APRECIACIONES RESPECTO AL PROCESO EVALUATIVO Y METODOLOGIA DE
ENSEÑANZA DE LA CATEDRA DE DERECHO CIVIL DE LA UNIVERSIDAD PEDRO
DE VALDIVIA El motivo de esta carta es manifestar mi falta de satisfacción del modo en que se esta impartiendo la catedra de Derecho Civil I. Soy un profesional del área de la Educación, con posgrado en esta área y experiencia en Educación Superior, por lo que tengo argumentos para hacer referencia a varios aspectos que me parecen muy lejanos a la propuesta educativa de la universidad y lejanos a los parámetros de calidad que ha establecido la Comisión Nacional de Acreditación referidos a la acreditación referida a la formación de abogados o Licenciados en Ciencias Jurídicas. Primero quisiera describir la forma en que se han venido realizando las clases para luego hacer referencia a la evaluación: 1. La experiencia educativa que hemos vivenciado durante el presente año en la asignatura de Derecho Civil I en las lecciones o clases puede ser descrita como clase expositiva, en la cual el docente expone y desarrolla una materia, en tanto que los estudiantes intentamos tomar atención e intentamos mantenerla. En ocasiones, el profesor hace preguntas y comprueba la retención de lo que se ha dicho y en el mejor de los casos comprueba el razonamiento o lógica de lo expuesto por él. 2. La evaluación, conforme a este patrón de enseñanza, ha sido una reproducción memorística de definiciones, en un ambiente de tensión y como es habitual en este tipo de exámenes la generación de ansiedad que incide en el rendimiento. Aunque esta reacción es natural ante este tipo de exámenes, lamentablemente esto es aumentado debido a los comentarios y observaciones inadecuadas por parte del docente afectando con estos a la autoestima y causando menoscabo a los estudiantes. Resultado como tal se ve afectada la motivación hacia esta asignatura. Si desde ya está fuera de duda que este tipo de clases y evaluaciones no están acordes con las exigencias formativas profesionales en general, las cuales apuntan al desarrollo de competencias profesionales y las evaluaciones deben estar acorde con el logro de aprendizajes en función del desempeño esperado de un futuro abogado. Así lo definen claramente la Comisión Nacional de Acreditación (CNA) al referirse al perfil de egreso del licenciado que ha obtenido su grado de la Carrera de Derecho, que entre otras menciona las siguientes que pudieran aplicarse a estas clases: •Poseer habilidad para expresarse en forma oral y escrita con dominio del lenguaje jurídico •Poseer habilidad para argumentar y razonar jurídicamente. •Es capaz de analizar y resolver situaciones jurídicas, con un adecuado manejo de las fuentes, identificando los hechos relevantes, las normas y principios aplicables, y dando una solución al problema planteado. Estas competencias profesionales, que, si bien corresponden a un perfil de egreso, cada catedra o asignatura debiera desarrollar, en una estructura lógica durante toda la carrera y que conlleva a una cadena de acciones pedagógicas que se construyen en cada clase, y que apuntan al desarrollo final según el perfil definido por la carrera. En este sentido, me pregunto ¿Qué tipo de competencias se están desarrollando en un modelo de clases expositivas? Con tratamientos de saberes lejanos a la generación de competencias profesionales propias de un futuro abogado. Por otra parte, en el proceso de la evaluación, que debiera tener la solemnidad, rigurosidad, planificación y retroalimentación respetuosa (por favor ver video de la evaluación), está muy lejana a cada uno de estos aspectos, pues se pasaron a llevar cada uno de aspectos técnicos de esta y además se prestó para el menoscabo por los comentarios indeseados del docente. Profundizando, en los aspectos técnicos de esta, no es una instancia en la cual los estudiantes demuestren el logro del desarrollo de competencias profesionales, esta carece de objetividad, confianza y validez, requisitos básicos de una evaluación, puesto que no existe un instrumento evaluativo que, de consistencia adecuada al juicio final del docente representado en una nota, la cual finalmente carece de validez. Cabe hacer notar que el docente en cuestión impartió la catedra de Filosofía del Derecho en el segundo semestre del año pasado, clases a las cuales falto reiteradas veces dando como excusa, apoyado por el jefe de carrera de ese momento, que se encontraba enfermo. Situación, que, de ser cierta, seria entendible, pero que sin embargo estas perdidas de clases no fueron compensadas, resultando con esto que el programa no fue cumplido. Situación reclamada por nosotros. Ante todo, esto, me causó sorpresa que fuera nombrado profesor de la asignatura de Derecho Civil I, Siendo que la evaluación del docente el año pasado por nuestro nivel fue muy baja (Ver estos registros para comprobar esta afirmación). Situación que reclame, teniendo como respuesta que para el nombramiento del docente no se veía la evaluación que hacemos los estudiantes. Por todo lo anteriormente expuesto, solicito a las autoridades de la universidad, supervisar y auditar el que hacer académico del docente de la catedra de derecho civil I del presente año y solicito su remoción de esta catedra. Atte. Claudio Muñoz Ahumada Profesor de Historia y Geografía Diplomado en Gestión y Evaluación Ambiental Master en Gestión Educacional Estudiante segundo año carrera de Derecho