A lo largo del desarrollo de nuestra carrera de psicología, se nos van a inculcar
métodos o técnicas eficaces que nos permitirán realizar una entrevista adecuada, esto permanecerá en nosotros por así decirlo, toda la vida ya que es una herramienta básica de debe tener todo psicólogo para el buen desarrollo de su carrera, esto es una herramienta que nos ayudara en el desenvolviendo académico y profesional. De tal manera, que nosotros nos sintamos cómodo y principalmente nuestros clientes debido a que las técnicas se deben adecuar a él, mas no hacer que los métodos que conozcamos se adecuen de una manera que el paciente se sienta incómodo. Pero no se podría realizar tal acción adecuadamente, sin la práctica, ni mucho menos sin un conocimiento base previo, para saber los puntos más importantes o los pasos que se pueden seguir y a que nos vemos enfrentados. El libro DMS IV Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, es un libro muy conocido, es un sistema de clasificación de los trastornos mentales que proporciona descripciones claras de las categorías diagnósticas, con el fin de que los clínicos e investigadores de las ciencias de la salud puedan diagnosticar, estudiar e intercambiar información y tratar los distintos trastornos. brinda también, estableciendo claramente los criterios que los definen y ayudando a asegurar que el diagnóstico sea preciso y consistente, es de gran ayuda para los estudiantes que buscar conocimiento porque, vendría hacer como una guía para realizar dicha entrevista, debido a que nos muestra en el capítulo II el cual vamos a tratar, brinda estrategias para la relación. Es importante señalar que en este capítulo encontraremos ciertos puntos los cuales se deben identificar durante la entrevista. Si nos percatamos este capítulo se preocupa por cómo se siente el evaluador y evaluado explicando que es impórtate que los dos muestren cierta comodidad y compromiso con la dificultad del paciente, dejando en claro las posibilidad de una recuperación o la liberación que debe tener el paciente en sus daciones sin ser autoritarios, porque, nosotros si bien es cierto somos un líder para ellos mas no podemos tomar las decisiones por ellos por más difícil que parezca la situación somos como una guía que brinda apoyo, seguridad, confianza y sobre todo la empatía con nuestro paciente sin sobrepasarte de los niveles que muestre el paciente en cuanto a confianza y tampoco el con nosotros. Es de suma importancia recalcar que cuando el paciente identifique sus síntomas y denotemos su introspección se nos hará un poco más fácil establecer los objetivos para así pasar a demostrar nuestros conocimientos para que el paciente nos vea con la capacidad de atender su dificultad y nos brinde la información que requerimos para así llegar al diagnóstico esperado y se pueda brindar una atención significativa y se el procedimiento de rehabilitación o mejoramiento. Conclusiones: 1. El evaluador debe establecer un nivel de confianza empezando con una conversación simple, como un tema fácil de conversar, para que el paciente muestra seguridad, confianza y pueda contar sus cosas de una manera relajada y cómoda, brindamos la información que necesitamos. 2. Mostar apoyo, cuando denotemos el sufrimiento por el cual este pasando el paciente mediante la empatía para que sienta que lo comprendemos y lo escuchamos diciéndole como se debe sentir y preguntar con los mismos términos que el menciona que significan para el para así lograr más comprensión con la situación. 3. Debemos identificar la introspección, que muestre el paciente en cuanto a su dificultad esto nos ayudara a establecer los objetivos terapéuticos. 4. Al llegar a los objetivos seguidamente, se debe mostrar nuestros conocimientos para el evaluado perciba nuestra capacidad para intervenir su dificultad, contestándole dudas o pensamientos inconclusos. 5. Para establecer el liderazgo se debe motivar y guiar al paciente para que, si bien acepte su dificultad y se sienta capaz de superarlo, más no liderar de manera autoritaria ya que cada acción que realice debe ser por su decisión. 6. En cuanto a equilibrio de papeles, el que debemos que establecer, es el oyente empático Logra que el paciente se sienta cómodo, es sensible a su sufrimiento y expresa su compasión.