Sie sind auf Seite 1von 12

1- HACER UN RESUMEN DE CADA TEMA

1. LA PROFESIONALIZACIÓN DOCENTE

Abordar la profesionalización del docente, es considerar al mismo dentro de la


centralidad de la vida de los alumnos y la sociedad. Dado que sin este profesional
sería muy difícil de alcanzar la formación de los niños, adolescentes, jóvenes y
adultos en sus distintas etapas de vida, de socialización y de incorporación de
saberes.

Es indudable que para la época que vivimos la educación tiene un protagonismo


sustancial y es ahí, donde el profesionalismo del docente debe ser fortalecido, para
preparar a alumnos que sepan resolver y cumplir con las demandas sociales y
laborales, tanto actuales como futuras.

La docencia implica varios aspectos; los fundamentos humanísticos, morales,


éticos, conceptuales y sociales que deben tener correlación con la misma persona
que los ejerce. Un docente debe tener una visión de su rol en el aula, interpretando,
dialogando, ser un mediador, mantener el orden y la libertad de expresión de los
alumnos y también saber que es un referente social.

Por lo expuesto, el rol de la docencia no se remite a la simple trasmisión de


saberes. Es mucho más, es el conjunto de recursos personales y conceptuales que
permitan el aprendizaje del estudiante, y este, pueda desenvolverse adecuadamente
en el ámbito familiar, social, profesional y fundamentalmente en el personal.

La docencia en sí es un compromiso y un actor importante en el proceso de


aprendizaje, por lo que las metodologías y herramientas que emplee deben
orientarse a generar en los alumnos, interés y compromiso, con los saberes que se
les imparten.

Saberes que les permiten desarrollarse en la vida cotidiana a partir de su


incorporación, dado que no se puede establecer un espacio meramente académico,
en el que solo se transfieran saberes. Un profesionalismo docente va más allá,
busca que los estudiantes se pongan en contacto con conocimientos que les permita
aplicarlos en su ámbito personal y comunitario, junto a los valores éticos que toda
persona debe tener y ejercer.
Por lo que el docente debe ser un profesional con amplios conocimientos,
capacidades y habilidades como es: la comunicación, observación, interpretación,
mediación, conocer la diversidad generacional, respeto por la multiculturalidad y
en especial flexibilidad para con la heterogeneidad de los alumnos.

Transitamos el S. XXI, lo que exige conocer las nuevas tecnologías, su uso, las
aplicaciones y las opciones que brindan, para incorporarlas como un recurso
eficiente y efectivo en el aprendizaje de los estudiantes en su aplicación en las
aulas, como también en su vida cotidiana.

Una exigencia hacia los docentes es la permanente actualización de los


conocimientos académicos, humanísticos, pedagógicos, didácticos y los recursos
tecnológicos que se pueden emplear en el aula. Si bien, la tecnología es una
herramienta para incorporar en el proceso de aprendizaje de los alumnos, es
fundamental afianzar los valores humanos, como el respeto por los DDHH de las
personas, establecer convivencias pacíficas y buscar la erradicación de todo tipo de
violencia escolar y social. Para ello, el docente es fundamental al propiciar un
aprendizaje en valores.

Desde mi perspectiva personal y particular por el ejercicio de la docencia,


considero que el conocimiento y uso de la tecnología es muy importante, pero más
significativo es desarrollar el pensamiento crítico en los niños y jóvenes que
transitan las aulas.

Tener conocimiento es importante, aunque saber qué hacer con el mismo, es


trascendente.

Los niños y jóvenes del milenio desde muy temprana edad se familiarizan con las
distintas tecnologías; celulares, PC, notebook, Facebook, Twitter, Instagram,
Blogger, etc., por lo que muchas veces se confunden las habilidades de manejo
tecnológico con conocimientos y pensamiento. Desde esta realidad, se necesita un
docente profesionalizado, en los nuevos conceptos multiculturales, generacionales,
académicos y tecnológicos con una perspectiva ética, para que los alumnos
comprendan la importancia de los comportamientos con valores que respeten la
dignidad de las personas.
La profesionalización del docente en un mundo muy tecnológico debe ser
acompañado por la institución educativa en un cambio de gestión que sea capaz de
aprender que las estructuras y decisiones que se tomaron en el pasado no son
eficientes en el presente y el futuro, porque las nuevas situaciones y retos necesitan
nuevas respuestas (Garcia Fraile, 2000).

Por lo tanto, las instituciones deben innovar en sus estructuras y desarrollar nuevas
formas de hacer, entendiendo a la institución como un sistema dinámico que
evoluciona y mejora en la medida que los docentes involucrados lo consiguen. Los
cambios son continuos y más en el ámbito educativo, la rapidez de los avances
tecnológicos, la facilidad de acceso a los mismos, hacen que las instituciones en
busca de ofrecer mayor calidad a los estudiantes, aporten la eficiencia y eficacia de
un docente profesionalizado.

Por lo expuesto, se hace imprescindible abordar el cambio cultural que se debe


realizar en las instituciones educativas. No gestionar sólo información, sino
también incorporar conocimientos unidos a la experiencia y capacidad de acción,
que el docente desarrolla desde su profesionalismo en una adecuación a las nuevas
necesidades del mercado laboral, donde se van a insertar los jóvenes estudiantes.

Este conjunto de habilidades y conocimientos que deben desarrollar los


profesionales de la educación, son también los requeridos por los ámbitos de
trabajo: Liderazgo, Trabajo en Equipo, Ética, Creatividad, Autoaprendizaje y
desarrollo Personal, Comunicación, Gestión.

La profesionalización del docente para este S. XXI, refleja un salto cualitativo y el


activo más importante para realizar una eficiente y eficaz educación. Las
instituciones tienen que estar dispuestas a implementar y acompañar las
transformaciones en un aprendizaje continuo, orientado al alumno y con la
formación permanente de los docentes.

2. EN BUSCA DE NUEVAS PERSPECTIVAS

Las nuevas tareas de la escuela y docentes:

 Convertir a ésta en un lugar más atractivo para los alumnos.


 Facilitar la clave de un verdadero entendimiento de la sociedad de la
información.
Se espera de los profesores:

 hacer frente a problemas.


 orientar a los alumnos sobre una serie de cuestiones sociales.
 encuentren el equilibrio entre tradición y modernidad, entre ideas y actitudes
propias del niño y el contenido del programa.

Expectativas y responsabilidades

A los maestros se les pide:

- Competencia

- Profesionalismo

- Dedicación

Esto es demasiado para las necesidades que hay que satisfacer.

3. EL FINANCIAMIENTO Y EL CAMBIO EDUCATIVO

El análisis del financiamiento de la educación en América Latina plantea algunos


de los problemas básicos de la crisis global y de las perspectivas de desarrollo de la
región. No se trata -como en los países centrales- de una situación estable, en la que
ya están decididas las cuestiones fundamentales y en donde hay que optar por la
asignación de pequeños porcentajes de los recursos totales para uno u otro fin. En
el caso de América Latina está por definirse el marco conceptual del
financiamiento, que dependerá del estilo de desarrollo que se adopte. En el caso
específico de la educación, deberá determinarse cómo se insertará en el contexto
social y económico global, y, en especial, cuál será la estructura del gasto según los
tipos de enseñanza que se desee privilegiar, así como los recursos que se le
asignarán, dados la estructura institucional, el sistema fiscal y los agentes sociales
comprometidos.

En este trabajo se comenzará por plantear el asunto de los estilos de desarrollo y la


educación, que constituye el «telón de fondo» del problema. A continuación, se
señalarán algunos indicadores de la situación y de los gastos en educación de los
países de América Latina. En el tema específico del financiamiento, se pasará
revista a los provenientes del sector público, de las familias, de las comunidades
locales, de la educación privada y del financiamiento internacional. Se expondrán
las soluciones alternativas, que dependerán del estilo de desarrollo que se adopte,
que en síntesis se refieren al aumento de los recursos y de la eficiencia en su uso, o
a la disminución de la cobertura y calidad de la educación y de su pago por el
sistema fiscal o por los usuarios. Por último, se reseñará la estrategia educativa
elaborada por la CEPAL y la UNESCO, y se señalará su costo.

La situación de crisis económica y social que sufre América Latina2 muestra


alternativas políticas, desequilibrios económicos e inequidades sociales. En el
plano político, se discute la función del Estado y las posibilidades de participación.
En lo económico, se plantean desequilibrios entre importaciones y exportaciones,
entre ahorro e inversión, entre ingresos y gastos públicos, entre la demanda y la
oferta de trabajo, entre la capacidad instalada y la utilizada. En lo social, se
manifiestan inequidades en la nutrición, en la distribución del ingreso, en el
empleo, en los servicios de salud, educación y saneamiento y en la seguridad
social. En el plano específico de la educación, se discute el ideal educativo, la
calidad y cobertura de las prestaciones, su vinculación con el mundo del trabajo, su
grado de descentralización y la forma de financiamiento.

La elección de alternativas y la prioridad que se asigne a la solución de cada


desequilibrio e inequidad dependen del criterio que se adopte. La divergencia de
puntos de vista se plantea cuando se jerarquizan los problemas, se establecen
relaciones de causalidad y se fija una secuencia para su solución. Aquí entran en
juego las diferentes visiones que se tienen de la realidad y las distintas
orientaciones ideológicas que, a su vez, se concretan en la elaboración de diversos
escenarios. Por supuesto, existe una amplia gama de planteos y soluciones; a modo
de ejemplo, y para señalar cuál es la función de la educación en cada uno, se
considerarán dos estilos de desarrollo: el neoliberal y el social de economía mixta.
Con estas denominaciones se tipifican dos arquetipos, que en distintos países y
circunstancias toman nombres diversos. Es difícil que estos modelos se apliquen
puros; en realidad, los distintos regímenes tienen dosis de ambos estilos, pero en
definitiva predomina alguno.
En el escenario neoliberal se estima que corresponde actuar por etapas, que cada
avance debe basarse sobre la consolidación de la fase anterior, y que la obtención
de los equilibrios que se consideran básicos y el ajuste estructural son
prerrequisitos para una política de equidad y expansión productiva. En el plano
económico se privilegian los equilibrios fiscales y del sector externo y una reforma
estructural basada en la acción del mercado, con reducción del Estado y
transferencia al sector privado de un conjunto amplio de actividades que antes eran
ejecutadas por el sector público. El equilibrio fiscal global (superávit operativo y
equilibrio, incluyendo el pago de deuda) permitiría suprimir la inflación, y con el
superávit del comercio internacional podría pagarse parte de la deuda externa. De
ese modo, se facilitaría una inserción internacional, que en la etapa siguiente
permitiría la afluencia de capitales. Como el ajuste tiene efectos sociales
regresivos, se preconiza una política asistencial que remedie los casos más
extremos. Después de esta etapa de restablecimiento de los equilibrios fiscal y
externo y de la reforma del Estado, se pasaría al período de equidad y expansión
productiva. Los objetivos esenciales son la modernización, la eficiencia, la
competitividad y la inserción internacional.

El escenario social de economía mixta se basa en la obtención simultánea de tres


finalidades: los equilibrios macroeconómicos, la equidad y la expansión. Se
reconoce que existen desequilibrios que deben suprimirse, pero no son los mismos
que en el modelo neoliberal y deben atacarse al mismo tiempo. Son los existentes
entre importaciones y exportaciones, entre la inversión y el ahorro bruto interno,
entre la capacidad productiva utilizada y la instalada, entre la demanda y la oferta
de trabajo, y entre los ingresos fiscales y los gastos públicos. Se procura elevar la
productividad media de la economía en sociedades relativamente homogéneas.
Difiere del modelo liberal no sólo en cuanto a la índole, sino también con respecto
a la finalidad de los equilibrios; por ejemplo, las divisas de las exportaciones
servirían para financiar la importación de bienes de capital que reequiparían la
industria, y no para el pago de la deuda externa. Actuando al mismo tiempo sobre
los tres elementos redefinidos -equilibrios macroeconómicos, equidad y
expansión-, se promovería una reactivación. Este modelo supone una importante
actividad del Estado, que incluye el manejo de la mayor parte de las divisas y la
realización de inversiones, así como una reestructuración del sector financiero. Una
preocupación fundamental de este estilo es la afirmación de la equidad, definida
como una conjunción de igualdad y justicia, que se obtendría como un fin en sí
mismo y no como un subproducto del crecimiento económico.

EL CAMBIO EDUCATIVO

El tema del cambio educativo es crucial para quienes laboramos y estamos


involucrados en el quehacer docente. Se trata de un concepto que implica dos
elementos psicoafectivos inherentes al mismo: esperanza y frustración. Un cambio
educativo va más allá del deseo o la voluntad, implica planeación, metodología,
pero, a pesar de ello, sus posibilidades siempre son inciertas. No tenemos que ir
muy lejos para constatar este grado de dificultad, simplemente con observar el
escenario actual, nos percatamos de que gran parte del proceso educativo nacional
se arropa con elegantes términos, pero abona a la ineficacia y simulación de los
principales actores implicados. Este escenario tan complejo a nivel nacional
justifica la importancia de abordar la temática, como lo han hecho un conjunto de
investigadores y académicos reunidos alrededor de este esfuerzo institucional de la
Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de Nuevo León, por
conjuntar diferentes aportes que den mayor claridad sobre el estado de la
educación, el cambio y sus representaciones. El trabajo colectivo al que me refiero
fue coordinado por Miguel de la Torre Gamboa y forma parte de la línea de
investigación "Cambio educativo: discursos, sujetos y prácticas", que se lleva a
cabo en esta institución de manera colegiada.

El libro Concepciones y representaciones del cambio educativo es un conjunto de


ensayos y trabajos de investigación que se divide en tres secciones, la primera
versa sobre los contextos socioculturales y representaciones sobre lo educativo; la
segunda trata esta temática desde el discurso de maestros y estudiantes sobre el
cambio; y la tercera aborda las representaciones sociales como teoría de la
interpretación y expresión de la visión del mundo. Sabemos que el orden de los
factores no altera el producto, pero influye en cómo discurrimos sobre ellos; en este
sentido, el ordenamiento de las secciones pudo haber tenido otra secuencia que
permitiera, de entrada, empezar con la parte más teórica y general, es decir, iniciar
con la tercera sección; después contextualizar la problemática, lo que implicaría
que la primera sección fuera la segunda; y finalizar dando voz a los sujetos que
participaron en las diferentes investigaciones contenidas en el texto, de tal manera,
que la segunda sección debería ser la tercera y última. Este detalle tiene que ver
con la manera cómo aprendemos, pero como ésta es muy diversa, el ordenamiento
actual del texto se justifica, ya que no impacta en el resultado final del aprendizaje.
En lo personal, como alternativa lectora, sugeriría que el interesado inicie la lectura
con la tercera sección, continúe con la primera y termine con la segunda.

Una propuesta de lectura como ésta, implicaría iniciar abordando la teoría de las
representaciones sociales desde la tradición de la psicología social europea, con el
texto, el único en inglés, de uno de los dos colaboradores externos a la Universidad
Autónoma de Nuevo León, el austriaco Wolfgang Wagner de la Universidad
Johannes Kepler. Su ensayo, "Social representation theory as an approach to
societal psychology", es un trabajo de gran profundidad teórica, donde refrenda su
idea de que las representaciones sociales son un enfoque vinculado con la
psicología social, que brinda beneficios para desarrollar una metodología que
permita investigar diversas temáticas, sin volverla tan elástica que se pretenda
hacer un uso excesivo, confundiendo con ello, en muchas ocasiones, el concepto de
representación social con el de actitud, opinión y percepción.

José María Infante Bonfiglio aborda el tema de las representaciones, considerando


el interjuego teórico, las dificultades que surgen en la perspectiva de la psicología y
la lingüística. Menciona la importancia de los sistemas semióticos para comprender
las construcciones culturales humanas. El texto es una invitación para considerar
los textos clásicos freudianos que conducen inevitablemente a la lectura de la obra
de Jaques Lacan, destacando con ello la influencia saussuriana de este último.
Junto con ello, el trabajo incita a analizar y problematizar la teoría de Noam
Chomsky respecto al lenguaje.

El ensayo de Infante Bonfiglio es una invitación para reconsiderar la problemática


entre ambas disciplinas: la psicología y la lingüística; relación, de entrada, bastante
compleja.

En la sección referente a los contextos socioculturales y representaciones sobre lo


educativo, encontramos el texto "Paideia, bildung y competitividad. Tres
representaciones sociales para un propósito: la buena educación", de Miguel de la
Torre Gamboa. El trabajo es un estudio crítico sobre el tema educativo en donde la
perspectiva pragmática y competitivista derivada del modelo neoliberal
hegemónico que vivimos, o padecemos, es puesta en evidencia; a la vez, es un
esfuerzo por desmitificar dos interpretaciones que han tratado de integrase a la
visión actual educativa, como lo son los conceptos de paideia y bildung. El autor
desarrolla, desde una perspectiva filosófica, antropológica, histórica y crítica, una
visión de cómo las ideas sobre lo educativo destacan la preocupación por lo
humano (paideia) y la necesidad de un enfoque más integral y formativo de los
contenidos, estrategias y finalidades de la educación (bildung) como
representaciones de lo educativo. De entrada, éstas aparentan ser una opción alterna
ante el pragmatismo posmoderno pero, descontextualizadas de su origen y
fundamento, se convierten en representaciones mutiladas; aunque tratan de
contribuir a la idea de ciudadanía, a las aspiraciones éticas contemporáneas, quedan
relegadas como discursos que reflejan un desfase respecto de la visión del mundo
posmoderna, perspectiva donde la educación es valorada como una mercancía, en
un mercado laboral enfocado sobre el tema de las competencias; cómplice, la
educación forma parte de ese proyecto.

Además de Wolfgan Wagner, tenemos otra colaboradora externa, la española Mar


Rodríguez Romero de la Universidad de La Coruña, con "Los avatares del cambio
educativo: buscando alternativas al persistente 'Consenso' Tecnológico". El texto
posee una excelente revisión de la literatura y la historia sobre el concepto de
cambio educativo, así como su impacto en diferentes movimientos, como el de
Eficacia escolar y Mejora de la escuela.

Por otra parte, el tema de la globalización no puede estar ausente en un abordaje


sobre el tema de cambio educativo, para ello Benigno Benavides Martínez colabora
con el ensayo "Significados para la educación en el marco de la globalización y las
sociedades del riesgo". Texto que aborda la problemática de la educación
universitaria, sus representaciones en el contexto de los retos que plantea la
globalización como fenómeno económico y social, con todas las implicaciones que
éste tiene, tanto en la cultura como en la tecnología y la educación.

"Dimensiones y representaciones en los procesos de cambio educativo", de Magda


García Quintanilla, es un estudio de inspiración etnográfica sobre el tema de la
innovación educativa, donde aborda un caso que muestra, con base en
investigación de campo, cómo el cambio procura la mejora de las prácticas
docentes, pero se enfrenta con resistencias por parte de actores educativos que
participan en la dinámica de la escuela; fenómeno que describe, atinadamente,
como inercia institucional; finalmente, las innovaciones tienen que enfrentar las
resistencias provenientes de la cultura escolar. La sección sobre "Las
representaciones de lo educativo".

El discurso de maestros y estudiantes sobre el cambio, es la más extensa, contiene


interesantes experiencias donde se da voz a los estudiantes y maestros involucrados
en los procesos educativos.

2- RESPONDE A ESTAS PREGUNTAS

1. ¿Qué entiende usted por profesionalización docente?

La profesionalización docente puede definirse como el compromiso que el maestro


adquiere desde su formación inicial y posteriormente durante su desempeño
laboral, aspectos que le promueven el desarrollo de la eficiencia y la eficacia para
engrandecer las capacidades requeridas en el trabajo educativo.

2. ¿Por qué es importante la profesionalización docente?

Actualmente la educación ha sufrido transformaciones y reformas en sus planes y


programas, siendo más exigentes para adentrarse a la nueva sociedad del
conocimiento y donde precisamente la educación exige estudiantes con
competencias sólidas para su ejecución. En este sentido, las escuelas de hoy no sólo
preparan para culminar un nivel educativo, sino además deben de preparar a sus
estudiantes para el futuro en el que se van a enfrentar de manera que, comprendan
los problemas actuales desde una perspectiva objetiva, implementando las
competencias adquiridas, por ello, los docentes deben estar actualizándose en todos
los ámbitos— con la finalidad de cumplir los perfiles de egreso que se exigen.

3. ¿Qué desafíos actuales enfrenta el ser docente?

1. Inhibición.

Inicia la tarea antes de que el docente acabe la explicación


 Experimenta impulsividad
 Interrumpe el ritmo de clase
 Requiere una atención individualizada y pautada

2. Flexibilidad.

 Tolera poco y mal el cambio.


 Le cuesta encontrar el término medio, es decir, o todo es blanco o todo es negro
 Le cuesta dejar atrás las cosas

3. Control emocional.

 Experimenta bruscos cambios de humor


 Pasa por períodos en los que se encuentra muy disgustado
 Se ve incapaz de controlar sus emociones

4. Inicio de la acción.

 Necesita que se le diga que empiece la tarea


 Quiere empezar una tarea, pero no sabe ni cómo ni por dónde
 Carece de iniciativa para realizar las actividades

5. Memoria de trabajo.

 Tiene dificultad para recordar cosas tan básicas como su dirección o número de
teléfono
 Pierde fácilmente la noción de lo que está haciendo
 No es capaz de mantener una atención constante en el tiempo

6. Planificación.

 No tiene conciencia del tiempo


 Deja las tareas para el último momento
 Es desordenado a la hora de realizar una tarea
 Pierde mucho tiempo en los detalles y no tiene una visión de totalidad
 Se le olvidan con facilidad las tareas

7. Organización del material.


 Tiene el material muy desordenado
 Se olvida el material en casa y en clase
 Su taquilla y pupitre son un desastre
 Pierde las cosas con frecuencia
 Tarda mucho en sacar el material para una tarea concreta

8. Monitorización.

 No es capaz de evaluar la tarea que ha llevado a cabo


 Le cuesta reconocer y controlar el efecto de su comportamiento sobre otros
compañeros
4. ¿Cuál es el perfil que debe poseer un docente en la actualidad?

El perfil del docente para el siglo XXI. La relación entre maestro y alumno debe
ser una relación liberadora5, que se da cuando se comparten6conocimientos y
herramientas útiles y trascendentales para la vida; un maestro puede transmitir a
sus alumnos el amor por la materia que imparte, el amor por la investigación, por el
trabajo, por la riqueza de las relaciones de los demás, por la vida y, sobre todo, por
el descubrimiento y la construcción de sí mismo. Este aprendizaje se da en la
relación interpersonal con los padres, en primer lugar, y en segundo término en la
relación significativa y profunda con otros adultos y compañeros de escuela. Es
aquí donde resulta fundamental el papel del auténtico maestro comprometido con
una educación para la vida.

El perfil de los maestros que pueden lograr la transformación que nuestros tiempos
demandan, exige un alto compromiso hacia ellos mismos y hacia la comunidad
educativa, exige una opción de vida y una jerarquía de valores orientada a lo
humano y a la construcción de una sociedad más justa colaboradora y equitativa,
con una opción por la paz, el respeto a la vida y a la diversidad y una opción por la
superación permanente.

El docente, deberá actualizar continuamente su propio papel para contribuir


significativamente a lo más trascendente en el desarrollo personal y social delas
nuevas generaciones, que, bajo las circunstancias de hoy, están inconstante
aprendizaje.

Das könnte Ihnen auch gefallen