Capitulo 12: Roger Fry Juan Daniel Álvarez Ricardez

Este capitulo resulta muy interesante por el simple hecho de estudiar las ideas de un critico
moderno ya que anteriormente habíamos leído las obras desde las perspectivas de los artistas,
escritores, políticos y demás ocupaciones. Los trabajos previos nos proporcionaron métodos
y teorías para el estudio del arte mas allá de la actividad, llegando a terrenos filosóficos y
científicos. En Fry me enfoco mucho a su trabajo como critico, por que considero que es el
campo que mejor desempeñó, en cuanto a su trabajo como pintor solo su obra Venecia y sus
diversos retratos fueron los que me sorprendieron. El extracto de su libro visión y diseño
proporcionado por Fernie en su antología, se percibe como una clase de apología al trabajo
del critico del arte, por lo mismo siento que el escrito es tan personal, como si fuese una parte
de el.
Conforme avanza el texto reconoce que todos sus trabajos se han ejecutado en la practica y
la acción, por lo mismo siempre mantendría un anhelo por sistematizar su conocimiento, aun
que es consiente y afirma que a pesar de querer trabajar objetivamente, siempre estamos
influenciados por diversos estímulos externos que intentan manifestarse en nosotros, por lo
tanto es difícil llegar a la objetividad, pero también es necesario tratar de desechar esos
detalles. Al ser un autor de acción se da cuenta de como su manera de pensar y criticar el arte
ha ido cambiando a lo largo del tiempo, pues sus trabajos siempre tenían ese toque personal.
Una de las secciones mas interesantes del texto, es cuando habla sobre las reacciones que
surgieron cuando organizo su exposición “Postimpresionista” de 1911. Esto dividió
opiniones y generó disgustos, pero según Fry esto se debe mas a un conflicto social que
estético. Claramente con este suceso podría cumplirse lo que vimos en el capitulo anterior
con Frankl; el creía que la sociedad debía estar preparada para la llegada de un nuevo estilo,
esta podría ser la posible causa del problema al que se enfrento Fry con su exposición. Pero
al final estamos hablando del siglo XX, donde la sociedad iría evolucionando partiendo de
ideas revolucionarias, liberales y anarquistas, donde los jóvenes resultan ser el sector mas
influenciado y según el critico, estos fueron los que terminan apreciando el trabajo de su
exposición. El argumento de Frankl por lo tanto ya no aplica en esta sociedad, donde diversos
estilos empiezan a infiltrarse, el arte y los artistas terminan siendo adoptados como símbolos
de libertad y revolución.
Probablemente este acercamiento con la juventud hace que las valoraciones de Fry hagan a
un lado el uso de tecnicismos y reflexiones filosóficas, tomando argumentos mas prácticos,
esto por lo tanto deja una puerta abierta a cualquier clase de espectador, ya que el resalta el
uso de las emociones y sentimientos al momento de contemplar una obra, esta deberá
transmitir los elementos anteriores y el observador por lo tanto reaccionará de igual manera.
Aquí es evidente que siempre se producirán reacciones infinitamente diversas de una obra.
Cuando habla de la fusión de sentimientos, noto que le otorga autonomía a este proceso entre
obra y observador. Pero igual esta debería estar acondicionada a la disponibilidad del
individuo a profundizar en la obra ya que esta deberá ser voluntaria para llegar a buenos
resultados.
Siento que esta nueva forma de valoración tiene un acercamiento al proceso del conocimiento
-la relación sujeto y objeto- de hecho Fernie en su análisis menciona una relación con Kant,
de igual manera al investigar en internet, surgen algunos trabajos referentes a una relación
entre Fry y el filosofo.
Fry se mantiene aferrado a la idea de la objetividad, rechazando pasar a un campo puramente
subjetivo, el afirma que esto lo llevaría a terrenos del misticismo, lugar que el rechaza
totalmente. Es comprensible y acertada su idea, involucrar irresponsablemente sentimientos
y emociones en los trabajos nos llevaría a hacer a un lado diversas características importantes
de las obras de arte.