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Creación de personaje

Si uno no usa su cuerpo, su voz, algún modo de hablar, de caminar y de moverse; si no sabe
encontrar una forma de caracterizar al personaje que corresponda a la imagen, lo probable es que
no pueda transmitir a otros su interior, su espíritu palpitante.

La caracterización externa explica e ilustra, y por eso transmite a los espectadores el esquema
interior del papel que el actor está desempeñando.

Ejemplo, uno conoce a una persona pelucona y barbona, tiene grabada en su cabeza su imagen,
piensa que lo conocer, de repente, se afeita y corta el cabello, es otra persona, tiene una carita de
niño, nos encontramos con un nuevo personaje, no lo reconocemos al instante, nos preguntamos
quién es ahhh? Al conversar con esa persona nos damos cuenta que era la persona que
pensábamos que conocíamos (esto significa que la persona estaba en un personaje que nos
convenció, no dio a conocer y no la persona que estaba adentro). Y si usa otra voz, más incluso nos
confunde, hablamos con un extraño.

Tortsov demostraba instantáneamente todos los defectos físicos que estaba describiendo: cojera,
parálisis, joroba, diversas posturas de brazos y piernas.

¡Qué notables son los trucos externos que pueden lograrse con la voz, el modo de hablar y la
pronunciación, sobre todo de las consonantes, para transformar por completo a la persona que
desempeña un papel! Por supuesto, la voz tiene que estar impostada y entrenada debidamente, si
se desea modificarla. Sin esto, nadie puede, durante un tiempo prolongado, hablar continuamente
con sus tonos más bajos o más altos.

No era él quien lo expiclaba, sino nosotros quienes le decíamos que todas las características que
intuitivamente salían a la superficie eran apropiadas, y dibujaban la imagen creada.

Es un hecho indudable que las facultades internar respondan a la imagen externa que se crea y se
ajustan a ella.

Cada individuo elabora una caracterización externa, partiendo de sí mismo, de los demás, la toma
de la vida real o imaginaria, según intuición y su talento observado del propio yo y del de los
demás,

Es una cosa que no uno deduce de su experiencia persona de la vida, o de la experiencia de sus
amigos, de la observación de retratos, grabados, dibujos, libros, cuentos, novelas , o de un simple
incidente… La fuente no tiene importancia. La única condición es que, mientras esté haciendo esta
investigación externa, no pierda su identidad persona.

Convicción
No es el hecho de descubrir mi identidad secreta, sino tener consciente de quien eres, pero dando
lugar a otro personaje.

Al actuar, uno es espectador de su propio yo, y al mismo tiempo, esa otra parte de mi
personalidad se convertía en una criatura buscafallas, crítica.

Sin embargo, ¿puede uno realmente decir que ese personaje, esa criatura no es parte de uno
mismo? Uno lo deduce de su propia naturaleza, uno se divide, por así decirlo, en dos
personalidades: una que sigue siendo el actor, y otra era el observador.

Pero, ¿esa dualidad no debe impedir o interrumpir o crear conflicto con el personaje? No debería
ser así, sino que de hecho promueve el trabajo creativo, lo estimula y le da un impulso.

Hay actores, y sobre todo actrices, que no sienten la necesidad de preparar personificaciones o
de transformarse en otros personajes, porque adaptan todos los papeles a su atractivo personal,
fundamentan su éxito exclusivamente en esa cualidad (en lo que ellos son). Sin ella son tan
impotentes como Sansón sin su cabellera.

Hay una gran diferencia entre buscar y escoger dentro de uno mismo emociones relacionadas con
un papel, y alterar el papel para adaptarlo a los recursos personales más fáciles. <- Tipo 1 de
personaje

Muchos entran en este tipo de personajes al principio, porque no están acostumbrados, es falta
de trabajo y experiencia. Si su encanto personal influye en el público, se encargan de ostentarlo. Si
su encanto personal está en los ojos, la cara, la voz, los modales, el cuerpo, se esfuerzan en que
resplandezca ante el público.

¿Por qué cambiar, convirtiéndonos en otro personaje, si eso nos hace menos atractivos de lo que
somos en la vida real? Si te fijas, la realidad es que es más lo que tú te amas a ti misma en el papel,
que lo que amas el papel en tu persona. ESO ES UN ERROR!!! TÚ TIENES EL TALENTO PARA
MOSTRARTE, NO SOLO A TI MISMA, SINO TAMBIÉN UN PAPEL CREADO POR TI.

Aprendan a amar el papel en su persona, ustedes tienen el talento creador para hacerlo realidad.

Podemos dar caracterizaciones clásicas, clichés de personajes típicos, usar esa representación para
nuestros papeles, pero debemos darles otras características más, algo que lo distinga de lo común.
Primero distinguir ese personaje del resto, si es un militar, qué rango tiene por ejemplo. Luego
darle características especiales a ese personaje que lo hacen único, un nombre, algún defecto o
algo notorio de su forma de ser, una personalidad definida.

Tan pronto como uno se siente bajo la piel del personaje, la actitud hacia lo demás es un cambio
radical.
Hacer suyo al personaje, sus sentimientos, su manera de ver el mundo. Las copias no son
creaciones.

Lo importante es sentir: yo estoy actuando dentro de un marco de las limitaciones definidas a la


condición física de una persona, no estoy simplemente pretendiendo e imitando.

Siento… (pausa)

Siento personas que me ven, siento personas que me escuchan, pero no las veo. Se que están ahí
(mientras muestro mi cabeza poco a poco subiendo detrás de la silla), y si fallo, si no les gusta. No
quiero, mejor no.

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