Sie sind auf Seite 1von 1

Ailén Rocío Vila

Todos deberíamos ser feministas

Chimamanda Ngozi Adichie es una novelista y dramaturga de Nigeria, que se


proclama a si misma como feminista y quiere expandir esta ideología. Una de las
maneras en las que realiza esto es a través de lo que se llama charlas TED, cuya
sigla significa “Tecnología, Entretenimiento, Diseñ o” y son otorgadas por una
organizació n sin fines de lucro con el objetivo de difundir ideas que consideran
dignas. En su charla TED, Chimamanda plantea una hipó tesis: la desigualdad de
genero es cultural.
Esta hipó tesis es respaldada por distintos argumentos expresados a lo largo de la
charla, y en estos se utilizan diferentes recursos con el objetivo de acercar al
pú blico a la narradora. Uno de los primeros elementos mencionados es el
fallecimiento de su mejor amigo, Okoloma, quien fue el primero que la catalogó
como “feminista”. Este es el recurso de la empatía, en donde se genera que el
pú blico sienta cierto tipo de afecció n por ella. A partir de este momento procede
a presentar sus argumentos. Segú n Chimamanda, la desigualdad social se generó
por la fuerza física, y la creencia de que el hombre es mas fuerte que la mujer, lo
cual se llevó de lo físico a lo psicoló gico también. Aunque ella argumenta que hoy
no posee tal importancia, sí dice que hay inercia respecto a esta. De esta
consideració n del género femenino como débil, se desprende otro argumento:
que el rol de la mujer no solo está asociado con la debilidad, sino también con el
matrimonio, la sensibilidad, dependencia, domesticidad. Ademá s, el rol
masculino, ademá s de estar asociado con la fuerza y superioridad, se encuentra
asociado con el mando, dinero y poder. Este argumento es acompañ ado con una
anécdota respecto a su infancia en su colegio, en donde no fue elegida como
monitor de su clase por ser mujer, y en cambio, eligieron a un chico tímido que
no tenía el cará cter que poseía ella para tener esa posició n. Esta anécdota seria
una manera de respaldar el hecho de que todos somos diferentes, y que los roles
son solo construcciones sociales. Esto significa que son enseñ ados y creados por
el hombre. Estos roles generan diferentes efectos en ambos géneros, y
argumenta que el rol masculino conlleva a un ego frá gil. También lleva a que la
mujer sienta que no puede poseer éxito, ya que una mujer exitosa amenaza al
hombre. Chimamanda acompañ a esto diciendo que conoció a muchas mujeres
que han dejado sus aspiraciones y sueñ os por tener “paz matrimonial” o
conseguir una pareja. Refuta la idea de que las mujeres tienen poder por la
manipulació n sexual que puede ejercer en otros individuos, lo que llama “bottom
power”. Segú n ella, la cultura es una creació n del hombre, por lo tanto la
desigualdad no puede ser considerada como algo bioló gico fundamentado.
Todos estos argumentos presentados se hacen ver como má s vá lidos cuando la
narradora menciona el hecho de escribir una novela, porque el ser escritor
otorga cierto prestigio.
Ella sugiere, entonces, que aquello que es enseñ ando, puede ser enseñ ado al
revés. Que si se presentó la desigualdad, se puede educar para desenseñ arla y
plantear una nueva idea que presenta a ambos géneros como iguales, y que
incentive a la gente a defender esta igualdad. Sus argumentos son vá lidos, y
aunque el argumento de tipo psicoló gico (respecto al ego frá gil del hombre) no
es tan fuerte, no le saca su legitimidad y solidez al resto. En conclusió n, su
hipó tesis es vá lida.

Das könnte Ihnen auch gefallen