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¿PORQUÉ EL AMOR ES LO MÁS IMPORTANTE?

Como resumen y conclusión a la serie “El amor, lo más importante” respondamos la pregunta ¿por
qué lo más importante es el amor? según 1 Corintios 13:13.

I. EL AMOR ES LO MÁS IMPORTANTE PORQUE ES LA ESENCIA DE DIOS MISMO.


El amor es lo más importante porque Dios mismo es el amor. 1 Juan 4:8, dice: “El que no ama no
ha conocido a Dios porque Dios es amor”.
Su plan perfecto para redimir al mundo de sus pecados se consumó o se logró por el grande amor
de Dios por el mundo. Juan 3:16.

II. EL AMOR ES LO MÁS IMPORTANTE PORQUE FUE LA BASE FUNDAMENTAL DEL


MINISTERIO DE JESÚS EN LA TIERRA.
Jesús, es reflejo de la gloria de Dios, y a la vez es el mismo Dios, y enseñó que toda la ley se
resumía solo en dos grandes mandamientos: Amar a Dios y al prójimo. Mateo 22.37-29: “Jesús le
dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es
el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti
mismo”.

Jesús, quien enseñó acerca del amor, y siendo Él mismo amor, lo demostró a lo largo de su
Ministerio sobre la tierra y en los momentos más difíciles de su vida (Juan 13:1) . Jesús mostró
amor a esos incrédulos discípulos que muchas veces dudaron de Él, amó al traidor, al violento, al
fluctuante. Dicen que en los peores momentos se conocen quiénes son aquellos que
verdaderamente te aman, a Jesús lo abandonaron todos sus discípulos justo cuando más los
necesitó. Sin embargo, Él los amó hasta el fin, sin importar todas las decepciones recibidas. Pero,
no sólo amó a los cercanos, sino también a todos los demás, y lo hizo de tal forma, que entregó su
vida para que “ninguno se perdiese” y en la Cruz expresó la evidencia de ese amor al decir en
Lucas 23:34: “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen”.

Resucitó con poder y al volver al cielo, expresó sinceras palabras de amor en Mateo 28:20: “Y he
aquí yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo”. No nos dejó solos y envió a su
Espíritu Santo para ayudarnos en el día a día de nuestra vida.

Por amor, Jesús regresará a buscar a los suyos, pero mientras, hace algo importante en el Cielo por
ellos que también muestra su amor, según dice Juan 14:2-3: “Voy pues a preparar lugar para
vosotros para que donde yo estoy, vosotros también estéis”. Y aún, si sentimos que tarda un
poquito en venir por nosotros, esa espera incluso es por amor. En 2 Pedro 3:9, dice: “El Señor no
retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente con nosotros, no
queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento”. Aunque aquí no
aparece literal la palabra “amor”, sí lo vemos implícito porque en la carta a los Corintios dice que
“el amor es paciente”, y 1 Corintios 13:4 expresa que el amor es sufrido.

III. EL AMOR ES LO MÁS IMPORTANTE PORQUE NADA HAY POR ENCIMA DE ÉL.
Quizás yo sea la persona que tenga dones extraordinarios y notorios como el don de hablar en
lenguas, el don de profecía, de discernimiento, de ciencia, de fe, de dar, etcétera, pero si todo eso
lo hago sin tener el verdadero amor en mí, de nada me sirve.
Todo pensamiento justo, honesto, de buen nombre, noble, puro, de virtud, digno de alabanza, así
como toda palabra llena de gracia para quienes las escuchan, toda actitud sencilla y sin juicio para
con otros, cuando a veces nosotros mismos hemos fallado aún más y en lo mismo que juzgamos, y
toda acción como vencer con el bien el mal, debe tener el ingrediente principal que es el amor. No
podemos movernos sin que el amor esté presente. Por eso es lo más importante.

Gálatas 5 enumera 9 características del fruto o evidencias que el Espíritu de Dios vive en nosotros,
pero de todas ellas la primera y mayor es el amor. El amor es como la máquina o motor que
moverá los otros 8 vagones del fruto del Espíritu.
1 Corintios 13:8, dice que el amor nunca deja de ser, y eso es lo más increíble que logra: ¡Nunca
acabarse! ¡Nunca dejar de existir! Aunque se vea amenazado, sigue adelante. Aunque se sienta
desafiado, sigue avanzando. Aunque lo maltraten y lo rechacen, se niega a darse por vencido. El
amor nunca se extingue. Tristemente, hay ocasiones cuando un matrimonio es probado, y estando
en crisis, un cónyuge intenta lograr que las cosas funcionen, y le dice al otro que sin importar lo
que haya sucedido en el pasado, está comprometido con su matrimonio. No obstante, como el
otro cónyuge todavía no quiere escucharlo, mantiene su postura de rechazo. Aun quiere
separarse. Entonces, el cónyuge que acaba de jugarse el corazón no puede manejar el rechazo, así
que retira lo dicho y dice: “Bueno, si eso es lo que quieres”, y todo llega a su fin. Pero si el amor es
en verdad amor, no cambia de opinión cuando no lo reciben como espera. Si al amor se le puede
decir que deje de amar, en realidad no es amor. El amor que viene de Dios es interminable,
imparable. Si el objeto de su afecto elige no recibirlo, aún así, no deja de dar, buscar e insistir. El
amor resiste sin importar lo que haya en el pasado, el presente o el futuro. Lo recibimos de parte
de Dios y es la manifestación de esencia divina a través de nosotros. No tiene fecha de caducidad.
¡Qué increíble es saber que Dios nos ama y no cambiará!

CONCLUSIÓN Y APLICACIÓN
Leamos 1 Corintios 13: 1-8ª:
Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena,
o címbalo que retiñe.
2 Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal
manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy.
3 Y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y si entregase mi cuerpo para
ser quemado, y no tengo amor, de nada me sirve.
4 El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se
envanece;
5 no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor;

no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad.

Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.

El amor nunca deja de ser.

Si usted no ha vivido el verdadero amor descrito en la Palabra de Dios, usted necesita recibirlo al
pedirle a la persona misma del amor que es Jesús, que venga y viva en su vida, porque vivir sin
amor es sólo subsistir, y Dios desea que usted y yo tengamos vidas plenas, vidas que reciben el
amor divino para dar de ese mismo de amor incluso a quienes nos puedan rechazar. Y si usted ya
tiene a Cristo, ¿ha demostrado ese amor divino con sus palabras, acciones y pensamientos a quienes
le rodean? Sea uno u otro caso, oremos juntos y pidamos al Señor que vivamos en el verdadero
amor, porque ¡EL AMOR ES LO MÁS IMPORTANTE!

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