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Quien iba a pensar o predecir, que después del año 2019 el mundo iba a dar un giro completo

que revolucionara su historia para siempre; Quien iba a pensar que lo que parecía tan lejano
amenaza en estos momentos el orden mismo de todo los ámbitos hasta en el económico. Lo
que estamos viviendo es una realidad y aunque parezca sacado de una película de Hollywood
la verdad es que no lo es y que tampoco va a terminar con el final feliz de siempre. El mundo
después de superar esto a travesara una crisis económica quizás mayor a la gran depresión
sufrida en la década de 1930 afectando toda la economía global y dejando en la ruina a
países en vías de desarrollo. Pero a ¿qué se debe este desbalance completo del sistema
económico de un país a causa de la cuarentena?
Parece ilógico pensar que un simple cese de actividades productivas podría destruir
prácticamente una economía sólida que llevaba mucho tiempo estructurándose y
adaptándose a las nuevas tecnologías, pero la realidad es que sí; este aparente cese
productivo por un tiempo relativamente corto, es un golpe directo a la falta de anticipación de
escenarios en la planeación estratégica de cada país ya que este es un panorama con
medidas preventivas que conlleva al cese casi completo de toda la actividad económica del
país.
Para entender el panorama que en estos momentos se avecina una vez se levante totalmente
la cuarentena tomemos como base un país en desarrollo como Colombia (con el fin de
analizar el impacto real en países del tercer mundo); Para el cuarto trimestre del año 2019 el
país presentaba un valor de PIB de casi 79822 millones de dólares indicando un crecimiento
del 3,3 % con respecto al año posterior queriéndonos demostrar a modo de índice productivo
que el país tuvo un aumento de los niveles de producción que justificaba de cierta manera el
aumento de la participación nacional en el comercio internacional, a eso también debe
sumársele la caída constante del precio del petróleo debido a la baja demanda y a su
agravante tras una guerra comercial entre Rusia y Arabia saudita junto a la salida de las
reservas de petróleo de estados unidos; teniendo este panorama inicial a comienzos de este
año podía observarse a pesar de todo se mantenía una economía estable; sin embargo al
decretarse la cuarentena total todos los sectores productivos entraron en recesión de
actividades absoluta mandando en un principio a todos los trabajadores a vacaciones legales,
pero en vista de los próximos alargues del confinamiento empezó a darse un aumento del
desempleo ya que al no haber ingresos adquiridos por la producción las compañías no
estaban en la capacidad de mantener los salarios y los gastos fijos elevados; A parte de ello
se empezó a generar una inflación en base a la demanda debido al exceso de producto que
se solicitaba en el mercado para poder pasar el confinamiento el cual tenía una característica
especial y era que crecía exponencialmente y de manera desmedida con el paso de los días,
puesto que no existía como tal una respuesta inmediata de la oferta.
Por ende en poco tiempo de establecer la cuarentena ya nos adentrábamos a un panorama
en donde directamente se conducía el país a una dura estanflación. Simultáneamente a esto
Colombia como se viene pronosticando desde el 2015 no ha podido mitigar del todo su
dependencia al petróleo por lo que poco a poco se empezaban a sentir los efectos de una
temprana enfermedad holandesa alterando su economía y encareciendo aún más los
productos principalmente de la canasta familiar.
Las implicaciones de este descenso considerable en el PIB del país se ven reflejados dentro
de las variables internas de la formulación keynesiana (PIB=ingreso + Consumo + gasto
Publico+ Expo. Neta); a través de esta podemos observar con mayor detalle la consecuencias
directas que sufrirán los habitantes, para comenzar con ello los ingresos se van a ver
severamente afectados ya que al no haber una reactivación normal de la economía si no
progresiva muchas de las compañías no van a poder sostener la nómina laboral llevaban
causando tomar dos medidas la disminución de la nómina y mantener personal adecuado en
las partes importantes de la ruta crítica o una rebaja salarial de casi un 50% para todos los
trabajadores implicando a su vez que desincentive la inversión y la cultura del ahorro puesto
que la propensión a consumir será mayor a la del ahorro por no decir que casi completa; sin
embargo a pesar de que la propensión indicaría un aumento en el consumo la realidad es que
este se mantendría equilibrado casi constante con pequeñas alzas, debido a que si la
demanda seria exagerada pero tras la poca reacción y capacidad de producción que tendría
las fabricas para soportar la demanda de este haría que se creara una inflación en base a la
demanda (que a la larga causaría una disminución del mismo); obviamente el presupuesto
para gasto público será redestinado en gran medida para brindar ayudas humanitarias y para
el caso de Colombia destinar el capital para pagar el incremento de la deuda con los fondos
internacionales, ya para finalizar el componente de las exportaciones netas por el momento es
nula puesto que hasta que no haya un verdadero control completo de la pandemia no se
reactivaran las actividades comerciales internacionales por lo que este factor se ve
drásticamente reducido o nulo. (Economistas a la fecha estiman que el PIB puede resultar en
un decrecimiento de casi 50 a 60 billones de pesos)
Ahondando un poco más en el tema del desempleo algunos estadísticos estiman que a la
fecha la tasa en Colombia ha incrementado en un 19,2% con respecto al índice presentado a
principios de este año, teniendo como principal causa la crisis de la industria a raíz del covid-
19; sin duda este será quizás el detonante de múltiples problemas sociales que podrían
desatar un caos completo pero ¿Por qué? Hay dos factores que en estos momentos limitan el
campo de acción para contrarrestar, el primero es que el confinamiento impide el re
direccionamiento de la personas es decir, dentro de una economía normal las personas
habitualmente entran en un desempleo friccional o se movilizan a la economía informal lo que
de cierta forma sirve como excusa para que el gobierno no subsidie directamente un fondo
gubernamental para los desempleados como en otros países desarrollados y el otro factor es
el impedimento del accionar de las manufactureras

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