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Asignatura: Psicología
Integrantes:
Danhey Silvina Montiel Duarte.
Isaida de los Ángeles Rodríguez Aguilar.
Keynor José López Sáenz.
Birsabec Samileh Reyna Miranda.
Yudiana Urbina Ortega
Docente: Lic.
Estas tres dimensiones deben hallarse equilibradas entre sí, de otro modo pueden ocurrir
estados patológicos.
Para describir la estructura de la personalidad, Freud desarrolló una teoría completa según
la cual la personalidad consiste en tres componentes separados pero interrelacionados: el
ello, el yo y el superyó. Aunque puede parecer que Freud describe los tres componentes de
la personalidad como estructuras físicas reales en el sistema nervioso, no lo son.
Representan más bien concepciones abstractas de un modelo general de la personalidad que
describe la interacción de las fuerzas que motivan el comportamiento.
2. Según su sentido o concepción, nombre los tipos de yo que existen.
El ello opera según el principio del placer, de acuerdo con el cual la meta es la reducción
inmediata de la tensión y la maximización de la satisfacción. Sin embargo, la realidad
impide satisfacer las exigencias del principio del placer en la mayor parte de los casos.
El yo, que comienza a desarrollarse poco después del nacimiento, se esfuerza por equilibrar
los deseos del ello y las realidades del mundo objetivo externo. En comparación con la
búsqueda de placer del ello, el yo opera según el principio de realidad, en el cual la energía
instintiva se limita para mantener la seguridad del individuo y ayudar a que la persona se
integre a la sociedad. Así, en cierto sentido, el yo es el “ejecutivo” de la personalidad: toma
las decisiones, controla las acciones y permite un pensamiento y una resolución de
problemas de orden superior a lo que permiten las capacidades del ello.
Los mecanismos de defensa son estrategias inconscientes mediante las cuales se reduce la
ansiedad, al ocultar su origen para sí y los demás. El mecanismo básico de defensa, la
represión, consiste en excluir de la conciencia los contenidos psicológicos que se es
incapaz de incluir armónicamente.
Cuando el ego no puede armonizar los impulsos primitivos de una persona con sus valores
morales o con la realidad, se origina un conflicto intrapsíquico, los cuales provocan
angustia y hace necesaria la utilización de mecanismos de defensa.
Control: Intentar manejar y regular los acontecimientos u objetos del entorno para
minimizar la ansiedad y controlar conflictos internos (TOC).
Desplazamiento: Trasladar una idea, una emoción o un impulso de un objeto hacia
otro semejante (fobias).
Externalización: Percibir en el mundo y en los objetos externos elementos de la propia
personalidad, adjudicándoles toda la responsabilidad.
Inhibición: Limitar o renunciar casi conscientemente a algunas funciones del yo para
evitar la ansiedad por un conflicto entre el ello y el superyó.
Aislamiento: Separar una idea del efecto que la acompaña (cuando una persona relata
un evento traumático como si no le causara emociones).
Intelectualización: Usar excesivamente procesos intelectuales para evitar experiencias
desagradables.
Racionalización: Ofrecer explicaciones racionales para intentar excusar actitudes,
creencias o conductas inaceptables.
Disociación: Modificar temporal pero drásticamente el carácter.
Formación reactiva: transformar un impulso inaceptable por su contrario.
Represión: eliminar o expulsar de la consciencia una idea o sentimiento.
Sexualización: darle un significado sexual a un objeto o idea que no la tenía.
La personalidad es una integración. Esto implica que ocurre en algún lugar donde sus
componentes pueden ser integrados. Este lugar es el cerebro. Como dice Murray,' "la
personalidad es postsensorial y premotora".
Evolutiva: Aunque la personalidad es un rasgo consistente, puede variar a largo plazo por
la interacción con el medio, por las experiencias vividas por el individuo o simplemente, a
medida que el individuo va madurando.
El temperamento se puede describir como los hábitos y habilidades que son inducidos por
los estímulos percibidos por los sentidos físicos. El temperamento o núcleo emocional de la
personalidad se define como las diferencias individuales en los hábitos y habilidades
relacionados con las emociones, que se hereda de forma moderada, alrededor de un 50%
(9,10,11) es moderadamente estable desde la infancia hasta la etapa adulta, y es consistente
en su estructura en distintas culturas y grupos étnicos. Se ha demostrado en estudios de
gemelos que cada una de estas dimensiones son genéticamente homogéneas e
independientes entre sí y que se asocian de forma predominante con un determinado
sistema de neurotransmisión (12). Las cuatro dimensiones incluidas en el temperamento se
denominan Búsqueda de novedad (impulsividad exploratoria vs estoicismo y frugalidad),
Evitación del riesgo (tendencia a la ansiedad vs toma de riesgos y la fuerza), Dependencia
de la recompensa (vinculación social vs soledad) y Persistencia. Cada una de estas
dimensiones está constituida por varias subescalas que constituyen diferentes expresiones
conductuales, emocionales y/o cognitivas de una misma tendencia hacia la inhibición
(Evitación del riesgo), la activación (Búsqueda de novedad) o el mantenimiento
(Dependencia de la recompensa) de la conducta.
Temperamento Carácter
Presenta una base innata Adquirido, procedentes de su desarrollo en el
ambiente y de sus relaciones interpersonales.
Al estar originado por factores genéticos, el El carácter es una parte modificable de la
temperamento es un elemento altamente forma de ser de las personas que depende del
estable de las personas. contexto.
El temperamento no es educable. Es decir, no En cambio, sucede todo lo contrario con el
se puede modificar y trabajar para que este carácter. Este depende del contexto y, por lo
mejore. tanto, resulta altamente educable.
1) Etapa prenatal. Esta es la primera etapa de la vida humana, denominada también fase
intrauterina, ya que tiene lugar dentro de la matriz de la madre durante el embarazo. Por lo
tanto, esta etapa va desde la fecundación (unión de las células sexuales de los progenitores)
y el desarrollo del feto, hasta el nacimiento o el parto.
2) Etapa de la infancia. La segunda etapa de la vida de todo ser humano, pero la primera
fuera de la contención y protección del cuerpo de la madre, es la infancia. Va desde el
instante del parto hasta alrededor de los seis años de edad, cuando se inicia como tal la
niñez.
3) Etapa de la niñez. Ubicada entre los 6 y 12 años, esta tercera etapa de desarrollo humano
coincide con la escolarización del individuo, es decir, su capacidad para el aprendizaje y la
convivencia con otros individuos de su edad. En la escuela el niño aprende a través de
diversos mecanismos lúdicos y pedagógicos a sacar provecho a sus facultades mentales,
físicas y sociales.
7) Etapa de la ancianidad. La última etapa de la vida humana, que inicia alrededor de los 60
años de edad y se prolonga hasta el fallecimiento. Los adultos en esta etapa pasan a
denominarse “ancianos” y suelen hallarse al final de una cadena familiar a la que transmitir
sus aprendizajes y enseñanzas vitales.
Las causas que pueden ocasionar el estrés son muchas, pero el estrés no tiene por qué ser
malo, también hay estrés positivo. En estas circunstancias el estrés actúa como un proceso
general de adaptación de los individuos al medio. Por ejemplo, el estrés puede aparecer
cuando alguien tiene frío tensando los músculos para producir calor cuando se produce un
esfuerzo para hacer la digestión o cuando alguien se duerme menos para estudiar.
Además, sirve como estímulo frente a situaciones importantes para la persona afectada,
como puede ser la pérdida de un ser querido, la quiebra económica o frente a una boda.
También puede servir como mecanismo de respuesta, según la Sociedad Española para el
Estudio del Estrés y la Ansiedad (SEAS), el estrés se manifiesta en una primera fase de
activación o preparación de la persona frente a este estímulo; después hay un periodo de
mantenimiento del estado de alta actividad y, por último, cuando se ha superado la
situación, se pasa a una fase de agotamiento en la que la alta actividad cae bruscamente.
Para adaptarse a las exigencias o a las necesidades activamos el proceso del estrés que
permite adaptarse y se manifiesta con reacciones como agilizar el pensamiento, emplear
una conducta más enérgica, aumentar la eficacia para superar determinadas situaciones con
éxito. A lo largo del día podemos vivir estrés sin consecuencias negativas, además puede
favorecer al aumento de la autoestima al lograr incrementar el rendimiento y superar los
retos y metas fijadas. Sin embargo, empieza a ser perjudicial cuando no se recuperan la
energía o los recursos gastados. Si sucede esto se produce un desgaste importante del
organismo.
Muchas veces ansiedad y estrés se usan como sinónimos. En ambos casos se produce una
reacción caracterizada por alta activación fisiológica. El estrés es un proceso más amplio de
adaptación al medio. La ansiedad es una reacción emocional de alerta ante una amenaza.
Digamos que dentro de los procesos de cambio que implica el estrés, la ansiedad es la
reacción emocional más frecuente. La ansiedad elevada genera estrés. A su vez, el estrés es
una de las fuentes más comunes de ansiedad.
La ansiedad puede aparecer tras una reacción de alerta, y puede asociarse con el miedo y la
preocupación. Por ejemplo, ante la amenaza de un animal o la idea anticipatoria de algo
malo va a ocurrir. En cambio, el estrés es un fenómeno que ocurre porque la persona no
posee (o piensa que no posee) las habilidades, las capacidades o el tiempo necesario para
afrontar una situación concreta. Es decir, que se produce un desajuste entre la demanda
específica y los recursos para afrontar esta demanda.
Mucha de la confusión que existe entre ambos fenómenos y lo que los hace similares es que
muchas veces aparecen juntos. De hecho, una situación estresante provoca ansiedad como
uno de sus síntomas, aunque también puede producir otros, por ejemplo, depresión o
dolores de cabeza.
7. ¿Cuáles son las fases del estrés y las consecuencias bilógicas del mismo?
8. ¿Cuáles son las causas que provocan el estres?
Causas sociales: trabajo, familia, otras relaciones
Causas biológicas: enfermedades, acontecimientos ligados a procesos degenerativos
Causas químicas: alcohol, drogas, tabaco
Causas climáticas: frio, calor
Otras causas:
Factores económicos. El dinero es necesario para vivir, así que si no se tienen suficientes
ingresos, puede ser un gran quebradero de cabeza.
Atención a la familia. El primer núcleo con el que tenemos contacto en nuestra vida,
normalmente suele acompañarnos hasta el final. Es normal querer atenderles como es
debido. Sobre todo cuando los abuelos o padres se hacen mayores y quieres recompensarles
por todo lo que han hecho por ti.
No decir nunca “no”. Grave error que puede traerte consecuencias. Aprender a decir “no”
es mucho más importante de lo que algunos creen.
No tener tiempo libre. ¿Quién puede permitirse el lujo de no tener tiempo libre para
disfrutar y no estar estresado? Muy necesario, o terminarás volviéndote loco.
Obsesionarse con la perfección. Es comprensible que existan personas que quieran que
todo salga perfecto, el problema es que la perfección no existe. Si intentar lograrlo se
convierte en una obsesión… Problema.
Falta de interés. Este síntoma normalmente afecta a personas que no encuentran nada que
les motive. Por eso la búsqueda de nuestros sueños nunca debe cesar.
El estrés laboral es uno de los problemas de salud más grave que en la actualidad afecta a la
sociedad en general, debido a que no sólo perjudica a los trabajadores al provocarles
incapacidad física o mental en el desarrollo de sus actividades laborales, sino también a los
empleadores y a los gobiernos, ya que muchos investigadores al estudiar esta problemática
han podido comprobar los efectos en la economía que causa el estrés.
El crónico: Es aquel que se presenta de manera recurrente cuando una persona es sometida
a un agente estresor de manera constante, por lo que los síntomas de estrés aparecen cada
vez que la situación se presenta y mientras el individuo no evite esa problemática el estrés
no desaparecerá.
10. Marque en un cuadro estas etapas y presente más importancia desarrollándose en
¨estrés en la niñez¨.
El estrés puede ser una respuesta a un cambio negativo en la vida del niño. En pequeñas
cantidades, el estrés puede ser bueno. Pero, el exceso de estrés puede afectar la forma como
el niño piensa, actúa y siente.
Los niños aprenden a responder al estrés a medida que crecen y se desarrollan. Muchas
situaciones estresantes que para un adulto son manejables causan estrés en un niño. Como
resultado, incluso los cambios pequeños pueden tener un impacto en los sentimientos de
seguridad y confianza del niño. El dolor, las lesiones, las enfermedades y otros cambios
son fuentes de estrés para los niños.