Mi asociación con el Espíritu Santo

Con la llave del Espíritu te asocias al Espíritu Santo para entregar el milagro por el poder
sobrenatural de Dios. Te comprometes a colaborar con el Espíritu Santo en toda oportunidad, a
fin de realizar la obra de Dios.

Mientras tú y yo podemos entregar un milagro, solo Dios es él que puede

hacerlo.

Él Espíritu que >>todo lo escudriña<< tiene el

conocimiento íntimo y total de todos, incluyendo a la gente que nos envía para que le ayudemos.

El Espíritu también nos conoce nuestros puntos fuertes y débiles, nuestros

temores y nuestras limitaciones y nos guía con determinación a la persona necesitada.

Jesús dijo: >>Cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la

verdad<< Por lo general, la respuesta que le damos a la dirección del Espíritu es un proceso natural. Le podrá parecer
demasiado misterioso la sensibilidad ante la dirección del Espíritu como para darle crédito o comprenderla. Sin
embargo, durante un encuentro preparado por Dios, cuando le pides que te envíe y te apasiona ser su socio en la
realización de su agenda, sabrás lo que quiere Él.

Te haré entender; y te enseñaré el camino en que debes andar; sobre ti fijaré mis ojos.
Salmos 32:8
 Dios Padre dirige todo lo que hace el
Espíritu, y es con un propósito: llevar a cabo la agenda del cielo y darle la gloria a Jesús, el Hijo de Dios. Cuando el
Espíritu obra en el corazón de la otra persona, le comunica la verdad acerca de su necesidad, el carácter de Dios y la
Persona y obra de Cristo.

Qué así como los Apóstoles después de recibir al Espíritu Santo

predicaron con denuedo y con poder, maravillando a todos aquellos que los veían. Así mismo el Espíritu Santo desciende
sobre nosotros y nos entrega poder, para glorificación del nombre de Jesús a todos. Somos socios del Espíritu Santo.

Estamos en sociedad con la fuerza moderna

que existe en la tierra: Con Dios mismo. Y se nos ha dado al Espíritu Santo para que podamos hacer buenas obras
mediante su poder. Él es nuestro Consolador. Es el único que hace los milagros. Tú y yo solo tenemos la bendición de que
nos inviten a entrar en sociedad con él. ¡Pero a nosotros nos toca hacer el trabajo! Nosotros hacemos el trabajo y el
Espíritu nos da el poder para hacerlo. Por lo tanto si te guía a testificar, a manifestar compasión, a ayudar a los
pobres y a los necesitados o a compartir con alguien tus recursos, tu parte es abrir la boca, el corazón y la billetera…
empezar.

El Espíritu te dará valentía, dirección, información y todo lo demás que necesites en el PROCESO de
tu obediencia, no separada de está

Espíritu Santo

El Espíritu Santo es El objetivo principal del El Espíritu Santo está

Real, personal y conocible,
y me invitaron a
comprender quién es él y
como obra, lo cuál influye
el aspecto de milagros
diarios.
Espíritu Santo es ayudarme
a realizar la agenda de
Dios en la tierra.
Solo puedo realizar todo lo
que Dios quiere que haga
hoy mediante la asociación
con el Espíritu Santo.
disponible por igual para
todos los que conocen a
Cristo, y Dos quizá tenga
para mí una agenda de
milagros que me exija
entrar en sociedad con el
Espíritu.