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AMO CONOCERTE

Hoy no vamos a tratar el tema de cómo conocer al otro en el


sentido intelectual, sus costumbres, sus preferencias, sus virtudes
o defectos.

Hoy vamos a usar una variable de significado de la palabra conocer


que encontramos en Génesis 4: 1: “conoció Adán a su mujer Eva”

Hoy vamos a tratar en la intimidad un tema que el propio Dios


inventó para permanecer en intimidad y sólo en el matrimonio: el
sexo.

Tengamos muy en cuenta, de ahora en adelante, que lo sexual es


creación divina y que, así suene algo incómodo, Dios siempre está
en su habitación.

Pero veamos antes algo sobre las necesidades sexuales de la


pareja, tomado del libro LAS CINCO NECESIDADES SEXUALES
DE HOMBRES Y MUJERES escrito por Gary & Barbara Rosberg.

NECESIDADES SEXUALES DISEÑADAS POR DIOS

Es importante recordar recordar que Dios intencionalmente hizo


diferentes a hombres y mujeres. Nuestras diferencias enriquecen y
agregan diversidad, emoción y gozo al matrimonio.

Por otro lado, nuestras diferencias también ocasionan desafíos.


Tenemos que aprender cuáles son las diferencias y saber cómo
manejarlas en nuestra relación matrimonial. Sabemos que nuestro
cerebro y nuestros órganos sexuales están conectados de manera
diferente.

Al varón lo excita el estímulo visual; un hombre puede excitarse


con solo mirar a su esposa.

Las mujeres son un poquito más complejas. Ellas necesitan ¨ser


seducidas¨. Los terapeutas sexuales dicen que las mujeres
demoran hasta 30 minutos en excitarse. Los estudios señalan que
los hombres piensan en el sexo cada 17 segundos, mientras que
las mujeres piensan en el sexo cada 17 días.

Dios nos hizo diferentes, pero también nos hizo complementarios,


para que pudiéramos equilibrarnos, para hacernos uno.

Para satisfacer nuestras necesidades tenemos que satisfacer las


necesidades de nuestro cónyuge. Ambas están íntimamente
conectadas. Desde luego eso no significa que los hombres
necesiten solamente lo físico y las mujeres solamente lo emocional.
Ambos necesitan de las dos cosas. Lo que ocurre es que Dios nos
programó para obtenerlo llegando por dos caminos distintos.

¿Cómo hizo Dios esto? Programó al hombre para que se sintiera


conectado a su esposa experimentando el orgasmo. El acto físico
sexual expone sus sentimientos y le permite mostrarse más
vulnerable. El sexo le da un sentido de cercanía e intimidad. Está
en mejores condiciones para concentrarse en sus emociones.

Dios también programó a la mujer pero para que se sintiera


conectada a su esposo experimentado la conexión emocional que
le proporciona sentido de seguridad. De esa manera está en
mejores condiciones para entregarse al sexo físico.

Dios creó a los esposos y esposas para complementarse


mutuamente: el hombre invita a su mujer a a la intimidad a través
del sexo y la esposa invita al hombre a la intimidad mediante la
conexión emocional. Juntos conforman un complemento total y
placentero.

¿QUE NECESITAN REALMENTE LOS ESPOSOS Y LAS


ESPOSAS?

Necesidades Sexuales de los Hombres Necesidades Sexuales de las Mujeres

1. Satisfacción mutuamente 1. Reconocimiento


2. Conexión 2. Conexión
3. Receptividad de la esposa 3. Caricias tiernas, no sexuales
4. Iniciativa de la esposa 4. Intimidad espiritual
5. Reconocimiento 5. Romanticismo

NECESIDADES SEXUALES DE LA MUJER

Reconocimiento.

Reconocer a tu esposa significa afianzar su autoestima. Es


prodigarle cumplidos sinceros, escuchar con atención lo que ella
dice, darle la oportunidad de que se desacelere de su ocupado
ritmo de vida, decirle cosas halagadoras delante de otras personas
y alentarla cuando está desanimada. Reconocer es señalar lo que
hace bien y recordarle cuánto aprecias lo que ella hace.

Conexión.

Cuando un esposo se conecta afectivamente con su mujer, la


prepara para la intimidad sexual. Conectarse afectivamente es
comprender que es importante ocuparse de las necesidades de
su esposa. Ejemplos; interrumpir lo que está haciendo para
saludarla con un beso, preguntarle como le fue, escucharla, decirle
que la ama, ayudarle en las tareas domésticas, ir juntos de
compras, realizar actividades juntos, quedarse cerca a ella cuando
ven televisión, reír juntos, compartir sentimientos, etc.

Contacto no Sexual.

Más del 80% de la necesidad de contacto fundamental para la


mujer es no sexual. A las mujeres les encanta un abrazo, una
caricia, un beso, tomarse de las manos y, en fin, cualquier señal
física de que ellas son especiales.

Hagamos una distinción entre contacto físico no sexual y contacto


físico erótico preliminar. El contacto físico no sexual es el afecto
cariñoso, puede tener entre líneas el tono de provocación sexual,
pero no tiene como objetivo llegar al acto sexual.

Por otro lado, el contacto en los juegos eróticos preliminares


conduce a la pareja a la intimidad sexual.

El problema se presenta porque para el hombre una cosa lleva a la


otra, todo lo siente de la misma manera. Pero no es así para la
mujer.

Cuando satisfaces la necesidad de cariño de tu esposa, refrescas


su espíritu desanimado y la ayudas a relajarse. Le brindas a ella,
lo cual repone sus energías. Cuando la tocas sin ninguna
expectativa de terminar en las sábanas, ella se sentirá mucho más
segura contigo y más abierta a la posterior actividad sexual.

Cuando inicias el contacto con la expectativa de entrar a la zona de


intimidad sexual, corres el riesgo de consumir la energía que le
queda. Por qué? Porque si tu esposa es como la mayoría de las
mujeres, se pasa todo el día satisfaciendo las necesidades de los
demás: dando, dando, dando. Se cansa, se consume. Cuando su
esposo llega a casa y adopta la actitud de ¨tomar¨, ella ya no tiene
nada que dar. Está vacía. Ella necesita que tu seas un lugar
seguro libre de amenazas. El contacto no sexual recarga su
energía y crea un espacio de seguridad.

En 1 Corintios 13 Pablo nos recuerda que el amor no es egoísta.


Puedes amar a tu esposa dejando de lado tus propias
necesidades, sin exigir lo que esperas y siendo amable con ella
mediante el reconocimiento, la conexión y el contacto físico no
sexual.

Por qué son estas tres necesidades de reconocimiento, conexión y


contacto no sexual tan importantes para la mujer?

1- Ayudan a construir confianza.

Las actitudes negativas, la duda, la inseguridad, el temor, la culpa y


el enojo matan rápidamente el deseo sexual.

2- Ayudan a estar dispuesta a complacer a su esposo.

El reconocimiento y la valoración motivan a que las personas


trabajen mejor. Así mismo, la gratitud, expresada mediante el
reconocimiento y la conexión, es un poderoso motivador.
3- Poner en marcha el motor sexual de la mujer.

El contacto no sexual la hace sentirse amada por quién ella es, no


por su cuerpo, no por lo que es capaz de darte físicamente, sino
porque la mas tanto como para dejar de lado tu propio deseo.
Cuando tu esposa se siente amada, estará más dispuesta y
preparada para avanzar hacia tí y satisfacer tus necesidades
también.

4- Reducen la tensión y el estrés de ambos cónyuges.

Sin una palabra, el contacto expresa un mensaje de amor,


conexión y aceptación. Dios creó nuestra piel con delicadas
terminaciones nerviosas que liberan químicos positivos y
saludables dentro de nuestros cuerpos: endorfinas y oxitocinas, las
sustancias químicas del bienestar.

El contacto físico también incrementa la actividad cerebral y eleva


la atención, afecta a las hormonas, así como los patrones de
sueño.

El contacto físico beneficia tanto al donante como al receptor.

5- Generan un química positiva en la relación.

Los expertos dicen que las parejas que se demuestran cariño físico
generosamente nutren un saludable vínculo de conexión. La
química y los sentidos están íntimamente relacionados y el tacto es
uno de los sentidos más fuertes.

Cuál es la química en tu relación? La química sola no basta para


mantenerse juntos en una relación a largo plazo, pero sin química,
la relación de una pareja es frágil y vulnerable. Si a la mujer se la
despoja del contacto físico no sexual en su matrimonio, ella podría
sentirse atraída hacia otro hombre que le tome las manos al
conversar, o que la abrace.

6- Favorecen la salud física y emocional.


Estudios anteriores dicen que para estar física y emocionalmente
sano, la persona promedio necesita recibir 8 a 10 contactos
afectuosos por día de una persona amada. Otros estudios
muestran que el contacto físico no sexual fortalece la salud
emocional, salud física, acrecentando la longevidad y ayudando al
fortalecimiento óseo.

Qué sucede cuando las necesidades de la mujer no son


satisfechas?

a- Podría sentirse decepcionada. No se siente cuidada, valorada,


ni apreciada. Seguramente no tomará la iniciativa para tener
relaciones.

b- Podría sentirse rechazada.

c- Podría empezar a dudar y desconfiar.

d- Podría considerar a su esposo como alguien egoísta. Se


concentrará en ser una mejor madre en lugar de intentar ser una
mejor esposa.

e- Podría volverse irritable y resentida. Estará más a la defensiva


con su esposo y le echará la culpa de los problemas.

f- Podría alejarse sexualmente. Puede distanciarse de su esposo


tratando de protegerse a sí misma, a sus emociones y a su espíritu
sensible. Tal vez rechace las propuestas de su esposo con
excusas y su negativa podría ser permanente.

g- Podría alejarse emocionalmente. Llegará a desconectarse y


cerrarse emocionalmente. Ella dirá ¨estoy cansada de suplicar¨ y
finalmente decir ¨se acabó¨.

h- Podría tratar de castigar a su esposo. Ignorará a su esposo o


podrá retraerse emocional y físicamente. Tal vez manipule a su
esposo a través del sexo, negándose a tener relaciones sexuales.

i- Podría buscar satisfacer sus necesidades con otra persona. La


realidad es que la mujer responde al hombre que se interesa por
su corazón. Cuando un esposo no le da a su mujer el
reconocimiento que necesita, deja el corazón de ella
completamente abierto para que otro hombre se conecte.

Intimidad espiritual.

Efe 5:23-25: “porque el marido es cabeza de la mujer, así como


Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su
Salvador. Así que, como la iglesia está sujeta a Cristo, así
también las casadas lo estén a sus maridos en todo. Maridos,
amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y
se entregó a sí mismo por ella...”

Tendrán un profunda intimidad espiritual cuando tengan un deseo


mutuo y sincero de estar cerca de Dios, cuando busquen la
dirección de Dios para su matrimonio, incluyendo su vida sexual.
Implica que en medio del conflicto se honren y se respeten
mutuamente. No se menosprecien el uno al otro, tratando de
ganar, piensen mejor de qué manera quiere Dios que actúen en la
situación. Únanse en oración. Tengan en cuenta los principios
bíblicos para la vida y el matrimonio.

Cuando, tu varón, lideras a tu esposa espiritualmente, ella se siente


animada para confiar mas en ti, será capaz de compartir temores,
ansiedades, alegrías y sueños. Ambos pueden experimentar una
verdadera honestidad, con la seguridad de se aman
incondicionalmente el uno al otro y de que ninguno abandonará
jamás el compromiso.

Romanticismo.

El romanticismo ocupó el primer lugar en las necesidades


sexuales. Romanticismo no es lo mismo que sexo. Hombres y
mujeres definen diferente el romanticismo. En una encuesta para
los hombres el romanticismo tiene que ver con sexo (50%), con
comida (25%) y hacer algo juntos (25%). Para las mujeres el
romanticismoo erel resultado de pasar juntos momentos
agradables.
La esposa se siente tratada con romanticismo cuando su esposo
hace cualquier cosa que demuestre que se interesa por ella y que
piensa en ella; especialmente llamadas telefónicas o notas,
sorpresas, algo fuera de lo común y de lo cotidiano, conversar con
ella sin distraerse, cuando la abraza y la besa todas las mañanas.

El romanticismo es el puente entre el amor y el sexo. Por lo tanto


cuando no se satisface la necesidad del romanticismo de la mujer,
le resulta difícil moverse y avanzar hacia lo sexual. Sin
romanticismo el sexo no es más que seducción.

El romanticismo es algo que haces para expresar el amor que


sientes. De qué manera lo logras? La clave es CONOCER A TU
ESPOSA, pues el romanticismo debe ser hecho a la medida de tu
esposa y de sus preferencias.

NECESIDADES SEXUALES DEL HOMBRE:

Mutua satisfacción.

1 Cor 7:3 y 5: “El marido cumpla con la mujer el deber


conyugal, y asimismo la mujer con el marido. La mujer no
tiene potestad sobre su propio cuerpo, sino el marido; ni
tampoco tiene el marido potestad sobre su propio cuerpo, sino
la mujer. No os neguéis el uno al otro, a no ser por algún
tiempo de mutuo consentimiento, para ocuparos
sosegadamente en la oración; y volved a juntaros en uno, para
que no os tiente Satanás a causa de vuestra incontinencia”.

Sí. El hombre necesita una descarga física. De hecho, no sólo la


desea, sino que realmente la necesita. La testosterona aumenta
en su sistema y necesita liberarla. Sí, es cierto, piensa mucho en
el sexo, pero Dios también lo creó con un fuerte deseo de necesitar
que su esposa disfrute de la experiencia tanto como él. Aunque el
comportamiento del hombre sugiera que siente que el sexo es todo
para él, en su interior desea desesperdamente satisfacer a su
esposa tanto como él quiere sentirse satisfecho. A eso se debe
que el hombre se sienta amenazado cuando piensa que su mujer
está insatisfecha con la vida sexual que tienen. El hombre se
siente varonil cuando puede complacer a su esposa. Casi la mitad
de la auto imagen del hombre está ligada a su sexualidad! Con
frecuencia se pregunta soy un buen amante? Soy competente? Lo
hago bien? Por eso cuando las mujeres le dicen que no al esposo,
están interfiriendo en sus emociones.

Conexión.

Para el hombre, la relación sexual forja la conexión, de la misma


manera que para la mujer lo hace conversar y ayudar con los
quehaceres domésticos. Nada hace que un hombre se sienta más
cerca de su esposa que el estar física y emocionalmente
conectados.

Cuáles son las cosas sencillas que una mujer puede hacer para
decir: eres importante para mi, o eres una prioridad o te amo?
Tocarle el brazo, rascarle la espalda, apretarle el brazo cuando
pasa cerca a él, acariciarlo con el pie o rozarse las rodillas debajo
de la mesa, tomarse de la mano, tocarle la rodilla cuando van en el
carro, buscar su mirada y sostenerla unos instantes, tirarle un beso.
Esas son poderosas formas como un hombre y una mujer se
conectan. Este tipo de conexión se da cuando la esposa busca
aprender qué es importante para su esposo: el trabajo, los
deportes, sus opiniones, sus emociones escondidas.

Cuando una mujer se conecta con su esposo de estas maneras,


no sólo le demuestra el valor que ella le da a la relación, sino
cuánto lo valora a él.

Sus esposos se sentirán honrados, valorados y atraídos cuando


ustedes hagan el intento de conectarse o cuando responden a sus
insinuaciones.

Receptividad.

Cuando una mujer responde a la necesidad sexual del hombre, el


se siente amado. Cuando una mujer rehúsa una propuesta sexual,
su esposo se siente emocionalmente rechazado y en el fondo los
hombres son susceptibles, se sienten heridos por las miradas de
desdén, los intentos con desgano y las quejas de su mujer.
Algunas mujeres parecen no darse cuenta que evitar el sexo o no
mostrarse receptiva afectará al matrimonio en su totalidad, de la
manera más negativa.

Un esposo sexualmente satisfecho hará cualquier cosa por su


esposa, se siente valorado y actúa en consecuencia.

Responder a los avances sexuales de tu esposo, construirá su


confianza sexual y lo volverá más tierno y atento. Se convertirá en
un amante más seguro que te complacerá de maneras más
maduras y apropiadas.

¿Qué sucede cuando las necesidades sexuales del hombre no


son satisfechas?

− Podría distanciarse sexual y emocionalmente. Siente que él


es un fracaso. Cuando el rechazo se repite, él se cierra.

− Podría resentirse y enojarse. Su enojo puede ser pasivo-


agresivo: no coopera, no escucha, evita el contacto, o llega
tarde a la casa sin haber llamado antes. O, quizás, su enojo
se exprese en forma de crítica o de comentarios duros.

− Podría volverse vulnerable a la tentación sexual. Aunque el


esposo es responsable de ser fiel y mantener los límites
sexuales, el comportamiento de la esposa contribuye a su
vulnerabilidad ante la tentación. Como esposa tienes una
gran influencia en la vida sexual de tu esposo. Cuando te
comprometes a involucrarte plenamente con el antes, durante
y después de la relación sexual, lo ayudas a mantenerse
completamente concentrado en ti.

Iniciativa Sexual.

Al hombre le gusta la espontaneidad. Cuando la mujer toma la


iniciativa, se da cuenta de que ella le importan sus necesidades,
que lo ama y que piensa en él, le permite descansar de la tarea de
ser el siempre tiene que hacerlo, librarse del temor a la falta de
reciprocidad y disfrutar de un encuentro sexual espontáneo.

Reconocimiento.

Si la mujer quiere que su esposo sea todo lo que Dios quiere que
sea, tiene que valorarlo de todas las maneras posibles.

La autoestima del hombre a menudo es frágil, especialmente en el


área del sexo. El necesita que su esposa – más que nadie-
confirme su masculinidad.

Si su mujer no lo hace, ¿quién lo hará? Cualquiera puede aprobar


sus cualidades laborales, su intelectualidad o su habilidad para los
deportes. Pero solamente su esposa debe reconocer la parte más
sensible, profunda, vulnerable e íntima de un hombre. Sólo su
esposa debe darle el reconocimiento sexual. La esposa es la única
persona que está lo suficientemente cerca de su esposo como para
levantarlo o derribarlo.

La mujer del libro Cantares del Antiguo Testamento comprendió la


importancia del reconocimiento.

Cantares 1:16, 2:3: “He aquí que tú eres hermoso, amado mío,
y dulce; nuestro lecho es de flores....

...Como el manzano entre los árboles silvestres, así es mi


amado entre los jóvenes; bajo la sombra del deseado me
senté, y su fruto fue dulce a mi paladar”.

Como lo que sigue es el desarrollo de una especie de taller sobre


el deleite de CONOCER nuestro cónyuge, es bueno recordar
algunas reglas que Dios nos da al respecto para que la edificación
de hoy se centre no en sentimientos ni en palabrería de hombres
sino que sea producto de la guianza del Espíritu.

Las relaciones sexuales deben ser un deleite:

Génesis 18:12: “Se rió, pues, Sara entre sí, diciendo:


¿Después que he envejecido tendré deleite, siendo también mi
señor ya viejo?”

Proverbios 5: 18-19: “Sea bendito tu manantial, y alégrate con


la mujer de tu juventud, como cierva amada y graciosa gacela.
Sus caricias te satisfagan en todo tiempo, y en su amor
recréate siempre”.

Cantares 7: 10-13: “Yo soy de mi amado, y conmigo tiene su


contentamiento. Ven, oh amado mío, salgamos al campo,
moremos en las aldeas. Levantémonos de mañana a las viñas;
veamos si brotan las vides, si están en cierne, si han florecido
los granados; allí te daré mis amores. Las mandrágoras han
dado olor, y a nuestras puertas hay toda suerte de dulces
frutas, nuevas y añejas, que para ti, oh amado mío, he
guardado”.

Ambos cónyuges se pertenecen el uno al otro:

1 Corintios 7: 1-5: “En cuanto a las cosas de que me


escribisteis, bueno le sería al hombre no tocar mujer; pero a
causa de las fornicaciones, cada uno tenga su propia mujer, y
cada una tenga su propio marido. El marido cumpla con la
mujer el deber conyugal, y asimismo la mujer con el marido.
La mujer no tiene potestad sobre su propio cuerpo, sino el
marido; ni tampoco tiene el marido potestad sobre su propio
cuerpo, sino la mujer. No os neguéis el uno al otro, a no ser
por algún tiempo de mutuo consentimiento, para ocuparos
sosegadamente en la oración; y volved a juntaros en uno, para
que no os tiente Satanás a causa de vuestra incontinencia”.

El sometimiento mutuo y el amor:

Efesios 5: 21-29: “Someteos unos a otros en el temor de Dios.


Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al
Señor; porque el marido es cabeza de la mujer, así como
Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su
Salvador. Así que, como la iglesia está sujeta a Cristo, así
también las casadas lo estén a sus maridos en todo. Maridos,
amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y
se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, habiéndola
purificado en el lavamiento del agua por la palabra, a fin de
presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese
mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y
sin mancha. Así también los maridos deben amar a sus
mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer,
a sí mismo se ama. Porque nadie aborreció jamás a su propia
carne, sino que la sustenta y la cuida, como también Cristo a
la iglesia...”

La fidelidad:

Hebreos 13: 4: “Honroso sea en todos el matrimonio, y el


lecho sin mancilla; pero a los fornicarios y a los adúlteros los
juzgará Dios”.

La santidad de la relación:

1 Tesalonicenses 4: 1-8: Por lo demás, hermanos, os


rogamos y exhortamos en el Señor Jesús, que de la manera
que aprendisteis de nosotros cómo os conviene conduciros y
agradar a Dios, así abundéis más y más. Porque ya sabéis
qué instrucciones os dimos por el Señor Jesús; pues la
voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de
fornicación; que cada uno de vosotros sepa tener su propia
esposa en santidad y honor; no en pasión de concupiscencia,
como los gentiles que no conocen a Dios; que ninguno agravie
ni engañe en nada a su hermano; porque el Señor es
vengador de todo esto, como ya os hemos dicho y testificado.
Pues no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a
santificación. Así que, el que desecha esto, no desecha a
hombre, sino a Dios, que también nos dio su Espíritu Santo”.

Deje a Dios todos sus problemas maritales:

Efesios 4: 6: “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas


vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego,
con acción de gracias”.
EJERCICIO

Oren juntos para que Dios muestre a sus corazones cómo responder este cuestionario.
Luego, responda cada uno este cuestionario y entréguelo después a su Cónyuge. NO
CONTROVIERTA LAS RESPUESTAS DEL OTRO, simplemente acéptelas y pida a Dios
que dónde ha abundado el pecado ahora sobreabunde la gracia (Romanos 5:20).

Qué me agrada de nuestras relaciones sexuales?

Qué no me agrada de nuestras relaciones sexuales?

Qué impedimento tengo para tener una buena relación sexual?

Necesita cambios nuestra vida sexual? Cuáles?

Hay una buena comunicación entre los dos acerca de nuestras relaciones sexuales?

Qué puedes hacer para satisfacer mis necesidades sexuales más plenamente?

Estoy conforme con tu proceder sexual?

Me agrada la frecuencia y la calidad de nuestra relación sexual?

Soy egoísta durante nuestra relación amorosa?

Hay cosas que haces durante el juego amoroso que no me gustan?

Existen técnicas que me gustaría que empleases para complacerme más?

Raras veces pienso en tus necesidades personales?

Raras veces pienso en como ser un (a) enamorado(a) con espíritu creador?

Raras veces inicio las relaciones sexuales?


Prefiero pasar la mayor parte del tiempo solo(a)?

Quiero que hablemos antes de empezar?

Si tuviera que comenzar de nuevo preferiría no tener hijos?

Me molestan tus exigencias sexuales?

Me molesta que te satisfagas sexualmente?

Me molesta que no me satisfagas sexualmente?

Raras veces te escribo notas de amor?

Raras veces te digo cuanto te amo?

Me molesta que tengas que dedicarle cuidados a nuestros hijos cuando yo quiero pasar
un rato contigo en intimidad?

El problema para tener buenas relaciones sexuales con mi cónyuge radica en mi área
espiritual?

El problema para tener buenas relaciones sexuales con mi cónyuge radica en mi área
emocional?

Creo que lo más conveniente para resolver nuestros problemas en el área sexual es
buscar asesoría? De qué tipo?

Me comprometo a hablar mucho de este tema sexual con mi cónyuge y encontrar las
soluciones que nos hace falta?

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