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la rosa y el sapo

Había una vez una rosa roja muy hermosa y bella. Se sentía de maravilla al
saber que era la rosa mas bella del jardín. Sin embargo, se daba cuenta de que
la gente la veía de lejos. Un dia se dió cuenta de que al lado de ella siempre
había un sapo grande y oscuro y que era por eso que nadie se acercaba a verla
de cerca. Indignada ante lo descubierto le ordenó al sapo que se fuera de
inmediato; el sapo muy obediente dijo:

-"Esta bien, si así lo quieres..."


Poco tiempo despues el sapo pasó por donde estaba la rosa y se sorprendió al
ver la rosa totalmente marchita, sin hojas y sin petalos. Le dijo entonces:
-"Vaya que te ves muy mal. -¿Qué te pasó?"
La rosa contestó
-"Es que desde que te fuiste las hormigas me han comido día a día, y nunca
pude volver a ser igual."
El sapo solo contesto
-"Claro, cuando yo estaba aquí me comía a esas hormigas y por eso siempre
eras la mas bella del jardín".

Muchas veces despreciamos a los demás por creer que somos mas que ellos,
mas bellos, mejores, simplemente que no nos "sirven" para nada. Nadie sobran
en este mundo, todos tenemos algo especial, que hacer, algo que aprender de
los demas o algo que enseñar, y nadie debe despreciar a nadie. No vaya a ser
que esa persona nos haga un bien del cual ni siquiera estemos conscientes.

Inclusión (pedagogía)
La inclusión es un concepto teórico de la pedagogía que hace referencia al
modo en que la escuela debe dar respuesta a la diversidad. Es un término que
surge en los años 90 y pretende sustituir al de integración, hasta ese momento
el dominante en la práctica educativa. Su supuesto básico es que hay que
modificar el sistema escolar para que responda a las necesidades de todos los
alumnos, en vez de que sean los alumnos quienes deban adaptarse al sistema,
integrándose a él. La opción consciente y deliberada por la heterogeneidad en
la escuela constituye uno de los pilares centrales del enfoque inclusivo.

La educación inclusiva se presenta como un derecho de todos los niños, y no sólo de


aquellos calificados como con necesidades educativas especiales (NEE). Pretende pensar
las diferencias en términos de normalidad (lo normal es que los seres humanos sean
diferentes) y de equidad en el acceso a una educación de calidad para todos. La educación
inclusiva no sólo postula el derecho a ser diferente como algo legítimo, sino que valora
explícitamente la existencia de esa diversidad. Se asume así que cada persona difiere de
otra en una gran variedad de formas y que por eso las diferencias individuales deben ser
vistas como una de las múltiples características de las personas. Por lo tanto, inclusión total
significaría la apuesta por una escuela que acoge la diversidad general, sin exclusión
alguna, ni por motivos relativos a la discriminación entre distintos tipos de necesidades, ni
por motivos relativos a las posibilidades que ofrece la escuela La inclusión comienza
aceptando las diferencias, celebrando la diversidad y promoviendo el trato equitativo de
cada alumno. El proceso de inclusión pretende minimizar las barreras para que todos
participen sin importar sus características físicas, mentales, sociales, contextos culturales ,
etc.

Desde esta postura resultan criticables, por su carácter excluyente, los modelos de
integración basados en el uso de espacios y tiempos separados para el trabajo con
determinados alumnos con problemas. A cambio de ello se favorecen las prácticas
educativas y didácticas que no sólo acojan la diversidad sino que saquen provecho de ella.
Es importante eliminar los sistemas educativos segregativos y propiciar la búsqueda de
estrategias, metodologías y espacios incluyentes buscando que el derecho de Educación
para todos sea una realidad .

Si la heterogeneidad constituye un valor, la homogenización en la escuela, que a su vez


ocurre como resultado de las prácticas selectivas en los sistemas educacionales, es vista
desde esta perspectiva como un empobrecimiento del mundo de experiencias posibles que
se ofrece a los niños, perjudicando tanto a los escolares mejor "dotados" como a los "menos
dotados". Existen diversas propuestas internacionales que muestran estrategias para la
inclusión total del alumnado aunque se debe tomar en cuenta que muchas veces debido a
las características de los estudiantes la inclusión total no se logra. Sin embargo hay maneras
de incluir y ser incluidos en la dinámica regular de las escuelas como la creación de
módulos de aprendizaje, actividades, talleres, espacios extra - escolares que propiciarán la
inclusión y el aprendizaje colaborativo.

Los principios de la escuela inclusiva están ideológicamente vinculados con las metas de la
educación intercultural.

[editar] Implementación
La educación inclusiva supone un modelo de escuela en el que los profesores, los alumnos
y los padres participan y desarrollan un sentido de comunidad entre todos los participantes,
tengan o no discapacidades o pertenezcan a una cultura, raza o religión diferente. Se
pretende una reconstrucción funcional y organizativa de la escuela integradora, adaptando
la instrucción para proporcionar apoyo a todos los estudiantes. En este modelo, los
profesores ordinarios y los profesores especialistas o de apoyo trabajan de manera conjunta
y coordinada dentro del contexto natural del aula ordinaria, favoreciendo el sentido de
pertenencia a la comunidad y la necesidad de aceptación, sean cuales fuesen las
características de los alumnos.
La escuela inclusiva forma parte de un proceso de inclusión más amplio; supone la
aceptación de todos los alumnos, valorando sus diferencias; exige la transmisión de nuevos
valores en la escuela; implica incrementar la participación activa (social y académica) de
los alumnos y disminuir los procesos de exclusión; supone crear un contexto de aprendizaje
inclusivo desarrollado desde el marco de un currículo común; exige una profunda
reestructuración escolar que debe ser abordada desde una perspectiva institucional; es un
proceso inacabado, en constante desarrollo, no un estado.

[editar] Delimitación conceptual entre integración e


inclusión
Algunas diferencias esenciales entre integración e inclusión son las siguientes:

• La integración se basa en la normalización de la vida del alumnado con necesidades


educativas especiales. La inclusión plantea el reconocimiento y valoración de la
diversidad como una realidad y como un derecho humano, esto hace que sus
objetivos sean prioritarios siempre. Desde la perspectiva de la inclusión la
heterogeneidad es entendida como lo normal, de modo que la postura inclusiva se
dirige a todo el alumnado y a todas las personas en general.

• La integración se centra en el alumnado con necesidades educativas especiales, para


los que se habilitan determinados apoyos, recursos y profesionales, mientras que la
inclusión se basa en un modelo sociocomunitario en el que el centro educativo y la
comunidad escolar están fuertemente implicados, lo que conduce a la mejora de la
calidad educativa en su conjunto y para todo el alumnado. Se trata de una
organización inclusiva en sí misma, en la que se considera que todos los miembros
están capacitados para atender la diversidad.

• La integración propone adaptaciones curriculares como medidas de superación de


las diferencias del alumnado con necesidades especiales; la inclusión propone un
currículo inclusivo, común para todo el alumnado, en el que implícitamente se
vayan incorporando esas adaptaciones. El currículo no debe entenderse como la
posibilidad de que cada alumno aprenda cosas diferentes, sino más bien que las
aprenda de diferente manera.

• La integración supone, conceptualmente, la existencia de una anterior separación o


segregación. Una parte de la población escolar se encuentra fuera del sistema
educacional regular y debe ser integrada en éste. En este proceso el sistema
permanece más o menos intacto, mientras que quienes deben integrarse tienen la
tarea de adaptarse a él. La inclusión supone un sistema único para todos, lo que
implica diseñar el currículo, las metodologías empleadas, los sistemas de enseñanza,
la infraestructura y las estructuras organizacionales del sistema educacional de tal
modo, que se adapten a la diversidad de la totalidad de la población escolar que el
sistema atiende.
[editar] Desarrollo del concepto de inclusión educativa
El origen de la idea de inclusión se sitúa en el foro internacional de la Unesco que ha
marcado pautas en el campo educativo en el evento celebrado en Jomtien en 1990 en
Tailandia, donde se promovió la idea de una Educación para todos, que ofreciera
satisfacción de las necesidades básicas de aprendizaje al tiempo que desarrollara el
bienestar individual y social de todas las personas dentro del sistema de educación formal.
En la conferencia internacional de 1994 que concluye con la llamada Declaración de
«Salamanca», se produce una amplia adscripción a esta idea entre los delegados y se pone
énfasis la urgencia de impartir la enseñanza a todos los niños, jóvenes y adultos, con y sin
necesidades educativas especiales dentro un mismo mismo sistema común de educación. La
resolución de Salamanca generaliza la inclusión como principio central que ha de guiar la
política y la práctica de la construcción de una educación para todos.

Desarrollo de competencias: Nuevo enfoque educativo

Dr. Santiago Delgado Coronado*

En la actualidad se pretende dar un nuevo enfoque a la educación, se ha señalado que a


partir del próximo ciclo escolar, que está por empezar, se dará inicio a la enseñanza por
medio del desarrollo de competencias; es un tema que no deja de tener cierto grado de
ambigüedad ya que aun no está totalmente establecido el concepto de competencia a
desarrollar; los días 20 y 21 de este mes de diciembre tuve la oportunidad de participar en
la conducción de un curso- taller desarrollado en el Colegio San José ubicado en
Quezaltepeque departamento La Libertad, donde participe compartiendo mi punto de vista
sobre este tema.

El concepto de competencia como se entiende en educación, resulta de las nuevas teorías de


la cognición y básicamente significa, saberes de ejecución.

Todo proceso de conocer se traduce en un saber por lo que competencia y saber son
recíprocos.
La educación basada en competencias es un enfoque sistemático del conocer y del
desarrollo de habilidades”, se describe como resultado de lo que el alumno está capacitado
a desempeñar o producir al finalizar una etapa.

La educación basada en competencias se refiere a una experiencia práctica donde se


enlazan los conocimientos para lograr un fin, es necesario que la enseñanza vertida al
alumno y el aprendizaje generado por él se orienten a la aplicación práctica de lo aprendido.

La educación basada en competencias se concentra en: conocimientos, habilidades,


actitudes inherentes a una competencia (actitudes o comportamientos que respondan a la
disciplina y a los valores), la evaluación de los logros mediante una demostración del
desempeño o la elaboración de un producto.

Existen infinidad de clasificaciones referentes a las competencias, pero todas se orientan en


un mismo sentido, la ONU establece los cuatro pilares de la educación, aprender a ser,
aprender a hacer, aprender a convivir y aprender a aprender, otros contextos hablan de
competencias intelectuales, comunicativas de investigación, etc., en seguida presento otra
clasificación pero que de alguna manera confluyen en los mismos conceptos que la escuela
debe de desarrollar para lograr una mejor educación integral en nuestros alumnos.

•Competencias para el aprendizaje permanente. Que implican que el alumno tenga la


posibilidad de aprender, asumir y dirigir su propio aprendizaje, integrarse a la cultura
escrita y matemática, movilizar saberes científicos y tecnológicos.

•Competencias para el manejo de la información. Que los alumnos busquen, evalúen,


sistematicen información; que piensen, reflexionen, argumenten y expresen sus juicios
críticos; analicen, sinteticen y utilicen información.

•Competencias para el manejo de situaciones.

Estas se vinculan con la posibilidad de que los alumnos diseñen sus proyectos de vida
considerando el aspecto social cultural, económico, político, académico, etc. Tomar
decisiones y asumir sus consecuencias.

•Competencias para la convivencia. Implican que el alumno pueda relacionarse


armónicamente con los demás, comunicarse con eficacia, trabajar en equipo, tomar
acuerdos, negociar, desarrollar su identidad personal, valorar la diversidad cultural, etc.

•Competencias para la vida en sociedad. Que el alumno tenga la capacidad de decidir y


actuar con juicio crítico, proceder a favor de la democracia, la paz y el respeto, etc.

Además, considero importante que se establezcan indicadores que nos permitan establecer
la orientación sobre el desarrollo de cada una de las competencias, ya que estos (los
indicadores) nos ofrecen elementos para no perder la orientación de los aprendizajes.

Lograr que la educación contribuya a la formación de ciudadanos con esas características


implica plantear el desarrollo de competencias como propósito educativo central.

Una competencia implica un saber hacer (habilidad) con saber (conocimiento), así como la
valoración de las consecuencias del impacto de ese hacer (valores y actitudes).

«Poseer un conocimiento y la habilidad para desarrollarlo, implica un verdadero


aprendizaje».

*Catedrático Universitario México

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