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PARA TI…

QUERIDA
NUESTRAS RELACIONES
CON ELLOS
NO LO QUIERO OLVIDAR
NO LO DEJO DE PENSAR
Y SI ÉL ES EL VERDADERO AMOR
CUÁNDO ME AMARÁN
SOMOS EL UNO PARA EL OTRO
NUESTRO AMOR NOS REBASA
Y SI… REGRESAMOS OTRA VEZ
La vida puede ser vivida,
o transformarse en un simulacro.
Puede ser serena,
puede ser competitiva.

Puede ser alegre, puede ser triste, pero siempre es irrecuperable.


Rabindranath Tagore, decía:

"Si de noche lloras


porque se ha ido el sol,
tampoco podrás
ver las estrellas".
Vivamos siempre el momento,
disfrutemos lo que tenemos y nunca,
pero nunca, olvidemos que el único tiempo
que no hemos perdido
es el que todavía no ha llegado.

Si una relación terminó, ya es pasado.


¡No sigamos perdiendo el tiempo!
El vínculo primario que presenta cualquier noviazgo es la
necesidad de una fusión simbiótica originada en el deseo de
alcanzar el alimento emocional del que carecimos en
nuestra infancia.
Obviamente, esto es algo por lo que atraviesan la gran
mayoría de las parejas, que, cuando acaban de conocerse,
atraviesan una fase de asociación que les lleva a cortar
temporalmente otras actividades o amistades y a pasar la
mayor parte del tiempo juntos.
PORQUÉ… ?
Si permanecemos demasiado tiempo en este estado, sucede que
contribuye a que ambas personas lleguen a establecer un
profundo vínculo emocional que anula a ambas partes.
Si cualquier noviazgo se convierte en la principal motivación de
la relación o si perdura demasiado tiempo, termina
convirtiéndose en un factor limitador que establece una dinámica
paterno o materno filial que limita el rango de expresión e
interacción de ambas personas.
Anula y destruye sus roles masculino y femenino
en la relación y termina creando pautas de
comportamiento adictivas.
Esta conducta adictiva crea frustración para ambos,
da paso a la agresión y se ejerce la violencia.
Se generan culpas en cada uno y terminan llegando
a ningún lado.
Finalmente obtenemos:

Transformamos en un simulacro nuestra vida,


nuestra relación y nuestro futuro.

Desarrollamos y convertimos nuestra vida en un


serio problema de adaptación.
Sé firme en tus actitudes y perseverante en tu ideal.
Sé paciente, no pretendiendo que todo te llegue de inmediato.
Haz tiempo para todo, y todo lo que es tuyo,
vendrá a tus manos en el momento oportuno.
Aprende a esperar el momento exacto para recibir los beneficios que reclamas.
Espera con paciencia a que maduren los frutos para apreciar debidamente su
dulzura.
No seas esclava de alegrías del pasado o los recuerdos tristes.
No revuelvas una herida que está cicatrizada.
No re-intentes ni rememores antiguas relaciones.
¡Lo que pasó, pasó!
Debe quedar en su lugar correcto…
Por muy bueno o malo que haya sido.

¡Pertenece al pasado!
Hay que tener cuidado con estas relaciones porque llegan a ser
peligrosas y más cuando no se han definido las emociones y los
términos de la "amistad“ o “noviazgo”.
Recuerda que debes de pensar con la cabeza y no dejarte llevar por
las emociones porque la cosa se puede poner "fea“…
…cuando la mayoría de las mujeres en la situación de “volver” se
convierten en un “free” para ellos y …
… pasamos a ser “menos”, jamás para una relación sana, seria y
comprometida.
De ahora en adelante procura construir una vida nueva, dirigida hacia lo alto
y camina hacia delante, sin mirar hacia atrás.
Haz como el Sol que nace cada día, sin acordarse de la noche que pasó.
Sólo contempla la meta y no veas que tan difícil es alcanzarla.
No te detengas en lo malo que has hecho; camina en lo bueno que quieres y
sabes hacer.
No te culpes por lo que hiciste, más bien decídete a cambiar.
No trates que otros cambien; sé responsable de tu propia vida y trata de
cambiar tú.
Deja que el amor te toque y no te defiendas de él.
Vive cada día, aprovecha el pasado para bien y deja que el futuro llegue a su tiempo.
No sufras por lo que viene, recuerda que "cada día tiene su propio afán".
Busca a alguien con quien compartir tus luchas hacia la libertad; una persona que te
entienda, te apoye y te acompañe en ella.
Si tu felicidad y vida dependen de otra persona, despréndete de ella y ámala, sin
pedirle nada a cambio.
Aprende a mirarte con amor y respeto, piensa en ti como en algo precioso.
Pongamos la vida en ello y si nos damos cuenta que no podemos, quizás
entonces necesitemos hacer un alto en el camino y experimentar un cambio
radical en nuestras vidas.
El éxito en la vida no se mide por lo que has logrado, sino por los obstáculos que
has tenido que enfrentar en el camino.
Tú y sólo tú escoges la manera en que vas a afectar el corazón de otros y esas
decisiones son de lo que se trata la vida.

"Que hoy y mañana sean el mejor día


de tu vida para alcanzar tus sueños".
QUÉ HACER..?
Crecer es dejar atrás algo a lo cual estuvimos apegados y de
lo cual nos cuesta desprendernos, es atrevernos una vez
más y estar dispuestos a ser diferentes de lo que fuimos
ayer, es desarrollarnos y evolucionar desde adentro.
Cuando decidimos cambiar una actitud negativa,
estamos creciendo. Cuando decidimos corregir un error,
estamos evolucionando. Cuando dejamos de hacer algo
que nos empequeñece, estamos desarrollándonos.
Todos los días la vida nos presenta oportunidades de crecer.
Y para proyectarse en el tiempo como algo duradero, nuestro cambio
debe ser paulatino y consciente.
Observa la naturaleza, y más particularmente a los árboles: en otoño
pierden su follaje, se liberan de la carga innecesaria, recogiéndose
dentro de sí para recibir el invierno.
Parecieran no tener vida, pero preparan sus raíces para
que en la primavera de sus ramas surjan brotes, dando
lugar a las hojas y luego los frutos del verano.
Si logramos desprendernos de esas hojas que no
necesitamos mientras desarrollamos nuestra esencia…
… nos transformaremos y daremos frutos.
PORQUÉ DEBE TERMINAR…

Siempre es preciso saber cuándo se acaba una etapa de la vida.


Si insistes en permanecer en ella, más allá del tiempo necesario,
pierdes la alegría y el sentido del resto.
Cerrando círculos, cerrando puertas, o cerrando capítulos, como
quieras llamarlo, lo importante es cerrarlos, es dejar ir momentos de
la vida que se van clausurando.
Pasar mucho tiempo del presente "revolcándose" en los
porqués, en devolver el casette y tratar de entender por qué
sucedió tal o cual hecho.
El desgaste va a ser infinito porque en la vida, todos estamos
abocados a ir cerrando capítulos, a pasar la hoja, a terminar
con etapas, o con momentos de la vida y seguir adelante.
No es posible estar en el presente añorando el pasado. Ni
siquiera preguntándonos por qué.
Lo que sucedió, sucedió, y hay que soltar, hay que desprenderse.
No somos niños eternos, ni adolescentes tardíos, ni empleados de
empresas inexistentes, ni tener vínculos con quien no tenemos
porqué estar vinculados.
No. ¡Los hechos pasan y hay que dejarlos ir!
Por eso a veces es tan importante destruir recuerdos, regalar
presentes, cambiar de casa, papeles por romper, documentos por
tirar, libros por vender o regalar.
Los cambios externos pueden simbolizar procesos interiores
de superación. Dejar ir, soltar, desprenderse.
En la vida nadie juega con las cartas marcadas, y hay que
aprender a perder y a ganar.
Hay que dejar ir, hay que pasar la hoja, hay que vivir sólo lo
que tenemos en el presente.
El pasado ya pasó.
No esperes que te devuelvan, no esperes que te reconozcan,
no esperes que alguna vez te den cuenta de quién eres tú.
La vida está para adelante, nunca para atrás. Si vas por la vida
dejando "puertas abiertas", por si acaso, nunca nos
desprenderemos ni habremos de vivir lo de hoy con
satisfacción.
Noviazgos o amistades que no clausuran, posibilidades de
"regresar" (a… ¿qué?), necesidad de aclaraciones, palabras que
no se dijeron, silencios que lo invadieron.
¡Si hay posibilidad de enfrentarlos ya y ahora, házlo!, si no,
déjalo ir, cierra capítulos.
Repetirnos que no, que no volvemos. No por orgullo ni
soberbia, sino porque ya no encajamos allí, en ese lugar, en
ese corazón, en esa habitación, en esa casa, en ese
escritorio, en ese oficio
Ya no somos lo mismo que fuimos, hace dos días, hace
tres meses, hace un año, por lo tanto, no hay nada a qué
volver.
Cierra esa puerta, pasa la hoja, cierra el círculo,
suavemente con total y completa seguridad.
Ya no somos lo mismo, ni el entorno al que regresamos será
igual, porque en la vida nada se queda quieto, nada es estático.
Es salud mental, amor por uno mismo, es desprender lo que ya
no está en nuestra vida.
Recuerda que nada ni nadie es indispensable.
Ni una persona, ni un lugar, ni un trabajo, nada es vital para vivir
porque…
…cuando vinimos a este mundo 'llegamos' sin ese adhesivo, por
"costumbre" vivimos pegado a él y…
…y es un trabajo personal aprender a vivir sin
él, sin el adhesivo humano o físico que hoy
duele dejar ir.
Es un proceso de aprender a desprenderse y,
humanamente lo logramos porque, te repito,
nada ni nadie nos es indispensable.
Sólo es costumbre, apego, necesidad.
Pero…
... cierra, clausura, limpia, tira, oxigena,
despréndete, sacude, suelta.
Hay tantas palabras para significar salud mental
y cualquiera que sea la que escojas, te ayudará
definitivamente a seguir para adelante con
tranquilidad.
¡Así es la vida!
¡Esa es la vida!

ÉSTA ES LA VIDA… ¡LA NUESTRA!


FINALMENTE… la realidad.

Hay que distinguir la diferencia entre querer y amar. El


concepto querer lleva implícita la idea de posesión.
Te quiero para algo, para que estés conmigo, para que me
acompañes, para que estés, para que compartas o no tal
actividad, etc.
A fin de cuentas, los seres queridos son seres de los que se
espera algunos comportamientos que nos causen
satisfacción.
Querer es, generalmente, nuestra causa de sufrimiento.
Si quiero a alguien, tengo expectativas, espero algo.
Si la otra persona no me da lo que espero, sufro.
El problema es que hay una mayor probabilidad que la otra persona
tenga otras motivaciones, pues todos somos muy diferentes entre sí.
Cada ser humano es un Universo.
Amar es desear lo mejor para el otro, aún cuando éste
tenga otras motivaciones muy distintas.
Amar es permitir que seas feliz, aún cuando tu camino
sea diferente al mío.
Es un sentimiento altruista y desinteresado.
Por esto, el amor nunca será causa de sufrimiento.
Cuando una persona dice que ha sufrido por amor, en
realidad ha sufrido por querer, no por amar.
Se sufre por apegos.
Si realmente se ama, no puedes sufrir, pues nada has esperado del otro.
Cuando amamos nos entregamos sin pedir nada a cambio, se da por el simple
y puro placer de dar.
Amar produce un gozo profundo.
Es la alegría de dar.
La única manera de darse cuenta de esto es empezar a aprender a amar.
Se comienza por actos pequeños, con las personas a quienes más
amamos, nuestros padres y hermanos.
Luego, debe extenderse a todas las personas, en todo momento.
Es paulatino encontrar que alguien me ame.
Es más fácil y rápido encontrar que alguien me quiera para algo,
mientras sea necesario y útil para alguien.
Son pocas las personas que dan amor altruista y desinteresado.
Pero si bien lleva su necesario, lógico y buen tiempo encontrar a alguien
que me ame y yo ame, mientras …
… tenemos más de seis mil millones de personas que necesitan amor.
Y seguro estamos entre ellos.
La mayor felicidad no está en ser amado, sino en la acción de amar al
otro que es un camino más rápido y corto para que alguien me ame.
De modo que nuestra felicidad y gozo está asegurado si dejamos nuestro
egoísmo.
Seguro que a nuestro alrededor hay cientos de personas que serán
felices cuando compartamos nuestro amor.
Y no hay problema al darlo: dar amor no agota el amor, por el
contrario, lo aumenta.
Enamorarse es estar temporalmente en un estado de exclusividad
que nos permite darnos cuenta cuán vivos estamos.
Amar es voluntad e inteligencia de estar siempre en un estado y
proceso de inclusividad que da, engrandece y enaltece la vida.
COMPARTE CON ALGUNA
AMIGA ESTOS
CONOCIMIENTOS QUE
CON VERDADERO AMOR
NO ESTARÍA MAL QUE ALGÚN SINCERO Y BUEN AMIGO LEYERA Y CONOCIERA
LAS COSAS QUE NOS PREOCUPAN Y QUE EN SECRETO LAS MUJERES PLATICAMOS.

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