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All content following this page was uploaded by Johanna Ayala on 19 September 2019.
Iniciativas y resultados
de investigaciones y experiencias
de innovación educativa
Editores
Eduard Vaquero Tió
Enric Brescó Baiges
Jordi L. Coiduras Rodríguez
F. Xavier Carrera Farran
I. Vaquero Tió, Eduard, editor II. Brescó Baiges, Enric, editor III. Coiduras
Rodríguez, Jordi L., editor IV. Carrera, Xavier, editor
1. Tecnologia educativa 2. Educació – Innovacions tecnològiques
3. Ensenyament a distància 4. Internet en l’ensenyament
37.012
URI
http://hdl.handle.net/10459.1/66488
DOI
https://doi.org/10.21001/edutec.2019
Edición
Edicions de la Universitat de Lleida, 2019
Asociación EDUTEC
Textos
Los y las autores/as
Ilustraciones
Shutterstock (portada), Pixabay (interiores)
Diseño y maquetación
Edicions i Publicacions de la Universitat de Lleida
ISBN
978-84-9144-139-7
DOI 10.21001/edutec.2019
Licencia
Creative Commons / Reconocimiento / No comercial / Sin obra derivada
¡SIMULADORES EN EL AULA!
TEORÍA, INVESTIGACIÓN Y PRÁCTICA
Palabras clave
Resumen
En el marco del proyecto: El uso de simuladores en el aula, una mirada desde los proyectos de
investigación formativa del programa MGTE-UDES- Colombia, se analizan los proyectos de
grado que presentan los estudiantes de la Maestría en Gestión de la Tecnología Educativa, para
determinar qué aspectos claves inciden en la pertinencia e impacto de las propuestas pedagó-
gicas de uso de simuladores en el campo educativo, para plantear estrategias que promuevan
este tipo de estudios.
Con esta iniciativa se pretende responder a ¿Cómo estructurar los procesos de investigación
formativa y el ecosistema de aprendizaje para la implementación de simuladores en los
proyectos educativos?
Investigación 265
1. Introducción
Para apoyar el proceso de investigación, se definen tres componentes teóricos que funda-
mentan la propuesta, en primera instancia la investigación formativa orientada a tecnologías
educativas, en segundo lugar las TIC y su impacto en los procesos educativos, y finalmente,
el uso de los simuladores en la escuela; tres enfoques que combinados podrán dar línea a la
investigación formativa, de manera que genere un mayor impacto cuando del uso de simula-
dores en el proceso de aprendizaje se trate (Figura 1).
El uso de TIC incide en los procesos de enseñanza – aprendizaje y tiene potencial en el trián-
gulo interactivo, por lo tanto, la investigación en tecnologías educativas debe ir más allá del
instrumentalismo, hacia una visión holística de la ecología del aula en la que conviene re-
flexionar sobre los fundamentos psico-pedagógicos que deben dar cobertura al uso de las tec-
nologías y el rol que juegan tanto los maestros como los estudiantes. (Cobo y Moravec, 2016),
(Salinas, 2017), (Coll, 2004), (Cabero y Barroso, 2016)
En cuanto al impacto de las TIC en los procesos formativos, es necesario considerar que, para
responder a los intereses y necesidades del ciudadano del siglo XXI, se requieren nuevos am-
bientes de aprendizaje, que estén mediados por TIC, se desarrollen en espacios virtuales o
mixtos, sean flexibles, promuevan el aprendizaje colaborativo, promuevan el aprendizaje au-
tónomo y que además tengan en cuenta los estilos de aprendizaje (Salinas & Agudelo, 2016).
Estos nuevos escenarios pueden referirse, tanto a la incorporación de las TIC en los escenarios
educativos convencionales, como al diseño de nuevos escenarios para el aprendizaje y es allí
donde se encuentra según Salinas (2005) y Pérez (2012) una variedad de propuestas.
Finalmente, el marco se completa con las teorías y conceptos que sustentan el uso de los simu-
ladores en la educación, desde su concepto básico, tipos y evolución hasta las ventajas de su
incorporación en el aula; llevar al estudiante o aprendiz a desenvolverse en situaciones lo más
aproximado a la realidad en condiciones seguras, con variables controladas, sin riesgos, con
menores costos y permitiendo el error como experiencia de aprendizaje. Como herramienta
psico-cognitiva, “la virtud de los simuladores como recursos educativos está en permitir que
el estudiante manipule modelos físicos que lo llevan a activar y restaurar sus modelos men-
tales para construir modelos explicativos; en un enfoque constructivista y experimental, el
estudiante una y otra vez, a su ritmo y en forma autónoma utiliza sus herramientas cognitivas
para resolver el problema y en su logro evidencia la eficiencia de su propio modelo” (Salinas
y Ayala, 2016), (Palés, 2012), (Yanitelli, 2011).
El siguiente paso después de abordar el marco teórico y tener claridad sobre los fundamen-
tos conceptuales, es el análisis de los proyectos que se han elaborado combinando esos tres
componentes, determinando el enfoque, la orientación de sus objetivos, la metodología, los
resultados, el impacto, para determinar y proponer modelos que guíen a futuro este tipo de
proyectos en las aulas de clase.
Investigación 267
2. Objetivos
El objetivo general del estudio es caracterizar los procesos de investigación formativa que
abordan el uso de simuladores en el aula en el programa MGTE-UDES, determinando los ele-
mentos que generan mayor impacto.
3. Metodología
La IBD funciona como un puente entre la teoría y la práctica; está comprometida tanto con la
construcción y ampliación teórica, como con la resolución de problemas del mundo real; se
centra en el desarrollo y evaluación sistemáticos y multifacéticos de intervenciones en con-
textos educativos auténticos (en oposición a la investigación conducida en condiciones de la-
boratorio. La revisión de la literatura es particularmente importante en la IBD ya que permite
ubicar el estudio en el contexto del conocimiento existente y así mismo intentar hacer frente
al problema de investigación basándose en la fundamentación teórica. (Ellis & Levy, 2010)
(De Benito & Salinas, 2016).
4. Resultados
Como resultado de la primera fase del estudio se identificaron los avances y limitaciones en la
investigación sobre el uso de simuladores en los procesos de enseñanza-aprendizaje compren-
diendo las tendencias mundiales y la realidad nacional.
El uso de los simuladores para el entrenamiento inició desde los años setenta en medicina,
aviación y prácticas militares, con el tiempo se incorporaron también en los laboratorios vir-
tuales para el estudio de las ciencias básicas; en esencia, son instrumentos educativos que se
utilizan para el desarrollo de competencias en contexto, especialmente en los niveles de edu-
cación superior y educación para el trabajo.
La mayoría de los estudios realizados sobre su uso en la educación a nivel global y nacional
se centran en las áreas pioneras, pero también se registran experiencias de su aplicación en
matemáticas, física, arquitectura, ingenierías, pensamiento computacional, administración,
negocios y otras disciplinas.
La simulación clínica es una técnica de enseñanza que va más allá del simple uso de simula-
dores físicos, también tiene en cuenta una metodología de enseñanza. En su desarrollo han
influido cuatro factores: el desarrollo de la bioética, el desarrollo de la educación médica, la
preocupación por la seguridad de los pacientes y el desarrollo tecnológico. Su efectividad se ha
demostrado en mejorar la adquisición de conocimiento médico, la comunicación y el trabajo
en equipo, el desarrollo de ciertas habilidades, disminuir el estrés durante los procedimientos
e incluso ha mostrado directa mejoría de ciertos resultados clínicos. En la siguiente tabla se
muestran las etapas de su evolución. (Corvetto, 2013).
Investigación 269
Etapa Fecha Características
Los precurso- Siglo VI a. C. • Juegos de guerra creados por el ejército espartano.
res
1929 hasta la • Simuladores de vuelo.
década de los • Aplicaciones básicas en el campo militar y de la medicina.
sesenta • Sin comercialización.
Los pioneros Década de los • Simuladores complejos, capaces de replicar características
sesenta a los anatómicas y eventos fisiológicos.
ochenta.
La consolida- Década de los • Simuladores de tareas específicas quirúrgicas, diagnósticas
ción noventa, primera y de procedimientos.
década del 2.000 • Aceptación creciente de la simulación como un comple-
mento y a veces como substituto ventajoso de la formación
clínica.
• Uso de simulación para evaluación y acreditación de com-
petencias.
• Investigación sobre la utilidad de la simulación clínica en el
desarrollo de competencias clínicas.
• Empresas dedicadas a la investigación, diseño, desarrollo y
comercialización.
Fuente: Construcción propia basada en: Palés y Gomar (2010), Garay y Reyes, (2012)
y Corvetto, et al,(2013)
Si bien la educación médica ha sido pionera en el uso de los simuladores para apoyar los pro-
cesos de enseñanza-aprendizaje, en otras áreas también se encuentran adelantos. Tal es así
que desde el 2012 el informe Horizont proyectaba el uso de los simuladores como una tecno-
logía emergente en los siguientes dos años, con la incorporación de los juegos de simulación
en toda la gama de entrenamientos para la formación de universitarios en diversas disciplinas,
mostrando exitosos ejercicios realizados por universidades de prestigio con la incorporación
del aprendizaje basado en juegos para intentar transmitir a los estudiantes aptitudes de cola-
boración, capacidad de resolución de problemas, comunicación, pensamiento crítico y cono-
cimientos digitales. Desde los juegos de rol hasta los juegos sociales en línea, concebidos todos
como simulaciones de contextos reales. (Johnson, Adams &Cummins, 2012)
Posteriormente el Informe Horizont 2014, en la versión especial para hight education (equi-
valente a ciclo de media vocacional en Colombia), además de insistir en los juegos serios y la
gamificación, plantea ente los desafíos difíciles (aquellos que entendemos pero para los que las
soluciones son difíciles de alcanzar) la creación de oportunidades de aprendizaje auténticas, y
entre los desafíos “malditos” (aquellos que son complejos incluso para definir, mucho menos
abordar) el Pensamiento complejo y la comunicación. (Johnson, Adams, Estrada, et al, 2014)
En varias de las versiones del Informe Horizont, enfocadas tanto a los ciclos de educación
básica como educación superior, se plantean como desafíos de la educación la creación de
oportunidades de aprendizaje auténticas y el desarrollo del pensamiento complejo; mostrando
varios casos de éxito en el uso de simuladores. Del mismo modo se proyectan para el 2020 la
El proyecto financiado por la UE “UniSchooLabs” es uno de esos proyectos que aborda esta
brecha de acceso, al colaborar con varias universidades, escuelas primarias y secundarias en
Investigación 271
todo el continente, quienes pueden usar herramientas de alta calidad a través de computado-
ras y otros dispositivos.
En el análisis de las publicaciones se encuentran que los estudios muestran diversos enfoques
pedagógicos para fundamentar las experiencias formativas con simuladores, algunos tienen
en cuenta los tipos de pensamiento a desarrollar, como el pensamiento clínico y el computa-
cional, y otros describen las teorías de aprendizaje aplicadas como el aprendizaje significativo,
el aprendizaje basado en problemas, la teoría de la mediación, la teoría de los modelos menta-
les, la espiral del conocimiento creativo o la técnica de elicitación de modelos.
En su recorrido por la evolución de las TIC en los entornos educativos, Mesa destaca el papel
pionero del sector productivo en la llegada de los computadores a Colombia a finales de la
década de los 50, la marcada desigualdad en las posibilidades de acceder a estos recursos y la
incidencia de las políticas estatales en la consolidación de los planes de integración de las TIC
en las instituciones educativas y particularmente en las universidades.
Por su parte Maldonado muestra que la década de los noventa la comunidad científica en el
área era apenas naciente, debido a la reciente entrada de las tecnologías a la educación en
Colombia y se hace manifiesta la crítica del déficit tecnológico que afecta intrínsecamente a la
pedagogía como disciplina. (Maldonado, 2001)
En el estudio se identifican temáticas con niveles de desarrollo diferentes; las más destacadas
son: incorporación de la informática como herramienta en los procesos de enseñanza, repre-
sentación computacional de procesos de aprendizaje, análisis etnográfico de la cultura institu-
cional y valoración de metodologías para el diseño y desarrollo de programas de computador.
Ahora bien, como se dijo anteriormente, existen muchas herramientas tecnológicas que se
pueden considerar simuladores por su capacidad para representar objetos, situaciones o fenó-
menos reales y permitir su manipulación, sin embargo, no son denominadas como tal. Como
por ejemplo los videojuegos, los programas de geometría dinámica, la realidad virtual, entre
otros. Por lo tanto, pueden encontrarse otros estudios relacionados con el tema que no inclu-
yen los términos “simuladores” o “simulación”, aunque se haga referencia al mismo objeto
de estudio.
Otras experiencias de uso de simuladores para la enseñanza se han publicado en Colombia, tal
es el caso de la experiencia con micromundos para el desarrollo del pensamiento económico
utilizando dinámica de sistemas, desarrollada por el grupo SIMON de la Universidad Industrial
de Santander; en cuya publicación destacan la potencialidad de los modelos simulables para el
Investigación 273
análisis de fenómenos sociales, ya que el micromundo permite observar consecuencias de un
sistema a través del tiempo. (Andrade, Lizcano& Pineda, 1998).
Estudios similares sobre simulación en educación médica son publicados por investigadores de
la Universidad Javeriana, la Universidad del Norte de Barranquilla, la Universidad de Caldas y
el Centro de Simulación y Habilidades Clínicas Valentín Fuster de la Fundación Cardioinfantil.
Tal es el caso del proyecto “Simulación por computador como alternativa para la enseñanza
de laboratorios en ingeniería civil” de la Escuela Militar de Cadetes “General José María Cór-
dova. En éste se resalta la utilidad del uso de simuladores en áreas como la ingeniería civil que
requieren una comprensión adecuada acerca del comportamiento mecánico de los materiales
que se utilizan para la construcción de obras civiles, donde las experiencias con simuladores a
diferencia de la experiencia directa en campo o laboratorio, implica menor costo, reducción de
la exposición a riesgos físicos o ahorro de tiempo. En su estudio, Camacho y Posso presentan
el marco conceptual necesario para el adecuado diseño de una herramienta de simulación por
computador junto con el modelo matemático utilizado para reproducir el comportamiento
físico-mecánico de una masa de suelo aplicable al contexto de la ingeniería civil. (Camacho y
Posso, 2012).
Forero y Giraldo, por su parte, publican los resultados de su estudio sobre el uso de un modelo
de simulación de un proceso de fabricación de bicicletas en un curso ingeniería industrial de
la Universidad Nacional. Justifican el uso de tecnologías emergentes en el aula para cambiar
el método tradicional de las clases magistrales, como una forma de implementar el paradigma
de la educación permanente y estar en sintonía con las demandas de la sociedad postindus-
trial en la que se da importancia al saber y la inteligencia como factores de progreso social y
económico. En su propuesta de aprendizaje basado en problemas se usa un modelo construido
con hojas de cálculo y el simulador Promodel que permitían a los estudiantes modificar un
Se concluye que el uso del modelo representa un soporte didáctico apropiado en asignaturas
relacionadas con la gestión de sistemas de producción industrial y que el aprendizaje basado
en problemas (ABP), apoyado en herramientas virtuales como la simulación, conlleva el aná-
lisis del problema en múltiples instancias y esto motiva a docentes y estudiantes a profundizar
en el conocimiento inherente a la situación para comprenderla. (Forero y Giraldo, 2016)
En la enseñanza de la robótica, también son utilizados los entornos de simulación, así lo pre-
sentan López y Andrade en la revisión de artículos que hacen acerca de la implementación
de la robótica en la educación, considerando dos ámbitos de aplicación: el aprendizaje de la
robótica y el aprendizaje con robótica. En su estudio encuentran que en los dos ámbitos, el
aprendizaje, puede ser mediado por la informática, la cual aporta tecnologías y herramientas
software como los lenguajes de modelado matemático y simulación, tutoriales multimediales,
laboratorios virtuales y remotos, entre otros. (López & Andrade, 2013)
Así pues, estas técnicas informáticas son utilizadas tanto para simular componente físico (di-
seño y mecánica) de la construcción de los robots como para simular su programación y con
ellas Los estudiantes requieren de menos tiempo para el aprendizaje sobre movimientos del
robot.
En otra área de aplicación se publica el estudio “Juegos de simulación como método de defen-
sa en la guerra” en el marco del proyecto de investigación: “Súper Match virtual de Derechos”
de la Escuela Militar de Cadetes “General José María Córdova”. En el estudio se justifica la
educación en Derechos Humanos (DH) y el Derecho Internacional Humanitario (DIH) desde
el deber del Estado y se hace un recuento del uso que se ha dado a los juegos de simulación
en los diversos escenarios de la historia de la humanidad y la historia de los conflictos armados
como herramienta de enseñanza y conocimiento de las operaciones militares.
El estudio concluye que “es indudable que estrategias didácticas como el juego interesan, mo-
tivan, generan curiosidad… se crea no solo el “saber” en el futuro combatiente, sino el “saber
hacer”, con un sólido poder en la toma de decisiones basado en un criterio claro y real”
En Colombia también se han divulgado las herramientas de simulación mediante las escuelas
de Ingeniería de Sistemas, dentro de las metodologías sistémicas de modelamiento y simula-
ción de procesos organizacionales. La Dinámica de Sistemas ha apoyado diferentes procesos de
gestión en el país, con proyectos de modelamiento de la generación, distribución y consumo
Investigación 275
de la energía eléctrica con las plataformas de aprendizaje de estrategia en la Universidad Nacional
y procesos industriales de la producción local de panela, caña de azúcar en la Universidad In-
dustrial de Santander, (Cabrera, 2000).
Otra línea de aplicación que se ha fortalecido en Colombia, ha sido la aplicación de estos simu-
ladores para apoyar estudios y campañas de control epidemiológico, como el trabajo de Gelvez
con el micromundo Mi U, en la Facultad de Salud, de la Universidad Industrial de Santander.
Los procesos de gestión educativa también se han apoyado con Micromundos en los trabajos
de Baez, Arguello y Gelvez, así mismo se han fortalecido procesos de aprendizaje en la escuela
con la construcción de ambientes de simulación de fenómenos de ciencias naturales en los
trabajos de Andrade. Aportes difundidos a la comunidad de docentes beneficiarios de las cam-
pañas de Computadores para Educar, en el Oriente colombiano. (Arguello & Gelves, 2000),
(Gelvez, 2008), (Andrade, 2001).
5. Conclusiones
En la revisión se han considerado investigaciones que estudian los usos educativos de los si-
muladores, desde una perspectiva histórica a nivel mundial y en el contexto nacional.
En cuanto a las temáticas, abundan los estudios relacionados con pensamiento clínico, sin
embargo, también se destacan otras áreas como el pensamiento computacional, la adminis-
tración, las matemáticas, las ciencias y las ingenierías, en definitiva, las aplicaciones abarcan
todas las áreas que requieran el uso de habilidades físicas y mentales.
6. Referencias bibliográficas
Cabero, J & Barroso, J. (2016). Ecosistema de aprendizaje con “realidad aumentada”: posibi-
lidades edicativas. En: CEF, num 5. P 141 – 154.
Cobo, C. y Moravec, J. (2.011) Aprendizaje invisible. [Libro electrónico]. Laboratorio de Mit-
jans Interactius, Universitat de Barcelona. ISBN de la ed. electrónica: 978-84-475-3517-0.
Coll, C. (2004). Psicología de la educación y prácticas educativas mediadas por las tecnologías
de la información y la comunicación. Una mirada constructivista. Revista Electrónica Si-
néctica, núm. 25
Corvetto, M., Bravo, M., Montaña, R., et al. (2013). Simulación en educación médica: una
sinopsis. En: Rev Med chile, 141, 70-79.
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