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UNIVERSIDAD DE SANTANDER
FACULTAD DE INGENIERÍA CIVIL
BUCARAMANGA
2020
ANÁLISIS DE LOS FACTORES QUE PRODUCEN DESPERDICIO DE MATERIALES EN
LA CONSTRUCCIÓN DE OBRAS CIVILES: IMPLEMENTACIÓN DE UNA
METODOLOGÍA PARA LA OPTIMIZACIÓN DEL USO DE LOS RECURSOS.
Currently, companies belonging to the civil construction industry are forced to compete in a
market that always seeks to optimize their processes to the maximum, thus achieving a high
productivity of resources. This mass production of resources and, therefore, these large amounts
of waste are reflected as a result of a lack of measurement or control that, when quantifying all
these wastes, then becomes significant additional expenses (obvious losses) for Construction
companies In view of the importance of carrying a proper measurement and control of the use of
the materials, this research work is carried out, which allows to determine which materials are
the ones that generate the most waste, in what percentage and what would be the most optimal
solution for this problem that is always present in civil engineering.
CAPITULO I...........................................................................................................................8
INTRODUCCIÓN...........................................................................................................................8
1.1 JUSTIFICACIÓN....................................................................................................................10
2.3.1. MÉTODO............................................................................................................................21
2.3.2. TÉCNICA............................................................................................................................21
2.3.3 PROCEDIMIENTO..............................................................................................................21
3. RESULTADOS.................................................................................................................22
4.DISCUSIÓN DE LOS RESULTADOS............................................................................23
4.1. SOLUCIÓN DEL PROBLEMA: IMPLEMENTACIÓN DE UNA METODOLOGÍA.......23
5.CONCLUSIONES.............................................................................................................24
BIBLIOGRAFÍA..................................................................................................................25
ANEXOS..............................................................................................................................26
CAPITULO I
INTRODUCCIÓN
Asimismo, Ortíz de Orbina (2003) afirma que la industria de la construcción alrededor del
mundo es responsable de una gran demanda en cuanto a recursos naturales se trata, el uso
responsable y sostenible de estos recursos hace parte fundamental del equilibrio socio ambiental
que debemos garantizar para las generaciones futuras. Por ello es necesario llevar el adecuado
control de una obra y los materiales que esta demanda ya que, por un lado, debido a la constante
dinámica en la que esta industria se encuentra envuelta, es decir, la optimización paulatina y
periódica de los materiales, es normal la sobreproducción de materiales y, junto con la falta de
control que se vive en las obras, un resultado inevitable siempre será el desperdicio de estos en la
construcción de obras civiles.
Esto último da paso a la necesidad de encontrar metodologías que permitan reducir en gran
medida el uso irresponsable de materiales en el campo de la construcción, dieron paso a la
realización de este proyecto, el cual busca precisamente identificar los factores que generan
desperdicios de materiales en los diferentes procesos constructivos que se presenta en el
desarrollo de los diferentes tipos de obras civiles; asimismo, las identificaciones de estos factores
son parte fundamental para el mejoramiento en cuanto a rendimiento de obra se refiere y así
reducir los costos (perdidas significativas) que pueden llegar a verse reflejados en el valor total
de una obra.
Es necesario identificar los factores que generan desperdicios de materiales ya que esto produce
un impacto económico por el gasto de recursos que se pueden utilizar de manera más eficiente y
un impacto ambiental al producir gran cantidad de desechos en la ejecución de un proyecto de
ingeniería civil.
para el presente proyecto se desarrollo el arbol de problemas ver FIGURA 1, donde se explica de
manera dictiaca y gerarquia de los problemas que afectan directamente al proyecto este arbol esta
dividio en causas y efectos, los cuales a traves de su analicis serviran de base dar un enfoque mas
preciso del problemas y servira de base para la jsutificacion.
Desperdicio de
materiales en
procesos de
contrucion.
Causas Efectos
Poco control en
Mal calculo de Alto impacto
las actividades de Perdida de dinero
materiales ambiental
obra
Producion de
No hay cultura de Pago extra en Mal utilizacion de
Descuido en las Poco control en el materiales que no
ahorro en los compra de recursos
compras flujo del dinero se llegaron a
maestros materiales naturales.
utulizar.
Pago de
movimiento de
escombros.
11
Figura 1. Árbol de problemas (Fuente propia)
Disminucion en
desperdicio de
materiales para
procesos de
contrucion.
Objetivos Fines
1.3 OBJETIVOS
1.3.1 OBJETIVOS GENERALES
- Identificar factores y procesos que generan desperdicios en las obras civiles mediante
seguimientos específicos y detallados durante un periodo de tiempo determinado; durante
dicho tiempo se realizará análisis y estudios en los procesos de ejecución con el fin de
determinar una metodología que pueda ayudar con la disminución de los desperdicios
generados durante la ejecución de una obra civil.
- Estudiar detalladamente los procesos en la ejecución de una obra civil, durante gran parte
de su periodo de ejecución; en determinado estudio se evaluará la metodología usada para
el desarrollo de la construcción y el método implementado en el uso de los materiales.
Ahora bien, para lograr calcular la cantidad de desperdicio que ocurre en las obras es necesario,
tal y como afirma Lucio Soibelman (2000), hacer una debida clasificación; el autor afirma que
esta se puede hacer de dos formas: la evitable e inevitable y la directa e indirecta. Para este
trabajo se hará uso de la segunda forma, es decir, la clasificación de los desperdicios de
materiales bajo el modelo directo e indirecto. El desperdicio directo, tal y como lo indica su
nombre, es precisamente el de los materiales directos: aquellos que son evidentes y
cuantificables como, por ejemplo, el acero o el vidrio. Por su parte, el desperdicio indirecto es
aún más complejo de cuantificar (por no decir imposible) dado su carácter inidentificable y que
logra pasar desapercibido como aquel que se encuentra escondido en una falta de control, en la
falta de supervisión o el desperdicio por el manejo en la obra resultado de un inventario
deficiente que a su vez se puede ver evidenciado en pérdidas por robo, accidentes, clima,
vencimiento y muchos otros factores que a diario ocurren en las obras.
Galarza (2011) define a los desperdicios directos como los más evidentes y sencillos de
diagnosticar, los cuales se reducen a todo aquel material que es eliminado de la obra como
desmonte, el cual se ocasiona cuando existen procesos improductivos que generan residuos
excesivos. De igual forma, el desperdicio de estos materiales no sólo es aquel que ha sido
generado en su compra, sino también en el transporte, en la manipulación y en aquellos gastos
adicionales tales como la limpieza y mano de obra que se usa para su debida manipulación.
Asimismo, Galarza (2011) divide a los desperdicios directos en tres sub-categorías: residuos de
proceso; negligencia; y usos provisionales. El primero de ellos es el que todos conocen y el que
ya se ha nombrado con anterioridad, es decir, el más visible; mientras que las pérdidas directas
por negligencia es aquel desperdicio de material que resulta debido a malas prácticas en el
manejo del mismo, como aquel cemento que se daña por almacenarlo en zonas húmedas; y, por
último, el material desperdiciado debido a usos provisionales es todo aquel material que se
pierde ya que no se encuentra cumpliendo las funciones para los que fueron diseñados.
En cuanto a los desperdicios indirectos, Skoyles (1999) define a aquellos desperdicios indirectos
como el material que aunque está puesto dentro de la obra, no ha sido considero en los planos o
especificaciones técnicas del proyecto y que, por ende, es necesario solicitar la implementación
de material adicional con el fin de esconder las fallas que se presentaron dentro de la obra.
Por su lado, Georgett Ochoa (2014) en su texto Costos y Desperdicios de los Materiales clasifica
a los desperdicios indirectos en siete categorías: por sobreproducción; por espera; por transporte;
por el proceso mismo; por inventario en proceso; por movimientos innecesarios; y finalmente
por productos defectuosos. Todas estas categorías permiten entender a fondo cómo estos
pequeños costos que, aunque parecen “mínimos” a simple vista, no lo resultan siendo y que, por
el contrario, representan un incremento importante a la hora de cuantificar los gastos. Por
ejemplo, el desperdicio más común y que más se logra ver en las obras, es el desperdicio por
sobreproducción y que es explicado por el autor como aquella producción de materiales, partes o
piezas que no son requeridas en algún proceso sino que más bien son solicitados con antelación
para ser almacenados, es decir, la acumulación de estos materiales requiere de unos sistemas para
su debido almacenamiento, su manejo, el transporte que este conlleva, el espacio del que hace
uso y otros aspectos tales como la obra; todo lo anteriormente nombrado genera costos indirectos
que, a su vez, encubre a los otros desperdicios.
No obstante, Galarza (2011) a diferencia de Georgett Ochoa (2014), divide a los desperdicios
indirectos en tres sub-categorías: sustitución; superproducción; y trabajos adicionales. El
primero, denominado desperdicio indirecto por sustitución, ocurre cuando se utiliza un material
de mayor calidad en reemplazo de otro, sin sustento técnico; el segundo, desperdicio indirecto
por superproducción, se da cuando se fabrica un producto final de dimensiones mayores a las
solicitadas por los documentos técnicos, por ejemplo, vaciado de concreto de mayor espesor;
último y tercero, desperdicio debido a trabajos adicionales, son los consumos de material que se
generan debido a actividades que no se consideraron inicialmente en el proyecto pero que, sin
embargo, deben ejecutarse.
Otro tipo de desperdicio, aunque este sería de carácter directo y a su vez indirecto (dado que son
materiales contables), es precisamente resultado de esta sobreproducción y son aquellos
materiales que, debido a que fueron solicitados con antelación, a la hora de implementarlos o han
perdido su validez o en su defecto se encuentran vencidos y su implementación, por ende, no
será la misma que cuando fue adquirido por primera vez. Estos, como anteriormente se había
dicho, son desperdicios directos que si bien pueden poseer carácter de desperdicio directo por
negligencia o desperdicio directo de uso provisional pueden establecerse, de igual forma, como
indirecto.
Un ejemplo acerca de estos desperdicios indirectos es ofrecido por Lucio Soibelman (2000) ya
que este afirma que el desperdicio indirecto, aquel que se puede llegar a sobreentender como
escondido, puede verse evidenciado en lo que sería una sustitución de material y a raíz de ello
propone tres ejemplos cotidianos que pueden suceder en una obra: el primero es un gerente de
proyecto que no ha ordenado la cantidad correcta de un material para los trabajos del día y al ver
que los albañiles necesitan trabajar, se permite sustituir ese material por uno más costoso; el
segundo se trata de un ingeniero que, por no confiar en la calidad de su material, autoriza que se
utilice más cemento para elaborar el concreto sin respetar las especificaciones del proyecto; el
tercer y último es que debido a la falta de supervisión en la construcción, se construyan losas un
poco más gruesas de lo especificado sin que se necesite. En los tres casos es evidente la
existencia de una falta de control y planeación en donde se hace uso de materiales que de haber
existido un correcto control, no habrían sido necesarios. Además, encajan con las sub-categorías
del esquema de los desperdicios indirectos propuesto por Galarza en anterioridad.
De acuerdo con lo anteriormente explicado, se concluye que los desperdicios que se generan por
una falta de control dentro de la misma obra generan costos adicionales que no se encuentran
contemplados dentro del presupuesto final, asimismo, son desperdicios que se pueden evitar para
que estos mismos no generan sobre costos en el presupuesto final de la obra. Ahora bien, los
residuos de los que se es posible hacer una cuantificación son precisamente los desperdicios
directos y tomando como referencia nuevamente a Soibelman (2000), este afirma, basándose en
sus propios estudios, que los materiales que más generan desperdicio en la construcción son el
acero, el concreto, el cemento, el mortero y la arena.
De igual forma, otros autores con anterioridad e implementando la investigación de campo han
realizado trabajos entorno a esta misma problemática y han brindado datos similares a los que
ofrece este autor. Por ejemplo, autores ingleses como Skoyles, según afirma Soibelman (2000),
realizaron estudios extensos sobre el desperdicio de materiales en obras civiles, este, en 1976,
monitoreó 114 sitios de construcción y concluyó que existe una cantidad considerable de
desperdicio que se puede evitar si se adoptan procedimientos preventivos simples; asimismo,
Wyatt, también inglés, en 1978 enfocó el problema más desde el punto de vista ecológico y
enfatizó las consecuencias negativas de tener niveles altos de desperdicio al reducir la
disponibilidad futura de materiales y de energía, además de crear requerimientos innecesarios en
los sistemas de transporte.
Por otro lado, otro resultado fue en 1993 en el Politécnico de Hong Kong junto con la Asociación
de Construcción de Hong Kong quienes, interesados en reducir la generación de desperdicios en
la fuente, propusieron algunos métodos alternativos para tratar el desperdicio de construcción
con el objetivo de reducir la demanda de áreas de disposición finales. En Holanda, por su parte,
Brossik y Browers en 1996 realizaron investigaciones para medir y prevenir el desperdicio en la
construcción. Todos ellos, continúa afirmando Soibelman (2000), trataron con el desperdicio
directo exclusivamente; sin embargo, obtuvieron números similares a los que él obtuvo.
Por ejemplo, Pinto, de la Universidad de San Carlos, en 1989 fue el cuarto en estudiar en Brasil
el problema del desperdicio; sus resultados se basan en un solo sitio, pero fue el primero en
mencionar que el desperdicio indirecto, o sea, material incorporado innecesariamente, puede ser
aún mayor que el desperdicio directo o escombro. Finalmente, en 1998, el Instituto para la
Tecnología y Calidad de la Construcción (ITQC) inició un enorme estudio con 15 universidades;
en más de 100 sitios se estudiaron 18 materiales diferentes.
Teniendo en cuenta todo lo anterior, resulta evidente que la producción académica en torno a esta
problemática es de carácter sistemático dado que, como aspecto de la ingeniería civil, preocupa
tanto a sus estudiantes como a quienes ejercen esta profesión, por ello, muchos académicos
ingenieros preocupados por los desperdicios generados en obras civiles han intentado darle una
solución a este fenómeno y han tomado como base la filosofía Lean Construction, la cual se basa
en la idea de TPS (Toyota Production System) y, de acuerdo con Porras et al (2014), la
implementación de esta tecnología consiste en la creación de sistemas de producción buenos con
los cuales sea posible reducir o eliminar las actividades que no agregan valor al proyecto y
optimizar las actividades que sí lo hacen, asimismo, esta filosofía sólo se puede aplicar en las
construcciones si el interesado en llevarlo a cabo, se centra en la mejora de todo el proceso de
gestión del proyecto, según Porras et al.
Estos autores, al igual que algunos otros, afirman que para llevar esta filosofía a la práctica es
necesaria la implementación de un sistema planificador, el cual recibe el nombre de SUP (last
planner system) y se basa en un sistema de planificación y control de la producción para mejorar
la variabilidad en las obras de construcción y reducir la incertidumbre en las actividades
programadas; esto último es importante dado que una de las razones que más genera desperdicio
es precisamente una mala planificación por parte de la administración quien, sin control alguno,
solicita la adquisición de materiales innecesarios, por ello, este sistema pretende asegurar que
todos los requisitos previos necesarios para realizar un trabajo estén en su lugar antes de asignar
las cuadrillas de trabajo a las actividades.
NORMAS EN COLOMBIA
Es evidente que estos desperdicios se entienden como contaminación y desde 1973, por medio de
la Ley 23 del marco CRN, el gobierno colombiano se ha preocupado a tal punto de expedir dicha
ley por la cual se conceden facultades extraordinarias al Presidente de la República para expedir
el Código de Recursos Naturales y protección al medio ambiente y se dictan otras disposiciones,
en las cuales se busca prevenir y controlar la contaminación del medio ambiente y buscar el
mejoramiento, conservación y restauración de los recursos naturales renovables, para defender la
salud y el bienestar de todos los habitantes del Territorio Nacional. En ese mismo orden de ideas,
un año después, en 1974, se expidió el Decreto 2811 del 18 de diciembre, el cual dicta el Código
Nacional de Recursos Naturales Renovables y de Protección al Medio Ambiente. Pasados cinco
años, es decir, el 24 de enero de 1979 se expide la Ley 9 de 1979, la cual también decreta la
debida protección del medio ambiente en donde se considera que es necesaria la legalización y
control de los descargos de residuos y materiales que afectan o pueden afectar las condiciones
sanitarias del Ambiente.
Igual que las anteriores, el Estado colombiano se encargó de expedir varias leyes que
evidenciaran su preocupación por el impacto que estos desperdicios de materiales tienen sobre el
medio ambiente; estas leyes aún siguen vigentes dado que quedaron reguladas bajo la
Constitución de 1991.
Pedro Mattey, Rafael Robayo, Yimmy Silva, Norman Álvares y Silvio Delvasto Arjona,
Caracterización física y mecánica de agregados reciclados obtenidos a partir de escombros de la
construcción, Proyecto: Reciclar Escombros en Concreto,[1] Financiado por la Universidad del
Valle, 2013, Estudiantes de Doctorado en Ingeniería de Materiales; analizaron la necesidad de
aumentar la eficiencia en el consumo de materiales y de energía por esta razón estudiaron
algunos materiales con el fin de reciclarlos y su enfoque principal fue en el concreto [2], un
material de alto consumo en el país , debido a que se utiliza mas de diez mil millones de
toneladas de concreto[3] , poco mas de una tonelada por habitante/año; realizaron un muestreo
de los escombros seguidamente trituraron los escombros, obtuvieron una granulometría
adecuada para los agregados reciclados, [4]caracterizaron física y mecánica de los agregados
reciclados [5][6], evaluaron y compararon las propiedades de los agregados reciclados obtenidos
y concluyeron que el uso del residuo de concreto[7] , para usarlo como un agregado para la
fabricación o elaboración del concreto puede llegar a ser muy efectivo de manera física y
mecánica además contribuyendo a la disminución del desperdicio de material[8].
2.3. MÉTODOS Y TÉCNICAS
2.3.1. MÉTODO
2.3.2. TÉCNICA
2.3.3 PROCEDIMIENTO
Ruiz, N., & Rojas, C. (2018). Análisis de los desperdicios del concreto y su incidencia en el
presupuesto final (trabajo de grado). Universidad la Gran Colombia, Bogotá, Colombia.
[6] A. Edinçliler, G. Baykal, and K. Dengili, “Determination of static and dynamic behavior
of recycled materials for highways,” in Resources, Conservation and Recycling, 2004, vol.
42, no. 3, pp. 223–237, doi: 10.1016/j.resconrec.2004.04.003.