Diego Alonso. C.I. 27742397. Economía Política II.

El Precio de la Desigualdad. Introducción.

El mercado mundial se ha visto en crisis, su carácter autosuficiente resulto en no ser

así, el estado en su postura de árbitro y los bancos centrales concentrados en disminuir la
inflación no genera una verdadera solución para las crisis que puedan surgir, o si se le
puede apreciar de otra perspectiva, fomentan a que las crisis sigan surgiendo. Las
investigaciones en materia económica arrojan muy claramente que el capitalismo presenta
fallas, los avances que se pudieron generar en el estudio de la economía era para procurar
lograr beneficiar a la mayoría posible, donde los gobiernos, los banqueros y empresarios
garantizaran la estabilidad social donde haya una igualdad de derechos, pero no se refleja
de esa manera, hay un grupo, pequeño que maneja el sistema y el resto, se ve
completamente perjudicado.

Luego de la Gran Recesión, cuando en el 2008 la economía global cayo y causo una
gran cantidad de estragos, es donde la verdad no se pudo negar, las medidas económicas y
las posturas políticas, no fueron las adecuadas, es más, fuero erróneas, generando un estado
de crisis que ha repercutido en el mundo entero y seguirá teniendo secuelas.

Las personas hartas se volvieron a las calles, iniciando protestas masivas, generando
un movimiento nacional, llamado Ocupy Wall Street, que luego terminando teniendo un
alcance mundial, claro, mucho antes en países como Túnez, Egipto, España, ya habían
iniciado.

Los recortes del estado, la subida de impuestos, los bonos entregados a los bancos
como estrategia de recuperación económica, llevo a que las personas tomaran las calles
para reclamar por sus derechos, que la democracia estaba fallando, que tenía que ir más allá
del voto y enfocarse en que los gobernantes y empresarios, así como los banqueros que
llevan el mercado, rindan cuentas ante la población.
 Esperando que hubiese culpables, las protestas no cesaron, y aun sabiendo que la
culpa la tenía los banqueros y gobernantes, aun así, nada se hizo al respecto que darles más
dinero. Esto logro una intensificación de las protestas, donde las personas se empezaron a
clasificar como el 99% restantes, enfocando sus consignas en que estos dirigentes, el 1%
debía hacerse responsable y generar solución a la inminente crisis, que dejaba cada día mas
a personas en la miseria, sin ya nada más que perder.

El capitalismo no genera igualdad de oportunidades, sino el dominio de una clase

sobre otra, y esto ha llevado a que cada vez exista unas condiciones despavórales que
generan una creciente desigualdad, donde la gran clase media que caracterizaba a Estados
Unidos y Europa, ahora se encuentre en colapso, generando un alza en la pobreza.

La solución se puede hallar en diversos factores, pero principalmente fomentar la

participación del Estado en las decisiones del mercado y separar el sistema económico de
las ideologías, ya que estas solamente corresponden a un sistema de creencias que
benefician a particularidades, mientras que la economía debe ser fomentada a poder llevar
beneficios y oportunidades a cuantas personas pueda.