La Memoria Descriptiva de un proyecto en arquitectura, se puede

entender como un documento de lo que será el proyecto arquitectónico, y

por ello se considera como parte de su génesis. Es un documento que se
exige a los arquitectos previamente a la realización del proyecto con
el fin de explicitar las principales variables tenidas en cuenta para el
desarrollo de sus ideas.

Si todo arquitecto debiera “tener la habilidad para demostrar y

explicar los resultados de la destreza en los principios de la
proporción”, y tal como decía Vitruvio en la antigua Roma, la M.D.
representa hoy el andamiaje conceptual y las herramientas proyectuales que
estructuran el pensamiento de todo arquitecto.

¿Cómo realizar de manera correcta una M.D.?

Básicamente la M.D. debería tener una estructura y un fin similar en

cualquier escenario, donde el objetivo principal debe justificar la solución del
proyecto arquitectónico. La explicación paso a paso de por qué se define al
proyecto como tal. Y dado que el “resultado” es la parte principal, se podría
estructurar en tres fases:

 FASE UNO: contexto.

En la primera fase de la memoria descriptiva, debe relatarse toda la

información natural y cultural a la que responde el proyecto. Las
características naturales, ambientales y hasta los conflictos (flujo de tráfico,
lejanía de infraestructuras, deficiencias de servicios básicos, zonas de
protección ambiental, balcones panorámicos, líneas de deseo, etc.) Y
también, los condicionantes culturales, tanto del lugar a intervenir como el
de los usuarios (la puesta en valor de un bien arquitectónico, las limitaciones
físicas del lugar o del propio usuario, la posibilidad del crecimiento familiar,
la respuesta a un deseo del usuario, etc.). Todo ello contribuirá a plantear
respuestas y soluciones al diseño del proyecto.

Es la fase donde se responde: ¿Dónde? ¿Para qué? ¿Para quién?

 FASE DOS. Solución al problema.

Luego de explicar todas las bases en donde se implantará el proyecto, se

expone de forma detallada y escrita el por qué cada una de las decisiones
tomadas en el proyecto. Estas serán descritas de una forma muy coherente
y haciendo énfasis en que las decisiones de diseño forman parten de la
solución a los problemas encontrados en la primera fase. Incluso en esta
segunda fase se podría entrar en una materia técnica definiendo el porqué
del uso de ciertos materiales, o de ciertos pre-conceptos. O porque se tuvo
que priorizar ciertos rubros y no otros en el mismo.

Ésta es la fase en que debemos responder fuertemente a la pregunta ¿Por

qué?

 FASE TRES. Visualización.

La última parte es donde se expone prácticamente el proyecto final
valiéndose de planos técnicos, imágenes en 3D y hasta infografías, donde se
aprecia el proyecto terminado y con todo su contexto general y particular.