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TRANSICIÓN
LENGUAJE Nº3
...el drama del desencantado que se arrojó a la calle desde el décimo piso, y a medida que
caía iba viendo a través de las ventanas la intimidad de sus vecinos, las pequeñas tragedias
domésticas, los amores furtivos, los breves instantes de felicidad, cuyas noticias no habían
llegado nunca hasta la escalera común, de modo que en el instante de reventarse contra el
pavimento de la calle había cambiado por completo su concepción del mundo, y había llegado
a la conclusión de que aquella vida que abandonaba para siempre por la puerta falsa valía la
pena de ser vivida.
El drama del desencantado, García Márquez
2. ¿Por qué crees que este microcuento se llama El drama del desencantado?
A) Porque presenta el caso de una persona que decide suicidarse luego de que
se desencantara de la vida por ver la forma en que vivían sus vecinos.
B) Porque narra una historia con el fin de explicar el dilema de tener que escoger
entre ayudar a otros con sus problemas o vivir su vida de forma independiente.
C) Porque la historia narrada presenta el dramático momento en que una persona
decida suicidarse, pero luego se arrepiente de la nada.
D) Porque interpela al lector con una interrogante que no se logra llegar a
resolver en el texto, sino que se deja como reflexión para quien lee la historia.
E) Porque narra la historia de una persona que se ha desencantado de la vida,
pero segundo antes de suicidarse cambia de opinión, pero ya es muy tarde.
4. ¿Por qué el narrador indica que “en el instante de reventarse contra el pavimento de
la calle había cambiado por completo su concepción del mundo”?
A) Porque el dolor de golpearse contra el pavimento fue tan grande que el
protagonista cuestionó todo lo vivido hasta entonces.
B) Porque todo lo visto mientras caía hizo que cambiara la forma en que veía el
mundo hasta ese momento.
C) Porque durante mucho tiempo pensó en cómo sería el suicidio, pero al
momento de hacerlo se dio cuenta de que era muy diferente.
D) Porque el golpe no lo dejaba ver ni pensar con claridad, por lo que todo se
veía completamente diferente.
E) Porque el miedo de estar cayendo hizo que se aferrada más a la vida que
nunca, encantándose nuevamente de esta.
"Frankenstein"
1. Una desapacible noche de noviembre contemplé el final de mis esfuerzos. Con una
ansiedad rayana en la agonía, coloqué a mi alrededor los instrumentos que me iban a permitir
infundir un hálito de vida a la cosa inerte que yacía a mis pies. Era ya la una de la madrugada;
la lluvia golpeaba las ventanas sombríamente, y la vela casi se había consumido, cuando, a la
mortecina luz de la llama, vi cómo la criatura abría sus ojos amarillentos y apagados. Respiró
profundamente y un movimiento convulsivo sacudió su cuerpo.
2. ¿Cómo expresar mi sensación ante esta catástrofe, o describir el engendro que con tanto
esfuerzo e infinito trabajo había creado? Sus miembros estaban bien proporcionados y había
seleccionado sus rasgos por hermosos. ¡Hermosos!: ¡santo cielo! Su piel amarillenta apenas si
ocultaba el entramado de músculos y arterias; tenía el pelo negro, largo y lustroso, los dientes
blanquísimos; pero todo ello no hacía más que resaltar el horrible contraste con sus ojos
acuosos, que parecían casi del mismo color que las pálidas órbitas en las que se hundían, el
rostro arrugado, y los finos y negruzcos labios.
3. Las alteraciones de la vida no son ni mucho menos tantas como las de los sentimientos
humanos. Durante casi dos años había trabajado infatigablemente con el único propósito de
infundir vida en un cuerpo inerte. Para ello me había privado de descanso y de salud. Lo había
deseado con un fervor que sobrepasaba con mucho la moderación; pero ahora que lo había
conseguido, la hermosura del sueño se desvanecía y la repugnancia y el horror me
embargaban. Incapaz de soportar la visión del ser que había creado, salí precipitadamente de
la estancia. Ya en mi dormitorio, paseé por la habitación sin lograr conciliar el sueño. Finalmente,
el cansancio se impuso a mi agitación, y vestido me eché sobre la cama en el intento de
encontrar algunos momentos de olvido. Mas fue en vano; pude dormir, pero tuve horribles
pesadillas. Veía a Elizabeth, rebosante de salud, paseando por las calles de Ingolstadt. Con
sorpresa y alegría la abrazaba, pero en cuanto mis labios rozaron los suyos, empalidecieron
con el tinte de la muerte; sus rasgos parecieron cambiar, y tuve la sensación de sostener entre
mis brazos el cadáver de mi madre; un sudario la envolvía, y vi cómo los gusanos reptaban
entre los dobleces de la tela. Me desperté horrorizado; un sudor frío me bañaba la frente, me
castañeteaban los dientes y movimientos convulsivos me sacudían los miembros. A la pálida y
amarillenta luz de la luna que se filtraba por entre las contraventanas, vi al engendro, al monstruo
miserable que había creado. Tenía levantada la cortina de la cama, y sus ojos, si así podían
llamarse, me miraban fijamente. Entreabrió la mandíbula y murmuró unos sonidos ininteligibles,
a la vez que una mueca arrugaba sus mejillas. Puede que hablara, pero no lo oí. Tendía hacia
mí una mano, como si intentara detenerme, pero esquivándola me precipité escaleras abajo.
Me refugié en el patio de la casa, donde permanecí el resto de la noche, paseando arriba y
abajo, profundamente agitado, escuchando con atención, temiendo cada ruido como si fuera a
anunciarme la llegada del cadáver demoníaco al que tan fatalmente había dado vida.
4. ¡Ay!, Ningún mortal podría soportar el horror que inspiraba aquel rostro. Ni una momia
reanimada podría ser tan espantosa como aquel engendro. Lo había observado cuando aún
estaba incompleto, y ya entonces era repugnante; pero cuando sus músculos y articulaciones
tuvieron movimiento, se convirtió en algo que ni siquiera Dante hubiera podido concebir.
5. Pasé una noche terrible. A veces, el corazón me latía con tanta fuerza y rapidez que notaba
las palpitaciones de cada arteria, otras, casi me caía al suelo de pura debilidad y cansancio.
Junto a este horror, sentía la amargura de la desilusión. Los sueños que; durante tanto tiempo
habían constituido mi sustento y descanso se me convertían ahora en un infierno; ¡y el cambio
era tan brusco, tan total!
6. Por fin llegó el amanecer, gris y lluvioso, e iluminó ante mis agotados y doloridos ojos la
iglesia de Ingolstadt, el blanco campanario y el reloj, que marcaba las seis. El portero abrió las
verjas del patio, que había sido mi asilo aquella noche y salí, cruzando las calles con paso
rápido, como si quisiera evitar al monstruo que temía ver aparecer al doblar cada esquina. No
me atrevía a volver a mi habitación; me sentía empujado a seguir adelante pese a que me
empapaba la lluvia que, a raudales, enviaba un cielo oscuro e inhóspito.
(“Frankenstein o el moderno Prometeo”, Mary Shelley
https://www.biblioteca.org.ar/libros/133605.pdf)
10. El rechazo que sufre la criatura por parte de su creador, se puede relacionar con la
problemática social:
A) Pobreza.
B) Desigualdad.
C) Hambre.
D) Discriminación.
E) Corrupción.
11. A partir de lo expresado en el párrafo 3: “Durante casi dos años había trabajado
infatigablemente con el único propósito de infundir vida en un cuerpo inerte. Para ello
me había privado de descanso y de salud.”, es correcto inferir que el narrador es un
hombre:
A) Violento.
B) Abnegado.
C) Obsesivo.
D) Irascible.
E) Paciente.
12. ¿Cuál es el propósito del siguiente fragmento: “A veces, el corazón me latía con
tanta fuerza y rapidez que notaba las palpitaciones de cada arteria, otras, casi me caía al
suelo de pura debilidad y cansancio” (párrafo 5)?
A) Evidenciar los problemas de salud que tenía el narrador.
B) Explicar que el narrador ha pasado una noche terrible.
C) Exacerbar los sentimientos de Elizabeth en el sueño del narrador.
D) Reforzar la idea de que el narrador ha pasado una noche terrible.
E) Evidenciar la angustia que siente la criatura por lo que ha sucedido.
13. ¿Con qué propósito el narrador utiliza adjetivos como: miserable, monstruo,
repugnante, para referirse a la criatura?
A) Provocar compasión y temor en el/la lector/a.
B) Provocar rabia y temor en el/la lector/a.
C) Provocar temor y odio el/la lector/a.
D) Provocar repulsión y temor en el/la lector/a.
E) Provocar repulsión y tristeza en el/la lector/a.
Acto primero
(Habitación blanquísima del interior de la casa de Bernarda. Muros gruesos. Puertas en arco
con cortinas de yute rematadas con madroños y volantes. Sillas de anea. Cuadros con paisajes
inverosímiles de ninfas o reyes de leyenda. Es verano. Un gran silencio umbroso se extiende
por la escena. Al levantarse el telón está la escena sola. Se oyen doblar las campanas. Sale la
Criada)
CRIADA: Ya tengo el doble de esas campanas metido entre las sienes.
LA PONCIA: (Sale comiendo chorizo y pan) Llevan ya más de dos horas de gori-gori. Han
venido curas de todos los pueblos. La iglesia está hermosa. En el primer responso se desmayó
la Magdalena.
CRIADA: Es la que se queda más sola.
LA PONCIA: Era la única que quería al padre. ¡Ay! ¡Gracias a Dios que estamos solas un
poquito! Yo he venido a comer.
CRIADA: ¡Si te viera Bernarda...!
LA PONCIA: ¡Quisiera que ahora, que no come ella, que todas nos muriéramos de
hambre! ¡Mandona! ¡Dominanta! ¡Pero se fastidia! Le he abierto la orza de chorizos.
CRIADA: (Con tristeza, ansiosa) ¿Por qué no me das para mi niña, Poncia?
LA PONCIA: Entra y llévate también un puñado de garbanzos. ¡Hoy no se dará cuenta!
VOZ (Dentro): ¡Bernarda!
LA PONCIA: La vieja. ¿Está bien cerrada?
CRIADA: Con dos vueltas de llave.
LA PONCIA: Pero debes poner también la tranca. Tiene unos dedos como cinco ganzúas.
VOZ: ¡Bernarda!
LA PONCIA: (A voces) ¡Ya viene! (A la Criada) Limpia bien todo. Si Bernarda no ve relucientes
las cosas me arrancará los pocos pelos que me quedan.
CRIADA: ¡Qué mujer!
LA PONCIA: Tirana de todos los que la rodean. Es capaz de sentarse encima de tu corazón y
ver cómo te mueres durante un año sin que se le cierre esa sonrisa fría que lleva en su maldita
cara. ¡Limpia, limpia ese vidriado!
CRIADA: Sangre en las manos tengo de fregarlo todo.
LA PONCIA: Ella, la más aseada; ella, la más decente; ella, la más alta. Buen descanso
ganó su pobre marido. (Cesan las campanas).
CRIADA: ¿Han venido todos sus parientes?
LA PONCIA: Los de ella. La gente de él la odia. Vinieron a verlo muerto, y le hicieron la cruz.
CRIADA: ¿Hay bastantes sillas?
LA PONCIA: Sobran. Que se sienten en el suelo. Desde que murió el padre de Bernarda no
han vuelto a entrar las gentes bajo estos techos. Ella no quiere que la vean en su dominio.
¡Maldita sea!
CRIADA: Contigo se portó bien.
LA PONCIA: Treinta años lavando sus sábanas; treinta años comiendo sus sobras; noches
en vela cuando tose; días enteros mirando por la rendija para espiar a los vecinos y llevarle el
cuento; vida sin secretos una con otra, y sin embargo, ¡maldita sea! ¡Mal dolor de clavo le
pinche en los ojos!
CRIADA: ¡Mujer!
LA PONCIA: Pero yo soy buena perra; ladro cuando me lo dice y muerdo los talones de los que
piden limosna cuando ella me azuza; mis hijos trabajan en sus tierras y ya están los dos
casados, pero un día me hartaré.
CRIADA: Y ese día...
LA PONCIA: Ese día me encerraré con ella en un cuarto y le estaré escupiendo un año entero.
"Bernarda, por esto, por aquello, por lo otro", hasta ponerla como un lagarto machacado por los
niños, que es lo que es ella y toda su parentela. Claro es que no le envidio la vida. La quedan
cinco mujeres, cinco hijas feas, que quitando a Angustias, la mayor, que es la hija del primer
marido y tiene dineros, las demás mucha puntilla bordada, muchas camisas de hilo, pero pan y
uvas por toda herencia.
CRIADA: ¡Ya quisiera tener yo lo que ellas!
LA PONCIA: Nosotras tenemos nuestras manos y un hoyo en la tierra de la verdad.
CRIADA: Esa es la única tierra que nos dejan a las que no tenemos nada.
LA PONCIA: (En la alacena) Este cristal tiene unas motas.
CRIADA: Ni con el jabón ni con bayeta se le quitan.
(Suenan las campanas)
LA PONCIA: El último responso. Me voy a oírlo. A mí me gusta mucho cómo canta el párroco.
En el "Pater noster" subió, subió, subió la voz que parecía un cántaro llenándose de agua poco
a poco. ¡Claro es que al final dio un gallo, pero da gloria oírlo! Ahora que nadie como el antiguo
sacristán, Tronchapinos. En la misa de mi madre, que esté en gloria, cantó. Retumbaban las
paredes, y cuando decía amén era como si un lobo hubiese entrado en la iglesia. (Imitándolo)
¡Ameeeén! (Se echa a toser)
CRIADA: Te vas a hacer el gaznate polvo.
LA PONCIA: ¡Otra cosa hacía polvo yo! (Sale riendo)
Federico García Lorca, La casa de Bernarda Alba. (Fragmento).
A) Solo I
B) Solo II
C) Solo I y III
D) Solo II y III
E) I, II y III
1. ELISA
Terminemos antes vuestro asunto, y decidme quién es la que amáis.
2. CLEANTO
Una joven que se aloja desde hace poco en este barrio, y que parece estar hecha para
inspirar amor a cuantos la ven. La naturaleza, hermana mía, no ha creado nada más
adorable; yo me sentí transportado desde el momento en que la vi. Se llama Mariana, y vive
bajo la guarda de una anciana madre, casi siempre enferma, y por quien esta amable niña
experimenta un afecto inimaginable. La atiende, la compadece y la consuela con una
ternura que os llegaría al alma. Se aplica a las cosas que hace con el aire más encantador
del mundo, y en todas sus acciones se ven brillar mil gracias: una dulzura llena de
atractivos, una bondad alentadora, una cortesía adorable, una... Ah, hermana, quisiera que
la hubieseis visto.
3. ELISA
La veo perfectamente, hermano, a través de las cosas que decís; y para comprender lo que
es, me basta con que vos la améis.
4. CLEANTO
He descubierto indirectamente que no están muy bien de fortuna, y que su discreto régimen
de vida apenas consigue equiparar los bienes que puedan tener a sus necesidades.
Figuraos, hermana, qué dicha podría ser el mejorar la situación de la persona que uno ama;
aportar hábilmente algunos pequeños socorros a las modestas necesidades de una virtuosa
familia; y concebidp el disgusto que me produce ver que, por la avaricia de un padre, me
hallo en la imposibilidad de gozar esa dicha, y de ofrecer a esa bella ningún testimonio de
mi amor.
5. ELISA
Sí, hermano, concibo perfectamente lo que ha de ser vuestro pesar.
6. CLEANTO
Ah, hermana mía, es más grande de lo que pudiera creerse. Porque, en fin, ¿puede haber
nada más cruel que esta estrechez rigurosa que sobre nosotros ejercen, que esta sequía
espantosa en la que nos hacen languidecer? ¿Y de qué nos sirve tener fortuna, si no ha de
venir a nuestras manos más que en época en que estemos ya en buena edad para gozarla,
y si hasta para mantenerme ahora es preciso que me empeñe por todos lados, si estoy
reducido como vos a buscar todos los días la ayuda de los comerciantes para tener algún
medio de llevar trajes decentes? En fin, he querido hablaros para que me ayudéis a sondear
a mi padre acerca de esta pasión mía; y si lo encuentro contrario a ella, he resuelto irme a
otro país, con esta amable persona, a gozar de la suerte que el Cielo quiera ofrecernos.
Con ese objeto, estoy haciendo buscar por todas partes dinero a préstamo; y si vuestros
asuntos, hermana, son semejantes a los míos, y sucede que nuestro padre se oponga a
nuestros deseos, lo abandonaremos ambos y nos libertaremos de esta tiranía en que nos
tiene desde hace tanto tiempo su avaricia insoportable.
7. ELISA
Es muy cierto que cada día nos da más y mayores motivos para lamentar la muerte de
nuestra madre y que...
8. CLEANTO
Oigo su voz. Alejémonos un poco para acabar mutuamente nuestra confidencia; y luego
uniremos nuestras fuerzas para venir a atacar la dureza de su carácter.
ESCENA TERCERA
9. (Harpagón, La Flecha)
10. HARPAGÓN
Fuera de aquí inmediatamente y que no se me replique más. Vamos, a volar de aquí,
maestro de pícaros, mal racimo de horca.
11. LA FLECHA (aparte)
Jamás he visto nada más malo que este maldito viejo, y me parece, con perdón sea dicho,
que tiene el diablo en el cuerpo.
12. HARPAGÓN
Murmuras entre dientes.
13. LA FLECHA
¿Por qué me arrojáis?
14. HARPAGÓN
Es a ti, bellaco, a quien te corresponde pedirme razones: márchate pronto, que no te mate.
15. LA FLECHA
¿Qué es lo que os he hecho?
16. HARPAGÓN
Me has hecho que quiero que te marches.
17. LA FLECHA
Vuestro hijo, mi amo, me ha dado orden de esperarle.
18. HARPAGÓN
Vete a esperarlo en la calle, y no te quedes aquí plantado como una estaca, para observar
cuanto pase y aprovecharte de todo. No quiero tener ante mí sin cesar un espía de mis
negocios, un traidor cuyos malditos ojos asedian todos mis actos, devoran lo que poseo y
registran por todas partes para ver si hay algo que robar.
19. LA FLECHA
¿Cómo diantres queréis que se haga para robaros? ¿Sois hombre robable, cuando
encerráis todas las cosas y hacéis de centinela día y noche?
18. Sobre el conflicto que se presenta en este texto, es correcto afirmar que tiene
relación con:
A) el amor y la avaricia.
B) el amor imposible.
C) el amor y la familia.
D) el poder y la venganza.
E) el amor y la justicia.
21. ¿Quién en esta obra cumple con las características del personaje tipo “el joven
enamorado”?
A) Harpagón
B) El criado de Cleanto
C) La Flecha
D) El hijo de La Flecha
E) Cleanto
24. ¿A qué problemática social se hace referencia por medio de la expresión “no están
muy bien de fortuna”, utilizada en el párrafo cuatro?
A) La pobreza
B) El hambre
C) La injusticia
D) El racismo
E) La discriminación
25. Respecto a lo que dice Cleanto en el párrafo seis: “he resuelto irme a otro país, con
esta amable persona, a gozar de la suerte que el Cielo quiera ofrecernos”,
¿qué simboliza “el Cielo”?
A) La voluntad divina
B) La muerte
C) El amor
D) El deseo
E) La eternidad
27. RESQUEMORES
A) obstáculos
B) desacuerdos
C) ostentaciones
D) animadversiones
E) deslumbramientos
30. De acuerdo con la lectura, la segunda perspectiva experimental considera que los
estudios de laboratorio son:
A) distintas, porque considera variadas mediciones.
B) básicas, porque desconoce otras interpretaciones.
C) insuficientes, ya que no reconoce todas las variables.
D) exageradas, porque señalan que los juegos generan violencia.
E) inconsistentes, ya que desconocen el placer provocado por los videojuegos.
“Sí algo nos ha enseñado la historia de la evolución es que la vida no puede contenerse; la
naturaleza siempre se abre camino”, comenta el matemático Ian Malcolm en El mundo
perdido, novela del escritor Michael Crichton. Interpretado por el actor Jeff Goldblum en la
popular franquicia de Jurassic Park, Malcolm es invitado a una isla del Caribe por un
excéntrico millonario para avalar un parque de dinosaurios donde todo lo que podía salir mal,
sale mal.
Para los humanos, obviamente.
Está pasando hoy en la ciudad de Venecia, donde la ausencia de miles de visitantes —con
millonarias y catastróficas pérdidas para la industria turística y el comercio— ha obrado el
mismo fenómeno descrito en el libro; la naturaleza abriéndose camino.
En los últimos días, sus residentes se han sorprendido al ver que la laguna y sus canales
lucen aguas transparentes y no turbias como de costumbre, algo impensado hasta hace un
tiempo. También ven peces bordeando las góndolas y barcazas, algas que pueblan sus
canales y aves acuáticas como cisnes y cormoranes que curiosos merodean por sus hoy
expeditos rincones fluviales.
Causante del fenómeno ha sido el fin de la circulación de sus cientos de embarcaciones y la
consiguiente disminución de sus niveles de contaminación. Todo ello en directo beneficio de la
biodiversidad local, aunque no de los humanos.
Hace unos meses, Venecia era una de las ciudades más colapsadas del mundo por el
turismo. En 2019 recibió veinte millones de visitantes, demasiados para una urbe fluvial que
apenas supera los 250 mil habitantes. La ciudad, literalmente, se hundía a vista y paciencia de
todo el mundo. Hasta que se quedó sin humanos y la naturaleza hizo el resto.
Tal como pasó en la novela de Crichton. Y también en la zona cero de Chernóbil.
Responsable directo fue el coronavirus, pandemia que frenó en seco el aluvión de visitantes
ofreciendo a Venecia un inesperado respiro. Y a sus habitantes la “vista limpia” de un entorno
que muchos creyeron haber perdido para siempre. Bendita paradoja. Algo similar se espera
suceda en el Monte Everest y otras cumbres de los Himalayas, transformadas en las últimas
décadas en verdaderos basurales por las compañías de turismo y las oleadas de alpinistas.
China y Nepal ya anunciaron la cancelación de la temporada de expediciones producto de la
pandemia global. Es la primera suspensión en cincuenta años de continua saturación y
contaminación del llamado techo del mundo. Leyeron bien, la primera en medio siglo. La
industria de seguro lo lamenta, el Everest, lo dudo. No más basura ni desperdicios, tampoco
muertes de alpinistas y sherpas en sus peligrosas laderas. Al menos por un tiempo.
En lo personal, siempre he creído que la naturaleza toma medidas bastante sabias para el
planeta y sus hijos, por más que a veces nos parezcan impopulares o trágicas para los
humanos. Aquella es también la creencia mapuche, la base de nuestro feyentun; que cada
tanto la Mapu ajusta sus desequilibrios y frente a ello, si logramos sobrevivir, solo nos cabe
sacar lecciones y aprender.
Lo curioso es que siempre, como toda buena madre, nos advierte.
Los eclipses y el florecimiento del colihue (chusquea culeou) son dos ejemplos recientes de
señales que nuestra cultura —profundamente conectada con los ciclos de la Tierra— suele
interpretar como alerta de tiempos difíciles y calamidades. También los temblores, antesalas
de la mítica confrontación entre Treng-Treng y Kai Kai, el equivalente mapuche de las placas
Continental y de Nazca.
¿Qué nos estará tratando de decir la Mapu en esta oportunidad?
Volviendo a Italia, si bien el coronavirus ha golpeado a su población de manera trágica con
miles de muertos, no son pocos los venecianos que esperan que la crisis sirva para un cambio
en su insostenible modelo de desarrollo económico. Y es que no todo debiera tratarse de
negocio o lucro desmedido, diría con sabiduría mi madre.
Fue ella quien me recordó lo del florecimiento del colihue. Yo, viviendo en la ciudad como
muchos, confieso no lo vi venir.
El mundo perdido, Pedro Cayuqueo
35. ALUVIÓN
A) Manada
B) Tormenta
C) Avalancha
D) Fenómeno
E) Inundación
36. El texto El mundo perdido se trata de una columna de opinión, esto lo podemos
deducir porque:
A) El texto presenta una estructura secuencial y no se ve reflejada la voz del
autor.
B) Trata un tema contingente a partir de la opinión del autor, que se manifiesta
abiertamente expresando únicamente sus pensamientos.
C) El autor presenta su postura con respecto a un tema en particular y utiliza
hechos para respaldar su opinión.
D) Se evidencia una estructura propia del texto argumentativo, es decir,
introducción, desarrollo y conclusión.
E) El autor hace una invitación a que los lectores puedan contrargumentar su
postura expresada en el texto.
37. CATASTRÓFICAS
A) Aniquilantes
B) Destructivas
C) Terribles
D) Invaluables
E) Desastrosas
38. DESEQUILIBRIOS
A) Tambaleo
B) Alteraciones
C) Trastornos
D) Anomalías
E) Inseguridades
39. A partir del texto, ¿qué podemos inferir sobre el pensamiento del autor?
A) El autor piensa que, debido a la pandemia, la naturaleza tiene la oportunidad
de recuperarse del daño ocasionado por los humanos.
B) El autor da a entender que la naturaleza es capaz de recuperarse del impacto
que genera el ser humano en el planeta por sus propios medios.
C) El autor cree en las leyendas provenientes de la cosmovisión mapuche, por
eso menciona a Treng-Treng y Kai-Kai.
D) El autor conoce muchos casos en que la naturaleza ha tomado acciones
contra la humanidad por sus maltratos.
E) El autor desconoce el futuro de la humanidad, pero está seguro de que la
naturaleza mejorará con la desaparición de los humanos.
1. Casi todas las estrellas parecen nacer por grupos y no de forma aislada; por ello
es normal que existan los cúmulos de estrellas. Los astrónomos los consideran
interesantes porque saben que todas las estrellas de su interior se formaron más o
menos al mismo tiempo y todas están a una distancia parecida. Debido a esto, los
cúmulos de estrellas son particularmente útiles para estudiar cómo varían las
propiedades de los astros en función de sus masas, ya que al ser todas las estrellas
casi iguales, sólo es su masa la magnitud que las diferencia.
2. Los hay de dos tipos: cúmulos abiertos y cúmulos globulares. En un cúmulo
abierto, las estrellas se ven separadas entre sí, dispersas en un sector celeste. Por el
contrario, los cúmulos globulares se constituyen como regiones en forma de esfera,
donde las estrellas están tan densamente agrupadas en la región central, que no
pueden distinguirse por separado.
3. Quizás el más famoso de los cúmulos abiertos es el grupo de las Pléyades o
Siete Hermanas, en la constelación de Tauro. A pesar de su nombre, la mayoría de la
gente sólo puede distinguir seis estrellas sin la ayuda de un telescopio. El número total
de estrellas en ese conjunto se cifra entre las 300 y las 500, todas ellas en una región
de unos 30 años luz de extensión y a 400 años luz de distancia con la Tierra. La edad
de esta agrupación es de sólo unos cincuenta millones de años -resulta joven para los
estándares astronómicos- y contiene estrellas muy luminosas y de gran tamaño, que
aún no se han transformado en gigantes.
4. Apenas se conocen agrupaciones de este tipo con una edad superior a los cien
millones de años. Es improbable que al ritmo que se forman hayan cambiado
demasiado. Más bien, las estrellas de los cúmulos antiguos se separaron unas de
otras hasta que se unen a la población general de estrellas no agrupadas, miles de las
cuales podemos ver en nuestro firmamento. Aunque la fuerza de gravedad mantiene la
cohesión hasta cierto punto, los cúmulos son bastante frágiles y la atracción de otros
objetos, como puede ser una gran nube interestelar, puede disgregarlos por completo
con facilidad.
5. A veces las estrellas están juntas de una manera tan poco compacta que a los
grupos que forman se les llama asociaciones estelares, en lugar de cúmulos. Como
estas asociaciones no duran demasiado tiempo, sabemos que todas las que podamos
ver son relativamente jóvenes y se hallan cerca de las nubes interestelares donde se
formaron. Las asociaciones cuentan con un número de miembros que oscila entre 10 y
100, y se reparten una región que puede tener muchos cientos de años luz de
anchura.”
Simón y Jacqueline Mitton, Astronomía
41. Según el emisor del fragmento, el interés de los astrónomos por los cúmulos se
debe a que
A) obtienen de ellos información sobre las distancias entre las estrellas, tomando
en consideración el tamaño de cada cúmulo.
B) todas las estrellas al interior de éste son iguales, entonces pueden dedicarse
al estudio de la única magnitud que las diferencia: sus masas.
C) contienen estrellas que solamente se diferencian por sus masas, lo que les
permite estudiar variaciones en sus propiedades en función de sus masas.
D) las propiedades de las estrellas agrupadas son distintas a la de las estrellas
aisladas, por lo tanto pueden establecer similitudes y diferencias entre los astros.
E) se puede realizar estudios muy detallados de las estrellas y su composición.
42. ¿Qué función discursiva cumple el segundo párrafo con respecto a la totalidad del
fragmento leído?
A) Entrega una tipología de las agrupaciones estelares, cuyas características se
detallarán en los párrafos siguientes.
B) Define dos grupos estelares, uno de los cuales se explicará en los párrafos
siguientes.
C) Establece diferencias entre dos tipos de cúmulos, los que se explicarán en los
párrafos restantes.
D) Reúne dos ideas esenciales para la comprensión de la totalidad del texto:
separación y concentración de las estrellas.
E) Presenta un problema y solución que determina la tematica del texto.
45. La frase “en la boca tiene el alma una de sus puertas”, del párrafo dos, se refiere a:
A) el alma se nutre a través de la buena comida.
B) el alma tiene puertas, igual que una habitación.
C) la boca es la puerta de entrada al aparato digestivo.
D) la boca se llena de comida, igual que el alma de amor.
E) la boca es el inicio del recorrido que hace la buena comida.
50. FORMIDABLE
A) Grande
B) Monstruoso
C) Impetuoso
D) Pavoroso
E) Estupendo
51. ¿Qué palabra puede sustituir mejor el término “cadena” (párrafo 5) sin cambiar el
significado?
A) Sujeción
B) Emisora
C) Secuencia
D) Continuación
E) Dependencia
55. ¿Qué elemento visual enfatiza la trascendencia del personaje Mario a lo largo de la
historia?
A) El título en la parte superior de la infografía.
B) El personaje en la posición central de la infografía.
C) La línea de tiempo en la parte media de la infografía.
D) Los diferentes escenarios de los videojuegos.
E) Las apariciones de los personajes a lo largo de la saga.
56. ¿De dónde surge el nombre oficial del personaje principal?
A) Surge a partir de Jump Man, el nombre del primer personaje.
B) Surge a partir de Mario Segale, uno de los productores del juego.
C) Surge a partir de Mario Segale, un amigo de su desarrollador.
D) Surge a partir de Jump Man, cuyo nombre es revelado en uno de loe juegos.
E) Surge a partir de Mario Segale, el casero de su desarrollador.
58. A partir del enunciado “su vida está en peligro”, es posible inferir que:
A) el dengue no tiene cura.
B) el dengue es un virus inofensivo.
C) el dengue no es tratado en ningún centro médico.
D) el dengue es una enfermedad que se propaga por el organismo rápidamente.
E) el dengue es un virus que puede ser mortal.
59. ¿Con qué propósito se incluyen los logos de la OPS, la OMS, UNICEF y el Gobierno
de Honduras en este afiche?
A) Poner en valor la labor que realizan estas instituciones.
B) Estructurar de forma óptima el afiche.
C) Aportar a la dimensión estética del afiche.
D) Dar credibilidad a la información presentada.
E) Aportar en la organización de la información.
62. A partir de la información contenida en el afiche, se puede afirmar que una persona
con los síntomas allí mencionados NO debe:
A) medicarse luego de ser revisada por un/a profesional de la salud.
B) esperar ni automedicarse.
C) acudir al hospital más cercano.
D) acercarse a otras personas.
E) permanecer junto a sus familiares.
63. A partir de la información entregada en el afiche, es correcto afirmar que, entre los
síntomas del dengue se encuentran:
A) fiebre y dolor estomacal.
B) dolor estomacal y dolor de cabeza.
C) vómitos frecuentes y cansancio o irritabilidad.
D) fiebre y mareos.
E) vómitos frecuentes y fiebre.
65. ¿Con qué propósito se utilizan los signos de exclamación en los enunciados
“¡Signos de alarma!” y “¡No espere, no se automedique!”?
A) Dar a entender que son órdenes que todas aquellas personas contagiadas
deben seguir.
B) Dar un carácter urgente a esta información y hacer un llamado de atención a
quienes la leen.
C) Recriminar a los/las lectores/as por no seguir estas instrucciones.
D) Transmitir el enojo que sienten las autoridades por la irresponsabilidad de la
población.
E) Restar importancia a esta parte de la información expuesta en el afiche.