Análisis de los acuerdos interinstitucionales de derecho
internacional
Inadmisibilidad de todas las doctrinas voluntaristas, además de ser inaceptables se
encuentran contradichas por el actual ordenamiento jurídico internacional de ahí que la conclusión siguiente lleve necesariamente a fundamentar la obligatoriedad del derecho internacional en consideraciones objetivas que trascienden las voluntades de los Estados, aunque sin llegar a desconocer el importante papel que dichas voluntades desempeñan en la creación y mantención de la vigencia de tales normas jurídico- internacionales cuando se analizaron esas teorías objetivas vimos que ninguna de ella podía de un modo satisfactorio explicar enteramente la validez del derecho internacional. Sin embargo, por otra parte, cada una de ellas contiene elementos que pueden ser utilizados en diferente medida, claro está para fundamentar la obligatoriedad y validez del derecho internacional o, al menos, ciertos aspectos de él la norma fundamental que se encuentran incorporadas al derecho convencional, tal cual es efectivamente en la actualidad, constituye uno de los pilares sobre los que descansa gran parte del derecho internacional convencional. es, por lo tanto, suficiente para fundamentar, en principio, la obligatoriedad de los compromisos internacionales libremente contraídos por los Estados. Las explicaciones de tipo sociológico de las cuales Scelle es el iniciador en el campo del derecho internacional resultan imprescindibles para comprender la vigencia de las normas Jurídico internaciona es, las cuales sólo pueden ser tales en la medida que ellas reflejen las realidades y necesidades sociales el caso de un numeroso conjunto de Estados, con base democrática e igualitaria, o una mayoría de la comunidad internacional, como ocurre, por ejemplo, con las cincuenta Naciones que fundaron las Naciones Unidas y dictaron la estructura básica de la comunidad internacional contemporánea así la utilización del método kelseniano puede servir para fundamentar toda aquella importante parte del actual derecho internacional basada en la Carta de las Naciones Unidas, a la que puede considerársele como una norma originaria y en razón del acuerdo logrado por los Estados victoriosos de la Segunda Guerra Mundial para establecer un nuevo orden internacional. Hoy día ningún Estado puede jurídicamente desafiar el principio de la autodeterminación de los pueblos o el respeto a los derechos esenciales de la persona humana, ello se ha debido precisamente a que tales principios han sido declarados como principios de derecho internacional en forma reiterada por los órganos de la comunidad internacional en todo caso, dada la desigual naturaleza, origen y extensión de las normas del derecho internacional, el fundamento de la obligatoriedad de cada una de ellas nunca podrá plantearse en términos unívocos y bajo el prisma de una sola doctrina que sea idónea para fundamentar todo el derecho internacional por otra parte, la tarea de buscar un fundamento doctrinario internacional no tiene en la importancia que tuvo anteriormente, cuando éste daba sus primeros pasos como un sistema normativo y resultaba importante consagrar su carácter jurídico. Hoy día, los Estados en sus relaciones recíprocas observan y acatan sin mayores dificultades las normas del derecho internacional.