VERSIONES ACTUALES DE LAS ANTÍGUAS HEREJÍAS

JUAN FELIPE CARDOZO

ESCUELA DE TEOLOGÍA, FILOSOFÍA Y HUMANIDADES

PROGRAMA EN TEOLOGÍA

MEDELLÍN

2020
 Es un hecho evidente la multiplicación de las herejías en la Iglesia actual. Ya
el Cardenal Ratzinger, en su Informe sobre la fe (1984), señalaba esa
misma proliferación innumerable de doctrinas falsas, tanto en temas dogmáticos
como morales (BAC, Madrid 1985 en Iraburú, S/F). Las doctrinas de los grupos
existentes, en su mayoría ya fueron usadas por otros con anterioridad, pues casi
siempre provienen directamente de estos o guardan alguna relación.
Entre estos grupos, destacan los Adventistas del Séptimo Día (Con origen
entre 1818 y 1846), apocalípticos y milenaristas que creen en la Trinidad y no
admiten el purgatorio y el infierno. Interpretan la Biblia sólo de manera literal.
Provienen entre otros de los Apocalípticos, grupo de cristianos de los primeros siglos,
de donde procedieron numerosos textos en los que se relatan hechos sobrenaturales
relacionados con el fin del mundo. Así mismo, de los Milenaristas (quiliastas o
xiliastas), herejía iniciada por San Papías, obispo de Hierápolis. Es el nombre que
reciben los creyentes en la existencia de un milenio temporal después del Apocalipsis
y antes del fin del mundo, mil años en los que tendría lugar el triunfo de la Iglesia.
Otros grupos relacionados son los Cátaros o Albigenses (siglo XII), los Antioquianos,
los Masboteos, los Dunceros, los Nepos y los Rebautizantes.
Otro grupo actual son los Testigos de Jehová (Watch Tower Bible and Tract
Society of Pennsylvania, 1881, Charles Taze Russell), quienes no creen en la
Trinidad. Afirman que Jesús (a quien llaman el primogénito o Ángel) es una
subdivinidad que antes fue Adán y el Arcángel Gabriel. No aceptan clero, imágenes y
son objetores de conciencia (no admiten el servicio militar y otras semejanzas).
Tampoco reconocen la Biblia como Palabra de Dios y fuente de Revelación. Niegan
la resurrección corporal de Cristo y admiten que su segunda venida se produjo en
1874, niegan a María como Madre de Dios, su Maternidad Divina, Virginidad,
Concepción Inmaculada y la Asunción a los Cielos. Rechazan el valor de los
Sacramentos. Se consideran a sí mismos una restitución del cristianismo primitivo.
Para 2018, contaban con 8.4 millones de “publicadores” o miembros activos.
Su relación con herejías antiguas, se encuentra en los Antitrinitarios, tales
como los Unitaristas, Socinistas y otros, que sólo reconocen un Dios y niegan por lo
tanto la Trinidad. También en los Paulicianos (siglo VII), que subordinaban Jesús a
Dios. Otras herejías antiguas relacionadas son el Arrianismo, que consideraron a
Jesús como una subdivinidad; el Macedonianismo, doctrina herética de Macedonio,
obispo de Constantinopla, para quien el Hijo era inferior al Padre; el Pelagianismo,
doctrina herética de Pelagio, monje bretón del siglo V, que atacó la doctrina del
pecado original; los Nestorianos, seguidores de Nestorio (Siria 380 – 451) Patriarca
de Constantinopla, que entre otros conceptos, no consideraban a María como la
Madre de Dios.
Se puede añadir a la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
(mormones) (1830), que consideran que Dios Padre (Elohim) está compuesto de
materia, aunque inmortal y habita en el sistema de la estrella Kolob. Es un dios
distinto de Jehová (su hijo), que encarnó como Jesús de Nazareth. Originalmente
practicaban la poligamia (siglo XIX). Consideran solamente a la tercera persona de la
Trinidad como no corpórea. Fundaron su propia ciudad santa Salk Lake City.
Aseguran que la Iglesia de Cristo dejó de existir con la muerte del último Apóstol.
Niegan la existencia del Pecado Original. Utilizan el rito del “bautismo por los
muertos”. Practican “La Cena” con pan y agua cristalina. Son milenaristas y creen en
el “sellamiento para toda la eternidad”, donde una persona puede casarse inclusive
con alguien desaparecido. Igualmente se relacionan con los Triteistas como los
Nominalistas de Roscelin de Compiegne. También con los Anabaptistas, los
Baraletas, los Antropomorfistas, los Rebautizantes y los Saccaphori. Una herejía
antigua relacionada también es el Pelagianismo.
Del mismo modo, se menciona a los Espiritistas (1857), que creen que Dios
es la inteligencia suprema, creador de todo, Suprema Energía y fuente inagotable de
amor, para quienes Jesús sólo es un espíritu bueno y evolucionado. Creen en la
reencarnación, en la ley del karma, en la posibilidad de que hayamos habitado otros
mundos y en los tres principios: Cuerpo, Periespíritu (cordón de plata) y Alma.
Rechazan el bautismo y no creen en la gracia de María Virgen. Creen en la salvación
sólo por la caridad y no por la Fe. Se relacionan con el culto Babilónico, con el culto
Egipcio y otros cultos orientales antiguos; también con los Priscilianistas, seguidores
de las doctrinas heréticas de Prisciliano (siglo II) basadas en el maniqueísmo y el
gnosticismo, quienes creían que Jesús no existía antes de su nacimiento y que no fue
hombre también en la reencarnación.
Otro grupo actual es Fe Universal Baha’ i (1863), que creen en la unidad de
Dios y el origen común de todas las religiones. Propugnan la libertad de pensamiento,
la educación, un lenguaje universal, la paz mundial y la igualdad. Rechazan el
ascetismo y la vida exclusivamente espiritual. No creen en el Cielo y el infierno,
tampoco en el dogma y concepto de la Resurrección de la carne y de la
reencarnación. No tienen liturgia ni sacerdotes. Creen que el sentido de la vida
humana es conocer y adorar a Dios. Se relacionan con el Babismo, con los
Albigenses y sectas heréticas musulmanas.
Un grupo añadido son los Rosacruces (Formada hipotéticamente en el siglo
XII, redescubierta en el XV e históricamente formada entre 1888 y 1915. Fue
reconocida en 1939), quienes creen en un ser supremo, también en el karma y la
reencarnación. Consideran a Jesús como una reencarnación más del Cristo. No creen
en el infierno, son vegetarianos, practican meditación. En algunas ramas son
decididamente luciferistas. Se relacionan con los Elcesiatas, secta palestina gnóstica
de los primeros años del cristianismo; con los Maniqueos, sectarios seguidores de
Mani y que fundamentan la fórmula dualista del Bien y el Mal, personificados por
dos personas divinas y que son las que dan origen a los seres; con los Priscilianistas,
seguidores de las doctrinas heréticas de Prisciliano (siglo II) basadas en el
maniqueísmo y el gnosticismo; con los Paulicianos, los Cátaros, los Hermanos de la
Sinceridad y los Papalorinquistas, entre otros grupos.
Por otro lado, el grupo El Nuevo Pensamiento, donde se congregan los grupos
de Emmet Fox, Yo Soy (I Am), la Iglesia Universal y Triunfante, la Metafísica
Cristiana Conny Méndez, el puente de la libertad, todos los grupos de la línea Rubén
Cedeño, Grupos Saint Germain (Siglo XX), quienes creen que además de ser “imagen
y semejanza” del Creador, somos creadores, cada cual, de su propia manifestación,
pues hemos tardado 14.000 años para evolucionar hasta hoy. Afirman que Dios tiene
siete aspectos invisibles, mentales: Amor, Verdad, Vida, Inteligencia, Alma, Espíritu
y Principio. También que al Amor es el carácter de Dios, la fuerza más potente de
todas las fuerzas y la más sensible. Utilizan la meditación y sus dogmas son una
versión más “popular” del teosofismo. Se relacionan con los Hinayana, doctrina
budista original, instituida por el Sakya Muni o Siddharta Gautama (Budha) que
sostiene la inexistencia de Dios y el aniquilamiento total de la personalidad o yoidad
en el paraíso mental o Nirvana. También con la Escuela de la Tierra Pura o Escuela
del Loto (Thing-Tu) secta china, de tradición budista; con los Familistas, secta
cristiana de carácter místico, fundada por Henrick Niclaes, en Holanda (siglo XVI),
quienes consideran el amor al prójimo y el amor mutuo, mayor que la fe; con los
Ebionitas y Cerintianos, los Nicolaitas, los Nestorianos, los Ofitas, los
Papalorinquistas y los Arcónticos.
También se relaciona con el Gnosticismo, idea religiosa que pretendía conocer
por una percepción misteriosa las cosas relativas a Dios, doctrina que se difundió en
el cercano oriente entre los siglos I y III de nuestra era y pretendía incorporar al
cristianismo elementos dogmáticos del judaísmo cabalístico, del parsismo, del
zoroastrismo, la teosofía hindú, la astrología, el hermetismo, la angelología y
demonología, el platonismo y el pitagorismo, etc.
Otra herejía cristológica actual que puede mencionarse es el Movimiento
“Sólo Jesús (Jesús Only)”, también conocido como Pentecostalismo Unicitario, o
teología de la unicidad, enseña que solo hay un Dios, pero niega su trinidad. La
doctrina central es que hay un Dios que se revela a Sí Mismo en diferentes
“maneras”. Se deriva del Modalismo (sabelianismo), condenado como herético ya en
el siglo II d.C., que enseña que Dios se ha revelado a Sí Mismo en tres modalidades o
formas en diferentes momentos. Es considerada antibíblica de acuerdo con la
ortodoxia cristiana, sin embargo el número de creyentes supera ya los 40 millones en
el mundo. Para ellos, Jesús es el único Dios verdadero, manifestado en la carne.
Más recientemente, el Papa Francisco advierte de dos amenazas modernas a la
salvación en nuestros días: la autosuficiencia (neo-pelagianismo) con el uso del ‘dios
spray’ y el individualismo que aísla (neo-gnosticismo) de una fe bajo el lema: ‘hágalo
usted mismo’, que recoge en la carta sobre la salvación cristiana dirigida a los
Obispos de la Iglesia Católica y a los fieles, sellada por el Ex Santo oficio, titulada
“Placuit Deo” (2018). Para el neo-pelagianismo “el individuo, radicalmente
autónomo, pretende salvarse a sí mismo, sin reconocer que depende, en lo más
profundo de su ser, de Dios y de los demás. La salvación es entonces confiada a las
fuerzas del individuo, o las estructuras puramente humanas, incapaces de acoger la
novedad del Espíritu de Dios”.
Por su lado, el neo-gnosticismo, “presenta una salvación meramente interior,
encerrada en el subjetivismo, que consiste en elevarse «con el intelecto hasta los
misterios de la divinidad desconocida». Se pretende, de esta forma, liberar a la
persona del cuerpo y del cosmos material, en los cuales ya no se descubren las huellas
de la mano providente del Creador, sino que ve sólo una realidad sin sentido, ajena de
la identidad última de la persona, y manipulable de acuerdo con los intereses del
hombre”.
El ex Santo Oficio aclara que la comparación con las herejías pelagiana y
gnóstica “solo se refiere a rasgos generales comunes, sin entrar en juicios sobre la
naturaleza exacta de los antiguos errores”.
 Referencias

Alvarado, Fernando (2019). Herejías cristológicas antiguas y modernas. En:

https://pensamientopentecostalarminiano.org/2019/10/01/herejias-cristologicas-
antiguas-y-modernas/

Federigo, Roberto (S/F). Sectas y movimientos religiosos antiguos y contemporáneos.

Comparación de sectas y Nuevos Movimientos Religiosos contemporáneas con
antiguas. En: http://es.catholic.net/op/articulos/1915/cat/17/sectas-y-
movimientos-religiosos-antiguos-y-contemporaneos.html#modal

Iraburu, José (S/F). Innumerables herejías actuales. En:

http://www.infocatolica.com/blog/reforma.php/0911061117-39-innumerables-
herejias-actu

Ramos, Ary (2018). Estas son las dos amenazas-herejías modernas. En:
https://es.aleteia.org/2018/03/01/estas-son-las-dos-amenazas-herejias-modernas/