PROYECTO DE LEY

Artículo 1°. – Deróguese la Ley N° 6.309 sancionada el 18 de junio de 2020.

Art. 2°. – Comuníquese.

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

En la sesión del jueves 18 de junio de 2020 fue aprobada la Ley N° 6.309

para que la Ciudad de Buenos Aires adhiera a la definición de antisemitismo
impulsada por la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto (HIRA).
Esta ley aprobada en la Ciudad, es consecuencia de la Resolución N° 114/2020
del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, de las
mismas características. Esta definición que se votó sin debate, es polémica y
cuestionada a nivel internacional.

Esta ley declara que el “antisemitismo es una cierta percepción de los

judíos que puede expresarse como el odio a los judíos. Las manifestaciones
físicas y retóricas del antisemitismo se dirigen a las personas judías o no judías
y/o a sus bienes, a las instituciones de las comunidades judías y a lugares de
culto”.

La definición en cuestión entraña un problema de fondo: si bien cuestiona

el antisemitismo, al hablar de “instituciones” deja abierta la posibilidad por
ejemplo de que el Estado de Israel pueda quedar integrado a esa definición. Esta
es una definición absurda, que utiliza políticamente el legítimo rechazo al
antisemitismo, rechazo que compartimos y enfrentamos cada expresión y política
antisemita, para acallar las críticas hacia la opresión y los crímenes del sionismo
e Israel contra los pueblos árabes en general y los palestinos en particular.

Con esta maniobra se pretende igualar la crítica a las acciones del Estado
de Israel con antisemitismo, buscando ocultar las masacres contra el pueblo
palestino o la ocupación de territorios palestinos, considerada ilegal incluso para
las normas de la actual “comunidad internacional”, que a excepción de Estados
Unidos, recurrentemente condena esta ocupación aunque sin ninguna
consecuencia práctica.

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 Ante ello, la Ley N° 6.309 permite perseguir y judicializar manifestaciones
y críticas contra un estado opresor del pueblo palestino y protector de los
intereses de Estados Unidos en Medio Oriente. Su aplicación en los términos
manifestados tanto en el texto dado a conocer como en el documento del IHRA,
significan una abierta invitación a la censura y persecución de ideas, algo
inadmisible, incluso constitucionalmente.

Ello fue lo que efectivamente ocurrió tras la sanción de la Ley: en un

comunicado emitido el 28 de junio de 2020, la Organización Sionista Argentina
(OSA) anunció que iniciará acciones legales contra los tres diputados del Frente
de Izquierda Unidad que integramos esta Legislatura, por haber rectificado el voto
positivo emitido por error.

El intento de la OSA de acallar la crítica al Estado de Israel contradice

derechos democráticos básicos como la libertad de expresión y opinión de los
ciudadanos en general, y el derecho de los diputados y legisladores a expresar
sus opiniones políticas sin la amenaza de persecución judicial.

Los legisladores y las fuerzas que integramos el Frente de Izquierda

Unidad repudiamos y nos movilizaciones contra cualquier expresión de
antisemitismo y seguimos denunciando la impunidad del encubrimiento estatal
del atentado contra la AMIA. No vamos a renunciar a nuestro derecho y a nuestra
obligación de denunciar a quienes en nombre de un crimen como el Holocausto
oprimen a otros pueblos.

Por todo lo expuesto, es que solicitamos como un derecho democrático

elemental, la derogación de la Ley N° 6.309.

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