El ensayo de resistencia al impacto es un ensayo destructivo, que
consiste en romper una probeta del material a ensayar golpeándola con un péndulo. Para facilitar el inicio de la fisura, se realiza una hendidura o entalladura en la probeta.
El objetivo del ensayo es conocer la energía que puede soportar un
material al recibir un choque o impacto sin llegar a romperse.
En este ensayo se utiliza una probeta de sección cuadrada provista
de una entalladura que es sometida a la acción de una carga de ruptura por medio de un martillo que se desplaza en una trayectoria circular. El más característico es el ensayo Charpy.
el sistema internacional es el J/m2
La resiliencia se obtiene con la expresión:
Cuanto más frágil sea el material y menor su tenacidad, menos
resiliencia presentará.
¿A qué materiales se les puede aplicar?
El ensayo a la resiliencia, gracias a su sencillez y precisión e
identidad de resultados obtenidos, es el método más empleado en los ensayos de metales con carga dinámica.
¿Qué se puede conocer con dicho ensayo?
Los ensayos dinámicos son realizados para valorar la capacidad de
resistencia de los materiales metálicos a las cargas de impacto (tenacidad) y determinar su tendencia a la rotura frágil.
La tenacidad nos indica la resistencia que presenta un material a la
fractura, o en otras palabras, la energía que absorbe un material con las respectivas deformaciones antes de romperse. Determinando su comportamiento dúctil o frágil a la temperatura de ensayo.
Ventajas y desventajas de cada una de estas pruebas
Ventajas:
El procedimiento Charpy tiene una amplia gama de aplicación y es el
más adecuado para el ensayo de materiales que presentan rotura por cizallamiento interlaminar o efectos de superficie. Además, el método Charpy ofrece ventajas en los ensayos con temperaturas bajas, ya que los asientos de la probeta se encuentran más alejados de la entalladura, evitando así una rápida transmisión de calor a las partes críticas de la probeta. Al obtener unos porcentajes de error relativamente pequeños en la simulación de la prueba, vislumbra otra ventaja del método, y es el hecho de que en un momento dado se pueda remplazar la prueba real por la simulación, reduciendo costos en uso de equipos y materiales en el laboratorio.
Desventajas:
Como limitaciones tenemos que sólo obtendremos datos
cuantitativos que únicamente serán útiles a efectos comparativos (no para el cálculo de piezas o estructuras); que están determinados en materiales sin defectos (ya que los materiales de prueba no presentan en general discontinuidades internas); que los datos son poco representativos de las condiciones de servicio reales, ya que:
El tamaño de la probeta es independiente del espesor real del
material. Siempre se emplea una carga de ensayo por impacto, con independencia de que la estructura en servicio esté sometida a cargas estáticas o dinámicas.
¿Cuál es la efectividad de los ensayos?
Si vamos sometiendo a un material cada vez a más fuerza, y el
material no se rompe ni deforma permanentemente, su resiliencia irá aumentando. Si dejamos de aplicarle la fuerza la energía absorbida la liberará para volver a su estado o forma inicial. Su máxima resiliencia será cuando llega a romperse o deformarse permanentemente. Se podría decir que es la capacidad de memoria que tiene un material para volver a su forma inicial.