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el cuento
Vamos-
Le contesté cuando me propuso doblar por Montes de Oca. Teníamos una
larga caminata porque esperar el colectivo ahí con toda esa gente, era una
ridiculez.
No había partido, así que el tema obligado, iba a ser el proyecto. Maldito
proyecto.
Que cagada “pensé”. Como algo tan maravilloso para los dos, se puede
convertir en algo tan desagradable, por la cantidad de historias sin resolver
que no nos dejan vivirlo en libertad.
Traté de tirar la mano hacia otra cosa en común para zafar.
-Que te pareció el fax que le mandé a La Nación?-
-Leí solo el encabezado y un poco más. Estoy tan metido en tantas cosas,
que no puedo distraerme en nada más-
Distraído-
Estas Sordoooo!!!!
Como mierda hay que hacer para comunicarse con vos.
Hola. Hola. Hay alguien ahí.
Ese fax es para vos también reboludo. Vos me hiciste ver la parte mía que
yo no veía.
Mirate. Reconocete. No te lo pierdas. Leelo. Es TU Sol. Tomá. Leelo.-
pensaba
Fernando Ferrari
DNI 12.791.004
cheferrari@uol.com.ar
44 años
Chef
Abanderado desde primero inferior
Casado por amor con la Arquitecta Sandra Mendez Mosquera
Feliz padre de dos hijas que concurren a las escuelas orgullosamente
patriotas “Escuela del Sol” y Escuela “AEDIN” (“donde todos los días
pintamos un sol”).
Socio Fundador de la Asociación de Padres de Infantes Discapacitados
Neurológicos.
Hijo de Alberto Esteban Ferrari. Destacado atleta pedestre nacional.
Artista. Libre pensador. Abogado y Periodista, y de Amelia Blaser Midleton
india tucumana surgida por propia voluntad rebelde y divina, de adentro de
la más pura sangre inglesa.
Patriota argentino, pa servirlo.
Tomá-
Leelo –(se me escapó)
Que? –me preguntó Edu
Te devuelvo las pasas. ----- Dios. Como me gustaría que me de un poco de
bola.
Como puedo hacer para que algún día se avive que ya cumplí cinco años.
Lo más cómico que el está convencido de que sabe todo de mi y que yo soy
el que no le da bola. El que no lo escucha. Cualquiera pensaría que somos
hermanos.
Hablamos de mis hijas Flora y Ada y nos reímos machos y machistas
cuando le conté la anécdota de la maestra de Ada, que me pedía disculpas
porque en el video no había salido la respuesta que Ada hace a la
estimulación de la Musicoterapeuta.
Me decía. Es una lástima que no haya salido. Pero cuando ella le canta Ada
le responde. Se lo juro. Ella le hace silencios y Ada le responde. Es
maravilloso.
No importa. No te preocupes le decía yo. Aunque…. porque no pasás atrás
un poco el video.
Ves. Ahí le está respondiendo. No hay sonido pero la respuesta es
evidente.
Ella la vio y los tres nosotros dos y Flora nos divertimos viendo como Ada
contestaba a la maestra en su idioma. Cantaba esa vez en el silencio.
En ese momento pensé. Hasta ausente y desde un video no deja de
enseñarnos cosas.
Mi hermano agregó cómico –claro no habrá dado el Do preciso, burlándose
de la exigencia.
Yo lo dejé, aunque sabía que era una broma fuera del tarro. De esas que
uno dice porque el que uno carga no puede escuchar.
Esas bromas que uno vaya a saber porque se permite decir solo de seres de
los que nunca querría burlarse y mucho menos decir lo que uno está
diciendo.
Y sobre el pucho me contó la anécdota del Monseñor que el otro día le
contaba un chiste verde:
Un hincha de Boca le dice al otro: porque traes a tu mujer a la cancha si
sabés que la van a manosear toda. Porque si la dejo en casa me la cogen.
Que me la cogen –reía – el monseñor. Ja. Que hijo de Puta.
Pero es cierto, cuando los flacos se van en la villa se las cogen a la mujer y
a las hijas y ellas no dicen nada. Que van a decir. Mejor traerlas a la
cancha.
- Viste el flaco que me pusieron adelante?—
- El de los tatuajes?
- Las estaba manoseando a las dos minitas al lado mío—
Hoy es el cumpleaños de Sábato – continuó ametrallando mi hermanito.
Que lindo. Pensar en Sábato me trajo la imagen de él y de su perro en la
cocina.
Y junto con ellos el olor de mi papá y sus bigotes. Su tapado de James
Smart. La gorra Kangol que le traje de Europa y el poncho Catamarqueño
que usaba sobre los hombros y empecé a sentir un calorcito lindo en el
pecho y en los hombros. Apreté los brazos contra el cuerpo y de esa
manera le apreté los brazos a los dos maestros que llevaba a cada lado.
En el cielo había una luminosidad espectacular. El atardecer nos ofrecía un
verdadero Show. Si no hubiera estado tan distraído me hubiera dado
cuenta que hasta hace unos instantes nos estábamos mojando hasta las
bolas.
Por lo tanto, la salida del sol era más que sorprendente, y por supuesto
sobre nuestras cabezas había un arco iris increíble que me tuve que
imaginar al día siguiente cuando mi mujer me lo contó.
Llegamos al Ministerio de Agricultura y no hubo necesidad que pasáramos
debajo de la oficina de Papá para que nos invitáramos y nos aceptáramos
subir la barranca hacia el bar.
Otra vez.
Miré de reojo la estatua de los trabajadores y me hizo acordar el dibujo de
la tapa de “La resistencia”. De Sabato. Como me gustaría leer ese libro.
Necesito leerlo.
En el camino Edu me mostró los cartelones de Much Music y me dijo que
eso era lo que el quería. Que no quería carteles pintados ni pegados para
respetar el patrimonio del barrio.
Yo miré los cuatro “Carlitos” como diría Pablito Oyuela, empezando por
Charly y los encontré curiosa y parecidamente tatuados y desnudos de torso
como el extraterrestre de la cancha. No entendí el tatuaje de Charly hasta
que me acordé.
S N M. Say No More. Lindo mensaje. Lástima. El no no existe Charly. No
more es… More. Pero vale en intento Aunque sea para que el título con
letras rojas nos vuelva a la memoria. Para los que no queremos ni quisimos
nunca ver. Para verlo. Para imaginar. Pero. Eso es lo que hay que
imaginar? Imagina Charly. Imagina. Beautiful. Beautiful. Beautiful. Little
Charly. Imagina.
Pero de todas maneras somos libres. Incluso del no. Del dame más y del
decir y decir sea lo que sea que digamos. En esa parte me pegas. Somos
libres.
Antes y después del garrote somos libres. Y el medio es todo. El medio es
hoy.
Y ahora. Dame más. Muy lejos del sol. Que quema de amor.
Sabés de qué me estoy acordando Edu? fumar da sensación de libertad.
- Porque?
Porque nos identificamos con lo que entra y con lo que sale como propio y
nuestro Ego “vuela” con el humo fuera de nosotros.
Como no es de color marrón y porque en vez del culo sale por la boca, no
nos damos cuenta que es la mierda que no sirve que estamos eliminando.
Que tal. Te gustó? Entregá el marrón. Me salió de título.
Entramos al bar y nos sentamos en una mesa diferente para cambiar un
poco.
Yo le conté mi anécdota de la Esuela de vida y el se fue a mear en el medio
de la historia y cuando volvió me dijo que el gallego ya se la había contado.
Para que me dejaste contarla pensé –pero salí airoso ampliando la historia.
Sabés que increíble –Cuando volvíamos a la Escuela de Vida eufóricos de
nuestro triunfo me di cuenta que la gorda había visto otra película.
Para ella yo había comenzado a bailar como un vanidoso y ridículo idiota y
ella me salvó tapándome con lo único que valía la pena.
-No la vio. La gorda no la vio. –Le disparó Edu.
-No Eduardo, es que ella vivió otra película. Y estoy seguro que cada uno
de los que estuvimos ahí, incluso los que no eran del grupo pero se hicieron
protagonistas después vivieron también otra película—
--si yo no la hubiera escuchado a la gorda no me hubiera dado cuenta de
esto –podemos estar los dos juntos en la misma historia, pero cada uno de
nosotros vive una película diferente.
Apenas dije esto el maestro me empezó a proyectar la película que yo no
había visto:
Todo lo que había contado era cierto. Quizás no era exacto como el lo
contaba. Quizás todo era una maniobra para dejar pasar a la barra brava,
que no tenía más entradas y ya les había cagado el campeonato de un
bombazo.
Quizás era exactamente como edu lo contaba. Quizás era todo cierto.
El pendejo tatuado había bajado especialmente de la barra para manotear
alas minas, y Eduardo se lo había impedido con esos movimientos locos.
La mina que había palmeado en la mano y se habían mirado, era una de las
dos minitas que el había defendido.
El no había visto mi película de maestro general de pasas de uva yo no
había visto la suya de Caballero oxidado de la armadura azul y oro.
Estábamos ciegos uno al otro. Teníamos que prender la luz.
La gorda la tenía clara. Ella laburaba con los tipos que viven la realidad.
Ella estaba en el frente de batalla.
Las villas no son una excepción, esa avenida Abbey Road argentina que
limita la cancha de San Lorenzo con la villa del Bajo Flores es una ridícula
ilusión.
Nosotros inventamos los límites que no existen, para vivir sin darnos
cuenta.
Los políticos, los empresarios y los que manejan el poder lo saben.
Por lo menos los que no se la creen. Ahí es donde van a buscar a los
Maradonas A los gladiadores. A los que solo saben ganar siempre, porque
no tienen nada que perder. De ahí es donde nace todo. Ahí. En las villas
están los líderes que hacen el país. Ellos los buscan temprano de chiquitos
y les compran su libertad. Todos son cómplices. Incluso los que piensan
que está mal. Porque saben que son todos indios y que la ley es de los
romanos. de los abogaditos. De los que copiaron el derecho Romano uno y
el derecho romano dos, sin darse cuenta que los romanos lo copiaron de los
griegos y que los griegos lo inventaron para formar la República.
El derecho romano es muy lindo pero es SOLO para los romanos. Fue solo
un intento de la humanidad. Un try. Los pueblos invadidos no tenían sus
derechos.
Hace dos mil años que jesús les marcó la decadencia y hace miles que
tenemos repúblicas, pero todavía todavía no tenemos LA REPUBLICA.
Los indios se equivocaron una vez. En los setenta. Se levantaron del sueño
y dejaron de ser Toro Sentado. Se juntaron con los mestizos que viajaron
con sus gremios a las villas. Se juntaron con los blancos que bajaron con
su arte POPular a las villas. Casi forman el hombre nuevo. Juntos. Parecía
cierto en ese entonces. Parecía que estaba viniendo el SOL.
Pero cada uno cometió un error. Los indios entregaron su poder a los
mestizos. Los mestizos usaron el poder para ser blancos. Los blancos
dispararon contra los blancomóviles y se volvieron a quedar con el poder.
Habían creado un objetivo. Un blanco donde atacar. Un objetivo y un
motivo de violencia. Truco. Retruco.
La acción de ataque había generado la respuesta.
La guerra estaba perdida antes de empezar y por un solo motivo: era una
guerra y en la guerra nadie gana. Nadie. Mucho menos los que tienen
poder.
Hoy terminó la guerra no guerra, pero no hay paz. Los indios capitularon y
están en sus reservas esperando. Sentados nuevamente. No importa cual
es el romano que los va a sacar afuera.
Ni como ni cuando. Lo importante es que hay que salir afuera. Hay que
romper ese ridículo límite de la avenida abbey road aunque sea para ir al
estadio de San Lorenzo. Hay que salir del pozo. Algunos lo hacen.
Algunos cuando salen del pozo les hacen el corte de manga y se cortan
solos sin ni gracias.
Otros siguen adelante y cada vez se ponen más gordos y pesados. De ahí
salen todos. Los canas y los ladrones. Los alumnos y los maestros. Los
genios y los idiotas. Los próceres y los dictadores. Los vivos y los muertos.
Los protagonistas. Todos.
Ahí no hay reglas. Ahí es donde se HACEN las reglas.
Adonde te crees que está la droga? en Libertador y Alvear? En la quinta de
Olivos?.
Adonde la guardan: en el Banco? La tienen en las villas. La guita está en
las villas. El poder está en las villas.
Todo está en las villas.
Todo no. Me dijo el maestro.
Me pasás esta película y después me corregís? le protesté.
Yo no te pasé ninguna película. Solo te encendí un rato el proyector que
entre paréntesis es tuyo. Hacete cargo.
Turro. Es más. Turra! Te crees que no me di cuenta que sos una maestra.
Eso de que en el cielo no hay sexo es cháchara. No me respondas ni ay.
Ay –dijo la muy turrita.
Aflojá Edu –encaré directo, claro y sintético al objetivo a lograr.
Aflojá el mambo—
El territorio de la doce es de ellos, lo que pasa por la tribuna es marihuana.
Me molesta menos que el tipo que me fumaba un porro en la nuca. Es más,
me encanta el olor. Y vos mismo dijiste el chiste del bostero que lleva sus
mujeres a la cancha.
La pesada no pasa por ahí. Quizás ahí se hagan contactos para otros
movimientos más pesados. Quizás pasen un poco para “sembrar y después
cosechar” eso nada más. No me parece para nada que la droga pase por la
doce mientras estamos cantando Edu.
Para mí es importante lo del espacio, porque lo que sirve es no darles el
espacio. Mi lema es “hay mucha, pero mucha gente, que todavía necesita
de la droga y la violencia. Démosle el tiempo. Pero pidámosle de vuelta
nuestro espacio”.
La campaña drogas NO debe estar bancada por la droga. El NO no existe.
Es pura publicidad para la droga.
El lema es Drogas SI. Al fondo a la derecha.
Al fondo a la derecha se tiene que ir Diego del proyecto --se enchufó la
bestia metiéndome en el proyecto del bistrot—
Se cambió el nombre Diego. Ahora es Diego Sol en vez de Solsona.
Me parece algo positivo Edu. Como no te das cuenta VOS que le pusiste Sol
a este proyecto. El también tiene la oportunidad de limpiar. Su historia y
la de su viejo.
Incluso la de su viejo está enganchada con la del nuestro a través del éxito.
Y por lo tanto con la nuestra.
La del éxito y la del fracaso La de ganar y perder. La de transar. La de
David y Goliat. La de dar Sentido.
Te acordás cuando le mostraste las medallas de Papi en aquella mesa de
allá en este mismo , y la foto de la carrera donde ganó el ORO para
Argentina?
Te acordás que yo saqué la foto abanderado de la delegación en Lima, la
nota de La Razón y mi foto de abanderado de primero inferior?
Ese es el tema que pusimos en el proyecto.
El éxito y el fracaso. El modo de lograrlo y no lograrlo. El costo.
Nosotros queremos jugar en primera. Somos don nadie hijos de don nadie
absolutamente desconocidos con justicia, y queremos jugar en primera.
Queremos salir de la nada y ganar el mundo.
Queremos repetir la historia de Papi que se dividió de su familia rica por
cagadora. Que dejó de ir a los campos donde le decían que esos potrillos
eran “para vos albertito”. Que dejó la calle posadas y se llevó a su familia a
La Plata gritando “mi familia empieza en mí”. A comer sopita con hueso
cuando hay suerte.
Solo a ganar porque no tenía nada que perder.
Ahí le sacó la media cuadra en 100 metros al pendejo de la escuela que lo
jodía “ché ferrari, no me podés ganar. Yo me entreno todo el año para
esto”
El pibe perdió la carrera pero cuando se compuso de la sorpresa ganó un
compañero de corridas.
Lo llevó a Estudiantes (a pesar del amor del viejo por el Lobo) y en un año
ganó 19 de 20 carreras.
Ya sé. La única que salió segundo para vos es pérdida.
Para mí y para el periodista que le hizo la nota es un milagro.
Se cortó solo y terminó hasta con la celeste y blanca.
En un Panamericano y no fue a las Olimpiadas porque el puto de Perón no
las considero suficientemente “para el pueblo”.
Nosotros queremos decir me cago en todos, no soy ninguno, no quiero
ganarle a nadie, no tengo nada, no tengo un mango partido por la mitad, no
hice nada para merecer nada, no vengo de ninguna parte, pero voy a salir
primero igual.
Del barrio, de la ciudad, del país y del mudo. Y sin tranzar.
El éxito y el fracaso. El costo. El sentido. A todo o nada. Rien ne vas plus.
Ese es el tema de diego también, es más. Está en el medio de su peor
fracaso, en la punta del Titanic por hundirse, sin amor ni música de fondo y
pensando en como salar a sus hijas.
El lo ve. Es un vidente. No puede dejar de verlo.
Pero el tema no es solo de él, es también del viejo.
Viste que diego habla en lenguaje de barcos y hace esculturas de barcos y
parece más un marino que un arquitecto?
Dice siempre estoy “llegando” a buen puerto. Me quieren hundir. Voy
viento en popa. Tengo que anclar mis barcos en alguna galería o en un
puerto intermedio.
Hay que buscar el norte. Es un pirata para ser más precisos. O un pirata
inglés para no dejar lugar a dudas.
--es un pirata. Lo sé— trató de ametrallar Eduardo, pero despacito, porque
ya sabía que yo estaba uniendo.
Todos hablamos solo de nosotros mismos Edu. Incluso cuando hablamos de
otros hablamos de nosotros mismos. Y nosotros somos nosotros y nuestros
padres, nuestros hijos y una multitud de nosotros que viven dentro nuestro.
Sabés. El día que hice la hoja del proyecto donde armé el collage de ideas,
gráficos y frases que representan a cada uno de los socios, usé un esquema
de tres partes.
Arriba a la izquierda, todas las frases que sintéticamente dicen quienes
verdaderamente somos. a la derecha, todos los dibujos que representan el
momento actual donde estamos.
y abajo un collage de fotos que representan la historia y el significado de
nuestras vidas.
No creo que le podamos mostrar esto a los inversores, pero te aseguro que
salieron cosas maravillosas.
En la parte del collage de Diego preferí no poner fotos. Hice una trama de
computación como la que se ve en la visión de la película Matrix y la cerré
así.
Al otro día me pareció un poco vacía, y se me ocurrió buscar en los libros
que tenía en casa alguna frase o texto para repetirla siempre como fondo
en vez de los ceros y unos.
La idea era que si alguien lo leyera, leyera palabras o frases que reflejaban
la identidad de Diego.
En la biblioteca de mi casa, entre los libros de Sandra, encontré un libro de
cuentos que ni siquiera sabía que existía:
Letrógrafo. Autor: Jujo Solzona. A la sazón arquitecto exitoso y padre de
un maravilloso hijo que está por perder hasta lo que no es de él y no
precisamente por propia voluntad. Bingo.
Ya la introducción que justifica el motivo del título me impresionó.
Viendo la letra excelente del padre o del tío arquitecto, en los planos. Este
chiquitín don Jujo, posteriormente uno de los más grandes arquitectos
argentinos, decidió no seguir nunca arquitectura y por suerte dijo el porqué:
Porque nunca iba a poder tener, ni cerca, una letra como tienen los
arquitectos.
El comprensivo pariente le dijo que no se preocupe, que se habían
inventado unos artefactos para que las letras sean prolijas, así que no iba a
tener ningún problema: El artefacto era la bien conocida plantilla que todos
usamos en la Facu: “el Letrógrafo”, que da título al libro y que es la ayuda
que permitió a uno de los mejores arquitectos argentinos dar el primer paso
hacia el éxito.
Linda historia. Llamativamente cercana al tema del éxito y el fracaso,.
Al como. Al miedo. A la confianza. Pero no al porque. Ni el para que.
Pero no al sentido.
Pero no con palabras o ideas de Diego.
La primer frase que leí, en el primer cuento del primer libro de cuentos de
su padre me puso piel de gallina. Leé.
“Debo describir primero las flotas, los barcos, los torpederos de apoyo,
los acorazados de lata, una enormidad de botecitos de madera, con vela de
papel y mitades de cáscaras de nuez con un cañón cada una. Que dijo que
eran? Lanchas, lanchas de desembarco. Una verdadera villa miseria
del mar. Los fue disponiendo cuidadosamente en el patio de la portería.
Al fondo, sus dos acorazados de lata, lejos del alcance del bolón de cristal:
por delante, un mundo de barcos de fantasía. Cada uno podía tirar un tiro,
un golpe de bolón por cada cañón que tenía su flota. Porque acepté este
juego? Para mi cumpleaños me habían regalado dos grandes barcos,
réplicas del acorazado inglés Nelson y del crucero de batalla Hood de la
Armada Británica, pintados de gris, con la línea de flotación marcada en
gris oscuro, cargados de cañones con baterías giratorias, torre de comando,
baterías laterales, chimeneas, pantallas de radar. Dos barcos sólidos,
pesados, que se desplazaban lentamente por el mar, sobre ruedas ocultas
debajo de sus cascos. Dos barcos hermosos. Jugaba siempre con Pepe.
Mis padres hacía ya varios años que vivían en esos pisos de la calle
Victoria, donde su padre era portero. Éramos amigos, con esa amistad de
chicos solos, reconcentrados en sus fantasías y en sus juguetes. Nos
reuníamos casi todos los días después de la hora de los deberes. Fue él
quien dijo: --Hagamos una batalla naval, vos con tus dos barcos y yo con
mi flota; tiramos con el bolón de vidrio tantos tiros como cañones tenemos,
avanzamos cuatro dedos por cada tiro que dé en el blanco. Vamos, dale!
Miré mis barcos como quien mira sus barcos de riña preferidos, los vi
seguros, grandes, y pensé:
“Pepe está loco, con solo dos acorazados de lata”.
--Bueno, mañana bajo al patio y jugamos….
Que decís… Los dioses? Que dioses, Apolo? yo tengo un Zeus. Hermes? no
me convence, me quedo con Mercurio. Plata, mujeres, alcohol, ok, acepto
ahora son mías y no te queda nada que ofrecer. Vamos. Vamos que me
aburro.
Ave Cesar. Morituri ti salutan.
Permiso dijo el petiso.
Yo vengo a ofrecer mi Amorazón. Disculpe don, de eso tenemos Afrodita,
este….
--no pero mire que es otra cosa—
--no me venga con versos, no me haga perder tiempo, vaya buen hombre
que no lo reviento porque somos cien y usted es uno solo y me dá lástima.
Rey de donde me dijo? Ah Ahora entiendo. Si que usted mismo es Dios.
Ahhh Si si.
No. Como? el hijo del hombre. Aahh Muy interesante. Muy interesante.
Por belenos, tutatis, Obelix mirá los locos que me traen --nex pasem
rompe bolus.
Vuelva mañana.
--Mire Don Poncio le traje algo que ustedes no tienen.
--otra vez el mismo loco—
--Usted no entiende lo que roma no tiene lo hace romano, es imposible que
exista lo que me ofrece—
--entiendo—le dijo el maestro irónica belicosa y decididamente tomándole el
pelo.
--pero hay personas que no son romanos y no tienen todo eso—
--así es pero como usted bien lo dijo, no son romanos. Y no veo para que
querríamos que fueran romanos y que tengan solo eso—
--para ser felices, por ejemplo—
--ellos o nosotros?
--Ambos—
--Nosotros somos felices—
--A si? y no les falta nada? No sufren, no tienen dolor de panza, no se
angustian, no lloran, no los violan, no los asesinan?
--buen intento. Loco. Absurdo. Pero buen intento. Les curramos todo.
No tienen nada para darnos, pero vaya a saber porque mágico misterio, sin
ellos no podemos ser felices. Y Además Esta situación vendría a ser algo así
como la causa de todos los males.
Si fuera cierto podría ser una oferta tentadora. Al menos por miedo, para
salir de este conjuro de la infelicidad.
Pero sabe una cosa: yo he visto dentro de los romanos más de uno
bastante feliz. Incluso alguno que otro desbordado de felicidad. Se lo
puedo asegurar. Por lo tanto usted me va a perdonar y va a pensar que me
estoy lavando las manos, pero no puedo ofrecer su propuesta porque nadie
me va a creer y además a nadie le interesa. Gracias por su tiempo eh.
Siga participando.
Como me dijo que se llamaba.
Pilatos.
Déjeme anotar su nombre, usted me va a ser útil para otra trabajito.
-El asuntito es así. Y preste atención que es la última oferta.
Ustedes tienen todo y no hay nada que nadie les pueda ofrecer, no es
cierto?
Así es.
Si hubiera algo diferente a lo que ustedes tienen y si ese algo ustedes no lo
pudieran tener, habría algo afuera de roma y roma no sería más todo?
Me está confundiendo un poco sobre todo que le repito que cada romano es
roma y roma es todo, así que no me confunda.
--no es mi intención, sino todo lo contrario—
Yo les ofrezco el remedio contra la pobreza, el dolor, la enfermedad, el
sufrimiento, el miedo, la injusticia y todos los males de la tierra.
--otra medicina--
--No otra. La única medicina—
--La UNICA
--La verdad… me está tentando—
--no precisamente, sino todo lo contrario—
--y cual es esa fórmula milagrosa. Aunque debo advertirle que si me la da
va a ser mía y si es mía es de los romanos y si es de los:….
--callate—
--Por favor --se endulzó un poco.
El remedio es el perdón.
--Pará. Pará. Che burocraticus, andá a buscarme en el registro de dioses
currados cual es el nombre afanado de….
Como me dijo?
--Perdón
--Pedrus perdón dice acá el hombre. Vamos a tener que esperar un poco
porque todavía no se inventaron las computadoras usted sabe.
--ni los virus
--bueno algo de eso hay—
--por primera vez quizás tenga razón, pero sabe que? yo estoy un poco
apurado porque dejé la cruz mal estacionada. De todas maneras no lo va a
encontrar. No hay ningún dios del perdón. Es un cero kilómetro. El perdón
es justo lo que yo vine a traer.
Digamos que es precisamente el motivo de mi entrevista.
--Bueno, por las dudas que me decida a comentarle al Cesar. Cual sería el
precio de este como dijo…
--perdón—
--Le parece que roma estará interesada en su propuesta?—
--Yo creo que si, de todas maneras hay tiempo y no voy a ser yo quien se
los enseñe.
--Aha. Y quien va a ser—
--Los cristianos. Los que van a enseñar en las plazas, entre los leones.
Cuando nadie entienda quien es el león, ni el cristiano, ni el romano, ni
roma, ni nada, y se les vaya todo el imperio al carajo.
--Esos vendrían a ser también dioses.
--No. Esos vendían a ser más bien seres humanos. Individuos. Algo así
como los legionarios. Pero sin roma. Usted me entiende una roma sin
romanos.
--entiendo—le contestó sin entender el romano
--permítame insistir, por si me decido a algo… Pedrus encontraste algo!!!!??
Le decía en el caso que me decidiera a algo.—
--Es usted bastante indeciso—
--Le parece? Lo que no quiero es equivocarme—
--Me imagino—
--Volvamos a lo nuestro, en el caso…--
--Hacela coarta que tengo solo tres años para escribir un libro para toda la
humanidad y no quiero que esta entreviste aparezca en la…..
¡!!!Aspetta giovanni. Vengo. Vengo. No caro non che niente di importante.
In questa intervista. No. Non scrivere. No. Non non scrivere non e una
parábola non scrivere sulserio. Ma va fan culo te e cuel pesato di pietro.
Nos poso pillare senza tenervi sotto I piedi Via. Andiamo!!!
vamos poncito decime que querés antes que vuelvan los escribas y
aparezcas en la holy historia.
--No se preocupe Don King. Lo que se habla acá queda entre nosotros.
Solo usted, yo y Charly García.
--Quien?
--El inconsciente colectivo.
--Papá los cría y ellos se juntan.
--Me preocupa que usted vino a traer el perdón y yo no lo estoy aceptando
—
--No te preocupes. Los que tienen que perdonar ahora no son los romanos
—
--A ustedes les va a caer servida dentro de unos 2000 y pico de años, la
puerta va a estar abierta. Lo que van a tener que decidir, es si pasar del
otro lado o no. Aunque ahora que lo pienso bien, quizás tengan que
perdonarse un poco a ustedes mismos. Pero en ese entonces toda la
humanidad va a haber aceptado el perdón, así que esa parte les va a ser
más fácil. Como si tuvieran que aprender algo que ya habían aprendido.
Como si un hermano tuyo supiera algo que vos no sabés. Entendés.
--No. Pero me quedo más tranquilo, porque a mi no me toca—
--Así parece. A vos nunca te toca—
Fernando Ferrari
cheferrari@uolmail.com.ar
PD. adjunto orden del médico del año 98, remarcando el texto donde el Dr.
detalla los dolores que en ese entonces producía la mala postura y que hoy
producen su ausentismo escolar, la copia de la primera entrevista en la
oficina de pediatría de Pami 4, y la fotocopia del recibo de sueldo.
Por último le adjunto el último pedido del Dr. el cual ofrece también la
alternativa de confeccionar solo la butaca por separado y adjuntarla (esto
no está expresado pero es obvio) a una silla de tipo Mac Laren, con un
ahorro considerable en el presupuesto económico.
Fernando Ferrari
cheferrari@uolmail.com.ar
Ves yo los puteo y los trato de idiotas, negligentes, Poncio Pilatos y mis
cosas más. Pero cuando me termino de descargar, primero borro lo que me
parece que no sirve, segundo agrego una disculpa cristiano o una
aparentemente contradictoria frase que descarta la posibilidad de un juicio
PERSONAL hacia los que personalmente acuso, y por último me aseguro de
ofrecerles una salida y que en lo posible esta salida sea lo que Ada necesita.
Sabés. En la orden con la que querían cerrar el expediente figura EN
MAYUSCULAS Y SUBRRAYADO la MARCA de los pañales. Es increíble.
El pié para mi primer apelación al trámite, fue justamente que el que me lo
rechazó, ni siquiera había leído el expediente. Y había creído que lo que yo
pedía era un CAMBIO DE MARCA.
Ahora hasta tengo la marca que quiero.
La salida de lo que te preocupa ya la tenés. Ya para esta fecha cambiaron
todo y no pasó nada.
Tenés razón, el lunes le presente una nota agradeciendo los cambios y que
Mauricio si quiere se ocupe de seguirla.
Claro. A parte que si la vuelven a hacer vos podés volver a quejarte
Como el truco.
Vamos?—
Vamos—dijimos para volver a pasear nuestro eterno camino hacia bethelem
y bajar por la calle de la Defensa.
Como que defensa. La primera, la única. La de siempre. La de las gordas
que le tiraban el aceite hirviendo a los de la Rata traicionera.
No era así como llamaba León Felipe a Inglaterra? No me acuerdo.
Las gordas con sus habanos en la boca, no eran todavía ni argentinas y ya
sabían donde golpear. Ya sabían cual era el eterno Goliat, perdido perdedor
abretonado.
Todavía los golpean. Algunas ya dejaron de fucking-fumar.
Cuando llegamos a la esquina de Amor & Cia, donde por supuesto el
obsesivo había estacionado el auto, ya estaba totalmente cansado y
agotado y podrido repodrido.
Me quería ir. Que no bombardeen Buenos Aires. Pero si lo hacen que sea
en este barrio que me tiene las pelotas llenas. Me quiero iiiir!
Y así seguimos esta vez derecho y diagonales después del obelisco como
caballo de vuelta al pago.
En automático sin dirigirnos la palabra.
Y antes de llegar a la nueve de julio ya estábamos en GEBA, donde Edu
acompañaba a Porta en su entrenamiento.
--Te conté lo de la despedida del Diego Edu?—
Le tengo preparada tres despedidas. La primera es en la bombonera.
Un Boca-River por el resto de los siglos. A todo o nada.
Pero no el boca actual. Un boca con todos los ex que están jugando afuera.
Batistuta, el Kiri, Verón, etc.
Y en River lo mismo, Ramón Díaz Ortega, y todo su equipazo más
Francescoli.
Los equipos los arman el Diego y el Príncipe y se juega sin técnico.
La segunda es en Napoli, con el equipo de veteranos del napoli campeón
contra un seleccionado de veteranos capitaneados por Platini.
Ahí entran Cruiff y Pelé.
La tercera es en Estados Unidos, Argentina contra Alemania y se llama “El
Bueno”.
Se la voy a contar a Cóppola.
Te conté que Cóppola lo conocí en “San Bábila”?.
Un día vino con Hernández, el secretario de Menem y yo le pedí que me
tirara una punta para la pensión de Ada que estaba parada (A él. No a
Hernández que no lo conozco).
En realidad a Cóppola lo conocí antes, cuando yo era el gerente
gastronómico de “Martín Carreras” y el venía seguido con Menem Junior y
nos hicimos bastante compinches.
El asunto es que se lo haya dicho o no, la pensión de Ada salió al mes y
mirá como se juntan las cosas.
Yo había empezado a salir de la cocina de San Bábila al salón, cuando le
llevé el primer sambayon a la mujer de Neustad y otro me vio y me pidió , y
una cosa llevo a la otra, hasta que terminé dirigiendo la cocina DESDE el
salón y ahí me hice amigo de toda la fauna que pasaba por San Bábila, que
son en lo cotidiano, mucho más simples de lo que la gente cree.
El que más me acuerdo, es el actor, este tano que ahora tiene un programa
de cocina. No me acuerdo el nombre, pero él y su mujer son la más de lo
más. Ranni. Rodolfo Ranni.
Me acordé.
Otro que me acuerdo, de el y su mujer, porque me da lástima, es el nueve
de boca que jugaba con Batistuta y se mandó la cagada de insultar a la 12
cuando jugaba en Racing.
Me acuerdo de el y de su novia.
Latorre.
Ese es un buen pibe, en una de esas el Diego lo pone en el banco de
suplentes y le da la oportunidad de resarcirse.
Pero la historia que se junta no es esa.
Un día le pedí a Federico si le podía dar una carta a Neustad pidiéndole un
favor y le pareció bien, así que cuando llegaron a cenar, les dí la carta y les
dije que era un mangazo y que la leyeran en casa cuando tuvieran tiempo.
Antes del primer plato me llamaron y me pidieron que les explicara de que
se trataba, así que les conté que estaba buscando una escuela para Ada y la
que me había parecido mejor era la Escuela AEDIN, de la cual había
escuchado que ellos estaban relacionados.
Me dijeron que no me preocupe, que ellos se iban a ocupar.
Esto fue un sábado a la noche y yo llegué como todos los sábados a las
cuatro de la matina.
A las siete suena el teléfono en casa.
--Señor Ferrari, le habla la secretaria de Victoria Rhom para comunicarle
que su hija tiene una beca en la Escuela AEDIN y que lo espera el lunes en
la escuela para ultimar los detalles.
El lunes cuando fui a la escuela Victoria me explicó, que el noventa por
ciento de sus alumnos son becados y el sesenta por ciento viven en villas
miserias, por lo tanto, no hacía falta ninguna cuña, pero de todas maneras:
Que lindo gesto el de Neustad No?
Y aquí cierran las dos historias. Maradona y Neustad se odian, pero están
unidos por la amistad y por un lazo indisoluble que es nada menos que Ada.
Que todavía hay gente que insiste en que está DIScapacitada, y ella mueve
el mundo a su alrededor.
Cuando llegamos a Muni, casi nos pasamos y esa vez fue la única vez que le
tuve que indicar a Eduardo que doble y seguimos así sin hablar cada uno en
la suya desde plaza de mayo hasta casa.
Chau –eso fue todo.
El me contestó con un gesto y tuve un flash. Es difícil explicar lo que es un
flash, pero es una especie de pensamiento intuición sin tiempo, donde en
tiempo presente, se te reproducen escenas, frases e ideas y entendés todo.
Yo vivo en una casa chorizo.
La casa del frente tiene una entrada aparte y las otras tres se comunican
por un pasillo exterior que da a cada uno de los patios de cada casa.
La primera casa es de Elena, la segunda es mía y la tengo alquilada para
que el alquiler me pague el crédito con que la compré. Para cuando me
pueda ampliar….
Algún día será.
Al fondo del pasillo en el corazón de la manzana, está mi casa que yo llamo
el paraíso. Por eso al pasillo lo bauticé el purgatorio.
Te das cuenta Eduardo, mi vecino de adelante es un vecino cualquiera.
Tiene su labarito, nos saludamos algunas mañanas pero da la casualidad
que son los hijos y yernos de Nora Carpena y Guillermo Bredeston, y la casa
se la compraron a Marcelo Mxlpxaga o sea que son famosos (¿) y nosotros
somos don nadies hijos de don nadie.
Por eso tenés que hacer el proyecto y por eso yo tengo que escribir mi libro.
Para demostrar que se puede.
Cerré la puerta de calle y me quedé pensando en tu quilombo.
Te das cuenta que verdaderamente te estás haciendo matar?
Y de ahí no vas a salir Edu. Vas a ir derecho al infierno gritando una
eternidad: CON LA FAMILIA NO SE METEN!!! mientras todos los demonios
se te van a cagar de risa en la jeta.
Tego que hacer algo contra estos angelitos. Les dolió conchudos? Mirá la
cara que pusieron. Acaso no eran ANGELES caídos. Les dolió a los muy
hijos de puta.
CON MI HERMANO NO SE METEN la concha de su puta madre. Me cago en
el Diablo.
Vení CAGON Vení!!!!!! Mariconcito.
Sabés lo que voy a hacer? Voy a poner una cuerda blanca que va a ir de la
doce al final de la escalera y por ahí van a subir todos del infierno hacia
arriba.
No solo mi hermano.
Me cansaste de Vos y todos los recontra pelotudos que creen en el Diablo.
Se acabó.
Se acabó el purgatorio. Se acabó el pasillo. Me voy al paraíso y esta vez
los meto a todos conmigo. El último cola de perro.
A vos te estoy hablando idiota. Vamos a quedar vos y yo. Vos elegís el
juego y yo elijo la cancha. Nos vemos en el infierno.
Abrí la puerta de casa y sentí la voz de Flora que me hizo olvidar el enojo en
un instante.
Y fue sábado y domingo y fue tarde y me llamó Diego Sol y me dijo que
estaba preocupado por mi hermano.
Y yo lo tranquilicé.
No saludé a nadie. Prendí la compu que le regalé a Sandra pero que ella
dijo que era para que yo un día escribiera mi libro y escribí solo esto:
Amor & Cía.
(y le di un beso a Ada).