Análisis de muestra.

Artista: Miguel Ángel Ríos

Nombre de la Muestra: “2001-2008”

Espacio : MALBA. Fundación Constantini

Lugar y fecha: Bs As, Argentina. Del 21 de Agosto al 26 de

Octubre.

Titulo de las obras:

• “Ni el color ni la estatura”

• “En el filo”

• “Traje blanco”.

Recursos y Técnica
En este caso el artista trabaja en las tres obras con la técnica de videoinstalación.
Utiliza la edición y el montaje, y el sonido, además de otros recursos, para generar
los distintos mensajes. En las tres se trata de dos proyecciones sincronizadas en un
mismo espacio. En dos de los casos con un solo frente visual, y en el caso de “Ni el
color, ni la estatura”, las proyecciones se enfrentan, quedando el espectador a
disposición de una doble visual, o una escena bifrontal.

“Ni el color, ni la estatura”

En esta obra de perspectivas visuales enfrentadas, vemos dos pequeñas
secuencias no simultaneas de dos goles famosos, de dos famosos futbolistas. Sin
embargo, el artista se ocupa aquí de hacer un intercambio de camiseta, ubicando a
Pelé con una camiseta argentina y a Maradona con una brasilera. Intenta,
simbólicamente , hablar acerca de los héroes latinoamericanos, pero por sobretodo
hay un concepto que quizás sea el mas importante y significativo del obra y es el de

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integración. Disminuyendo rivalidades, y poniendo a los dos héroes populares al
mismo nivel, donde no importa ni el c olor ni la estatura, sino la habilidad y la
inteligencia de cada uno de ellos. Es importante ver que no elige cualquier deporte
para expresar este concepto, sino que lo hace a través del futbol, es decir utiliza el
deporte más popular de Latinoamérica, un deporte que une en una misma pasión
a millones de latinoamericanos sin distinción de clase, ni colores, ni religiones. Creo
que Ríos apunta fundamentalmente unir, integrar, y demostrar igualdad de
condiciones dejando de lado la camiseta y revalorizando al hombre en su talento e
inteligencia mas allá del “equipo en el que juega”, aplastando antiguas rivalidad,
que parecen sencillas pero tienen una raigambre muy dura en el imaginario popular
y han dividido muy fuertemente a los latinoamericanos y aun hoy lo siguen
vigentes.

“En el filo”.
Aquí el impacto visual es grande. Vemos en dos pantallas sincronizadas,
enfrentadas al espectador. Se suceden imágenes de trompos en movimiento,
trompos blancos y negros, sobre fondos negros y blancos. El movimiento de estos
se da de modo corográfico, y acompañado de un soporte sonoro la fuerza de los
movimientos se acentúa cada vez más. Utiliza el contraste máximo entre negro y
blanco como símbolo de oposición y división. Esta obra aborda una temática
específica, relacionada con la metáfora de la supremacía social, la lucha por el
acenso de clases, el poder de unos sobre otros. Hay en el transcurso del video una
tensión constante, como las sensación de un hilo a punto de cortarse, el zumbido
sonoro apoya esta imagen y sumada al movimiento rígido, pero a la vez azaroso de
los trompos el impacto es efectivo y sintético.

“Traje blanco”
En esta proyección se ve a un hombre que simultáneamente baila y gira con
boleadoras cubiertas con carne cruda, rodeado de perros hambrientos. El hombre
viste un traje blanco ( no cualquier traje, un Armani) , la carne atrae a los perros
que esperan el momento para atacar generando una situación de peligro.
Nuevamente el concepto y sentido general de la obra atraviesa una crítica o
cuestionamiento hacia la sociedad y su desequilibrio, del poder y del peligro.

Reseña biográfica del artista.

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Nació en 1943 en San José Norte, Santa María, provincia de Catamarca. Se trasladó
a Bs As en 1958, allí cursó estudios en la Escuela Manuel Belgrano y luego en la
Escuela Prilidiano Pueyrredón, donde se graduó de Profesor de Artes Visuales, con
especialización en Pintura. A partir de 1966, se dedicó a recorrer el Norte
Argentino y dictó cursos en La Rioja, Salta y Tucumán, en la Universidad Nacional
de Arte.

En 1976 se exilia en EE.UU. y establece su estudio en Manhattan. El ambiente

cultural de la gran ciudad impacta sobre su trabajo artístico. En 1978 viaja a
México, y descubre una realidad social, un espacio y una luz similares al norte
argentino. Un año después viaja a Japón y más tarde concreta en la Galería Ueda
su primera muestra individual importante: Así en la tierra como en el cielo. En 1985
se establece en Oaxaca donde hace una serie relacionada con la tierra. Luego se
traslada a México DF y a partir de entonces alterna su actividad entre Nueva York
y México.

-1992 Realiza una Instalación: Huellas del Colonizaje MAMBA , para más tarde
dedicarse a una serie titulada “critica postcolonial a través de los mapas”

-1994. Participa de la muestra “Mapping “ curada por Robert Storr en el Museo de

Arte Moderno de N. Y.

-Entre 1996-199 acentúa en sus trabajos la toma de conciencia hacia el arte político
y trabaja sobre la identidad, el territorio y los conflictos de fronteras.

-Entre 1994-2000 participa con instalaciones monumentales en importantes

exposiciones y bienales de arte (bienal de La Habana, Kwangju, Corea del sur ).

-2001 produce el díptico video instalación “Ni el color, ni la estatura”, a partir de

imágenes filmadas de Pelé y Maradona. Mas tarde atraído por los juegos populares
de Latinoamérica realiza una gran serie de videos con proyecciones sincronizadas
referidas a metáforas sobre la violencia, la superpoblación y el territorio. La
concluye con un documental, “fuego amigo”.

En los últimos cinco años las obras de Miguel Ángel Ríos se presentaron en
numerosos e importantes espacios de arte en el mundo. Actualmente, trabaja en
nuevos proyectos de video y sonido: en Bogotá, sobe el tejo, el juego nacional de
Colombia; y en los valles calchaquíes del norte argentino, sobre los sonidos del eco.

Opinión personal
No se si podría definir esta muestra en términos de “me gusto” o “no me gusto”,
pero no puedo negar que hay un trabajo interesante de búsqueda de la imagen,
con climas muy bien logrados, y muy buen manejo de la técnica utilizada. Como

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aspecto muy positivo, considero que la elección de imágenes sintéticas con pocos
elementos que muestran múltiples opciones, como en el caso de “en el filo” y en
“traje blanco”, ayudan al la fácil compresión del mensaje. Habría quizás que
preguntarse si por momentos no roza la obviedad, pero considerando que la
búsqueda del artista apunta a cuestionamientos sociales y utiliza temáticas que
involucran al hombre y su sociedad, y mas específicamente al hombre
latinoamericano, me parece intencional la necesidad de expresar un mensaje claro
y contundente basado en simbolismos que pueden atravesar las barreras de la
intelectualización general del arte, para abordar de forma directa y sin demasiadas
aclaraciones el contacto entre obra y espectador.

Anexo

CULTURA: UNA MUESTRA DEL ARTISTA MIGUEL ANGEL RIOS, UN CATAMARQUEÑO CON
INSERCION INTERNACIONAL

¿Qué están haciendo Maradona y Pelé en una obra de arte?

Son videos que hablan de violencia, racismo y poder en América latina.

Por: Marina Oybin
Fuente: ESPECIAL PARA CLARIN

De impecable traje blanco, el bailarín no para de zapatear.
En un mix que incluye pasos de malambo, tap y flamenco,
baila y revolea unas boleadoras como poseído. Una jauría
gruñe, muestra sus fauces. Eso es lo primero que se ve en
la videoinstalación White Suit (Traje blanco) de Miguel Angel
Ríos. Pero hay que descubrir que las boleadoras están
hechas de carne cruda para entender la reacción de los
canes. Están desencajados. Y lo que sigue será pura
tensión.
"El hombre de blanco simboliza la especulación por el
poder; y los perros son los pueblos y naciones
hambreados", dice Ríos en diálogo con Clarín, en la sala del
MALBA. Se trata de parte de Contemporáneo 24. Miguel
Ángel Ríos 2001-2008, la exposición que acaba de
inaugurar. La muestra reúne tres videoinstalaciones
vinculadas con tradiciones de Latinoamérica. Obras que
aluden al poder, la violencia y el racismo.
Reconocido en el mundo del arte internacional, Ríos nació
en Catamarca en 1943. Estudió en la escuela Prilidiano
Pueyrredón y en 1976, luego de haber estado detenido en
Coordinación Federal, se exilió en los Estados Unidos.
Desde entonces, vive entre México y Nueva York. Se hizo
conocido con su serie de mapas Crítica post colonial, y hay
obra suya en el museo de Hirshhorn en Washington, en el
MoMA de Nueva York y en el Reina Sofía, entre otros.
Hoy Ríos, sombrero ranchero, pañuelo animal print al cuello,
saco de traje y zapatillas bien modernas, cuenta que en sus
obras busca "que haya cosas imposibles, difíciles y
peligrosas". Nada menos. ¿Qué bailarín se animaría a
revolear pedazos de carne cruda ante más de una veintena
de perros listos para atacar? Uno de los canes del video es
el de la multipremiada película Amores perros. "Son perros
muy bravos: adiestrados para atacar y matar", destaca Ríos,
y como si fuera poco agrega: "Para que estuvieran más
agresivos los teníamos un día sin comer". Los perros meten
miedo. Y no se quedan en la amenaza.
Dar con el bailarín que vistiera y danzara como Ríos quería,
frente a dogos y ovejeros, no fue fácil. Después de buscar
en el norte argentino, en Málaga y en Sevilla, el artista
encontró en Nueva York a un bailarín mexicano que había
sido torero y "no le temía a la muerte". Ríos revela que "la
clave para que los perros no lo lastimaran fue bailar con
absoluta seguridad: esa es la forma de mantener el poder
frente a ellos". Y recuerda que aunque en el set de filmación
los entrenadores (uno trabajó en Amores perros)
controlaban cada movimiento de los perros, el bailarín (que
llevaba una protección de tela para amortiguar los
tarascones), el propio Ríos y un camarógrafo fueron
mordidos.
El resultado del video, filmado en 2008 en Colonia Doctores,
en México D.F., con cuatro cámaras y en tiempo real ("no

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hay trucos de edición", aclara Ríos), es sencillamente
impactante.
El video On the Edge (En el filo, 2005), donde trabajaron
sesenta tiradores de trompos que no aparecen en escena,
encarna un juego violento. El movimiento de la serie de
trompos blancos y negros es, en palabras del artista, "una
metáfora de la violencia, la sobrepoblación y la competencia
en grandes ciudades". Y también una batalla por el control y
la hegemonía de territorios en disputa
Lo de Ríos es una mezcla explosiva entre juego y mirada
ácida con foco en la sociedad, que no elude temas de
identidad y fronteras. Neither Color, Nor Height (Ni el color,
ni la estatura, 2001) es un trabajo minucioso realizado
digitalmente, a partir de las imágenes de archivo de la
semifinal entre Bélgica y Argentina en el Mundial de Fútbol
1986, y de la final entre Italia y Brasil, en 1970. El artista
juega con los dos grandes símbolos del fútbol: Maradona
lleva la camiseta de Pelé, y éste la del diez, en "dos jugadas
que son grandes obras de arte".
Ríos incluyó a estos íconos para demostrar, dice, que "ni la
raza, ni el color, ni la estatura, ni la nacionalidad son más
importante que la inteligencia y la destreza". El fútbol es
acaso uno de los pocos espacios donde el sueño del
vertiginoso ascenso social se vuelve realidad. Pero, claro,
sólo para pocos.
Tenemos aquí a un artista que tiene algo que decir y quiere
que se entienda bien: "Mi idea fue cuestionar la integración
latinoamericana. Creo que aquí -arriesga el artista- el video
va a despertar polémica, y eso es bueno. Me interesa el arte
con poesía y mensaje político".