Sie sind auf Seite 1von 20

APH INTERMEDIA II 1

APH INTERMEDIA II

SEMIOLOGÍA CARDIOVASCULAR

JUAN ESTEBAN MOTATO LINARES

NATHALIA GUTIÉRREZ

PROFESORA

UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DE PEREIRA

FACULTAD CIENCIAS DE LA SALUD

TECNOLOGÍA EN ATENCIÓN PREHOSPITALARIA, SEMESTRE 3

PEREIRA

2019
APH INTERMEDIA II 2

INTRODUCCIÓN

En el campo de la salud, la medicina se encarga de estudiar la estructura y

funcionamiento del cuerpo humano. De esta manera se establece que el cuerpo humano se

encuentra conformado por diferentes sistemas orgánicos, entre los cuales se encuentra el

sistema cardiovascular. Como sistema biológico que es, se puede ver afectado por diferentes

enfermedades o traumas que alteran el estado normal del paciente. Dentro de la Atención

Prehospitalaria, los tecnólogos de dicha área, se encargan de ofrecer una atención primaria y

oportuna, en busca de encontrar el diagnóstico más acertado según el estado de salud del

paciente, para así brindar un cuidado adecuado.

De esta manera el presente trabajo busca estudiar el sistema cardiovascular

entendiendo su semiología hacia diferentes enfermedades y complicaciones, en base a la

anamnesis de la historia clínica y una adecuada exploración física.


APH INTERMEDIA II 3

OBJETIVOS

 Objetivo General

Identificar cual es la semiología de las enfermedades y traumas que afectan el sistema

cardiovascular.

 Objetivos Específicos

1. Describir la adecuada forma de abordar la anamnesis de la historia clínica.

2. Identificar cuáles son patrones que diferencian los signos y síntomas de una

afectación del sistema cardiovascular de otros sistemas.

3. Analizar la causa de los signos y síntomas de las enfermedades del sistema

cardiovascular.

4. Realizar una adecuada descripción de la exploración física del sistema

cardiovascular.

5.
APH INTERMEDIA II 4

Historia clínica y exploración física en los padecimientos cardiovasculares

HISTORIA CLÍNICA

En el ámbito de la medicina, no existe especialidad como la cardiología, en la cual la

historia clínica y exploración física revelen datos vitales en el abordaje diagnóstico de los

pacientes. La evaluación clínica integral debe ser realizada con detenimiento, prestando

atención a los puntos cardinales de las enfermedades cardiovasculares para lograr un

diagnóstico preciso y poder orientar la conducta terapéutica que mejor responda a las

necesidades del paciente. En este capítulo se expone la descripción detallada de los

principales síntomas y signos de las enfermedades cardiovasculares que deben ser

considerados al momento de interrogar y explorar a un paciente con sospecha de cardiopatía.

DISNEA

Se define como la sensación subjetiva de falta de aire o ahogo. La disnea no es

exclusiva de los padecimientos cardiovasculares, ya que también se presenta en alteraciones

pulmonares como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica y la tromboembolia pulmonar, en

la anemia severa e incluso en individuos sanos tras el ejercicio extenuante.

 Disnea de esfuerzo

Es la más común, se presenta, como su nombre lo indica, durante la actividad física. Es

importante identificar la cantidad o intensidad de esfuerzo necesario para desarrollarla, ya que

esto se refiere a la severidad de la patología subyacente. Para esto se utiliza la clasificación

propuesta por la New York Heart Association, la cual cataloga en cuatro grados según el

esfuerzo necesario para desencadenarla (cuadro 3-1). Es producida por un aumento en la

presión capilar pulmonar secundario a un incremento en la presión telediastólica del ventrículo


APH INTERMEDIA II 5

izquierdo, como sucede en la insuficiencia cardiaca o debido a un aumento en la presión de la

aurícula izquierda, como sucede en la estenosis mitral.

Cuadro 3-1. Clase Funcional NYHA


Clase I Disnea de grandes esfuerzos, paciente sin limitación de la actividad física.
Clase II Disnea de esfuerzos moderados, paciente con limitación ligera de la actividad física.
Clase III Disnea de esfuerzos leves, limitación marcada de la actividad física.
Clase IV Disnea de reposo, incapacidad de realizar alguna actividad física sin presentar síntomas.

 Ortopnea o disnea de decúbito

Es la que se produce inmediatamente después de que el paciente adopta la posición

supina. Al acostarse, el paciente eleva los miembros inferiores perdiendo el efecto de la

gravedad en la columna sanguínea, por lo que incrementa de manera súbita el retorno venoso,

el cual al llegar al corazón, no puede ser manejado por el ventrículo izquierdo, provocando un

aumento en la presión capilar pulmonar que produce la disnea.

 Disnea paroxística nocturna

Es la que ocurre después de 2 o 3 horas de que el paciente se acostó. Se presenta más

por la noche, despertando al paciente con una sensación de ahogo y angustia que se resuelve

minutos después de que se incorpora o se levanta. Cuando el paciente adquiere la posición

supina se pierde el declive de los miembros inferiores, lo que produce una reabsorción del

edema (no siempre aparente desde el punto de vista clínico) en dichos miembros. El líquido

pasa del espacio intersticial al espacio vascular, aumentando el volumen vascular circulante,

que al llegar a un corazón insuficiente se acumula en el intersticio pulmonar produciendo la

disnea.
APH INTERMEDIA II 6

DOLOR PRECORDIAL

El dolor precordial sin duda alguna es el síntoma cardinal que refiere enfermedad

cardiovascular. Para evaluar al paciente que acude a la sala de urgencias debido al dolor

precordial se utiliza una herramienta diagnóstica muy importante, el interrogatorio. Existen

causas tanto cardiacas como no cardiacas de dolor precordial. Alrededor del 10% de los

pacientes que lo presentan tienen alteraciones de la cavidad abdominal, dentro de las que

destacan: trastornos asociados a una hernia hiatal, úlcera perforada, pancreatitis, espasmo

esofágico, gastritis erosiva y la patología de la vía biliar. Las causas cardiacas de dolor

precordial más comunes son, por mucho, los síndromes coronarios; entre los que se

encuentran: angina estable, angina inestable y el infarto agudo de miocardio en sus dos

modalidades con/sin elevación del segmento ST. Sin embargo, es necesario realizar el

diagnóstico diferencial con las otras causas cardiacas de dolor precordial como pericarditis

aguda, disección aórtica, tromboembolia pulmonar y miocarditis.

 Dolor isquémico

Se caracteriza por ser un dolor de localización retroesternal y características opresivas,

cuya intensidad va aumentando con el paso de los minutos y que se puede irradiar hacia la

región torácica y el hombro izquierdo, el cuello, el maxilar inferior, el epigastrio y la región ulnar

de cualquiera de los brazos (con más frecuencia el izquierdo). Por lo general es de gran

intensidad.

Pero hasta un 25% de los infartos agudos de miocardio se presentan sin dolor

(isquemia silente); esto es más frecuente en pacientes diabéticos y ancianos. Dichos pacientes

se presentan con equivalentes anginosos, es decir, síntomas no dolorosos producidos durante

un episodio isquémico.
APH INTERMEDIA II 7

Los equivalentes anginosos más habituales son: disnea, lipotimia, síncope, náusea,

fatiga y malestar gastrointestinal. Estas manifestaciones no deben ser pasadas por alto en

pacientes de alto riesgo y es necesario realizar estudios complementarios para descartar un

síndrome coronario agudo. Así mismo, los pacientes pos trasplantados de corazón no sienten

dolor, ya que el órgano trasplantado del donador ha sido denervado, lo que impide la

transmisión del dolor.

Existen diferentes factores desencadenantes de dolor isquémico, entre los más

comunes se encuentran: la realización de grandes esfuerzos, el estrés emocional, la exposición

al frío y la ingesta de un almuerzo pesado. La duración del dolor es variable y a la vez es un

dato muy importante en la identificación del síndrome coronario. La angina estable tiene una

duración aproximada de 2 a 15 minutos, cede con el reposo o con la administración de nitratos.

La angina inestable es aquella que dura menos de 20 minutos, es de inicio reciente o existe un

aumento en la intensidad, duración o frecuencia de los síntomas anteriores, o se presenta en

reposo. El infarto agudo de miocardio se presenta con dolor por más de 30 minutos, en donde

el paciente refiere una sensación de muerte inminente.

Es importante tener en mente que existen causas de dolor precordial isquémico en

pacientes sin enfermedad coronaria, como en la estenosis aórtica y la miocardiopatía

hipertrófica obstructiva, en la cual el aumento del espesor del músculo cardiaco no va

acompañado por aumento de la vascularidad coronaria con la subsecuente isquemia, por un

desequilibrio entre el aporte y la demanda miocárdica de oxígeno.

 Pericarditis aguda

El dolor que se presenta en la pericarditis se caracteriza por ser de localización

retroesternal de tipo opresivo, quemante, que se irradia hacia los hombros, en especial hacia el

músculo trapecio y que por lo general fue precedido por un proceso infeccioso, de origen viral
APH INTERMEDIA II 8

en las dos semanas previas. Su intensidad es variable y se modifica tanto con la respiración

como con la posición, incrementándose durante la inspiración profunda y la posición de

decúbito, disminuyendo durante la espiración y en la posición de Fowler. Es de inicio insidioso,

puede ser precedido de síntomas gripales, su duración puede ser de varios días y cede con la

administración de antiinflamatorios no esteroideos.

 Disección aórtica

Se manifiesta con dolor retroesternal, transfictivo de tipo cortante que se irradia hacia el

abdomen y los brazos. Es de gran intensidad, no se modifica ni cede a la administración de

nitratos ni analgésicos. Se caracteriza por un inicio súbito en cuanto a su intensidad con

posterior decremento de la misma.

EDEMA

El edema se define como la acumulación de líquido en el espacio intersticial que

produce un aumento en el volumen de los tejidos. El edema de origen cardiaco es provocado

por un aumento en la presión venosa, primero central y luego periférica, a causa de un

incremento en la presión telesistólica del ventrículo derecho, como sucede en la hipertensión

pulmonar o un efecto de barrera como en el caso de la estenosis tricuspídea.

El edema cardiogénico se distingue porque comienza en las regiones de declive. Se

presenta en las extremidades inferiores en los pacientes que conservan la deambulación y en

la región sacra, así como la cara interna de los muslos en los pacientes encamados. Dicho

edema es de predominio vespertino, de características ascendentes simétricamente hasta

llegar al abdomen. Puede afectar también las serosas, dando como resultado hidrocele, ascitis

o incluso hidrotórax. De no corregirse la causa, puede llevar al paciente a un estado de edema

generalizado conocido como anasarca.


APH INTERMEDIA II 9

HEMOPTISIS

Las causas más frecuentes de hemoptisis no son los padecimientos cardiovasculares.

Dentro de las causas cardiovasculares se encuentran los padecimientos que producen una

presión venosa pulmonar elevada por un lago periodo (meses a años), como la estenosis

mitral, en los que existe la formación de circulación colateral. En dicha circulación, por el

aumento de presión a la que se encuentra sometida, se forman ramas venosas colaterales que

van desde las venas pulmonares hacia las venas hiliares (que drenan en las venas ácigos), con

el fin de distribuir y liberar la presión de la circulación pulmonar. Los vasos de neoformación no

poseen una pared tan resistente como la de los vasos normales, por lo que se rompen con

mayor facilidad, produciendo hemoptisis, esta última puede ser una manifestación grave de

edema agudo pulmonar.

LIPOTIMIA Y SÍNCOPE

 Lipotimia o desvanecimiento

Se define como la obnubilación de la conciencia, sin pérdida en el estado de alerta. Es

de corta duración y existe recuperación inmediata después de su presentación. Se considera

como un estado previo al síncope.

 Síncope

Es la pérdida del estado de alerta secundaria a una disminución en el flujo sanguíneo

cerebral. El síncope de origen cardiaco se caracteriza por ser de inicio súbito sin la presencia

de aura, de rápida evolución, donde los pacientes no presentan movimientos anormales ni

pierden el tono de los esfínteres y al recobrar la conciencia no hay presencia de periodo

confusional o postictal.

Las causas cardiacas de síncope pueden ser divididas en:


APH INTERMEDIA II 10

1. Alteraciones de la conducción: Bloqueos auriculoventriculares. Taquicardias.

Síncope vaso-vagal.

2. Alteraciones vasculares: Obstrucción del tracto de salida ventricular (tanto

izquierdo como derecho). Hipersensibilidad del seno carotídeo. Hipotensión

ortostática. Mixoma de la aurícula derecha.

Es importante tener en cuenta que cuando son de origen cardiaco, las lipotimias, el

síncope y la muerte súbita tienen una fisiopatología común y representan diferentes grados de

severidad de una misma enfermedad. Se debe tener cautela al interpretar estos síntomas, ya

que un paciente que se manifiesta desde el inicio con síncope, tiene un grado de afectación

más avanzado que aquel que lo hace con lipotimias. Hay que entender el síncope como un

síntoma que se puede presentar previo a un cuadro de muerte súbita.

CIANOSIS

Se define como la coloración azulada de la piel y las mucosas producida por la

presencia de más de 4 mg/dL de hemoglobina no oxigenada. La cianosis periférica es

producida por una disminución en la velocidad del flujo en los vasos sanguíneos, lo que

aumenta la desaturación de la hemoglobina, produciendo coloración azul. Si la cianosis se

encuentra confinada a una sola extremidad se debe sospechar la oclusión parcial del vaso que

la irriga. Estas son algunas de las principales causas de cianosis central:

1. Alteración en la permeabilidad del endotelio pulmonar o vascular (p. ej., en la

fibrosis pulmonar idiopática).

2. Presencia de un corto circuito de sangre no oxigenada a la circulación sistémica

(derecha a izquierda); debido a comunicaciones anómalas dentro del corazón,

como sucede en la tetralogía de Fallot (Estenosis de la válvula pulmonar,


APH INTERMEDIA II 11

Comunicación interventricular, Cabalgamiento de la aorta, Hipertrofia

ventricular derecha).

3. Alteración de la hemoglobina. Como la producida por la metahemoglobinemia.

PALPITACIONES

Es la percepción desagradable del latido cardiaco. Es importante hacer énfasis en que

es una percepción desagradable, ya que un paciente sano después de hacer ejercicio

extenuante percibirá de forma normal su latido cardiaco, sin tener una sensación desagradable

al respecto. Las palpitaciones pueden ser descritas de diversas formas, como brincos en el

pecho, como un latido más fuerte de lo normal, como un conjunto de latidos rápidos e

irregulares. Las palpitaciones de origen cardiaco son: Fibrilación auricular, Flúter auricular,

Taquicardias, Extrasístoles, Marcapasos (normofuncionantes o disfuncionantes),

Enfermedad del nodo sinusal.


APH INTERMEDIA II 12

EXPLORACIÓN FÍSICA CARDIOVASCULAR

Entender la exploración física normal en cardiología es vital para comprender las

cardiopatías y el cómo se presentan.

SIGNOS VITALES

Son la primera parte de la exploración física y tienen mucha importancia, ya que no sólo

proporcionan idea del estado hemodinámico del paciente, sino que también ayudan en el

abordaje diagnóstico, sobre todo en la patología cardiovascular.

 Frecuencia cardiaca

Es el número de latidos del corazón en un minuto. Se puede tomar palpando un pulso

arterial o auscultando el área precordial. Se recomienda medir durante 1 minuto con

cronómetro y contar los latidos en este intervalo de tiempo. Los valores normales de la FC son

entre 60 y 100 latidos por minuto.

 Frecuencia respiratoria

Es el número de respiraciones en un minuto. Es importante contar siempre las

respiraciones en la totalidad de 1 minuto. Los valores normales de la FR son entre 12 y 18

respiraciones por minuto.

 Presión arterial o tensión arterial

La presión arterial (también conocida como tensión arterial) es aquella que ejerce la

sangre sobre la pared de las arterias sistémicas. Durante el ciclo cardiaco existen dos

diferentes presiones arteriales: sistólica y diastólica. Durante la sístole, la válvula aórtica se


APH INTERMEDIA II 13

encuentra abierta, por lo que durante esta fase las presiones del ventrículo izquierdo y de la

aorta son las mismas. Durante la diástole, la válvula aórtica se encuentra cerrada y las

presiones son diferentes. La presión sistólica se encuentra determinada por la contracción del

ventrículo izquierdo, mientras que la presión diastólica por las resistencias periféricas y la

elasticidad de la aorta. Los valores normales de la Presión arterial son como mínimo de 90-60

mmHg y máximo 120-80 mmHg.

 Presión diferencial (presión de pulso)

Presión diferencial = presión sistólica – presión diastólica

La presión diferencial se refiere a la diferencia entre las presiones sistólica y diastólica.

También se conoce como presión de pulso, porque es aquella que determina la intensidad del

mismo. El pulso intenso se presenta cuando hay presión diferencial grande. El pulso tenue se

presenta con una presión diferencial pequeña. El paciente puede tener hipertensión arterial

sistémica; sin embargo, tener un pulso tenue si las presiones sistólica y diastólica son similares.

Un ejemplo de aumento en la presión de pulso son los pacientes con insuficiencia aórtica; en

quienes disminuye de manera importante la presión arterial diastólica y con ello aumenta la

presión diferencial.

 Presión arterial media (presión de perfusión)

Presión arterial media = presión diastólica + 1/3 presión diferencial

Todos los órganos, con excepción del cerebro, se perfunden a la presión arterial media,

por lo que también es llamada presión de perfusión. Cuyos valores normales son por encima de

60 mmHg, valor donde los tejidos y órganos diana están bien perfundidos. No obstante, el

cerebro está dentro de una cavidad rígida como lo es el cráneo. Aquí existe una presión

intracraneal que se opone a la entrada de sangre del cuello al cráneo. Los valores normales de
APH INTERMEDIA II 14

la PIC son de 10-15 mmHg. La presión de perfusión cerebral se denomina de la siguiente

manera:

Presión de perfusión cerebral = presión arterial media – presión intracraneal

La PPC en valores normales debe mantenerse como mínimo en 70 mmHg.

INSPECCIÓN

La inspección en la exploración cardiovascular se puede dividir en dos grandes grupos:

inspección general e inspección del área precordial.

Inspección general

La inspección general en pacientes con patología cardiovascular es similar a cualquier

exploración física completa, por lo que no se hará mayor énfasis. Sin embargo, es importante

tomar en consideración algunas situaciones especiales: recordar que la coloración es un

indicador sustancial de patologías, sobre todo de cardiopatías congénitas con cortocircuito de

derecha a izquierda, en las cuales siempre existe cianosis generalizada; asimismo se debe

tomar en cuenta la morfología del tórax, ya que algunas cardiopatías congénitas que producen

cardiomegalia en etapas muy tempranas de la vida, pueden acompañarse de malformaciones

torácicas, debido a que el grado de osificación de las estructuras torácicas no es completa y

permite la deformación de las mismas por el desplazamiento generado por el corazón.

Inspección del área precordial

En la inspección del área precordial se debe valorar el levantamiento apical (que

corresponde al choque de la punta en la pared torácica) y determinar si dicho levantamiento

tiene una ubicación normal (quinto espacio intercostal izquierdo, línea medio clavicular) o está

desplazado. Del mismo modo se debe poner énfasis en la presencia de levantamientos


APH INTERMEDIA II 15

anormales, que en algunas situaciones pueden ser visibles y traducir patología cardiovascular

como se describirá más adelante.

PALPACIÓN

Durante la palpación del área precordial siempre es conveniente realizar inspección de

la misma zona que se esté palpando.

 Ápex

El ápex o el choque de la punta del corazón, en algunas personas se palpan a través de

la caja torácica. La presencia de éste depende de varios factores como: tamaño del corazón,

grosor de la pared torácica, posición de corazón e intensidad de la contracción ventricular. Las

características a describir de ápex se le deben describir durante la exploración lo siguiente:

1. Localización. Por lo general quinto espacio intercostal en el cruce con la línea

medioclavicular izquierda. Es sustancial localizar el ápex antes de auscultar,

porque ésta es la localización del foco de auscultación mitral.

2. Diámetro o área. Alrededor de 2 cm.

3. Intensidad. Variable y depende del grosor de la pared del tórax, así como de la

intensidad de la contracción del ventrículo izquierdo.

4. Duración.

5. Presencia o ausencia de frémitos.

6. Presencia o ausencia de ruidos palpables.

7. Presencia o ausencia de discinesia.

Si el ápex se desplaza a la izquierda, por lo general se considera que hay crecimiento

del ventrículo derecho. Si está desplazado hacia abajo, tal vez se deba a crecimiento del

ventrículo izquierdo.
APH INTERMEDIA II 16

 Levantamientos paraesternales

Existen dos levantamientos paraesternales que se pueden palpar en la región precordial

en ciertos casos. El levantamiento paraesternal alto se localiza en el segundo espacio

intercostal en la línea paraesternal izquierda. Cuando se presenta este levantamiento, sugiere

que hay un crecimiento de la arteria pulmonar, el cual se encuentra con más frecuencia en

pacientes con hipertensión arterial pulmonar. El levantamiento paraesternal bajo se encuentra

en el cuarto o quinto espacio intercostal a la altura de la línea paraesternal izquierda. Este

levantamiento, cuando está presente, indica crecimiento del ventrículo derecho.

 Pulso arterial

Se deben palpar los pulsos centrales (arterias carótidas) y periféricos (miembros

superiores e inferiores). Se deben palpar todos los pulsos, ya que existen algunas patologías

como coartación aórtica donde puede haber una diferencia entre los pulsos periféricos.

En la palpación del pulso carotídeo es necesario tener cuidado, ya que en pacientes de

edad avanzada puede haber aterosclerosis carotídea. Se recomienda auscultar las carótidas

antes de palparlas, sobre todo en este grupo etario. Si existe obstrucción del flujo carotídeo por

aterosclerosis se auscultará un soplo carotídeo. La palpación exagerada de las carótidas que

contienen placas ateroscleróticas puede condicionar ruptura de éstas, enviando un émbolo

hacia la circulación cerebral. De igual forma se puede producir un reflejo vagal por estimulación

excesiva de los barorreceptores localizados en el seno carotídeo. Nunca se debe palpar el

pulso de ambas arterias carótidas simultáneamente, ya que se puede disminuir de manera

considerable el flujo cerebral de modo temporal.


APH INTERMEDIA II 17

PERCUSIÓN

La percusión se utilizaba en la exploración física cardiovascular para delimitar la silueta

cardiaca. Esto permite determinar en cierta medida el tamaño del corazón. La percusión se

debe realizar en los espacios intercostales y nunca sobre costillas o esternón. El parénquima

pulmonar tiene un sonido a la percusión denominado claro pulmonar, mientras que el corazón

se escucha mate a la percusión. De esta forma, se puede determinar el contorno del corazón.

AUSCULTACIÓN

 Focos de auscultación cardiaca

 Aórtico: segundo espacio intercostal, línea paraesternal derecha.

 Pulmonar: segundo espacio intercostal, línea paraesternal izquierda.

 Tricuspídeo: borde izquierdo del apéndice xifoides.

 Mitral: El foco mitral se encuentra donde se palpe el ápex. Si el ápex está

desplazado, entonces, el foco mitral se desplaza también. Si el ápex no es

palpable, entonces, se asume que se encuentra en el quinto espacio intercostal,

línea medio clavicular izquierda.

 Aórtico accesorio: Se encuentra en el punto medio entre el foco pulmonar y el

tricuspídeo.

 Ruidos o sonidos cardiacos

Los ruidos o sonidos pueden ser por ruidos valvulares o ruidos ventriculares. Los ruidos

valvulares son el primer ruido (S1) y el segundo ruido (S2). Los ruidos ventriculares son ruidos

producidos por la pared ventricular y no por las válvulas cardiacas. Estos son los ruidos tercero

(S3) y cuarto (S4), de ahí que, solo se podrán auscultar en el foco mitral y tricuspídeo. Ambos
APH INTERMEDIA II 18

se presentan en la diástole ventricular cuando los ventrículos se están llenando. Se denomina

ritmo de galope cuando se presenta el S3 y/o S4 con taquicardia.

 Sonidos de eyección

Los sonidos de eyección se auscultan inmediatamente después de la apertura de una

válvula cuando ésta se abre hacia una cavidad que tiene una presión alta. Se presenta sobre

todo en los focos de auscultación de las válvulas sigmoideas. El fenómeno fisiopatológico que

subyace a este evento clínico es la salida de sangre de una cavidad ventricular hacia una

arteria con hipertensión, ya sea sistémica para la válvula aórtica o hipertensión arterial

pulmonar para la válvula pulmonar.

 Chasquidos de apertura

Aquí es posible realizar una analogía entre las válvulas cardiacas y una puerta. Por lo

regular, una puerta no genera sonido alguno cuando se abre pero sí suena cuando es cerrada.

Lo mismo sucede con las válvulas del corazón. Sin embargo, cuando la puerta está atorada se

necesita una fuerza mayor para abrirla y puede llegar a emitir un sonido cuando finalmente se

logra abrir. Este mismo fenómeno ocurre cuando se abren las válvulas que se encuentran

engrosados por un proceso patológico. Esto se encuentra en valvulopatías reumáticas. Por lo

tanto, sólo se auscultan en la diástole y en los focos tricuspídeo y mitral.

 Soplos

El soplo es el fenómeno auscultatorio de un flujo turbulento. Este fenómeno se presenta

cuando la sangre pasa a través de un orificio por el cual no debería de pasar normalmente

(comunicaciones entre cavidades). También se puede manifestar cuando la sangre pasa por un

orificio por el cual sí pasa, pero que se encuentra alterado de manera anatómica (estenosis
APH INTERMEDIA II 19

valvular) o cuando la sangre pase por un orificio en sentido contrario del flujo normal de la

sangre (insuficiencia valvular).

Cuando se ausculta un soplo, se describe lo siguiente:

1. Localización espacial (foco de auscultación).

2. Localización temporal (sístole o diástole y en qué tercio).

3. Intensidad (escala 0-6) (cuadro 3-2).

4. Tonalidad (agudo o grave).

5. Irradiaciones.

6. Modificaciones respiratorias y posicionales (maniobras especiales). Cuando un

soplo es de gran intensidad puede ser palpado, a este fenómeno se le conoce

como frémito.

Cuadro 3-2. Intensidad de los soplos


Grado 1 Soplo apenas audible con la mayor dificultad.
Grado 2 Soplo audible pero ligero.
Grado 3 Soplo moderado.
Grado 4 Soplo intenso, que presenta frémito o irradiación.
Grado 5 Soplo más intenso.
Grado 6 Soplo tan intenso que incluso puede escucharse sin pegar el estetoscopio al tórax del paciente

 Frotes

Los frotes son los fenómenos auscultarorios del roce de dos superficies serosas como

las capas del pericardio. Cuando existe inflamación entre estas capas se puede generar un

ruido con el movimiento del corazón, tal y como sucede en frote pericárdico.
APH INTERMEDIA II 20

Bibliografía

Alexánderson Rosas, E. (2017). Exploración cardiovascular bases fisiopatológicas (Segunda

ed., Vol. 1). (J. M. Valera Bermejo, Ed.) Ciudad de México, Estado de México, México:

El Manual Moderno. Recuperado el 28 de Abril de 2019

Das könnte Ihnen auch gefallen