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CIVIL Y OBLIGACIONES
CUARTO SEMESTRE
FACULTAD DE DERECHO
ARAUCA-ARAUCA
2020
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INTRODUCCION
En el presente trabajo les hablare sobre el tema de parejas del mismo sexo, en el cual
cabe resaltar que Colombia es un Estado libre, y social de derecho, pero que aún no se ha
aprobado el matrimonio de parejas del mismo sexo, sin embargo se garantiza por medio de
derechos humanos por medio de sus artículos, así mismo la convención de los derechos del
niño, el pacto de los derechos civiles y políticos, y finalizaremos con la convención contra
todas las formas de discriminación de la mujer. Destacando cada una de sus posturas, y
fundamentos.
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del mismo sexo, y no describe una población semejante, ya que los hombres y mujeres con
esta orientación constituyen un grupo tan diferente como los heterosexuales, desde los puntos
Algunos autores restringen el término a la descripción del contacto sexual entre dos personas
del mismo sexo, mientras otros amplían la definición para incluir deseo, fantasía o apertura
más antiguas civilizaciones; su aceptación social y legal ha variado con el tiempo, cultura y
circunstancias.
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ENSAYO
Para el 30 de junio de 2013, las parejas del mismo sexo en Colombia quedaron facultadas
por un fallo de la Corte Constitucional (sentencia C-577 de 2011) para acudir a notarios y
jueces de la República para formalizar y solemnizar su unión, mediante un vínculo
contractual. El reconocimiento del derecho de las parejas del mismo sexo en Colombia a
contraer matrimonio mediante contrato civil ha significado la concreción de otros derechos,
como son a conformar familias y a la libre disposición de la voluntad. El matrimonio está
regulado por el Código Civil, en su artículo 113, de igual forma está consagrado por la
Constitución Política, en su artículo 42, en ambos se alude a la condición de la diferencia de
sexo de los contrayentes bajo la expresión “un hombre y una mujer”, por tanto, hacer una
interpretación diferente configuraría una sustitución de la Constitución. Además, el texto
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superior confiere al legislativo amplitud para legislar acerca de “las formas de matrimonio, la
edad y capacidad para contraerlo, los deberes y derechos de los cónyuges, su separación y la
disolución del vínculo”1 y, en ese sentido, goza de un margen más amplio de configuración
legislativa. Sin embargo, al constatar que la protección y garantía de los derechos de las
parejas del mismo sexo ha sido posible gracias a la intervención judicial, y no por
intervención legislativa, no es claro si la Corte Constitucional se mantiene aún dentro de sus
atribuciones constitucionales o, al contrario, se ha extralimitado en el ejercicio de sus
funciones invadiendo un espacio reservado a la configuración legislativa para poder dar
protección a un grupo social que ha sido históricamente marginado y discriminado, inclusive
por el Derecho. Es necesario decir que la Corte, para poder ampliar los derechos limitados a
parejas heterosexuales a parejas del mismo sexo, tuvo que proceder por vía de control de
constitucionalidad; no obstante, para autorizar y declarar la validez del matrimonio entre
personas del mismo sexo tuvo que revisar sus líneas jurisprudenciales anteriores, sobre todo
antes de 2007. A partir de la sentencia C-075 de 2007, la Corte empezó a plantear y
desarrollar la tesis de déficit de protección de los derechos de las parejas del mismo sexo,
irradiando su ratio dicidendi a la jurisprudencia posterior, permitiendo la ampliación del
reconocimiento y protección de los derechos de las personas del mismo sexo. Efectivamente,
este cambio jurisprudencial se ha basado en una interpretación evolutiva del ordenamiento
jurídico, como lo indica la Corte en la sentencia.
Para dar respuesta al problema planteado en este artículo se hizo una revisión documental de
sentencias de la Corte Constitucional de Colombia con el fin de determinar los derechos
fundamentales que han sido reconocidos a las personas homosexuales por vía jurisprudencial
y su respectivo alcance. Se indagó también en las normas internacionales ratificadas por el
Estado colombiano y que forman parte del bloque constitucional para encontrar fundamentos
normativos en el derecho convencional, sobre todo en los derechos humanos. A su vez,
intentó rastrearse en las normas nacionales las categorías sospechosas con base en la
orientación sexual, así como las consecuencias de la aplicación de estas categorías
sospechosas. Por último, se recurrió a textos jurisprudenciales y a opiniones de autores para
determinar la procedencia de la aplicación del test de igualdad estricto en los casos sometidos
a la Corte, así como los alcances y límites del principio de libertad de configuración
legislativa que determinan la competencia de la Corte para intervenir en los casos de omisión
legislativa relativa.
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Este artículo nos da a conocer la importancia, que otros países implementan bajo un
ordenamiento jurídico, respetar y garantizar los derechos de cada persona, sin importar su
condición
1. Toda persona tiene derecho a que se respete su integridad física, psíquica y moral.
2. Nadie debe ser sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes.
Toda persona privada de libertad será tratada con el respeto debido a la dignidad inherente al
ser humano.
5. Cuando los menores puedan ser procesados, deben ser separados de los adultos y llevados
ante tribunales especializados, con la mayor celeridad posible, para su tratamiento.
Efectivamente se puede interpretar que cada uno de los artículos que manifiesta la convención
Americana de los Derechos Humanos, es proteger y garantizar el libre desarrollo de la
personalidad sin sufrir discriminación alguna por parte de la sociedad
2. Nadie puede ser privado de su libertad física, salvo por las causas y en las condiciones
fijadas de antemano por las Constituciones Políticas de los Estados Partes o por las leyes
dictadas conforme a ellas.
4. Toda persona detenida o retenida debe ser informada de las razones de su detención y
notificada, sin demora, del cargo o cargos formulados contra ella.
5. Toda persona detenida o retenida debe ser llevada, sin demora, ante un juez u otro
funcionario autorizado por la ley para ejercer funciones judiciales y tendrá derecho a ser
juzgada dentro de un plazo razonable o a ser puesta en libertad, sin perjuicio de que continúe
el proceso. Su libertad podrá estar condicionada a garantías que aseguren su comparecencia
en el juicio.
6. Toda persona privada de libertad tiene derecho a recurrir ante un juez o tribunal
competente, a fin de que éste decida, sin demora, sobre la legalidad de su arresto o detención
y ordene su libertad si el arresto o la detención fueran ilegales. En los Estados Partes cuyas
leyes prevén que toda persona que se viera amenazada de ser privada de su libertad tiene
derecho a recurrir a un juez o tribunal competente a fin de que éste decida sobre la legalidad
de tal amenaza, dicho recurso no puede ser restringido ni abolido. Los recursos podrán
interponerse por sí o por otra persona.
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7. Nadie será detenido por deudas. Este principio no limita los mandatos de autoridad
judicial competente dictados por incumplimientos de deberes alimentarios.
Artículo 14
Considerando que los Estados Partes en los Pactos Internacionales de Derechos Humanos
tienen la obligación de garantizar a hombres y mujeres la igualdad en el goce de todos los
derechos económicos, sociales, culturales, civiles y políticos,
Teniendo en cuenta las convenciones internacionales concertadas bajo los auspicios de las
Naciones Unidas y de los organismos especializados para favorecer la igualdad de derechos
entre el hombre y la mujer,
Preocupados, sin embargo, al comprobar que a pesar de estos diversos instrumentos las
mujeres siguen siendo objeto de importantes discriminaciones.
Los Estados Partes en la presente Convención Considerando que la Carta de las Naciones
Unidas reafirma la fe en los derechos humanos fundamentales, en la dignidad y el valor de la
persona humana y en la igualdad de derechos de hombres y mujeres, Considerando que la
Declaración Universal de Derechos Humanos reafirma el principio de la no discriminación y
proclama que todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y que
toda persona puede invocar todos los derechos y libertades proclamados en esa Declaración,
sin distinción alguna y, por ende, sin distinción de sexo.
Considerando que los Estados Partes en los Pactos Internacionales de Derechos Humanos
tienen la obligación de garantizar a hombres y mujeres la igualdad en el goce de todos los
derechos económicos, sociales, culturales, civiles y políticos, Teniendo en cuenta las
convenciones internacionales concertadas bajo los auspicios de las Naciones Unidas y de los
organismos especializados para favorecer la igualdad de derechos entre el hombre y la mujer.
Teniendo en cuenta asimismo las resoluciones, declaraciones y recomendaciones aprobadas
por las Naciones Unidas y los organismos especializados para favorecer la igualdad de
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derechos entre el hombre y la mujer, Preocupados, sin embargo, al comprobar que a pesar de
estos diversos instrumentos las mujeres siguen siendo objeto de importantes discriminaciones.
Recordando que la discriminación contra la mujer viola los principios de la igualdad de
derechos y del respeto de la dignidad humana, que dificulta la participación de la mujer, en las
mismas condiciones que el hombre, en la vida política, social, económica y cultural de su
país, que constituye un obstáculo para el aumento del bienestar de la sociedad y de la familia
y que entorpece el pleno desarrollo de las posibilidades de la mujer para prestar servicio a su
país y a la humanidad.
Preocupados por el hecho de que en situaciones de pobreza la mujer tiene un acceso mínimo a
la alimentación, la salud, la enseñanza, la capacitación y las oportunidades de empleo, así
como a la satisfacción de otras necesidades, convencidos de que el establecimiento del nuevo
orden económico internacional basado en la equidad y la justicia contribuirá
significativamente a la promoción de la igualdad entre el hombre y la mujer, Subrayado que la
eliminación del apartheid, de todas las formas de racismo, de discriminación racial,
colonialismo, neocolonialismo, agresión, ocupación y dominación extranjeras y de la
injerencia en los asuntos internos de los Estados es indispensable para el disfrute cabal de los
derechos del hombre y de la mujer.
Artículo 1
Artículo 2
Los Estados Partes condenan la discriminación contra la mujer en todas sus formas,
convienen en seguir, por todos los medios apropiados y sin dilaciones, una política
encaminada a eliminar la discriminación contra la mujer y, con tal objeto, se comprometen a:
Bibliografía
http://colombiadiversa.org/colombiadiversa/documentos/asuntos-legales/parejas-del-
mismo-sexo.pdf
https://www.oas.org/dil/esp/tratados_b-
32_convencion_americana_sobre_derechos_humanos.htm
script=sci_arttext&pid=S0718-09502018000100079. Obtenido de
https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-
09502018000100079.
https://www.oas.org/dil/esp/Convencion_sobre_todas_las_formas_de_Discriminacion_con
tra_la_Mujer.pdf
https://www.un.org/es/events/childrenday/pdf/derechos.pdf
https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo;jsessionid=B97A3CBB622B9486C7FB01F2992
CFE1A.dialnet01?codigo=5589619