Sie sind auf Seite 1von 5

UNIDAD 3- ESTÉTICA FACIAL

El concepto de belleza facial está ligado al equilibrio y la armonía. De ahí que cada
rostro tenga proporciones únicas y que no haya caras iguales. Qué se entiende por
rasgos armónicos. Qué retoques hacer sin cambiar las facciones.
Es innegable que una cara armoniosa debe tener ciertas características que hacen
que el todo luzca atractivo en su conjunto. Respecto de esto, podemos señalar que
hay algunos rasgos faciales que son sinónimo de belleza, y que resultan llamativos:
una piel suave y luminosa, mejillas redondeadas, frente equilibrada (ni muy ancha,
ni demasiado pequeña), ojos seductores y sin arrugas alrededor, mentón suave y
nariz acorde a la forma y el tamaño de la cara.

Pero también es lógico que antes de realizarnos un cambio facial, tengamos en


cuenta ciertos aspectos básicos. Estos son edad, rasgos típicos, calidad de la piel
y nivel de deterioro, y hábitos de vida.

Qué engloba la medicina estética


La medicina estética corporal incluye el peso y todo lo que engloba a la silueta
corporal: nutrición, remodelación de la silueta, sus técnicas como mesoterapias,
radiofrecuencia, intralipoterapia.
También incluye todo lo que afecta a la piel desde el punto de vista estético: estrías,
flacidez, varicosidades.

La medicina estética facial se encarga del envejecimiento de la piel, su textura y


calidad. Incluiría las manchas, melasmas, hiperpigmentaciones, secuelas del acné,
no el propio acné sino sus secuelas.
Higiene en el tratamiento estético facial

Higiene facial

Aunque limpiemos nuestra piel todos los días, siempre quedan restos que exigen
un tratamiento más profundo. La limpieza facial profesional completa nuestros
pequeños rituales de limpieza cotidianos. No es un sistema para parecer más joven;
su objetivo es limpiar en profundidad células muertas y feas espinillas y tonificar los
músculos de la cara gracias a los masajes.
Es un básico de la estética por sí misma, para que la piel esté bonita, es necesario
que siempre haya una buena limpieza. Además es el paso previo imprescindible
antes de todo tratamiento específico facial. Dependiendo de la carencia y necesidad
de cada piel, diagnosticaremos una higiene facial específica y adecuada.
En qué consiste el tratamiento la higiene facial
Una limpieza facial puede durar entre 50 minutos y 90 minutos. La básica tiene tres
partes distintas; limpieza propiamente dicha, masaje tonificante y nutrición:

Limpieza facial: para ello se aplican distintos productos que limpian la parte
superficial de la cara. A continuación se abren los poros mediante vapor para drenar
las impurezas gracias a productos especiales. Cada piel (seca, grasa o mixta)
necesitará un tipo de producto distinto.

Masaje: en este punto es importante cerrar los poros y descongestionar la piel


después del drenaje. Se aplican productos en gel o crema y se da un masaje
relajante y tonificante.

Nutrición: la piel ya está lista para aprovechar al máximo los nutrientes y


vitaminas de las mascarillas u otros tratamientos que vengan a continuación.

Beneficios de la higiene facial


• Permite la oxigenación de la piel.
• Los productos cosméticos destinados a mejorar el aspecto de la piel tienen
mayor efectividad.
• Retrasa la aparición de arrugas.
• La piel es más luminosa.
• Ayuda a disminuir la apariencia de cansancio.
• Elimina acné y puntos negros.
• La piel luce más suave y tersa.
• Una piel limpia acepta y muestra mejor el maquillaje.

Algunos Tratamientos faciales

Limpieza de cutis: La higiene facial o "limpieza de cutis" está destinada a


eliminar la suciedad que se deposita en la superficie cutánea, y su finalidad es
dejarla en perfectas condiciones para su normal metabolismo.

Tratamiento Anti-edad: Con el correr del tiempo, se van notando cambios


en la textura, firmeza y coloración de la piel. Estos cambios se deben a cambios
fisiológicos del organismo (menopausia, por ejemplo) o a cambios externos:
exposición solar, clima, tipo y lugar de trabajo, contaminación ambiental, estrés, etc.
El tratamiento anti-edad está destinado a corregir la pérdida de elasticidad y
tonicidad cutánea; a modificar el aspecto de la piel deslucida, a retrasar la formación
de arrugas, a restablecer la luminosidad de la piel, etc.

Tratamiento de cicatrices aberrantes: Este tratamiento está destinado a


mejorar el aspecto clínico y estético de las cicatrices y, según donde se encuentren
ubicadas, puede mejorar hasta el aspecto psicológico de un paciente. Su
tratamiento incluye una combinación de diferentes métodos: peeling químico y/o
mecánico, ultrasonido, masaje, etc. cuya finalidad es mejorar el aspecto del tejido
cicatrizal.

Estimulación facial: Uno de los adversarios de la estética es la flaccidez facial,


que están relacionados con la edad, con el daño solar, o con el descenso brusco
de peso. Este tratamiento tiene como meta mejorar estos aspectos mediante la
utilización del electroestimulador o contractor facial, cuyos electrodos tienen el
diámetro adecuado para trabajar sobre músculos tan delicados. La
electroestimulación acompaña a otros tratamientos y se complementa con ellos.

Masaje cosmetológico: Se realiza con diferentes técnicas y está destinado a


estimular la circulación sanguínea y linfática, a estimular la musculatura facial, cuello
y escote, y a estimular el relax o distensión neuromuscular. Por ese motivo, produce
una mejor oxigenación del tejido, un mayor aporte de sustancias nutrientes a las
células y una mejor evacuación de toxinas o desechos.

Depilación progresiva con electrolisis: Está destinada a pequeñas zonas:


ceja, bozo y mentón, y a pacientes que por diversos motivos no pueden acceder a
depilación con láser. Elimina, en forma paulatina, el vello o, en algunos casos,
retrasa su crecimiento en forma considerable.

Peeling químico o mecánico: Destinado a producir la renovación celular de la


capa córnea de la piel, para lograr algunos de los siguientes beneficios: corrección
de arrugas y pliegues cutáneos, disminución o mejoramiento del aspecto de las
cicatrices, tratamiento de discromías, etc.

Drenaje linfático manual: Es la técnica efectiva por excelencia para eliminar


la acumulación de líquidos en los tejidos (edemas) y para la resolución rápida de
hematomas (sobre todo en períodos posquirúrgicos), favorece el retorno venoso y
linfático y, por consiguiente, la eliminación de toxinas.

Das könnte Ihnen auch gefallen