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19971215
ENSAYO 1
Principio de la Dignidad humana
Concepto:
¿Qué es un principio?
Principio: es lo que está al comienzo de una cosa, por ejemplo, las premisas son principios de la
conclusión, pero de igual manera este concepto aplica en varios contextos, existen principios
lógicos, que su principio es justificar ciertas reglas a seguir, con la conclusión de lograr
coherencia a los pensamientos, al final resulta ser un término que cobra sentido según el ámbito
en que se aplique.
Tomando en cuenta la última definición, podemos decir, que la palabra lo que busca es
representar ciertas maneras de ser, ciertas reglas o directrices de acción, dentro de las conductas
libres de los seres humanos y es por esto que la doctrina social de la Iglesia plantea una seria de
principios de reflexión y normas, que podemos concluir que su ámbito de aplicación es social,
para que sirva de guía y reflexión a toda sociedad humana y constituyen los verdaderos puntos
de apoyo de la enseñanza social católica
¿Cómo puedo explicar el principio de la dignidad humana según la Doctrina Social de la Iglesia?
Partiendo de un conjunto de textos redactados por los distintos Papas, se cuenta con el
Compendio de la doctrina social de la Iglesia1, que explica el principios a la dignidad de la
persona humana, entre otros principios, el cual se considera unos de los principios de constate
reflexión y parte del estudio y enseñanza de la doctrina social de la Iglesia en la formación de los
sacerdotes, partiendo de que ya tenemos más claro el concepto de principio, procedemos a
explicar el principio de la dignidad humana, contexto de la persona humana y sus múltiples
dimensiones.
A partir de entender los 3 principios descritos en la pregunta anterior, como concluimos que la
dignidad humana es la raíz universal de los principios del orden social y se fundamenta en que
LA PERSONA HUMANA es Criatura a imagen de Dios
“El mensaje fundamental de la Sagrada Escritura anuncia que la persona humana es criatura de
Dios (cf. Sal 139,14-18) y especifica el elemento que la caracteriza y la distingue en su ser a
imagen de Dios: « Creó, pues, Dios al ser humano a imagen suya, a imagen de Dios le creó,
macho y hembra los creó » (Gn 1,27). Dios coloca la criatura humana en el centro y en la cumbre
de la creación: al hombre (en hebreo « adam »), plasmado con la tierra (« adamah »), Dios insufla
en las narices el aliento de la vida (cf. Gn 2,7). De ahí que, « por haber sido hecho a imagen de
Dios, el ser humano tiene la dignidad de persona; no es solamente algo, sino alguien. Es capaz de
conocerse, de poseerse y de darse libremente y entrar en comunión con otras personas; y es
llamado, por la gracia, a una alianza con su Creador, a ofrecerle una respuesta de fe y de amor
que ningún otro ser puede dar en su lugar”
La Dignidad Humana en la Iglesia señala que ninguna institución estatal, ninguna propuesta
política, ningún bien terrenal prevalece sobre el respeto a la dignidad de cada ser humano, creado
a imagen de Dios mismo, redimido en su humanidad por Jesucristo, verdadero Dios y hombre.
¿Qué entiendo por Dignidad Humana?
Este principio, se fundamenta que el hombre ha sido creado imagen y semejanza de Dios, es por
esto que la dignidad humana va más allá de nuestra propia libertad, no es una cosa y tiene un
valor en sí misma y que se nos da como regalos al nacer, al heredar rasgos de nuestro creador
deja en evidencia la amistad personal con El y por ser un regalo el ser humanos, da paso a
entender que nuestro próximo de igual manera debe ser valorado.
El hombre no es un ser solitario, ya que, por su íntima naturaleza, es un ser social, y no puede
vivir ni desplegar sus cualidades, sin relacionarse con los demás.” (Pontificio Consejo Justicia y
Paz, 2005). Es algo natural, parte de nuestro ADN, parte de nuestro ser, la dignidad de la
persona humana da sentido nuestra manera de convivir en una sociedad, es prácticamente un
instinto de convivir en armonía y aunque al pecar nos alejamos de esta naturaleza, debe
prevalecer la dignidad Humana ( El bien) que es siempre un bien común, es decir,
simultáneamente mío y de su prójimo, por lo cual el bien que realizo a otros lo hago a mí mismo.
El derecho que tiene cada ser humano, de ser respetado y valorado como ser individual y social,
con cada una de nuestras características y condiciones particulares, por el solo hecho de ser una
persona.
Dentro de los más recientes Homilía del santo Padre Francisco nos regala las siguientes palabras
“Toda injusticia que se comete contra una persona que trabaja es un atropello a la dignidad
humana, incluso a la dignidad del que comete la injusticia: se baja el nivel y se termina en esa
tensión de dictador-esclavo. En cambio, la vocación que Dios nos da es muy hermosa: crear, re-
crear, trabajar. Pero esto puede hacerse cuando las condiciones son justas y se respeta la dignidad
de la persona.”
Aquí nos refleja como la injusticia es un atropello a la dignidad, tanto por quien lo hace, como el
afectado, es increíble como esto nos da a entender lo valioso de la persona y como nos ayuda a
comprender que cada vida es valiosa y no podemos atentar contra la misma.
Bibliografía
f. Dialnet-EticaYDignidadHumana-5556728.pdf