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Contenido, Clase 1
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Sain Simon, francés (1760 – 1825), muchos lo ubican como el antecedente inmediato del método
científico para estudiar la sociedad, también como el socialista útopico a pesar de no participar en la
Revolución francesa de 1789. Renunció a su título noble y adquirió el de ciudadano. Es el primero en
plantear la ciencia del hombre como ciencia positiva, en una corresponde entre sistemas de ideas y
sistema social, el sistema de ideas cambia cuando se producen mutaciones en los sistemas sociales.
Parte de la idea de Evolución hacia el progreso “cada uno de nuestros conocimientos,
pasa sucesivamente por tres estados teóricos distintos; el estado teológico o ficticio, un
estadio primario y básico de tipo militar por mandar y obedecer, el estado metafísico o
abstracto crea el poder del cosmos y el estado científico o positivo, propio de la
sociedad industrial”, cada uno con su método de filosofar, de ahí la idea de crear un
solo método que lleve a la evolución del pensamiento.
La clasificación de los fenómenos debe comenzar por el estudio de los fenómenos más
generales o sencillos y sucesivamente hacia los fenómenos más particulares o
complejos. Al aplicar este método clasifica las ciencias en Cuerpos brutos o inertes
(astronomía, física terrestre, química), y Cuerpos Organizados o vivos (fisiología,
sociología). La ciencia positiva considera a los fenómenos generales más simples,
abstractos y alejados de la humanidad mientras los otros son más particulares, más
concretos, complejos y directos para el hombre, un Método de Observación Deductivo,
Comte define a su obra como un método histórico comparativo. La metodología que
utiliza es la verificación de resultados a partir de la formulación de preguntas e
hipótesis.
Comte predijo que en el estado positivo, la sociedad industrial superaría las guerras,
pero vemos que en siglo XX se han producido dos guerras mundiales e innumerables
conflictos hasta los actuales días. Era un hombre que a partir de su ley de los tres
estados creía que finalmente la humanidad llegaría a la paz, incluso propuso que una
sociedad moderna no debería colonizar otros lugares, que no debería haber ejércitos
militares porque la sociedad sería capaz de organizarse con la supremacía y valores del
trabajo. Esto llevaría a un “poder espiritual” que regulara los sentimientos de las
personas y promoverá la unión mediante la perspectiva de un trabajo común, la sociedad
industrial, estas predicciones aún no se cumplen, la iglesia y la religión aún controlan.
6. Conclusiones
La idealización del pensamiento positivista o científico desconoció por completo el
aporte milenario de muchos pueblos del mundo, desde la idea de eliminar todo lo
anterior se edificó una sola visión de análisis de la sociedad y las ciudades. La expresión
superior de construir ciudad desde el método positivista es la Planificación y
Ordenación de los territorios de la ciudad desde una jerarquización de los espacios y las
instituciones sin reconocer que existen otros procesos organizativos territoriales que no
necesariamente deben responder a esa jerarquía espacial, tal como Comte lo hizo con las
ciencias. Un aporte del método positivista es el estudio de la ciudad y los fenómenos
sociales desde la interrelación de la observación empírica y teórica, se plantean marcos
teóricos que ayudan a comprender la ciudad, sin embargo los retos parten en pensar en
método y metodologías que puedan equilibrar y comprender de manera integral una sola
realidad de la sociedad, la naturaleza, el espíritu.
7. Referencias
Aron, Raymond. 2004. Las etapas del pensamiento sociológico. Editado por
Traducción. 2004a ed. Madrid: Tecnos.
Comte, Augusto. 1822. Plan de los trabajos científicos necesarios para reorganizar la
sociedad. Editado por TECNOS. 2000a ed. Madrid: Edigrafos.
———. 1830. Curso de Filosofía Positiva. Lecciones I y II. Editado por Libertador.
2004a ed. Buenos Aires: A.B.R.N.
Elias, Norbert. 1970. Sociología Fundamental. Editado por Gedisa. 1999a ed.
Barcelona: Romanya Valls.
Iglesias, María, Julio Arrambebri, y Luis Zuñiga. 2006. Los Orígenes de la Teoría
Sociológica. Editado por Textos AKAL. AKAL. Madrid: Lavel S.A.