Sie sind auf Seite 1von 13

ISIEC (Instituto Superior de la Iglesia Evangélica Congregacional)

Profesorado en Ciencias Sagradas

Cursado: 2do año

Cátedra: Práctica Docente II

Profesor/a: Verónica Richter

Trabajo: Actividad II

Estudiante: Maximiliano Kreick


Tareas:
Leer de la Ley de Educación Nacional: el TÍTULO I “Disposiciones Generales”.
CAPÍTULO I “Principios, Derechos y Garantías” (Artículos 1 al 10).
1) Realizar un breve comentario explicativo de cada artículo (palabras claves, de qué
se trata…)
Artículo 1: Presentación de la ley reguladora del derecho al ejercicio de enseñar y aprender.

Artículo 2: La educación es un bien público, un derecho social garantizado por el Estado.

Artículo 3: La educación, su prioridad y sus objetivos en el desarrollo socio-económico nacional.

Artículo 4: El Estado debe dar educación pública en igualdad, gratuidad y equidad a sus habitantes.

Artículo 5: El Estado nacional regula la política educativa del país y su cumplimiento.

Artículo 6: El Estado garantiza el derecho a la educación, pero las acciones educativas también
competen a la sociedad, la religión y la familia

Artículo 7: El Estado garantiza la educación para el desarrollo económico y la justicia social.

Artículo 8: La educación forma integralmente a las personas, para que desarrollen su proyecto de vida.

Artículo 9: El Estado Nacional financia el sistema educativo Nacional.

Artículo 10: El Estado no permitirá la mercantilización de la educación pública.

2) Buscar una nota periodística, donde demuestres que  no se


está cumpliendo algunos de los artículos que leíste en la Ley. Debes justificar tu
elección y adjuntar ese recorte periodístico.
Noticia:
LA NACION | COMUNIDAD | CORONAVIRUS

Educación en cuarentena:
aprender sin wifi ni
computadora el Gobierno

Por la pandemia, las clases van a seguir suspendidas y casi la mitad de los niños y
adolescentes del país no tienen computadora ni acceso a banda ancha para hacer sus tareas;
qué medidas está adoptando el Gobierno.
Lorena Oliva
9 de abril de 2020  • 15:38

Cuando no se sabe si se va a poder comer ni se dispone de un espacio


adecuado para concentrarse y hacer tareas, y tampoco se cuenta con banda
ancha o computadora, estudiar se parece a ir contra la corriente. Una
corriente peligrosa, que amenaza con doblegar voluntades. Incluso las más
firmes. A partir de la suspensión de clases en las escuelas, esa es la
sensación de miles de chicos y adolescentes del país que,
ya antes de la pandemia, tenían bastante dificultado el acceso a los derechos
básicos. Entre ellos, el de la educación.
En tiempos de cuarentena, la situación se complejiza. La
reconversión del sistema educativo presencial hacia instancias más virtuales
acota las posibilidades de aprendizaje de casi la mitad de los
niños y adolescentes del país, que no tienen
computadora ni acceso a banda ancha para hacer sus
tareas: un 48,7% no tiene PC y un 47,1% no cuentan con wifi en su hogar,
según el Observatorio de la Deuda Social Argentina. Esta proporción se
eleva a siete de cada 10 en el estrato social más bajo. Por otra parte, de
cada 10 chicos, dos viven hacinados y una proporción
similar comparte cama o colchón para dormir, haciendo
sumamente dificultosa la posibilidad de contar con un espacio adecuado
para realizar las actividades escolares. Frente a esta realidad, el
ministro de Educación Nicolás Trotta asegura, en diálogo
con LA NACIÓN, que "el principal desafío es hacer los máximos
esfuerzos para que no se profundice la desigualdad
educativa."
Santiago Lazarte, un chico de 17 años que sueña con terminar el
secundario para estudiar Turismo y Hotelería, tampoco cuenta con esa
posibilidad. Vive con Noemí, su mamá, y su hermanita Emily en un hotel
ubicado en Constitución, desde que nació. Antes de la pandemia iba
caminando hasta la Escuela República del Líbano, en donde cursa 5°
año. Ahora todo es más complicado.
"Unos días antes de que se cortaran las clases, los profesores empezaron a
pedirnos los mails. Mandan las tareas por ahí y tenemos que entregarlas
también por mail y por WhatsApp. Como en el hotel no hay Internet, tengo
que cargar crédito en el celular para recibir los mails. Por suerte,
tengo la computadora de Conectar Igualdad que me sirve un montón.
Trabajo ahí y después paso al celular y mando por mail", relata Santiago,
quien forma parte del programa Futuros Egresados de la Fundación
Cimientos, que consiste en una beca dineraria y el seguimiento de un tutor.
"Para cargar crédito, uso la plata de la beca. A veces me ayuda mi papá, que
no vive con nosotros. El problema es cuando no consigo cargar por ningún
lado, porque tampoco puedo alejarme mucho por lo de la cuarentena",
agrega Santiago, quien extraña la posibilidad de trabajar en la escuela.
"Vivimos los tres en una pieza chica -continúa-. A veces tengo que pedirles
a mi mamá y a mi hermana que hagan silencio para poder concentrarme."

El principal desafío es hacer los máximos esfuerzos para que no se


profundice la desigualdad educativa.
Nicolás Trotta, ministro de Educación de la Nación

Para Marcelo Miniati, director ejecutivo de Cimientos, estudiar es, para los
chicos que viven en contextos vulnerables, la posibilidad de superar las
dificultades del presente para arribar a un futuro mejor. La cuarentena
les complejiza esa posibilidad.
"El 80% de estos chicos cuenta con celular con acceso a Internet, pero en
un 60% de los casos, ese teléfono pertenece a un adulto, que
también lo necesita y, por ende, se lo puede prestar un rato. Además, la
mayor parte de las tareas están pensadas para ser realizadas por
computadora, y tener computadora en los contextos más vulnerables
es algo excepcional", puntualiza Miniati, quien agrega que muchas veces
estos estudiantes desconocen cómo funcionan ciertos aspectos de la
tecnología y no cuentan en su entorno con alguien que pueda explicarles.
El referente de Cimientos, organización que cuenta con diferentes
programas de acompañamiento a adolescentes y jóvenes para que puedan
concluir sus estudios secundarios e insertarse en el mundo del trabajo, cree
que la cuarentena tendrá un impacto muy nocivo en la
trayectoria educativa de miles de chicos . "No solo va a
profundizar la brecha que ya existe. Después de la cuarentena es probable
que muchos chicos se hayan alejado de la escolaridad. Por la crisis
económica que genera la extensión del aislamiento especialmente en los
hogares más pobres, las familias de estos chicos van a necesitar que ellos
generen algún ingreso mediante un empleo o que se queden cuidando a los
hermanitos. Esto siempre pasa después de una crisis económica", se
lamenta Miniati.

No solo va a profundizar la brecha que ya existe. Después de la


cuarentena es probable que muchos chicos se hayan alejado de la
escolaridad.
Marcelo Miniati, Fundación Cimientos

Una postal que promete agravarse


A fines del año último, la instantánea sobre la situación socioeconómica de
los argentinos era por demás alarmante. Según las últimas cifras del
Indec, el índice de pobreza alcanzó al 35,5% de los
habitantes en el segundo semestre del 2019 y, si se pone la lupa en la
infancia, el 52,3% de los menores de 14 años son
pobres, mientras que entre los que tienen entre 15 y
29 años alcanza al 42,5%. Además, estimaciones del
Observatorio de la Deuda Social Argentina, muestran que un 7,4% de los
hogares padecía inseguridad alimentaria severa y el 14% de los hogares los
constituían viviendas precarias. El panorama promete agravarse durante la
cuarentena.
Para llegar a todos los chicos, pero especialmente a las poblaciones más
vulnerables, el Ministerio de Educación desarrolló una estrategia que tiene
tanto ingredientes digitales como analógicos. "Por un lado,
contamos con el portal Seguimos Educando, que tiene recursos para la
familia pero también para el docente y para el estudiante, y, por el otro,
armamos contenidos para la televisión pública y para Radio Nacional. Al
mismo tiempo, confeccionamos nueve cuadernos que cubren tres semanas
de clases, desde el miércoles 1° de abril hasta el viernes 17. Ahí tenemos un
cronograma día por día de actividades para cada uno de los momentos del
ciclo escolar que se pueden descargar de la web", explica Trotta.
"El portal es de navegabilidad gratuita a partir del compromiso de
las tres empresas de telefonía celular y eso para nosotros es un paso
importante porque en la Argentina hay más celulares que personas
-continúa el funcionario-. Conjuntamente con la televisión son las dos
tecnologías que más están presentes en todos los hogares. Que no consuma
datos no resuelve, pero ayuda a la posibilidad de ingresar a la página desde
los celulares". Por otra parte, detalla que están distribuyendo 7.000.000 de
cuadernos a través de las provincias, del ministerio de Desarrollo Social, en
los comedores, por los distintos movimientos sociales, y que se pueden
retirar en algunos supermercados emplazados en sectores medios y
populares.

Nicolás Trotta: "Es imposible anticipar la fecha de la vuelta a clases"


Sin embargo, Ianina Tuñón, investigadora responsable del Barómetro de la
Deuda Social de la UCA, no ve clara la manera en que los chicos que viven
en la pobreza podrán capitalizar este tiempo en
cuarentena.
"El Estado está llevando adelante un conjunto de acciones a través de
programación en los canales públicos muy interesante, pero la
televisión es una ventana que está siendo
aprovechada más que nada por los sectores sociales
que mejor están. Para poder aprovechar ese material tiene que haber
hogares con conciencia y capacidad para ello. Si bien es cierto que en casi
todos los hogares hay televisión, las condiciones de vida en cuarentena son
muy difíciles", sostiene la especialista.
Tuñón detalla que "en los estratos de trabajadores marginales, en
donde vive el 30,5% de los chicos de 0 a 17 años, los
adultos están acechados por múltiples preocupaciones diarias,
especialmente qué comer y en dónde obtener esa comida". La investigadora
hace hincapié en que la mayoría de estos adultos son trabajadores
informales precarizados que, con la cuarentena están negociando, en el
mejor de los casos, su continuidad laboral, probablemente ganando mucho
menos que antes, porque en muchos casos trabajan con ingresos por
productividad. "Son hogares con propensión a padecer otros problemas
como las adicciones o la violencia, que se exacerban en
cuarentena. Es difícil pensar que estos adultos puedan garantizar una rutina
para el aprendizaje", puntualiza Tuñón.

La realidad educativa de la mayoría de los chicos argentinos no es


la de las clases virtuales por Zoom u otras plataformas, esa es la
realidad de, apenas, un 4%.
Ianina Tuñón, investigadora del ODSA/UCA

La especialista agrega que en el escalón siguiente, el de las clases


populares, vive el 40% de los chicos. "Son hogares mejor
preparados desde lo psicológico para la cuarentena, con mamás tratando de
ayudar a los chicos en las tareas que reciben por Facebook o WhatsApp.
Pero también les significa un gran desafío sostener las
actividades con regularidad. La escuela tiene recursos
pedagógicos que la familia no puede recrear. En muchos de estos hogares
hay celular, pero no siempre con conectividad. Además, un celular no es el
medio más adecuado para realizar las tareas. En cualquier caso, la realidad
educativa de la mayoría de los chicos argentino no es la de las clases
virtuales por Zoom u otras plataformas, esa es la realidad de, apenas,
un 4% ", afirma Tuñón.

Usar Word desde el celular


Para Milagros Cañete, de 16 años, la cuarentena significó, entre otras cosas,
el desafío de aprender a usar Word desde el celular. "La
mayoría de los profesores manda tareas para hacer por Word, pero yo
compu no tengo. No me queda otra que hacer las cosas con el celular,
pero me cuesta mucho. Le cargo plata de crédito y descargo las
cosas", cuenta Milagros, también becaria de Cimientos, quien, antes de la
suspensión de clases se desplazaba en colectivo desde Villa Itatí, en
Quilmes, hasta la escuela secundaria ubicada en Barracas, en la que cursa
5° año.
"Como mi mamá trabaja algunos días en un comedor del barrio, a veces me
toca cuidar a Mateo, mi hermanito de 4 años. Así que trato
de hacerme tiempo para cumplir con las tareas más hacia la noche. Igual
espero que todo esto pase pronto, porque es mejor tener clases en la
escuela. Ahí hay espacio para hacer las cosas y además tenemos un profesor
para que nos explique", agrega Milagros, quien sueña con estudiar Ciencias
Económicas.
Lo que estamos viviendo es un laboratorio inesperado, sostiene
el profesor e Investigador Axel Rivas. "Quizás los alumnos estén viviendo
una especie de dolorosa toma de conciencia del valor de la
escuela ante su desaparición física. Sospecho que muchos han
comenzado a valorar más sus rutinas y sus docentes, además de extrañar a
sus compañeros/as", reflexiona Rivas, quien cree que su último libro,
titulado ¿Quién controla el futuro de la educación? no podría
haber sido más profético.
"Allí propuse que el Estado debía diseñar un sistema educativo digital, una
gran plataforma pública de acceso universal para aumentar las fuentes de
aprendizaje de los estudiantes. Mi propuesta estaba inspirada en el caso de
Ceibal en Uruguay, que fue un caso único en la región, con conectividad
total de las escuelas y con recursos digitales de gran calidad de acceso
público. En Argentina se había detenido el proceso de
avance logrado con Educ.ar, Encuentro y Conectar
Igualdad ", afirma Rivas, también director de la Escuela de Educación
de la Universidad de San Andrés. Y agrega: " Ahora padecemos
esos años en los cuales debería haberse invertido en crear recursos
educativos de calidad. Afortunadamente el actual gobierno ha reaccionado
muy rápido para crear opciones de acceso a contenidos".
En los últimos diez años, la Vicaría de Educación junto con el Padre Pepe
Di Paola iniciaron el establecimiento de escuelas parroquiales en
barrios populares de la Ciudad, con la apertura de una escuela
de oficios en el barrio de Barracas. Fuentes de esa institución informan que
hoy asisten a una población de 4397 estudiantes en jardines de infantes,
escuelas primarias, secundarias y de educación para adultos. Son escuelas
que funcionan dentro de la Villa 1-11-14, Villa 21-24, Villa 15, Villa
Lugano, Soldati, Cildañez, Villa Fraga y en el bajo Flores.
El actual gobierno ha reaccionado muy rápido para crear opciones
de acceso a contenidos.
Axel Rivas, doctor en Ciencias Sociales, investigador

Los hijos de Arminda Herrada, Randy y Gianfranco Jiménez, asisten a la


escuela Don Bosco, una de esas instituciones. Vecina del barrio Padre
Ricciardelli -ex villa 1-11-14- Arminda cuenta que sus hijos cursan 1° y 3°
grado. "Con la cuarentena, Daniel, mi esposo, que es albañil, se quedó
sin trabajo. Así que entre los dos ayudamos a los chicos con las
tareas. Hacemos lo que podemos porque nos cuesta
mucho ", explica Arminda, quien agrega que la familia solo utiliza un
celular, al que se le carga crédito para bajar las tareas que envían las
docentes por WhatsApp.
"Por suerte, la escuela nos dio los libros de los chicos, así que nos van
marcando las páginas que hay que hacer. A veces también tenemos que
mirar algún video por YouTube. Lo cuidamos el crédito. Tratamos de
cargar una vez cada 15 días porque mi esposo se quedó sin trabajo y
pagamos alquiler. Solo contamos con las asignaciones de
los chicos y con la comida que nos da la escuela. Nos
dan desayuno, almuerzo y cena todos los días", agrega Arminda, quien
reconoce que los chicos extrañan la escuela, especialmente a sus amigos y
maestros.
"Desde una mirada educativa buscamos garantizar la continuidad
pedagógica en contextos de adversidad social, donde de hace visible la
brecha digital y las desigualdades en materia de acceso. Pero las escuelas
parroquiales también se caracterizan por cultivar la vida comunitaria, en
este sentido los colegios han emprendido diversas acciones que involucran
la participación conjunta de padres y docentes, para enfrentar el aislamiento
y la cuarentena obligatoria", explica el Pbro. Pablo Corbillón, delegado
episcopal de la Vicaría Pastoral de Educación.

El sacerdote agrega que, en estos momentos, estas instituciones están


llevando adelante acciones orientadas tanto a garantizar la
alimentación de los estudiantes -mediante la entrega diaria de
bolsones de alimentos-, como a procurar la continuidad educativa, a través
de diferentes medios de comunicación entre escuela y familia. "Los
desafíos son muy grandes en circunstancias normales, es difícil explicar la
enormidad de la tarea por la crisis que tenemos por delante", analiza.
Todos los especialistas consultados por LA NACIÓN consideran que, con
la cuarentena, el abismo socioeconómico que ya existe entre ambos
extremos de la pirámide poblacional se va a profundizar. El
optimismo parecería no tener lugar. Pero sí las oportunidades.
"Esta situación nos impone el desafío de pensar cómo podemos llegar a los
chicos de maneras alternativas a las que propone la educación tradicional
-analiza Marcelo Miniati-. Hacerlos volver a la escuela va a
requerir campañas específicas. Y también de una oferta que combine el
sistema de clases presenciales con otros recursos. Llegó el momento de
repensar la escuela."

Por: Lorena Oliva
En base a lo leído, se puede concluir que, en este período de cuarentena, se están
violando los siguientes artículos de la Ley de Educación:

 Se está violando el artículo 2, porque muchos estudiantes argentinos no pueden


acceder al bien público de la educación, ya que no poseen los recursos para
ingresar a las aulas virtuales, obtener sus tareas y seguir con el curso de sus
estudios. Están siendo privados de un bien público.
 Se está violando lo estipulado en el artículo 4, debido a que los alumnos no están
recibiendo la educación de manera igualitaria, sino completamente desigual. En
aquellos sectores sociales que cuentan con los recursos económicos/tecnológicos
adecuados, los estudiantes pueden acceder a la educación, pero por el contrario,
los alumnos de los sectores carenciados no tienen cómo seguir el curso de sus
estudios. Esto implica un agravamiento de la desigualdad y la inequidad social.
 En vista de que un sector de la sociedad ve coartado su derecho a la educación y
acceso al conocimiento, puede aludirse a una violación implícita del artículo 7, en
consideración de que esto produce una limitante en el desarrollo social y
económico, lo cual tiene como consecuencia un aumento de la injusticia social.
 Por último, se viola el artículo 8, ya que, al no contar con el acceso adecuado a la
educación y el conocimiento, miles de habitantes de la República Argentina en
vulnerabilidad social no acceden a su derecho jurídico de educación y formación
integral, lo cual cercena su garantía y libertad de desarrollar un proyecto de vida.

Leer el CAPÍTULO II “FINES Y OBJETIVOS DE LA POLÍTICA EDUCATIVA NACIONAL”


      

(Artículo 11).
3) Transcribe  sólo cinco  incisos que  más te llamaron la atención y justifica por qué
los elegiste.
- Brindar una formación ciudadana comprometida con los valores éticos y
democráticos de participación, libertad, solidaridad, resolución pacífica de
conflictos, respeto a los derechos humanos, responsabilidad, honestidad,
valoración y preservación del patrimonio natural y cultural.
La elegí porque considero que nuestra sociedad está en continua degradación ética/moral,
por lo se necesita de la implementación de políticas que reviertan la situación. Por otra
parte, considero que hay una deuda ciudadana con el desarrollo político, el cual solo
puede lograrse en el país en base a la responsabilidad individual, que se da por medio de
la educación.
- Fortalecer la centralidad de la lectura y la escritura, como condiciones básicas para
la educación a lo largo de toda la vida, la construcción de una ciudadanía
responsable y la libre circulación del conocimiento.
Este aspecto me parce fundamental, porque cuando una persona aprende a leer (no solo
a ver palabras, sino a comprender), se abren las fronteras del conocimiento, dando lugar
al aprendizaje continuo, autodidacta, de libre pensamiento, crítico, que otorga libertad al
individuo.
- Desarrollar las competencias necesarias para el manejo de los nuevos lenguajes
producidos por las tecnologías de la información y la comunicación.
Este es un rasgo crucial; ya que la informática es el oro del siglo XXI, los estudiantes deben
ser formados conforme al ritmo al que avanza el mundo, para que así tengan verdadero
acceso a las nuevas tecnologías, pudiendo dominarlas y beneficiarse de ellas.
- Promover valores y actitudes que fortalezcan las capacidades de las personas para
prevenir las adicciones y el uso indebido de drogas.
En un país como el nuestro, con un alto índice de pobreza, indigencia y marginalidad
social, es menester que la educación dirija su atención a esta problemática, para evitar
que las futuras generaciones queden atrapadas en las drogas y el narcotráfico.
- Coordinar las políticas de educación, ciencia y tecnología con las de cultura, salud,
trabajo, desarrollo social, deportes y comunicaciones, para atender integralmente
las necesidades de la población, aprovechando al máximo los recursos estatales,
sociales y comunitarios.
Si Argentina quiere lograr un desarrollo sustentable en lo económico, político, social,
cultural, ambiental, etc., es importante que se deje todo atomicismo y divisionismo del
sistema educativo del siglo XIX, para dar paso a una visión integradora, que permita a los
estudiantes desarrollar una mentalidad holística de comprensión, en la cual puedan
relacionar los conceptos y las metodologías, para ya no pensar las materias como
currículos separados, sino como áreas o ramas conectadas en un mismo árbol. Así, los
ciudadanos estarán preparados para hacer frente a los debates del siglo XXI, siendo
capaces de desarrollar una mentalidad racional y crítica, que produzca el avance de la
República.

Das könnte Ihnen auch gefallen