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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

PODER JUDICIAL

JUZGADO SEXTO DE PRIMERA INSTANCIA EN FUNCIONES DE JUICIO


DEL CIRCUITO JUDICIAL PENAL DEL ESTADO ZULIA
Maracaibo, 06 de septiembre del año 2018
Años 208 º de la Independencia y 159º de la Federación.

SENTENCIA Nº 024-18
CAUSA J-843-17
SETENCIA DE SOBRESEIMIENTO

JUEZ: DANIEL JOSE SEQUEDA YÁNEZ.


SECRETARIA DE SALA: LOREDY MARIA COLINA ORTEGA.

I
CAPITULO
IDENTIFICACIÓN DE LAS PARTES:

FISCAL 25º DEL MINISTERIO PÚBLICO: ABG. MANUEL NUÑEZ GONZALEZ


ACUSADOS: JUAN CARLOS GUERRA LÓPEZ, ISIMAR DEL CARMEN ÁVILA MOYEJA
y PATRICIA COROMOTO COLMENARES PÍRELA.
DEFENSA PÚBLICA: ABG. ZUGLENIS PRADO.
DELITOS: OBTENCIÓN FRAUDULENTA DE DIVISAS y RETENCIÓN DE SELLOS O
TIMBRES.
VICTIMA: EL ESTADO VENEZOLANO
II
CAPITULO
DE LA ENUNCIACIÓN DE LOS HECHOS Y CIRCUNSTANCIAS QUE HAN SIDO
OBJETO DEL JUICIO

Los hechos por los cuales se apertura el Juicio Oral y Público en la presente
causa, se encuentran plasmados en el escrito acusatorio, presentado en la
oportunidad legal correspondiente por la Vindicta Pública, el cual una vez abierto
el debate, fue ratificado en todas y cada una de sus partes, por los representantes
del Ministerio Público de la Circunscripción Judicial del estado Zulia, quedando
plasmados los hechos de la siguiente manera:

“La presente investigación, se inició con ocasión a un procedimiento policial, llevado a


efecto, en fecha 1° de Abril de 2014, por funcionarios adscritos al Cuerpo de Investigaciones
Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC), Sub Delegación Maracaibo; en las personas
de: Inspector Agregado ALEXANDER RODRÍGUEZ, Detective Jefe MARVINSON
DELGADO, Detectives ANÍBAL AGOSTA, ALEXANDER SANDOVAL, WILLIAN
GONZÁLEZ, ANDRÉS MORALES, GABRIELA FERNANDEZ, EDIXON GRATEROL y
ALWUYS PINA; quienes se trasladaban a bordo de las unidades policiales P-02 y P-04, por
el Sector Amparo, Parroquia Cacique Mará, Municipio Maracaibo del Estado Zulia, en
actividades de campo; propias del Órgano Policial; momento cuando fueron abordados, por
una persona adulta de sexo femenino, quien obviando su nombre por razones de seguridad
personal, manifestó ser miembro del Consejo Comunal del referido sector, informándoles
que en un local de una Empresa de nombre "SERVICIO AUTOMOTRIZ SERVISEG, C.A.
(SERVISEGCA)" el cual fungía como una venta de repuestos, se realizaban boletos aéreos
falsos, por lo que se trasladaron a dicho local, ubicado en la Casa Nro. 28C-72 de la Calle
57B del Barrio Amparo, Parroquia Cacique Mará; siendo recibidos en la entrada, por la
ciudadana PATRICIA COROMOTO COLMENARES PIRELA, quien les manifestó que en
local funciona la empresa "SERVICIO AUTOMOTRIZ SERVISEG, C.A. (SERVISEGCA)"
entregándoles copia fotostática de Asamblea General Extraordinaria de Accionistas de la
precitada Sociedad Mercantil, de fecha 14 de Marzo de 2012, informándoles que en el
instante, estaban presentes los ciudadanos JUAN CARLOS GUERRA LÓPEZ; THOMAS
IGNACIO BENTANCOURT; ISIMAR DEL CARMEN AVILA MOLLEJA y BETZARAY
VIRGINIA GUERRA SÁNCHEZ, quienes laboran en dicha empresa; seguidamente le
autorizó la entrada al inmueble a ios Funcionarios actuantes, por lo que estos, de
conformidad con lo establecido en el artículo 186 del Código Orgánico Procesal Penai, se
dispusieron a ubicar a tres (03) ciudadanos, transeúntes del lugar, los cuales quedaron
identificados como JUAN TRUJILLO; LEADRO ESCOLA y JOSÉ ESCOLA, quienes
fungieron como testigos de la inspección a realizar; acto seguido, ingresaron dichos
Funcionarios y testigos al interior del local, procediendo a realizar una revisión en sus
aéreas, localizando lo que se describe a continuación: A) Dieciocho (18) pasaportes
pertenecientes a los siguientes ciudadanos: 01). LUIS DAVID GUERRA SIERRA, signado
con el ° 029751835; 02) LUIS MIGUEL GUERRA SIERRA signado con el N° 029751851.
03) PATRICIA CORQMOTO COLMENARES signado con el N ° 001714133; 04) JUAN
ENRIQUE PQLANCO COLMENARES, signado con el N ° 009610165, 05) ANA RAQUEL
SÁNCHEZ VILLALOBOS, signado con el N° 059532961; 06MSIMAR DEL CARMEN AVILA
MQYEJA. signado con el N° 074365465,07) JUAN CARLOS GUERRA LÓPEZ, signado con
el ° 059532783, 08). JOSÉ MIGUEL GUERRA LÓPEZ, signado con el N° 059532518. 09).
JUAN ENRIQUE PQLANCQ COLMENARES, signado con el N ° 071427087. 10) PATRICIA
COROMOTO COLMENARES PIRELA. signado con el N° 059940041; 11) -DANNYS
JAVIER ATENCIO AVILA, signado con el N° 034402045; 12) EUTIMIA DEL VALLE
LÓPEZ DE GUERRA signado con el N ° 029751806; 13) BETZA RAY VIRGINIA GUERRA
SÁNCHEZ, signado con el N° 059576941. 14) FABIOLA LUCIA GUERRA SIERRA, signado
con el N ° 029751848; 15).-ESTHER VIRGfNIA GUERRA LÓPEZ, signado con el N°
D0524174; 16) ALEJANDRO EFRAIN GUILLEN SUAREZ, signado con el N ° C1021225;
171.-EUTIMIA DEL VALLE LÓPEZ DE GUERRA, signado con el N C1586907; 18)
ESTHER VIRGINIA GUERRA LÓPEZ, signado con el N° 151 94082; B) Distintos
instrumentos bancarios tales como: 01) Cuatro (04) tarjetas pertenecientes a la entidad
bancaria BANESCO signadas con los siguientes números: 6012886153266148; 60128861
32455986; 6012886105236603; 6012886128358673; 02) Una (01) tarjeta perteneciente a la
entidad bancaria B.O.D. signada con el número: 5543882215004098; 03) Seis (06) tarjetas
pertenecientes a la entidad bancaria PROVINCIAL, signadas con los siguientes números:
5406283303663463; 4110970205229 175; 5406283303664842; 5895240108316156867;
4540422919090436; 5406283303669767; 04) Tres tarjetas pertenecientes a la entidad
bancaria BANCO BICENTENARIQ, signadas con el número: 6031220040004239934, (dos
de ellas sin números visibles); 05) Once (11) chequeras pertenecientes a la entidad
BANCARIA (BANESCO) afiliadas a las cuentas;
01340039340391046659;01340039340391046659;01340039340391046659;0134003939039
1046729;1340039330393093681;01340039340391046659;01340039330393093681;013400
39350393094814;01340039340391046659;01340039330393093681;0134003934039104665
9.;06)Dieciocho (18)chequeras pertenecientes a la entidad Banco Occidental de Descuento
(BOD), afiliadas a las cuentas: 01160151180009319662;
01160106510010646132;01160151170007840764;01160106530012088625;011601065
30012088625;01160106530012088625;01160151100009110534;011601511700080176
54;01160151170008017654;01160101410012286265;01160106510010646132;0116015
1170007241976;01160106530012088625.; 07) Cuatro (04) chequeras pertenecientes a la
entidad bancaria BANCO PROVINCIAL afiliadas a las cuentas:
01080086270100127309;01080086210100184159;01080300420100089476;010800862
60100211199; 08) Tres (03) chequeras pertenecientes a la entidad bancaria CORP BANCA,
afiliadas a las cuentas: 01210331050013504908; 01210331050013504908; 012102 143900
14282798; 09) Dos (02) chequeras pertenecientes a la entidad bancaria BANCO
BICENTENARIO afiliadas a las cuentas: 01750562940071571119;
01750562960071571118; 10) Una (01) chequera perteneciente a la entidad bancaria
BANCO MERCANTIL afiliada a la cuenta: 01050147461147142823; 11) Dos (02)
chequeras pertenecientes al Banco Internacional "WELLS FARGO" pertenecientes a la
ciudadana MARÍA PÉREZ. C) Así mismo siete (07) sellos húmedos, de las entidades que se
clasifican de la siguiente manera; dos (02) pertenecientes a la empresa SERVISEG C. A: un
(01) pertenecientes a la EMPRESA MAQUINAS CENTRO AUTOMOTRIZ: uno (01)
perteneciente al CONSULADO GENERAL DE SAN FRANCISCO EE. UU: uno (01)
perteneciente a LA UNIVERSIDAD DEL ZULIA: uno (01) perteneciente a la ENTIDAD
BANCARIA BANESCO; uno (01) perteneciente a la COOPERATIVA DE INGENIERÍA Y
SERVICIO COIS. D) De igual modo fueron retenidos tres (03) sellos húmedos; en los cuales
se aprecian las siguientes siglas; 01}^ ANULADO: 02).-PAGADQ: 03).-NO ENDOSABLE.
E) Así también fueron encontradas veinticinco (25) carpetas, de color marrón, contentivas de
DOCUMENTOS PARA TRAMITES DE OBTENCIÓN DE DIVISAS EN CADIVI, clasificadas
de la siguiente manera; dos (02) perteneciente a la ciudadana CELIA SUAREZ; tres (03)
carpetas pertenecientes al ciudadano DIEGO GUERRERO; dos (02) carpetas pertenecientes
a la ciudadana EUTIMIA LÓPEZ, dos (02) carpetas pertenecientes a la ciudadana MARÍA
ESPERANZA LÓPEZ; dos (02) carpetas pertenecientes al ciudadano JOSÉ MIGUEL
GUERRA; dos (02) carpeta pertenecientes a la ciudadana CELIA PACHECO; doce (12)
carpetas, contentivas de documentos CADIVI sin identificación aparente y una (01) carpeta
contentiva de varios folios, donde se observan varias firmas.

En tal sentido, al preguntárseles a los cinco ciudadanos ut supra mencionados, sobre el


motivo que justifique la tenencia de la evidencias colectadas, no hubo una razón coherente y
convergente entre si; es decir, ausencia de justificación de las evidencias localizadas; en
consecuencia, por considerar los funcionarios actuantes, estar en presencia de un hecho
punible, procedieron a realizar la aprehensión en flagrancia de los ciudadanos 1), JUAN
CARLOS GUERRA LÓPEZ, portador de la cédula de identidad Nro. 10.410.911, 2)
THOMAS IGNACIO BENTANCOURT, portador de la cédula de identidad Nro. 14.356.888,
3) ISIMAR DEL CARMEN AVILA MOLLEJA, portadora de la cédula de identidad 15 840
843, 4) PATRICIA COROMOTO COLMENARES PIRELA, portadora de la cédula de
identidad 10.430.188 y 5) BETZARAY VIRGINIA GUERRA SÁNCHEZ, portadora de la
cédula de identidad 23.863.919; elaborándose la respectiva acta policial, donde se dejó
constancia del aludido procedimiento.

Ahora bien; iniciada la correspondiente investigación por el Ministerio Público y una vez
obtenidos los resultados de las diligencias practicadas, para clarificar los hechos y
determinar las responsabilidades penales a que haya lugar, quedó demostrada la relación de
causalidad establecida, entre las evidencias colectadas y los imputados JUAN CARLOS
GUERRA LÓPEZ; PATRICIA COROMOTO COLMENARES PIRELA THOMAS IGNACIO
BENTANCOURT, y (SIMAR DEL CARMEN AVILA MOLLEJA; todos plenamente
identificados; siendo menester, establecer que los ciudadanos: JUAN CARLOS GUERRA
LÓPEZ y PATRICIA COROMOTO COLMENARES PIRELA, eran los Gerentes de dicha
Empresa; el primero como Gerente de Repuesto, y la segunda mencionada, como Gerente
Administrativo; es decir, que la responsabilidad penal, por las evidencias colectadas en el
lugar, son directamente atribuibles a dichos ciudadanos; aunado, el local donde funciona la
aludida empresa, es propiedad del ciudadano JUAN CARLOS GUERRA LÓPEZ, quien a su
vez, tiene una sociedad con la ciudadana PATRICIA COROMOTO COLMENARES PIRELA

En lo que respecta, a los ciudadanos THOMAS IGNACIO BENTANCOURT e ISIMAR DEL


CARMEN AVILA MOLLEJA, ambos tenían laborando desde hacía un año aproximadamente
en dicha Empresa, por lo que estaban en pleno conocimiento y se hicieron parte de las
acciones delictivas que se suscitaban el lugar; toda esta acción dolosa, estaba orientada
para obtener Divisas Preferenciales, de la Comisión de Administración de Divisas (CADIVI),
en procura de un lucro personal; en perjuicio del Estado Venezolano. En el caso de marras,
la actuación policial, impidió que se consumaran los hechos delictivos en desarrollo, ya que
no fue posible que dichas solicitudes se consignaran ante la institución bancaria;
verbigracia, si bien es cierto, los pasaportes incautados, algunos son propiedad de
ciudadanos con vínculos de parentesco; hay otros que no; inclusive, hay sellos que se
localizaron en el lugar, sin justificación alguna, que por la praxis general, son utilizado en
este tipo delictivo.

En tal contexto, por la valoración objetiva, que caracterizan a estas Representaciones


Fiscales, se determinó en la Investigación que la ciudadana BETZARAY VIRGINIA GUERRA
SÁNCHEZ, portadora de la cédula de identidad 23.863.919, al momento del procedimiento
Policial, venía llegando al lugar como visitante, por tener un vinculo de parentesco (tio) con
el imputado JUAN CARLOS GUERRA LÓPEZ; por consiguiente no se le puede atribuir
ninguna conducta de naturaleza punible.

Finalmente, es dable acotar que las imputaciones antes especificadas, se fundamentan en los
siguientes elementos de convicción:”

En fecha 30 de mayo de 2017, el Tribunal Noveno de Primera Instancia en


funciones de Control, llevó a cabo la audiencia preliminar, en razón de la
acusación presentada por la Fiscalia 25, en contra del ciudadano THOMAS
IGNACIO VILLALOBOS BETANCOURT titular de la cedula de identidad Nº V-
14.356.888, JUAN CARLOS GUERRA LÓPEZ titular de la cedula de identidad Nº
V- 10.410.911, ISIMAR DEL CARMEN ÁVILA MOYEJA titular de la cedula de
identidad Nº V- 15.840.843, PATRICIA COROMOTO COLMENARES PÍRELA
titular de la cedula de identidad Nº V- 10.430.188, por la presunta comisión de los
delitos de OBTENCIÓN FRAUDULENTA DE DIVISAS, previsto y sancionado en el
artículo 10 de la Ley de Ilícitos Cambiarios y RETENCIÓN DE SELLOS O
TIMBRES, previsto y sancionado en el artículo 312 del Código Penal, en prejuicio
del ESTADO VENEZOLANO.

En la referida oportunidad, el mencionado Tribunal admitió la totalidad de la


acusación presentada por el Ministerio Público, los medios de prueba ofrecidos en
la acusación y la comunidad de la prueba, ordenándose la apertura a Juicio oral.

Llegado el conocimiento del presente asunto a este Juzgado de Juicio entre los
días 19 de marzo de 2018 al 13 de agosto de 2018, se llevó a cabo las audiencias
del juicio oral y publico con aplicación de los principios de oralidad, inmediación,
contradicción y concentración; en las referidas audiencias, se escucharon los
argumentos de las partes, se llevó a cabo la práctica de los medios de prueba
ofertados, e igualmente se dio cumplimiento a las garantías sustantivas y adjetivas
de orden constitucional y legal, a las que está sometido el proceso penal.

Siendo importante resaltar, en fecha 17 de Agosto del año 2018, la Defensora


Pública ABG. KESIA FINOL solicitó al Tribunal el Sobreseimiento a favor de sus
defendidos basándose en el DECRETO DEROGATORIO DEL RÉGIMEN
CAMBIARIO Y SUS ILÍCITOS, publicado por La Asamblea Nacional
Constituyente, en fecha 2 de agosto de 2018, Gaceta Oficial N° Número 41.452, e
igualmente solicitó se declarara el sobreseimiento de la presente causa en virtud a
lo antes planteado, de la prescripción de la acción penal de conformidad con el
artículo 110 del Código Penal, incidencia en la cual la Vindicta Publica no se
opuso, a lo solicitado por la Defensa, en esa oportunidad ente tribunal de merito
consideró procedente el sobreseimiento de la presente causa de conformidad con
los numerales 2 y 3 del artículo 300 del Código Orgánico Procesal Penal, al
verificarse que en el presente caso, con respecto al primer delito, existe una
causal que hace imposible la continuación del proceso penal, referido a que: “…2.
El hecho imputado no es típico o concurre una causa de… no punibilidad…”. en
aplicación retroactiva del DECRETO DEROGATORIO DEL RÉGIMEN
CAMBIARIO Y SUS ILÍCITOS, publicado por La Asamblea Nacional
Constituyente, en fecha 2 de agosto de 2018, Gaceta Oficial N° Número 41.452,
por resultar mas favorable a los procesados de conformidad con establecido en los
artículos 24 del la Constitución Nacional, en concordancia con el artículo 2 del
Código Penal, en estricta vinculación con el principio de legalidad garantía
estatuida en el artículo 49 numeral 6 de la Constitución Nacional, en relación con
el artículo 1 del Código Penal. Y para el segundo la acción se extinguió por
operado la prescripción judicial de conformidad con el artículo 300 numeral 3 “La
acción penal se ha extinguido”, por cuanto la acción penal ya esta prescrita.

Adicionalmente, este Tribunal Sexto de Juicio, estimó inoficioso realizar la


evacuación del resto de las pruebas, así como efectuar su respectiva valoración,
en virtud que la declaratoria con lugar de la incidencia planteada por la defensa,
condujo a la culminación anticipada del juicio oral y público, debido a que el
sobreseimiento decretado pone termino al procedimiento y tiene la autoridad de
cosa juzgada.

III

CAPITULO

FUNDAMENTOS DE LA ACUSACION FISCAL

El Ministerio Público fundamento la imputación que le hace a los ciudadanos acusados


THOMAS IGNACIO VILLALOBOS BETANCOURT titular de la cedula de identidad
Nº V- 14.356.888, JUAN CARLOS GUERRA LÓPEZ titular de la cedula de
identidad Nº V- 10.410.911, ISIMAR DEL CARMEN ÁVILA MOYEJA titular de la
cedula de identidad Nº V- 15.840.843, PATRICIA COROMOTO COLMENARES
PÍRELA titular de la cedula de identidad Nº V- 10.430.188, por los tipos penales de
OBTENCIÓN FRAUDULENTA DE DIVISAS, previsto y sancionado en el artículo 10 de la
Ley de Ilícitos Cambiarios y RETENCIÓN DE SELLOS O TIMBRES, previsto y
sancionado en el artículo 312 del Código Penal, en prejuicio del ESTADO VENEZOLANO,
con los siguientes elementos de convicción:

1.- Acta Policial N°-K14-0135-02294, de fecha 01 de abril de 2016, suscrita por los
funcionarios Inspector Agregado ALEXANDER RODRÍGUEZ, Detective Jefe
MARVINSON DELGADO, Detectives ANÍBAL AGOSTA, ALEXANDER SANDOVAL,
WILLIAN GONZÁLEZ, ANDRÉS MORALES, GABRIELA FERNANDEZ, EDIXON
GRATEROL y ALWUYS PINA; adscritos al Cuerpo de Investigaciones Científicas
Penales y Criminalísticas -Sub Delegación Maracaibo.

2.- Acta de Asamblea General Extraordinaria de Accionistas de la Sociedad Mercantil


"SERVICIO AUTOMOTRIZ SERVISEG, C.A. (SERVISEGCA), de fecha 14 de marzo de
2014. inscrita su acta constitutiva y estatutos sociales por ante el Registro Mercantil
Primero de la Circunscripción Judicial del estado Zulia, el día 10 de noviembre de 2010,
con el No. 45, Tomo 72-A, expediente numero 483-2421.
3.- Acta de Inspección Técnica del Lugar de los Hechos Expediente N° K-14-0135-02294,
de fecha 01 de Abril de 2016, realizada en el sector amparo, calle 57, casa sin numero,
parroquia Cacique Mará, Municipio Maracaibo del estado Zulia, específicamente detrás de
la ganga de los repuestos , suscrita por los funcionarios Inspector Agregado ALEXANDER
RODRÍGUEZ, Detective Jefe MARVINSON DELGADO, Detectives ANÍBAL AGOSTA,
ALEXANDER SANDOVAL, WILLIAN GONZÁLEZ, ANDRÉS MORALES,
GABRIELA FERNANDEZ, EDIXON GRATEROL y ALWUYS PINA; adscritos al
Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas -Sub Delegación
Maracaibo.

4.- Acta de entrevista decepcionada ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y


Criminalisticas, Sub delegación Maracaibo, en fecha 01 de abril de 2016, al ciudadano Juan
Carlos Trujillo Prado.

5.- Acta de entrevista decepcionada ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y


Criminalisticas, Sub delegación Maracaibo, en fecha 01 de abril de 2016, al ciudadano José
Leonardo Escola Quintero.

6.- Acta de entrevista decepcionada ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y


Criminalisticas, Sub delegación Maracaibo, en fecha 01 de abril de 2016, al ciudadano
Leandro Escola.

7.- Registro de Cadena de Custodia de Evidencias Físicas N° 0459-14, numero de caso K-


14-0135-02294 de fecha 01-04-2016. Organismo Actuante: Cuerpo de Investigaciones
Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo, suscrita por el
funcionario que entrega ALEXANDER SANDOVAL y por el funcionario que recibe
FÉNIX FRANCO.

8.- Registro de Cadena de Custodia de Evidencias A Físicas N° 0458-14, numero de caso


K-14-0135-02294 de fecha 01-04-2016. Organismo Actuante: Cuerpo de Investigaciones
Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo, suscrita por el
funcionario que entrega ALWUYS PINA y por el funcionario que recibe FÉNIX
FRANCO.

9.- Registro de Cadena de Custodia de Evidencias Físicas N° 0460-14, numero de caso K-


14-0135-02294 de fecha 01-04-2016. Organismo Actuante: Cuerpo de Investigaciones
Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo, suscrita por
el funcionario que entrega ALEXANDER SANDOVAL y por el funcionario que recibe
JOSÉ MOLINA.

10.- Registro de Cadena de Custodia de Evidencias Físicas N° 0468-14, numero de caso K-


14-0135-02294 de fecha 01-04-2016. Organismo Actuante: Cuerpo de Investigaciones
Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo, suscrita por el
funcionario que entrega ALEXANDER SANDOVAL y por el funcionario que recibe
JOSÉ MOLINA.

11.- INFORME remitido con Oficio SIB-DSB-UNIF-16398, de fecha 16 de Mayo de


2014, emitida por el Gerente de la Unidad Nacional de Inteligencia Financiera.

12.- Experticia de Reconocimiento y Vaciado de Contenido a los equipos de computación,


realizada por los funcionarios Detective Jhon Briceño y Experto profesional III Tarire
Vento.

13.- Experticia de Reconocimiento para determinar autenticidad o falsedad de las piezas


debitadas, realizada por el Inspector Cira Fleire y Detective Adrian Rincón, adscritos al
Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalisticas.

IV

MEDIOS DE PRUEBA QUE OFRECIO EL MINISTERIO PÚBLICO Y FUERON


ADMITIDOS EN LA AUDIENCIA PRELIMINAR PARA DEBATIR EN EL JUICIO
ORAL

TESTIMONIALES:

1.- Inspector Agregado ALEXANDER RODRÍGUEZ funcionario adscrito al Cuerpo de


Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo.

2.- Detective Jefe MALVINSON DELGADO funcionario adscrito al Cuerpo de


Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo.

3.- Detective ANÍBAL ACOSTA funcionario adscrito al Cuerpo de Investigaciones


Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo.

4.- Detective ALEXANDER SANDOVAL, funcionario adscrito al Cuerpo de


Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo.

5.- Detective WILLIAN GONZÁLEZ, funcionario adscrito al Cuerpo de Investigaciones


Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo.

6.- Detective ANDRÉS MORALES, funcionario adscrito al Cuerpo de Investigaciones


Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo.

7.- Detective GABRIELA FERNANDEZ, funcionario adscrito al Cuerpo de


Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo.
8.- Detective EDIXON GRATEROL, funcionario adscrito al Cuerpo de Investigaciones
Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo.

9.- Detective ALWUYS PINA, funcionario adscrito al Cuerpo de Investigaciones


Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo.

10.- Detective ÁNGEL MAVAREZ, funcionario adscrito al Cuerpo de Investigaciones


Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo.

11.- Detective JHON BRICEÑO, funcionario adscrito al Cuerpo de Investigaciones


Científicas Penales v Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo.

12.- EXPERTO PROFESIONAL III TAIRE J. VENTO, funcionario adscrito al Cuerpo de


Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo.

13.- INSPECTOR CIRA FLEIRE, funcionario adscrito al Cuerpo de Investigaciones


Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo.

14.- Detective ADRIÁN RINCÓN, funcionario adscrito al Cuerpo de Investigaciones


Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo.

15.- ciudadano JUAN CARLOS TRUJILLO PRADO, titular de la cédula de la cédula de


identidad N° V-13.704.470, testigo presencial del procedimiento policial.

16.- ciudadano LEANDRO ESCOLA, titular de la cédula de la cédula de identidad N° V-


24.730, testigo presencial del procedimiento policial.

17.- ciudadano JOSÉ LEONARDO ESCOLA QUINTERO, titular de la cédula de la cédula


de identidad N° V-24.730.518, testigo presencial del procedimiento policial.

DOCUMENTALES:

1.- Acta de Inspección Técnica del Lugar de los Hechos Expediente N° K-14-0135-02294,
de fecha 01 de Abril de 2016, realizada en el sector amparo, calle 57, casa sin numero,
parroquia Cacique Mará, Municipio Maracaibo del estado Zulia, específicamente detrás de
la ganga de los repuestos , suscrita por los funcionarios Inspector Agregado ALEXANDER
RODRÍGUEZ, Detective Jefe MARVINSON DELGADO, Detectives ANÍBAL AGOSTA,
ALEXANDER SANDOVAL, WILLIAN GONZÁLEZ, ANDRÉS MORALES,
GABRIELA FERNANDEZ, EDIXON GRATEROL y ALWUYS PINA; adscritos al
Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas -Sub Delegación
Maracaibo.

2.- Acta Policial N° K-14-0135-02294, de fecha 01ABR16, suscrita por los funcionarios;
Inspector Agregado ALEXANDER RODRÍGUEZ, Detective Jefe MARVINSON
DELGADO, Detectives ANÍBAL AGOSTA, ALEXANDER SANDOVAL, WILLIAN
GONZÁLEZ, ANDRÉS MORALES, GABRIELA FERNANDEZ, EDIXON GRATEROL
y ALWUYS PINA; adscritos al Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y
Criminalísticas -Sub Delegación Maracaibo.

3.- Registro de Cadena de Custodia de Evidencias Físicas N° 0459-14, numero de caso K-


14-0135-02294 de fecha 01-04-2016. Organismo Actuante: Cuerpo de Investigaciones
Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo, suscrita por el
funcionario que entrega ALEXANDER SANDOVAL y por el funcionario que recibe
FÉNIX FRANCO.

4. Registro de Cadena de Custodia de Evidencias A Físicas N° 0458-14, numero de caso K-


14-0135-02294 de fecha 01-04-2016. Organismo Actuante: Cuerpo de Investigaciones
Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo, suscrita por el
funcionario que entrega ALWUYS PINA y por el funcionario que recibe JOSÉ MOLINA.

5.- Registro de Cadena de Custodia de Evidencias Físicas N° 0460-14, numero de caso K-


14-0135-02294 de fecha 01-04-2016. Organismo Actuante: Cuerpo de Investigaciones
Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) Sub Delegación Maracaibo, suscrita por el
funcionario que entrega ALEXANDER SANDOVAL y por el funcionario que recibe JOSÉ
MOLINA.

6.- Acta de Asamblea General Extraordinaria de Accionistas de la Sociedad Mercantil


"SERVICIO AUTOMOTRIZ SERVISEG, C.A. (SERVISEGCA), de fecha 14 de marzo de
2014, inscrita su acta constitutiva y estatutos sociales por ante el Registro Mercantil
Primero de la Circunscripción Judicial del estado Zulia, el día 10 de noviembre de 2010,
con el No. 45, Tomo 72-A, expediente numero 483-2421.

7.- INFORME remitido con Oficio SIB-DSB-UNIF-16398, de fecha 16 de Mayo de 2014,


emitida por el Gerente de la Unidad Nacional de Inteligencia Financiera.

CAPITULO V
DE LOS FUNDAMENTOS DE HECHO Y DE DERECHO

Se deja expresa constancia que los acusados JUAN CARLOS GUERRA LÓPEZ titular de
la cedula de identidad Nº V- 10.410.911, ISIMAR DEL CARMEN ÁVILA MOYEJA titular de
la cedula de identidad Nº V- 15.840.843, PATRICIA COROMOTO COLMENARES
PÍRELA titular de la cedula de identidad Nº V- 10.430.188, fueron impuestos durante todo
el desarrollo del debate Oral y Publico del Precepto Constitucional que los exime de
declarar en causa propia, contenido en el numeral 5º del articulo 49 de la Constitución de
la República Bolivariana de Venezuela y los artículos 126, 127, 132, 133 y 134, todos del
Código Orgánico Procesal Penal, así como, que en el caso de libre y voluntariamente
decidieran declarar, lo harían sin juramento, libre de coacción y apremio, indicándole que
su declaración es un medio para su defensa pero que pueden abstenerse de declarar sin
que su silencio lo perjudique, y los mismos no rindieron declaración alguna.

De manera similar, este Tribunal en su deber insoslayable de actuar apegado al


ordenamiento jurídico vigente, en fecha 13 de agosto de 2018, declaró con lugar la
incidencia planteada por la defensa pública, en donde solicitó el sobreseimiento de la
causa en aplicación al decreto de la Asamblea Nacional Constituyente que deroga la Ley
de Ilícitos Cambiarios, publicado en la Gaceta Oficial Nº 41.452 y en razón de la extinción
de la acción penal por operar la prescripción judicial, siendo importante resaltar que no
hubo oposición por parte del representante del Ministerio Público; en ese sentido, al
enumerar la Ley taxativamente las causas en que procede el sobreseimiento, se entiende
que sólo en esos casos se permite sobreseer, en este asunto convergen dos causales de
las establecidas en el artículo 300 del Código Orgánico Procesal Penal, la de los
numerales 2 y 3, es decir, “El hecho imputado no es típico o concurre una causa de
justificación, inculpabilidad o de no punibilidad.” , “La acción penal se ha extinguido o resulta
acreditada la cosa juzgada.” En este punto es conveniente recordar que el sobreseimiento
como institución se encuentra regulada en el Código Orgánico Procesal Penal de
diferentes maneras, pudiendo ser provisional o definitivo, y así tenemos, que el mismo
puede darse en primer lugar como acto conclusivo a solicitud Fiscal; en segundo lugar,
por determinarlo así el Juez de Control al término de la audiencia preliminar y en tercer
lugar, en la etapa de juicio -como en el presente caso-.

Ahora bien, al analizar los hechos que dieron origen a este proceso y que el Ministerio
Público encuadró en los tipos penales de OBTENCIÓN FRAUDULENTA DE DIVISAS,
previsto y sancionado en el artículo 10 de la Ley de Ilícitos Cambiarios y RETENCIÓN DE
SELLOS O TIMBRES, previsto y sancionado en el artículo 312 del Código Penal, en
prejuicio del ESTADO VENEZOLANO, este juzgado considera procedente el
sobreseimiento de la presente causa de conformidad con los numerales 2 y 3 del artículo
300 del Código Orgánico Procesal Penal, al considerar este Juzgador que en el presente
caso, con respecto al primer delito, existe una causal que hace imposible la
continuación del proceso penal, referido a que: “…2. El hecho imputado no es típico o
concurre una causa de… no punibilidad…”.

Tal afirmación estriba en el hecho, que la Constitución de la República Bolivariana de


Venezuela en su artículo 24, establece que las leyes tendrán efecto retroactivo cuando
impongan menor pena y cuando haya dudas se aplicará la norma que beneficie al reo o
rea, es por ello que se hace necesario traer a colación lo dispuesto en el mencionado
artículo el cual preceptúa que:

“Ninguna disposición legislativa tendrá efecto retroactivo, excepto cuando imponga menor
pena. Las leyes de procedimiento se aplicarán desde el momento mismo de entrar en
vigencia, aun en los procesos que se hallaren en curso; pero en los procesos penales, las
pruebas ya evacuadas se estimarán en cuanto beneficien al reo o rea, conforme a la ley
vigente para la fecha en que se promovieron.
Cuando haya dudas se aplicará la norma que beneficie al reo o a la rea.”
En el ordenamiento penal tiene plena vigencia el principio de la irretroactividad de la ley,
que representa una exigencia del principio de legalidad a los fines de brindad seguridad
jurídica ya que se requiere que las actuaciones de los poderes públicos estén sometidas
al imperio de la Ley; la legalidad penal es entonces un límite a la potestad punitiva del
Estado, en el sentido que sólo pueden castigarse las conductas expresamente descritas
como delitos en una ley anterior a la comisión del hecho punible, tal como lo estableció el
legislador en el artículo 49 numeral 6 de la Constitución Nacional, “Ninguna persona podrá
ser sancionada por actos u omisiones que no fueren previstos como delitos, faltas o infracciones en
leyes preexistentes”, en armonía con el artículo 1 del Código Penal, que a la letra dice: “
Nadie podrá ser castigado por un hecho que no estuviere expresamente previsto como punible por
la ley, ni con penas que ella no hubiere establecido previamente. Los hechos punibles se dividen en
delitos y faltas.”

No obstante, en el propio ordenamiento se establecen excepciones al principio general,


admitiéndose la retroactividad de la ley nueva cuando ésta sea más favorable al reo, de
conformidad con la disposición ut supra transcripta, cuando impongan menor pena y
cuando haya dudas se aplicará la norma que beneficie al reo o rea, a este respecto se
aprecia, que el contenido de dicha norma, específicamente cuando contiene la expresión
‘cuando imponga menor pena’, debe ser entendida mediante una interpretación finalística,
en el sentido de que será retroactiva la ley que imponga un menor gravamen al reo. (Vid.
sentencia no 790, de 04 de mayo de 2004, Sala Constitucional), en concordancia con el
artículo 2 del Código Penal, reza: ‘Las leyes penales tienen efecto retroactivo en cuanto
favorezcan al reo, aunque al publicarse hubiere ya sentencia firme y el reo estuviere cumpliendo la
condena’. En otras palabras, debe aplicarse la ley que trate con menor rigor al reo, por
tanto si la nueva ley deja de considerar delictivo un hecho penado hasta entonces, tiene
efectos retroactivos.

Por ende, la retroactividad obedece a la existencia de una sucesión de leyes penales, que
por emanar de seres humanos y estar destinadas a controlar la conducta de éstos, su
validez o vigencia se encuentran sometidas a la temporalidad, por lo cual se dan casos
donde la situación fáctica acaecida en un determinado momento y bajo el imperio de una
ley, al tiempo de ser sometida al juzgamiento se encuentra con que ha entrado en
vigencia otro texto legal más favorable y por ello se debe aplicar la nueva ley
retrotrayendo su vigencia al momento de la comisión del delito, o por el contrario, con la
nueva ley se desfavorece al sujeto activo del hecho punible acaecido bajo el imperio de la
ley derogada, por lo que ésta adquiere supervivencia. (Sentencia n° 1807 del 3 de julio de
2003, exp. 02-1870, Magistrado-Ponente José Manuel Delgado Ocando).

En este caso, los hechos que dieron origen al presente proceso acaecieron en fecha 01
de abril de 2014, por lo que el titular de la acción penal, encuadro la conducta y acusó de
OBTENCIÓN FRAUDULENTA DE DIVISAS, previsto y sancionado en el artículo 10 de la
Ley de Ilícitos Cambiarios, publicada por la Asamblea Nacional de la República de
Venezuela el 27 de febrero de 2008 en Gaceta Oficial N° 38.879, vigente para el
momento, esta sufrió múltiple sucesiones de leyes, entre ellas la más reciente y vigente
publicada en Gaceta Oficial N° 6.210 de fecha 30 de diciembre de 2015, con el titulo de
de Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley del Régimen Cambiario y sus Ilícitos,
contemplando entre sus ilícitos cambiarios la Adquisición de Divisas Mediante Engaño y
Desviación del uso de las Divisas, en los artículos 21 y 23 respectivamente, por lo que,
se verificó una continuidad del tipo contenido en el artículo 10 de la ley del año 2008,
estima pertinente este Jueza citar el contenido de las referidas normas, las cuales prevén
textualmente lo siguiente:

Ley de Ilícitos Cambiarios, publicada por la Asamblea Nacional de la República de


Venezuela el 27 de febrero de 2008 en Gaceta Oficial N° 38.879:

“Artículo 10.- Quien obtenga divisas, mediante engaño, alegando causa falsa o
valiéndose de cualquier otro me dio fraudulento, será penado de tres a siete años de
prisión y multa del doble del equivalente en bolívares del monto de la respectiva
operación cambiaria, además de la venta o reintegro de las divisas al Banco central de
Venezuela.
Si el engaño, la causa falsa o el medio fraudulento que se empleare, son descubiertos antes
de la obtención de las divisas, la pena se rebajará conforme a las disposiciones del Código
Penal.”

Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley del Régimen Cambiario y sus Ilícitos,
publicada en Gaceta Oficial N° 6.210 de fecha 30 de diciembre de 2015:

“Adquisición de divisas mediante engaño


Artículo 21. Quienes adquieran divisas a través de los mecanismos administrados por
las autoridades competentes del régimen de administración de divisas, mediante
engaño, alegando causa falsa o valiéndose de cualquier otro medio fraudulento, serán
sancionados con prisión de cuatro (4) a ocho (8) años y multa equivalente a doce (12)
Unidades Tributarias (12 U.T.) vigente para la fecha de la sentencia condenatoria, por
cada dólar de los Estados Unidos de América o su equivalente en otra divisa, del
monto correspondiente a la respectiva operación cambiaría, además de la venta o
reintegro de las divisas al Banco Central de Venezuela. Si el engaño, la causa falsa o el
medio fraudulento que se empleare son descubiertos antes de la liquidación de las
divisas, la pena privativa de libertad se rebajará conforme a las disposiciones del
Código Penal.”

“Desviación del uso de las divisas


Artículo 23.
Las autorizaciones de adquisición y liquidación de divisas emitidas por la autoridad
cambiaría son intransferibles y deben ser usadas únicamente a los fines y en los términos
que fueron generadas, conforme a la solicitud de adquisición de divisas respectiva.
Quienes destinen las divisas obtenidas, a través de los mecanismos administrados
por la autoridades competentes del régimen de administración de divisas, para fines
distintos a los que motivaron su solicitud, o los declarados en ella, serán sancionados con
pena de prisión de tres (3) a siete (7) años y multa equivalente a diez Unidades
Tributarias (10 U.T.) vigente para la fecha de la sentencia condenatoria, por cada
dólar de los Estados Unidos de América o su equivalente en otra divisa, del monto
correspondiente a las divisas obtenidas.
Igualmente, se considera ilícito toda desviación o utilización de las divisas por personas
naturales y jurídicas distintas a las autorizadas, los que incurrieren en dicho ilícito,
serán sancionados de conformidad con lo previsto en este artículo.”

En torno a ellos y a la Ley de Ilícitos Cambiarios, La Asamblea Nacional Constituyente, de


conformidad con lo previsto en los artículos 347, 348 y 349 de la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela y las Normas para Garantizar el Pleno
Funcionamiento Institucional de la misma, en Armonía con los Poderes Públicos
Constituidos, dictadas por ese órgano soberano y publicadas en la Gaceta Oficial de la
República Bolivariana de Venezuela N° 6.323 Extraordinario de fecha 08 de agosto de
2017, publicó DECRETO DEROGATORIO DEL RÉGIMEN CAMBIARIO Y SUS
ILÍCITOS, el jueves 2 de agosto de 2018, en Gaceta Oficial N° Número 41.452, resultando
necesario plasmar el contenido del referido decreto, en ese sentido dice:

“Objeto
Artículo 1. El presente Decreto Constituyente tiene por objeto establecer la derogatoria del
Régimen Cambiario y sus Ilícitos, de acuerdo con lo establecido en el artículo 2 de este
Decreto Constituyente, con el propósito de otorgar a los particulares, tanto personas
naturales como jurídicas, nacionales o extranjeras, las más amplías garantías para el
desempeño de su mejor participación en el modelo de desarrollo socio-económico productivo
del país.

Derogatoria
Artículo 2. A partir de la entrada en vigencia del presente Decreto Constituyente, y sin
perjuicio de lo establecido en el artículo 3 ejusdem, se deroga el Decreto con Rango, Valor y
Fuerza de Ley del Régimen Cambiario y sus Ilícitos; el artículo 138 del Decreto con Rango,
Valor y Fuerza de Ley del Banco Central de Venezuela en lo que concierne exclusivamente al
ilícito referido a la actividad de negociación y comercio de divisas en el país; y todas
aquellas disposiciones normativas en cuanto colidan con lo establecido en este Decreto
Constituyente.

No favorabilidad
Artículo 3. En virtud de la naturaleza lesiva del patrimonio público de delitos económicos
previstos en los artículos 21 y 23 del Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley del Régimen
Cambiario y sus Ilícitos, y en aras de evitar su impunidad, no se aplicará la excepción de
retroactividad de la ley más favorable a los casos graves ocurridos hasta la fecha de la
publicación de este Decreto Constituyente en la Gaceta Oficial de la República Bolivariana
de Venezuela.

Menor dañosidad del hecho


Artículo 4. Las sanciones previstas en los artículos 21 y 23 del Decreto con Rango, Valor y
Fuerza de Ley del Régimen Cambiario y sus Ilícitos, se rebajarán a sus dos terceras partes,
cuando la totalidad de las operaciones realizadas por el mismo sujeto activo, no excedan en
conjunto de DIEZ MIL DÓLARES de los Estados Unidos de América (US$ 10.000,00) o su
equivalente en otra divisa. Sin menoscabo de las acciones del Estado para resarcir el daño
patrimonial público.

Responsabilidad civil
Artículo 5. La responsabilidad civil derivada de los ilícitos cambiarios cometidos hasta la
fecha de entrada en vigencia de este Decreto Constituyente, subsiste y será reclamada por la
República Bolivariana de Venezuela a los responsables, de conformidad con lo establecido
en el Código Penal y en el Código Civil. A tal efecto, la Procuraduría General de la
República procederá judicialmente para garantizar la restitución, la reparación y la
indemnización por los daños y perjuicios ocasionados contra el patrimonio público.

La Procuraduría General de la República procederá a gestionar ante la autoridad judicial,


administrativa, fiscal e incluso ante personas jurídicas de Derecho privado, tanto en el
ámbito nacional como internacional, todo lo referente a la restitución, reparación e
indemnización por los daños y perjuicios contra el patrimonio público ocasionados.

DISPOSICIÓN FINAL
Única. Este Decreto Constituyente entrará en vigencia a partir de su publicación en la
Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela.”

Del contenido del decreto, se desprende de sus primeros dos artículos, el campo de
cobertura que tiene este decreto derogatorio. Partiendo del objeto del mismo, el cual se
centra en el establecimiento de unas políticas cambiaras menos rígidas y favorables a los
venezolanos; este decreto no sólo deroga la Ley de Ilícitos Cambiarios, sino que también
deja sin efecto, el artículo 138 del Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley del Banco
Central de Venezuela que hace alusión exclusivamente al ilícito referido a la actividad de
negociación y comercio de divisas en el país; y también deja sin afectos todas aquellas
disposiciones normativas en cuanto colindan con lo establecido en este Decreto
Constituyente. Por tanto, toda ley que verse sobre el control de cambio y su ilicitud queda
sin efecto y ya no es considerado un delito con pena de prisión como justamente era
abarcado por la antigua ley, correspondiendo la aplicación retroactiva de la ley por resultar
mas favorable a los procesados de conformidad con establecido en los artículos 24 del la
Constitución Nacional, en concordancia con el artículo 2 del Código Penal, en estricta
vinculación con el principio de legalidad garantía estatuida en el artículo 49 numeral 6 de
la Constitución Nacional, en relación con el artículo 1 del Código Penal.

Sin embargo, en el artículo 3 se plantea una exclusión al señalar que en cuanto a los
delitos de Adquisición de divisas mediante engaño y Desviación del uso de las divisas “no
se aplicará la excepción de retroactividad de la ley más favorable a los casos graves” pero no
especifica los constituyentistas a que se refieren con la expresión “casos grave”, sino
que de seguidas en el artículo 4 instituye que las sanciones previstas en los artículos 21 y
23 del Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley del Régimen Cambiario y sus Ilícitos, se
rebajarán a sus dos terceras partes, cuando la totalidad de las operaciones realizadas por
el mismo sujeto activo, no excedan en conjunto de DIEZ MIL DÓLARES de los Estados
Unidos de América (US$ 10.000,00) o su equivalente en otra divisa.

Visto de esta forma, se desprende que los casos de los delitos de Adquisición de divisas
mediante engaño y Desviación del uso de las divisas, donde las transacciones cambiarias
que fueron realizadas con moneda extranjera adquiridas a través de los mecanismos del
régimen administrado afecten el patrimonio público, el Estado en aras de evitar su
impunidad se reserva la acción y el artículo 4 señala dos situaciones: la primera cuando la
totalidad de las operaciones realizadas por el mismo sujeto activo, no excedan en
conjunto de DIEZ MIL DÓLARES de los Estados Unidos de América (US$ 10.000,00) o su
equivalente en otra divisa. Y la segunda: cuando las operaciones realizadas por el sujeto
activo exceden los DIEZ MIL DÓLARES de los Estados Unidos de América (US$
10.000,00) o su equivalente en otra divisa.

En ese orden de ideas, en el primer caso, cuando la totalidad de las operaciones no


excedan en conjunto de diez mil dólares, no puede aplicarse retroactivamente el Decreto
Derogatorio del Régimen Cambiario y sus Ilícitos, sino que por ultractividad del Decreto
con Rango, Valor y Fuerza de Ley del Régimen Cambiario y sus Ilícitos, sigue
produciendo efectos y sobrevive en este caso concreto los artículos 21 y 23, referido a los
delito de Adquisición de divisas mediante engaño y Desviación del uso de las divisas y
sólo permite rebajarán a sus dos terceras partes las sanciones aplicables. En el segundo
caso, cuando las operaciones realizadas exceden los diez mil dólares, evidentemente no
se puede aplicar retroactivamente el Decreto Derogatorio del Régimen Cambiario y sus
Ilícitos y tampoco es procedente ninguna rebaja especial a las sanciones aplicables.
Entendiendo entonces este juzgador que los “casos graves” a los que se refiere el 3 del
mencionado decreto, son los previstos en el artículo 4, donde hay una afectación al
patrimonio público y el Estado en aras de evitar la impunidad consideró necesario
mantener las acciones, no obstante al hacer una interpretación A contrario sensu se
desprende con mediana claridad, que se aplicara retroactivamente este decreto, por ser la
ley más favorable, cuando no es un caso grave, lo que se debe establecer, a juicio de
este juzgador, ponderando las diversas variables fácticas que le acompañan, en especial
las consecuencias del mismo.

En el caso bajo análisis, la investigación, se inició con ocasión a un procedimiento policial


motivado a una denuncia que hiciere un miembro del Consejo Comunal, quien informó
que en un local de una Empresa de nombre "SERVICIO AUTOMOTRIZ SERVISEG, C.A.
(SERVISEGCA)" el cual fungía como una venta de repuestos, se realizaban boletos
aéreos falsos, por lo que se trasladaron a dicho local, ubicado en la Casa Nro. 28C-72 de
la Calle 57B del Barrio Amparo, Parroquia Cacique Mará, procediendo a realizar una
revisión en sus aéreas, localizando lo que se describe a continuación: A) Dieciocho (18)
pasaportes, Distintos instrumentos bancarios tales como: 01) Cuatro (04) tarjetas
pertenecientes a la entidad bancaria BANESCO, Una (01) tarjeta perteneciente a la
entidad bancaria B.O.D, Seis (06) tarjetas pertenecientes a la entidad bancaria
PROVINCIAL, Tres tarjetas pertenecientes a la entidad bancaria BANCO
BICENTENARIO, Once (11) chequeras pertenecientes a la entidad BANCARIA
BANESCO, Dieciocho (18) chequeras pertenecientes a la entidad Banco Occidental de
Descuento (BOD), Cuatro (04) chequeras pertenecientes a la entidad bancaria BANCO
PROVINCIAL, Tres (03) chequeras pertenecientes a la entidad bancaria CORP BANCA,
Dos (02) chequeras pertenecientes a la entidad bancaria BANCO BICENTENARIO, Una
(01) chequera perteneciente a la entidad bancaria BANCO MERCANTIL, Dos (02)
chequeras pertenecientes al Banco Internacional "WELLS FARGO", Así mismo siete (07)
sellos húmedos, de las entidades que se clasifican de la siguiente manera; dos (02)
pertenecientes a la empresa SERVISEG C. A: un (01) pertenecientes a la EMPRESA
MAQUINAS CENTRO AUTOMOTRIZ: uno (01) perteneciente al CONSULADO GENERAL
DE SAN FRANCISCO EE. UU: uno (01) perteneciente a LA UNIVERSIDAD DEL ZULIA:
uno (01) perteneciente a la ENTIDAD BANCARIA BANESCO; uno (01) perteneciente a la
COOPERATIVA DE INGENIERÍA Y SERVICIO COIS. D) De igual modo fueron retenidos
tres (03) sellos húmedos; en los cuales se aprecian las siguientes siglas; 01) ANULADO:
02).-PAGADQ: 03).-NO ENDOSABLE y veinticinco (25) carpetas, de color marrón,
contentivas de DOCUMENTOS PARA TRAMITES DE OBTENCIÓN DE DIVISAS EN
CADIVI.

De allí, luego de estudiar los elementos de convicción donde el representante fiscal


fundamento su acusación y de los elementos de pruebas que fueron ofertados y admitidos
en la audiencia preliminar, no se verifica un monto de la presunta operación cambiaria a
los fines de determinar la afectación al patrimonio del Estado, por tanto al ponderar esta
circunstancia y entendido que el decreto como se indico ut supra, maneja dos situaciones
la primera, cuando la totalidad de las operaciones no excedan en conjunto de diez mil
dólares y la segunda, cuando las operaciones realizadas exceden los diez mil dólares,
considera quien aquí decide que lo procedente en derecho es la aplicación retroactiva del
DECRETO DEROGATORIO DEL RÉGIMEN CAMBIARIO Y SUS ILÍCITOS, publicado
por La Asamblea Nacional Constituyente, en fecha 2 de agosto de 2018, Gaceta Oficial N°
Número 41.452, por resultar mas favorable a los procesados de conformidad con
establecido en los artículos 24 del la Constitución Nacional, en concordancia con el
artículo 2 del Código Penal, en estricta vinculación con el principio de legalidad garantía
estatuida en el artículo 49 numeral 6 de la Constitución Nacional, en relación con el
artículo 1 del Código Penal.

Tal afirmación estriba en el hecho, que al analizar los hechos que dieron origen a este
proceso y que para el Ministerio Público encuadraron en los delitos de OBTENCIÓN
FRAUDULENTA DE DIVISAS, previsto y sancionado en el artículo 10 de la Ley de Ilícitos
Cambiarios y RETENCIÓN DE SELLOS O TIMBRES, previsto y sancionado en el artículo
312 del Código Penal, en prejuicio del ESTADO VENEZOLANO, este juzgador de mérito
considera procedente el sobreseimiento de la presente causa de conformidad el numeral
2 del artículo 300 del Código Orgánico Procesal Penal, al estimar que en el presente caso
existe una causal que hace imposible la continuación del proceso penal.

En cuanto al segundo delito referido a RETENCIÓN DE SELLOS O TIMBRES, previsto y


sancionado en el artículo 312 del Código Penal, se desprende de los elementos de
convicción y los medios ofertados, el carácter punible del hecho imputado a los
acusados JUAN CARLOS GUERRA LÓPEZ titular de la cedula de identidad Nº V-
10.410.911, ISIMAR DEL CARMEN ÁVILA MOYEJA titular de la cedula de identidad Nº
V- 15.840.843, PATRICIA COROMOTO COLMENARES PÍRELA titular de la cedula de
identidad Nº V- 10.430.188. En razón que “para dar por demostrada la prescripción de la
acción penal, es imprescindible que el Juez exprese “…cuales son los elementos que
sirven de fundamento a los hechos probados que recoge su decisión, ello por medio de la
valoración de los elementos de convicción, cuya determinación no debe extenderse a la
participación y responsabilidad penal cuando la extinción de la acción se verifica en la
fase inicial del proceso penal, donde las diligencias de investigación carecen en principio,
de valor probatorio, por cuanto no están orientadas a la producción de pruebas, sino a la
búsqueda y aseguramiento de las fuentes de prueba” . “…si el proceso se encuentra en
fase de juzgamiento, antes de proceder a declarar la prescripción de la acción penal (de
ser el caso) debe determinarse la comprobación del hecho punible tipificado en la
legislación penal, debiendo ser previo o indefectible para su calificación jurídica, lo cual
solo puede surgir con la debida motivación judicial a través del análisis y valoración de los
elementos probatorios en el debate, siendo indispensable además, establecer la
culpabilidad o no de los acusados, con la finalidad de tutelar el derecho de la víctima a
reclamar eventualmente el resarcimiento de los daños, en garantía de lo previsto”.
(Sentencia nro 030, de fecha 11/02/14, Ponencia Magistrado Paúl Aponte Rueda).
Ahora bien, cabe señalar que el autor ERIC LORENZO PÉREZ, en su obra Comentarios
al Código Orgánico Procesal Penal, quinta edición, refiere que …La prescripción y la
caducidad, son circunstancias establecidas únicamente en interés del imputado, pero
deben declararse de oficio cuando existan, porque se refiere a un presupuesto
esencial de la estabilidad de los procesos: su extinción por el tracto del tiempo, que es, a
su vez, un presupuesto básico de la legalidad penal, ya que los juicios no pueden
permanecer abiertos indefinidamente, y corresponde a los jueces velar por ellos. De
este supuesto solo se excluirían los delitos que el sistema constitucional, violando una
probable norma de derecho natural inmanente, declare como imprescriptible. Pero solo
respecto a la prescripción y nunca a la caducidad.

La Sala de Casación Penal, ha establecido que: “…en cuanto al cálculo de la prescripción


por extinción del transcurso del tiempo del “ius puniendo” del Estado, que a tales efectos
debe tomarse en cuenta el termino medio de la pena aplicable al delito, o sea, la
normalmente aplicable, según el artículo 37 del Código Penal. (Sentencia nro 385,
del 21/06/05)”. (Sentencias nro 047, 105, y 202, de fechas 18/02/14, 01/04/14 y 25/06/14.
Magistrada Ponente Deyanira Nieves Bastidas).

Así las cosas, conforme se desprende de la acusación fiscal que uno de los tipos penales
donde se subsume la conducta desplegada por los acusados es el delito de RETENCIÓN
DE SELLOS O TIMBRES, previsto y sancionado en el artículo 312 del Código Penal;
prevé una pena de quince (15) días a doce (12) meses, el cual tiene una pena en su
término medio, de seis (6) meses siete (7) días de prisión. En este aspecto, es menester
referir que el artículo 108 ordinal 5to del Código Penal, refiere que la acción penal
prescribe por tres (03) años, si el delito merece pena de prisión de tres (03) años o
menos.

De igual modo, el artículo 109 ejusdem refiere que comenzara la prescripción para los
hechos punibles consumados desde el día de la perpetración; y conforme al artículo 110
idem, se interrumpe el curso de la prescripción de la acción penal por el pronunciamiento
de la sentencia condenatoria, o por la requisitoria que se libre en contra del reo, si este se
fugare, la citación que como imputado practique el ministerio público y las diligencias y
actuaciones procesales que le siguen, pero si el juicio continuare sin culpa del reo, se
prolongare por un tiempo igual al de la prescripción aplicable, mas la mitad del
mismo, se declarara prescrita la acción penal, siendo esta ultima la prescripción
judicial.

Así las cosas, se han precisado dos (02) circunstancias para el establecimiento de
la prescripción: la primera de ellas referidas al tiempo y a la falta de acción de los
órganos jurisdiccionales sobre una determinada causa (prescripción ordinaria);
mientras que la otra, referida al transcurso del juicio, cuando sin culpa del
imputado se prolongare por un tiempo igual al de la prescripción aplicable mas la
mitad del mismo (prescripción judicial). (Sala de Casación Penal, de fecha 11 de
noviembre del 2009, sentencia nro 559, ponente Eladio Aponte Aponte).
Igualmente, en la prescripción ordinaria su curso puede ser interrumpido, y nuevamente
comienza a computarse desde el día de su interrupción.

En este aspecto la Sala de Casación Penal en fecha 12/05/05, expediente nro 04-0422,
estableció: … se observa que aún no se encuentra prescrita la acción penal, ya que
desde el 05 de agosto de 2002, fecha de admisión de la acusación fiscal, acto que
según jurisprudencia de este tribunal, es el acto de interrupción de la prescripción
por excelencia, a la fecha, aún no han transcurrido los cinco años que dispone la ley.
(Subrayado y negrilla de este Juzgado).

Ahora bien, en cuanto al calculo de la prescripción ordinaria de la acción penal, la Sala de


Casación Penal, en sentencia N° 396, del 31 de marzo de 2000. (Caso: Raúl Eduardo
Zambrano Lozada y otros), decidió: “…La prescripción ordinaria consagrada en el artículo
108 del Código Penal extingue la acción que nace de todo delito, el Tribunal debe
declararla con el simple transcurso del tiempo y ésta debe calcularse con base en el
término medio de la pena del delito tipo, sin tomar en cuenta las circunstancias que
la modifican, como atenuantes, agravantes o calificantes…”.

Por lo que, mientras el proceso se encuentre vivo, la prescripción se va interrumpiendo en


forma sucesiva, y todos los actos interruptores de la prescripción hacen que esta
comience a correr de nuevo.

En este modo de ideas, en fecha 02 de junio del 2005, la Sala Penal estableció en el
expediente nro E05-0188:

…Esta Sala, en la decisión del 9 de mayo de 2005 se apoyó en el fallo de la Sala


Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia del 25 de junio de 2001, en la sentencia Nº
1118, que trata lo relativo a los actos procesales que interrumpen la prescripción de la
acción penal (artículo 110 del Código Penal), en la que se examinan, entre otros aspectos, lo
relativo al régimen procesal transitorio que surgió por la entrada en vigencia del Código
Orgánico Procesal Penal, en una materia de orden público como lo es la prescripción de la
acción penal. En tal fallo, se expresó lo siguiente: “...Lo que sí es cierto es que, mientras
dure el proceso, existe un acto continuo y sucesivo de interrupción de la prescripción sobre
la acción o los derechos que allí se ventilan,... El artículo 110 del Código Penal señala las
causas de interrupción de la prescripción. 1) La primera de ellas es la sentencia
condenatoria, que claro está al llegar al fin el proceso mediante sentencia, mal puede correr
prescripción alguna, ya que la acción quedó satisfecha. 2) Si el reo se fuga antes o durante
el juicio, mediante la requisitoria librada contra el imputado. 3) El auto de detención o de
citación para rendir indagatoria, figuras que actualmente no existen en el Código Orgánico
Procesal Penal, y las diligencias procesales que les sigan. Dado que el Código Orgánico
Procesal Penal señala que el proceso penal comienza en la fase investigativa, la citación del
imputado o su declaración como tal en dicha fase, que es equivalente a la citación para
rendir declaración, se convierte en actos interruptivos de la prescripción. 4) El desarrollo
del proceso, que corresponde a las diligencias procesales que le siguen a la citación para
rendir declaración, como se señaló antes. Por lo que mientras el proceso se encuentre vivo,
la prescripción se va interrumpiendo, en forma sucesiva. Todos estos actos interruptores
hacen que comience a correr de nuevo la prescripción desde el día de dichos actos. ..”.
(Resaltado de la Sala).
La Sala reitera que para esta determinación revisó el artículo 90 del derogado Código de
Enjuiciamiento Criminal, que establecía que la prescripción de índole procesal o judicial se
contaba a partir de la fecha en que se dio inicio al proceso (auto de proceder). Y además
examinó que en esta prescripción no sólo se requiere el transcurso del tiempo, sino que la
prolongación sea atribuible al órgano jurisdiccional, ya que si la dilación es atribuible al
reo, el lapso extintivo no corre. Es evidente, que el presente proceso ha durado más de
veintidós años y seis meses, pero tal dilación no ha sido imputable al órgano jurisdiccional
sino al acusado Luís Clemente Posada Carriles, quien, como se indicó, se fugó el 18 de
agosto de 1985; motivo por el cual no operó a su favor la prescripción extraordinaria o
judicial, de acuerdo con la legislación vigente en la materia, ya que la paralización de la
causa se debió a los hechos ejecutados por el solicitado en extradición. (negrilla del
tribunal).

En tanto, se verifica de autos las causas de diferimientos de los actos procesales


pautados, en razón de que para el cálculo de la prescripción extraordinaria o judicial, “…
debe tomarse en cuenta que, sólo se requiere el transcurso del tiempo –que no se
interrumpe-, además, que esa prolongación del proceso no sea por causas
imputables al procesado (sin culpa del reo)” (Sala de Casación Penal, sentencia nro
202, de fecha 25-06-14, Magistrado Ponente Deyanira Nieves Bastidas).

Por lo que, del estudio efectuado al presente expediente, claramente se puede verificar
que los acusados JUAN CARLOS GUERRA LÓPEZ titular de la cedula de identidad Nº V-
10.410.911, ISIMAR DEL CARMEN ÁVILA MOYEJA titular de la cedula de identidad Nº
V- 15.840.843, PATRICIA COROMOTO COLMENARES PÍRELA titular de la cedula de
identidad Nº V- 10.430.188, siempre han comparecido a cada uno de los actos fijados por
este Órgano Jurisdiccional, por lo que no puede ser atribuido a su persona, el retardo
procesal en la presente causa; y no puede tal circunstancia prolongar indefinidamente la
situación procesal del mismo. La figura de la prescripción constituye una institución de
indudable relevancia procesal y constitucional, en el entendido de que la misma comporta
una limitante de índole político criminal, que en atención al transcurso del tiempo,
establece un freno al poder punitivo del Estado, para la persecución penal del delito,
sancionándose la inactividad para perseguir y sancionar a los reos de delitos en todos
aquellos casos de dilaciones procesales imputables al Estado y sus representantes.
Es la consecuencia del Estado democrático Social de Derecho y Justicia que propugna el
artículo 2 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, debe precisarse,
que la duración del plazo dentro del cual el Estado debe llevar a cabo la persecución
penal y la ulterior materialización del castigo, se encuentra íntimamente ligado al derecho
constitucional de ser juzgado dentro de un plazo razonable y al principio de seguridad
jurídica, toda vez que a ningún ciudadano se le puede mantener indefinidamente bajo una
investigación o sometido a un proceso, que le genere una situación de incertidumbre,
ante la inacción de la persecución penal y la no imposición del castigo o absolución
correspondiente, en los términos que pauta la ley. (Sent. 042 6-3-2012 Magistrado
Ponente: Ninoska Queipo Briceño).

Por otra parte, “…el momento inicial para el cálculo de la prescripción judicial o
extraordinaria, tiene lugar desde el momento en que se efectúa el acto de imputación…”.
(Sentencia nro 202, fecha: 25/06/14. Ponente Magistrado Deyanira Nieves Bastidas). En
tal sentido, el caso en estudio, desde la fecha de la imputación, es decir, desde el día 03
de abril de 2014, fecha en la cual se llevo a cabo la audiencia de presentación de
imputado, hasta el día de hoy, ha transcurrido el tiempo que dispone el artículo 108
ordinal 5to del Código Penal en concordancia con el artículo 110 ejusdem; ya que, tal
como se indicara, el computo de la prescripción judicial o extraordinaria, debe
comenzar a partir de la fecha del acto de imputación formal, sea que este tenga
lugar en sede fiscal, durante el transcurso del procedimiento ordinario, o en la
audiencia que se celebre en razón de la aprehensión en flagrancia del imputado,
conforme a lo dispuesto en el artículo 373 del Código Orgánico Procesal Penal, o con
ocasión de la audiencia de presentación celebrada de conformidad con el articulo 250
eiusdem, una vez materializada la orden de aprehensión preventiva acordada por el
juzgado (Vid. Sentencias de la Sala Constitucional n° 276 del 20 de marzo de 2009 y n°
1381 del 30 de octubre de 2009): pues solo será a partir de ese momento que el
procesado se encuentre a derecho pudiendo cumplir con las cargas y deberes que le
impone su condición de imputado, siendo además ese el momento donde eventualmente
podrá examinarse si en el proceso seguido en su contra ha transcurrido el tiempo para
que opere la señalada extinción de la acción penal, y si el juicio se ha prolongado por
causas imputables o no a dicho encausado". (Sent. 042 6-3-2012 Magistrada Ponente:
Ninoska Queipo Briceño).

Por lo que, tales circunstancias y hechos analizados, hace que opera la prescripción
judicial a favor de los ciudadanos los acusados JUAN CARLOS GUERRA LÓPEZ,
ISIMAR DEL CARMEN ÁVILA MOYEJA y PATRICIA COROMOTO COLMENARES
PÍRELA, al haber transcurrido a la fecha más de los cuatro (04) años y seis (06) meses,
que dispone el artículo 108 ordinal 5to del Código Penal en concordancia con el artículo
110 ejusdem.

Se hace preciso traer a colación, decisión dictada en fecha 24/04/15, por la Sala
Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, signada con el nro 487, de la cual se
extrae:

…Precisado lo anterior, debe indicarse que cuando el proceso penal se desarrolla en forma
completa concluye con una sentencia definitiva, que condena o absuelve al imputado. Pero
no siempre el proceso llega a esa etapa final, sino que, en muchas ocasiones, en
consideración a causales de naturaleza sustancial expresamente previstas en la ley, que
hacen innecesaria su prosecución, se concluye anticipadamente, en forma definitiva. La
decisión judicial que detiene la marcha del proceso penal y le pone fin de esta manera,
constituye el sobreseimiento (Vid. decisión de la Sala Constitucional N° 299/2008).

En el vigente sistema procesal penal venezolano, el sobreseimiento procede    -artículo 300


del Código Orgánico Procesal Penal- cuando: 1. El hecho objeto del proceso no se realizó o
no puede atribuírsele al imputado o imputada; 2. El hecho imputado no es típico o concurre
una causa de justificación, inculpabilidad o de no punibilidad; 3. La acción penal se ha
extinguido o resulta acreditada la cosa juzgada; 4. A pesar de la falta de certeza, no exista
razonablemente la posibilidad de incorporar nuevos datos a la investigación, y no haya
bases para solicitar fundadamente el enjuiciamiento del imputado; 5. Así lo establezca
expresamente dicho Código.

 Y opera según ha establecido esta Sala Constitucional: “… cuando terminado el


procedimiento preparatorio, el Ministerio Público estime que proceden una o varias de las
causales señaladas precedentemente, en cuyo caso solicitará el sobreseimiento al Juez de
Control -artículo 320 del Código Orgánico Procesal Penal-; b.- al término de la audiencia
preliminar, si el juez de control considera igualmente que proceden una o varias de dichas
causales, salvo que estime que éstas, por su naturaleza, sólo pueden ser dilucidadas en el
debate oral y público -artículo 321- y c.- durante la etapa de juicio, el tribunal de juicio
podrá dictar el sobreseimiento, cuando se produzca una causa extintiva de la acción penal
o resulte acreditada la cosa juzgada, y siempre que no sea necesaria la celebración del
debate para comprobarla -artículo 323-”. (Vid. sentencia de esta Sala N° 299/2008).

 Respecto de la extinción de la acción penal -causal de sobreseimiento- esta Sala en


sentencia número 1118 del 25 de junio de 2001, asentó lo siguiente:

 “El artículo 110 del Código Penal señala las causas de interrupción de la prescripción.


En realidad, la figura del artículo 110 comentado,  no se trata de una prescripción, ya que
la prescripción es interruptible, y este término no puede interrumpirse. Más bien se trata
de una forma de extinción de la acción derivada de la dilación judicial. (omisis)
A juicio de esta Sala no se trata realmente de prescripciones, sino de extinciones de las
acciones, por decaimiento de las mismos, debido a la falta de impulso pleno del proceso,
hasta el punto que transcurre el tiempo y no se dictan sentencias definitivas.
(omisis)
  Estamos ante una figura que viene a proteger al reo de un proceso interminable, cuya
dilación no sea imputable a él por mal ejercicio o ejercicio abusivo de su derecho de
defensa, por lo que realmente no se trata ni de una prescripción, ni de una perención, sino
de una fórmula diferente de extinción de la acción, que opera ajena a la prescripción, ya
que mientras el proceso se ha estado desenvolviendo, la prescripción se ha ido
interrumpiendo.

 Ahora bien, la declaratoria de sobreseimiento, por prescripción de la acción penal,


supone la previa demostración del hecho punible que dio nacimiento a dicha acción. En
otras palabras, para que pueda ser decretada la prescripción de la acción penal es
necesario la demostración de un delito concreto.

 Esto se evidencia del contexto del artículo 108, ordinales 1º al 7º, del Código Penal, que
establecen lapsos prescriptivos diferentes tomando en cuenta la pena correspondiente a cada
delito. El artículo 109 eiusdem, en lo referente al comienzo de la prescripción, dispone que,
para los hechos punibles consumados, el lapso prescriptivo comenzará a correr desde el
día de la perpetración del delito, estableciendo, igualmente, términos de prescripción
precisos para los delitos continuados o permanentes y para los cometidos en grado de
tentativa o frustración. Por otra parte, el artículo 113 del mismo Código sustantivo prescribe
que “la responsabilidad civil nacida de la penal no cesa porque se extinga ésta o la pena,
sino que durará como las demás obligaciones civiles con sujeción a las reglas del derecho
civil”.

 Así lo ha sostenido esta Sala en anteriores oportunidades, que “[a]ún cuando la acción
penal para perseguir los delitos materia de la acusación del Ministerio Público y de la parte
acusadora, pudiera estar prescrita, la comprobación de tales hechos punibles es
indispensable a los efectos de las reclamaciones civiles que pudieran surgir como
consecuencia de tales infracciones delictivas” (Decisión N° 554/2002).

 …

 Así las cosas, debe esta Sala ratificar lo expuesto por el anterior fallo, en el sentido de que
la determinación del delito es indispensable en las decisiones que declaran el
sobreseimiento por prescripción de la acción penal, que debe en todo caso efectuarse de ser
el caso en base al análisis de las pruebas cursantes a los autos, sin que ello signifique que
se está condenando al acusado a cumplir una determinada pena.

 Pero tal como se expuso en este fallo en párrafos anteriores, y contrario a lo expuesto por
los integrantes de la Sala N° 2 de la Corte de Apelaciones del Circuito Judicial Penal del
Estado Zulia, dicho sobreseimiento por prescripción de la acción penal puede declararse
en diversas etapas del procedimiento, y no única y exclusivamente -como erradamente lo
indicó- en el juicio oral y público; inclusive en dicho supuesto se hace innecesaria la
realización del mismo, pues su comprobación obedece –como ya referimos-, a cómputos
completamente objetivos que por su naturaleza reglada pueden ser establecidos en
cualquier estado y grado del proceso, de acuerdo al iter procesal particular de la causa
penal de que se trate.
En efecto, la prescripción de la acción penal deben declararla tanto los Tribunales de
Primera Instancia en lo Penal y las Cortes de Apelaciones, sin necesidad de esperar la
realización de juicio oral alguno, pues ese lapso de espera innecesario, atentaría contra la
tutela judicial efectiva de los justiciables, claro está, cuando efectivamente se ha
extinguido la acción penal.

Por ello, los jueces están obligados a emitir el pronunciamiento respectivo, esto es, si hay o
no la prescripción, en las causas que estén sometidas a su conocimiento en el momento
procesal de que se trate, sin atender a otra circunstancia que a las directrices legales y
elementos probatorios existentes a los autos (para el caso de sobreseimiento por
prescripción de la acción penal).

Vale destacar sentencia dictada por la Sala de Casación Penal, nro 619 de fecha
03/11/05, donde estableció: …En efecto, procede en la presente causa la prescripción de
la acción penal que es materia de orden público, tal y como lo decidió la Sala Accidental
de la Corte de Apelaciones del Circuito Judicial Penal del Estado Táchira.

Así mismo la Sala Penal en expediente C05-0226-490 de fecha 16/11/06: La prescripción


es una institución legal de orden público que se produce por el sólo transcurso del tiempo
señalado en la Ley. En consecuencia, una vez verificada, hace imposible la persecución
del hecho punible y la pretensión punitiva del mismo.

La prescripción de la acción penal es de orden publico, por lo que tanto los Tribunales de
Primera Instancia en lo Penal y las Cortes de Apelaciones pueden declarar, de oficio, el
sobreseimiento de la causa, por extinción de la acción penal, en las causas que estén
sometidas a su conocimiento. (Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, en
fecha 23 de noviembre del 2009, bajo el nro 1593). La prescripción judicial es una
garantía del derecho a la tutela judicial efectiva, que exige el seguimiento de un proceso o
juicio sin dilaciones indebidas y constituye un límite al poder punitivo del Estado, de allí
que, la interpretación de las normas que regulan la materia debe hacerse de manera
cónsona con los derechos y garantías establecidas a su favor. (Sentencia nro 202, fecha:
25/06/14. Ponente Magistrado Deyanira Nieves Bastidas).

En consecuencia, hechas las anteriores consideraciones se observa la existencia de un


motivo que impide la continuación del presente proceso penal, por cuanto al delito de
RETENCIÓN DE SELLOS O TIMBRES, previsto y sancionado en el artículo 312 del
Código Penal, imputado al ciudadano JUAN CARLOS GUERRA LÓPEZ, ISIMAR DEL
CARMEN ÁVILA MOYEJA, PATRICIA COROMOTO COLMENARES PÍRELA, se
encuentra evidentemente prescrito, por haber trascurrido el lapso estipulado para que
opere la prescripción judicial, y siendo la prescripción una Institución de orden público y
una causal de extinción de la acción penal, prevista en el artículo 49 ordinal 8vo del
Código Orgánico Procesal Penal, considera este Juzgador, que lo mas ajustado a
derecho es decretar el sobreseimiento de la presente causa de conformidad con lo
dispuesto en el artículo 300 ordinal 3ero del Código Orgánico Procesal Penal en relación
con el artículo 108 ordinal 5to ejusdem, en concordancia con el artículo 110 en su primer
parágrafo ejusdem, por cuanto la acción penal ya esta prescrita.
En tal sentido, refiere el artículo 300 ordinal 3° del Código Orgánico Procesal Penal lo
siguiente: "El sobreseimiento procede cuando: ... 3º. La acción penal se ha
extinguido…”.

En definitiva, establecido lo anterior, concluye este Juzgador que al analizar los hechos
que dieron origen a este proceso y que para el Ministerio Público entre los delitos
tipificados se configuro la RETENCIÓN DE SELLOS O TIMBRES, previsto y sancionado
en el artículo 312 del Código Penal, lo procedente es el sobreseimiento de la presente
causa de conformidad con el numeral 3 del artículo 300 del Código Orgánico Procesal
Penal, al verificarse que en el presente caso, con respecto al segundo delito la acción
se extinguió por operado la prescripción judicial de conformidad con el artículo 300
numeral 3 “La acción penal se ha extinguido”. Y así se decide.

En merito de lo anterior, y estando en la oportunidad para decidir respecto de la


devolución, el comiso, o destrucción de aquellos objetos que fueron incautados durante el
transcurso de la investigación, pues ello resulta del mandato legal contenido en los
artículo 348 y 349 del Código Orgánico Procesal Penal, que ordenan que luego de
culminado el debate y en la oportunidad de dictar la respectiva sentencia pronunciarse
además respecto de los objetos incautados y ocupados durante el proceso.

En este orden de ideas, como ya se indicó, es en la sentencia definitiva la oportunidad del


juez o jueza de juicio ordenará la restitución de los objetos afectados al proceso que no
estén sujetos a comiso; a quien el tribunal considera con mejor derecho a poseerlos, sin
perjuicio de los reclamos que correspondan ante los tribunales competentes, así como,
sobre el comiso, destrucción o confiscación, en los casos previstos en la Constitución de
la Republica Bolivariana de Venezuela y la Ley, toda vez que en primer lugar, los objetos
íntimamente relacionados con la comisión del hecho punible son incautados en la fase
preparatoria o en la fase preliminar, a los fines del aseguramiento de los objetos activos y
pasivos a los efectos futuros del fallo, ya que, en la mayoría de los casos son elementos
de prueba relacionados con los delitos que se están investigando, razón por la cual el
destino final de los mismos compete al Juez o Jueza que dicta la Sentencia Definitiva,

En este caso, el sobreseimiento de la presente causa de conformidad con los numerales 2


y 3 del artículo 300 del Código Orgánico Procesal Penal, seguida a los ciudadanos JUAN
CARLOS GUERRA LÓPEZ titular de la cedula de identidad Nº V- 10.410.911, ISIMAR
DEL CARMEN ÁVILA MOYEJA titular de la cedula de identidad Nº V- 15.840.843,
PATRICIA COROMOTO COLMENARES PÍRELA titular de la cedula de identidad Nº V-
10.430.188, por los tipos penales de OBTENCIÓN FRAUDULENTA DE DIVISAS, previsto
y sancionado en el artículo 10 de la Ley de Ilícitos Cambiarios y RETENCIÓN DE
SELLOS O TIMBRES, previsto y sancionado en el artículo 312 del Código Penal, en
prejuicio del ESTADO VENEZOLANO, lo procedente en derecho es ordenar la restitución
de los objetos incautado. Y así se decide.
Sobre la base de las consideraciones anteriores, concluye este tribunal de merito que al
analizar los hechos que dieron origen a este proceso y que para el Ministerio Público
encuadraron en los delitos de OBTENCIÓN FRAUDULENTA DE DIVISAS, previsto y
sancionado en el artículo 10 de la Ley de Ilícitos Cambiarios y RETENCIÓN DE SELLOS
O TIMBRES, previsto y sancionado en el artículo 312 del Código Penal, en prejuicio del
ESTADO VENEZOLANO, que lo procedente es el sobreseimiento de la presente causa
de conformidad con los numerales 2 y 3 del artículo 300 del Código Orgánico Procesal
Penal, al verificarse que en el presente caso, con respecto al primer delito, existe una
causal que hace imposible la continuación del proceso penal, referido a que: “…2. El hecho
imputado no es típico o concurre una causa de… no punibilidad…”. Y para el segundo la
acción se extinguió por operado la prescripción judicial de conformidad con el artículo 300
numeral 3 “La acción penal se ha extinguido”. Y así se decide.
VI

DISPOSITIVA

En consecuencia de los fundamentos antes expuesto TRIBUNAL SEXTO DE PRIMERA


INSTANCIA EN FUNCIONES DE JUICIO DEL CIRCUITO JUDICIAL PENAL DEL
ESTADO ZULIA, Administrando Justicia, en Nombre de la República Bolivariana de
Venezuela y por Autoridad de la Ley, DECRETA:

PRIMERO: El sobreseimiento de la causa, a favor de los ciudadanos JUAN CARLOS


GUERRA LÓPEZ titular de la cedula de identidad Nº V- 10.410.911, ISIMAR DEL
CARMEN ÁVILA MOYEJA titular de la cedula de identidad Nº V- 15.840.843,
PATRICIA COROMOTO COLMENARES PÍRELA titular de la cedula de identidad
Nº V- 10.430.188, en cuanto al delito de OBTENCIÓN FRAUDULENTA DE DIVISAS,
previsto y sancionado en el artículo 10 de la Ley de Ilícitos Cambiarios, de conformidad el
numeral 2 del artículo 300 del Código Orgánico Procesal Penal, al estimar que en el
presente caso existe una causal que hace imposible la continuación del proceso penal.

SEGUNDO: La extinción de la acción por haber operado la prescripción judicial de


conformidad con el artículo 300 numeral 3 del Código Orgánico Procesal Penal y en
consecuencia se decreta el sobreseimiento de la presente causa, a favor de los
ciudadanos JUAN CARLOS GUERRA LÓPEZ titular de la cedula de identidad Nº
V- 10.410.911, ISIMAR DEL CARMEN ÁVILA MOYEJA titular de la cedula de
identidad Nº V- 15.840.843, PATRICIA COROMOTO COLMENARES PÍRELA
titular de la cedula de identidad Nº V- 10.430.188, en cuanto al delito de RETENCIÓN
DE SELLOS O TIMBRES, previsto y sancionado en el artículo 312 del Código Penal, de
conformidad con el numeral 3 del artículo 300 del Código Orgánico Procesal Penal, al
verificarse que en el presente caso, con respecto al segundo delito la acción se extinguió
por operado la prescripción judicial.
TERCERO: Se ordena la restitución de los objetos incautados en la fase de investigación,
de conformidad con los artículos 293 del Código Orgánico Procesal Penal.

CUARTO: Se acuerda notificar a las partes de la presente decisión.

Dada, firmada y sellada en este Tribunal Sexto de Primera Instancia en Funciones de


Juicio del Circuito Judicial Penal del Estado Zulia, a los seis (6) días del mes de
septiembre de año dos mil dieciocho (2018). Años 208º de la Independencia y 159º de la
Federación.-

EL JUEZ EN FUNCIONES DE JUICIO N° 6

ABG. DANIEL JOSE SEQUEDA YÁNEZ


SE DICTÓ DECISIÓN N° 024-18 mediante la cual se declara: PRIMERO: El
sobreseimiento de la causa, a favor de los ciudadanos JUAN CARLOS GUERRA
LÓPEZ, ISIMAR DEL CARMEN ÁVILA MOYEJA, PATRICIA COROMOTO
COLMENARES PÍRELA, en cuanto al delito de OBTENCIÓN FRAUDULENTA DE
DIVISAS, de conformidad el numeral 2 del artículo 300 del COPP. SEGUNDO: La
extinción de la acción por haber operado la prescripción judicial de conformidad con el
artículo 300 numeral 3 del COPP y en consecuencia se decreta el sobreseimiento de la
presente causa, a favor de los referidos ciudadanos , en cuanto al delito de RETENCIÓN
DE SELLOS O TIMBRES. TERCERO: Se ordena la restitución de los objetos incautados
en la fase de investigación. Se deja constancia que por problemas del sistema
independencia no pudo ser adjuntado el documento correspondiente en alfresco.

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