UN ANALISIS DEL NUEVO MODELO EDUCATIVO DEL INSTITUTO
POLITÉCNICO NACIONAL.
Abraham Salinas Castellanos
CECYT 10 Carlos Vallejo Márquez del Instituto Politécnico Nacional. Av. Loreto Favela s/n Esq. Av. 508,
Col. San Juan de Aragón, México Distrito Federal. México.
Email: abrrahams@yahoo.com.mx
Palabras clave: Educación, modelo educativo, vocación.
Resumen
En muchos países se ha venido tratando de
implementar, desde hace ya algún tiempo, el
modelo constructivista basado en ideas de
Ausubel1,2 y otros. En el instituto Politécnico
Nacional (IPN) este modelo se introdujo con el
nombre de “pertinencia y competitividad” desde el
año de 19943, sin que se lograra un avance
significativo en la calidad de la educación en las
escuelas del IPN3. A partir del año 2000 el modelo
se reforma introduciendo nuevos conceptos
importados de países como España que vienen a
hacer más difícil la labor del docente. Un estudio
reciente en escuelas del IPN ha demostrado que el
modelo tiene poca eficacia4. Actualmente el modelo
sufre otras reformas y se ha introducido el concepto
de “competencias”, palabra que era destinada a
tareas laborales y que se ha introducido en el
medio educativo; embargo, la base del modelo
sigue siendo el constructivismo.
1. Antecedentes
El nuevo modelo educativo del Instituto
Politécnico Nacional (IPN) ha sido basado en
teorías del aprendizaje significativo del
psicólogo David P. Ausubel y otros1,2. En este
modelo se busca que el alumno “descubra” y
“construya” su propio aprendizaje en el aula
con la ayuda del profesor, haciendo éste las
veces de “facilitador” del aprendizaje,
supervisando las actividades que los alumnos
realizan. Se establece que el aprendizaje
adquirido está basado en conocimientos
previos adquiridos en los niveles escolares
anteriores, que cuando el alumno descubre
su aprendizaje en el aula, el conocimiento
que adquiere se vuelve más significativo para
él y lo retiene mejor que el aprendizaje
adquirido en forma tradicional en el que
1
maestro es el único expositor en clase y el
estudiante permanece inactivo.
Lo cierto es que en el modelo tradicional,
como se le llama, el alumno no presenta el
papel de individualista del todo, pues en los
laboratorios y proyectos que se le asignan, el
alumno aprende a trabajar en equipo;
además, en muchos casos los problemas que
se dejan a los alumnos para que practiquen
la teoría dada, o las investigaciones
asignadas, se les pide que trabajen en
equipos de dos o tres personas para que
discutan y saquen más provecho de los
problemas y/o de los proyectos, y en ninguna
manera el alumno es poco comprometido con
el proceso, pues se le enseña que él es
responsable del conocimiento que adquiera.
Aquí interviene la clase de estrategia que
tenga el profesor para su enseñanza y su
experiencia en el aula5,6.
El modelo educativo propuesto en el IPN
es complementado con el “método de
proyectos”, mediante el cual se asigna a cada
grupo un proyecto a desarrollar durante el
semestre; este proyecto deberá relacionarse
con los temas que se cubrirán en el curso y
además con todas y cada una de las materias
que cursa el alumno en el semestre (en
promedio 10) con diferentes profesores, con
esto se pretende que el aprendizaje en cada
una de las materias sea significativo. Para
lograr éste objetivo, los profesores deben
acudir a juntas periódicas donde se revisa el
avance del proyecto por parte de los alumnos
y las tareas a desarrollar por cada profesor,
siendo en las materias de especialidad
(talleres) donde se lleva a cabo la mayor
parte de las tareas asignadas. Al final de los
cursos se presentan los proyectos terminados
en una exposición donde asisten los padres
de familia y las autoridades principales de la
escuela, siendo los alumnos los expositores.
Otro aspecto importante del nuevo
modelo es la evaluación, esta se lleva a cabo
conjuntamente con los alumnos, es decir, se
toma en consideración la participación del
alumno en dicho proceso. Esto se logra,
mediante un “portafolios de evidencias”
donde se colectan los trabajos realizados
durante todo el curso por cada alumno; el
profesor entonces decide una calificación en
base a este portafolio de evidencias y al
proyecto realizado por el grupo; en realidad el
nuevo modelo educativo del IPN contempla la
realización de varios proyectos por grupo,
siendo cada proyecto realizado por cuatro o
cinco alumnos. Sin embargo, actualmente
solo se ha realizado un proyecto por grupo,
sin que hasta la fecha se hayan logrado
resultados significativos de mejor aprendizaje
y eficiencia en los alumnos.
El modelo constructivista basado en
proyectos del IPN se detalla en el libro de
Díaz-Barriga2 y en la página de Internet del
diplomado que se imparte a los profesores
del IPN de manera semipresencial7.
Por otra lado, en las preparatorias del
Gobierno del Distrito Federal (GDF) se
propone que la función básica de la
evaluación del aprendizaje sea la de apoyar
al estudiante en su proceso de formación,
que sea la forma en que sepa lo que sabe y
lo que ignora y poderlo así apoyar en los
aspectos que requiera8. Los alumnos llevan
una evaluación “personalizada”, en la que el
profesor asesor asignado al alumno trata de
identificar sus deficiencias académicas; si
estas son muchas, entonces el asesor le
sugerirá al alumno o bien repetir la materia o
estudiar algunos temas durante el
intersemestre (con ayuda del profesor
asesor). Sin embargo, tal esquema de
evaluación resulta muy difícil de aplicar en la
realidad y encontramos que aún así la
deserción en esas preparatorias del GDF es
muy significativa9,10.
Enseguida analizaremos los problemas a
los que nos enfrentamos al tratar de
implementar los modelos constructivistas en
escuelas públicas y en general en escuelas
de países en vías de desarrollo.
2
2. Planteamiento y Desarrollo.
Aunque el modelo constructivista no ha
sido efectivo en los países donde se ha
implementado11, este modelo resulta hasta
cierto punto costoso para ser implementado
en países en vías de desarrollo como México.
En la publicación del anuario estadístico de la
UNESCO12, los gastos públicos destinados a
la educación en el mundo representan
diferentes porcentajes respecto al Producto
Interno Bruto. En ese anuario puede
apreciarse que hay varios países en el mundo
que destinan sumas superiores al 7 por ciento
a la educación. Tenemos en el caso de
América del Norte: Canadá con 8 por ciento,
Estados Unidos con 6.4, Cuba con 9.9, San
Vicente y Granada con 8.5, Guyana con 7.6,
Bahamas, Jamaica, Costa Rica, Holanda y
Suecia con 8.4, Noruega 7 por ciento,
Dinamarca 6.7, Arabia Saudita 8.7 e Israel 6.8,
y México con un 4.8 por ciento.
Los países que han destinado al gasto
educativo proporciones altas de su Producto
Interno Bruto, son también muchos de ellos los
que ocupan los primeros lugares en el Índice
de Desarrollo Humano de las Naciones
Unidas.
Por otro lado, existe también diferencia
en la cultura, la idiosincrasia, las tradiciones,
etc., factores que influyen en el
comportamiento de los alumnos en las
escuelas, aún en diferentes estados en un
mismo país. Un estudiante de Latinoamérica
tiene una perspectiva muy diferente del
mundo que un estudiante de Europa.
Pongamos un ejemplo, tal vez en el extremo
un estudiante de Israel, tiene una mentalidad
muy diferente que un estudiante de un país
como México, por las situaciones en que se
vive en ambos países; un adolescente Israelí
tiene que madurar más rápido porque a los
18 años se enrola en el ejército y ya no vive
con sus padres, se independiza en todos los
sentidos y por ello toma las cosas más en
serio, entre ellas su educación; si decide
continuar sus estudios después de concluir
su servicio militar, es porque realmente le
interesa continuar con una carrera profesional
y aprovecha los recursos que se ofrecen en
las escuelas. En nuestro país los estudiantes
de nivel bachillerato no se tienen que
preocupar por el servicio militar y la madurez
mental se realiza más lentamente al grado de
que muchos se independizan de sus padres
hasta pasados varios años después de haber
terminado la Universidad, cuando se casan.
La independencia juega un papel muy
importante en el desarrollo del individuo,
sobre todo en el aspecto intelectual13,14.
Aunque el modelo educativo basado en
el constructivismo y en el aprendizaje
significativo presenta ciertas bondades, como
la de involucrar más activamente al
estudiante en su proceso de aprendizaje
haciéndolo más participativo, nosotros
encontramos los siguientes problemas
(además de los ya mencionados) para ser
implementado de manera exitosa en las
escuelas públicas del país.
a) El problema del descubrimiento del
conocimiento y de las asesorías.
Construimos el conocimiento con
conocimiento previo. Esta es una manera
muy natural de aprender, pero para ello se
necesita tener una buena cantidad de
conocimiento previo almacenado en nuestra
memoria a largo plazo. Un estudiante no
puede aprender de esa manera, pues los
conocimientos que posee son muy limitados,
y al tratar de descubrir cosas nuevas como
indica el modelo constructivista puede
conducir a la frustración en muchos
casos15,16. Cuando ya hemos adquirido
suficiente conocimiento en nuestra memoria
de largo plazo es cuando estamos en la
posibilidad de hacer contribuciones a un área
del conocimiento. Así es como se ha
desarrollado el conocimiento científico17,18.
Por ejemplo Isaac Newton, quien descubrió el
cálculo infinitesimal, dos de las tres leyes que
llevan su nombre y la teoría de la gravitación
Universal, entre otras cosas, decía en forma
modesta: “Si he visto más lejos que otros, es
porque me he levantado sobre las espaldas
de gigantes”19,20,21, queriendo decir con ello
que sus descubrimientos estaban basados en
trabajos hechos por otras personas anteriores
a él como Galileo, Kepler, etc. y que sus
descubrimientos eran la culminación de
dichos trabajos. Newton estaba muy
3
concentrado en las cuestiones de la Física y
el retiro a su casa debido a la epidemia de
peste bubónica que azotaba Inglaterra en ese
entonces pudo haberle ayudado a llevar a
cabo su trabajo20.
Podemos decir lo mismo de Einstein,
cuyos trabajos sobre la teoría de la relatividad
especial y general estuvieron fundamentados
en trabajos desarrollados por Lorenz, Mach,
etc.22. Cualquier otro caso de descubrimiento
y construcción de conocimiento que tomemos
mostrará el mismo patrón: conocimientos
previos y profundos sobre el tema20,22.
Sin embargo, uno de los problemas que
vemos al tratar de que los estudiantes
“descubran” su conocimiento y de esta
manera hacer su aprendizaje significativo es
el tiempo. En las escuelas se han elaborado
programas a cubrir con contenidos muy
extensos, y si tratamos de que el alumno
vaya descubriendo cada uno de los aspectos
del curso, el tiempo no sería suficiente para
cubrir ni la mitad del programa. Se podría
argumentar aquí que al enseñar al alumno a
descubrir su conocimiento, él mismo podría
después aprender lo que no se cubrió
durante el curso, convertirse en autodidacta.
Esto sería ser demasiado optimista, pues
sabemos que se necesita de una buena
disciplina para hacer esto, la cual la mayoría
de nuestros estudiantes no la tiene (ni la
adquiriría de esta manera). Solo cuando
tengan verdadera necesidad de aprender
algo, lo harán, pero esto ocurrirá hasta que
estén ejerciendo su carrera profesional y se
verán en serios problemas si se les acumulan
muchos temas por aprender; es más fácil
repasar algo que tratar de aprenderlo desde
el principio. Cuando estamos ávidos por
aprender algo, siempre resulta más fácil que
otra persona nos lo explique a tratar de
descubrirlo por nuestra cuenta, y si nuestro
interés es genuino, entonces podemos
mejorar e ir más allá de lo que nuestro
maestro nos enseñó y hasta podemos llegar
a superarlo.
Aplicar este esquema de descubrimiento
resulta también difícil por la cantidad de
alumnos en las aulas: en algunas llegan a
haber hasta 65 o 70 alumnos; cantidad difícil
de manejar para un profesor. El descubrir
cosas requiere de una educación más
personalizada, lo cual es imposible con ésta
cantidad de alumnos. Cada día aumenta la
cantidad de estudiantes en todos los niveles
escolares. En contraste, en los países
desarrollados se tiene un profesor para
exponer la clase a un grupo, el cual puede
ser muy extenso, pero la práctica de
ejercicios y la evaluación la llevan a cabo
varios auxiliares que se dividen el grupo
haciendo la tarea más sencilla; en países
como Finlandia la cantidad de alumnos por
grupo no rebasa los 20.
Tratar de sembrar la curiosidad
científica, como lo sugiere el constructivismo,
tiene poco provecho para la mayoría de los
estudiantes, pues sus intereses podrían ser
muy diferentes y forzar a una persona a que
se dedique o tenga las cualidades de un
científico no es bueno psicológicamente
hablando; caeríamos en el error que cometen
algunos padres de obligar a que sus hijos
estudien algo que ellos no quieren; tal vez
sería mejor tratar de desarrollar su
creatividad en tanto descubren su vocación23,
la creatividad es muy beneficiosa en
cualquier carrera que emprenda una persona.
Otro aspecto a tomar en cuenta es el
tiempo de los profesores. Este no es
suficiente para ayudar al estudiante a
descubrir su conocimiento. Si analizamos la
fuerza laboral académica de la mayoría de
las escuelas públicas del país, ésta esta
constituida por profesores que están
contratados por pocas horas. Un gran
porcentaje de los profesores tiene que
trabajar en por lo menos dos escuelas,
atendiendo en promedio 8 o 10 grupos por
periodo escolar, resultando en un pobre
desempeño académico, y resulta imposible
para ellos asesorar de manera individual a los
alumnos (no menos de 400 por periodo
escolar) como lo sugiere el modelo.
El modelo educativo de las escuelas del
GDF va más allá, pues en el se pide a los
profesores que visiten en sus hogares a los
alumnos de bajo rendimiento escolar o que
dejan de asistir a la escuela, para tratar de
solucionar el problema juntamente con su
familia y detectar así las causas (problemas
económicos, sociales, de pareja, etc.).
Es necesario que se tengan contratados
profesores de tiempo completo si se desea
implementar el nuevo modelo educativo en el
IPN. En las preparatorias del GDF se
4
consideró este problema desde un principio y
se contrataron los profesores a tiempo
completo, aunque el salario no es muy
competitivo y los profesores son llevados a
niveles muy altos de estrés. Las condiciones
laborales también son mínimas: por ejemplo,
los profesores trabajan por contrato anual y
sin derecho a sindicalizarse.
b) El problema de los proyectos.
El método de proyectos presenta
también la limitante del tiempo; por un lado
los semestres son demasiado cortos como
para concretar un proyecto interesante y por
el otro, los alumnos no disponen de tiempo
para la elaboración del proyecto, pues tienen
clases de manera continua (una tras otra);
tendrían que permanecer en la escuela o
reunirse en la casa de alguno de sus
compañeros después de sus clases
normales, cosa muy complicada para ellos.
Se requiere entonces reducir el número de
clases para que los estudiantes tengan
tiempo de trabajar en sus proyectos en la
escuela. Se tiene el problema adicional de
que es un tanto difícil que un proyecto pueda
relacionarse con todo el programa de un
curso y con todas y cada una de las materias
que cursa el alumno; se necesita mucho
tiempo para pensar en dicha relación, si es
que esto es posible. Además de que se ha
observado que no todos los alumnos trabajan
de igual manera en la elaboración de los
proyectos, y solo unos cuantos terminan
trabajando en nombre de los demás. Por otra
parte, los proyectos que hasta la fecha se
han asignado a los grupos comprenden un
proyecto por grupo, todos los alumnos del
grupo (en algunos casos hasta 60-70
alumnos) deben trabajar en el proyecto, lo
cual hace más complicado el asunto al tratar
de ponerse de acuerdo en las tareas. El
proyecto podría resultar interesante para los
alumnos si ellos lo eligieran, pero el problema
es que el conjunto de profesores que
imparten las materias al grupo elige el
proyecto a realizarse, esto lo hace menos
interesante para los estudiantes y que
muestren poco o ningún interés. Al final, se
ha observado que son los profesores de las
áreas tecnológicas los que terminan el
proyecto. Por el mismo problema del tiempo
que tienen los profesores, es imposible que
estén asistiendo a las juntas de evaluación de
proyectos, llenando protocolos y estar
asesorando a los alumnos asignados.
c) El problema de la evaluación.
La evaluación contemplada en el nuevo
modelo educativo se realiza en tres etapas:
Evaluación inicial o diagnóstica, formativa y
sumativa. La evaluación inicial o diagnóstica
se deberá hacer al principio del curso para
detectar las deficiencias en alguna materia
que es requisito para el curso que se va a
dar, o para saber que tanto saben los
alumnos sobre el curso, pues hay algunos
estudiantes que están aventajados con
respecto a los demás; la evaluación formativa
se realiza mediante las tareas y trabajos
durante el curso y la evaluación sumativa se
realiza cada cierto número de temas y al final
del curso para ver que tanto han aprendido
los alumnos el curso en cuestión. Para llevar
a cabo la tarea de evaluación en sus tres
fases se sugieren diversos esquemas, entre
ellos los de rúbrica, en el cual se les pregunta
a los alumnos la manera en que quieren ser
evaluados; el de debates, donde el profesor
califica la participación individual y del grupo,
de escala de rangos, y el de portafolios de
evidencias, en el que se colectan los trabajos
de los alumnos y ellos evalúan su aprendizaje
juntamente con el profesor. No se consideran
los exámenes tradicionales de tiempo
limitado, argumentándose que los exámenes
tradicionales no reflejan lo que el alumno
realmente sabe debido a que el estrés
aumenta el nerviosismo del estudiante y se
les olvida lo que aprendieron, al menos de
manera momentánea. Este argumento resulta
cierto, pero ocurre solo en aquellos alumnos
que “estudian” unas horas antes del examen,
que memorizan las cosas, que solo tienen
interés en pasar la materia, pues en un
estudiante que estudia de manera constante
durante el curso, que su interés radica en el
conocimiento y que trata de razonar lo
aprendido en vez de memorizar, no se
presenta tal situación, y si se presenta será
solo en los primeros minutos del examen. Se
ha hecho hábito del estudiante politécnico
5
estudiar unas horas antes de los exámenes.
El principal problema de los alumnos que
estudian unas horas antes del examen se les
presenta en las materias básicas (Física,
Química y Matemáticas), donde la memoria
no juega un papel tan importante como el
razonamiento, resultando en una enorme
cantidad de alumnos reprobados en estas
materias; sólo pueden responder los
problemas donde se les pide aplicar una
fórmula de manera directa, lo cual es muy
sencillo y este tipo de problemas no refleja
un conocimiento sobre un tema dado, sino
más bien el uso adecuado de las operaciones
básicas de la calculadora y algebra
elemental.
Por fortuna el nuevo modelo educativo
contempla la eliminación de los llamados
exámenes departamentales, pero por otro
lado abre la posibilidad de que los profesores
(conjuntamente con los alumnos) sean un
tanto arbitrarios a la hora de asignar una
calificación, pues se pide que el profesor
evalúe al alumno en base al portafolios de
evidencias y al proyecto desarrollado durante
el semestre. Esto puede originar descontento
en los alumnos con calificaciones bajas, pues
puede darse el caso de que el proyecto que
desarrollaron no sea tan impresionante como
el de de sus compañeros, pero que el
esfuerzo desarrollado hubiese sido mayor, no
siendo reconocido por el profesor o por los
demás compañeros. En las escuelas del GDF
no se les asigna una calificación a los
estudiantes, argumentándose que estas
pueden causar traumas en ellos. Se dice
también que un número en la evaluación es
perjudicial para los alumnos en términos
psicológicos porque ellos se llegan a
identificar con ése número, y que creen que
“son” ese número de la calificación. Este
argumento es por demás falso, pues en
nuestra experiencia hemos visto como a gran
parte de los estudiantes no les interesa el
número en sí, solo les interesa pasar la
materia, y un seis es muy bueno para ellos
(en la escala 0-10); hasta se da el caso de
que reprobar no es mal visto entre los
estudiantes y se llegan a burlar del que saca
diez, llamándolo “ñoño”, palabra equivalente
al “nerd” del inglés. Se ha convertido en una
moda estudiantil reprobar materias como
Física, Matemáticas y Química.
 En el modelo de las preparatorias del
GDF se dice que la evaluación es más bien
un apoyo al alumno: al final del curso solo se
le sugiere al alumno repetir el curso en caso
de no haber adquirido los conocimientos
mínimos que se necesitan para el siguiente
curso o cursos y la decisión final está en
manos del alumno. El problema aquí radica
en que muchos alumnos todavía no tienen
un buen juicio al respecto y pueden decidir
seguir con el siguiente semestre prometiendo
dedicar mayor esfuerzo para compensar las
deficiencias que presentan, lo que puede no
ocurrir debido a la falta de responsabilidad y
disciplina del estudiante o por los mismos
problemas por los que atraviesa, pues la
filosofía de las escuelas del GDF es llevar la
educación a las zonas más marginadas del
país, donde los alumnos tienen muchos
problemas tanto familiares como de
adaptación social y económicos.
La eliminación de los exámenes
evaluativos durante el curso presenta
también el problema, entre muchos otros, de
que los alumnos se vuelvan menos
competitivos a la hora de ser comparados
con estudiantes de instituciones donde si se
aplican exámenes. Por ejemplo en los
exámenes PISA de la OCDE24, México ha
figurado en los últimos lugares en
comprensión de Ciencias, Matemáticas y de
Lectura; los estudiantes que no están
acostumbrados a la presión de los exámenes
tienen un fracaso asegurado pues no toman
en serio los exámenes evaluativos.
3. Propuesta.
Acciones propuestas para que el
aprendizaje de los estudiantes sea
significativo y aumentar su
rendimiento escolar.
En su libro Tener o Ser, Eric Fromm25
distingue dos modalidades de la existencia
humana: la de Tener y la de Ser. Fromm nos
dice que en los estudiantes estos dos modos
de existencia se presentan de la siguiente
manera:
“En el modo de existencia de Tener los
estudiantes asisten a clases, escuchan las
palabras del maestro y comprenden su
6
estructura lógica y su significado. De la mejor
manera posible, escriben en sus cuadernos
todas las palabras que escuchan; así mas
tarde podrán aprender de memoria sus notas
y ser aprobados en el examen; pero el
contenido no pasa a ser parte de su sistema
individual de pensamiento, ni lo enriquece ni
lo amplia. En vez de ello, los alumnos
transforman las palabras que oyen en
conjuntos fijos de pensamiento o teorías, y
las almacenan. Los estudiantes y el
contenido de las clases continúan siendo
extraños entre sí, pero cada estudiante pasa
a ser propietario de un conjunto de
afirmaciones hechas por alguien (que las
creó o las tomó de otra fuente).
En el modo de Tener, los estudiantes
sólo tienen una meta: retener lo “aprendido”.
Con éste fin lo depositan firmemente en su
memoria, o lo guardan cuidadosamente en
sus notas. No deben producir ni crear algo
nuevo. De hecho, los individuos del tipo
Tener se sienten perturbados por las ideas o
los pensamientos nuevos acerca de una
materia, porque lo nuevo los hace dudar de la
suma fija de información que poseen”.
En esta modalidad los estudiantes son
parecidos a las personas autistas (Savants)
de gran memoria que pueden almacenar en
sus mentes grandes cantidades de
información pero son incapaces de hacer
relaciones entre ellas o de analizarlas, de
hecho se ha observado los savants de gran
memoria tienen poca inteligencia y
creatividad.
En el modo de Ser del aprendizaje, Eric
Fromm dice:
“En el modo de Ser, el proceso de
aprender es de una calidad enteramente
distinta para los estudiantes en su relación
con el mundo. En primer lugar, no asisten a
las clases, ni aún a la primera clase, con la
mente en blanco. De antemano han pensado
en los problemas que se tratan en las clases,
y tienen en mente ciertas cuestiones y
problemas propios. Se han ocupado del
tema, y les interesa. En vez de ser
recipientes pasivos de las palabras y de las
ideas, escuchan, oyen, y lo que es más
importante, captan y responden de manera
productiva y activa. Lo que escuchan
estimula la actividad de su pensamiento. En
su mente surgen nuevas preguntas, nuevas
ideas y perspectivas. Para ellos oír es un
proceso vital. Escuchan con interés lo que
dice el maestro, y espontáneamente le dan
vida a lo que oyen. No sólo adquieren
conocimientos que puedan llevar a casa y
recordar. El estudiante se siente afectado y
cambia: es distinto después de clase. Desde
luego, este modo de aprender solo puede
existir si la clase ofrece material estimulante.
En el modo de Ser, la charla vacía no ayuda,
y en estas circunstancias, en el modo de Ser,
los estudiantes descubren que es preferible
no oír, y concentrarse en sus propios
pensamientos”.
Un estudiante con modalidad de Ser es
un problema para los profesores que no
preparan su clase o que no dominan el tema,
porque hacen preguntas interesantes, no por
molestar al maestro, sino por el interés de
aprender. Para un maestro con interés de
que los estudiantes aprendan bien su
materia, las preguntas hechas resultan
gratificantes, y si van más allá de lo que él
sabe, no le molesta, sino por el contrario, se
alegra de haber despertado en el alumno el
interés de saber más allá de lo expuesto en la
clase. La clase se vuelve interesante tanto
para el maestro como para los alumnos. Las
preguntas hechas en clase son esenciales
para los buenos maestros, porque les ayudan
a diagnosticar si los alumnos realmente están
poniendo atención y aprendiendo la materia,
las preguntas sirven de retroalimentación
para el maestro.
No solo en la escuela es conveniente
que las personas actúen en la modalidad de
Ser, sino también en todos los aspectos de
su vida25. ¿Cómo podemos hacer que un
estudiante asista a la escuela en la
modalidad de Ser y no en la de Tener?
Sin duda esta pregunta es un tanto difícil
de responder, y al parecer los modelos
educativos del IPN, de las escuelas del GDF,
y muchos otros persiguen este objetivo.
Creemos que una manera de llevar al
estudiante hasta el modo de Ser es, como
dijimos anteriormente, ayudándoles a busca su conocimiento por si solo. Si
encontrar su vocación.
En un trabajo presentado en el V
Encuentro de exbecarios de Israel en 200526,
7
los autores realizaron un estudio en la
Universidad de Tamaulipas sobre las
expectativas que los estudiantes tienen de la
Universidad: ¿que esperan de la
Universidad?, ¿Qué significa la Universidad
para ellos?, ¿Porqué ingresan a la
Universidad?, entre otras preguntas
interesantes. La mayoría de los estudiantes
no pudieron explicar porque ingresan a la
Universidad ni que esperan al salir de ella; En
las escuelas donde hemos impartido clases
les hacemos preguntas semejantes a los
estudiantes y las respuestas son muy
similares: No han identificado que es lo que
quieren, no saben cual es su vocación y viven
en un vacío existencial. Sin embargo, es
interesante observar que los estudiantes de
nivel universitario sienten la necesidad de
encontrar un sentido a sus vidas, de
encontrar aquello que los haga sentir bien por
encima de los bienes materiales27.Parte del
comportamiento desinteresado de los
estudiantes lo explica la etapa de la vida por
la que atraviesan: la adolescencia28,29.Sin
embargo, pensamos que si el estudiante
encuentra su vocación, entonces su
comportamiento, sobre todo en el salón de
clases, podría cambiar a la modalidad de Ser
y esto facilitaría la labor del maestro.
Es por los mismos problemas de la
adolescencia que los estudiantes asisten a
clases en la modalidad de Tener, para ellos el
asistir a la escuela es una rutina que deben
cumplir día a día. El ayudarles a identificar
para que son buenos, cual es su vocación,
les induciría a entrar en la modalidad de Ser,
y cambiaría la manera en que ven la escuela
y la vida en general. Entre más temprano se
den cuenta de que profesión quieren seguir
en la vida, más provechosa será la escuela
para ellos, y el modelo educativo pasa a un
plano secundario. Un alumno que tiene una
meta definida busca por cuenta propia el
conocimiento, se vuelve en cierta forma
proactivo, autodidacta y la escuela y los
maestros se convierten en medios para
conseguir sus metas, que aunque son
importantes, no llegan a ser esenciales. En
cuanto logra identificar su meta, el alumno
miramos en la historia casos de personas que
han sobresalido en ciertos campos del
conocimiento humano, veremos que muchos
de ellos descubrieron su vocación a muy
temprana edad. Por ejemplo los músicos
Mozart y Beethoven la descubrieron en su
niñez, el matemático Carl Gauss, a los tres
años descubrió su gusto por las matemáticas,
Evariste Galois la descubrió en la
adolescencia30, Galileo la descubrió ya en la
Universidad, Einstein, cuando tenía cinco
años, etc. etc.
Se podría argumentar que los casos que
se mencionan son de personas
extraordinarias, con gran inteligencia y que
por eso sobresalieron en sus áreas, pero esto
no es del todo cierto, pues hay casos de
personas de gran inteligencia que no llegaron
a descubrir su vocación y su inteligencia y
habilidades son desperdiciadas, prueba de
ello son las deserciones escolares9,10 y las
personas que trabajan en oficios muy
distintos de los que se prepararon, pues las
carreras que estudiaron no les satisface y se
desarrollan mediocremente en ellas.
Un caso interesante lo constituye la
familia Bernoulli, quienes por tres
generaciones se dedicaron a las
matemáticas, pero que estudiaron carreras
muy distintas como la medicina y teología22,31
y abandonaron sus carreras (al concluirlas) a
favor de las matemáticas. Podemos también
mencionar a Paul M. Dirac, que entre otras
cosas descubrió la ecuación relativista del
electrón, de donde se deriva la existencia de
la antimateria; Dirac estudio la carrera de
ingeniería Química la cual abandonó para
dedicarse a la Física. Entre más pronto
identifique una persona su vocación, más
logros podrá hacer en su área de
conocimiento y encontrarle un significado a
su vida27. Creemos que la persona que tiene
un objetivo claro de lo que va a realizar en su
vida, que ha encontrado un sentido a su
existencia, tiene mucha probabilidad de
triunfar en la vida, aún y cuando no encuentre
las condiciones propicias para ello.
El mismo Piaget estudió la carrera de
biología, la cual no ejerció y estudió después
psicología. Descubrió su vocación después
de haber estudiado una carrera distinta a lo
que realmente quería.
Por último, mencionamos dos casos muy
interesantes: recientemente se descubrió que
un campesino de China, Wu Lu, tiene un
ejército de robots (26) los cuales ha
8
construido en el transcurso de 30 años. El
hombre no fue a la Universidad y uno se
pregunta que no hubiera hecho si hubiera
tenido la posibilidad de estudiar robótica32. El
otro se refiere al mexicano José Julián
Arreola Jasso, herrero de oficio quien
construyó su automóvil a partir de una
bicicleta y otros materiales de desecho33, su
talento ha sido desperdiciado al no descubrir
su vocación. Es por esto que es importante
ayudarle al estudiante a encontrar su
vocación, su Voz, como le llama Stephen
Covey34.
Víctor Frankl27 plantea que la educación
debería plantearse como deber principal el de
redefinir la conciencia individual, pues es
importante que el ser humano encuentre un
significado a su vida cuanto antes.
¿Cómo ayudarles a encontrar su
vocación y con ello un significado a sus
vidas?
Frankl dice que en la logoterapia,
moderno análisis existencial que el mismo
inventó, hay un principio que afirma que la
humanidad del hombre se basa en su sentido
de responsabilidad; el hombre es el
responsable de darle sentido a su vida. Esta
verdad resulta difícil de ser aceptada por la
mayoría de las personas, pues siempre se
buscan un culpable para justificar sus
acciones. Por ejemplo, muy a menudo
escuchamos a los estudiantes decir: “…el
maestro me reprobó”, “…eso no me lo
enseñó el maestro”, “…es que mis
compañeros de equipo no trabajan”, etc.
Proponemos, como una manera de
ayudar a los estudiantes a asistir a sus clases
en la modalidad de Ser en vez de la de Tener
y de orientarlos en su búsqueda de una
vocación y así darle un sentido a sus vidas, a
su existencia, las siguientes acciones, las
cuales también podrían mejorar el nivel
académico en las escuelas y ayudar así a los
estudiantes a ver la escuela de una manera
diferente, incrementando su aprovechamiento
escolar:
i) A través de los padres y de los
profesores
Una dificultad que surge al tratar de
ayudar al adolescente a encontrar su
profesión o vocación es su comportamiento
egocéntrico y sus actitudes35,28,29,; sin
embargo, debemos aprovechar que en esta
etapa el estudiante esta entrando en la
madurez cognitiva14, etapa en la cual
adquiere pensamiento abstracto, y trata
también de identificarse a sí mismo. En la
etapa de la niñez y la adolescencia el
estudiante se ve fuertemente influenciado por
sus padres, y si el estudiante observa un gran
sentido de responsabilidad en sus padres,
también él tratará de mostrar tal sentido.
Estudiantes que no viven con sus padres
tienden a imitar a sus amigos. Un gran
número de los valores del individuo derivan
del hogar. El problema que se ha suscitado
en la sociedad moderna son los divorcios, los
cuales han proliferado afectando moral y
psicológicamente a los estudiantes,
repercutiendo directamente en la escuela.
Los padres deberían pensar bien las
consecuencias de un divorcio sobre todo en
los hijos adolescentes. Por otro lado, una
buena comunicación con los padres y
ejemplo por parte de estos, ayuda mucho al
estudiante a encontrar su vocación y a ser un
buen estudiante con valores bien
fundamentados.
Stephen Covey36 señala como octavo
hábito de las personas altamente efectivas el
de encontrar su voz (vocación) e inspirar a
los demás para que encuentren la suya:
“…cuando nos dedicamos a un trabajo que
aprovecha nuestro talento y alimenta nuestra
pasión, que surge de una gran necesidad en
el mundo a la que nuestra conciencia nos
impulsa a responder; ahí se encuentra
nuestra voz, nuestra vocación, la clave de
nuestra alma”.
¿Cómo puede el profesor ayudar a sus
estudiantes a encontrar su vocación sin tener
que interferir directamente en sus vidas como
lo sugiere el modelo educativo propuesto en
el IPN y en las preparatorias del GDF
mediante el asesoramiento personalizado?
Pensamos que el asesoramiento
personalizado que se sugiere en dichos
modelos educativos acosa en cierta forma a
los estudiantes10 pues muchos de ellos
abandonan los estudios por diversos motivos,
entre ellos los económicos y familiares. El
profesor asesor visita entonces al alumno en
su casa o donde se encuentre para
9
convencerlo de regresar a la escuela,
haciéndole ver lo importante que es la
educación hoy en día; esto resulta en un
acoso que puede resultar hasta cierto punto
peligroso para el profesor, pues algunos
estudiantes (y sus padres) pueden sentirse
hostigados y podrían reaccionar de manera
violenta hacia el profesor, que se expone
mucho llevando a cabo estas acciones (por
esto muchos profesores de las preparatorias
del GDF han desertado). Sin embargo, el
profesor podría influenciar al alumno
indirectamente para que éste encuentre su
vocación mediante el ejemplo existencial del
compromiso personal27 . Si el profesor tiene
un vacío existencial, entonces lo transmitirá al
alumno. “Si lo que los maestros muestran con
sus actitudes y acciones es que son cínicos,
se aburren o fracasan, los alumnos captarán
el mensaje, sin importar la cantidad de
clásicos literarios que les hagan leer”37. El
profesor debe entonces mostrar entusiasmo a
sus alumnos en clase, mostrar que lo que
está haciendo realmente le gusta, que es su
vocación la enseñanza, que está a gusto con
su profesión. Si el alumno observa lo
contrario, esto lo contagiará y dificultará
encontrar su vocación. Para lograr un buen
desempeño en el aula, el profesor podría
estudiar técnicas de exposición de una clase5
además de actualizarse en sus materias que
imparte. Pocos son los maestros que en
realidad se actualizan, y sería bueno que
aquellos profesores que están impartiendo
materias que no coinciden con lo que
estudiaron, por ejemplo, un ingeniero (de
cualquier área) impartiendo la materia de
Física o Matemáticas, tomaran cursos un
poco avanzados de dicha materia, con ello
podrían estar en mejores condiciones de
responder las preguntas que hagan los
estudiantes sobre la materia en cuestión.
Cabe también mencionar que la
asistencia de los profesores a talleres de
enseñanza o el intercambio académico con
otras escuelas resulta muy beneficiosa no
solo para ellos, sino también para sus
estudiantes porque en ellos intercambian
ideas con profesores de otras escuelas del
país o del extranjero. Una actitud positiva por
parte del profesor y una buena comunicación
con los padres ayuda mucho tanto a
aumentar la autoestima como a encontrar la
vocación al estudiante.
ii) A través de estancias de verano, visitas
a empresas e institutos de
investigación científica.
En muchas universidades importantes
del mundo y del país se llevan a cabo
campamentos de verano de ciencia.
Mencionamos los siguientes ejemplos:
En el Instituto Nacional de Óptica y
Electrónica (INAOE), en Puebla, México, se
ofrecen campamentos de verano para
estudiantes de bachillerato para realizar
algunas actividades sencillas con los
investigadores del Instituto; en el Instituto de
Física de la UNAM hay un día al año llamado
“puertas abiertas” en el que los estudiantes y
público en general pregunta a los
investigadores acerca de sus proyectos e
investigaciones; en el Instituto Weizmann en
Rehovot, Israel, cada año hay campamentos
de verano al cual se convocan estudiantes de
nivel bachillerato de todo el mundo para
realizar investigaciones conjuntas con
estudiantes de posgrado del Instituto, etc. etc.
Estas actividades podrían despertar el
interés en aquellos estudiantes que aún no
han decidido que carrera seguir debido a que
ignoran las actividades que hace un
científico. Esta es una de las razones de
porque pocos alumnos deciden seguir una
carrera científica, aunque podrían tener
vocación para la ciencia y ellos no lo saben.
Otra actividad que se debería
implementar tanto en alumnos de nivel básico
(primaria y secundaria) como de bachillerato
son las visitas a empresas, donde ellos
pueden ver las actividades que realizan los
diferentes profesionistas como Ingenieros,
Psicólogos, Médicos, Actuarios, Arquitectos,
etc.
Cuando se descubre lo que realmente se
quiere, no hay obstáculos que nos puedan
detener o desviar de nuestros objetivos; y el
descubrir lo que se quiere se puede presentar
en cualquier momento, para esto es
necesario presentar al alumno diversas
situaciones que le puedan ayudar a lograr tal
objetivo.
10
iii) A través de los métodos de
estudio
El fracaso escolar es una realidad que
desde el punto de vista pedagógico debe
preocupar tanto a centros, educadores y
padres, como a los propios alumnos que la
padecen, siendo éstos últimos los más
importantes. Un buen método o técnica de
estudio es quizás un factor que influye en el
rendimiento escolar de los estudiantes. El
inicio de un curso de métodos de estudio
debe motivar al alumno porque le ofrece la
posibilidad de mejorar, de aprovechar mejor
su tiempo y optimizar su dedicación.
Podemos decir que gran parte de los
estudiantes no tienen un método efectivo de
estudio. Actualmente se dedica mucho
esfuerzo en enseñar a los profesores
métodos de enseñanza “efectivos”: El
problema es que, como dijimos antes, los
profesores tienen poco tiempo para dedicarse
siquiera a preparar sus clases, pues están
saturados con tanta clase que imparten en
por lo menos dos escuelas, ésta es una
característica de los profesores en los países
en vías de desarrollo en general. Se debe
poner más énfasis en proveer a los
estudiantes con métodos efectivos de estudio
para aumentar con ello su rendimiento
escolar, pues muchos estudiantes se
decepcionan cuando ven que no pueden
sacar una buena calificación en la materia
que supuestamente les gusta más, y
terminan por perder interés en la escuela o
en la materia. Como señalamos
anteriormente, el “método” que los alumnos
usan es el de “estudiar” unas horas antes del
examen, el cual no funciona con las materias
básicas de Física, Química y Matemáticas. El
estudiante debe crear hábitos como los que
señala Stephen Covey para ser realmente
efectivos en cualquier acción que
emprendan36. El estudiante debería
principalmente ser proactivo; el alumno no
puede permanecer estático a esperar que las
cosas sucedan, sino más bien el debe buscar
la manera de tener éxito tanto en sus
estudios como en su vida personal. La
mayoría de los estudiantes no estudia en los
libros y solo revisa los apuntes que le da el
profesor, teniendo problemas con aquellos
profesores que no están acostumbrados a
dictar apuntes y que les recomiendan lecturas
en libros o en Internet para complementar la
clase; a este tipo de profesores los alumnos
los califican de “malos” por salirse del
esquema del dictado en clase de muchos
profesores.
Si en la escuela no se enseñan las
técnicas de estudio, el alumno debería tomar
entonces la iniciativa de realizar un curso en
algún centro especializado en éste tipo de
enseñanzas durante su horario extraescolar
o, intensivamente, en los periodos
vacacionales. Esto también debería ser
sugerido al alumno por los profesores o por
los propios padres.
Estos métodos y hábitos de estudio se
podrían enseñar también en la escuela en la
materia de orientación vocacional, en la que
se pueden asimismo organizar las
actividades del inciso anterior, pues esta
materia muchas veces no cumple su
objetivo, y “orientan” al estudiante en base a
cuestionarios, los cuales no garantizan
identificar la vocación del alumno, además de
que muchas veces esa materia se le asigna a
un ingeniero, a un biólogo, a un médico, etc.,
que puede indicar a los estudiantes
solamente cuestiones referentes a su
profesión.
iv) A traves de la creatividad.
Por último quisiéramos sugerir cursos y
talleres de creatividad para ayudar a los
alumnos a encontrar su vocación. La
creatividad es importante en todos y cada
uno de los aspectos de la vida del ser
humano. Como señala Mauro Rodríguez23, la
creatividad es un proceso complejo que
comprende proyectos de cambio, generación
de ideas, recopilación de información, manejo
de materiales, experimentos, organización de
equipos, aportación de recursos, sistemas de
comunicación, administración financiera, etc.
Pero su núcleo dinámico es el pensamiento
creativo, la creatividad puede hacer que los
estudiantes se vuelvan más productivos y
motivados en sus estudios. Según Guillermo
González las características más importantes
y fundamentales que afloran de una
personalidad creativa son: capacidad
11
intuitiva, imaginación, capacidad crítica,
soltura y libertad, pasión, audacia, tenacidad,
tolerancia a la frustración, capacidad de
decisión, etc. Un estudiante con pensamiento
creativo puede lograr que su rendimiento
escolar aumente en forma dramática23 ya que
su mente se vuelve más ágil, y las tareas
asignadas pueden resultar más interesantes.
Con una mente creativa se le facilita al
estudiante determinar lo que realmente
quiere, encontrar su vocación, pues su mente
está en una búsqueda continua de cosas que
se le facilita hacer o que le gusta, le ayuda a
generar ideas para adquirir destrezas, en fin,
la creatividad es esencial para que el ser
humano se desarrolle completamente.
Conclusiones
Varios autores y psicopedagogos han
considerado el modelo constructivista como
único medio para que el estudiante logre el
aprendizaje significativo, entendiéndose por
este que el alumno se vuelva autónomo y que
sea capaz de desarrollar y descubrir su
propio conocimiento, meta que el alumno solo
puede alcanzar después de haber acumulado
una serie de conocimientos para resolver
problemas, pues es la manera natural del se
humano para aprender15. Se ha mostrado
que el aprendizaje significativo se puede
realmente lograr cuando el sujeto encuentra
su vocación, cuando le encuentra un sentido
a la vida, un sentido a las cosas que realiza,
de otra manera no tendrá ningún interés en
las acciones que emprenda en la vida, y los
estudiantes asistirán a la escuela sin
motivación alguna, como se ha observado en
la mayoría de ellos, que no tienen una idea
clara del estudio profesional que van a elegir.
Cualquier modelo educativo tiene como
destino el fracaso si no se atiende esta
primera necesidad de los estudiantes.
Un modelo educativo efectivo deberá
considerar, además, las condiciones y
problemas educativos de cada región, pues
es claro que no todos los países o estados en
el mismo país tienen las mismas condiciones
y problemática educativas. Los problemas
educativos más importantes en los países en
vías de desarrollo son la creciente población
estudiantil (hecho que ha beneficiado y
enriquecido a los propietarios de colegios
particulares), y la excesiva carga y poca
remuneración de los profesores, que se ven
obligados en trabajar en dos o más escuelas
al mismo tiempo, además de la falta de
preparación pedagógica y de la materia que
imparten, principalmente los de nivel medio
superior y de secundaria.
Un modelo educativo eficaz deberá,
además, considerar la etapa de adolescencia
de los alumnos. El modelo constructivista
basado en proyectos aula demanda a los
estudiantes un excesivo trabajo extra clase
de investigación, dejando poco tiempo para
otras actividades no académicas, propias de
su edad. Cuando un estudiante no tiene
oportunidad de realizar actividades propias
de la adolescencia como ir al cine, convivir
con sus amigos, etc., mostrará mucha
inquietud en el salón de clases prestando
poca o ninguna atención al maestro. El
modelo Finlandés considera este hecho y tal
vez sea una de las razones por las que ha
tenido éxito entre los estudiantes.
Para construir un modelo educativo que
tome en cuenta todo lo anterior, se debería
considerar, además de los investigadores de
escritorio, que no tienen que impartir clases o
de hacerlo, tienen un solo grupo de pocos
alumnos, a los profesores que imparten
muchas clases, que es la realidad de la
mayoría de los docentes de nuestro país,
que no cuentan con una plaza de tiempo
completo para dedicarse a una sola escuela,
hecho que disminuye su eficacia como
educadores, saturándose de trabajo
evaluativo que muchas veces se tienen que
llevar a casa. Los investigadores de escritorio
no viven esta realidad que vive gran parte de
la población docente.
Un modelo educativo eficaz deberá
más bien centrarse en el profesor que en el
alumno; en una de sus investigaciones,
Bloom notó que los estudiantes aprendían
mejor con profesores cada vez mas
capaces38; de poco servirá un modelo
educativo si el profesor no domina su materia
o carece de preparación pedagógica, sobre
todo para trabajar en el nivel medio superior.
Las acciones que hemos propuesto en
este trabajo podrían bien incorporarse a un
modelo educativo nacional, así como algunas
características de otros modelos educativos
12
como la participación activa de los
estudiantes16.
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cfie.ipn.mx
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alternativa democrática, en:
http://www.alternativaeducativa.df.gob.mx/ponencias/gluci
o.html
[9] Alejandra Martínez, en El Universal, viernes 02 de
marzo, 2007:
“Por su ubicación en zonas marginadas y de alta
conflictividad social, las preparatorias del GDF atienden a
población con perfil especial. Según Juventino
Rodríguez, asisten jóvenes con pocas posibilidades de
acceder al bachillerato”. “…la mitad de los estudiantes
abandona la educación al concluir el primer año".
[10] Mónica Archundia, en El Universal, viernes 06 de
julio de 2007:
“Marco David Hernández Sánchez podría estar en la
calle, lejos de las aulas que ahora lo rodean, porque
para él estudiar no ha sido fácil. Los últimos seis años
los ha invertido en cursar un bachillerato que ya habría
abandonado, de no ser por el seguimiento
personalizado que tiene en la preparatoria
Azcapotzalco”.
[11] Inger Enkvist, 2007,
http://www.aciprensa.com/noticia.php?n=17769
[12] UNESCO (2006), Anuario Estadístico de la, en:
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http://www.aciprensa.com/noticia.php?n=17769
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13