierra al cielo. Es decir,
como puedan presentarse ante la ima-
no se parte de lo que los hombres
ginación propia o ajena, sino tal y como
dicen, se representan o se imaginan, ni
realmente son; es decir, tal y como
tampoco del hombre predicado, pensa-
actúan y como producen materialmen-
do, representado o imaginado, para lle-
te y, por tanto, tal y como desarrollan
gar, arrancando de aquí, al hombre de
sus actividades bajo determinados lími-
carne y hueso; se parte del hombre que
tes, premisas y condiciones materiales,
realmente actúa y, arrancando de su
independientes de su voluntad.
proceso de vida real, se expone también
La producción de las ideas, las repre- el desarrollo de los reflejos ideológicos y
sentaciones y la conciencia aparece, al de los ecos de este proceso de vida.
principio, directamente entrelazada con También las formaciones nebulosas
28- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

que se condensan en el cerebro de los desarrollo de los hombres. Terminan


hombres son sublimaciones necesarias allí las frases sobre la conciencia y pasa
de su proceso material de vida, proceso a ocupar su sitio el saber real. La filo-
empíricamente registrable y ligado a sofía independiente pierde, con la expo-
condiciones materiales. La moral, la sición de la realidad, el medio en que
religión, la metafísica y cualquier otra puede existir. En lugar de ella, puede
ideología y las formas de conciencia que aparecer, a lo sumo, un compendio de
a ellos correspondan pierden, así, la los resultados más generales, abstraí-
apariencia de su propia sustantividad. dos de la consideración del desarrollo
No tienen su propia historia ni su pro- histórico de los hombres. Estas abs-
pio desarrollo, sino que los hombres tracciones de por sí, separadas de la
que desarrollan su producción material historia real, carecen de todo valor.
y su trato material cambian también, al Sólo pueden servir para facilitar la
cambiar esta realidad, su pensamiento ordenación del material histórico, para
y los productos de su pensamiento. No indicar la sucesión de sus diferentes
es la conciencia la que determina la estratos. Pero no ofrecen en modo algu-
vida, sino la vida la que determina la no, como la filosofía, receta o patrón
conciencia. Desde el primer punto de con arreglo al cual puedan aderezarse
vista, se parte de la conciencia como si las épocas históricas. Por el contrario,
fuera un individuo viviente; desde el la dificultad comienza allí donde se
segundo punto de vista, que es el que aborda la consideración y ordenación
corresponde a la vida real, se parte del del material, sea de una época pasada
mismo individuo real viviente y se con- o del presente, la exposición real de las
sidera la conciencia solamente como su cosas. La eliminación de estas dificulta-
conciencia. des hállase condicionada por premisas
que en modo alguno pueden darse
Y este modo de considerar las cosas
aquí, pues se derivan siempre del estu-
posee sus premisas. Parte de las condi-
dio del proceso de vida real y de la
cionas reales y no las pierde de vista ni
acción de los individuos en cada época.
por un momento. Sus premisas son los
Destacaremos aquí algunas de estas
hombres, pero no tomados en un aisla-
abstracciones, para oponerlas a la ide-
miento y rigidez fantástica, sino en su
ología, ilustrándolas con algunos ejem-
proceso de desarrollo real y empírica-
plos históricos.
mente registrable, bajo la acción de
determinadas condiciones. En cuanto [……….]
se expone este proceso activo de vida,
la historia deja de ser una colección de
hechos muertos, como lo es para los [3. Relaciones históricas primarias,
empíricos, todavía abstractos, o una o aspectos básicos de la actividad
acción imaginaria de sujetos imagina- social: producción de medios de sub-
rios, como lo es para los idealistas. sistencia, creación de nuevas necesi-
dades, reproducción del hombre (la
Allí donde termina la especulación, en
familia), relación social, conciencia]
la vida real, comienza también la cien-
cia real y positiva, la exposición de la Tratándose de los alemanes, situados
acción práctica, del proceso práctico de al margen de toda premisa, debemos
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 29

comenzar señalando que la primera esta primera necesidad, la acción de


premisa de toda existencia humana y satisfacerla y la adquisición del instru-
también, por tanto, de toda historia, es mento necesario para ello conduce a
que los hombres se hallen, para «hacer nuevas necesidades, y esta creación de
historia», en condiciones de poder vivir. necesidades nuevas constituye el pri-
Ahora bien, para vivir hacen falta ante mer hecho histórico. Y ello demuestra
todo comida, bebida, vivienda, ropa y inmediatamente de quién es hija espiri-
algunas cosas más(7). El primer hecho tual la gran sabiduría histórica de los
histórico es, por consiguiente, la pro- alemanes que, cuando les falta el mate-
ducción de los medios indispensables rial positivo y no se trata de necedades
para la satisfacción de estas necesida- políticas, teológicas ni literarias, no nos
des, es decir la producción de la vida ofrecen ninguna clase de historia, sino
material misma, y no cabe duda de que que hacen desfilar ante nosotros los
es éste un hecho histórico, una condi- «tiempos prehistóricos», pero sin dete-
ción fundamental de toda historia, que nerse a explicarnos cómo se pasa de
lo mismo hoy que hace miles de años, este absurdo de la «prehistoria» a la his-
necesita cumplirse todos los días y a toria en sentido propio, aunque es evi-
todas horas, simplemente para asegu- dente, por otra parte, que sus especu-
rar la vida de los hombres. Y aun cuan- laciones históricas se lanzan con espe-
do la vida de los sentidos se reduzca al cial fruición a esta «prehistoria» porque
mínimum, a lo más elemental —a un en ese terreno creen hallarse a salvo de
palo—(8), como en San Bruno, este la ingerencia de los «toscos hechos» y,
mínimo presupondrá siempre, necesa- al mismo tiempo, porque aquí pueden
riamente, la producción de dicho palo. dar rienda suelta a sus impulsos espe-
Por consiguiente, lo primero, en toda culativos y proponer y echar por tierra
concepción histórica, es observar este miles de hipótesis.
hecho fundamental en toda su signifi-
El tercer factor que aquí interviene
cación y en todo su alcance y colocarlo
desde un principio en el desarrollo his-
en el lugar que le corresponde. Cosa
tórico es el de que los hombres que
que los alemanes, como es sabido, no
renuevan diariamente su propia vida
han hecho nunca, razón por la cual
comienzan al mismo tiempo a crear a
jamás han tenido una base terrenal
otros hombres, a procrear: es la rela-
para la historia ni, consiguientemente,
ción entre marido y mujer, entre padres
un historiador. Los franceses y los
e hijos, la familia. Esta familia, que al
ingleses, aun cuando concibieron de un
principio constituye la única relación
modo extraordinariamente unilateral el
social, más tarde, cuando las necesida-
entronque de este hecho con la llamada
des, al multiplicarse, crean nuevas
historia, sobre todo los que se vieron
relaciones sociales y, a su vez, al
prisioneros de la ideología política,
aumentar el censo humano, brotan
hicieron, sin embargo, los primeros
nuevas necesidades, pasa a ser (salvo
intentos encaminados a dar a la histo-
en Alemania) una relación secundaria y
riografía una base material, al escribir
tiene, por tanto, que tratarse y desarro-
las primeras historias de la sociedad
llarse con arreglo a los datos empíricos
civil, del comercio y de la industria.
existentes, y no ajustándose al «con-
Lo segundo es que la satisfacción de cepto de la familia» misma, como se
30- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

suele hacer en Alemania. alguna. Se manifiesta, por tanto, ya de


antemano, una conexión materialista
Por lo demás, estos tres aspectos de
de los hombres entre sí, condicionada
la actividad social no deben considerar- por las necesidades y el modo de pro-
se como tres peldaños distintos, sino ducción y que es tan vieja como los
sencillamente como eso, como tres hombres mismos; conexión que adopta
aspectos o, para decirlo de modo más constantemente nuevas formas y que
comprensible a los alemanes, como tres ofrece, por consiguiente, una «historia»,
«momentos» que han coexistido desde aún sin que exista cualquier absurdo
el principio de la historia y desde el pri- político o religioso que mantenga, ade-
mer hombre y que todavía hoy siguen más, unidos a los hombres.
rigiendo en la historia.
Solamente ahora, después de haber
La producción de la vida, tanto de la considerado ya cuatro momentos, cua-
propia en el trabajo, como de la ajena tro aspectos de las relaciones origina-
en la procreación, se manifiesta inme- rias históricas, caemos en la cuenta de
diatamente como una doble relación — que el hombre tiene también «concien-
de una parte, como una relación natu- cia». Pero, tampoco ésta es desde un
ral, y de otra como una relación principio una conciencia «pura». El
social—; social, en el sentido de que por «espíritu» nace ya tratado con la maldi-
ella se entiende la cooperación de diver- ción de estar «preñado» de materia, que
sos individuos, cualesquiera que sean aquí se manifiesta bajo la forma de
sus condiciones, de cualquier modo y capas de aire en movimiento, de soni-
para cualquier fin. De donde se des- dos, en una palabra, bajo la forma del
prende que un determinado modo de lenguaje. El lenguaje es tan viejo como
producción o una determinada fase la conciencia: el lenguaje es la concien-
industrial lleva siempre aparejado un cia práctica, la conciencia real, que
determinado modo de cooperación o un existe también para los otros hombres
determinado peldaño social, modo de y que, por tanto, comienza a existir
cooperación que es a su vez, una «fuer- también para mí mismo; y el lenguaje
za productiva»; que la suma de las fuer- nace, como la conciencia, de la necesi-
zas productivas accesibles al hombre dad, de los apremios de relación con los
condiciona el estado social y que, por demás hombres. Donde existe una acti-
tanto, la «historia de la humanidad» tud, existe para mí, pues el animal no
debe estudiarse y elaborarse siempre tiene «actitud» ante nada ni, en general,
en conexión con la historia de la indus- podemos decir que tenga «actitud» algu-
tria y del intercambio. Pero, asimismo na. Para el animal, sus relaciones con
es evidente que en Alemania no se otros no existen como tales relaciones.
puede escribir este tipo de historia, ya La conciencia, por tanto, es ya de ante-
que los alemanes carecen, no sólo de la mano un producto social, y lo seguirá
capacidad de concepción y del material siendo mientras existan seres huma-
necesarios, sino también de la «certeza» nos. La conciencia es, en principio,
adquirida a través de los sentidos, y de naturalmente, conciencia del mundo
que del otro lado del Rin no es posible inmediato y sensorio que nos rodea y
reunir experiencias, por la sencilla conciencia de los nexos limitados con
razón de que allí no ocurre ya historia otras personas y cosas, fuera del indivi-
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 31

duo consciente de sí mismo; y es, al trabajo en el acto sexual y, más tarde,


mismo tiempo, conciencia de la natura- de una división del trabajo espontáneo
leza, que al principio se enfrenta al o introducida de un modo «natural» en
hombre como un poder absolutamente atención a las dotes físicas (por ejem-
extraño, omnipotente e inexpugnable, plo, la fuerza corporal), a las necesida-
ante el que la actitud de los hombres es des, a las coincidencias fortuitas, etc.,
puramente animal y al que se someten etc. La división del trabajo sólo se con-
como el ganado; es, por tanto, una con- vierte en verdadera división a partir del
ciencia puramente animal de la natura- momento en que se separan el trabajo
leza (religión natural). material y el mental. Desde este instan-
te, puede ya la conciencia imaginarse
Inmediatamente, vemos aquí que esta
realmente que es algo más y algo dis-
religión natural o esta determinada
tinto que la conciencia de la práctica
actitud hacia la naturaleza se halla
existente, que representa realmente
determinada por la forma social, y a la
algo sin representar algo real; desde
inversa. En este caso, como en todos, la
este instante se halla la conciencia en
identidad entre la naturaleza y el hom-
condiciones de emanciparse del mundo
bre se manifiesta también de tal modo
y entregarse a la creación de la teoría
que la actitud limitada de los hombres
«pura», de la teología «pura», la filosofía
hacia la naturaleza condiciona la limi-
«pura», la moral «pura», etc. Pero, aun
tada actitud de unos hombres para con
cuando esta teoría, esta teología, esta
otros, y ésta, a su vez, determina su
filosofía, esta moral, etc., se hallen en
actitud limitada hacia la naturaleza,
contradicción con las relaciones exis-
precisamente porque la naturaleza ape-
tentes, esto sólo podrá explicarse por
nas ha sufrido aún modificación histó-
que las relaciones sociales existentes se
rica alguna. Y, de otra parte, la con-
hallan, a su vez, en contradicción con
ciencia de la necesidad de entablar
la fuerza productiva dominante; cosa
relaciones con los individuos circun-
que, por lo demás, dentro de un deter-
dantes es el comienzo de la conciencia
minado círculo nacional de relaciones,
de que el hombre vive, en general, den-
podrá suceder también por que la con-
tro de una sociedad. Este comienzo es
tradicción no se da en el seno de esta
algo tan animal como la propia vida
órbita nacional, sino entre esta con-
social, en esta fase; es, simplemente,
ciencia nacional y la práctica de otras
una conciencia gregaria, y, en este
naciones; es decir, entre la conciencia
punto, el hombre sólo se distingue del
nacional y la conciencia general de una
cordero por cuanto que su conciencia
nación (como ocurre actualmente en
sustituye al instinto o es el suyo un ins-
Alemania); pero, dado que esta contra-
tinto consciente. Esta conciencia grega-
dicción se presenta como contradicción
ria o tribal se desarrolla y se perfeccio-
existente sólo dentro del cuadro de la
na después, al aumentar la productivi-
conciencia nacional, a tal nación le
dad, al incrementarse las necesidades y
parece que también la lucha se cir-
al multiplicarse la población, que es el
cunscribe a dicha escoria nacional.
factor sobre que descansan los dos
anteriores. A la par con ello se desarro- Por lo demás, es de todo punto indife-
lla la división del trabajo, que origina- rente lo que la conciencia por sí sola
riamente no pasaba de la división del haga o emprenda, pues de toda esta
32- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

escoria sólo obtendremos un resultado, diando a partir de esas premisas su


a saber: que estos tres momentos, la proceso de nacimiento, lo que, natural-
fuerza productiva, el estado social y la mente, permitirá exponer las cosas en
conciencia, pueden y deben necesaria- su totalidad (y también, por ello mismo,
mente entrar en contradicción entre sí, la interdependencia entre estos diver-
ya que, con la división del trabajo, se da sos aspectos). Esta concepción, a dife-
la posibilidad, más aún, la realidad de rencia de la idealista, no busca una
que las actividades espirituales y mate- categoría en cada período, sino que se
riales, el disfrute y el trabajo, la pro- mantiene siempre sobre el terreno his-
ducción y el consumo, se asignen a tórico real, no explica la práctica par-
diferentes individuos, y la posibilidad tiendo de la idea, sino explica las for-
de que no caigan en contradicción resi- maciones ideológicas sobre la base de
de solamente en que vuelva a abando- la práctica material, por lo cual llega,
narse la división del trabajo. Por lo consecuentemente, a la conclusión de
demás, de suyo se comprende que los que todas las formas y todos los pro-
«espectros», los «nexos», los «seres supe- ductos de la conciencia no pueden ser
riores», los «conceptos», los «reparos», destruidos por obra de la crítica espiri-
no son más que la expresión espiritual tual, mediante la reducción a la «auto-
puramente idealista, la idea del indivi- conciencia» o la transformación en «fan-
duo imaginariamente aislado, la repre- tasmas», «espectros», «visiones»(9), etc,
sentación de trabas y limitaciones muy sino que sólo pueden disolverse por el
empíricas dentro de las cuales se derrocamiento práctico de las relacio-
mueve el modo de producción de la vida nes sociales reales, de las que emanan
y la forma de relación congruente con estas quimeras idealistas; de que la
él. fuerza propulsora de la historia, inclu-
so la de la religión, la filosofía, y toda
[……….]
teoría, no es la crítica, sino la revolu-
ción. Esta concepción revela que la his-
toria no termina disolviéndose en la
[7. Resumen de la concepción
«autoconciencia», como el «espíritu del
materialista de la historia]
espíritu» , sino que en cada una de sus
Esta concepción de la historia consis- fases se encuentra un resultado mate-
te, pues, en exponer el proceso real de rial, una suma de fuerzas productivas,
producción, partiendo para ello de la una actitud históricamente creada de
producción material de la vida inmedia- los hombres hacia la naturaleza y de
ta, y en concebir la forma de intercam- los unos hacia los otros, que cada gene-
bio correspondiente a este modo de ración transfiere a la que le sigue, una
producción y engendrada por él, es masa de fuerzas productivas, capitales
decir, la sociedad civil en sus diferentes y circunstancias, que, aunque de una
fases como el fundamento de toda la parte sean modificados por la nueva
historia, presentándola en su acción en generación, dictan a ésta, de otra parte,
cuanto Estado y explicando a base de él sus propias condiciones de vida y le
todos los diversos productos teóricos y imprimen un determinado desarrollo,
formas de la conciencia, la religión, la un carácter especial; de que, por tanto,
filosofía, la moral, etc., así como estu- las circunstancias hacen al hombre en
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 33

la misma medida en que éste hace a las NOTAS:


circunstancias. 1- Se refiere a la obra fundamental de D. F.
Strauss "Das Leben Jesu" ("La vida de Jesús"),
Esta suma de fuerzas productivas,
Bd. 1-2, Tübingen, 1835-1836, que puso comien-
capitales y formas de relación social zo a la crítica filosófica de la religión y a la divi-
con que cada individuo y cada genera- sión de la escuela hegeliana en viejos hegelianos
ción se encuentran como con algo dado y jóvenes hegelianos.
es el fundamento real de lo que los filó-
2- Se alude a la revolución burguesa de fines
sofos se representan como la «sustan- del siglo XVIII en Francia.
cia» y la «esencia del hombre», eleván-
dolo a la apoteosis y combatiéndolo; un 3- Diadocos: generales de Alejandro Magno
que se enzarzaron al fallecer éste, en enconada
fundamento real que no se ve menosca- lucha por el poder. A lo largo de esta lucha (fines
bado en lo más mínimo en cuanto a su del siglo IV y comienzos del siglo III a. de n. e.), la
acción y a sus influencias sobre el des- monarquía de Alejandro, que era, en sí, una
arrollo de los hombres por el hecho de agrupación administrativo-militar efímera, se
que estos filósofos se rebelen contra él dividió en varios Estados.
como «autoconciencia» y como el 4- En este caso con la palabra “trato” se tradu-
«Unico». Y estas condiciones de vida ce el término alemán «verkehr» que en "La
con que las diferentes generaciones se Ideología Alemana" tiene un contenido muy
encuentran al nacer deciden también si amplio. Incluye la comunicación material y espi-
las conmociones revolucionarias que ritual de individuos, grupos sociales y países
periódicamente se repiten en la historia enteros. Marx y Engels muestran en su obra que
el trato material entre las personas, sobre todo en
serán o no lo suficientemente fuertes el proceso de producción, es la base de todo otro
para derrocar la base de todo lo exis- trato. En los términos Verkehrsform,
tente. Y si no se dan estos elementos Verkehrsweise, Verkehrs-verhältnisse, Produk-
materiales de una conmoción total, o tions- und Verkehrs-verhältnisse («forma de
sea, de una parte, las fuerzas producti- trato», «modo de trato», «relaciones de trato»,
vas existentes y, de otra, la formación «relaciones de producción y trato»), que se usan
en la "Ideología Alemana", encontró expresión el
de una masa revolucionaria que se
concepto de relaciones de producción que, por
levante, no sólo en contra de ciertas entonces, Marx y Engels tenían en proceso de for-
condiciones de la sociedad anterior, mación.
sino en contra de la misma «producción
5- El término «Stamm», que se traduce en "La
de la vida» vigente hasta ahora, contra
Ideología Alemana» por «tribu», tenía en la ciencia
la «actividad de conjunto» sobre que de los años 40 del siglo XIX un significado más
descansa, en nada contribuirá a hacer amplio que en la actualidad. Implicaba conjunto
cambiar la marcha práctica de las de personas que procedían de un mismo antece-
cosas el que la idea de esta conmoción sor y abarcaba los conceptos modernos de «gens»
haya sido proclamada ya una o cien y «tribu». La definición exacta y la distinción de
veces, como lo demuestra la historia del estos conceptos se dio por primera vez en el libro
de L. Morgan "La sociedad antigua" (1877). Al
comunismo.
sintetizar los resultados de las investigaciones de
Morgan, Engels desplegó en todos los aspectos el
contenido de los conceptos «gens» y «tribu» en su
obra "El origen de la familia, la propiedad priva-
da y el Estado" (1884) (véase la presente edición,
t. 3).
34- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

6- La ley agraria de los tribunos populares 8- Se alude a una expresión que B. Bauer hace
romanos Licinio y Sexto, adoptada en el año 367 en su "Característica de Ludwig Feuerbach"
a. de n. e., prohibía a los ciudadanos romanos ("Wigand's Vierteljahrsschrift" de 1845, t. III, pág.
poseer más de 500 yugadas (unas 125 ha) de tie- 130).
rra de fondo público (ager publicus).
9- Expresiones del libro de M. Stirner "El único
7- Véase Hegel, "Filosofía de la Historia, y su propiedad" (M. Stirner. "Der Einzige und sein
Introducción, Base geográfica de la Historia Eigenthum". Leipzig, 1845).
Universal".
10- Expresión de B. Bauer.
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 35

Tesis sobre Feuerbach


Carlos Marx

Nota sobre el texto: Escrito en alemán por Carlos Marx en


la primavera de 1845, fue publicado por primera vez por Friedrich Engels en
1888 como apéndice a la edición de su obra Ludwig Feuerbach y el fin de la
filosofía clásica alemana. Actualmente se publica de manera habitual junto
con el texto de Marx y Engels La ideología alemana. La presente versión
digital se extrajo de Marxists Internet Archive (http://www.marxists.org).

[I] El defecto fundamental de todo el judaica de manifestarse. Por tanto, no


materialismo anterior -incluido el de comprende la importancia de la actua-
Feuerbach- es que sólo concibe las ción "revolucionaria", "práctico-crítica".
cosas, la realidad, la sensoriedad, bajo
[II] El problema de si al pensamiento
la forma de objeto o de contemplación,
humano se le puede atribuir una ver-
pero no como actividad sensorial
dad objetiva, no es un problema teóri-
humana, no como práctica, no de un
co, sino un problema práctico. Es en la
modo subjetivo. De aquí que el lado
práctica donde el hombre tiene que
activo fuese desarrollado por el idealis-
demostrar la verdad, es decir, la reali-
mo, por oposición al materialismo, pero
dad y el poderío, la terrenalidad de su
sólo de un modo abstracto, ya que el
pensamiento. El litigio sobre la realidad
idealismo, naturalmente, no conoce la
o irrealidad de un pensamiento que se
actividad real, sensorial, como tal.
aísla de la práctica, es un problema
Feuerbach quiere objetos sensoriales,
puramente escolástico.
realmente distintos de los objetos con-
ceptuales; pero tampoco él concibe la [III] La teoría materialista de que los
propia actividad humana como una hombres son producto de las circuns-
actividad objetiva. Por eso, en La esen- tancias y de la educación, y de que por
cia del cristianismo sólo considera la tanto, los hombres modificados son
actitud teórica como la auténticamente producto de circunstancias distintas y
humana, mientras que concibe y fija la de una educación modificada, olvida
práctica sólo en su forma suciamente que son los hombres, precisamente, los
36- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

que hacen que cambien las circunstan- esencia humana no es algo abstracto
cias y que el propio educador necesita inherente a cada individuo. Es, en su
ser educado. Conduce, pues, forzosa- realidad, el conjunto de las relaciones
mente, a la sociedad en dos partes, una sociales. Feuerbach, que no se ocupa
de las cuales está por encima de la de la crítica de esta esencia real, se ve,
sociedad (así, por ej., en Robert Owen). por tanto, obligado a hacer abstracción
La coincidencia de la modificación de de la trayectoria histórica, enfocando
las circunstancias y de la actividad para sí el sentimiento religioso (Gemüt)
humana sólo puede concebirse y enten- y presuponiendo un individuo humano
derse racionalmente como práctica abstracto, aislado. En él, la esencia
revolucionaria. humana sólo puede concebirse como
"género", como una generalidad inter-
[IV] Feuerbach arranca de la autoe-
na, muda, que se limita a unir natural-
najenación religiosa, del desdoblamien-
mente los muchos individuos.
to del mundo en un mundo religioso,
imaginario, y otro real. Su cometido [VII] Feuerbach no ve, por tanto, que el
consiste en disolver el mundo religioso, "sentimiento religioso" es también un pro-
reduciéndolo a su base terrenal. No ducto social y que el individuo abstracto
advierte que, después de realizada esta que él analiza pertenece, en realidad, a
labor, queda por hacer lo principal. En una determinada forma de sociedad.
efecto, el que la base terrenal se separe
[VIII] La vida social es, en esencia,
de sí misma y se plasme en las nubes
práctica. Todos los misterios que des-
como reino independiente, sólo puede
carrían la teoría hacia el misticismo,
explicarse por el propio desgarramiento
encuentran su solución racional en la
y la contradicción de esta base terrenal
práctica humana y en la comprensión
consigo misma. Por tanto, lo primero
de esa práctica.
que hay que hacer es comprender ésta
en su contradicción y luego revolucio- [IX] A lo que más llega el materialis-
narla prácticamente eliminando la con- mo contemplativo, es decir, el materia-
tradicción. Por consiguiente, después lismo que no concibe la sensoriedad
de descubrir, por ejemplo, en la familia como actividad práctica, es a contem-
terrenal el secreto de la sagrada familia, plar a los distintos individuos dentro de
hay que criticar teóricamente y revolu- la "sociedad civil".
cionar prácticamente aquélla.
[X] El punto de vista del antiguo
[V] Feuerbach, no contento con el materialismo es la sociedad civil; el del
pensamiento abstracto, apela a la con- nuevo materialismo, la sociedad huma-
templación sensorial; pero no concibe na o la humanidad socializada.
la sensoriedad como una actividad sen-
[XI] Los filósofos no han hecho más
sorial humana práctica.
que interpretar de diversos modos el
[VI] Feuerbach diluye la esencia reli- mundo, pero de lo que se trata es de
giosa en la esencia humana. Pero la transformarlo.
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 37

Prólogo a la
Contribución a la
Crítica de la Economía
Política
Carlos Marx

Nota sobre el texto: La obra “Contribución a la crítica de


la economía política” escrita durante 1858 en Londres por Marx -simultánea
e inmediatamente posterior a la obra Elementos fundamentales para la crí-
tica de la economía política (los Grundrisse)- se convertirá en el primer libro
que publicará Marx dedicado explícitamente a la “economía política” antece-
dente de “El Capital. Publicado en 1859, su prólogo presenta un relato auto-
biográfico de Marx sobre su periplo político-intelectual y reitera una versión
breve de la visión del “materialismo histórico” refiriéndolo por primera vez a
través de las ideas de estructura y superestructura. La presente versión digi-
tal se extrajo del Marxists Internet Archive (http://www.marxists.org).

Estudio el sistema de la Economía tadas con grandes intervalos de tiempo


burguesa por este orden: capital, pro- para el esclarecimiento de mis propias
piedad del suelo, trabajo asalariado; ideas y no para su publicación; la ela-
Estado, comercio exterior, mercado mun- boración sistemática de todos estos
dial. Bajo los tres primeros títulos, materiales con arreglo al plan apunta-
investigo las condiciones económicas do dependerá de circunstancias exter-
de vida de las tres grandes clases en nas.
que se divide la moderna sociedad bur-
guesa; la conexión entre los tres títulos Aunque había esbozado una intro-
restantes salta a la vista. La primera ducción general, prescindo de ella,
sección del libro primero, que trata del pues, bien pensada la cosa, creo que el
capital, contiene los siguientes capítu- adelantar los resultados que han de
los: 1) la mercancía; 2) el dinero o la cir- demostrarse, más bien sería un estor-
culación simple; 3) el capital, en gene- bo, y el lector que quiera realmente
ral. Los dos primeros capítulos forman seguirme deberá estar dispuesto a
el contenido del presente fascículo. remontarse de lo particular a lo gene-
Tengo ante mí todos los materiales de ral. En cambio, me parecen oportunas
la obra en forma de monografías, redac- aquí algunas referencias acerca de la
38- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

trayectoria de mis estudios de Mi primer trabajo emprendido para


Economía Política. resolver las dudas que me azotaban,
fue una revisión crítica de la filosofía
Mis estudios profesionales eran los de
hegeliana del derecho[3], trabajo cuya
jurisprudencia, de la que, sin embargo, introducción apareció en 1844 en los
sólo me preocupé como disciplina “Anales franco-alemanes”[4] que se
secundaria, junto a la filosofía y la his- publicaban en París. Mi investigación
toria. En 1842 1843, siendo redactor de me llevó a la conclusión de que, tanto
la “Gaceta Renana”[1] me vi por prime- las relaciones jurídicas como las for-
ra vez en el trance difícil de tener que mas de Estado no pueden comprender-
opinar sobre los llamados intereses se por sí mismas ni por la llamada evo-
materiales. Los debates de la Dieta lución general del espíritu humano,
renana sobre la tala furtiva y la parce- sino que, por el contrario, radican en
lación de la propiedad de la tierra, la las condiciones materiales de vida cuyo
polémica oficial mantenida entre el conjunto resume Hegel siguiendo el
señor von Schaper, por entonces gober- precedente de los ingleses y franceses
nador de la provincia renana, y la del siglo XVIII, bajo el nombre de
“Gaceta Renana” acerca de la situación “sociedad civil”, y que la anatomía de la
de los campesinos de Mosela y, final- sociedad civil hay que buscarla en la
mente, los debates sobre el librecambio economía política. En Bruselas a donde
y el proteccionismo, fue lo que me me trasladé a consecuencia de una
movió a ocuparme por primera vez de orden de destierro dictada por el señor
cuestiones económicas. Por otra parte, Guizot proseguí mis estudios de econo-
en aquellos tiempos en que el buen mía política comenzados en París. El
deseo de “ir adelante” superaba en resultado general al que llegué y que
mucho el conocimiento de la materia, la una vez obtenido sirvió de hilo conduc-
“Gaceta Renana” dejaba traslucir un tor a mis estudios puede resumirse así:
eco del socialismo y del comunismo en la producción social de su vida los
francés, teñido de un tenue matiz filo- hombres establecen determinadas rela-
sófico. Yo me declaré en contra de ese ciones necesarias e independientes de
trabajo de aficionados, pero confesando su voluntad, relaciones de producción
al mismo tiempo sinceramente, en una que corresponden a una fase determi-
controversia con la “Gaceta General” de nada de desarrollo de sus fuerzas pro-
Ausburgo[2] que mis estudios hasta ese ductivas materiales. El conjunto de
entonces no me permitían aventurar estas relaciones de producción forma la
ningún juicio acerca del contenido pro- estructura económica de la sociedad, la
piamente dicho de las tendencias fran- base real sobre la que se levanta la
cesas. Con tanto mayor deseo aprove- superestructura jurídica y política y a
ché la ilusión de los gerentes de la la que corresponden determinadas for-
“Gaceta Renana”, quienes creían que mas de conciencia social. El modo de
suavizando la posición del periódico producción de la vida material condi-
iban a conseguir que se revocase la ciona el proceso de la vida social políti-
sentencia de muerte ya decretada con- ca y espiritual en general. No es la con-
tra él, para retirarme de la escena ciencia del hombre la que determina su
pública a mi cuarto de estudio. ser sino, por el contrario, el ser social
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 39

es lo que determina su conciencia. Al dad se propone siempre únicamente los


llegar a una fase determinada de des- objetivos que puede alcanzar, porque,
arrollo las fuerzas productivas materia- mirando mejor, se encontrará siempre
les de la sociedad entran en contradic- que estos objetivos sólo surgen cuando
ción con las relaciones de producción ya se dan o, por lo menos, se están ges-
existentes o, lo que no es más que la tando, las condiciones materiales para
expresión jurídica de esto, con las rela- su realización. A grandes rasgos, pode-
ciones de propiedad dentro de las cua- mos designar como otras tantas épocas
les se han desenvuelto hasta allí. De de progreso en la formación económica
formas de desarrollo de las fuerzas pro- de la sociedad el modo de producción
ductivas, estas relaciones se convierten asiático, el antiguo, el feudal y el
en trabas suyas, y se abre así una moderno burgués. Las relaciones bur-
época de revolución social. Al cambiar guesas de producción son la última
la base económica se transforma, más forma antagónica del proceso social de
o menos rápidamente, toda la inmensa producción; antagónica, no en el senti-
superestructura erigida sobre ella. do de un antagonismo individual, sino
Cuando se estudian esas transforma- de un antagonismo que proviene de las
ciones hay que distinguir siempre entre condiciones sociales de vida de los indi-
los cambios materiales ocurridos en las viduos. Pero las fuerzas productivas
condiciones económicas de producción que se desarrollan en la sociedad bur-
y que pueden apreciarse con la exacti- guesa brindan, al mismo tiempo, las
tud propia de las ciencias naturales, y condiciones materiales para la solución
las formas jurídicas, políticas, religio- de este antagonismo. Con esta forma-
sas, artísticas o filosóficas, en una ción social se cierra, por lo tanto, la
palabra las formas ideológicas en que prehistoria de la sociedad humana.
los hombres adquieren conciencia de Federico Engels, con el que yo mante-
este conflicto y luchan por resolverlo. Y nía un constante intercambio escrito de
del mismo modo que no podemos juz- ideas desde la publicación de su genial
gar a un individuo por lo que él piensa bosquejo sobre la crítica de las categorí-
de sí, no podemos juzgar tampoco a as económicas en los Deutsch
estas épocas de transformación por su Französische Jahrbücher[5], había llega-
conciencia, sino que, por el contrario, do por distinto camino (véase su libro La
hay que explicarse esta conciencia por situación de la clase obrera en Inglaterra)
las contradicciones de la vida material, al mismo resultado que yo. Y cuando, en
por el conflicto existente entre las fuer- la primavera de 1845, se estableció tam-
zas productivas sociales y las relacio- bién en Bruselas, acordamos elaborar en
nes de producción. Ninguna formación común la contraposición de nuestro
social desaparece antes de que se des- punto de vista con el punto de vista ide-
arrollen todas las fuerzas productivas ológico de la filosofía alemana; en reali-
que caben dentro de ella, y jamás apa- dad, liquidar cuentas con nuestra con-
recen nuevas y más elevadas relaciones ciencia filosófica anterior. El propósito
de producción antes de que las condi- fue realizado bajo la forma de una crítica
ciones materiales para su existencia de la filosofía poshegeliana[6]. El manus-
hayan madurado dentro de la propia crito dos gruesos volúmenes en octavo
sociedad antigua. Por eso, la humani- ya hacía mucho tiempo que había llega-
40- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

do a su sitio de publicación en Westfalia, los nuevos materiales. Estos estudios a


cuando nos enteramos de que nuevas veces me llevaban por sí mismos a
circunstancias imprevistas impedían su campos aparentemente alejados y en
publicación. En vista de eso, entregamos los que tenía que detenerme durante
el manuscrito a la crítica roedora de los más o menos tiempo. Pero lo que sobre
ratones, muy de buen grado, pues nues- todo reducía el tiempo de que disponía
tro objeto principal: esclarecer nuestras era la necesidad imperiosa de trabajar
propias ideas, ya había sido logrado. para vivir. Mi colaboración desde hace
Entre los trabajos dispersos en que por ya ocho años en el primer periódico
aquel entonces expusimos al público anglo americano, el New York Daily
nuestras ideas, bajo unos u otros aspec- Tribune, me obligaba a desperdigar
tos, sólo citaré el Manifiesto del Partido extraordinariamente mis estudios, ya
Comunista escrito conjuntamente por que sólo en casos excepcionales me
Engels y por mí, y un Discurso sobre el dedico a escribir para la prensa corres-
librecambio, publicado por mí. Los pun- pondencias propiamente dichas. Sin
tos decisivos de nuestra concepción fue- embargo, los artículos sobre los aconte-
ron expuestos por primera vez científica- cimientos económicos más salientes de
mente, aunque sólo en forma polémica, Inglaterra y del continente formaban
en la obra Miseria de la filosofía, publica- una parte tan importante de mi colabo-
da por mí en 1847 y dirigida contra ración, que esto me obligaba a familia-
Proudhon. La publicación de un estudio rizarme con una serie de detalles de
escrito en alemán sobre el Trabajo asala- carácter práctico situados fuera de la
riado[7], en el que recogía las conferen- órbita de la verdadera ciencia de la eco-
cias que había dado acerca de este tema nomía política.
en la Asociación Obrera Alemana de
Bruselas[8], fue interrumpida por la Este esbozo sobre la trayectoria de
revolución de febrero, que trajo como mis estudios en el campo de la econo-
consecuencia mi alejamiento forzoso de mía política tiende simplemente a
Bélgica. demostrar que mis ideas, cualquiera
que sea el juicio que merezcan, y por
La publicación de la “Nueva Gaceta mucho que choquen con los prejuicios
Renana” (1848 1849) y los aconteci- interesados de las clases dominantes,
mientos posteriores interrumpieron son el fruto de largos años de concien-
mis estudios económicos, que no pude zuda investigación. Pero en la puerta de
reanudar hasta 1850, en Londres. El la ciencia, como en la del infierno,
enorme material sobre la historia de la debiera estamparse esta consigna:
economía política acumulado en el
British Museum, la posición tan favora- Qui si convien lasciare ogni sospetto;
ble que brinda Londres para la observa- Ogni viltá convien che qui sia morta [9]
ción de la sociedad burguesa y, final-
mente, la nueva etapa de desarrollo en Londres, enero de 1859.
que parecía entrar ésta con el descubri-
miento del oro en California y en
Australia, me impulsaron a volver a Publicado en el libro; Zur Kritik der pli-
empezar desde el principio, abriéndome tischen Oekonomie von Karl Marx,
paso, de un modo crítico, a través de Erstes Heft, Berlín 1859.
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 41

NOTAS [7] Marx, Trabajo asalariado y capital.

[1] Gaceta Renana (“Rheinische Zeitung”): dia- [8] La Asociación Obrera Alemana de Bruselas
rio radical que se publicó en Colonia en 1842 y fue fundada por Marx y Engels a fines de agosto
1843. Marx fue su jefe de redacción desde el 15 de 1847, con el fin de educar políticamente a los
de octubre de 1842 hasta el 18 de marzo de 1843. obreros alemanes residentes en Bélgica y propa-
gar entre ellos las ideas del comunismo científico.
[2] Gaceta General (“Allegemeine Zeitung”): dia- Bajo la dirección de Marx, Engels y sus compañe-
rio alemán reaccionario fundado en 1798; desde ros, la sociedad se convirtió en un centro legal de
1810 hasta 1882 se editó en Ausburgo. En 1842 unión de los proletarios revolucionarios alemanes
publicó una falsificación de las ideas del comu- en Bélgica y mantenía contacto directo con los
nismo y el socialismo utópicos y Marx lo desen- clubes obreros flamencos y valones. Los mejores
mascaró en su artículo “El comunismo y el elementos de la asociación entraron luego en la
Allegemeine Zeitung de Ausburgo”, que fue publi- organización de Bruselas de la Liga de los
cado en Rheinische Zeitung en octubre de 1842. Comunistas. Las actividades de la Asociación
[3] C. Marx, Contribución a la crítica de la filo- Alemana en Bruselas se suspendieron poco des-
sofía del derecho de Hegel. pués de la revolución burguesa de febrero de
1848 en Francia, debido al arresto y expulsión de
[4] Deutsch französische Jahrbücher (“Anales sus miembros por la policía belga.
franco alemanes”): órgano de la propaganda revo-
lucionaria y comunista, editado por Marx en [9] Frase de La Divina Comedia de Dante
París, en el año 1844. Alighieri que significa [Y a la puerta de la ciencia,
como a la del infierno, debiera estamparse esta
[5] “Anales franco alemanes” consigna] “Déjese aquí cuanto sea recelo /
[6] Marx y Engels, La ideología alemana. Mátese aquí cuanto sea vileza”.
42- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2
Primer encuentro: Marx, marxismos y pensamiento crítico - 43

Carta de Federico
Engels
A José Bloch
Nota sobre el texto: A fines de
la década de 1880 las interpre-
taciones mecanicistas y econo-
micistas del “materialismo his-
tórico” motivaron que Federido
Engels, ya fallecido Marx, enta-
blara una intensa polémica
frente a estos razonamientos.
En estos debates Engels hará
mención al término “determi-
nación en última instancia”.
Reproducimos a continuación
un fragmento de una de esas
cartas, en este caso enviada a
Jose Bloch que sostuviera jus-
tamente la visión reduccionista
que Engels criticara. La presen-
te versión digital se extrajo de
Marxists Internet Archive
(http://www.marxists.org).

Londres, 21- [22] de setiembre de aquella tesis en una frase vacua, abs-
1890. tracta, absurda. La situación económi-
....Según la concepción materialista ca es la base, pero los diversos factores
de la historia, el factor que en última de la superestructura que sobre ella se
instancia determina la historia es la levanta --las formas políticas de la
producción y la reproducción de la vida lucha de clases y sus resultados, las
real. Ni Marx ni yo hemos afirmado Constituciones que, después de ganada
nunca más que esto. Si alguien lo tergi- una batalla, redacta la clase triunfante,
versa diciendo que el factor económico etc., las formas jurídicas, e incluso los
es el único determinante, convertirá reflejos de todas estas luchas reales en
44- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

el cerebro de los participantes, las teo- un duende en las cabezas de los hom-
rías políticas, jurídicas, filosóficas, las bres. También el Estado prusiano ha
ideas religiosas y el desarrollo ulterior nacido y se ha desarrollado por causas
de éstas hasta convertirlas en un siste- históricas, que son, en última instan-
ma de dogmas-- ejercen también su cia, causas económicas. […]
influencia sobre el curso de las luchas
[…] El que los discípulos hagan a
históricas y determinan, predominante-
veces más hincapié del debido en el
mente en muchos casos, su forma. Es
aspecto económico, es cosa de la que,
un juego mutuo de acciones y reaccio-
en parte, tenemos la culpa Marx y yo
nes entre todos estos factores, en el
mismo. Frente a los adversarios, tenía-
que, a través de toda la muchedumbre
mos que subrayar este principio cardi-
infinita de casualidades (es decir, de
nal que se negaba, y no siempre dispo-
cosas y acaecimientos cuya trabazón
níamos de tiempo, espacio y ocasión
interna es tan remota o tan difícil de
para dar la debida importancia a los
probar, que podemos considerarla
demás factores que intervienen en el
como inexistente, no hacer caso de
juego de las acciones y reacciones.
ella), acaba siempre imponiéndose
Pero, tan pronto como se trataba de
como necesidad el movimiento econó-
exponer una época histórica y, por
mico. De otro modo, aplicar la teoría a
tanto, de aplicar prácticamente el prin-
una época histórica cualquiera sería
cipio, cambiaba la cosa, y ya no había
más fácil que resolver una simple ecua-
posibilidad de error. Desgraciada-
ción de primer grado.
mente, ocurre con harta frecuencia que
Somos nosotros mismos quienes se cree haber entendido totalmente y
hacemos nuestra historia, pero la hace- que se puede manejar sin más una
mos, en primer lugar con arreglo a pre- nueva teoría por el mero hecho de
misas y condiciones muy concretas. haberse asimilado, y no siempre exac-
Entre ellas, son las económicas las que tamente, sus tesis fundamentales. De
deciden en última instancia. Pero tam- este reproche no se hallan exentos
bién desempeñan su papel, aunque no muchos de los nuevos «marxistas» y así
sea decisivo, las condiciones políticas, y se explican muchas de las cosas pere-
hasta la tradición, que merodea como grinas que han aportado....
ANEXO Primer encuentro - 45

ANEXO: Extractos del libro


Marx para principiantes, de Rius
46- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2
ANEXO Primer encuentro - 47
48- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2
ANEXO Primer encuentro - 49

“Un fantasma recorre Europa:


el fantasma del comunismo.
Todas las potencias de la
vieja Europa han formado
una alianza sagrada para
exorcizarlo: el Papa y el Zar,
Metternich y Guizo, los
radicales franceses y los espías
de la policía alemana. ¿Qué
partido opositor no ha
sido declarado comunista
por sus rivales en el poder?
¿qué opositores no han
esgrimido contra él
el reproche?”
50- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2
ANEXO Primer encuentro - 51
52- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

Cronología de las principales obras


escritas por Carlos Marx

Década de 1840 Elementos fundamentales para la crítica de


Crítica de la filosofía del Derecho de Hegel la economía política (más conocida como los
(escrita entre 1843 y 44 entre Alemania y París Grundrisse) (escrito entre 1857 y 58 en
y publicado en 1844 en los Anales Franco Londres, publicado entre 1939 y 41)
Alemanes) Contribución a la crítica de la economía
La cuestión Judía (escrita en 1843 en política (escrito en 1858 en Londres, publicado
Alemania, publicada por primera vez en 1844 en en 1859)
los Anales Franco Alemanes) Prólogo a la Contribución a la Crítica de la
La Sagrada Familia (escrita con Federico Economía Política (escrito en 1859 en Londres,
Engels en 1844 en París, Francia, publicada en publicado en 1859)
1845)
Los Manuscritos económico filosóficos Décadas de 1860 y 1870
(escrita en 1844 en París, publicada por prime-
Manifiesto Inaugural de la Asociación
ra vez en 1932)
Internacional de los Trabajadores (escrito en
Tesis sobre Feuerbach (escrita en 1845 en 1864 en Londres, publicado el mismo año)
Bruselas, Bélgica, publicada en 1888)
Estatutos (provisionales) de la Asociación
La ideología alemana (escrita con Engels Internacional de los Trabajadores (escritos en
entre 1845 y 46 en Bruselas, Bélgica, publicada 1864 en Londres, habrán de servir de base a la
en 1932) elaboración de los estatutos generales aproba-
Miseria de la Filosofía (escrita en 1847 en dos finalmente en 1871)
Bruselas, Bélgica, publicada el mismo año) Salario, precio y ganancia (escrito en 1865
Manifiesto Comunista (escrita con Engels en en Londres, publicado en 1898)
1847 en Bruselas, Bélgica, publicada en 1848) Historia crítica de la teoría de la plusvalía
Trabajo asalariado y capital (escrita en 1847 (escrito entre 1862 y 63 en Londres, publicado
en Bruselas, Bélgica, publicada en 1849) entre 1905 y 10)
El capital. Tomo I. El proceso de produc-
Década de 1850 ción del capital (escrito entre 1863 y 67 en
Londres, publicado en 1867)
Las luchas de clases en Francia de 1848 a
1850 (escrita en 1850 en Londres, Inglaterra, La guerra civil en Francia (escrito en 1871en
publicada el mismo año) Londres, publicado el mismo año)
Circular del Comité Central a la Liga Glosas marginales al programa del partido
Comunista (escrita con Engels en 1850 en obrero alemán. Conocido como Crítica al
Londres) Programa de Gotha (escrito en 1875 en
El dieciocho brumario de Luis Bonaparte Londres, publicado en 1890)
(escrita entre 1851 y 52 en Londres, publicada El Capital Tomo II. El proceso de circula-
en 1852) ción del capital (escrito entre 1863 y 78 en
Artículos “La dominación británica en la Londres, publicado en 1885)
India” y “Futuros resultados de la domina- El Capital Tomo III. El proceso global de la
ción británica de la India” (escritos y publica- producción capitalista (escrito entre 1864 y 78
dos en 1853 en The New York Daily Tribune) en Londres, publicado en 1894)
Segundo encuentro: El Capitalismo - 53

El Capitalismo
Introducción a la selección de textos de
El capital de Carlos Marx

Por Área de Formación del FPDS

I. Contexto histórico de El capital. Marx comienza la escritura de El capital a


mediados del siglo XIX. Es la época de la consolidación del capitalismo que
comienza con la Segunda Revolución Industrial. En ese período se desarrolla la
industria pesada que permite trabajar el hierro a gran escala y producir máquinas
gigantes: se revolucionan los transportes terrestres (aparecen los ferrocarriles) y
los marítimos (con los barcos a vapor transatlánticos) que dan un fuerte impulso
a la expansión del mercado mundial.

Si bien Marx nació en Alemania, sus muchas idas y vueltas. Para empezar, la
escritos se centran en la realidad inglesa vida de Marx estuvo signada por perse-
donde la industria, y por ende el capita- cuciones políticas, deportaciones y difi-
lismo, presentaban un mayor desarrollo. cultades económicas y de salud que
De todos modos, los análisis de El capi- obstaculizaron sus investigaciones. Pero
tal también están referidos, aunque en también, su trabajo teórico se repartía
menor medida, a países como Alemania, el tiempo con sus trabajos de redactor
Bélgica, Holanda, Francia y Estados para diversos periódicos (gracias a lo
Unidos. Las realidades de regiones peri- que obtenía algún salario) y con su vida
féricas como Rusia, la India y política. Además de estas dificultades
Latinoamérica, donde las relaciones que hacen a su biografía, la empresa
capitalistas recién estaban comenzando teórica que se proponía con El capital le
a dominar, también fueron objetos de
presentó sus propios problemas. El plan
estudio para Marx aunque poco de estas
inicial de lo que terminaron siendo los
realidades es analizado en El capital.
tres tomos de El capital poseía el nom-
La elaboración de esta obra tuvo bre de “Economía” y constaba de seis
54- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

tomos: 1º Sobre el capital, 2º Sobre la El capital, escrito en alemán, fue rápi-


propiedad de la tierra, 3º Sobre el tra- damente traducido al inglés y al francés.
bajo asalariado, 4º Estado, 5º Comercio Pero los escritos de Marx también
exterior y 6º Mercado mundial (donde tuvieron una importante recepción en
también pensaba estudiar más en pro- Rusia, lo que en un comienzo sorpren-
fundidad las crisis cíclicas). Esto significa dió a Marx (como queda plasmado en el
que los tres tomos de El capital no pre- intercambio epistolar con Vera
tendían ser un estudio acabado de la Zasülich). La primera traducción al
sociedad capitalista, sino que dejaban español la realizó el socialista argentino
fuera aspectos considerados como cen- Juan B. Justo en 1898.
trales por el mismo Marx. Aunque en la Asociación Internacional
de Trabajadores (A.I.T.) comienza a divi-
Por otra parte, Marx sólo pudo dar el
dirse el campo socialista entre comunis-
acabado final al tomo I, único que publi-
tas y anarquistas, la recepción positiva
có en vida y cuya primera edición fue en
de El capital no se restringió a los pri-
1867. Aunque no aceptó hacerlo hasta meros como queda claro en la opinión
no resolver los aspectos teóricos prin- de anarquistas como Bakunin y
cipales de la totalidad de los tres libros Malatesta.
de El capital, luego de esta primera
publicación siguió demorándose en la
escritura de los siguientes. Por un lado, II. Elementos teórico metodológicos
su enfermedad volvía más lento el tra- para la lectura de El capital.
bajo. Por otro lado, Marx había comen-
zado a estudiar otros países (y por esto a) La relación entre forma y contenido.
otros idiomas, como el ruso), para ela- Marx comienza su análisis de la reali-
borar y reelaborar algunos puntos de su dad –en el caso de El capital, el análisis
estudio, como la renta de la tierra. de la dimensión económica de la reali-
Finalmente, las ediciones de los tomos II dad histórica– por la superficie. Luego
y III de El capital fueron preparadas por se sumerge en las profundidades para
Federico Engels (en 1885 y 1894 res- encontrar el origen y la fuente de las
pectivamente), uno de sus compañeros realidades que estudia. Una vez allí
más constantes y coautor de varios recomienza el viaje conceptual, pero
escritos como La ideología alemana y el ahora partiendo desde el contenido o
Manifiesto del partido comunista. sustancia, para explicar la razón de la
Segundo encuentro: El Capitalismo - 55

forma o manifestación superficial. yendo, juntas, una totalidad.


Así, en la explicación del capitalismo En lo que sigue de esta introducción
comienza su análisis en el mercado, con veremos algunos conceptos de Marx,
la mercancía y el intercambio, para bus- aquellos que hacen al corazón de su
car la sustancia del sistema en la esfera teoría del valor trabajo y de su teoría
de la producción, en el trabajo. Y allí, en de la explotación, que son fundamenta-
la explotación y el carácter bifacético les para leer los materiales selecciona-
del trabajo, encuentra la llave para expli- dos de la cartilla.
car tanto lo que no se podía ver al limi-
tar el análisis económico al mercado, b) La teoría del valor trabajo.
como la razón por la que la esfera de la El capital comienza sus páginas con el
circulación, el mercado, necesariamente desarrollo de la teoría del valor trabajo
oculta otras relaciones económicas. porque esta teoría es la piedra angular
En este doble viaje no sólo se com- de la lucha de ideas que Marx empren-
prende la razón de ser del sistema y sus de contra los economistas burgueses. Si
leyes históricas de movimiento, sino que bien él, dentro de lo que en su tiempo
también se explica por qué son necesa- se llamaba “economía política”, recono-
rias y eficaces las ilusiones que produce ce la profundidad de algunos economis-
el sistema capitalista en su mismo fun- tas “clásicos” y los diferencia de los
cionamiento: por ejemplo, las ilusiones meros ideólogos o economistas “vulga-
de “propiedad, libertad e igualdad” res”, considera que ninguno de todos
implícitas en la idea de intercambio. ellos logra explicar la fuente de la
ganancia capitalista. Ni siquiera un “clá-
El carácter necesario de esas ilusiones sico” como David Ricardo había podido
es precisamente lo que da importancia romper los compromisos afectivos con
al concepto de fetichismo para explicar el sistema capitalista para poder tomar
la sociedad capitalista. Este concepto es en consideración las contradicciones
una muestra de la importancia de del sistema social. Por esto el subtítulo
remontarse a la sustancia de las cosas, de El capital es Crítica de la economía
pero no para desechar las formas apa- política.
rentes como haría un científico positi-
vista, sino para entender el modo en El capital de Marx comienza presen-
que la sustancia y la forma se entrelazan tando su teoría del valor trabajo.
y cada una depende de la otra constitu- Trataremos a partir de aquí de exponer
56- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

las nociones principales de esta teoría.cada uno con su valor de uso, tienen
Marx, para explicar su teoría, parte delque encontrar una medida común que
análisis de la mercancía, es decir de unpermita expresar la diferencia cualitati-
producto elaborado para el mercado. va (entre, por ejemplo, la cama y la galli-
Cuando habla del mercado se refiere a na) como una diferencia meramente
una red de relaciones sociales donde lascuantitativa, que sirva para determinar
personas se reconocen como iguales y la proporción en que un bien se inter-
libres en tanto son propietarios de mer-cambiará por otro: el valor de cambio
cancías que quieren intercambiar: todos (por ejemplo, 1 cama “vale” 150 galli-
quieren comprar y vender. Esas mercan- nas). De todas maneras, ¿cómo sabe-
cías, piezas esenciales sin las que no mos que 1 cama es igual a 150 gallinas?
podría haber una relación mercantil, No tiene que ver con la utilidad que
también guardan una relación en su representan ya que se trata de valores
seno entre valor de uso y valor. Por un de uso completamente diferentes,
lado, son cualquier cosa que pueda ser ambas cosas son útiles; la cuestión es
consumida. No importa si es algo com- ¿por qué lo cambian en esa proporción?
pletamente necesario como el alimento Lo que es necesario entender para
o algo simplemente entretenido como seguir adelante es que el valor de cam-
la entrada a un recital de música. Lo bio de las mercancías, el hecho de que
importante es que tenga un valor de se puedan intercambiar en cierta pro-
uso, o sea, que, en la proporción en queporción, nos está indicando que las
fue producida, esa mercancía pueda mercancías deben tener algo en común,
una sustancia que les da un valor intrín-
satisfacer necesidades sociales, que esté
en relación a un deseo social. Esto seco (valor objetivo o absoluto) a partir
transforma esas cosas en bienes, que del cuál podemos establecer los dife-
tengan un valor de uso reconocido rentes valores de cambio (1 cama = 150
socialmente (no por toda la sociedad, gallinas = 100 DVD pirata, etc.). Y eso
pero sí al menos por una porción de la en común que tienen todas las mercan-
sociedad suficiente para que se consu- cías y de donde proviene su valor, nos
ma el producto). dice Marx, es que son productos del
trabajo humano. Y el trabajo humano es
Sin embargo, con esto no alcanza. algo que puede medirse en tiempo de
Porque, por otro lado, para que sean trabajo. El tiempo que lleva criar a las
mercancías es necesario el intercambio. gallinas, o hacer de un árbol una cama,
Y esto implica que diferentes bienes, etc. O sea que para entender lo que
Segundo encuentro: El Capitalismo - 57

ocurre en la superficie visible del mer- Claro que el tiempo que se gasta, o la
cado, es necesario sumergirnos en la habilidad que se dedica, no pueden ser
producción de las mercancías. caprichosos. Lo que cuenta para medir
el valor, ese valor-trabajo reconocido
No obstante, el trabajo del carpintero socialmente, no es el trabajo individual
o ebanista es diferente que el del cria- que realizó tal o cual trabajador para
dor de gallinas, y por esto Marx habló hacer tal o cual mercancía, sino un pro-
del carácter bifacético del trabajo y medio de la habilidad y el gasto de ener-
diferenció entre el trabajo concreto, gía que necesitan para fabricar ese bien
por el que se crea un valor de uso, y el los diferentes productores que partici-
trabajo abstracto que es el que cuenta pan del mercado. Esto es, lo que cuenta
para medir el valor. En lugar de atender es el trabajo socialmente necesario para
al carácter particular del trabajo, éste fabricar esa mercancía, y aquellos pro-
mide la cantidad de energía humana (de ductores con menos productividad (es
cerebro, nervio y músculo) gastada en la decir, los que gastan más tiempo y ener-
producción de la mercancía. Y si bien gía en producir la misma mercancía)
esto podía ser difícil de hacer antes del deberán modificar sus condiciones de
surgimiento de la gran industria, con la producción para ajustarlo al nivel de
simplificación de las operaciones desarrollo de la fuerza productiva
manuales en el uso de la maquinaria se social. De lo contrario, deberán conten-
transformó en una práctica cotidiana un tarse con que su trabajo individual valga
trabajador a la búsqueda de empleo se cada vez menos hasta que ya tampoco
ofrezca alternativamente en las más sea posible continuar produciendo. La
variadas industrias. Es cierto que aún manera en que el mercado regula la pri-
muchos trabajos requieren más pericia macía de la productividad media no es
y preparación por parte del trabajador. otra que la competencia y “la sobrevi-
Por eso, Marx diferencia el trabajo sim- vencia del más apto”.
ple del trabajo complejo, y toma al pri- Antes de continuar desentrañando los
mero como unidad de medida del misterios del mercado, nos detendre-
segundo. Así, el trabajo de un ingeniero mos en un punto más. En el proceso de
produce en el mismo tiempo más valor trabajo además de la utilización de los
que el de un peón, porque tiene como objetos de trabajo preexistentes en la
presupuesto un tiempo mayor de for- naturaleza casi siempre se utilizan otros
mación y preparación. objetos de trabajo: las materias primas.
58- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

Éstas, al igual que los medios de trabajo llegan a tener un precio. El precio no es
o instrumentos que el trabajador utiliza más que la expresión monetaria del
para modificar cualquier objeto, son valor, la moneda es el valor de cambio a
también productos del trabajo humano. partir del momento en que se pasa del
Claro, productos de un proceso de tra- intercambio o trueque (Mercancía-
bajo anterior. A este trabajo pretérito Mercancía o M-M) a la circulación de
Marx lo llama trabajo muerto (o inani- mercancías (Mercancía-Dinero-Mercan-
mado), porque sólo entra indirecta- cía o M-D-M). Cuando una mercancía,
mente en la mercancía a través de la un metal precioso por ejemplo, asume
acción del trabajo vivo, es decir, el tra- la función de moneda, significa que se ha
bajo presente en actividad. De modo convertido en el equivalente general de
que el valor de la mercancía está com- todas las mercancías. Es una mercancía
puesto tanto por el valor creado en su que funciona como dinero. Es importan-
producción directa, como por el valor te resaltar que para Marx no deja de ser
transferido de manera indirecta. Si el una mercancía, por ejemplo el oro, dado
carpintero compró la madera al leñador que sino no habría una medida a partir
en lugar de hacer él mismo ambas acti- de la cual equiparar. A lo largo de la his-
vidades, al momento de fabricar la cama toria y a lo ancho de la geografía dife-
no sólo crea valor de acuerdo al tiempo rentes mercancías han cumplido con
de trabajo que le lleva (socialmente) esta función dinero. La ventaja de los
hacer la cama, sino que transfiere el metales preciosos fueron sus cualidades
valor contenido en la madera de acuer- materiales de conservación, su alta con-
do al tiempo de trabajo que (socialmen- centración de valor (un poco de oro
te) al leñador le lleva obtener y cortar contiene mucho trabajo de exploración
la madera. Del mismo modo, al operar y extracción) y su casi infinita capacidad
con una máquina el obrero industrial de dividirse (de modo que se puedan
crea valor (de acuerdo a su gasto de intercambiar tanto mercancías costosas
energía) y transfiere valor (de acuerdo como baratas). Sin embargo, en deter-
al desgaste de la máquina que no es otra minado momento del desarrollo del
cosa que trabajo muerto, fruto de un comercio, surge el papel moneda. Sea
proceso de trabajo anterior en el que para evitar las adulteraciones de la
se fabricó la herramienta de trabajo). moneda, sea contra la especulación
(con los metales preciosos que cambian
Llegados a este punto es mucho más de precio más rápido de lo que se cam-
fácil comprender cómo las mercancías bia el número que llevan las monedas),
Segundo encuentro: El Capitalismo - 59

sea para evitar el desgaste de las mone- del trabajo social de una economía.(*)
das (que con el uso iban perdiendo
peso pero debían aceptarse por el Sabemos, entonces, que el mercado es
número que tenían gravado), sea por un aspecto muy importante de la socie-
otros motivos (más bien políticos). La dad capitalista, es el principal regulador
cuestión es que ahora los billetes ya no de este sistema. Sin embargo, el merca-
contienen en sí una cantidad de trabajo do preexistió al capitalismo. La sociedad
comparable con el valor de cambio que Antigua, con su sistema esclavista, y la
representan. De hecho, un billete de Medieval, con su sistema feudal, conocí-
$100.- no tiene objetivado más trabajo an las relaciones mercantiles. Pero a
que uno de $50.-.Ya no vale como mer- diferencia del capitalismo, allí el merca-
cancía. Llegamos así a una pregunta que do estaba subordinado a las jerarquías
no era plenamente formulable en la estamentales (amo/esclavo o señor/
época de Marx: ¿por qué se aceptan siervo según el caso) y no estaba plena-
estos papeles? Porque hay una institu- mente desarrollado. Marx pensaba que
ción, el Estado, que garantiza a todos los por eso no fue posible, hasta entones,
poseedores de estos papelitos que les elaborar una teoría del valor que expli-
dará, en cualquier momento que se lo que el intercambio. Porque para que
requieran, la cantidad de trabajo huma- pueda pensarse la teoría del valor tra-
no correspondiente (en forma de oro, bajo se tiene que haber dado un proce-
plata u otros valores). Por cada unidad so social de abstracción del trabajo, en
de papel moneda en circulación, por el que éste se convierta efectivamente
cada peso, hay un equivalente de traba- en el contenido de valor de las mercan-
jo humano almacenado. A veces se trata

*
de una moneda extranjera aceptada
mundialmente, las divisas. Pero esto es En el sistema capitalista hay muchos
bienes, o valores de uso, que aunque no tie-
posible porque otro Estado asegura el nen valor tienen precio. Un ejemplo, la tierra
respaldo del billete. El respaldo puede inculta o los derechos sobre los bienes natu-
ser en oro, pero lo importante es que rales. En este caso es el título jurídico y la
violencia lo único que permite obtener algo
poseer ese oro acumulado implica la a cambio de ese valor de uso. Esta no es la
existencia de una economía capaz de relación capitalista específica (la ganancia
producir mercancías. En este sentido, el empresarial por extracción de plusvalor)
sino que remite a otras formas de expropia-
respaldo último del papel moneda no es ción que se desarrollan junto a ésta (ver por
tanto el oro como la potencia de la eco- ejemplo la “acumulación originaria” más
nomía que la sustenta, la productividad adelante).
60- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

cías. Esto sólo ocurre cuando aparece y cia del esclavo o el tributario) señala el
se generaliza el intercambio de una predominio de las relaciones capitalistas
mercancía muy particular: la mercancía y con ellas del sistema capitalista. Es en
fuerza de trabajo. La existencia de la esta sociedad que el mercado alcanza
mercancía fuerza de trabajo es posible toda su extensión mundial e impregna
por dos condiciones históricas.. todas las relaciones entre las personas.
Primero, que los trabajadores dispongan Es en esta sociedad, y no antes, que la
de su fuerza de trabajo como mercan- explotación de una clase por parte de
cía, es decir, sean propietarios libres de otra clase se renueva constantemente a
su capacidad de trabajo de modo que través del mercado bajo la forma de un
puedan pactar con el poseedor de dine- acto “voluntario”: el trabajador vende
ro como personas jurídicamente iguales su fuerza de trabajo y el capitalista la
(a diferencia de lo que ocurre con los compra. Luego, el capitalista vende pro-
esclavos y los siervos). Segundo, que ductos de consumo y el trabajador los
esos trabajadores no tengan más reme- compra. Bajo esta igualdad que el mer-
dio que ofrecer su fuerza de trabajo en cado necesita para desarrollarse se
el mercado porque están “libres”, des- esconde la división social entre la clase
provistos de cualquier otra mercancía de los poseedores y propietarios de los
para vender y desposeídos de todos los medios de producción (la burguesía) y
medios de trabajo necesarios para la la clase de los que sólo poseen su fuer-
puesta en actividad de su fuerza de tra- za de trabajo (los proletarios). En esta
bajo. El proceso histórico que realiza sociedad de clases, a diferencia de las
estas condiciones es lo que Marx llama anteriores, la coerción de una clase
acumulación originaria (ver selección de sobre otra es principalmente una coer-
textos). Dadas estas condiciones, se ción económica: el trabajador es “libre”
enfrentan en el mercado, de un lado, de no vender su fuerza de trabajo, sólo
poseedores de dinero o mercancías, y lo amenaza el hambre. Por supuesto
del otro, personas que sólo poseen su que para que esta coerción económica
fuerza de trabajo. (y no política o militar) sea efectiva, la
burguesía necesita un Estado con un
La aparición de esta mercancía señala aparato represivo que obligue a los
la aparición de relaciones capitalistas, hambrientos a respetar la “igualdad”
del mismo modo que la generalización formal del mercado y la “propiedad”
de esta forma de explotación del traba- privada de los medios de producción y
jo ajeno (el trabajo asalariado a diferen- subsistencia.
Segundo encuentro: El Capitalismo - 61

c) Teoría del plusvalor tada (D) más un incremento. “A dicho


incremento, o al excedente por encima
Aunque históricamente el capital se del valor originario, lo denomino yo
presenta primero bajo la forma de dine- plusvalor. El valor adelantado originaria-
ro, no toda circulación de dinero es cir- mente no sólo, pues, se conserva en la
culación de capital. Es partiendo de esta circulación, sino que en ella modifica su
diferencia que Marx explica la teoría del magnitud de valor, adiciona un plusvalor
plusvalor. o se valoriza. Y este movimiento lo
En principio, Marx distingue al dinero transforma en capital” (Marx).
en cuanto dinero y al dinero en cuanto Pero como vimos, las mercancías se
capital por su forma de circulación. El intercambian a su valor, es decir, que los
primero funciona según el ciclo actos de circulación sólo reconvierten
Mercancía-Dinero-Mercancía (M-D-M): las mercancías de su forma natural a la
conversión de mercancía en dinero y de dinero y al revés (exceptuando las
reconversión de dinero en mercancía, estafas y los robos, que dentro de una
vender para comprar. En cambio, el economía nunca producen un valor
dinero en cuanto capital convierte dine- nuevo: lo que uno ganó, otro lo perdió).
ro en mercancía y mercancía nuevamen- Por ende, la modificación tiene que venir
te en dinero: D-M-D, comprar para ven- con la existencia de una mercancía. Pero
der. Si el sentido del ciclo M-D-M está no por su valor, puesto que se intercam-
dado por el intercambio de valores de bian equivalentes, sino por su valor de
uso diferentes (por ejemplo camas por uso: además de ocurrir algo en la circu-
gallinas), el ciclo D-M-D no tiene ningún lación debe ocurrir algo a espaldas de la
sentido si se cambia un valor dinerario misma. “Nuestro poseedor de dinero
cualquiera por el mismo valor dinerario. tendría que ser tan afortunado como
Aquí la diferencia no es por la cualidad para descubrir dentro de la esfera de la
del valor de uso en vistas al consumo, circulación, en el mercado, una mercan-
sino por la cantidad del valor en vistas a cía cuyo valor de uso poseyera la pecu-
la acumulación. El intercambio D-M-D liar propiedad de ser fuente de valor;
sólo tiene sentido si el valor adelantado cuyo consumo efectivo mismo, pues,
D modifica su magnitud de valor, es fuera, objetivación de trabajo, y por
decir si se valoriza. Así, la forma comple- tanto creación de valor. Y el poseedor
ta de este proceso es, en realidad, D-M- de dinero encuentra en el mercado esa
D’, donde D’ es igual a la suma adelan- mercancía específica: la capacidad de
62- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

trabajo o fuerza de trabajo” (Marx)(*). mercancías, cada una de las cuales es


una unidad de valor de uso y valor, este
Por un lado, el valor de la fuerza de
proceso tiene dos aspectos. Por un
trabajo, como el de toda mercancía, está
lado, proceso de trabajo (es decir, pro-
dado por el tiempo de trabajo social-
ducción de valores de uso), y por el
mente necesario para su producción y
otro, proceso de valorización (es decir,
reproducción (en este caso, los valores
producción de valor).
de uso que los trabajadores deben con-
sumir para reproducirse día a día y gene- El proceso de trabajo, en términos
ración tras generación, y cuyo precio es genéricos, es una actividad orientada a
lo que llamamos el salario). Por otro un fin (el de la producción de valores de
lado, el valor de uso de la fuerza de tra-uso), apropiación de lo natural para las
bajo se diferencia del de todas las demás necesidades humanas. En este sentido,
mercancías por ser el único cuyo consu- es una condición común de la vida
mo es creación de valor.Y en el caso del humana y pertenece a todas las formas
consumo capitalista de la misma es cre- de sociedad. En las particulares condi-
ación de un valor mayor al necesario ciones del capitalismo, este proceso
para reproducirla. Llegado a este punto, muestra dos fenómenos peculiares: el
no es al mercado sino al lugar del con- obrero trabaja bajo el control del capi-
sumo de la mercancía fuerza de trabajo, talista; y el producto del trabajo es pro-
el proceso de producción, a donde se piedad del capitalista y no del productor
dirige Marx para continuar la explica- directo (el obrero). Dentro del proceso
ción del plusvalor, dado que sólo allí
de trabajo capitalista, los medios de
puede analizar el valor de uso particular
producción y las materias primas (que
de esta mercancía.
son trabajo muerto) y la fuerza de tra-
Marx parte de lo siguiente: en tanto el bajo (cuyo uso es el trabajo vivo) perte-
proceso de producción en el capitalis- necen al capitalista y, por esto, él es
mo es un proceso de producción de dueño del producto.
Ahora bien, la producción capitalista

* “Por fuerza de trabajo o capacidad de tra-


bajo entendemos el conjunto de las facultades
físicas y mentales que existen en la corporeidad
en la personalidad viva de un ser humano y que
él pone en movimiento cuando produce valores
de uso de cualquier índole” (Marx).
no tiene por fin la producción de valo-
res de uso, salvo en la medida en que
son sustrato material y portadores de
valores de cambio. Pero incluso con
esta distinción no basta para entender
Segundo encuentro: El Capitalismo - 63

el proceso de valorización, ya que “para posible hacer de la jornada de trabajo


nuestro capitalista se trata de dos cosas un proceso de trabajo prolongado.
diferentes. En primer lugar, el capitalista
quiere producir un valor de uso que Si el valor diario de la fuerza de traba-
tenga valor de cambio, un artículo des- jo de un obrero, su jornal, es de $50,
tinado a la venta, una mercancía. Y en pero ese obrero durante su jornada
segundo lugar, quiere producir una mer- laboral de 10 horas crea un valor de
cancía cuyo valor sea mayor que la $100, el capitalista que lo emplea obtie-
suma de los valores de las mercancías ne $50 con los que paga la reproduc-
requeridas para su producción, de los ción de la fuerza de trabajo (producidos
medios de producción y de la fuerza de en el tiempo de trabajo necesario de la
trabajo por los cuales él adelantó su jornada) más otros $50 por los que no
dinero contante y sonante en el merca- ha tenido que adelantar ningún equiva-
do. No sólo quiere producir un valor de lente (los que fueron producidos en el
uso, sino una mercancía; no sólo un tiempo de trabajo excedente de la jor-
valor de uso, sino un valor, y no sólo nada). Esos $50 producidos más allá del
valor, sino además plusvalor” (Marx). tiempo necesario para la reproducción
del obrero constituyen el plusvalor: “El
La única mercancía que puede crear valor de la fuerza de trabajo y su valori-
valor, e incluso un valor superior al que zación en el proceso laboral son, pues,
cuesta ella misma en el mercado, es la dos magnitudes diferentes” (Marx). Esta
fuerza de trabajo. De hecho, la fuerza de diferencia de valor es la tasa de plusva-
trabajo al ponerse en movimiento (tra- lor que el capitalista tuvo en cuenta al
bajo vivo) no sólo crea valor nuevo, sino contratar al obrero. En el caso del ejem-
que transfiere el valor de los medios de plo la tasa es del 100%, 5 horas de tra-
trabajo y las materias primas consumi- bajo necesario y 5 horas de trabajo
das (trabajo muerto) al producto. Por excedente o plustrabajo. Esta forma
eso, mientras que el valor de los medios específica de apropiación de trabajo
de trabajo y materias primas se conser- excedente constituye para Marx la
va constante, el consumo de la fuerza explotación capitalista.
de trabajo es trabajo vivo y, por ende, su
valor se vuelve una magnitud variable. A partir de esto, Marx diferencia dentro
Así las cosas, no hay manera de hacer del capital global invertido por el capita-
que el valor de los medios de trabajo y lista en el proceso de producción entre el
materias primas aumente, pero sí es capital constante (el trabajo muerto) y el
64- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

capital variable (la fuerza de trabajo), y ta por lo tanto el tiempo de trabajo


llama composición orgánica de capital a la necesario para la reproducción de la
proporción entre uno y otro. fuerza de trabajo dentro de la jornada
laboral. Aquí no se trata de extender la
Marx llama plusvalor absoluto al que jornada laboral sino de reducir la parte
el capitalista obtiene aumentando la jor- relativa dedicada a reproducir el valor
nada de trabajo, sea en extensión o en de la fuerza de trabajo.
intensidad. Es decir, el que resulta de un
mayor gasto de fuerza de trabajo en el Tanto el plusvalor absoluto como rela-
día (haciendo que el trabajador se tivo son el objeto de la acumulación por
quede más horas o quitándole los reproducción ampliada, es decir, de la
momentos de descanso), sin una modi- reinversión del plusvalor y el aumento de
ficación proporcional del salario. Aquí el la escala de producción. Pero, si el plus-
trabajador y el capitalista se enfrentan, valor absoluto es resultado directo de
derecho contra derecho, por los límites las condiciones de la jornada laboral
absolutos de la jornada laboral ¿Cuántas (producto de lucha entre trabajadores
horas debe durar la jornada de trabajo? asalariados y capitalistas), el plusvalor
El capitalista le pagó el valor de la relativo es resultado indirecto de la inno-
reproducción de un día de vida, el obre- vación tecnológica (que en gran parte
ro al vender su fuerza de trabajo quiere está determinada por la competencia
cuidar su mercancía de la expoliación, capitalista y la búsqueda de ganancias
de manera que no se arruine y pueda extraordinarias). Esta innovación lleva,
continuar vendiéndola en el mercado. mediante la generalización de una nueva
productividad media, al desarrollo de las
A medida que la producción capitalis- fuerzas productivas y al aumento de la
ta se generaliza (lo que en la periodiza- parte constante del capital con dos efec-
ción de Marx es el paso de la manufac- tos contrapuestos. Por un lado, disminu-
tura a la gran industria), se desarrolla ye la parte variable, lo que hace bajar la
otra forma de plusvalía, el plusvalor producción de plusvalor (una parte
relativo. Ella surge en la medida en que menor del capital global es destinada a
el abaratamiento general de las mercan- contratar obreros). Por el otro lado, dis-
cías (por el aumento de la productivi- minuye el valor de la fuerza de trabajo, lo
dad en las distintas ramas de produc- que aumenta relativamente la produc-
ción) incide también en los medios de ción de plusvalor (una parte mayor de la
subsistencia de los trabajadores y acor- jornada de trabajo es destinada a la pro-
Frente Popular Darío Santillán - 65

ducción de plusvalor). Pero estas formas de la clase obrera que antes le eran inac-
de extracción de plusvalor no son con- cesibles y dejando en libertad a los obre-
trapuestas: con la aparición del plusvalor ros que desplaza la máquina, una pobla-
relativo continúa y cobra más fuerza la ción obrera superflua, que no puede opo-
extracción de plusvalor absoluto. nerse a que el capital le dicte su ley. De
ahí ese notable fenómeno en la historia
“Si bien el empleo capitalista de la de la industria moderna, consistente en
maquinaria genera por un lado podero- que la máquina arroja por la borda todas
sos estímulos para la prolongación des- las barreras morales y naturales de la jor-
mesurada de la jornada laboral trastocan- nada laboral. De ahí la paradoja económi-
do además tanto el modo de trabajo ca de que el medio más poderoso para
como el carácter del cuerpo social del reducir el tiempo de trabajo se trastrue-
trabajo de tal manera que quebranta la que en el medio más infalible de transfor-
resistencia opuesta a esa tendencia, ese mar todo el tiempo vital del obrero y de
empleo produce, por otro lado, mediante su familia en tiempo de trabajo disponible
el reclutamiento para el capital de capas para la valorización del capital.” (Marx)
66- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

Guía para la interpretación del texto (sugerimos abordar


estas preguntas en grupo, después de la lectura)

1) ¿Por qué las mercancías tienen


“valor de uso” y “valor”?

2) ¿Qué distinciones hace Marx en el concepto de “traba-


jo” para que podamos entender al mismo como productor
de valor?

3) ¿Cuál es la particularidad de la mercancía “fuerza de


trabajo”? ¿Qué implica que se generalice el intercambio de
esa mercancía?

4) ¿Por qué la producción capitalista es tanto “proceso de


trabajo” como “proceso de valorización”? ¿Cómo explica
Marx la diferencia entre “dinero” y “capital”?

5) ¿A qué llama Marx “explotación”? ¿Cuáles son las dife-


rencias entre el plusvalor “absoluto” y el “relativo”?

En el texto que abre esta cartilla encontraremos los primeros ele-


mentos para responder estas preguntas. Con la lectura directa de la
selección de textos de El Capital de Marx, a continuación, podremos
profundizar en la comprensión de los conceptos, yendo directo a las
fuentes. Finalmente, en el encuentro de formación,
podremos evacuar dudas y debatir colectivamente
en función de esta primera aproximación a estos
temas tan complejos, necesarios y apasionantes
para la lucha revolucionaria...
Segundo encuentro: El Capitalismo - 67

“EL CAPITAL,
CRÍTICA DE LA ECONOMÍA
POLÍTICA
LIBRO PRIMERO.
EL PROCESO DE PRODUCCIÓN
DEL CAPITAL.”

SECCIÓN CUARTA: otra parte de la jornada de trabajo, la


que el obrero cede gratuitamente al
LA PRODUCCIÓN DE capitalista. Es un medio para la pro-
PLUSVALOR RELATIVO ducción de plusvalor.
En la manufactura, la revolución que
tiene lugar en el modo de producción
CAPITULO XIII: toma como punto de partida la fuerza
de trabajo; en la gran industria, el
MAQUINARIA Y GRAN INDUSTRIA
medio de trabajo. (…).
1. Desarrollo de la maquinaria.
En cuanto maquinaria, el medio de
En sus "Principios de economía políti- trabajo cobra un modo material de
ca" dice John Stuart Mill: "Es discutible existencia que implica el reemplazo de
que todos los inventos mecánicos efec- la fuerza humana por las fuerzas natu-
tuados hasta el presente hayan aliviado rales, y de la rutina de origen empírico
la faena cotidiana de algún ser huma- por la aplicación consciente de las cien-
no". Pero no es éste, en modo alguno, el cias naturales. En la manufactura, la
objetivo de la maquinaria empleada por organización del proceso social de tra-
el capital. Al igual que todo otro des- bajo es puramente subjetiva, combina-
arrollo de la fuerza productiva del tra- ción de obreros parciales, en el sistema
bajo, la maquinaria debe abaratar las de las máquinas, la gran industria
mercancías y reducir la parte de la jor- posee un organismo de producción
nada laboral que el obrero necesita totalmente objetivo al cual el obrero
para sí, prolongando, de esta suerte, la encuentra como condición de produc-
68- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

ción material, preexistente a él y acaba- maquinaria! Así, este poderoso rempla-


da. En la cooperación simple (...)el des- zante de trabajo y de obreros se convir-
plazamiento del trabajador aislado por tió sin demora en medio de aumentar el
el obrero socializado sigue siendo más o número de los asalariados, sometiendo
menos casual. La maquinaria, con a todos los integrantes de la familia
algunas excepciones que habremos de obrera, sin distinción de sexo ni eda-
citar más adelante, sólo funciona en des, a la férula del capital. El trabajo
manos del trabajo directamente sociali- forzoso en beneficio del capitalista no
zado o colectivo. El carácter cooperati- sólo usurpó el lugar de los juegos infan-
vo del proceso de trabajo, pues, se con- tiles, sino también el del trabajo libre
vierte ahora en una necesidad técnica en la esfera doméstica, ejecutado den-
dictada por la naturaleza misma del tro de límites decentes y para la familia
medio de trabajo. (…) misma.
El valor de la fuerza de trabajo no
estaba determinado por el tiempo de
3. Efectos inmediatos que la indus- trabajo necesario para mantener al
tria mecánica ejerce sobre el obrero. obrero adulto individual, sino por el
La revolución operada en el medio de necesario para mantener a la familia
trabajo constituye, como hemos visto, obrera. Al arrojar a todos los miembros
el punto de partida de la gran indus- de la familia obrera al mercado de tra-
tria, y el medio de trabajo revoluciona- bajo, la maquinaria distribuye el valor
do adquiere su figura más desarrollada de la fuerza de trabajo del hombre entre
en el sistema de máquinas organizado, su familia entera. Desvaloriza, por
imperante en la fábrica. Mas antes de ende, la fuerza de trabajo de aquél. (…)
ver cómo a este organismo objetivo se Para que viva una familia, ahora son
incorpora material humano, pasemos a cuatro personas las que tienen que
examinar algunas repercusiones gene- suministrar al capital no sólo trabajo,
rales de esa revolución sobre el obrero sino también plustrabajo. (…)
mismo. La maquinaria, asimismo, revolucio-
a) Apropiación de fuerzas de traba- na radicalmente la mediación formal de
jo subsidiarias por el capital. Trabajo las relaciones capitalistas, el contrato
femenino e infantil entre el obrero y el capitalista. Sobre la
base del intercambio de mercancías, el
La maquinaria, en la medida en que primer supuesto era que el capitalista y
hace prescindible la fuerza muscular, el obrero se enfrentaran como personas
se convierte en medio para emplear a libres, como propietarios independien-
obreros de escasa fuerza física o de des- tes de mercancías: el uno en cuanto
arrollo corporal incompleto, pero de poseedor de dinero y medios de produc-
miembros más ágiles. Trabajo femenino ción, el otro como poseedor de fuerza de
e infantil fue, por consiguiente, la pri- trabajo. Pero ahora el capital adquiere
mera consigna del empleo capitalista de personas que total o parcialmente se
Segundo encuentro: El Capitalismo - 69

hallan en estado de minoridad. Antes, diarias" (tres) "deben estar encerrados


el obrero vendía su propia fuerza de entre las cuatro paredes de un lugar
trabajo, de la que disponía como perso- denominado escuela, y que el patrón
na formalmente libre. Ahora vende a su del niño debe recibir semanalmente, a
mujer e hijo. Se convierte en tratante de tal efecto, un certificado de una perso-
esclavos. (…) na que firma en calidad de maestro o
maestra de escuela" (Informes de
Friedrich Engels, en su "Situación de
Leonard Horner del año 1857). Antes
la clase obrera de Inglaterra", y otros
que se promulgara la ley fabril revisada
autores han expuesto tan exhaustiva-
de 1844, no era raro que los maestros o
mente la degradación moral causada
maestras firmaran con una cruz los
por la explotación capitalista de las
certificados de escolaridad, ya que ni
mujeres y los niños, que me limitaré
siquiera sabían escribir su nombre. "Al
aquí a recordarla. Pero la devastación
visitar una Escuela que expedía tales
intelectual, producida artificialmente al
certificados, me impresionó tanto la
transformar a personas que no han
ignorancia del maestro que le pregunté:
alcanzado la madurez en simples
«Disculpe, señor, ¿pero usted sabe
máquinas de fabricar plusvalor (…)
leer?» Su respuesta fue: «Y bueno, un
obligó finalmente al propio parlamento
poco». A modo de justificación agregó.
inglés a convertir la enseñanza elemen-
«De todas maneras, estoy al frente de
tal en condición legal para el uso "pro-
mis discípulos»." Durante los debates
ductivo" de chicos menores de 14 años,
previos a la aprobación de la ley de
en todas las industrias sometidas a la
1844, los inspectores fabriles denun-
ley fabril. El espíritu de la producción
ciaron el estado bochornoso de los
capitalista resplandece con toda clari-
lugares que se intitulaban escuelas, y
dad en la desaliñada redacción de las
cuyos certificados ellos tenían que
llamadas cláusulas educacionales de
admitir como plenamente válidos desde
las leyes fabriles; en la carencia de un
el punto de vista legal.
aparato administrativo debido a lo cual
esa enseñanza obligatoria se vuelve en (…) Mediante la incorporación masiva
gran parte ficticia; en la resistencia de de niños y mujeres al personal obrero
los fabricantes incluso contra esta ley combinado, la maquinaria quiebra,
de enseñanza y en sus triquiñuelas y finalmente, la resistencia que en la
subterfugios para infringirla. "Al único manufactura ofrecía aún el obrero
al que caben los reproches es al legisla- varón al despotismo del capital.
dor, porque aprobó una ley engañosa
b) Prolongación de la jornada laboral
que, bajo la apariencia de velar por la
educación de los niños [...], no contiene Si bien las máquinas son el medio
una sola disposición que asegure el más poderoso de acrecentar la produc-
cumplimiento del objetivo pretextado. tividad del trabajo, esto es, de reducir el
No preceptúa nada, salvo que los niños tiempo de trabajo necesario para la pro-
[...], durante cierta cantidad de horas ducción de una mercancía, en cuanto
70- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

agentes del capital en las industrias de industria fundada en la maquinaria, en


las que primero se apoderan, se con- efecto, fija una parte siempre creciente
vierten en el medio más poderoso de del capital bajo una forma en la que,
prolongar la jornada de trabajo más allá por una parte, el mismo es constante-
de todo límite natural. Generan, por mente valorizable, y por otra parte pier-
una parte, nuevas condiciones que per- de valor de uso y valor de cambio no
miten al capital dar rienda suelta a esa bien se interrumpe su contacto con el
tendencia constante que le es propia, y trabajo vivo. "Cuando un trabajador
por otra, nuevos motivos que acicatean agrícola", le explica el señor Ashworth,
su hambre rabiosa de trabajo ajeno. magnate inglés del algodón, al profesor
En primer término en la maquinaria Nassau William Senior, "abandona su
adquieren autonomía, con respecto al pala, vuelve inútil durante ese período
obrero, el movimiento y la actividad un capital de 18 peniques. Cuando uno
operativa del medio de trabajo. Se vuel- de nuestros hombres" (esto es, uno de
ve éste, en sí y para sí, un perpetuum los obreros fabriles) "deja la fábrica,
mobile industrial, que seguiría produ- vuelve inútil un capital que ha costado
ciendo ininterrumpidamente si no tro- 100.000". ¡Figúrese usted! ¡Volver
pezara con ciertas barreras naturales "inútil", aunque más no sea por un ins-
en sus auxiliares humanos: debilidad tante, un capital que ha costado
física y voluntad propia. Como capital 100.000! ¡Es una atrocidad, realmente,
–y en cuanto tal el autómata posee en que uno de nuestros hombres abando-
el capitalista conciencia y voluntad– ne la fábrica jamás! La escala creciente
está animado pues por la tendencia a de la maquinaria hace que la prolonga-
constreñir a la mínima resistencia las ción siempre creciente de la jornada
barreras naturales humanas, renuen- laboral sea, como advierte Senior,
tes pero elásticas (…) adoctrinado por Ashworth, "deseable".
Al prolongar la jornada laboral se La máquina produce plusvalor relati-
amplia la escala de la producción, vo, no sólo al desvalorizar directamente
mientras que se mantiene inalterada la la fuerza de trabajo y abaratar indirec-
parte del capital invertida en maquina- tamente la misma mediante el abarata-
ria y edificios. No sólo, pues, se acre- miento de las mercancías que entran
cienta el plusvalor, sino que disminu- en su reproducción, sino también por-
yen las inversiones necesarias para la que en su primera introducción esporá-
obtención del mismo. No cabe duda de dica transforma el trabajo empleado
que esto ocurre también, en mayor o por el poseedor de máquinas en traba-
menor grado, en toda prolongación de jo potenciado, eleva el valor social del
la jornada laboral, pero en este caso su producto de la máquina por encima de
importancia es más decisiva, porque la su valor individual y permite al capita-
parte del capital transformada en lista, de esta suerte, sustituir con una
medio de trabajo tiene, en general, una parte menor de valor del producto dia-
importancia mayor. El desarrollo de la rio el valor diario de la fuerza de traba-
Segundo encuentro: El Capitalismo - 71

jo. De ahí que las ganancias sean obreros ocupados por un capital dado.
extraordinarias durante este período de A una parte antes variable del capital,
transición en que la industria fundada es decir, una parte que se convertía en
en la maquinaria sigue siendo una fuerza viva de trabajo, la transforma en
especie de monopolio, y el capitalista maquinaria, por tanto en capital cons-
procura explotar de la manera más tante que no produce plusvalor alguno.
concienzuda ese "tiempo primero del Es imposible, por ejemplo, extraer de
amor juvenil" mediante la mayor pro- dos obreros tanto plusvalor como de
longación posible de la jornada laboral. 24. Si cada uno de los 24 obreros sólo
La magnitud de la ganancia acicatea el suministrara una hora de plustrabajo
hambre canina de más ganancia. en 12 horas, en conjunto suministrarí-
an 24 horas de plustrabajo, mientras
Al generalizarse la maquinaria en el
que el trabajo global de los dos obreros
mismo ramo de la producción, el valor
sólo asciende a 24 horas. Como vemos,
social del producto de las máquinas
el empleo de la maquinaria para la pro-
desciende hasta su valor individual,
ducción de plusvalor implica una con-
haciéndose valer entonces la ley según
tradicción inmanente, puesto que de los
la cual el plusvalor no surge de las fuer-
dos factores del plusvalor suministrado
zas de trabajo que el capitalista ha rem-
por un capital de magnitud dada, un
plazado por la máquina, sino, a la inver-
factor, la tasa del plusvalor, sólo
sa, de las fuerzas de trabajo que ocupa
aumenta en la medida en que el otro
en ella. El plusvalor surge exclusiva-
factor, el número de obreros, se reduce.
mente de la parte variable del capital, y
Esta contradicción inmanente se pone
vimos ya que la masa de aquél está
de manifiesto tan pronto como, al gene-
determinada por dos factores, la tasa
ralizarse la maquinaria en un ramo de
del plusvalor y el número de los obreros
la industria, el valor de la mercancía
ocupados simultáneamente. Una vez
producida a máquina deviene valor
dada la extensión de la jornada laboral,
social regulador de todas las mercancí-
la tasa del plusvalor se determina por
as de la misma clase, y es esta contra-
la proporción en que la jornada laboral
dicción la que, a su vez, impele al capi-
se subdivide en trabajo necesario y
tal, sin que el mismo sea consciente de
plustrabajo. El número de los obreros
ello, a una prolongación violenta de la
ocupados simultáneamente depende a
jornada laboral para compensar,
su vez de la proporción entre la parte
mediante el aumento no sólo del plus-
variable del capital y la constante.
trabajo relativo sino del absoluto, la
Ahora bien, resulta claro que la indus-
disminución del número proporcional
tria fundada en la maquinaria, por
de los obreros que explota.
mucho que extienda el plustrabajo a
expensas del trabajo necesario gracias Por tanto, si bien el empleo capitalista
al acrecentamiento de la fuerza produc- de la maquinaria genera por un lado
tiva del trabajo, sólo genera ese resulta- poderosos estímulos para la prolonga-
do mediante la reducción del número de ción desmesurada de la jornada laboral
72- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

trastocando además tanto el modo de leyes de 1844 y 1850, reconocen empe-


trabajo como el carácter del cuerpo ro que la reducción de la jornada labo-
social del trabajo de tal manera que ral ha provocado ya una intensificación
quebranta la resistencia opuesta a esa del trabajo perniciosa para la salud de
tendencia, ese empleo produce, por los obreros, y por tanto para la fuerza
otro lado, mediante el reclutamiento misma del trabajo. "En la mayor parte
para el capital de capas de la clase de las fábricas que elaboran algodón,
obrera que antes le eran inaccesibles y estambre o seda, el agotador estado de
dejando en libertad a los obreros que excitación necesario para el trabajo con
desplaza la máquina, una población la maquinaria, cuyo movimiento se ha
obrera superflua, que no puede oponer- acelerado extraordinariamente en los
se a que el capital le dicte su ley. De ahí últimos años, parece ser una de las
ese notable fenómeno en la historia de causas de ese exceso de mortalidad por
la industria moderna, consistente en enfermedades pulmonares señalado
que la máquina arroja por la borda por el doctor Greenhow en su reciente y
todas las barreras morales y naturales admirable informe". No cabe la mínima
de la jornada laboral. De ahí la parado- duda de que la tendencia del capital no
ja económica de que el medio más bien la ley le veda de una vez para
poderoso para reducir el tiempo de tra- siempre la prolongación de la jornada
bajo se trastrueque en el medio más laboral, a resarcirse mediante la eleva-
infalible de transformar todo el tiempo ción sistemática del grado de intensi-
vital del obrero y de su familia en tiem- dad del trabajo y a convertir todo per-
po de trabajo disponible para la valori- feccionamiento de la maquinaria en
zación del capital. medio para un mayor succionamiento
de la fuerza de trabajo, pronto hará que
c) Intensificación del trabajo se llegue a un punto crítico en el que se
Como hemos visto, la desmesurada volverá inevitable una nueva reducción
prolongación de la jornada laboral, pro- de las horas de trabajo. Por otra parte,
vocada por la maquinaria en manos del el avance impetuoso de la industria
capital, suscita más adelante una reac- inglesa entre 1848 y el presente, esto
ción de la sociedad, amenazada en sus es, durante el período de la jornada
raíces vitales, y una jornada laboral laboral de 10 horas, sobrepuja al lapso
normal limitada legalmente. Sobre el que va de 1833 a 1847, es decir al perí-
fundamento de esta última se desarro- odo de la jornada de 12 horas, mucho
lla y adquiere importancia decisiva un más ampliamente que este último al
medio siglo transcurrido desde la intro-
fenómeno con el que ya nos encontra-
ducción del sistema fabril, o sea el perí-
mos antes, a saber, la intensificación
odo de la jornada laboral ilimitada.
del trabajo. (…)
4. La fábrica.
(…) Aunque los inspectores fabriles
elogien infatigablemente, y con toda Al comienzo de este capítulo exami-
razón, los resultados positivos de las nábamos el cuerpo de la fábrica, la arti-
Segundo encuentro: El Capitalismo - 73

culación del sistema fundado en las a la vez de proceso de valorización del


máquinas. Vimos entonces [a] cómo la capital, es que no es el obrero quien
maquinaria, al apropiarse del trabajo emplea a la condición de trabajo, sino,
de las mujeres y los niños, aumenta el a la inversa, la condición de trabajo al
material sujeto a la explotación del obrero. Pero sólo con la maquinaria ese
capital; [b] cómo confisca todo el tiem- trastrocamiento adquiere una realidad
po vital del obrero mediante la expan- técnicamente tangible. Mediante su
sión desmesurada de la jornada labo- transformación en autómata, el medio
ral, y [c] cómo su progreso, que permi- de trabajo se enfrenta al obrero, duran-
te suministrar un producto enorme- te el proceso mismo de trabajo, como
mente mayor en un tiempo cada vez capital, como trabajo inanimado que
menor, termina por servir como medio domina y succiona la fuerza de trabajo
sistemático de poner en movimiento más viva. La escisión entre las potencias
trabajo en cada momento, o de explotar intelectuales del proceso de producción
cada vez más intensamente la fuerza de y el trabajo manual, así como la trans-
trabajo. Pasamos ahora a considerar el formación de las mismas en poderes del
conjunto de la fábrica, y precisamente capital sobre el trabajo, se consuma,
en su forma más desarrollada. (…) como ya indicáramos, en la gran indus-
tria, erigida sobre el fundamento de la
En la manufactura y el artesanado el
maquinaria. La habilidad detallista del
trabajador se sirve de la herramienta;
obrero mecánico individual, privado de
en la fábrica, sirve a la máquina. Allí
contenido, desaparece como cosa acce-
parte de él el movimiento del medio de
soria e insignificante ante la ciencia,
trabajo; aquí, es él quien tiene que
ante las descomunales fuerzas natura-
seguir el movimiento de éste. En la
les y el trabajo masivo social que están
manufactura los obreros son miembros
corporificados en el sistema fundado en
de un mecanismo vivo. En la fábrica
las máquinas y que forman, con éste, el
existe un mecanismo inanimado inde-
poder del "patrón". (…)
pendiente de ellos, al que son incorpo-
rados como apéndices vivientes. (…) El La subordinación técnica del obrero a
trabajo mecánico agrede de la manera la marcha uniforme del medio de traba-
más intensa el sistema nervioso, y a la jo y la composición peculiar del cuerpo
vez reprime el juego multilateral de los de trabajo, integrado por individuos de
músculos y confisca toda actividad uno u otro sexo y pertenecientes a
libre, física e intelectual, del obrero. diversos niveles de edad, crean una dis-
Hasta el hecho de que el trabajo sea ciplina cuartelaria que se desenvuelve
más fácil se convierte en medio de tor- hasta constituir un régimen fabril pleno
tura, puesto que la máquina no libera y que desarrolla completamente el tra-
del trabajo al obrero, sino de contenido bajo de supervisión (…) y por tanto, a la
a su trabajo. Un rasgo común de toda vez, la división de los obreros entre obre-
la producción capitalista, en tanto no ros manuales y capataces, entre solda-
se trata sólo de proceso de trabajo, sino dos rasos de la industria y suboficiales
74- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

industriales. (…) El código fabril en el nomía en los medios sociales de produc-


cual el capital formula, como un legis- ción, madurada por primera vez en el
lador privado y conforme a su capricho, sistema fabril como en un invernáculo,
la autocracia que ejerce sobre sus obre- en manos del capital se vuelve a la vez
ros sin que en dicho código figure esa un robo sistemático en perjuicio de las
división de poderes de la que tanto condiciones vitales del obrero durante el
gusta la burguesía, ni el sistema repre- trabajo, robo de espacio, aire, luz y de
sentativo, aun más apetecido por ella medios personales de protección contra
no es más que la caricatura capitalista las circunstancias del proceso de pro-
de la regulación social del proceso labo- ducción peligrosas para la vida o insa-
ral, que se vuelve necesaria al introdu- lubres, y no hablemos de aparatos des-
cirse la cooperación en gran escala y el tinados a aumentar la comodidad del
empleo de medios de trabajo colectivos, obrero.
principalmente de la maquinaria. La
libreta de castigos, en manos del capa- 5. Lucha entre el obrero y la máquina
taz, remplaza al látigo del negrero. La lucha entre el capitalista y el asa-
Todas las penas, naturalmente, se lariado principia con la relación capita-
resuelven en multas en dinero y des- lista misma, y sus convulsiones se pro-
cuentos del salario, y la sagacidad longan durante todo el período manu-
legislativa de los Licurgos(*) fabriles facturero. Pero no es sino con la intro-
hace que la transgresión de sus leyes ducción de la maquinaria que el obrero
les resulte más lucrativa, si cabe, que el combate contra el medio de trabajo
acatamiento de las mismas. mismo, contra el modo material de exis-
tencia del capital. Su revuelta se dirige
Nos limitaremos aquí a aludir a las
contra esa forma determinada del
condiciones materiales bajo las cuales
medio de producción en cuanto funda-
se ejecuta el trabajo fabril. Todos los
mento material del modo de producción
órganos de los sentidos son uniforme-
capitalista.
mente agredidos por la elevación artifi-
cial de la temperatura, la atmósfera Casi toda Europa experimentó,
cargada de desperdicios de la materia durante el siglo XVII, revueltas de los
prima, el ruido ensordecedor, etc., para trabajadores contra el llamado “molino
no hablar del peligro mortal que se de cintas” (…), una máquina para tejer
corre entre la apiñada maquinaria, la cintas y galones. A fines del primer ter-
cual produce sus partes industriales de cio del siglo XVII un aserradero movido
batalla con la misma regularidad con por un molino de viento, instalado por
que se suceden las estaciones. La eco- un holandés en las cercanías de
Londres, sucumbió debido a los exce-

* Licurgo fue un legendario legislador de


Esparta a quien se atribuye la reforma militarista
de dicha ciudad-Estado. Vivió del 700 a. C.
(aprox.) al 630 a. C. [N. de E.]
sos del populacho. Aun a principios del
siglo XVIII, en Inglaterra, las máquinas
hidráulicas de aserrar superaban a
duras penas la resistencia popular, res-
Segundo encuentro: El Capitalismo - 75

paldada por el parlamento. Cuando lateraliza esa fuerza de trabajo, la con-


Everet, en 1758, construyó la primera vierte en esa destreza totalmente parti-
máquina de tundir impulsada por el cularizada que consiste en el manejo de
agua, 100.000 hombres que habían una herramienta parcial. No bien el
quedado sin trabajo le prendieron fuego manejo de la herramienta recae en la
al invento. 50.000 trabajadores, que máquina, se extingue, a la par del valor
hasta entonces habían vivido del carda- de uso, el valor de cambio de la fuerza
do de lana, elevaron una petición al de trabajo. El obrero se vuelve invendi-
parlamento contra los molinos de carda ble, como el papel moneda puesto fuera
y las máquinas de cardar. La destruc- de circulación. La parte de la clase tra-
ción masiva de máquinas que tuvo bajadora que la maquinaria transforma
lugar bajo el nombre de movimiento de esta suerte en población superflua, esto
ludista en los distritos manufactureros es, no directamente necesaria ya para la auto-
ingleses durante los primeros 15 años valorización del capital, por un lado
del siglo XIX, a causa sobre todo de la sucumbe en la lucha desigual de la
utilización del telar de vapor, ofreció al vieja industria artesanal y manufactu-
gobierno antijacobino(*) de un Sid- rera contra la industria maquinizada;
mouth, un Castlereagh, etc., el pretex- por otro, inunda todos los ramos indus-
to para adoptar las más reaccionarias triales más fácilmente accesibles,
medidas de violencia. Se requirió tiem- colma el mercado de trabajo y, por
po y experiencia antes que el obrero tanto, abate el precio de la fuerza de
distinguiera entre la maquinaria y su trabajo a menos de su valor. Para los
empleo capitalista, aprendiendo así a obreros pauperizados ha de constituir
transferir sus ataques, antes dirigidos un gran consuelo, en parte, que sus
contra el mismo medio material de pro- sufrimientos sean sólo "temporales", y
ducción, a la forma social de explotación en parte, que la maquinaria sólo se
de dicho medio. (…) apodere gradualmente de todo el
En cuanto máquina, el medio de tra- campo de producción, con lo cual men-
bajo se convierte de inmediato en com- guan el volumen y la intensidad de su
petidor del propio obrero. La autovalori- efecto aniquilador. Un consuelo anula
zación del capital por la máquina está al otro. Donde la máquina hace presa
en razón directa al número de obreros gradualmente en un campo de la pro-
cuyas condiciones de existencia aquélla ducción, produce una miseria crónica
aniquila. Todo el sistema de la produc- en las capas obreras que compiten con
ción capitalista se funda en que el obre- ella. Donde la transición es rápida,
ro vende su fuerza de trabajo como surte un efecto masivo y agudo. La his-
mercancía. La división del trabajo uni- toria universal no ofrece ningún espec-
táculo más aterrador que el de la extin-

* Se refiere en este caso a los gobiernos con-


servadores ingleses contrarios a la Revolución
Francesa [N. de E.].
ción gradual de los tejedores manuales
ingleses del algodón, un proceso que se
arrastró a lo largo de decenios hasta su
76- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

desenlace en 1838. Muchos de ellos las cuales amenazaban empujar a la


murieron de hambre, muchos vegeta- crisis al incipiente sistema fabril. Se
ron largos años con sus familias a podría escribir una historia entera de
razón de 2 1/2 peniques por día. La los inventos que surgieron, desde 1830,
maquinaria algodonera inglesa, por el como medios bélicos del capital contra
contrario, surtió un efecto agudo en las los amotinamientos obreros. (…) "En su
Indias Orientales, cuyo gobernador declaración ante la "Trade's Unions
general verificaba en 1834-1835: "La Commission", Nasmyth, el inventor del
miseria difícilmente encuentre un para- martinete de vapor, informa en estos
lelo en la historia del comercio. Los términos acerca de los perfecciona-
huesos de los tejedores de algodón mientos de la maquinaria introducidos
hacen blanquear las llanuras de la por él a consecuencia de las grandes y
India". Seguramente que al apartarlos prolongadas huelgas de los obreros
de este mundo temporal, la máquina no constructores de máquinas en 1851:
hacía más que ocasionarles "inconve- «El rasgo característico de nuestros
nientes temporales". Por lo demás, el modernos perfeccionamientos mecáni-
efecto "temporal" de la máquina es per- cos es la introducción de máquinas-
manente, puesto que constantemente herramientas automáticas. Lo que
se apodera de nuevos dominios produc- tiene que hacer ahora un obrero mecá-
tivos. La figura autonomizada y enaje- nico, y lo que puede hacer cualquier
nada que el modo capitalista de pro- muchacho, no es trabajar él mismo,
ducción confiere en general a las condi- sino vigilar el espléndido trabajo de la
ciones de trabajo y al producto de tra- máquina. Toda esa clase de obreros
bajo, enfrentados al obrero, se desarro- que depende exclusivamente de su des-
lla con la maquinaria hasta convertirse treza, está actualmente marginada.
en antítesis radical. De ahí que al apa- Antes yo empleaba cuatro muchachos
recer la maquinaria estalle, por prime- por cada mecánico. Gracias a estas
ra vez, la revuelta brutal del trabajador nuevas combinaciones mecánicas, he
contra el medio de trabajo. reducido el número de obreros adultos
de 1.500 a 750. La consecuencia fue un
(…) El capital proclama y maneja, considerable aumento de mis ganan-
abierta y tendencialmente, a la maqui- cias»". (…)
naria como potencia hostil al obrero. La
misma se convierte en el arma más 7. Repulsión y atracción de obreros
poderosa para reprimir las periódicas al desarrollarse la industria maquini-
revueltas obreras, las huelgas, etc., zada. Crisis de la industria algodone-
ra.
dirigidas contra la autocracia del capi-
tal. Según Gaskell, la máquina de vapor (…) Mientras la explotación maquini-
fue desde un primer momento un anta- zada se expande en un ramo industrial
gonista de la "fuerza humana", el rival a costa del artesanado o la manufactu-
que permitió a los capitalistas aplastar ra tradicionales, sus éxitos son tan
las crecientes reivindicaciones obreras, seguros como lo serían los de un ejérci-
Segundo encuentro: El Capitalismo - 77

to que, armado con fusiles de percutor, arruinar el producto artesanal de éstos,


luchara contra un ejército de arqueros. la industria maquinizada los convierte
Ese período inicial en que la máquina forzadamente en campos de producción
conquista por primera vez su campo de de su materia prima. Así, por ejemplo,
acción, es de una importancia decisiva las Indias Orientales han sido constre-
a causa de las ganancias extraordina- ñidas a producir algodón, lana, cáña-
rias que ayuda a producir. No sólo mo, yute, añil, etc., para Gran Bretaña.
constituyen éstas, en sí y para sí, una La constante conversión en "supernu-
fuente de acumulación acelerada, sino merarios" de los obreros en los países
que atraen a la esfera de producción de gran industria fomenta, como en un
favorecida gran parte del capital social invernáculo, la emigración hacia países
adicional que constantemente está cre- extranjeros y la colonización de los mis-
ándose y que pugna por hallar nuevos mos, transformándolos en semilleros
campos de inversión. Las ventajas par- de materias primas para la metrópoli,
ticulares del período inicial fermental y como se transformó por ejemplo a
de turbulencia se reiteran constante- Australia en un centro de producción
mente en los ramos de la producción lanera (…). Se crea así una nueva divi-
donde la maquinaria se introduce por sión internacional del trabajo, adecuada
vez primera. Pero no bien el régimen a las principales sedes de la industria
fabril ha conquistado cierta amplitud maquinizada, una división que convier-
de existencia y determinado grado de te a una parte del globo terrestre en
madurez; no bien, ante todo, su propio campo de producción agrícola por exce-
fundamento técnico, la maquinaria lencia para la otra parte, convertida en
misma, es a su vez producido por campo de producción industrial por
máquinas; no bien se revolucionan la excelencia. (…)
extracción del carbón y el hierro así
como la metalurgia y el trasporte y, en La enorme capacidad, inherente al
suma, se establecen las condiciones sistema fabril, de expandirse a saltos y
generales de producción correspon- su dependencia respecto del mercado
dientes a la gran industria, este modo mundial generan necesariamente una
de producción adquiere una elastici- producción de ritmo febril y la consi-
dad, una capacidad de expansión súbi- guiente saturación de los mercados,
ta y a saltos que sólo encuentra barre- que al contraerse originan un período
ras en la materia prima y en el merca- de paralización. La vida de la industria
do donde coloca sus propios productos. se convierte en una secuencia de perío-
La maquinaria, por un lado, promueve dos de animación mediana, prosperi-
un incremento directo de la materia dad, sobreproducción, crisis y estanca-
prima; (…). Por otro lado, la baratura miento. A raíz de estos cambios periódi-
de los productos hechos a máquina y cos del ciclo industrial, se vuelven nor-
los sistemas revolucionados de traspor- males la inseguridad e inestabilidad
te y comunicación son armas para la que la industria maquinizada impone a
conquista de mercados extranjeros. Al la ocupación del obrero y por tanto a su
78- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

situación vital. Excepto en las épocas ro volveremos a examinar la resistencia


de prosperidad, los capitalistas se fanática de los fabricantes contra la
empeñan en una lucha encarnizada por cláusula que les imponía un pequeño
su participación individual en el merca- desembolso para proteger los miembros
do. Esta cuota parte se halla en razón de su "mano de obra". (…) Esta parte de
directa a la baratura del producto. la ley fabril ha demostrado de manera
Además de la rivalidad que esa lucha contundente cómo el modo de produc-
provoca en cuanto al uso de maquina- ción capitalista, conforme a su esencia,
ria perfeccionada, sustitutiva de fuerza a partir de cierto punto excluye todo
de trabajo, y a la aplicación de nuevos perfeccionamiento racional. (…) Lo que
métodos de producción, se llega siem- declaran [estas cláusulas sanitarias],
pre a un punto en que se procura aba- en realidad, es que la tisis y otras enfer-
ratar la mercancía mediante la reduc- medades pulmonares de los obreros
ción violenta del salario por debajo del constituyen una condición de vida del
valor de la fuerza de trabajo. (…) capital.
Aunque, tomadas en conjunto, las
cláusulas educacionales de la ley fabril
9. Legislación fabril. (Cláusulas
son mezquinas, proclaman la enseñan-
sanitarias y educacionales). Su
za elemental como condición obligatoria
generalización en Inglaterra.
del trabajo. Su éxito demuestra, en pri-
La legislación fabril, esa primera reac- mer término la posibilidad de combinar
ción planificada y consciente de la la instrucción y la gimnasia con el tra-
sociedad sobre la figura natural de su bajo manual, y por tanto también la de
proceso de producción, es, como hemos combinar el trabajo manual con la ins-
visto un producto necesario de la gran trucción y la gimnasia. (…) Del sistema
industria, a igual título que el hilado de fabril, como podemos ver en detalle en
algodón, las hiladoras alternativas la obra de Robert Owen, brota el ger-
automáticas y el telégrafo eléctrico. (…) men de la educación del futuro, que
Hemos de mencionar brevemente algu- combinará para todos los niños, a par-
nas cláusulas de la ley fabril inglesa tir de cierta edad, el trabajo productivo
que no guardan relación con el horario con la educación y la gimnasia, no sólo
de la jornada laboral. como método de acrecentar la produc-
ción social, sino como único método
Prescindiendo de su redacción, que
para la producción de hombres des-
facilita al capitalista el trasgredirlas,
arrollados de manera omnifacética. (…)
las cláusulas sanitarias son extremada-
mente insuficientes. En realidad se Mientras la industria artesanal y la
reducen a disposiciones sobre el blan- manufactura constituyen el fundamen-
queo de las paredes y algunas otras to general de la producción social (…)
medidas de limpieza o relativas a la cada ramo particular de la producción
ventilación y la protección contra encuentra empíricamente la figura téc-
maquinaria peligrosa. En el libro terce- nica que le corresponde, la perfecciona
Segundo encuentro: El Capitalismo - 79

con lentitud y, no bien se alcanza cier- fundamento técnico de la producción,


to grado de madurez, la cristaliza rápi- las funciones de los obreros y las com-
damente. Salvo los nuevos materiales binaciones sociales del proceso laboral.
de trabajo suministrados por el comer- Con ellas, revoluciona constantemente,
cio, lo único que provoca cambios aquí asimismo, la división del trabajo en el
y allá es la variación gradual del instru- interior de la sociedad y arroja de
mento de trabajo. Una vez adquirida manera incesante masas de capital y de
empíricamente la forma adecuada, ésta obreros de un ramo de la producción a
también se petrifica, como lo demues- otro. La naturaleza de la gran indus-
tra el pasaje de esos instrumentos, a tria, por ende, implica el cambio del
menudo milenario, de manos de una trabajo, la fluidez de la función, la
generación a las de las siguientes. Es movilidad omnifacética del obrero. Por
característico que ya entrado el siglo otra parte, reproduce en su forma capi-
XVIII, todavía se denominaran “miste- talista la vieja división del trabajo con
rios” los diversos oficios, en cuyos sus particularidades petrificadas.
secretos sólo podía penetrar el iniciado Hemos visto cómo esta contradicción
por experiencia y por profesión. absoluta suprime toda estabilidad, fir-
La gran industria rasgó el velo que meza y seguridad en la situación vital
ocultaba a los hombres su propio pro- del obrero, a quien amenaza permanen-
ceso social de producción y que conver- temente con quitarle de las manos,
tía los diversos ramos de la producción, junto al medio de trabajo, el medio de
espontáneamente particularizados, en
enigmas unos respecto a otros, e inclu-
so para el iniciado en cada uno de esos
ramos. El principio de la gran industria
esto es, el de disolver en sí y para sí a
* "La burguesía no puede existir sin revolucio-
nar continuamente los instrumentos de produc-
ción, por tanto las relaciones de producción, y por
tanto todas las relaciones sociales. La conserva-
todo proceso de producción en sus ele- ción inalterada del viejo modo de producción era,
mentos constitutivos y, ante todo, el por el contrario, la primera condición de existen-
cia de todas las clases industriales anteriores. El
hacerlo sin tener en cuenta para nada
trastocamiento continuo de la producción, la con-
a la mano humana, creó la ciencia moción ininterrumpida de todas las condiciones
modernísima de la tecnología. (…). La sociales, la inseguridad y el movimiento perennes
industria moderna nunca considera ni distinguen la época burguesa de todas las prece-
trata como definitiva la forma existente dentes. Todas las relaciones fijas y enmohecidas,
de un proceso de producción. Su base con su comitiva de ideas y concepciones arcaicas y
técnica, por consiguiente, es revolucio- consagradas, se disuelven, y las recién surgidas
naria, mientras que todos los modos de envejecen antes de poder osificarse. Todo lo sólido
y fijo se evapora, todo lo sagrado es profanado, y
producción anteriores eran esencial-
finalmente los hombres se ven obligados a con-
mente conservadores.(*) La industria templar con mirada impasible su posición en la
moderna, mediante la maquinaria, los vida y sus relaciones recíprocas." (F. Engels y K.
procesos químicos y otros procedimien- Marx, "Manifest der Kommunistischen Partie",
tos, revoluciona constantemente, con el Londres, 1848, p. 5.)
80- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

subsistencia; con hacer superflua su agronómicas; otra, las “escuelas de


función parcial y con ésta a él mismo. enseñanza profesional”, en las cuales
Vimos, también, cómo esta contradic- los hijos de los obreros reciben alguna
ción se desfoga en la hecatombe ininte- instrucción en tecnología y en el mane-
rrumpida de la clase obrera, en el des- jo práctico de los diversos instrumentos
pilfarro más desorbitado de las fuerzas de producción. Si la legislación fabril,
de trabajo y los estragos de la anarquía esa primera concesión penosamente
social. Es éste el aspecto negativo. Pero arrancada al capital, no va más allá de
si hoy en día el cambio de trabajo sólo combinar la enseñanza elemental con
se impone como ley natural avasallado- el trabajo en las fábricas, no cabe duda
ra y con el efecto ciegamente destructi- alguna de que la inevitable conquista
vo de una ley natural que por todas del poder político por la clase obrera
partes topa con obstáculos, la gran también conquistará el debido lugar
industria, precisamente por sus mis- para la enseñanza tecnológica teórica y
mas catástrofes, convierte en cuestión práctica en las escuelas obreras.
de vida o muerte la necesidad de reco- Tampoco cabe duda alguna de que la
nocer como ley social general de la pro- forma capitalista de la producción y las
ducción el cambio de los trabajos y por correspondientes condiciones económi-
tanto la mayor multilateralidad posible cas a las que están sometidos los obre-
de los obreros, obligando, al mismo ros, se hallan en contradicción diame-
tiempo, a que las circunstancias se tral con tales fermentos revolucionarios
adapten a la aplicación normal de y con la meta de los mismos, la aboli-
dicha ley. Convierte en cuestión de vida ción de la vieja división del trabajo. El
o muerte el sustituir esa monstruosi- desarrollo de las contradicciones de
dad de que se mantenga en reserva una una forma histórica de producción, no
miserable población obrera, pronta obstante, es el único camino histórico
para satisfacer las variables necesida- que lleva a la disolución y transforma-
des de explotación que experimenta el ción de la misma. "¡Zapatero, a tus
capital, por la disponibilidad absoluta zapatos!", ese extremo insuperable de
del hombre para cumplir las variables la sabiduría artesanal, se convirtió en
exigencias laborales, el remplazar al tremebunda necedad a partir del
individuo parcial, al mero portador de momento en que el relojero Watt hubo
una función social de detalle, por el inventado la maquina de vapor, el bar-
individuo totalmente desarrollado, para bero Arkwright el telar continuo, y el
el cual las diversas funciones sociales orfebre Fulton el barco de vapor. (…)
son modos alternativos de ponerse en
Si la generalización del cuerpo de
actividad.
leyes fabriles como medio físico y espi-
Una fase de este proceso de trastoca- ritual de protección a la clase obrera se
miento, desarrollada de manera natu- ha vuelto inevitable, dicha generaliza-
ral sobre la base de la gran industria, la ción por su parte y como ya se ha indi-
constituyen las escuelas politécnicas y cado, generaliza y acelera la transfor-
Segundo encuentro: El Capitalismo - 81

mación de procesos laborales disper- la revolución que la gran industria pro-


sos, ejecutados en escala diminuta, en voca en la agricultura, así como en las
procesos de trabajo combinados, efec- relaciones sociales de sus agentes pro-
tuados en una escala social, grande; ductivos. Aquí bastará con que indi-
esto es, acelera la concentración del quemos brevemente y por anticipado
capital y el imperio exclusivo del régi- algunos de los resultados. Si bien el
men fabril. Destruye todas las formas uso de la maquinaria en la agricultura
tradicionales y de transición tras las está exento, en gran parte, de los per-
cuales el capital todavía estaba semio- juicios físicos que ocasiona al obrero
culto, y las sustituye por su domina- fabril, su acción (en cuanto a convertir
ción directa, sin tapujos. Con ello, la en "supernumerarios" a los obreros), es
legislación fabril generaliza también la aun más intensa y no encuentra resis-
lucha directa contra esa dominación. tencia (…)
Mientras que en los talleres individua-
Es en la esfera de la agricultura
les impone la uniformidad, la regulari-
donde la gran industria opera de la
dad, el orden y la economía, al mismo
manera más revolucionaria, ya que
tiempo acrecienta por el enorme estí-
liquida el baluarte de la vieja sociedad,
mulo que para la técnica significan la
el "campesino", sustituyéndolo por el
limitación y regulación de la jornada
asalariado. De esta suerte, las necesi-
laboral la anarquía y las catástrofes de
dades sociales de trastocamiento y las
la producción capitalista en su conjun-
antítesis del campo se nivelan con las
to, así como la intensidad del trabajo y
de la ciudad. Los métodos de explota-
la competencia de la maquinaria con el
ción más rutinarios e irracionales se
obrero. Al aniquilar las esferas de la
ven remplazados por la aplicación
pequeña empresa y de la industria
consciente y tecnológica de la ciencia.
domiciliaria, aniquila también los últi-
(…) Con la preponderancia incesante-
mos refugios de los "supernumerarios", mente creciente de la población urba-
y con ello la válvula de seguridad de na, acumulada en grandes centros por
todo el mecanismo social. Al hacer que la producción capitalista, ésta por una
maduren las condiciones materiales y parte acumula la fuerza motriz históri-
la combinación social del proceso de ca de la sociedad, y por otra perturba el
producción, hace madurar las contra- metabolismo entre el hombre y la tie-
dicciones y antagonismos de la forma rra, esto es, el retorno al suelo de aque-
capitalista de ese proceso, y por ende, llos elementos constitutivos del mismo
al mismo tiempo, los elementos creado- que han sido consumidos por el hom-
res de una nueva sociedad y los facto- bre bajo la forma de alimentos y vesti-
res que trastuecan la sociedad vieja". menta, retorno que es condición natu-
ral eterna de la fertilidad permanente
del suelo. Con ello destruye, al mismo
10. Gran industria y agricultura
tiempo, la salud física de los obreros
Sólo más adelante podremos exponer urbanos y la vida intelectual de los tra-
82- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

bajadores rurales. (…) SECCIÓN SÉPTIMA:


En la agricultura, como en la manu- EL PROCESO DE
factura, la transformación capitalista ACUMULACIÓN DE
del proceso de producción aparece a la
vez como martirologio de los producto-
CAPITAL.
res; el medio de trabajo, como medio de
sojuzgamiento, de explotación y empo-
CAPITULO XXIII:
brecimiento del obrero, la combinación
social de los procesos laborales, como LA LEY GENERAL DE LA ACUMU-
opresión organizada de su vitalidad, LACION CAPITALISTA
libertad e independencia individuales.
La dispersión de los obreros rurales en
grandes extensiones quebranta, al 1. Demanda creciente de fuerza de
mismo tiempo, su capacidad de resis- trabajo, con la acumulación, mante-
tencia, mientras que la concentración niéndose igual la composición del
aumenta la de los obreros urbanos. Al capital.
igual que en la industria urbana, la
fuerza productiva acrecentada y la (…) Las circunstancias más o menos
mayor movilización del trabajo en la favorables bajo las cuales se mantienen
agricultura moderna, se obtienen y multiplican los asalariados, no modi-
devastando y extenuando la fuerza de fican en nada el carácter fundamental
trabajo misma. Y todo progreso de la de la producción capitalista. Así como
agricultura capitalista no es sólo un la reproducción simple reproduce conti-
progreso en el arte de esquilmar al obre- nuamente la relación capitalista misma
ro, sino a la vez en el arte de esquilmar capitalistas por un lado, asalariados
el suelo; todo avance en el acrecenta- por la otra, la reproducción en escala
miento de la fertilidad de éste durante
ampliada, o sea la acumulación, repro-
un lapso dado, un avance en el agota-
duce la relación capitalista en escala
miento de las fuentes duraderas de esa
ampliada: más capitalistas o capitalis-
fertilidad. (…) La producción capitalis-
ta, por consiguiente, no desarrolla la tas más grandes en este polo, más asa-
técnica y la combinación del proceso lariados en aquél. Como vimos con
social de producción sino socavando, al anterioridad, la reproducción de la
mismo tiempo, los dos manantiales de fuerza de trabajo que incesantemente
toda riqueza: la tierra y el trabajador. ha de incorporarse como medio de valo-
rización al capital, que no puede desli-
garse de él y cuyo vasallaje con respec-
to al capital sólo es velado por el cam-
bio de los capitalistas individuales a los
que se vende, constituye en realidad un
factor de la reproducción del capital
Segundo encuentro: El Capitalismo - 83

mismo. Acumulación del capital es, por producción y la reproducción de sus


tanto, aumento del proletariado. (…) propias condiciones: por un lado de los
medios de producción y de subsistencia
(…) La fuerza de trabajo no se compra
como capital, por el otro de la fuerza de
aquí para satisfacer, mediante sus ser-
trabajo como mercancía; en un polo,
vicios o su producto, las necesidades
del capitalista, en el otro, del asalaria-
personales del [capitalista] comprador.
do. (…)
El objetivo perseguido por éste es la
valorización de su capital, la produc- Vemos entonces que (…) no es la
ción de mercancías que contengan más reducción en el crecimiento absoluto o
trabajo que el pagado por él, o sea que relativo de la fuerza de trabajo, o de la
contengan una parte de valor que nada población obrera, lo que vuelve excesi-
le cuesta al comprador y que sin embar- vo al capital, sino que, a la inversa, es
go se realiza mediante la venta de las el incremento del capital lo que vuelve
mercancías. La producción de plusva- insuficiente la fuerza de trabajo explo-
lor, el fabricar un excedente, es la ley table. (…) [Así como] no es el aumento
absoluta de este modo de producción. en el crecimiento absoluto o proporcio-
Sólo es posible vender la fuerza de tra- nal de la fuerza de trabajo o de la
bajo en tanto la misma conserva como población obrera lo que hace insufi-
capital [constante] los medios de pro- ciente al capital, sino que, a la inversa,
ducción, reproduce como capital [varia- es la disminución del capital lo que
ble] su propio valor y proporciona, con vuelve excesiva la fuerza de trabajo
el trabajo impago, una fuente de plus- explotable, o más bien su precio. Son
capital. Por consiguiente, las condicio- estos movimientos absolutos en la acu-
nes de su venta, sean más favorables o mulación del capital los que se reflejan
menos para los obreros, implican la como movimientos relativos en la masa
necesidad de que se la venda siempre de la fuerza de trabajo explotable y
de nuevo y la reproducción continua- parecen obedecer, por ende, al movi-
mente ampliada de la riqueza como miento propio de esta última. (…) Los
capital. Como vemos, el salario, confor- economistas [vulgares] interpretan esos
me a su naturaleza, implica siempre el fenómenos de la acumulación diciendo
suministro por parte del obrero de que en un caso existen menos asalaria-
determinada cantidad de trabajo impa- dos que los necesarios y en el otro
go. (…) El aumento de los salarios sólo demasiados asalariados. La ley de la
denota, en el mejor de los casos, la acumulación capitalista, fraudulenta-
merma cuantitativa del trabajo impago mente transmutada de esta suerte en
que debe ejecutar el obrero. Dicha ley natural, no expresa en realidad sino
merma nunca puede alcanzar el punto que la naturaleza de dicha acumulación
en el que pondría en peligro seriamente excluye toda mengua en el grado de
el carácter capitalista del proceso de explotación a que se halla sometido el
84- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

trabajo o toda alza en el precio de éste (…) Como la demanda de trabajo no


que pueda amenazar seriamente la está determinada por el volumen del
reproducción constante de la relación capital global, sino por el de su parte
capitalista, su reproducción en una constitutiva variable, ésta decrece pro-
escala constantemente ampliada. No gresivamente a medida que se acrecien-
pueden ocurrir las cosas de otra mane- ta el capital global, en vez de aumentar
ra en un modo de producción donde el proporcionalmente al incremento de
trabajador existe para las necesidades éste, tal como antes suponíamos. (…) Al
de valorización de valores ya existentes, incrementarse el capital global, en efec-
en vez de existir la riqueza objetiva para to, aumenta también su parte constitu-
las necesidades de desarrollo del traba- tiva variable, o sea la fuerza de trabajo
jador. Así como en la religión el hombre que se incorpora, pero en proporción
está dominado por las obras de su pro- constantemente decreciente. (…). Esa
pio cerebro, en la producción capitalis- disminución relativa de su parte cons-
ta lo está por las obras de su propia titutiva variable (…) aparece por otra
mano. (…) parte, a la inversa, como un incremento
absoluto de la población obrera que
siempre es más rápido que el del capital
3. Producción progresiva de una variable o que el de los medios que per-
sobrepoblación relativa o ejército miten ocupar a aquélla. La acumulación
industrial de reserva. capitalista produce de manera constan-
La acumulación del capital, que origi- te, antes bien, y precisamente en pro-
nariamente no aparecía más que como porción a su energía y a su volumen,
su ampliación cuantitativa, se lleva una población obrera relativamente
cabo, como hemos visto, en medio de excedentaria, esto es, excesiva para las
un continuo cambio cualitativo de su necesidades medias de valorización del
composición, en medio de un aumento capital y por tanto superflua.
ininterrumpido de su parte constitutiva Si nos atenemos al capital global
constante a expensas de su parte cons- social, ora el movimiento de su acumu-
titutiva variable. lación provoca un cambio periódico, ora
El modo de producción específica- sus elementos se distribuyen simultá-
mente capitalista, el consiguiente des- neamente entre las diversas esferas de
arrollo de la fuerza productiva del tra- la producción. (…) En todas las esferas,
bajo, el cambio que ocasiona ese des- el incremento de la parte variable del
arrollo en la composición orgánica del capital, y por tanto del número de obre-
capital, no sólo corren parejas con el ros ocupados, está ligado siempre a vio-
progreso de la acumulación o el incre- lentas fluctuaciones y a la producción
mento de la riqueza social. Avanzan con transitoria de una sobrepoblación, ya
una rapidez incomparablemente mayor adopte ésta la forma más notoria de la
Segundo encuentro: El Capitalismo - 85

repulsión de obreros ocupados ante- modificaba muy gradualmente. Con la


riormente o la forma no tan evidente, acumulación de éste guardaba corres-
pero no menos eficaz, de una absorción pondencia, en líneas generales, un cre-
más dificultosa de la población obrera cimiento proporcional de la demanda
suplementaria a través de los canales de trabajo. Por lento que fuera el pro-
habituales (…). La población obrera, greso de esa acumulación, comparado
pues, con la acumulación del capital con el de la época moderna, dicho
producida por ella misma, produce en avance tropezaba con las barreras
volumen creciente los medios que per- naturales de la población obrera explo-
miten convertirla en relativamente table, barreras que sólo era posible
supernumeraria. Es esta una ley de remover por los medios violentos que
población que es peculiar al modo de mencionaremos más adelante. La
producción capitalista, ya que de hecho expansión súbita e intermitente de la
todo modo de producción histórico par- escala de producción es el supuesto de
ticular tiene sus leyes de población par- su contracción súbita; esta última, a su
ticulares, históricamente válidas. Una vez, provoca la primera, pero la prime-
ley abstracta de población sólo rige, ra es imposible si no existe el material
mientras el hombre no interfiere histó- humano disponible, si en el número de
ricamente en esos dominios, en el caso los obreros no se produce un aumento
de las plantas y los animales. (…) independiente del crecimiento absoluto
de la población. Dicho aumento se
El curso vital característico de la
genera mediante el simple proceso que
industria moderna, la forma de un ciclo
"libera" constantemente una parte de
decenal interrumpido por oscilaciones
los obreros, aplicando métodos que
menores de períodos de animación
reducen, en comparación con la pro-
media, producción a toda marcha, cri-
ducción acrecentada, el número de los
sis y estancamiento, se funda sobre la
obreros ocupados. Toda la forma de
formación constante, sobre la absor-
movimiento de la industria moderna
ción mayor o menor y la reconstitución,
deriva, pues, de la transformación
del ejército industrial de reserva o
constante de una parte de la población
sobrepoblación. A su vez, las alternati-
obrera en brazos desocupados o semio-
vas del ciclo industrial reclutan la
cupados. (…)
sobrepoblación y se convierten en uno
de sus agentes de reproducción más El trabajo excesivo de la parte ocupa-
activos. Este curso vital, peculiar de la da de la clase obrera engruesa las filas
industria moderna y desconocido en de su reserva, y, a la inversa, la presión
todas las épocas anteriores de la huma- redoblada que esta última, con su com-
nidad, era imposible también durante petencia, ejerce sobre el sector ocupado
la infancia de la producción capitalista. de la clase obrera, obliga a éste a traba-
La composición del capital sólo se jar excesivamente y a someterse a los
86- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

dictados del capital. La condena de una demanda de trabajo no es idéntica al


parte de la clase obrera al ocio forzoso crecimiento del capital, la oferta de tra-
mediante el exceso de trabajo impuesto bajo no se identifica con el aumento de
a la otra parte, y viceversa, se convierte la clase obrera, como si se tratara de
en medio de enriquecimiento del capi- dos potencias independientes que se
talista singular y, a la vez, acelera la influyen recíprocamente. “Los dados
producción del ejército industrial de están cargados”. El capital opera en
reserva en una escala acorde con el pro- ambos lados a la vez. Si por un lado su
greso de la acumulación social. (…) En acumulación aumenta la demanda de
todo y por todo, los movimientos gene- trabajo, por el otro acrecienta la oferta
rales del salario están regulados exclu- de obreros mediante su "puesta en
sivamente por la expansión y contrac- libertad", mientras que a la vez la pre-
ción del ejército industrial de reserva, sión de los desocupados obliga a los
las cuales se rigen, a su vez, por la alter- ocupados a poner en movimiento más
nación de períodos que se opera en el trabajo, haciendo así, por ende, que
ciclo industrial. Esos movimientos no se hasta cierto punto la oferta de trabajo
determinan, pues, por el movimiento del sea independiente de la oferta de obre-
número absoluto de la población obrera, ros. El movimiento de la ley de la oferta
sino por la proporción variable en que la y la demanda de trabajo completa,
clase obrera se divide en ejército activo sobre esta base, el despotismo del capi-
y ejército de reserva, por el aumento y tal.
la mengua del volumen relativo de la
No bien los obreros descifran, por
sobrepoblación, por el grado en que
tanto, el misterio de cómo en la misma
ésta es ora absorbida, ora puesta en
medida en que trabajan más producen
libertad. (…)
más riqueza ajena, de cómo la fuerza
Durante los períodos de estancamien- productiva de su trabajo aumenta
to y de prosperidad media, el ejército mientras que su función como medios
industrial de reserva o sobrepoblación de valorización del capital se vuelve
relativa ejerce presión sobre el ejército cada vez más precaria para ellos, no
obrero activo, y pone coto a sus exigen- bien descubren que el grado de intensi-
cias durante los períodos de sobrepro- dad alcanzado por la competencia entre
ducción y de paroxismo. La sobrepobla- ellos mismos depende enteramente de
ción relativa, pues, es el trasfondo sobre la presión ejercida por la sobrepobla-
el que se mueve la ley de la oferta y la ción relativa, no bien, por tanto, procu-
demanda de trabajo. Comprime el ran organizar, mediante trades' unions
campo de acción de esta ley dentro de [uniones sindicales], etc. una coopera-
los límites que convienen de manera ción planificada entre los ocupados y
absoluta al ansia de explotación y el los desocupados para anular o paliar
afán de poder del capital. (…) La las consecuencias ruinosas que esa ley
Segundo encuentro: El Capitalismo - 87

natural de la producción capitalista trae ejército de reserva en proporción al


aparejadas para su clase, el capital y su ejército obrero activo, tanto mayor será
sicofante, el economista, claman aira- la masa de la pluspoblación consolida-
dos contra esa violación de la ley "eter- da o las capas obreras cuya miseria
na", y por así decirlo "sagrada", de la está en razón inversa a la tortura de su
oferta y la demanda. Toda solidaridad trabajo. Cuanto mayores sean, final-
entre los ocupados y los desocupados mente, las capas de la clase obrera for-
perturba, en efecto, el "libre" juego de madas por menesterosos enfermizos y
esa ley. Por otra parte, no bien en las el ejército industrial de reserva, tanto
colonias, por ejemplo, se dan circuns- mayor será el pauperismo oficial. Esta
tancias adversas que impiden la crea- es la ley general, absoluta, de la acumu-
ción del ejército industrial de reserva, lación capitalista. En su aplicación, al
menoscabando así la dependencia igual que todas las demás leyes, se ve
absoluta de la clase obrera respecto de modificada por múltiples circunstan-
la clase capitalista, el capital, junto a cias, cuyo análisis no corresponde efec-
su Sancho Panza esgrimidor de lugares tuar aquí. (…)
comunes, se declara en rebeldía contra
la "sagrada" ley de la oferta y la deman- La ley según la cual el desarrollo de la
da y procura encauzarla con la ayuda fuerza productiva social del trabajo
de medios coercitivos. reduce progresivamente, en proporción
a la eficacia y la masa de sus medios de
producción, la masa de fuerza de traba-
4. Diversas formas de existencia jo que es necesario gastar, se expresa
de la sobrepoblación relativa. en el terreno capitalista donde no es el
La ley general de la acumulación trabajador el que emplea los medios de
capitalista. trabajo, sino éstos al trabajador de la
(…) Cuanto mayores sean la riqueza siguiente manera: cuanto mayor sea la
social, el capital en funciones, el volu- fuerza productiva del trabajo, tanto
men y vigor de su crecimiento y por mayor será la presión de los obreros
tanto, también, la magnitud absoluta de sobre sus medios de ocupación, y tanto
la población obrera y la fuerza producti- más precaria, por tanto, la condición de
va de su trabajo, tanto mayor será la existencia del asalariado: venta de su
pluspoblación relativa o ejército indus- fuerza de trabajo para aumentar la
trial de reserva. La fuerza de trabajo riqueza ajena o para la autovalorización
disponible se desarrolla por las mismas del capital. El incremento de los medios
causas que la fuerza expansiva del capi- de producción y de la productividad del
tal. La magnitud proporcional del ejér- trabajo a mayor velocidad que el de la
cito industrial de reserva, pues, se población productiva se expresa, capita-
acrecienta a la par de las potencias de listamente, en su contrario: en que la
la riqueza. Pero cuanto mayor sea este población obrera crece siempre más
88- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

rápidamente que la necesidad de valori- reserva y el volumen e intensidad de la


zación del capital. acumulación, encadena el obrero al
capital con grillos más firmes que las
En la sección cuarta, cuando analizá-
cuñas con que Hefesto aseguró a
bamos la producción del plusvalor rela-
Prometeo en la roca.(**) Esta ley pro-
tivo, veíamos que dentro del sistema
duce una acumulación de miseria pro-
capitalista todos los métodos para acre-
porcionada a la acumulación de capital.
centar la fuerza productiva social del
La acumulación de riqueza en un polo
trabajo se aplican a expensas del obre-
es al propio tiempo, pues, acumulación
ro individual; todos los métodos para
de miseria, tormentos de trabajo, escla-
desarrollar la producción se trastrue-
vitud, ignorancia, embrutecimiento y
can en medios de dominación y explo-
degradación moral en el polo opuesto,
tación del productor, mutilan al obrero
esto es, donde se halla la clase que pro-
convirtiéndolo en un hombre fracciona-
duce su propio producto como capital.
do, lo degradan a la condición de apén-
dice de la máquina, mediante la tortu- Los economistas han expuesto de
ra del trabajo aniquilan el contenido de maneras diversas ese carácter antagó-
éste, le enajenan al obrero las potencias nico de la acumulación capitalista, aun-
espirituales del proceso laboral en la que lo confundan con fenómenos en
misma medida en que a dicho proceso parte análogos, sin duda, pero esen-
se incorpora la ciencia como potencia cialmente diferentes, que se dan en
autónoma, vuelven constantemente modos de producción precapitalistas.
anormales las condiciones bajo las cua- El monje veneciano Ortes, uno de los
les trabaja, lo someten durante el pro- grandes escritores económicos del siglo
ceso de trabajo al más mezquino y odio- XVIII, concibe el antagonismo de la pro-
so de los despotismos, transforman el ducción capitalista como ley natural y
tiempo de su vida en tiempo de trabajo, universal de la riqueza social: "El bien
arrojan su mujer y su prole bajo la económico y el mal económico se equi-
rueda de Zhaganat(*) del capital. Pero libran siempre en una nación; la abun-
todos los métodos para la producción dancia de bienes para algunos iguala
del plusvalor son a la vez métodos de la siempre a la falta de los mismos para
acumulación, y toda expansión de ésta otros. [...] La gran riqueza de algunos
se convierte, a su vez, en medio para el está siempre acompañada de la priva-
desarrollo de aquellos métodos. De esto ción absoluta de lo necesario en otros
se sigue que a medida que se acumula
el capital, empeora la situación del
obrero, sea cual fuere su remuneración.
La ley, finalmente, que mantiene un * Dios hindú cuyo altar consistía en un carro
de proporciones gigantes. [N. de E.]

equilibrio constante entre la sobrepobla-


ción relativa o ejército industrial de **
de E.]
Personajes de la mitología griega. [N.
Segundo encuentro: El Capitalismo - 89

muchos [...]". La riqueza de una nación lista, una acumulación que no es el


corresponde a su población, y su mise- resultado del modo de producción capi-
ria corresponde a su riqueza. La labo- talista, sino su punto de partida.
riosidad de algunos exige el ocio de
Esta acumulación originaria desempe-
otros. Los pobres y los ociosos son un
ña en la economía política aproximada-
fruto necesario de los ricos y los acti-
mente el mismo papel que el pecado ori-
vos, etc. Unos diez años después de
ginal en la teología. Adán mordió la
Ortes, el cura Townsend, de la Alta
manzana, y con ello el pecado se pose-
Iglesia protestante, glorificó con toda
sionó del género humano. Se nos expli-
insolencia la pobreza como condición
ca su origen contándolo como una
necesaria de la riqueza. "La coerción
anécdota del pasado. En tiempos muy
legal de trabajar se ve acompañada de
remotos había, por un lado, una elite
muchos trastornos, violencias y fragor
diligente, y por el otro una pandilla de
[...], mientras que el hambre no sólo
vagos y holgazanes. Ocurrió así que los
constituye una presión pacífica, silen-
primeros acumularon riqueza y los últi-
ciosa e incesante, sino que además, en
mos terminaron por no tener nada que
su calidad de motivo más natural de la
vender excepto su pellejo. Y de este
industria y del trabajo, provoca los
esfuerzos más intensos." Lo esencial, pecado original arranca la pobreza de
entonces, es hacer permanente el ham- la gran masa que aun hoy, pese a todo
bre entre la clase obrera, y para ello su trabajo, no tiene nada que vender
vela, según Townsend, el principio de la salvo sus propias personas y la riqueza
población, particularmente activo entre de unos pocos, que crece continuamen-
los pobres. te aunque sus poseedores hayan deja-
do de trabajar hace mucho tiempo. (…)
CAPITULO XXIV: En la historia real el gran papel lo des-
LA LLAMADA ACUMULACION empeñan, como es sabido, la conquis-
ORIGINARIA ta, el sojuzgamiento, el homicidio moti-
vado por el robo: en una palabra, la vio-
lencia. (…)
1. El secreto de la acumulación El dinero y la mercancía no son capi-
originaria. tal desde un primer momento, como
(…) La acumulación del capital presu- tampoco lo son los medios de produc-
pone el plusvalor, el plusvalor la pro- ción y de subsistencia. Requieren ser
ducción capitalista, y ésta la preexis- transformados en capital. Pero esta
tencia de masas de capital relativamen- transformación misma sólo se puede
te grandes en manos de los productores operar bajo determinadas circunstan-
de mercancías. Todo el proceso, pues, cias coincidentes: es necesario que se
parece suponer una acumulación "ori- enfrenten y entren en contacto dos cla-
ginaria" previa a la acumulación capita- ses muy diferentes de poseedores de
90- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

mercancías, a un lado los propietarios productor y medios de producción.


de dinero, de medios de producción y de Aparece como "originaria" porque confi-
subsistencia, a quienes les toca valori- gura la prehistoria del capital y del
zar, mediante la adquisición de fuerza modo de producción correspondiente al
de trabajo ajena, la suma de valor de la mismo. (…)
que se han apropiado; al otro lado, tra-
En la historia del proceso de escisión
bajadores libres, vendedores de la fuer-
hacen época, desde el punto de vista
za de trabajo propia y por tanto vende-
histórico, los momentos en que se
dores de trabajo. Trabajadores libres en
separa súbita y violentamente a gran-
el doble sentido de que ni están inclui- des masas humanas de sus medios de
dos directamente entre los medios de subsistencia y de producción y se las
producción como sí lo están los escla- arroja, en calidad de proletarios total-
vos, siervos de la gleba, etcétera, ni mente libres, al mercado de trabajo. La
tampoco les pertenecen a ellos los expropiación que despoja de la tierra al
medios de producción a la inversa de lo trabajador, constituye el fundamento
que ocurre con el campesino que traba- de todo el proceso. (…) La historia de
ja su propia tierra, etcétera, hallándo- esa expropiación adopta diversas tona-
se, por el contrario, libres y desembara- lidades en distintos países y recorre en
zados de esos medios de producción. una sucesión diferente las diversas
Con esta polarización del mercado de fases. Sólo en Inglaterra, y es por eso
mercancías están dadas las condiciones que tomamos de ejemplo a este país,
fundamentales de la producción capita- dicha expropiación reviste su forma
lista. La relación del capital presupone clásica. (…)
la escisión entre los trabajadores y la
propiedad sobre las condiciones de rea-
lización del trabajo. Una vez establecida 6. Génesis del capitalista industrial(*)
la producción capitalista, la misma no
sólo mantiene esa división sino que la La génesis del capitalista industrial no
reproduce en escala cada vez mayor. El se produjo de una manera tan gradual
proceso que crea a la relación del capi- como la del arrendatario.
tal, pues, no puede ser otro que el pro- Indudablemente, no pocos pequeños
ceso de escisión entre el obrero y la pro- maestros gremiales, y aun más peque-
piedad de sus condiciones de trabajo, ños artesanos independientes, e inclu-
proceso que, por una parte, transforma so trabajadores asalariados, se trans-
en capital los medios de producción y formaron primero en pequeños capita-
de subsistencia sociales, y por otra listas, y luego, mediante una explota-
convierte a los productores directos en

*
asalariados. La llamada acumulación Industrial se emplea aquí por oposición a agrí-
originaria no es, por consiguiente, más cola. En el sentido “categórico”, el arrendatario es
que el proceso histórico de escisión entre capitalista industrial a igual título que el fabricante.
Segundo encuentro: El Capitalismo - 91

ción paulatinamente creciente de tra- ma colonial, en el de la deuda pública,


bajo asalariado y la acumulación consi- en el moderno sistema impositivo y el
guiente, en capitalistas a secas. (…) sistema proteccionista. Estos métodos,
Con todo, el paso de tortuga inherente como por ejemplo el sistema colonial,
a este método en modo alguno era com- se fundan en parte sobre la violencia
patible con las necesidades comerciales más brutal. Pero todos ellos recurren al
del nuevo mercado mundial, creado por poder del estado, a la violencia organi-
los grandes descubrimientos de fines zada y concentrada de la sociedad, para
del siglo XV (…). fomentar como en un invernadero el
proceso de transformación del modo de
El descubrimiento de las comarcas
producción feudal en modo de produc-
auríferas y argentíferas en América, el
ción capitalista y para abreviar las
exterminio, esclavización y soterra-
transiciones. La violencia es la partera
miento en las minas de la población
de toda sociedad vieja preñada de una
aborigen, la conquista y saqueo de las
nueva. Ella misma es una potencia eco-
Indias Orientales, la transformación de
nómica.
África en un coto reservado para la caza
comercial de pieles-negras, caracteri- Del sistema colonial cristiano dice
zan los albores de la era de producción William Howitt, un hombre que del
capitalista. Estos procesos idílicos cristianismo ha hecho una especiali-
constituyen factores fundamentales de dad: "Los actos de barbarie y los ini-
la acumulación originaria. Pisándoles cuos ultrajes perpetrados por las razas
los talones, hace su aparición la guerra llamadas cristianas en todas las regio-
comercial entre las naciones europeas, nes del mundo y contra todos los pue-
con la redondez de la tierra como esce- blos que pudieron subyugar, no
nario. Se inaugura con el alzamiento de encuentran paralelo en ninguna era de
los Países Bajos y su separación de la historia universal y en ninguna raza,
España; adquiere proporciones ciclópe- por salvaje e inculta, despiadada e
as en la guerra antijacobina llevada a impúdica que ésta fuera". (…)
cabo por Inglaterra y se prolonga toda-
Es sabido que la Compañía Inglesa
vía hoy en las expediciones de piratas,
de las Indias Orientales obtuvo, ade-
como las famosas guerras del opio con-
más de la dominación política en la
tra China, etcétera.
India, el monopolio exclusivo del
Los diversos factores de la acumula- comercio del té, así como del comercio
ción originaria se distribuyen ahora, en chino en general, y del transporte de
una secuencia más o menos cronológi- bienes desde Europa y hacia este con-
ca, principalmente entre España, tinente. Pero la navegación de cabota-
Portugal, Holanda, Francia e Inglaterra. je en la India y entre las islas, así
En Inglaterra, a fines del siglo XVII, se como el comercio interno de la India,
combinan sistemáticamente en el siste- se convirtió en monopolio de los altos
92- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

funcionarios de la compañía. Los transformación de la riqueza social en


monopolios de la sal, del opio, del capital, en la expropiación de producto-
betel y de otras mercancías eran res autónomos y en la opresión de los
minas inagotables de riqueza. Los fun- asalariados, ha inducido a no pocos
cionarios mismos fijaban los precios y escritores (…) a ver erróneamente en
expoliaban a su antojo al infeliz hindú. dichos sistemas el motivo de toda la
El gobernador general participaba en miseria popular moderna. (…) Con la
ese comercio privado. (…) Grandes for- deuda pública surgió un sistema credi-
tunas brotaban como los hongos, de ticio internacional, que a menudo
un día para otro, la acumulación origi- encubría una de las fuentes de la acu-
naria se efectuaba sin necesidad de mulación originaria en un país determi-
adelantar un chelín. (…) Entre 1769 y nado. (…) Un caso lo constituye hoy la
1770 los ingleses fabricaron una ham- relación entre Inglaterra y Estados
bruna, acaparando todo el arroz y Unidos. No pocos capitales que ingre-
negándose a revenderlo a no ser por san actualmente [como préstamos] a
precios fabulosos. (…). Estados Unidos sin partida de naci-
El sistema colonial hizo madurar, miento, son sangre de niños recién ayer
como plantas de invernadero, el comer- capitalizada en Inglaterra.
cio y la navegación. (…) La colonia ase-
Como la deuda pública tiene su res-
guraba a las manufacturas en ascenso
paldo en los ingresos del estado, que
un mercado donde colocar sus produc-
han de cubrir los pagos anuales de
tos y una acumulación potenciada por
intereses, etc., el moderno sistema
el monopolio del mercado. Los tesoros
impositivo se convirtió en el comple-
expoliados fuera de Europa directa-
mento requerido necesariamente por el
mente por el saqueo, por la esclaviza-
sistema de los empréstitos públicos.
ción y las matanzas con rapiñas, reflu-
Los préstamos permiten que el gobier-
ían a la metrópoli y se transformaban
allí en capital. (…) no sufrague gastos extraordinarios sin
que el contribuyente lo note de inme-
Hoy en día, la supremacía industrial diato, pero exigen, de ahí en adelante,
trae aparejada la supremacía comer- que los impuestos aumenten. A su vez,
cial. En el período manufacturero pro- la suba de los impuestos provocada por
piamente dicho, por el contrario, es la la acumulación de deudas contraídas
supremacía comercial la que confiere el sucesivamente, obliga al gobierno a
predominio industrial. De ahí el papel recurrir siempre a nuevos empréstitos
preponderante que desempeñaba en para cubrir los nuevos gastos extraor-
ese entonces el sistema colonial. (…) dinarios. El sistema fiscal moderno,
El extraordinario papel desempeñado cuyo puntal está constituido por los
por el sistema de la deuda pública y por impuestos sobre los medios de subsis-
el moderno sistema impositivo en la tencia más imprescindibles (y, en con-
Segundo encuentro: El Capitalismo - 93

secuencia, por el encarecimiento de los turero, la opinión pública de Europa


mismos), lleva en sí, por tanto, el ger- perdió los últimos restos de pudor y de
men de su progresión automática. La conciencia. (…) Al mismo tiempo que
sobrecarga de impuestos no es, pues, introducía la esclavitud infantil en
un incidente, sino antes bien un princi- Inglaterra, la industria algodonera
pio. De ahí que en Holanda, donde este daba el impulso para la transformación
sistema se aplicó por vez primera, el de la economía esclavista más o menos
gran patriota de Witt lo celebrara en patriarcal de Estados Unidos en un sis-
sus máximas como el mejor sistema tema comercial de explotación. En
para hacer del asalariado un individuo general, la esclavitud disfrazada de los
sumiso, frugal, industrioso y... abru- asalariados en Europa exigía, a modo
mado de trabajo. (…). Refuerza aun de pedestal, la esclavitud al desnudo en
más la eficacia expropiadora de este el Nuevo Mundo.
régimen el sistema proteccionista, que
Tantos esfuerzos se requirieron para
es uno de los elementos que lo inte-
asistir al parto de las "leyes naturales
gran.
eternas" que rigen al modo capitalista
El sistema proteccionista era un de producción, para consumar el pro-
medio artificial de fabricar fabricantes, ceso de escisión entre los trabajadores
de expropiar trabajadores independien- y las condiciones de trabajo, transfor-
tes, de capitalizar los medios de produc- mando, en uno de los polos, los medios
ción y de subsistencia nacionales, de de producción y de subsistencia socia-
abreviar por la violencia la transición les en capital, y en el polo opuesto la
entre el modo de producción antiguo y el masa del pueblo en asalariados, en
moderno. Los estados europeos se dis- "pobres laboriosos" libres, ese producto
putaron con furor la patente de este artificial de la historia moderna. Si el
invento, y una vez que hubieron entra- dinero, como dice Augier, "viene al
do al servicio de los fabricantes de plus- mundo con manchas de sangre en una
valor, no sólo esquilmaron al propio mejilla", el capital lo hace chorreando
pueblo indirectamente con los arance- sangre y lodo, por todos los poros,
les protectores, directamente con pri- desde la cabeza hasta los pies.
mas a la exportación, etcétera para
alcanzar ese objetivo, sino que en los
países contiguos dependientes extirpa- 7. Tendencia histórica de la
ron por la violencia toda industria, acumulación capitalista.
como hizo Inglaterra, por ejemplo, en el
¿En qué se resuelve la acumulación
caso de la manufactura lanera irlande-
originaria del capital, esto es, su géne-
sa. (…)
sis histórica? (…) La propiedad privada
Con el desarrollo de la producción del trabajador sobre sus medios de pro-
capitalista durante el período manufac- ducción es el fundamento de la pequeña
94- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

industria, y la pequeña industria es dispersos en socialmente


una condición necesaria para el des- concentrados, y por consiguiente la
arrollo de la producción social y de la conversión de la propiedad raquítica
libre individualidad del trabajador de muchos en propiedad masiva de
mismo. Ciertamente, este modo de pro- unos pocos, y por tanto la expropiación
ducción existe también dentro de la que despoja de la tierra y de los medios
esclavitud, de la servidumbre de la de subsistencia e instrumentos de tra-
gleba y de otras relaciones de depen- bajo a la gran masa del pueblo, esa
dencia. Pero sólo florece, sólo libera expropiación terrible y dificultosa de
toda su energía, sólo conquista la las masas populares, constituye la
forma clásica adecuada, allí donde el prehistoria del capital. Comprende
trabajador es propietario privado libre una serie de métodos violentos, de los
de sus condiciones de trabajo, maneja- cuales hemos pasado revista sólo a
das por él mismo: el campesino, de la aquellos que hicieron época como
tierra que cultiva; el artesano, del ins- métodos de la acumulación originaria
trumento que manipula como un vir- del capital. La expropiación de los pro-
tuoso. ductores directos se lleva a cabo con el
Este modo de producción supone el vandalismo más despiadado y bajo el
parcelamiento del suelo y de los demás impulso de las pasiones más infames,
medios de producción. Excluye la con- sucias y mezquinamente odiosas. La
centración de éstos, y también la coo- propiedad privada erigida a fuerza de
peración, la división del trabajo dentro trabajo propio; fundada, por así decir-
de los mismos procesos de producción, lo, en la consustanciación entre el
el control y la regulación sociales de la individuo laborante independiente,
naturaleza, el desarrollo libre de las aislado, y sus condiciones de trabajo,
fuerzas productivas sociales. Sólo es es desplazada por la propiedad priva-
compatible con límites estrechos, da capitalista, que reposa en la explo-
espontáneos, naturales, de la produc- tación de trabajo ajeno, aunque for-
ción y de la sociedad. Al alcanzar cierto malmente libre.
grado de su desarrollo, genera los No bien ese proceso de transforma-
medios materiales de su propia des- ción ha descompuesto suficientemen-
trucción. te, en profundidad y en extensión, la
A partir de ese instante, en las entra- vieja sociedad; no bien los trabajado-
ñas de la sociedad se agitan fuerzas y res se han convertido en proletarios y
pasiones que se sienten trabadas por sus condiciones de trabajo en capital;
ese modo de producción. Éste debe ser no bien el modo de producción capita-
aniquilado, y se lo aniquila. Su aniqui- lista puede andar ya sin andaderas,
lamiento, la transformación de los asumen una nueva forma la socializa-
medios de producción individuales y ción ulterior del trabajo y la transfor-
Segundo encuentro: El Capitalismo - 95

mación ulterior de la tierra y de otros manera constante y que es disciplina-


medios de producción en medios de da, unida y organizada por el mecanis-
producción socialmente explotados, y mo mismo del proceso capitalista de
por ende en medios de producción producción. El monopolio ejercido por
colectivos, y asume también una nueva el capital se convierte en traba del
forma, por consiguiente, la expropia- modo de producción que ha florecido
ción ulterior de los propietarios priva- con él y bajo él. La concentración de
dos. El que debe ahora ser expropiado los medios de producción y la sociali-
no es ya el trabajador que labora por zación del trabajo alcanzan un punto
su propia cuenta, sino el capitalista en que son incompatibles con su cor-
que explota a muchos trabajadores. teza capitalista. Se la hace saltar.
Esta expropiación se lleva a cabo por Suena la hora postrera de la propiedad
medio de la acción de las propias leyes privada capitalista. Los expropiadores
inmanentes de la producción capita- son expropiados.
lista, por medio de la concentración de
El modo capitalista de producción y
los capitales. Cada capitalista liquida
de apropiación, y por tanto la propie-
a otros muchos. Paralelamente a esta
dad privada capitalista, es la primera
concentración, o a la expropiación de
negación de la propiedad privada indivi-
muchos capitalistas por pocos, se des-
dual, fundada en el trabajo propio. La
arrollan en escala cada vez más
negación de la producción capitalista
amplia la forma cooperativa del proce-
se produce por sí misma, con la necesi-
so laboral, la aplicación tecnológica
dad de un proceso natural. Es la nega-
consciente de la ciencia, la explotación
ción de la negación. Ésta restaura la
colectiva planificada de la tierra, la
propiedad individual, pero sobre el fun-
transformación de los medios de tra-
damento de la conquista alcanzada por
bajo en medios de trabajo que sólo son
la era capitalista: la cooperación de tra-
utilizables colectivamente, la economi-
bajadores libres y su propiedad colecti-
zación de todos los medios de produc-
va sobre la tierra y sobre los medios de
ción gracias a su uso como medios de
producción producidos por el trabajo
producción colectivos del trabajo
mismo.
social, combinado. Con la disminución
constante en el número de los magna- La transformación de la propiedad
tes capitalistas que usurpan y mono- privada fragmentaria, fundada sobre el
polizan todas las ventajas de este pro- trabajo personal de los individuos, en
ceso de trastocamiento, se acrecienta propiedad privada capitalista es, natu-
la masa de la miseria, de la opresión, ralmente, un proceso incomparable-
de la servidumbre, de la degeneración, mente más prolongado, más duro y difi-
de la explotación, pero se acrecienta cultoso, que la transformación de la
también la rebeldía de la clase obrera, propiedad capitalista, de hecho funda-
una clase cuyo número aumenta de da ya sobre el manejo social de la pro-
96- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2

ducción, en propiedad social. En aquel padores; aquí se trata de la expropia-


caso se trataba de la expropiación de la ción de unos pocos usurpadores por la
masa del pueblo por unos pocos usur- masa del pueblo.
ANEXO Segundo encuentro - 97

ANEXO: Extractos del libro...


98- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2
ANEXO Segundo encuentro - 99
100- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2
ANEXO Segundo encuentro - 101
102- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2
ANEXO Segundo encuentro - 103
104- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2
ANEXO Segundo encuentro - 105
106- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2
ANEXO Segundo encuentro - 107
108- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2
ANEXO Segundo encuentro - 109
110- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2
ANEXO Segundo encuentro - 111
112- FRENTE POPULAR DARÍO SANTILLÁN - Curso de formación 2009. Encuentros 1 y 2
Otras cartillas de
formación
Las cartillas que edita el Área de Formación del Frente Popular
Darío Santillán, están concebidas como materiales de apoyo
para talleres y cursos que se realizan sistemáticamente.

Construcción de poder popular. En el campamento


de formación de abril de 2006, uno de los principales
ejes de debate y profundización fue la noción de
Construcción de Poder Popular. La ponencia que pre-
sentamos nos brindó un panorama histórico y un marco
conceptual imprescindible para comprender y potenciar
nuestras prácticas

El trabajo y su forma... en el capitalismo (...)


Reconcer el sentido de la "plusvalía", la idea de "medios
de producción", o la distinción entre "trabajo" y "fuerza
de trabajo", siguen siendo claves para dar cuenta de la
sociedad capitalista, sus contradicciones, sus límites
estructurales... análisis necesarios para comprender
nuestra realidad, condición indispensable para trans-
formarla…

1- Tradiciones revolucionarias. El pensamiento de


Mariátegui y su importancia en el pensamiento revolucionario
latinoamericano. La revolución cubana y su impacto mundial
Textos en esta cartilla:
José Carlos Mariátegui: Punto de vista antiimperialista /
Aniversario y balance / El problema del indio
Emiliano Zapata: El Plan Ayala de 1911
Ernesto Che Guevara: El socialismo y el hombre en Cuba

http://formaciondelfrente.blogspot.com/

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