PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

El turismo según el concepto que proporciona la Organización Mundial del Turismo, OMT
(2005-2007) es un fenómeno social, cultural y económico relacionado con el movimiento
de las personas a lugares que se encuentran fuera de su lugar de residencia habitual por
motivos personales o de negocios/profesionales. Estas personas se denominan visitantes
y el turismo tiene que ver con sus actividades, de las cuales algunas implican un gasto
turístico. Teniendo en cuenta que la realización de esta acción (el turismo: actividad o
hecho de viajar por placer según la RAE) incluye diversos factores, para que se dé de una
manera organizada es necesario que se caracterice cada uno de estos.
En la actualidad se le da una gran importancia estratégica al turismo, por su envergadura
económica y social, en el desarrollo y diversificación de la economía regional. El
crecimiento de las pernoctaciones realizadas en establecimientos hoteleros, la difusión de
la riqueza gastronómica, la revalorización del patrimonio natural y cultural y la ampliación
de las plazas turísticas, entre otros indicadores, ponen de manifiesto un evidente impacto
en la dinámica del sector, creando unas expectativas bien fundamentadas sobre el
positivo papel que en el futuro el turismo puede jugar como elemento estratégico de
crecimiento de la producción regional y del empleo, si se indaga en éste de tal manera
que podamos llegar a conocer las áreas débiles para trabajarlas y las áreas fuertes para
potencializarlas.
En 2019 se registraron 1.500 millones de llegadas de turistas internacionales en el
mundo, eso supone un incremento del 4% en la actividad turística, en relación a 2018. No
obstante, es una cifra que indica que los crecimientos se van haciendo más pequeños
pues el crecimiento en 2017 fue del 7% y en 2018 del 6%. Ahora, esto no quita el
crecimiento e importancia que ha cobrado el turismo puesto que la industria pasó de
gestionar 25 millones de turistas en 1950 a la cifra actual. Los crecimientos de llegadas
por área arrojan las siguientes cifras; Europa: +4%, Las Américas: +2%, Asia y el Pacífico:
+5%, Oriente Medio: +8% y África: +4% (con resultados muy positivos en el Norte de
África de +9%).
La WTTC (World Travel & Tourism Council) estima que el PIB (Producto Interior Bruto)
mundial del sector turístico ha crecido en un 3% (como las llegadas), aunque aquí
también se ve una desaceleración, ya que en 2017 fue del 4,6% y en 2018 del 3,9%.
Estas cifras y el hecho que el sector turístico no ha parado de crecer en los últimos 10
años, demuestran la fortaleza de la insdustria, que no deja de crecer por encima de los
niveles de la economía general (+3%) aún en tiempos de gran incertidumbre (causados
entre otras cosas por la desaceleración económica, el Brexit, la guerra comercial entre
Estados Unidos y China o las protestas ciudadanas que ha recorrido América Latina o
Hong Kong). Hoy los viajes se han vuelto la regla y no la excepción, todos tienen dentro
de sus propósitos viajar y se ha convertido en algo normal en la vida de las personas; es
impresionante que hace solo unas décadas, los viajes internacionales estaban reservados
a una pequeña élite, la evolución del turismo es indiscutible.
En Colombia, mientras tanto han pasado más de cuatro años desde que el sector turístico
pasó de ser el gran desafío del Gobierno Nacional a convertirse en uno de los principales
impulsadores de la economía del país, las cifras así lo demuestran: desde 2015 el valor
agregado turístico nacional ha crecido 31%, el sector subió siete puestos en el índice de
Competitividad en Viajes y Turismo del Foro Económico Mundial entre 2017 (puesto 62 /
136) y 2019 (55 / 140), y generó más de 1,9 millones de empleos en 2018 (3,7% más que
en 2017) y 8,8% del total de empleos del país.
Durante el año pasado la llegada de visitantes no residentes a Colombia llegó a
4.515.932, superando la meta prevista y reflejando un crecimiento del 2,7% con respecto
a 2018. Además, en 2019 se presentó récord en ocupación hotelera que alcanzó el
57,8%, en ingresos nominales de las agencias de viajes con un crecimiento del 3,7%, en
ingresos de los hoteles con un aumento del 10,6%, en conectividad internacional con 17
nuevas rutas y 39 nuevas frecuencias internacionales y en pasajeros movilizados nacional
e internacionalmente que alcanzó los 41,2 millones de pasajeros.
Los resultados anteriores son producto de una serie de políticas que el Gobierno
Colombiano ha ideado para fortalecer el sector turístico vigilado por el Ministerio de
Comercio, Industria y Turismo, es el caso del impacto que han generado ciertos proyectos
como el de la marca “Colombia: el riesgo es que te quieras quedar”, para el mejoramiento
de la imagen de Colombia en el extranjero. Sin embargo, en la ciudad de Valledupar no se
le ha dado la importancia que este sector de la economía merece pues ni siquiera se
tienen identificadas las oportunidades que tiene la región con respecto al turismo y mucho
menos caracterizadas las mismas.
Actividades como la explotación petrolera y minera o la agricultura y ganadería ocupan un
lugar más relevante en la región, por tal razón sobre todo en los municipios mineros se
hace evidente que la dinámica de alimentación, hospedaje y servicios gira en torno a
dichas actividades pues estos no son pensados con una fin turístico, en este sentido, muy
pocos establecimientos poseen registro nacional de turismo o conocen algún tipo de
programa del Viceministerio de turismo y no ven en la policía de turismo un ente
acompañante sino más bien sancionatorio. De esta manera, es evidente la falta de
asociatividad empresarial entre los prestadores de servicios en cada municipio donde no
se ve como importante.
Está claro que hay una falta de conocimiento y aprovechamiento de las bondades de este
sector económico, resultado de la falta de planeación desde sus gobiernos municipales, lo
cual también influye en el hecho de que no sea gran receptora de turistas tanto nacionales
como extranjeros y esto a su vez produce que sus niveles de grado de desarrollo turístico
se consideren bajos comparado con otras ciudades del país con igual número de
población.
 ANTECEDENTES

Al identificar que en el Municipio de Valledupar Cesar no existía un referente cuantitativo o

cualitativo que indicara en un solo contexto las opciones de un turismo sostenible y
sustentable en Valledupar se planteó hacer una metodología investigativa, descriptiva,
transversal y Observacional, la cual diera los aportes teóricos y estadísticos de la
percepción de los turistas sobre Valledupar. Esta fase se desarrollará por medio de
encuestas, que están dirigidas al sector gremial y a los turistas que puedan encontrarse
en los sitios más representativos de la ciudad como aeropuerto, terminal de transporte,
sitios turísticos.
Es pertinente para mi investigación porque nos permite identificar uno de los factores que
hace que Valledupar no sea receptora de turistas nacionales y extranjeros teniendo todos
los atributos para serlo; uno de estos factores es que los gobiernos municipales no han
coordinado sus políticas de desarrollo turísticos, con los agentes de la cadena de valor
turístico; restaurantes, hoteles, hostales, agencias de viajes, academias. Estos son
influyentes para el crecimiento de la ciudad, generan inversiones y oportunidades de
empleo. Por otro lado, como método de recolección de datos podemos tomar como
referencia la encuesta, relacionadas con la necesidad de establecer opiniones que tiene la
ciudad de Valledupar para potencializar el turismo.
Existe la evidencia empírica que muestra el pobre desarrollo del sector turístico en la
ciudad de Valledupar, según la revista (Portafolio, 2017), la ciudad no es gran receptora
de turistas nacionales y extranjeros. El grado de desarrollo turístico de Valledupar en
relación con otras ciudades del país con igual población presenta niveles muy bajos. Por
la falta de planeación desde sus gobiernos municipales, la ciudad no ha consolidado su
sector turístico. A partir de la Carta Política de 1991 se ha buscado que sean las
gobernaciones y las alcaldías las que tomen la iniciativa de establecer entidades o
mecanismos que permitan al turismo hacer presencia regional, formular propuestas y
coordinar acciones con las instancias nacionales e internacionales.
Para poder desarrollar el turismo de una manera sostenible y competitiva es de vital
importancia fortificar la presencia estatal local en todo el proceso, como lo sostiene la ley
300 de 1996 y las leyes y decretos que la estructuran, y como lo planifica la
descentralización turística del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo.
Valledupar cumple con las características que definen un destino turístico musical; en
primera medida, se identifica la ciudad con su música; segundo, el gran nivel de
aceptación e importancia del vallenato en el ámbito nacional e internacional; tercero, hay
un creciente auge de espectáculos musicales en la ciudad; cuarto, su entorno natural y
cultural es la fuente de inspiración para los creadores de la música vallenata; quinto,
porque se está desarrollando un ambiente de producción musical muy dinámico; sexto,
por el desarrollo institucional de sus academias de música; séptimo, por el grado de
asociatividad de los prestadores de servicios turísticos y los prestadores de servicios
culturales; entre otros.