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Libertades Fundamentales
Teddy Panitz Mau
¿Qué es la libertad?
La libertad es la capacidad de un
individuo para elegir y llevar a cabo un
plan de vida que pueda ser considerado
satisfactorio por él y por los demás; es
decir, la libertad es la capacidad para la
autonomía o, lo que es lo mismo, la
capacidad de un individuo para orientar
significativamente su vida siguiendo sus
propias decisiones
Definiciones
Según Isaiah BERLIN, el término “libertad” designa al menos dos cosas distintas,
a las que denomina “libertad positiva” y “libertad negativa”.
protege el derecho subjetivo de ser informado o de acceder a las fuentes de información, sino, al mismo tiempo,
garantiza el derecho colectivo de ser informados, en forma veraz e imparcial, protegiéndose de ese modo el proceso de
formación de la opinión pública y, en consecuencia, no sólo al informante, sino también a todo el proceso de
elaboración, búsqueda, selección y confección de la información. b) la garantía de que el sujeto portador de los
hechos noticiosos pueda difundirla libremente. La titularidad del derecho corresponde a todas las personas y, de
manera especial, a los profesionales de la comunicación. El objeto protegido, en tal caso, es la comunicación libre,
tanto la de los hechos como la de las opiniones. Por ello, tratándose de hechos difundidos, para merecer protección
constitucional, requieren ser veraces, lo que supone la asunción de ciertos deberes y responsabilidades delicadísimas
por quienes tienen la condición de sujetos informantes, forjadores de la opinión pública.
Libertad de Expresión
Sentencia TC 2976-2012-PA
7 .- Tener presente el distinto programa normativo de la libertad de expresión y la libertad de información
vital a la hora de determinar la legitimidad del ejercicio de estas libertades. Y lo es porque mientras en el
caso de la libertad de información, la veracidad del hecho noticioso está sometida a prueba; en cambio, la
expresión de opiniones o juicios de valor no se presta a ninguna demostración de exactitud. Como también
dijimos en la STC 0905-2001-AAJTC, ello se debe al hecho de que, por su propia naturaleza, los juicios de
valor, las opiniones o las ideas que cada persona pueda tener son de naturaleza estrictamente subjetivas y,
en ese sentido, no pueden ser objetos de un test de veracidad; a diferencia de lo que sucede con los hechos
noticiosos, que por su misma naturaleza de datos objetivos y contrastables, sí lo pueden ser.
Libertad de conciencia y de religión
Sentencia TC 895-2011 AA
3. La libertad de conciencia y la libertad de religión, si bien pueden confluir en algunos de sus postulados, son dos
derechos de distinto contenido.
El derecho a la libertad de conciencia supone el derecho de toda persona de formarse libremente la propia
conciencia, de manera tal que aquella formación se vea exenta de intromisiones de cualquier tipo. El libre desarrollo
de la personalidad del individuo implica que en el transcurrir de la vida la persona vaya formándose en valores o
principios que den lugar a la generación de un propio cúmulo de criterios e ideas. El Estado Constitucional de Derecho
resguarda que el forjamiento de la propia conciencia no conlleve perturbación o imposición de ningún orden, ni
siquiera de aquellos postulados éticos o morales que cuenten con el más contundente y mayoritario apoyo social,
pues justamente, una condición intrínseca al ideal democrático lo constituye el garantizar el respeto de los valores e
ideas de la minoría.
Libertad de conciencia y de religión
Sentencia TC 895-2011 AA
Por otra parte, la libertad de religión comporta el derecho fundamental de todo individuo de
formar parte de una determinada confesión religiosa, de creer en el dogma y la doctrina
propuesta por dicha confesión, de manifestar pública y privadamente las consecuentes
convicciones religiosas y de practicar el culto. Como todo derecho de libertad, el derecho a la
libertad religiosa tiene una vertiente negativa, que garantiza la libertad de cada persona para
decidir en conciencia que no desea tomar parte en actos de la naturaleza antes descrita.
En puridad, la libertad de conciencia está vinculada a la libertad de ideas; mientras que la
libertad de religión, a la libertad de creencias.
Libertad personal
Sentencia TC 1091-2002/HC
2. En cuanto derecho subjetivo, garantiza que no se afecte
indebidamente la libertad física de las personas, esto es, su libertad
locomotora, ya sea mediante detenciones, internamientos o condenas
arbitrarias. Los alcances de la garantía dispensada a esta libertad
comprende frente a cualquier supuesto de privación de la libertad
locomotora, independientemente de su origen, la autoridad o persona
que la haya efectuado. Garantiza, pues, ante cualquier restricción
arbitraria de la libertad personal, según señala el artículo 9.° de la
Declaración Universal de Derechos Humanos y el artículo 7.3 de la
Convención Americana de Derechos Humanos.
Derecho a la Vida Privada
Sentencia TC 6712-2005/HC
38. Con respecto al bien jurídico tutelado en la Constitución, no cabe duda que la vida privada refleja uno de muy
difícil comprensión, tanto así que algunos consideran que se trata de un concepto jurídico indeterminado. No
obstante ello, juzgamos que es necesario plantearse sobre él un concepto inicial y preliminar.
Son diversas las posturas para explicar el significado de la vida privada. Algunas la conciben como aquella zona de la
persona que no es pública, por lo que nadie debe tener acceso a ella. Sin embargo, más correcto es tratar de otorgar
un sentido positivo. Así, sobre la base del right to be alone (derecho a estar en soledad), se ha estimado apropiado
afirmar que es el ámbito personal en el cual un ser humano tiene la capacidad de desarrollar y fomentar libremente
su personalidad. Por ende, se considera que está constituida por los datos, hechos o situaciones desconocidos para
la comunidad que, siendo verídicos, están reservados al conocimiento del sujeto mismo y de un grupo reducido de
personas, y cuya divulgación o conocimiento por otros trae aparejado algún daño.
Libertad de asociación
Sentencia TC 2243-2010/AA
3 Que el derecho de asociación se encuentra reconocido en el inciso 9 del artículo 2º de la Constitución, para el desarrollo de las distintas actividades
culturales, deportivas, económicas, ideológicas, laborales, políticas, religiosas, sociales o de cualquier otra índole que las personas, tanto naturales como
jurídicas, realizan en sociedad. Este derecho tiene una doble dimensión, a saber:
a. Una dimensión positiva que abarca las facultades de conformar asociaciones (derecho a formar asociaciones), la de afiliarse a las organizaciones
existentes y la de permanecer asociado mientras no se incumplan las normas estatutarias.
Dentro de la facultad de conformar organizaciones se encuentra comprendida la posibilidad de estructurar, organizar y poner en funcionamiento la
asociación (principio de autoorganización), la que se materializa a través del estatuto, que debe establecer como mínimo reglas acerca del
comportamiento exigido a los socios y de las cargas que se les imponen, así como de los derechos que pueden ejercer y, por supuesto, sobre la manera de
terminar el vínculo con la asociación, por parte del afiliado, y de excluir al socio, por parte de la asociación.
En este contexto, puede señalarse que el ejercicio del derecho de asociación supone un número plural de personas que acuerdan de manera autónoma,
libre y espontánea la creación de un ente a través del cual realizarán un proyecto de interés, propósitos, ideas o metas colectivo, común, pacífico y lícito.
Desde esta perspectiva, este Tribunal considera que el derecho de asociación se concreta en la existencia de personas jurídicas, libres y capaces para
ejercer derechos y contraer obligaciones, a fin de responder autónomamente por su devenir social, en aras de lograr la satisfacción de un interés u
objetivo común, no siempre ligado a la obtención de lucro.
Libertad sindical
Sentencia TC 1978-2011/AA
El artículo 28º, inciso 1) de la Constitución reconoce el derecho de sindicación y la libertad sindical. Al respecto,
este Colegiado ha establecido que su contenido esencial tiene dos aspectos: el primero consiste en la facultad de
toda persona de constituir sindicatos con el propósito de defender sus intereses gremiales, mientras que el
segundo se refiere a la facultad de afiliarse o no afiliarse a este tipo de organizaciones. A su vez, se ha precisado
que implica la protección del trabajador afiliado o sindicado frente a la comisión de actos que perjudiquen sus
derechos y tengan como motivación real su condición de afiliado o no afiliado de un sindicato u organización
análoga.
Igualmente el derecho a la libertad sindical tiene como contenido el poder del trabajador para que por razones de
su afiliación o actividad sindical no sufra ningún menoscabo en sus derechos fundamentales, como puede ser la
diferencia de trato carente de toda justificación objetiva y razonable entre trabajadores sindicalizados y
trabajadores no sindicalizados (STC 03169-2006-PA/TC, fundamentos 17 y 18).
Libertad de reunión
Sentencia TC 4677-2004/PA
14. El derecho de reunión puede ser definido como la facultad de toda persona de congregarse junto a otras, en un lugar
determinado, temporal y pacíficamente, y sin necesidad de autorización previa, con el propósito compartido de exponer y/o
intercambiar libremente ideas u opiniones, defender sus intereses o acordar acciones comunes.
En tal sentido, aunque (como luego podrá observarse con nitidez) los elementos que configuran el derecho de reunión, determinan,
sin lugar a dudas, que la libertad de expresión y la libertad de reunión, strictu sensu, gocen de un contenido constitucionalmente
distinto[6], la estrecha relación reunión-manifestación, genera una singular vinculación entre ambos, al extremo de que el Tribunal
Europeo de Derechos Humanos (TEDH), ha destacado una instrumentalidad mutua, por así decirlo, “de ida y vuelta”. En efecto, en el
“la libertad de expresión constituye uno de los medios principales que permite asegurar el disfrute efectivo del derecho a la libertad
de reunión y de asociación.”
Para luego señalar, en el caso Stankov, que “la protección de las opiniones y de la libertad de expresarlas constituye uno de los