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PESKIN: LA FOBIA

Plantea la fobia como una alternativa neurótica.

Propone que la angustia es lo más cercano a lo real, podemos verlo en el historial con lo
que le sucede a Manuel ante la iglesia en Londres, se le presentifica la angustia y huye de
la situación, situación de se repite en Roma, en los medios de transporte, al estar con otras
personas, etc. Manuel presenta una alternancia entre agorafobia y claustrofobia

“Se vincula lo real como centro de la angustia, y la angustia como punto central de
cualquier neurosis, pero en particular de la fobia.” (pág. 212) Ésta tiene una relación
continuada o sostenida con la angustia.

Lacan propone que la angustia no aparece por una falta de objeto, sino por un tipo de
ausencia, de falta, que permite la aparición de lo real, lo denominará “la presentificación
de lo real”. Lo real no tiene presencia teórica concebible. Siempre está mediatizado, pero
sin embargo eso que aparece tiene cualidades tales que despierta angustia. (pág. 213)

La angustia es el centro de toda neurosis, que se calma ante la aparición del síntoma,
distinto en la fobia, que tiene una relación constante con el objeto fobigeno, por lo
que no calma la misma

El objeto fobígeno es algo que para el fóbico presentifica lo real, y cómo es sólo para
él, el único que se angustia es él, en el caso de Manuel cuando se va de la iglesia en
Londres, su mujer y su hija se quedan, lo mismo en Roma, él se queda en el hotel, no
refiere que su mujer y su hija se hayan quedado.

Cuando Manuel en su vida cotidiana va achicando el ámbito geográfico por el que se


mueve, podemos ver lo que postula Peskin respecto a que el fóbico “tiene la necesidad de
medir continuamente su distancia con relación a la angustia para tomar decisiones y saber
cómo moverse” (pág. 214)

La fobia y la perversión tienen un parentesco estructural, ambas se vinculan a la


metonimia del falo materno, en lugar de la metáfora paterna. En la perversión existe el
fetiche, como resultado del resto metonímico, y en la fobia el objeto fobígeno.

La fobia sería la primera estructura reconocible dentro del campo de las neurosis, la
diferencia entre fobia y perversión es que en la perversión el fetiche tiene como
configuración el rechazo al padre, mientras que, en la fobia, el objeto fobígeno sostiene
al padre. En el caso de Manuel lo podemos ver que cuando el padre lo llama, él le contesta
“Hola, viejo”, el significante estaba reprimido.

Con respecto al papel de la madre en las fobias, Peskin dice: “En el análisis de un fóbico
va apareciendo una madre que sabe demasiado bien que es lo que al niño le da seguridad
o tranquilidad…” (pág. 220) Si pensamos en el historial que hemos presentado, la madre
de Manuel le dice a él constantemente lo que tiene que hacer, sobre todo en relación con
el padre. También, el autor propone que quizás muchas fobias se resuelvan cuando lo
paterno pueda ser más eficaz, en nuestro caso cuando el significante padre pudo entrar en
la cadena significante.

En cuanto a la relación de la fobia con el fantasma, el autor dice que será tarea del analista
dentro del análisis, armar algún fantasma. Es por ello que postula que la fobia sería la
forma más primaria de una neurosis, puesto que sería como una “plataforma giratoria”
hacia otra estructura, si el analista promueve la formación fantasmática, muchas veces
hay un giro a la histeria o hacia la neurosis obsesiva. Tal es así, que la analista de Manuel
diagnóstico la neurosis fóbica y no la psicosis después de dos años.

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