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Señor
Presidente de la República de Chile
Sebastián Piñera Echeñique
Presente
A menos de tres semanas de que se cumpla el plazo para firmar el Acuerdo regional sobre
el acceso a la información, participación pública y acceso a la justicia en asuntos
ambientales, recibimos el portazo del canciller Allamand y el Gobierno, que usted preside,
con respecto a no suscribir como país este importante tratado internacional de carácter
medioambiental y democrático.
A modo de retratar esto, Chile es uno de los países con mayor cantidad de conflictos
socioambientales del mundo, destacándose por acuñar conceptos como las zonas de
sacrificio -en Quintero y Puchuncaví- donde la comunidad se enferma por exceso de
emisiones contaminantes.
Se suma a esto que existe una débil institucionalidad ambiental, ejemplo de ello es la grave
crisis hídrica amparada bajo la actual Constitución, que permite el uso indebido de derechos
de agua para monocultivos como la palta, por sobre el derecho humano a este elemento
vital, poniendo en riesgo la sostenibilidad de la vida de las comunidades desde hace
décadas.
Hay regiones como Valparaíso donde existe una estrategia de desarrollo instalada por la
élite que le otorga beneficios para explotar los territorios, y que es aprovechada por la
debilidad del Estado para ordenar el territorio y favorecer que haya trabas que eviten
cualquier incidencia por parte de las comunidades en las decisiones que afectan los lugares
que habitan.
Por lo anterior, no podemos dejar de mencionar que nos encontramos en una región muy
peligrosa para ser activistas ambientales o ecologistas, viviendo como personas
perseguidas, amenazadas y asesinadas, en que la justicia y protección es lejana. No
olvidamos los casos de dirigentes como Macarena Valdés y Alejandro Castro.
Todas estas condiciones hacen inverosímil la tesis de que el Acuerdo de Escazú no le
conviene a Chile, puesto que los hechos están demostrando lo contrario.
Sin duda que esta es la última oportunidad que tiene este gobierno para demostrar el
compromiso y liderazgo internacional por la crisis climática, justicia ambiental y el respeto
de los derechos humanos. En consecuencia, le solicitamos, Presidente, que como Ejecutivo
transparenten las razones que hay detrás para no firmar este pacto; se replanteen la
decisión anunciada por el canciller Allamand y suscriban el Acuerdo de Escazú antes del 26
de septiembre.
Firman: